Valentina Cano Sucesorio
Valentina Cano Sucesorio
Valentina Cano Sucesorio
PRESTACIONES
HECHOS
Es así como, dentro de esa base legal que mi extinta madre ARTEMIA
HERNÁNDEZ GÁLDAMEZ, ejerció ese derecho y facultad que le dio la
misma Ley de formular su Testamento Público Abierto ante fedatario
público, en su calidad de ejidataria del ejido Ocozocoautla de Espinosa,
Municipio de Ocozocoautla de Espinosa, mediante el cual plasmó su última
voluntad, designándome como su única y universal heredera de todos sus
bienes, derechos y acciones que tuviere a la fecha, y si bien es cierto, en el
testamento en mención, no se señaló un orden de preferencia, también es
cierto que es que al ser la suscrita la única y universal heredera de sus
derechos, queda claro esa preferencia.
El artículo 17 de la Ley Agraria prevé la facultad del ejidatario para designar a quien deba
sucederlo en sus derechos sobre la parcela y en los demás inherentes a su calidad de
ejidatario, para lo cual bastará que formule una lista de sucesión en la que consten los
nombres de las personas y el orden de preferencia conforme al cual deba hacerse la
adjudicación de derechos a su fallecimiento; dicha lista de sucesión debe depositarse en el
Registro Agrario Nacional o formalizarse ante fedatario público. Por otra parte, acorde con la
jurisprudencia 2a./J. 11/2000, de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, de rubro: "SUCESIÓN DE DERECHOS AGRARIOS. LA ÚLTIMA VOLUNTAD DEL
EJIDATARIO FORMULADA EN TESTAMENTO NOTARIAL ES SUSCEPTIBLE DE
REVOCAR O MODIFICAR LA LISTA DE SUCESIÓN INSCRITA EN EL REGISTRO
AGRARIO NACIONAL HECHA CON ANTERIORIDAD.", nada impide que el ejidatario
otorgue testamento notarial respecto de todos sus derechos, incluyendo los agrarios, a
través del cual puede modificar o revocar la lista de sucesión hecha anteriormente. En ese
orden de ideas, la mera omisión de señalar en el testamento público abierto el orden de
preferencia de las personas designadas como herederos de los derechos parcelarios, no es
razón suficiente para declarar la nulidad de la disposición testamentaria y dejar sin efectos
la voluntad del testador, porque ante la ausencia de orden preferencial de sucesores, el
principio de indivisibilidad de la parcela ejidal se salvaguarda con la aplicación analógica del
procedimiento previsto en el último párrafo del artículo 18 de la Ley Agraria, conforme al
cual los herederos gozarán de tres meses a partir de la muerte del ejidatario para decidir
quién, de entre ellos, conservará los derechos ejidales y en caso de no ponerse de acuerdo,
el Tribunal Agrario proveerá su venta en subasta pública y repartirá el producto, por partes
iguales, entre las personas con derecho a heredar.
Contradicción de tesis 251/2009. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado del Vigésimo Cuarto Circuito, el Segundo
Tribunal Colegiado de Circuito del Centro Auxiliar de la Cuarta Región y el Segundo Tribunal Colegiado en Materias Administrativa y de
Trabajo del Séptimo Circuito. 23 de septiembre de 2009. Mayoría de tres votos. Disidentes: Genaro David Góngora Pimentel y José
Fernando Franco González Salas. Ponente: Mariano Azuela Güitrón. Secretaria: Amalia Tecona Silva.
Tesis de jurisprudencia 162/2009. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del treinta de septiembre de dos
mil nueve.
Nota: La tesis 2a./J. 11/2000 citada, aparece publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XI,
febrero de 2000, página 231.
El artículo 17 de la Ley Agraria, que tiene por objeto proteger al ejidatario en sus derechos
agrarios, establece, sin mayores formalismos, que tiene derecho de designar a quien o
quienes deban sucederle en el goce de sus derechos sobre la parcela ejidal mediante un
trámite ágil, práctico y sencillo, con la simple formulación de una lista de sucesión, que debe
depositar en el Registro Agrario Nacional o formalizada ante fedatario público, pero nada
impide que también exprese su última voluntad, a través de testamento en los términos de
las leyes civiles, modificando o revocando aquella lista, pues si la misma Ley Agraria le
concede derecho de revocar o modificar una lista anterior con las mismas formalidades con
que se hubiera realizado, con mayor razón podrá hacerlo en un testamento notarial.
Contradicción de tesis 108/98.—Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado del Noveno Circuito y el Primer Tribunal
Colegiado del Décimo Quinto Circuito.—14 de enero de 2000.—Cinco votos.—Ponente: Juan Díaz Romero.—Secretario: Aristeo Martínez
Cruz.
Tesis de jurisprudencia 11/2000.—Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión pública del catorce de enero de dos mil.
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XI, febrero de 2000, página 231, Segunda Sala, tesis 2a./J.
11/2000; véase ejecutoria en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XI, febrero de 2000, página 232.
Apéndice 1917-2000, Tomo III, Materia Administrativa, Jurisprudencia, Suprema Corte de Justicia de la Nación, página 227, Segunda
Sala, tesis 215.
De una interpretación teleológica de los artículos 185 a 187 y 189 de la Ley Agraria, se
advierte que los tribunales de la materia tienen la obligación de recabar oficiosamente
pruebas y acordar su práctica, ampliación o perfeccionamiento cuando sean indispensables
para conocer la verdad sobre los puntos sometidos a litigio; por tanto, la omisión de actuar
en ese sentido constituye una violación a las leyes del procedimiento que afecta las
defensas del quejoso, análoga a las previstas en el artículo 159 de la Ley de Amparo,
vigente hasta el 2 de abril de 2013, e impugnable en el juicio uniinstancial que se interponga
contra la resolución definitiva del asunto, dado que la referida obligación probatoria resulta
indispensable, a fin de que el fallo se emita conforme a derecho.
PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS PENAL Y ADMINISTRATIVA DEL VIGÉSIMO PRIMER CIRCUITO.
Amparo directo 256/2008. Adelaido Gregorio Félix. 6 de febrero de 2009. Unanimidad de votos. Ponente: Jorge Carreón Hurtado.
Secretario: Alfredo Rafael López Jiménez.
Amparo directo 315/2010. Birjilio Gomes Brito. 24 de febrero de 2011. Unanimidad de votos. Ponente: María Adriana Barrera Barranco.
Secretario: Tomás Flores Zaragoza.
Amparo directo 391/2010. Agustín Ayala Perdomo. 3 de marzo de 2011. Unanimidad de votos. Ponente: Xóchitl Guido Guzmán.
Secretario: Raúl Sánchez Aguirre.
Amparo directo 43/2011. Dominga Alarcón Guevara. 9 de junio de 2011. Unanimidad de votos. Ponente: Guillermo Sánchez Birrueta,
secretario de tribunal autorizado por la Comisión de Carrera Judicial del Consejo de la Judicatura Federal para desempeñar las funciones
de Magistrado. Secretaria: María Alejandra Popoca Pérez.
Amparo directo 272/2013. 8 de noviembre de 2013. Unanimidad de votos. Ponente: Jorge Carreón Hurtado. Secretario: Guillermo
Sánchez Birrueta.
Nota: En relación con el alcance de la presente tesis, destaca la diversa jurisprudencial 2a./J. 54/97, de rubro: "JUICIO AGRARIO.
OBLIGACIÓN DEL JUZGADOR DE SUPLIR LA DEFICIENCIA DE LA QUEJA, DE RECABAR OFICIOSAMENTE PRUEBAS Y DE
ACORDAR LA PRÁCTICA, AMPLIACIÓN O PERFECCIONAMIENTO DE DILIGENCIAS EN FAVOR DE LA CLASE CAMPESINA.", que
aparece publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo VI, noviembre de 1997, página 212.
Esta tesis se publicó el viernes 11 de abril de 2014 a las 10:09 horas en el Semanario Judicial de la Federación y, por ende, se considera
de aplicación obligatoria a partir del lunes 14 de abril de 2014, para los efectos previstos en el punto séptimo del Acuerdo General
Plenario 19/2013.
De una recta y armónica interpretación de los artículos 185, 186 y 187 de la Ley Agraria, se
colige que los tribunales agrarios deben recabar las pruebas documentales ofrecidas por las
partes en el juicio natural, que se encuentren en diversas dependencias, cuando tengan
relación con la litis; sin que ello implique una asesoría técnico-jurídica en favor del oferente
de dicho medio probatorio, sino una forma de poder establecer la verdad buscada en la
contienda en cuestión; de ahí que si el tribunal responsable se niega a proveer en términos
de los preceptos legales referidos, su proceder se traduce en una violación a las leyes que
rigen el procedimiento, prevista en la fracción III del artículo 159 de la Ley de Amparo.
PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGÉSIMO PRIMER CIRCUITO.
Amparo directo 175/97. Moisés Procopio Escobar y Javier García Procopio. 17 de abril de 1997. Unanimidad de votos. Ponente: Joaquín
Dzib Núñez. Secretario: Salvador Vázquez Vargas.
DERECHO
II. Rigen el fondo del asunto los artículos 12, 14, 16 fracción II, 17, 18 y
demás relativos de la Ley Agraria.
III. Rigen el procedimiento los artículos 163, 164, 167, 170, 172, 178, 185,
186, 191 y demás relativos de la Ley Agraria, 322, 323, 324 y demás
relativos del Código Federal de Procedimientos Civiles de aplicación
supletoria en materia agraria.
PRUEBAS
Todas las pruebas antes reseñadas las relaciono con todos los hechos de la
presente demanda.
PROTESTO LO NECESARIO