Marcos 1.9-13
Marcos 1.9-13
19 de Septiembre de 2021
MENSAJE
Texto: Marcos 1:9-13
acabamos de leer, quiero compartir con ustedes algo de lo que el pastor Félix compartió con
el camino para Jesús. La expresión, “como está escrito” nos recuerda que Dios ya había dicho
que vendría uno antes que el Mesías: Isaías 40:3 (que menciona Marcos), Éxodo 23:20 y
pero apuntaba a Uno que perdonaría pecados: CRISTO. La clave del mensajero es que apuntó al
que haría lo que él no era capaz de hacer: perdonar pecados y llenarnos con su Espíritu.
Y acabó el pastor Félix con una pregunta final para cada uno de nosotros:
Y hoy vamos a estar meditando en los versículos del 9 al 13, que acabamos de leer. Y
como vimos hace dos semanas, el Evangelio de Marcos es el evangelio de la acción, donde los
sucesos casi que se atropellan los unos a los otros. Y esta porción que acabamos de leer es una
buena muestra de lo que acabo de decir, pues en cinco versículos vemos tres expresiones que
acontecimientos vitales en la vida de Jesús, que son la antesala de Su ministerio, y en los que
Vs. 9: “Y sucedió en aquellos días que Jesús vino de Nazaret de Galilea, y fue bautizado
Probablemente el bautismo de Jesús sea una de las acciones ante la cual muchos
cristianos han quedado perplejos y confundidos. De hecho, cuando leemos este relato en el
Evangelio de Mateo, capítulo 3, versículo 14, podemos ver esta perplejidad en el propio Juan el
Bautista: “Pero Juan trató de impedírselo diciendo: Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes
a mí?
La pregunta que surge es: ¿Por qué Juan el Bautista se oponía al bautismo de Jesús?
Bueno la respuesta la vimos la semana pasada en el versículo 4 de este capítulo 1 del Evangelio
de Marcos, donde se nos dice que “Juan el Bautista apareció en el desierto predicando el
pecados, la pregunta que surge es: ¿POR QUÉ SE BAUTIZÓ JESÚS? La respuesta la da el mismo
Jesús cuando le dice a Juan el Bautista en el relato paralelo de Mateo 3:15 → “Permítelo ahora;
Cita de R. C. Sproul:
“Al ser bautizado, Jesús no estaba actuando para sí mismo, sino para Su pueblo. Dado
que a Su pueblo se le exigía que guardara los Diez Mandamientos, Él tenía que guardar los Diez
Mandamientos. Del mismo modo, dado que a Su pueblo se le exigía, según el mandato del
profeta Juan el Bautista, someterse a este ritual bautismal, Él tenía que someterse al mismo”.
infringió en la cruz.
Y esta doble obediencia de Jesús, queda reflejada en el texto de Filipenses 2:5-8, que el
pastor Félix leyó para comenzar este servicio, y que quiero leer una vez más:
“Haya, pues, en vosotros esta actitud que hubo también en Cristo Jesús, el cual, aunque
existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a que aferrarse, sino que se
Mire la secuencia… Nuestro pecado le fue imputado a Jesús en la cruz. Y Su justicia nos
fue imputada a nosotros. Pero Él no habría tenido esa justicia si no hubiera vivido una vida de
perfecta obediencia.
Cita de R. C. Sproul:
“Dios no envió a Jesús a la tierra el Viernes Santo, para que pudiera ir directamente a la
cruz. Jesús no sólo tuvo que morir por nuestros pecados, sino que también tuvo que vivir por
nuestra justicia”.
Cita de Cranfield:
perfecta obediencia y auto-dedicación a Su misión que le identificaba con los pecadores, misión
profeta Isaías, cuando en el capítulo 53 y verso 12, dijo que Jesús “con los transgresores fue
contado”.
C) Marca una primera identificación con aquellos cuyos pecados habría de llevar.
II. LA APROBACIÓN DE JESÚS DE PARTE DE SU PADRE
Vs. 10-11: “E inmediatamente, al salir del agua, vio que los cielos se abrían, y que el
Espíritu como paloma descendía sobre Él, y vino una voz de los cielos que decía: Tú eres mi
En primer lugar, las palabras del Padre, “Tu eres mi Hijo Amado, en Ti, me he
Salmo 2:7 → “Ciertamente anunciaré el decreto del Señor que me dijo: Mi Hijo eres Tú,
Yo te he engendrado hoy”.
Isaías 42:1 → “He aquí mi siervo a quien yo sostengo, mi escogido, en quien mi alma se
La expresión del Padre, “Mi Hijo Amado”, puede traducirse como “Mi Hijo, el Amado”; y
más que un título mesiánico, estas palabras de aprobación divina fueron para Jesús una
Debemos tener presente que Marcos, el autor de este evangelio, es el vocero del
apóstol Pedro, el cual se refirió a este evento cuando dijo en el libro de los Hechos, capítulo
10 y versículo 38 que “Dios ungió a Jesús con el Espíritu Santo y con poder”.
Por otro lado, recordemos la palabra con la que comienza este versículo 10,
como dijimos al principio, un evangelio de acción. Pero al mismo tiempo eso no quita para
que nos detengamos en cada pasaje de este relato de Marcos y de manera especial en estos
¿Por qué lo digo? Porque en estos dos versículos podemos ver un cuadro hermoso de la
cuarenta días, siendo tentado por satanás; y estaba entre las fieras, y los ángeles le
servían”.
Es verdad que tanto Mateo como Lucas, revelan más detalles que Marcos en el relato de
la tentación de Jesús, pero en este día vamos a intentar ceñirnos al relato de Marcos que,
Vemos, una vez más la acción que Marcos le imprime a este relato con la expresión con
“el Espíritu le impulsó al desierto”. Es decir, el mismo Espíritu Santo que ungió a Jesús en Su
Este hecho pudiera parecer, en principio, una acción contradictoria de parte del Espíritu
Santo; sin embargo, aunque Dios no tienta a nadie, como vemos en Santiago 1:13, Él
tenemos un claro ejemplo de los que estoy diciendo en la vida de Job, donde Dios le da
permiso a satanás para atacar a Job, y también el relato cuando Jesús le dice a Pedro que
Y el verbo que Marcos usa para impulsar (“ERKBALLO” en el original) tiene un sentido
muy fuerte y quiere decir, literalmente, “arrojar”. Como dijo un autor: “Una vigorosa
persuasión interior del Espíritu le impeló a tomar la ofensiva en este encuentro con
satanás”.
Los cuarenta días son, posiblemente, una referencia simbólica a los 40 años de Israel en
Lo que si vemos es que la tentación era persistente y larga. La palabra satanás significa
servían”.
Y el tiempo verbal de la palabra servían sugiere que los ángeles ministraban a Jesús
Y, por último, quisiera aclarar algo en cuanto a la tentación de Jesús, en relación a las
¿Son iguales?
¿Son comparables?
Mire lo que dice Hebreos 4: 15→ “Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda
compadecerse de nuestras flaquezas, sino uno que ha sido tentado en todo como nosotros,
El hecho de que fue tentado como nosotros, ¿implica que son comparables nuestras
su propia pasión”.
Reina Valera del 60: “Sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia
es atraído y seducido”.
tenía concupiscencia ni malos deseos. La diferencia entre las tentaciones nuestras y las de
Jesús, es que las nuestras se producen en nuestro interior (malos deseos de la carne, pasiones y
que:
. Donde el primer Adán salió derrotado, el segundo Adán, Cristo salió victorioso.
C O N C L U S I Ó N
Y, SOBRE TODO, NO SÓLO SUPERÓ LA TENTACIÓN, SINO QUE TAMBIÉN ERA UN PREÁMBULO
PERMANENTE EN LA CRUZ.
1.- EL BAUTISMO DE JESÚS NOS DEBE MOTIVAR A UNA VIDA DE OBEDIENCIA.
2.- LAS PALABRAS DEL PADRE NOS DEBEN MOTIVAR A RECONOCER A JESÚS COMO EL
3.- LA TENTACIÓN DE JESÚS NOS DEBE LLEVAR A DESCANSAR EN SU VICTORIA FINAL SOBRE
A P L I C A C I Ó N
NO CREYENTE
Hace un momento dijimos que la justicia perfecta de Cristo fue imputada a Sus hijos.
Ahora bien, si tu no eres un creyente, esa justicia no ha sido imputada a ti. En primer lugar,
necesitas reconocer que no eres justo. Dice Romanos 3:10-11 que “no hay justo, ni aún uno; no
hay quien entienda, no hay quien busque a Dios”; y esto te incluye a ti. La única forma de que la
justicia de Cristo sea imputada a ti, es reconociendo que no eres justo, es decir, eres un pecador
en Jesús como tu único y suficiente Señor y Salvador. Arrepentimiento y fe. Entonces y solo
entonces, podrás disfrutar de una relación con Dios en esta vida y por toda la eternidad.
No hay nada que tu hayas hecho o puedas hacer en un futuro que te permita recibir el
favor de Dios. Cristo lo hizo por tu. Su justicia perfecta imputada a ti, concedida a ti, por medio
del arrepentimiento y la fe. Oro al Señor para que en este día puedas caer rendido al Señor
CREYENTE
Si eres creyente, acabamos de decir que este relato nos debe llenar de confianza, pero
palabras del Padre al Hijo, “Tu eres Mi Hijo amado, en Ti me he complacido”, nos deben llevar,
como dijimos en la conclusión, a reconocer a Jesús como el Unigénito Hijo de Dios, nuestro
Señor y Salvador. Pero eso implica mucho más que decirlo con nuestros labios; conlleva vivir de
tal manera que Él sea el dueño de nuestras vidas y que nosotros vivamos en completa
obediencia a Él, porque Él y solo Él es el Señor. Pero también con confianza. Recordemos
nuestras flaquezas, sino Uno que ha sido tentado en todo como nosotros, pero sin pecado”.
¿Cómo podemos aplicar a nuestras vidas el hecho de que Cristo fue tentado en todo y que no
cometió pecado? En primer lugar, debemos saber que tenemos la compasión de nuestro Señor
Pero la aplicación, es decir, aquello que tenemos que poner en práctica nos la da el
versículo 16: “Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos