Detras de Los Textos
Detras de Los Textos
Detras de Los Textos
Instituto Mexicano de
Ciencias y Humanidades
www.imch.org.mx
IMCH (2015)
Detrás de los Textos:
Una aproximación al significado1.
Según los estudiosos de la comunicación humana (Ferrés, 1996) ésta tiene lugar mediante
dos grandes vías: la racional y la emotiva. La primera vía trabaja a base de argumentos,
tiene como finalidad el convencimiento del receptor, se rige por leyes lógicas, toma en
cuenta la temporalidad de los fenómenos y también la causalidad de los mismos. Desde el
punto de vista psicológico, la vía racional apela al consciente del receptor y por lo mismo,
sus argumentaciones son susceptibles de ser rebatidas y sujetas a discusión.
La vía emotiva, como su nombre lo indica, trabaja generando emociones para inducir
conductas en el receptor. El lenguaje que emplea es simbólico en tanto que los hechos y
experiencias que se expresan son representaciones de los sentimientos, pensamientos y
experiencias internas de las personas. Dado el carácter metafórico de este lenguaje, las
leyes que lo rigen son las de la intensidad, condensación y desplazamiento. Desde el punto
de vista psicológico la vía emotiva apela la inconsciente del receptor, por lo cual no puede
ser rebatida y se presta a la manipulación. Lo anterior convierte a dicha vía en la idónea
para la publicidad.
a) En las telenovelas el jefe y la bonita son casi siempre: blancos y de ojos claros y los
subordinados y los “criados” son morenos. ¿Tendrá esto que ver con la
internalización de patrones de belleza?
b) Los villanos de las telenovelas suelen ser agredidos en su vida cotidiana por el
público.
c) Cuando ocurre el desenlace de una telenovela se para el tránsito de la ciudad.
d) Los patrones de belleza masculinos: antes eran delgados y ahora musculosos.
1
Texto correspondiente a la conferencia presentada en la Sesión Académica del Instituto Mexicano de
Ciencias y Humanidades el 8 de septiembre de 2015.
e) Se dan identificaciones siniestras: el que atacó a Reagan, identificado con la
película “Taxi Driver”, o el joven Holmes, que asesinó a niños en una escuela,
identificado con el “guasón” interpretado por Heath Ledger.
Como puede observarse, los ejemplos incluyen desde los cuentos “de hadas” hasta las
grandes tragedias Shakespeareanas. Sin embargo, resulta oportuno recordar que en la
literatura los problemas humanos universales, los impulsos internos y las soluciones se
ofrecen en lenguaje simbólico (Fromm, 1957), por ello deben interpretarse en forma
analógica, como metáforas y no en forma literal, porque conduciría a absurdos y resultaría
reduccionista. Así pues, en la literatura los procesos internos del ser humano se externalizan
en forma metafórica. Los textos dan sugerencias simbólicas de soluciones a los problemas
planteados. Se puede afirmar (Bettelheim, 1994) que los textos literarios presentan en
forma imaginaria la esencia del desarrollo humano normal.
Ahora bien, el proceso anterior sucede dentro de la vía de la comunicación emotiva y por lo
tanto, va desde el inconsciente del autor (emisor) que a veces puede ser el inconsciente
colectivo, al inconsciente del lector (receptor). Es bastante frecuente que dicho proceso no
pase por la conciencia y quede implícito.
Por lo anterior, resulta importante hacer explícito el mensaje, lo que sería equivalente
despejarlo. Entonces leer, en el sentido más superficial permite por ejemplo seguir
instrucciones, usar manuales, recibir información, etc. Pero leer en el sentido más amplio
implica: recibir la HERENCIA CULTURAL de la humanidad; es decir ni más ni menos
que el compendio de la experiencia humana respecto a problemas de todo tipo y sus
soluciones, (aunque se lleve a cabo en forma inconsciente). Sin embargo cuando se
analizan los textos y se INTERPRETAN (se hace explícito su significado) se obtiene una
riqueza mayor del acto de leer.
Si consideramos el “Principio de Yoneda” que dice que para conocer un objeto de estudio
debemos aproximarnos a él desde muchos puntos de vista, entonces podemos afirmar que
un texto, leído en el amplio sentido, requiere ser visualizado desde varios puntos de vista,
algunos de los cuales son, para efectos de este trabajo: el de la FORMA (ensayo, narrativa,
poesía, teatro), el del CONTENIDO (que se refiere al tema que aborda el texto) y el del
SENTIDO o SIGNIFICADO del mismo (que alude a los problemas humanos trabtados en
forma literal o simbólica y a las ideas o valores y puntos de vista que plantea).
Por otra parte, dada la identificación que “engancha” e involucra a los receptores, se
produce una necesidad de soluciones a problemas humanos en forma de: novelas, cuentos,
series de televisión, etc. que genera un CONSUMO de las mismas, esto a su vez se presta
para comercializarlas.
En efecto eso es lo que hacemos cuando decimos que estamos en presencia de obra
artística, lo mismo si asistimos a una puesta en escena de obras de Ibsen, Shakespeare o
algún dramaturgo y experimentamos una “catarsis”, que si bailamos al ritmo de una
canción “pegajosa”, hipnótica (“¡Querida! ¿Dime cuándo tú vas a volver?” o “¡Con el
apagón: ¿qué es lo que sucede?”). También decimos que estamos ante el arte cuando
lloramos al calor de un tequila cantando una canción de despecho (“No tengo trono, ni
reina, ni nadie que me comprenda; pero sigo siendo El Rey” o “Y tú que te creías el rey de
todo el mundo”), o cuando nos desahogamos expresando sentimientos de revancha con
canciones (“Unas nalgadas con penca de nopal” o “Mala mujer no tiene corazón. ¡Má-ta-
la!” o “A los ex no se les llora: se les reemplaza” o “Rata de 2 patas”) alegando que,
además de artísticas, estas obras son humorísticas (aunque entre broma y broma…).
Cuando nos divertimos sanamente en compañía de los hijos con alguna película de Walt
Disney, consideramos que estamos asimismo introduciéndolos al séptimo arte.
Si nos decidiéramos como receptores a interpretar lo que nos comunican los textos que nos
emocionan o simplemente nos detuviéramos a reflexionar un poco en aquello con lo que
nos enganchamos y nos preguntáramos con qué nos estamos identificando, posiblemente
nos sorprenderíamos. Y es que no puede menos que resultar interesante el percatarse de que
“Otelo, el moro de Venencia” no era celoso y que dicha obra puede leerse como obra
psicológica, poética e incluso también desde el punto de vista de los errores que cometen
los jefes en el ámbito laboral; es decir que se trata de una obra rica y compleja, bella y
estructurada, aunque no genere ganancias económicas a los que la presentan.
También puede resultar asombroso descubrir que una canción que ha sido merecedora de
premios por su mensaje “positivo” y por supuesto que ha vendido bastantes discos y
recaudado mucho dinero como es el caso de “Tiempos mejores” de Sergio Andrade es en
su letra de una gran simplicidad y su contenido, de aparente crítica social, no propone nada,
se reduce a decir que las cosas están mal y que hay esperar tiempos mejores. ¿Cuál es el
mensaje? ¿No hagas nada y espera?
Mención especial merecen las canciones de “revancha” al estilo de “Unas nalgadas con
penca de nopal” o “Mala mujer no tiene corazón. ¡Má-ta-la!” Bien dicen que no hay que
tomarlas en serio, que son bromas. Pero…¿qué tan chistoso es golpear o matar a una mujer,
por mala que sea? ¿Se las toman a guasa los golpeadores? ¿Habrá que considerarlas parte
de la picaresca nacional en un país con un enorme índice de violencia de género? Lo que sí
es claro es que reditúan muchísimo dinero, pues con su tonada sencilla y ritmo repetitivo
inducen estados hipnóticos de identificación inconsciente…Pero: ¿son artísticas?
Hasta ahora hemos hablado de los textos en las canciones populares. Sin embargo las
identificaciones inconscientes se producen en toda comunicación vea emotiva y el cine no
es la excepción. Tomemos a las películas de Walt Disney “Mujer Bonita” por ejemplo.
La trama es muy sencilla: sucede en los años de 1990, en California, Estados Unidos.
Vivian, una hermosa joven norteamericana huye de su casa con el novio, que la lleva a la
ciudad de Los Ángeles y luego la abandona. Decidida a regresar a su casa pero “con
honor”, sin llegar derrotada y humillada, resuelve ponerse a trabajar y una amiga la
convence de que, dado lo bonita que es, lo que le conviene es laborar de prostituta, ya que
así logrará una mayor cantidad de dinero en un menor tiempo del que le llevaría juntar lo
mismo en otro tipo de trabajo.
Ante todo lo anterior Edward la redime: despide y golpea al socio lujurioso y la lleva a la
boutique donde, haciendo uso de su tarjeta de crédito y declarando que “va a gastar una
cantidad de dinero OBSCENA”, hace que la dependienta la atienda humildemente.
De más está decir que “Pretty Woman” resultó una película sumamente exitosa y que
aportó millones de dólares a la compañía de Disney (Giroux, 1996). Esto resulta lógico, ya
que la producción cuenta con súper estrellas como actores principales, tiene toda la
tecnología, magníficos escenarios, contrataron a un famoso grupo de rock para
musicalizarla y todo lo concerniente al ramo. Pero…¿qué ideas implícitas propone? ¿Con
qué se están identificando los receptores?
¿Es eso lo que queremos que sea la mentalidad y los valores de los jóvenes y niños?
¿Esto es arte?
Bibliografía
Ha trabajado por más de 30 años como profesora de Tiempo Completo en el Departamento de Geotecnia y también imparte clases en la
División de Ciencias Sociales y Humanidades de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Ha recibido distinciones como la “Cátedra Especial Nabor Carrillo” de la Facultad de Ingeniería, UNAM, la medalla “Gabino Barreda”
en la Carrera de Pedagogía y el premio “Sor Juana Inés de la Cruz” por su trayectoria en la Facultad de Ingeniería.
Es autora de 4 audiolibros sobre la vida cotidiana en la Facultad de Ingeniería, numerosos artículos técnicos, libros de apuntes en la rama
de Geotecnia. Su línea de investigación es la vida cotidiana de la Facultad de Ingeniería y la Teoría Curricular.