Caso Clinico Diafisis Humeral

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 5

Rev esp cir ortop traumatol.

2011;55(2):120—124

Revista Española de Cirugía


Ortopédica y Traumatología
www.elsevier.es/rot

NOTA CLÍNICA

Fractura de húmero con interposición de partes blandas y paresia


radial en un niño: técnica de reducción abierta y fijación
percutánea. A propósito de un caso y revisión bibliográfica
D. López a,∗ , H. Fahandezh-Saddi a , D. García-Germán b , P. González-Onandía a ,
J. Campo c y J. Martínez a

a
Departamento de Cirugía Ortopédica y Traumatología, Hospital Universitario Fundación Alcorcón, Madrid, España
b
Departamento de Cirugía Ortopédica y Traumatología, Hospital Central de la Cruz Roja, Madrid, España
c
Departamento de Cirugía Ortopédica y Traumatología, Hospital Universitario Puerta de Hierro, Madrid, España

Recibido el 22 de noviembre de 2010; aceptado el 7 de diciembre de 2010


Disponible en Internet el 19 de febrero de 2011

PALABRAS CLAVE Resumen Una paresia del nervio radial puede ocurrir secundaria a una manipulación. Un error
Fractura húmero; diagnóstico de interposición de partes blandas puede ocasionar una manipulación repetida con
Paresia radial el consiguiente riesgo de lesión del nervio radial. Presentamos un caso de un niño con un fractura
diafisaria de húmero con interposición de partes blandas y paresia radial secundaria con buen
resultado tras reducción abierta y fijación percutánea. Revisamos el adecuado manejo en estos
casos.
© 2010 SECOT. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.

KEYWORDS Incarcerated humerus fracture with radial palsy in a child: open reduction and
Humeral fracture; percutaneous fixation technique. A case presentation and literature review
Radial palsy
Abstract Radial nerve palsy after humeral shaft fractures can be secondary to manipulation.
Incorrect diagnosis of soft tissue entrapment can lead to repetitive manipulation, putting the
radial nerve at risk. We present a case of humeral shaft fracture with soft tissue entrapment and
secondary nerve palsy that was successfully managed with open reduction and percutaneous
fixation. We discuss the correct management in these cases.
© 2010 SECOT. Published by Elsevier España, S.L. All rights reserved.

Introducción

Cuando nos encontramos con una fractura que no se reduce


de diáfisis humeral y una paresia radial, se debe diferen-
ciar entre fractura inestable o fractura irreductible, por
∗ Autor para correspondencia. interposición del nervio o por interposición muscular. Una
Correo electrónico: [email protected] (D. López). cuidadosa exploración física e interpretación radiológica son

1888-4415/$ – see front matter © 2010 SECOT. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
doi:10.1016/j.recot.2010.12.001
Fractura incarcerada de húmero con paresia radial en un niño 121

esenciales para un diagnóstico correcto. La paresia radial


asociada a fractura diafisaria de húmero es una complicación
poco frecuente en los niños. Si esta ocurre, la recuperación
es excelente en la mayoría de los casos, con una recupera-
ción entre el 78 y 100% sin cirugía. Por lo tanto, la actitud
debe ser expectante y conservadora. En paresias secun-
darias del nervio radial, que ocurren tras manipulación o
reducción, la recuperación se produce entre un 80 y 100%
sin tampoco precisar tratamiento quirúrgico. Si la paresia se
presenta tras un tiempo, probablemente se deba a la forma-
ción de callo óseo en el período de curación4 . Presentamos el
caso de un paciente con una paresia radial tras una fractura
de diáfisis humeral con interposición muscular con reducción
abierta y fijación percutánea con agujas de Kirschner.

Caso clínico

Una niña de 6 años acude a nuestro servicio de Urgencias 3


días después de sufrir un accidente de tráfico de alta ener-
gía. Evaluada en otro centro, fue diagnosticada de fractura
diafisaria de húmero derecho. Se intentó reducción cerrada
sin éxito, no existiendo déficit neurológico previo y se diag-
nóstico de fractura inestable. Figura 1 Retracción cutánea del brazo.
La paciente presentaba una deformidad en brazo dere-
cho, con equimosis en cara posterior, con una clara
retracción o arruga cutánea a nivel de la fractura1 (fig. 1). No Esta imagen radiológica junto con la retracción cutánea
crepitaba a la exploración. El examen vascular era normal, y la falta de crepitación con el movimiento, nos debe hacer
existiendo una paresia completa del nervio radial. sospechar la existencia de una interposición de tejidos. Se
En la radiografía se observa una fractura diafisaria trans- decidió confirmar bajo escopia directa, y no realizar reduc-
versa con un tercer fragmento desplazado (fig. 2). El ción cerrada, ya que por la interposición muscular, con la
fragmento distal se encuentra subcutáneo atravesando el manipulación, aún pudiendo conseguirse la reducción, se
plano muscular inmediatamente bajo la piel. podría agravar el daño neurológico. Realizamos entonces,

Figura 2 Fractura de diáfisis humeral con signo radiológico de interposición.


122 D. López et al

Figura 3 Fragmento distal del húmero a través del plano mus- Figura 4 Nervio radial.
cular.

una reducción abierta y fijación con exploración del nervio


radial.

Técnica quirúrgica

Bajo anestesia general, el paciente se coloca en decúbito


prono con un soporte radiotransparente en el brazo derecho,
se le coloca protección radiológica y se administra IV profi-
laxis antibiótica. La interposición en la fractura se confirma
con radioscopia continua.
Se realiza una incisión longitudinal posterior en al brazo,
a nivel de la fractura. Se abre la fascia, e inmediatamente
se identifica el fragmento distal protruyendo a través del
tríceps (fig. 3). El nervio radial se exploró sin signos de lace-
ración, transección o elongación (fig. 4). Se desperiostizó el
foco de fractura y se redujo la fractura en todos los planos
con control visual del nervio radial.
Se realizó una fijación percutánea retrógrada con ag. de Figura 5 Reducción y síntesis de la fractura.
k. asociada a una pequeña incisión medial para control del
nervio cubital a nivel del codo. Las agujas premoldeadas en
su extremo de 1,8 mm se avanzaron desde medial y lateral Discusión
a través del canal medular hasta la zona próxima a la fisis
proximal. Se obtuvo un montaje divergente para conseguir Las fracturas de húmero diafisarias suponen un 3% de las
una estabilidad rotacional de la fractura (fig. 5). Se colocó fracturas en pacientes menores de 16 años, generalmente
una férula en U durante tres semanas en el postoperatorio tras un trauma menor. Las fracturas producidas por alta
A las dos semanas de seguimiento había recuperado energía asocian conminución2 . La complicación neurológica
completamente la función del nervio radial. Las agujas se más frecuente es la paresia radial, que supone entre un 2 y
retiraron a las 6 semanas, no presentaba dolor, ni movilidad un 17%3-5 , estudios recientes documentan esta asociación en
a nivel del foco de fractura. Presentaba una movilidad com- un 9%6 . Y actualmente se pone en duda5-7 la mayor asocia-
pleta de hombro y codo y las radiografías mostraban correcta ción de paresia radial con cierto tipo de fractura de húmero
unión de la fractura (fig. 6). distal8 .
Fractura incarcerada de húmero con paresia radial en un niño 123

acción musculares y sensitivos muestran cambios10-12 . Sin


embargo, la sensibilidad aumenta entre los 21 y 30 días des-
pués de la lesión (dependiendo de la longitud del muñón
distal del nervio). En manos expertas, la ECO puede detectar
una interposición, o transección nerviosa pudiendo ayudar a
la elección del tratamiento13,14 .
ECO, CT y RM pueden ser de ayuda en ciertos casos (lesión
plexo braquial), pero su realización no debería retrasar una
exploración nerviosa quirúrgica indicada urgente15 .
En nuestro caso, el paciente presenta una fractura
diafisaria con interposición y paresia radial secundaria,
realizándose reducción abierta y exploración del nervio
radial.
Si se sospecha este tipo de fractura, los intentos de
reducción se deberían hacer bajo control de radioscopia
directa, para no tener la falsa sensación de fractura inesta-
ble siendo una fractura irreducible. Realizar una reducción
abierta para no provocar una paresia secundaria o agravar
más la lesión neurológica presente con la manipulación de
la fractura, podría estar indicado.
Por lo tanto, en caso de diagnosticar una fractura diafisa-
ria de húmero con retracción cutánea a nivel del foco1 , sin
crepitación, debemos considerar la posibilidad de interposi-
Figura 6 Imagen postquirúrgica. ción. En ese caso confirmado con intensificador de imagen,
no recomendamos realizar intentos de reducción cerrada
y se debe valorar deducción abierta, con exploración del
El nervio radial es particularmente vulnerable en los trau- nervio radial, si existe paresia previa asociada. Por tanto,
matismos de alta energía, por su estrecha relación con el ante la posibilidad de lesión neurológica se debe estar pre-
húmero rodeado por la cabeza lateral del tríceps a nivel de parado para asumir una cirugía de reparación de nervio
la diáfisis y su vascularización a este nivel fácilmente com- periférico.
prometida contribuye también como factor de riesgo para En nuestro caso el tratamiento quirúrgico de fractura de
su lesión9 . húmero con interposición de partes blandas asociada a pare-
La paresia primaria ocurre en el momento de la lesión sia radial con reducción abierta y síntesis con agujas fue
y se descubre con la exploración del paciente. Aproxima- efectivo.
damente del 10 al 20% de las paresias se desarrollan en el Se precisa realizar estudios adecuados, para dilucidar el
curso del tratamiento, sobre todo tras la reducción cerrada, correcto manejo de este tipo de lesiones.
y se denominan paresias secundarias. Estas paresias secun-
darias se producen más frecuentemente en las fracturas en
tercio medio y distal de húmero dafisarias3 . Si el músculo Nivel de evidencia
braquioradialis o extensor carpi radialis longus no son fun-
cionales en el momento del traumatismo, localizan el daño Nivel de evidencia V.
neurológico a nivel de la diáfisis del húmero.
El nervio periférico de puede dañar de diferentes formas,
desde una simple compresión, a una completa sección, lace-
Bibliografía
ración o elongación hasta una lesión por tracción del plexo
braquial (incluyendo avulsión de las raíces nerviosas a nivel 1. Marquis PC, Cheung G, Dwyer JSM, Emery DFG. Supracondylar
fractures of the humerus. Curr Orthopaed. 2008;22:62—9.
medular)10 . La paresia radial puede ser parcial o completa,
2. Caviglia H, Pascual C, Fernández F, Vallejos N. Pediatric Fractu-
el déficit motor completo ocurre en el 50% de los casos5 . res of the Humerus. Clinical orthopaedics and related research.
Cuando la paresia radial se produce tras la manipula- 2005;432:49—56.
ción de la fractura (paresia secundaria), muchos cirujanos 3. Shao YC, Harwood P, Grotz MR, Limb D, Giannoudis PV. Radial
abogan por la exploración directa del nervio debido a la nerve palsy associated with fractures of the shaft of the
sospecha de interposición del nervio en la fractura9 . Sin humerus: a systematic review. J Bone Joint Surg. 2005;87B:
embargo, en la revisión de Shao3 no hubo diferencias entre 1647—52.
la recuperación de las paresias primarias ni secundarias sin 4. Amillo S, Barrios R, Martínez-Peric R, Losada J. Surgical treat-
cirugía, con un resultado del 88,6 y 93,1% respectivamente. ment of radial nerve lesions associated with fractures of the
Aunque no existen estudios prospectivos, randomizados, humerus. J Orthop Trauma. 1993;7:215—21.
5. Pollock F, Drake D, Trafton P. Treatment of radial neuropathy
que comparen observación con tratamiento quirúrgico
associated with fractures of the humerus. J Bone Joint Surg.
precoz de la paresia radial tras fractura diafisaria de 1981;63A:239—43.
húmero. 6. Ekholm R, Adami J, Tidermark J, Hansson K, Törnkvist H,
El EMG podría distinguir entre neuroapraxia y axonotme- Ponzer S. Fractures of the shaft of the humerus. An epidemio-
sis entre los 9 y 11 días tras la lesión, cuando una completa logical study of 401 fractures. J Bone Joint Surg Br. 2006;88:
degeneración walleriana ha ocurrido y los potenciales de 1469—73.
124 D. López et al

7. Gregory P. Rockwood and Green’s fractures in adults. Phila- 12. Robinson LR. Traumatic injury to peripheral nerves. Muscle
delphia: Lippincott Williams & Wilkins; 2002, 973—97. Nerve. 2000;23:863—73.
8. Holstein A, Lewis G. Fractures of the humerus with radialnerve 13. Bodner G, Huber B, Schwabegger A, Lutz M, Waldenberger
paralysis. J Bone Joint Surg. 1963;48A:1382—8. P. Sonographic detection of radial nerve entrapment wit-
9. De Franco MJ, Lawton JN. Radial nerve injuries associated with hin a humerus fracture. J Ultrasound Med. 1999;18:
humeral fractures. J Hand Surg Am. 2006;31:655—63. 703—6.
10. Chaudhry V, Cornblath DR. Wallerian degeneration in human 14. Bodner G, Buchberger W, Schocke M, Bale R, Huber B, Harpf
nerves: serial electrophysiological studies. Muscle Nerve. C, et al. Radial nerve palsy associated with humeral shaft
1992;15:687—93. fracture: evaluation with US-initial experience. Radiology.
11. Naoki Kato N, Birch R. Peripheral nerve palsies associated 2001;219:811—6.
with closed fractures and dislocations. Int J Care Injured. 15. Lars. B. Dahlin. Nerve injuries. Mini-symposium: Hand trauma.
2006;37:507—12. Current orthopaedics. 2008; 22:9-16.

También podría gustarte