Acto Del 25 de Mayo 2
Acto Del 25 de Mayo 2
Acto Del 25 de Mayo 2
2007
Bandera de Ceremonias:
Abanderado: ........................................... de ..................
1º Escolta: ........................................... de .................
2º Escolta: ........................................... de .................
Bandera Bonaerense:
Abanderado: ........................................... de ..................
1º Escolta: ........................................... de .................
2º Escolta: ........................................... de .................
• Fue en ese mismo contexto que señalábamos que imbuidos de las mismas ideas de libertad y
lucha que se escribe el Himno Nacional. Entonemos con respeto y entusiasmo, las estrofas del
Himno Nacional Argentino.
• Celebrar el 25 de Mayo es festejar la lucha por la libertad. Fueron muchos varones y mujeres
de nuestra tierra los que dieron sus esfuerzos y su vida por la emancipación.
• Para ayudarnos a reflexionar sobre estos hechos fundamentales en nuestra historia
………………………………………………………… nos leerá unas palabras alusivas.
• La decisión de nuestros próceres de crear un primer gobierno patrio, fue una demostración de
la madurez de nuestro pueblo, esta madurez se manifiesta en numerosos aspectos de nuestra
vida, y si bien implica libertad, también significa responsabilidad. La responsabilidad de
defender el sueño de una Argentina independiente.
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• Hemos compartido una jornada de alegría y esperanza. Nos hemos encontrado y hemos
compartido palabras y sentimientos. Seguramente, nos vamos fortalecidos porque, para
enseñar, para aprender, para recordar y hacer la historia, y para vivir día a día somos mucho
más que dos.
Imaginemos un día nublado y medio lluvioso, de esos que son tan frecuentes en el otoño. Ese
día fue el 25 de Mayo de 1810. Un día como hoy, pero 197 años atrás, un grupo de idealistas
se reunía en el Cabildo de Buenos Aires para deponer a un representante del rey Fernando VII
y reemplazarlo por un cuerpo colegiado.
Se buscaba dejar de ser una colonia española y comenzar a ser un país libre, con su propio
gobierno y, sobre todo, la posibilidad de crear una patria grande.
Estos hombres, tenían grandes sueños y esos sueños eran, en primer lugar, constituir una
Nación, un país nuevo, independiente, sin ninguna clase de vínculos con la antigua España ni
con ninguna otra. En segundo lugar, la idea era hacer una sociedad más justa, mediante dos
principios fundamentales: el de que la autoridad venía del pueblo, no ya del rey, y el de que
debía construirse una sociedad más igualitaria, aboliendo el régimen de castas que había
existido durante la dominación española. Estas eran las ilusiones de los hombres de Mayo.
Pero esto hombres no sólo tenían sueños, tenían la fortaleza y la determinación para hacerlos
realidad.
Este primer gobierno patrio fue sólo el primer paso hacia el desarrollo de una Argentina libre e
independiente.
Sin embargo, en estos días de economías globalizadas, estos ideales se han ido diluyendo,
aquellos ideales que en el nacimiento de la Patria movilizaron tantos sueños y tantos esfuerzos,
fueron perdiendo su significado y hoy su sentido es un poco difuso.
¿Podemos afirmar hoy en día que somos una patria libre de toda dominación extranjera?,
cuando nuestra economía depende de las naciones más poderosas.
¿Podemos hablar del ejercicio irrestricto de nuestra soberanía?, cuando nuestro territorio se
halla usurpado por capitales multinacionales.
¿Podemos asegurar nuestra independencia política?, cuando la corrupción de la clase política
es moneda corriente.
Tal vez nos toque a nosotros volver a retomar aquellos ideales y formular un nuevo significado
de la palabra Revolución. Un significado que abarque el derecho de cada argentino para
trabajar y ganarse su pan, sin debérselo a nadie sino a su propio esfuerzo. La independencia
de nuestro país de decidir según sus propios intereses. La posibilidad de que cada persona que
viva en nuestro país, tenga derecho a tener su techo, educar a sus hijos y poder prometerles un
futuro mejor.
La Revolución Argentina de hoy debe ser la que sea capaz de dar a su pueblo más educación y
los instrumentos culturales que le permitan enfrentarse en pie de igualdad a este mundo
globalizado, que insiste en dejarnos de lado. Tal vez nos toque a nosotros ser los idealistas que
llevemos a cabo esta Revolución. Y que podamos decir otra vez que “surge a la faz de la tierra
una nueva y gloriosa nación”.