Felicidady Calidad Vida

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Felicidad y calidad de vida

José de Jesús García Vega


Editor

Colaboradores:
Luis Butten
Richard Easterlin
Reto Felix
Nicole Fuentes
José de Jesús García Vega
Alejandro Tapia
Ruut Veenhoven
Índice

Prólogo 7
García Vega, José de Jesús, ed.
Felicidad y calidad de vida
Coyoacán, Ciudad de México ¿Qué hace feliz a la gente?
Editora Nómada, 2017 Richard Easterlin 15
152 págs., 15 x 22.5 cm.
ISBN: 978-607-96638-6-5
¿Absoluta o relativa? La felicidad en función del ingreso, la
adquisición y el consumo
Belisario Domínguez 17-B Luis Butten y Reto Felix 29
Colonia Villa de Coyoacán
Coyoacán, Ciudad de México
México, CP 04000 La felicidad y el dinero
Nicole Fuentes 41
Primera edición, Ciudad de México, 2017
La calidad de vida en México y el mundo
José de Jesús García Vega 49
Edición y diseño de interiores: Katia Ibarra
Diseño de portada: Liv Mendoza Religión y felicidad en México: 10 años de estudio
Alejandro Tapia 67

Crisis económica en México y calidad de vida


Alejandro Tapia y José de Jesús García Vega 81

© José de Jesús García Vega


© Editora Nómada
Felicidad: lecciones de la investigación empírica
Se prohíbe la reproducción parcial o total de esta obra, por cualquier medio, sin Ruut Veenhoven 91
previo permiso y por escrito del editor

Impreso en México / Printed in Mexico


Bibliografía y lecturas recomendadas 107
Prólogo
José de Jesús García Vega

E
l tema de felicidad y los conceptos, aparentemente similares,
como calidad de vida, bienestar subjetivo y satisfacción con la
vida han ocupado buena parte de la literatura reciente. En revis-
tas especializadas como Social Indicators Research, Journal of Happi-
ness Studies y Applied Research in Quality of Life podemos encontrar
un sinnúmero de artículos sobre estos temas que basan sus publi-
caciones en investigaciones con alto rigor científico. En un reciente
artículo, Ed Diener indica que las publicaciones acerca del bienestar
subjetivo rebasan la cifra de 10 mil por año. Por otro lado, publica-
ciones como el Time, The Economist y, más recientemente, el Harvard
Business Review, han dedicado las portadas de algunos de sus núme-
ros al tema de la felicidad y han incluido como parte sustancial algu-
nos artículos que destacan la importancia de su estudio.
Existe un aparente consenso entre los investigadores sociales de
que, en la segunda mitad del siglo xx, la atención se centró en la pro-
ducción de bienes y servicios para satisfacer las necesidades de una
población creciente. Para ello, en este periodo, la humanidad dedicó
gran parte de sus esfuerzos al desarrollo de tecnologías, y los seres
humanos se concentraron en la producción y el consumo, con la
convicción de que un mayor consumo era el camino directo hacia la
satisfacción de necesidades y la felicidad. Algo falló en esta percep-
ción. Estudios alrededor del mundo han demostrado que pese a los
incrementos en la producción de bienes y servicios, la población en
general no ha sido más feliz. El Dr. Richard Easterlin, colaborador en
este volumen, fue un pionero en descubrir la escasa o tal vez nula
relación entre el crecimiento económico y el aumento de la felicidad.
Esta es la “paradoja de Easterlin”, establecida en los años 70, la cual ha
desatado una buena cantidad de estudios que buscan probar, criticar
o simplemente utilizar esta paradoja para analizar la relación entre el
dinero y la felicidad. Cierta o no, la comunidad científica debe sen-
tirse muy agradecida por esta llamada de atención que de alguna

7
8 José de Jesús García Vega Prólogo 9

manera desató un interés en el tema de la felicidad, que ciertamente satisfacción laboral en la empresa se vuelven elementos estratégicos
va más allá del simple crecimiento económico. para el éxito y la obtención de una ventaja competitiva. Este hecho se
Afortunadamente, el mismo grupo de investigadores que se dedi- destaca en el reporte de bienestar de 2012 del Foro Económico Mun-
ca a estos temas ha llegado a la conclusión de que la primera parte dial, que se reúne en Davos todos los inviernos: las empresas deben
del siglo xxi está destinada a regresar la atención a temas más impor- mencionar en su reporte anual, además de sus resultados financieros,
tantes para el ser humano y que habían quedado fuera de la agenda el estado de bienestar de sus empleados. La lectura de esta recomen-
principal del hombre: la felicidad y el medio ambiente. Es así que en dación puede ser que si bien se pueden obtener buenos resultados
varios países y en diversas organizaciones internacionales se ha reto- en el corto plazo, lo único que garantiza su continuidad es tener un
mado el tema de la felicidad y el bienestar en su concepción integral capital humano capaz y satisfecho con lo que hace.
como parte importante del desarrollo y lo han colocado como parte En este libro nos complace sobremanera contar con dos de los más
de la agenda pública. Durante el iv Foro de la ocde dentro del proyecto destacados investigadores en el tema de la felicidad a nivel mundial:
“Measuring Progress”, realizado en Nueva Delhi en octubre de 2012, el Dr. Richard Easterlin y el Dr. Ruut Veenhoven. Como se mencionó
se presentaron avances de las iniciativas oficiales encaminadas a la anteriormente, el Dr. Easterlin generó uno de los primeros estudios
medición de la felicidad y el bienestar subjetivo. Dentro de estas ini- sobre la relación entre el dinero y la felicidad y causó tal efecto en
ciativas destacan la de Gran Bretaña, Francia, Chile y, afortunadamen- los investigadores de su época que se acuñó en su nombre la famosa
te para quienes habitamos en este país, la de México. “paradoja de Easterlin”. Sus contribuciones posteriores han abonado
La medición y el monitoreo de la felicidad no es un asunto trivial. al estudio de esta relación y también a la relación que existe entre la
Saber cómo está la gente y cómo se siente en su entorno es algo muy felicidad y el desarrollo de las generaciones, dando luz a importantes
importante. A nivel país, podemos encontrar una situación en la que conclusiones que, entre otras, se muestran en la contribución con la
los indicadores materiales o económicos se encuentran en un muy que inicia este libro denominada “¿Qué hace feliz a la gente?”.
buen nivel y, aun así, la gente se siente inconforme. Entre otros asun- El Dr. Veenhoven ha liderado un proyecto que ha sido una referen-
tos, esta situación fue la que llevó al expresidente francés, Nicolás cia obligada para todos los investigadores interesados en el tema de
Sarkozy, a buscar alternativas de medición que mostraran la situación la felicidad: la Base de Datos Mundial de la Felicidad. Este proyecto,
real de la población y no sólo los avances económicos. Esta medición con sede en la Universidad Erasmus de Róterdam, contiene una gran
del bienestar subjetivo también se vuelve relevante en el contexto cantidad de referencias bibliográficas en una gran variedad de idio-
laboral, en virtud de las evidencias encontradas que relacionan la mas, además de contar con bases de datos y referencias de investi-
productividad de las empresas con la satisfacción de los empleados. gadores que están involucrados en el tema. Sus escritos son también
Nuevamente, no basta proveer de bienes materiales (léase sueldo y una referencia en la concepción de lo que es la felicidad y cómo se
prestaciones) a los empleados, sino que es imperativo explorar cómo comporta este aspecto en los diferentes países del mundo. Su contri-
se sienten para poder tomar decisiones en consecuencia y así elevar bución “Felicidad: lecciones de la investigación empírica” cierra esta
la productividad de la empresa. obra y nos da un recorrido por los conceptos, mediciones y compara-
Varias instituciones e investigadores, entre ellos el Harvard Business ciones de las distintas encuestas con las que cuenta su base de datos.
Review, han encontrado una fuerte relación entre la productividad y Además de las contribuciones de estos destacados investigadores
la satisfacción laboral, haciendo de esta tarea no sólo un movimiento a nivel internacional, en este libro se incluyen las aportaciones de in-
en busca de un reconocimiento de responsabilidad social o de bue- vestigadores relacionados con el Centro de Estudios para el Bienestar
na voluntad, sino que la medición y el monitoreo de la felicidad y la de la Universidad de Monterrey (udem). El primero de ellos es obra de
10 José de Jesús García Vega Prólogo 11

Luis Butten, graduado de la licenciatura en Mercadotecnia Interna- los estudios encontrados a la fecha señalan que esta situación no se
cional, y Reto Felix, quien en su tiempo fuera profesor de mercado- presenta en forma generalizada. De hecho, en países industrializados
tecnia en dicha universidad. Butten y Felix toman como referencia hay evidencias de que los incrementos en el ingreso per cápita no ha
un artículo de Christopher Hsee, Yang Yang, Naihe Li, Luxi Shen para sido acompañado de un incremento en la felicidad. Estos hallazgos
replicar un experimento en el cual se busca identificar la relación en- dan pie para que la autora le dedique un espacio más extenso a la
tre la felicidad y la posesión material, expresada ésta en términos de última pregunta y así explica, con base en varios elementos como los
posesión de recursos, capacidad de compra y disfrute de los bienes valores, el materialismo, las comparaciones y la habituación, el por-
adquiridos (o en términos utilizados por los autores: ingreso, adqui- qué más dinero no necesariamente genera una mayor felicidad.
sición y consumo). Ellos parten de la hipótesis de que hay diferencias
En un intento de ir más allá del concepto de felicidad como me-
sustanciales si evaluamos la felicidad que generan estas posesiones
dida de progreso, José de Jesús García Vega propone un índice de
materiales. Esto es, en términos materiales no es lo mismo tener para
calidad de vida en el cual se combinen medidas objetivas y subjeti-
comprar (ingreso), comprar (adquisición) o disfrutar de lo comprado
vas. Para ello, señala que los resultados de un país como México pue-
(consumo). Analizando diferentes niveles de recursos, llegan a la con-
den ser contrastantes, dependiendo de la medida de progreso que
clusión de que las posesiones materiales son más importantes en tér-
se utilice. El Dr. García utiliza los resultados a nivel internacional de
minos relativos que en términos absolutos, siempre y cuando se trate
los indicadores tradicionalmente objetivos de progreso como el pib
de posesión de recursos y de capacidad de compra, más no así en tér-
per cápita y muestra cómo nuestro país se coloca muy por debajo
minos de disfrute de los bienes comprados. En esta última condición,
de las potencias industrializadas al ubicarse en la posición 61 (datos
esto es, en el disfrute de los bienes comprados, las posesiones son
del fmi de 2010). Por otro lado, señala que si se toma un indicador
más importantes en términos absolutos que en términos relativos,
de bienestar subjetivo, como lo es la felicidad, México ocupa el pri-
haciéndonos ver que a la hora del disfrute es cuando efectivamente
mer lugar de acuerdo a la Encuesta Mundial de Valores 2005-2008.
el dinero sí hace diferencia.
Dada la imposibilidad de que una sola de estas dos medidas refleje el
Nicole Fuentes retoma la relación entre la felicidad y el dinero para bienestar integral de las personas, García Vega propone una medida
analizar cuatro preguntas fundamentales: ¿son más felices las perso- compuesta en la que se incluyen elementos objetivos y subjetivos
nas que viven en países más ricos? Dentro de un país determinado, del bienestar de las personas. Basado, entre otras aportaciones, en el
¿son más felices las personas que tienen más dinero? ¿Aumenta la llamado “Reporte Stiglitz”, el autor afirma que el bienestar debe ser
felicidad cuando crece el ingreso? Y por último, ¿por qué más dinero multidimensional y, para ello, deben considerarse diversos aspectos
no se traduce necesariamente en una mayor felicidad? La respuesta que en conjunto reflejan la calidad de vida. Al final, García Vega utiliza
a la primera interrogante es positiva y esta afirmación está basada la matriz de lo que él denomina “el paraíso de Michalos” para justificar
en múltiples estudios. El porcentaje de personas felices en los paí- la incorporación de la medición de indicadores subjetivos en el bien-
ses ricos tiende a ser mayor que en los países con menos recursos. estar integral de las personas.
También, basada en estudios, Nicole Fuentes señala que no necesa-
En la contribución de Alejandro Tapia, se aborda un análisis de la
riamente las personas que tienen más dinero son más felices en un
felicidad y su relación con la religión en nuestro país. Inicia su escrito
determinado país. Cita incluso algunos estudios realizados en Méxi-
con una descripción del panorama religioso en México y los valores
co. La tercera pregunta nuevamente merece una respuesta indefini-
de los mexicanos, para después concentrarse en un estudio parti-
da: a pesar de la sabiduría convencional económica que establece
cular realizado en la Zona Metropolitana de Monterrey en 2002. Se-
que a mayor ingreso la satisfacción de las personas debe ser mayor,
ñala que si bien la religión católica es la que predomina en el país,
12 José de Jesús García Vega Prólogo 13

las preferencias religiosas varían de acuerdo a las regiones. Advierte presenta una gran cantidad retos. Desde las diferentes concepciones
también que existe una tendencia a la baja en el comportamiento de los términos, de su medición, interpretación de los resultados y la
religioso de los mexicanos. Por otro lado, y acorde a otros estudios, selección de las diferentes muestras en las cuales se aplican los es-
Tapia sostiene que los mexicanos somos un grupo feliz, aunque su tudios, las conclusiones a las que se llega distan aún de formar un
análisis de los resultados de la Encuesta Mundial de Valores refleja conjunto sólido de hallazgos que nos lleve a establecer una teoría
un poco o nula relación entre la religión y la felicidad. Centrándose general aceptada de la felicidad y la calidad de vida. Las diferencias
en los resultados correspondientes a la Zona Metropolitana de Mon- culturales y, más aún, la falta de convencimiento de algunos sectores
terrey, la relación entre la satisfacción con su religión y la felicidad es de la población sobre la importancia de la felicidad y de la medición
más evidente, al igual que la relación entre la felicidad y quienes le del bienestar en forma integral, hacen que los intentos realizados
dan importancia a Dios. Finalmente, Tapia compara la percepción de sean apenas pequeños granos de arena que van formando un cuer-
estudiantes de dos entidades académicas, una de Monterrey y otra po de conocimientos que habrán de servir de base para las decisio-
del Distrito Federal, y encuentra que la importancia que le otorgan nes relevantes de un país, de los estados, de los municipios y aun de
a la religión es muy diferente, siendo los estudiantes de Monterrey las empresas que buscan progresar.
quienes más creen en Dios y en la religión.
Una de las frases que quizá refleje con mayor claridad es estatus de
Finalmente, en un intento por encontrar una asociación entre las la investigación en este tema es: “En el camino de tu vida no es tan
crisis económicas y la felicidad, Alejandro Tapia y José de Jesús Gar- importante la distancia a la que has llegado, sino la dirección que lle-
cía presentan un análisis de lo que implica y lo que se puede hacer vas”. En el estudio de la felicidad y la calidad de vida es evidente que
cuando se presenta una crisis como la vivida en México y el mundo aún falta mucho camino por recorrer. Lo que resulta prometedor es
en 2008 y 2009. La contribución inicia con una descripción del con- que parece que vamos en la dirección correcta.
cepto de crisis y hace una diferenciación entre las diversas “crisis eco-
nómicas” argumentando que no todas son iguales y que los impac-
tos pueden ser diferentes en los diferentes grupos de la población.
Sin buscar ser un tratado extensivo de las teorías que relacionan el
dinero con la felicidad, los autores repasan algunas propuestas, en-
tre ellas, la conceptualización de los placeres y las gratificaciones de
Martin Selligman, la de las discrepancias de Alex Michalos, la teoría
de la adaptabilidad al ingreso y retoman la matriz del paraíso y del
infierno del propio Michalos. Concluyen que se requiere considerar
los aspectos objetivos y subjetivos del bienestar, tal y como se propo-
ne en los trabajos que toman la calidad de vida como indicador del
bienestar integral de los seres humanos. Del mismo modo, se presen-
tan algunas recomendaciones para enfrentar las crisis económicas,
que si bien en muchos de los casos son inevitables, el sufrimiento
derivado de las mismas es, hasta cierto punto, opcional.
Aun cuando los estudios y las investigaciones relacionadas con los
conceptos de felicidad y calidad de vida han sido extensos, aún se
¿Qué hace feliz a la gente?
Richard A. Easterlin

C
reo que es seguro decir que a la mayoría de nosotros le gustaría
ser más feliz, y tener las “llaves de la felicidad.” Durante siglos,
este tema era competencia exclusiva de los filósofos y teólo-
gos, quienes especularon y ofrecieron recetas sobre “la buena vida”.
Recientemente, el tema de la felicidad se ha incorporado al dominio
de las ciencias sociales, en primer lugar en la psiquiatría (donde el
inverso de la felicidad, la depresión, fue el centro de esta disciplina) y
después, desde aproximadamente 1950, en las ciencias sociales con-
vencionales. El impulso para la investigación en las ciencias sociales
en el último medio siglo ha sido el desarrollo de las encuestas de po-
blación que indagan sobre el sentimiento de bienestar en las perso-
nas. Una pregunta muy simple de una encuesta sería, por ejemplo:
“En general, ¿qué tan feliz diría usted que es: muy feliz, algo feliz o no
muy feliz?” Otra pregunta podría ser, “¿qué tan satisfecho está usted
con su vida como un todo: mucho, algo, más o menos, poco, o nada
en absoluto?”. Me imagino que cada uno de nosotros, puede respon-
der fácilmente a tales preguntas sobre los sentimientos de bienestar,
así como la mayoría de los encuestados lo hacen.
Con los años, la literatura metodológica se ha desarrollado para
darle valor a las respuestas de estas preguntas. El consenso profesio-
nal es que las respuestas, aunque no sin sus problemas, son signifi-
cativas y comparables razonablemente entre grupos de individuos.
Aunque existen sutiles diferencias entre la felicidad y la satisfacción
de vida, para efectos del presente objetivo, voy a tratarlas como me-
didas intercambiables sobre los sentimientos generales de bienestar,
es decir, del bienestar subjetivo. Mi trabajo se centrará en los datos de
la encuesta sobre las causas de bienestar subjetivo, lo que estamos
aprendiendo al respecto, lo que podríamos hacer, como individuos,
para mejorar dicho bienestar.
A medida que avanzo voy a discutir dos teorías de bienestar, ambas
importantes y diferentes, una de psicología y la otra de economía.

15
16 Richard A. Easterlin ¿Qué hace feliz a la gente? 17

Éstas son lo que podríamos llamar la “tendencia central” en la actua- Fuentes de la felicidad
lidad en cada disciplina, no hace falta decir que no hay nada como la
Mi análisis se guía por lo que las personas dicen acerca de lo que las
unanimidad.
hace felices. A principios de 1960, el psicólogo social Hadley Cantril
En psicología, la teoría del punto de referencia o “set point theory”, llevó a cabo un estudio intensivo en catorce países del mundo, ricos y
ha ganado cada vez más atención en la última década. Se piensa que pobres, capitalistas y comunistas, haciendo preguntas abiertas sobre
cada individuo tiene un punto de referencia fijo de felicidad o de sa- lo que la gente quiere de la vida y lo que sería necesario para que
tisfacción de la vida determinada por la genética y la personalidad. sus vidas fueran completamente felices. Me gustaría hacer énfasis en
Eventos de la vida como el matrimonio o el divorcio, la pérdida el carácter abierto de la encuesta de Cantril. Ha habido muchos es-
de un trabajo, y alguna discapacidad grave o enfermedad, pueden tudios sobre los valores y las metas de las personas, pero casi todos
desviar temporalmente a una persona por encima o por debajo de presentan al encuestado una lista de opciones predeterminadas por
este punto, pero con el tiempo cada individuo se ajusta a las nuevas el entrevistador. Cantril, por el contrario, deja que cada participante
circunstancias, y vuelve a establecer un punto base. Los psicólogos hable por sí mismo.
llaman a este proceso de ajuste “adaptación hedónica”. Un escritor de A pesar de las enormes disparidades socioeconómicas y cultura-
la teoría de punto de referencia afirma rotundamente que las circuns- les entre los países, lo que la gente dijo es muy similar. En todos los
tancias de la vida tienen un papel insignificante a la hora de hablar de países, las circunstancias materiales, especialmente el nivel de vida,
una teoría de la felicidad. Si esto es correcto, entonces es poco lo que son mencionadas más a menudo. Después están las preocupaciones
usted o yo podemos hacer para mejorar nuestro bienestar y las polí- sobre la familia como, por ejemplo, tener una vida feliz de familia.
ticas públicas dirigidas a hacer que la gente esté mejor por medio del Esto es seguido por inquietudes sobre la salud personal o familiar.
mejoramiento de sus condiciones sociales y económicas son inútiles. Después de esto, y más o menos igual en importancia, están los asun-
En contraste, la economía hace especial hincapié en la importancia tos relacionados con el trabajo propio (tener un trabajo interesante)
de las circunstancias de la vida para el bienestar, particularmente en y de carácter personal (estabilidad emocional, valor personal, auto-
el ingreso de las personas así como su situación laboral. La opinión disciplina, etc.). Las preocupaciones sobre problemas generales na-
de que el dinero te hace más feliz encuentra un rotundo respaldo cionales o internacionales, como la guerra, la libertad política o civil
en la teoría económica. La implicación es que uno puede mejorar su y la igualdad social, rara vez son mencionadas. Los cambios abruptos
satisfacción con la vida al tener más dinero y que las medidas de las en estas últimas circunstancias afectan a la gente en su sentido de
políticas públicas destinadas a incrementar los ingresos de la socie- bienestar en el momento que ocurren, pero normalmente se toman
dad en su conjunto aumentarán el bienestar. como un hecho. En cambio, son las cosas que ocupan la mayor parte
de la vida cotidiana de las personas, cuestiones dentro de su control,
Voy a argumentar que la obtención de datos de la encuesta indica las que suelen estar en la vanguardia de las preocupaciones persona-
que ninguna de estas teorías es correcta. Contrariamente a la teo- les –especialmente ganarse la vida, el matrimonio y la familia y la sa-
ría del punto de referencia, los acontecimientos de la vida como el lud. La universalidad de estos problemas ayuda a explicar por qué las
matrimonio, el divorcio o alguna discapacidad grave o enfermedad comparaciones de la felicidad entre los grupos de personas son signi-
tienen efectos duraderos sobre la felicidad. A diferencia de lo que la ficativas. A pesar de que las preguntas del cuestionario sean abiertas
teoría económica supone, más dinero no hace más feliz a la gente. para que cada individuo defina la felicidad y la satisfacción de la vida
por sí mismo, la mayoría de las personas están basando sus juicios de
bienestar en la esencia de las mismas consideraciones.
18 Richard A. Easterlin ¿Qué hace feliz a la gente? 19

A continuación, voy a discutir la evidencia sobre la relación de la felicidad. Uno podría suponer, por una parte, que un accidente o en-
felicidad con los tres casos mencionados con mayor frecuencia por fermedad grave permanente reduciría la felicidad. Por otro lado, las
la gente como sus fuentes de bienestar: el nivel de vida material, la personas pueden recuperarse de estos hechos, especialmente si tie-
situación familiar y la salud. Me centraré en las relaciones a lo largo nen la ayuda de medicamentos y dispositivos de salud, tales como si-
de la media. No es necesario decir que, lo que es verdadero para el llas de ruedas, así como por una red de apoyo de amigos y familiares.
promedio no necesariamente es cierto para cada individuo, pero es
De hecho, la teoría del punto de referencia considera que la gente
importante tener claro lo que es típico.
se adapta plenamente y vuelve al nivel de felicidad que tenía antes
Por lo general, voy a informar los resultados de los datos de las en- del cambio adverso en la salud. El artículo seminal, varias veces cita-
cuestas –algunos, no todos, de mi propia investigación– que mues- do en la literatura psicológica como prueba de la adaptación com-
tran cómo los eventos de la vida afectan el bienestar a medida que pleta, es un estudio de 1978, de 29 de parapléjicos y tetrapléjicos,
las personas progresan a través del ciclo de la vida adulta, a partir hecho por el psicólogo Philip Brickman y sus colaboradores. La prin-
de la edad adulta temprana a través de la edad media y hasta sus cipal conclusión de este estudio es que las víctimas de accidentes,
años de jubilación. La mayoría de las generalizaciones en la literatura en comparación con otras 22 personas (tomados en comparación
de las ciencias sociales en el bienestar subjetivo no se basan en el todos los aspectos excepto que no habían experimentado alguna in-
ciclo de vida, sino en una de sus etapas. Como se verá más adelante, capacidad grave), “no resultaron tan infelices como podría haberse
respecto al dinero y la felicidad, las relaciones de un momento deter- esperado”. Sin embargo, una lectura cuidadosa de esta declaración
minado no siempre se replican en el curso de la vida. Incluso en los pone de manifiesto que el estudio en realidad no afirma que hubo
estudios que tratan de seguir a los mismos individuos a través del una adaptación completa. En efecto, la conclusión estadística es que
tiempo, el plazo es rara vez más de un año o dos, y casi nunca son las víctimas de accidentes fueron significativamente menos felices
representativos de la población nacional entre cinco y diez años. El que el grupo de comparación.
enfoque del ciclo de vida que yo uso aquí emplea la técnica de los
Desde entonces, ha habido una serie de estudios en los que al-
demógrafos –análisis de cohorte de nacimientos–, ya que abarca un
gunos siguen la teoría de adaptación completa, mientras que otros
segmento mucho más largo del curso de la vida. Las encuestas anua-
la contradicen. Para mi conocimiento, la investigación más completa
les se utilizan para rastrear la experiencia a medida que aumenta la
es una investigación estadounidense de 1990 que compara la satis-
edad de un grupo de individuos nacidos en un determinado año o
facción con la vida de grandes muestras nacionales de personas con
década una “cohorte de nacimiento”. Aunque los mismos individuos
discapacidad y sin discapacidad. La conclusión es que la satisfacción
no son entrevistados en cada año sucesivo, tenemos una muestra al
con la vida de las personas con discapacidad es, en promedio, sig-
azar representativa del mismo grupo de individuos. La ventaja espe-
nificativamente menor que aquellos que no reportan discapacidad.
cial de este enfoque es que podemos seguir cohortes de nacimiento
Aún más elocuente es constatar que las personas con discapacidad
en los datos estadounidenses sobre la felicidad desde hace casi tres
se clasifican de diferentes maneras, de acuerdo a la severidad de la
décadas.
discapacidad, si la persona sufre de una o varias condiciones, en qué
medida se limita en sus actividades diarias, las demás personas lo
perciben como discapacitado; en estos casos, la satisfacción con la
Salud y felicidad
vida es menor para los que tienen problemas más graves en cada una
Permítanme comenzar con la salud. La cuestión crítica es si los cam- de estas dimensiones.
bios significativos en la salud tienen un efecto duradero sobre la
Es muy poco probable que estas diferencias sistemáticas en la
20 Richard A. Easterlin ¿Qué hace feliz a la gente? 21

satisfacción con la vida, por la seriedad de la discapacidad, surjan de ingresos, pero más importante aún a los efectos no pecuniarios,
porque las personas con problemas peores simplemente no han te- tales como la infelicidad causada por la limitación de una de sus ac-
nido tiempo suficiente para adaptarse. La conclusión más directa es tividades habituales. A partir de datos de la encuesta global, parece
que, en promedio, un cambio adverso en la salud reduce permanen- claro que, contrariamente a la teoría del punto de referencia de los
temente la felicidad, y mientras peor es el cambio, mayor es la reduc- psicólogos, los cambios adversos en la salud tienen un efecto nega-
ción de la felicidad. Los resultados no significan que no se produce la tivo duradero en la felicidad, y que no hay una completa adaptación
adaptación a la discapacidad. Pero la evidencia sugiere, incluso con la al deterioro de la salud.
adaptación, que la mala salud tiene, en promedio, un efecto negativo
duradero en la felicidad.
Permítanme pasar de la evidencia relativa de un punto en el tiem- El matrimonio y la felicidad
po, a la de un ciclo de vida. Como todos sabemos, los problemas de Permítanme referirme a los efectos del matrimonio y su disolución.
salud reales aumentan con la edad. Pero, ¿qué dice la gente sobre su Uno podría suponer que al establecer una relación cercana e íntima
salud? Si la gente se adaptara por completo a los cambios adversos tal como lo representa el matrimonio, hace más feliz y más satisfe-
en la salud, como la teoría del punto de referencia afirma, entonces chos con la vida a los socios de dicha relación. En consecuencia, la
no debería haber ningún cambio en la percepción de salud durante pérdida de un compañero y la consiguiente disolución de estas rela-
toda la vida, porque la gente constantemente se ajusta al empeora- ciones, a través de la viudez, separación o divorcio, afectaría negati-
miento de la salud. ¿Es cierto entonces que la salud autorreportada vamente a la felicidad. Se espera que algunos de los placeres iniciales
no cambia? de una nueva unión desaparezcan con el tiempo, de manera similar,
La respuesta es no: la salud autorreportada decae a través del cur- las personas que han perdido a un compañero pueden adaptarse a
so de la vida. Si uno sigue a los estadounidenses nacidos en la déca- ser solteros de nuevo. Se espera que las relaciones estrechas consa-
da de los años 1950 sobre el segmento de 28 años de vida, para los gradas en el matrimonio tengan un efecto positivo duradero en la
que se dispone de datos, se observa una tendencia clara a la baja y felicidad, y la pérdida de este tipo de relaciones, un efecto negativo
estadísticamente significativa en su salud promedio. Esta tendencia permanente (estoy utilizando el matrimonio aquí como un ejemplo
a la baja en la percepción de salud en las personas mayores también para la formación de uniones; en la actualidad el matrimonio es a ve-
aplica a las personas nacidas en décadas anteriores tan atrás hasta ces precedido por un período de convivencia, y la verdadera “unión”,
que los datos llegan a ser confiables. por consiguiente, tiene lugar algún tiempo antes del matrimonio).

Este resultado evalúa la adaptación en términos de salud auto- Sin embargo, la teoría del punto de referencia de los psicólogos
rreportada, no la satisfacción de vida, tal como en el análisis de la diría que la adaptación a la disolución del matrimonio o al cambio
discapacidad. Tal vez la salud podría empeorar, pero la gente no se de estado civil es completa. De hecho, hay un reciente estudio empí-
siente infeliz al respecto. Sin embargo, este no es el caso, las personas rico de la población alemana que afirma esta conclusión. En todo el
que reportan niveles de salud más pobres también dicen que están tiempo del matrimonio, la felicidad aumenta brevemente durante lo
menos satisfechos con su salud, y que son menos felices en general. que podría llamarse el “período de luna de miel”, pero después de un
Cuando los adultos mayores de todas las edades reportan sus niveles año de matrimonio se vuelve al nivel que prevalecía más de un año
de felicidad, siempre son menores en promedio mientras su estado antes del matrimonio. La viudez tarda un periodo más largo para la
de salud autorreportado es menor. El impacto negativo del deterioro adaptación completa: ocho años; la separación y el divorcio no están
de la salud sobre la felicidad se debe, en cierta parte, a la pérdida incluidos en el estudio.
22 Richard A. Easterlin ¿Qué hace feliz a la gente? 23

Sin embargo, datos estadounidenses, contradicen los resultados mer matrimonio continúan siendo significativamente mayores que
del estudio alemán, y mencionan que los efectos de la formación y los de los solteros.
disolución de las uniones son perdurables. Los jóvenes estadouni-
Resultados consistentes sobre esto son presentados por la soció-
denses, en el período comprendido entre las edades de 18 a 29 años,
loga estadounidense Linda Waite y sus colaboradores, en un estu-
cada vez se casan más, y la felicidad promedio de los que se casan es
dio nacional representativo que sigue a 5 mil estadounidenses casa-
consistentemente más alta que los solteros.
dos durante un período de más de cinco años. Al final del período,
Este resultado es contrario al de la población alemana que encuen- la felicidad de los que siguen casados permanece virtualmente sin
tra que sólo en el período de “luna de miel” se presenta una elevación cambios, mientras que la felicidad de aquellos que se separaron o di-
de la satisfacción con la vida. Si los jóvenes estadounidenses simple- vorciaron y no se volvieron a casar, es significativamente inferior a la
mente experimentan un aumento temporal en el bienestar cuando de aquellos que están casados. Volver a casarse revierte el efecto del
se casan, entonces la felicidad de las personas casadas debe comen- divorcio: la felicidad de aquellos que se divorciaron y se volvieron a
zar en su valor más alto a edades de 18 a 19 años, cuando los casados casar, es casi la misma que los que permanecieron casados. La lección
están en el período de luna de miel. Entonces, la felicidad debería es clara: en promedio, el matrimonio aporta una mayor felicidad, la
reducirse progresivamente después de los 19, tal como el periodo de disolución del matrimonio, la disminuye.
felicidad de la luna de miel desciende para los recién casados hasta
La evidencia de los deseos de la gente de tener un “matrimonio
llegar al nivel del punto de referencia de aquellos que se casaron pri-
feliz”, también contradice la idea de que la gente se adapta completa-
mero. De hecho, durante la primera década del matrimonio, la felici-
mente a su estado civil. Creo que es razonable decir que las mujeres
dad de los jóvenes casados se mantiene constante en un nivel más
mayores de 45 años tienen perspectivas muy bajas de volver a casar-
alto que los solteros.
se si son viudas, divorciadas o separadas, por lo que uno podría espe-
Los resultados estadounidenses también contradicen otro argu- rar que se hayan adaptado plenamente a su soltería, y han despojado
mento, a saber, la felicidad más alta del grupo de casados se debe en gran medida el matrimonio de sus mentes. Sin embargo, cuando
a un “efecto de selección”, es decir, que para empezar, los que se ca- se le preguntó acerca de su concepción personal de la buena vida,
san son más felices. Si los que se casan son más felices, para empe- seis de cada diez mencionaron tener un matrimonio feliz. Aún más
zar, entonces la satisfacción con la vida del grupo combinado de las notable son las respuestas de las mujeres mayores de 45 años que
personas casadas y no casadas no aumentaría a medida que más y nunca se han casado. Entre estas mujeres más de cuatro de cada diez
más contraen matrimonio. Pero contrariamente a la tesis del efecto citaron tener un matrimonio feliz, como parte de la buena vida. Tal
de selección, la felicidad del grupo en conjunto, casados y solteros, vez algunas se han adaptado, y sin duda algunas no querían casarse,
se incrementa a medida que la proporción de casados se eleva de pero una proporción considerable de estas mujeres, que han estado
edades de 18 a 29. solas toda su vida, no se han adaptado plenamente a ser solteras y
Más allá de la edad adulta temprana, la evidencia de las encuestas continúan deseando estar casadas.
sigue sugiriendo los efectos duraderos sobre la felicidad asociados Creo que éstas son las razones de fondo para concluir que la adap-
con el estado civil. La felicidad de las personas casadas sigue siendo tación en lo que respecta al estado civil no es completa y que la for-
significativamente mayor que la de los solteros en todo el ciclo de mación de las uniones de parejas tiene un efecto positivo y duradero
vida. Las personas que se vuelven a casar son tan felices como los en la felicidad, mientras que la disolución tiene un efecto negativo
que siguen en su primer matrimonio, e incluso después de 35 años permanente. Esto no quiere decir que no exista tal adaptación des-
de matrimonio, los niveles de felicidad de los que siguen en su pri- pués de que las uniones son formadas o disueltas pero la adaptación
24 Richard A. Easterlin ¿Qué hace feliz a la gente? 25

que se produce es menor que completa. Si la teoría del punto de re- de 26 a 54 años y el ingreso promedio por persona, ajustado por la
ferencia de los psicólogos es cierta al afirmar que las circunstancias variación de los precios de bienes y servicios, aumentó en 116%. Sin
de la vida son de escasa importancia en la felicidad a largo plazo, en- embargo, su felicidad reportada en 2000 no fue diferente de la que
tonces es difícil ver cómo se puede conciliar con la mayor parte de las reportaron 28 años antes. Ellos tenían mucho más dinero y un nivel
pruebas en la población encuestada sobre el matrimonio y la salud. considerablemente más alto de vida en una fecha posterior, pero
Finalmente, permítanme mencionar, dos datos de la encuesta so- esto no los hacía sentir más felices.
bre la salud y el matrimonio que son difíciles de conciliar con la teoría Tomando dos grupos de personas nacidas en la década del 40, uno
del punto de referencia. A lo largo del ciclo de vida, los afrodescen- con al menos alguna educación universitaria, y otro con educación
dientes en los Estados Unidos, en promedio, son cada vez menos fe- secundaria o menos, a cualquier edad, las personas con un nivel edu-
lices que los blancos. Creo que sería muy agresivo argumentar que cativo mayor son más felices que los menos educados. Esto es consis-
esta diferencia es causa de la raza y que se debe simplemente a di- tente con la relación de los estudios en un punto del tiempo entre la
ferentes puntos de referencia determinados por la genética y la per- felicidad y el ingreso que acabamos de mencionar, los más educados,
sonalidad, y que las diferencias en las circunstancias de la vida de las en promedio son más ricos y más felices.
dos razas son de poca importancia. Además, más allá de los 60 años
Pero, ¿qué les sucede en el curso de la vida a los dos grupos con
del ciclo de vida, el exceso de felicidad de las mujeres sobre la pobla-
diferente nivel de educación? Como era de esperarse, los ingresos de
ción masculina se invierte. Claramente, esto no puede ser explicado
los más educados incrementan más que los de los menos educados.
por factores genéticos y de personalidad, sino un acontecimiento im-
Si la felicidad se moviera de acuerdo con los ingresos de cada grupo,
portante en la vida: la mayor incidencia de la viudez entre las mujeres
entonces la felicidad de ambos grupos debería de aumentar, con la
que los hombres es el principal responsable.
de las personas con mayor nivel de educación cada vez más, y la di-
ferencia entre los dos grupos sería cada vez más amplia. De hecho,
la felicidad se mantiene constante durante toda la vida para ambos
Dinero y felicidad
grupos de educación, y el diferencial de felicidad, sin cambios. Aun
Me gustaría referirme ahora a la fuente de la felicidad que se men- cuando los afortunados que empiezan con mayores ingresos, en pro-
ciona más a menudo por la gente: el nivel de vida material o están- medio, son más felices que los de menor nivel socioeconómico, no
dares de vida. ¿Más dinero hace más feliz a la gente? A juzgar por las hay evidencia en ninguno de los grupos de que la felicidad aumenta
respuestas de la encuesta, para la mayoría de la gente sí, aunque hay a medida que su ingreso crece.
un límite. Cuando se les preguntó cuánto dinero más necesitan para
Estos resultados, tanto los de un punto en el tiempo y el de ciclo de
ser completamente felices, la gente suele nombrar una cifra superior
vida, se mantienen para las personas nacidas en los años 1950, 1930
a sus ingresos corrientes en 20 por ciento. En efecto, si la felicidad y
y 1920. Aunque el resultado de los estudios de un punto en el tiem-
los ingresos se comparan en cualquier momento, los que tienen más
po aparentemente confirma la hipótesis de los economistas que más
ingresos son, en promedio, más felices que los que tienen menos.
dinero te hace más feliz, el resultado del ciclo de vida lo contradice.
Pero ¿qué pasa con la felicidad a medida que sus ingresos incre- Esto es, en un punto en el tiempo quien tiene más dinero puede ser
mentan a lo largo del ciclo de vida? ¿La felicidad sube demasiado? La más feliz, pero si ese dinero se incrementa en su ciclo de vida, su nivel
respuesta es no, en promedio, no hay ningún cambio. Consideremos, de felicidad no se incrementará sólo por este hecho.
por ejemplo, los estadounidenses nacidos en la década de 1940. En-
¿Por qué este patrón paradójico? Un sencillo experimento mental
tre los años 1972 y 2000, la media de su edad aumentó de alrededor
26 Richard A. Easterlin ¿Qué hace feliz a la gente? 27

pone de manifiesto la razón básica. Imagine que su ingreso aumenta el de los demás. Esto significa que las normas internas que evalúan la
considerablemente, mientras que el de todos los demás sigue igual. felicidad también incrementan. Al pensar en el efecto de los futuros
¿Te sentirías mejor? La respuesta que la mayoría de la gente da es que ingresos más altos en el bienestar, la gente no considera este factor
sí. Pero ahora, cambiemos el ejemplo. Piense en una situación en la de este incremento potencial en sus normas internas en sus juicios,
que su ingreso real se mantiene igual, pero el de los demás aumenta por lo que concluyen equivocadamente que el dinero les dará más
sustancialmente, entonces, ¿cómo te sentirías? La mayoría de la gen- felicidad. Pero no, la felicidad sigue siendo la misma a medida que
te dice que se sentiría menos pudiente, a pesar de que su nivel real de aumenta el ingreso propio y el de los demás. Finalmente, tenemos
vida no haya cambiado en lo absoluto. una validación del modelo de los psicólogos, en el dominio de bienes
Ahora, lo que este experimento demuestra es que, en cuanto a materiales se presenta una adaptación hedónica completa.
cosas materiales se refiere, la satisfacción de uno con la vida no de-
pende simplemente de la propia condición objetiva, sino de una
comparación objetiva de su situación con una comparación subjeti- Implicaciones
va (o internalizada) del nivel de vida; y esta norma interna es signifi- Los datos de la encuesta indican que las circunstancias familiares y
cativamente afectada por el nivel de vida de la gente que nos rodea. de salud del ciclo de vida suelen tener efectos duraderos sobre la fe-
En un momento dado, las condiciones de vida, o los ingresos reales licidad, pero el dinero no. ¿Qué significan estos resultados empíricos
de los demás son fijos y las diferencias de felicidad dependen, por lo sobre la posibilidad de aumentar la felicidad personal?
tanto, sólo de las diferencias de las personas en sus ingresos reales.
Cada uno de nosotros tiene sólo una cantidad fija de tiempo
Esta es la relación de puntos en el tiempo. Sin embargo, a medi- disponible para la vida familiar, las actividades de salud y el traba-
da que aumenta el ingreso de todos, también lo hacen las normas jo. ¿Distribuimos nuestro tiempo de cierta manera que maximiza
internas que generan nuestros juicios de la felicidad. El aumento en nuestra satisfacción personal? Creo que la respuesta es no, por una
las normas internas es mayor para aquellos con ingresos más altos, razón que ya se ha mencionado. Nosotros decidimos cómo utilizar
porque a medida que avanzamos a través del ciclo de vida, cada vez nuestro tiempo basado en una “ilusión monetaria”, la creencia de que
nos comparamos más con aquellos con quienes estamos en contacto más dinero nos hará más felices, fallando en anticipar que en lo que
más estrecho, y los contactos son cada vez más limitados con los de respecta a las condiciones materiales de la norma interna en la que
ingresos similares. El aumento a través del tiempo en la propia norma nuestros juicios de bienestar se basan, aumentarán; no sólo nuestro
interna del nivel de vida debilita el efecto sobre el bienestar del creci- propio ingreso crece, sino el de los demás también lo hace. Debido
miento personal de los ingresos reales y como resultado, la felicidad a la ilusión del dinero, nosotros establecemos demasiado tiempo en
permanece sin cambios. alcanzar objetivos monetarios y poco cambio hay en los aspectos no
El efecto del aumento de las normas internas también explica por pecuniarios como la familia y la salud.
qué las personas piensan que, a lo largo del ciclo de vida, más di- Como prueba del efecto perverso de la ilusión del dinero, permí-
nero las hará más felices, cuando, en realidad, no es así. Cuando la tanme citar, por último, un estudio reportado por el sociólogo Norval
gente piensa acerca del efecto de tener más dinero, implícitamente Glenn. En esta encuesta se les preguntó a los estadounidenses sobre
supone que los incrementos de ingresos sólo son los propios, mien- la probabilidad de tengan un trabajo más gratificante que les quita-
tras que todos los de los demás se mantienen igual y, por lo tanto, la ría tiempo para la familia, porque requeriría más horas en la oficina
conclusión de que serían más felices. Lo que realmente ocurre, por y más tiempo en la carretera. De cada cuatro opciones de respuesta,
supuesto, es que al aumentar su ingreso propio, lo mismo ocurre con ninguno de los 1 mil 200 encuestados dijo que era “muy improbable
28 Richard A. Easterlin

¿Absoluta o relativa? La felicidad en función


“ que él o ella tomaran el trabajo, y sólo uno de cada tres dijo que era
“algo poco probable.” La gran mayoría de los encuestados dijo que
era “muy probable” o “algo probable” que tomaran el trabajo y cada del ingreso, la adquisición y el consumo
una de las categorías contó alrededor de un tercio de los encuesta-
dos. La mayoría de los estadounidenses, al parecer, sacrificarían la Luis Butten y Reto Felix
vida familiar por lo que ellos creen traerá mayores beneficios, sin sa-

D
ber que estas recompensas tienden a ser ilusiones.
urante siglos, la felicidad ha sido un tema que ha intrigado
En este caso, aunque he sido crítico de dos teorías importantes de al hombre. Los antiguos griegos la concibieron como el ob-
la felicidad en la psicología y la economía, quiero dejar claro que hay jetivo de la vida misma. En la Edad Media, se consideró que
mucho trabajo valioso en ambas disciplinas, sin la cual este artículo la felicidad era Dios. A partir del siglo xviii se definió como la
no habría sido posible. Algunos pueden pensar que he dado muy consecución del placer y la ausencia del dolor. Además, también fue
poca atención a los determinantes genéticos y la personalidad en la considerado que, para medirla, se necesitaba una ciencia empírica,
cuestión de la felicidad. Esto es así, pero hay una razón para ello: no es decir, una basada en la experimentación.
hay nada que uno pueda hacer, al menos en la actualidad, acerca de
A partir de esa postura inició el desarrollo de estudios encamina-
los genes de las personas, y muy poco lo que la mayoría de nosotros
dos a medir la felicidad. Tal tendencia continúa hasta la fecha, y es a
podemos hacer acerca de nuestras personalidades (excepto, quizás,
través de ésta que se han identificado numerosos factores que origi-
consultar a un costo considerable a un psicólogo). Pero todos tene-
nan o influencian la felicidad. Entre ellos se encuentran el ingreso, la
mos el potencial para manejar nuestras vidas de manera más eficien-
salud, las relaciones humanas, un sistema de gobierno democrático
te para producir una mayor felicidad.
y federal, el tiempo libre y el materialismo (aunque este último, de
En mi análisis de eventos de la vida, me he centrado en los tres que manera negativa).
la gente cita más a menudo que son importantes para su felicidad: el
Gracias a investigaciones recientes, a la lista anterior ha sido posi-
dinero, la familia y la salud. Hay, por supuesto, otras circunstancias de
ble agregar un elemento más: la maximización. El investigador Barry
vida que tienen efectos duraderos sobre la felicidad. Como las amis-
Schwartz y sus colegas sugieren que la maximización es la tendencia
tades, por ejemplo. ¿No es cierto que para muchos de nosotros hay
a desear el mejor producto para resolver una necesidad, llevando al
ciertas personas que cuando los vemos, siguen evocando en noso-
maximizador a ser más ansioso, estresado y menos feliz. En el extre-
tros, año tras año, sentimientos especiales de placer? Y, sin embargo,
mo opuesto se encuentran los satisfactores, quienes no buscan el
¿con qué frecuencia los compromisos de “trabajo” interfieren con el
mejor producto disponible, sino uno que solamente cumpla su cri-
disfrute de tales amistades? Cada uno de nosotros, estoy seguro, po-
terio de aceptable, por lo que, generalmente, son más felices que los
dría nombrar fuentes similares de satisfacción que hemos sacrificado
maximizadores.
debido a la ilusión del dinero.
De todas maneras, la información arrojada por la medición obje-
He tratado de resumir aquí lo que las encuestas sociales tienen que
tiva del nivel absoluto de la felicidad –al responder a una pregunta
decir acerca de las fuentes de la felicidad personal. ¿Podemos hacer
que, por ejemplo, podría ser: “¿Qué tan feliz te sientes: muy feliz, algo
nuestra vida más feliz? La respuesta tentativa, con base en la eviden-
feliz, o nada feliz?”– enfrenta una paradoja, que se verá reflejada a
cia, es la siguiente: la mayoría de las personas podrían aumentar su
continuación.
felicidad si dedicaran menos tiempo a hacer dinero, y más tiempo a
los objetivos no pecuniarios, tales como la vida familiar y la salud. Tal medición puntual de la felicidad señala que en los últimos 60
29
30 Luis Butten y Reto Felix

años ésta no ha aumentado en Estados Unidos; ni en los últimos 40 a tal conclusión tomando en cuenta el nivel de ingreso de 19 países
en Inglaterra o Alemania. Considerando que estos países cuentan del mundo y el nivel de felicidad que sus respectivos habitantes re-
con algunos de los índices de desarrollo humano (idh) más altos del portaron durante 20 años.
planeta, lo que hace suponer que sus habitantes tienen todo a su dis-
El científico sustenta su afirmación argumentando que el están-
posición para ser más felices en la medida en que su calidad de vida
dar con el que se juzga el nivel de bienestar aumenta en la misma
mejora, entonces, ¿por qué necesariamente no lo son?
proporción que el nivel de ingreso de la sociedad. Es decir, al contar
Una posible explicación de esta paradoja es que la felicidad es rela- con mayores ingresos, las aspiraciones materiales de los ciudadanos
tiva y no absoluta. Mientras que la felicidad absoluta se encuentra en aumentan en la misma proporción. Así, aun con más dinero, una per-
el interior de las personas y es inmune a juicios externos, la felicidad
relativa se basa en compararse con los demás por lo que se pone en
función de otras personas.
La especial relevancia que posee la naturaleza de la felicidad, fuera
absoluta o relativa, contiene implicaciones sociales importantes. De
comprobarse que, en efecto, la felicidad es relativa, poco importará
que los estándares de vida mejoren de una generación a la siguiente
(como podría sugerir el caso mencionado de Estados Unidos, Ingla-
terra y Alemania).
Es decir, si la felicidad en función del ingreso fuera relativa, un au-
mento en el ingreso per cápita no aumentaría la felicidad de un país
necesariamente. Esto sería así porque las personas pobres del país
en cuestión, aunque con un ingreso mayor que el de antes, seguirían
comparándose con los ricos de dicho lugar. En cambio, si realmente
fuese absoluta, invariablemente el nivel de felicidad aumentará de
una generación a la siguiente, al mejorar los niveles de ingreso y la
calidad de vida en general.
Investigadores del tema cubren el punto anterior al explicar que
la felicidad no depende de un bien objetivo, sino de una compara-
ción subjetiva. En ese caso, la felicidad es relativa, y puede llegar a
clasificarse como inútil y evasiva. Inútil, porque una vida feliz no ne-
cesariamente es una buena vida, y evasiva, porque los estándares de
comparación tienden a aumentar con el éxito, dejando al individuo
tan infeliz como antes.
Richard Easterlin, autoridad en investigaciones sobre la felicidad
desde hace más de 35 años, demostró que el aumentar los ingresos
de todos no necesariamente redunda en una mayor felicidad. Llegó
32 Luis Butten y Reto Felix ¿Absoluta o relativa? La felicidad en función... 33

El experimento constó de tres fases, cada una por las experiencias pesar de que los miembros pobres del grupo rico poseen más que los
hedonistas específicas a las que se referían: el ingreso, la adquisición miembros ricos del grupo pobre, éstos son menos felices.
y el consumo. En cada etapa, los estudiantes evaluaron su nivel de la
Para investigar si la felicidad sigue el patrón absoluto o relativo,
felicidad contestando la pregunta “¿Te sientes feliz, en general?” con
una muestra de 131 alumnos fue dividida en dos grupos indepen-
una escala del 0 al 10, donde 0 significa No y 10, Sí.
dientes uno del otro: uno de los grupos representaba un país pobre,
Para investigar si la felicidad era absoluta o relativa se comparó la con 65 personas; el otro, un país rico, con 66 personas. Se efectuó tal
representación gráfica de cada media con un patrón que describe, división en función del ingreso simbólico que les iba a ser entregado
hipotéticamente, cómo debería comportarse la felicidad en ambos durante la primera etapa de la experimentación.
casos. El patrón mencionado puede verse en la figura 1.
A su vez, ambos grupos fueron subdivididos en otros dos, cata-
Figura 1. Patrones hipotéticos, absoluto y relativo, de la felicidad logando al azar sus respectivos miembros como pobres y ricos de-
pendiendo del ingreso simbólico que cada persona, dentro de cada
grupo, recibió. La representación gráfica de lo anterior se muestra en
la figura 2
Figura 2. Representación gráfica del diseño del experimento
Felicidad

grupos
pobre rico
miembros pobres miembros ricos miembros pobres miembros ricos
del grupo pobre del grupo pobre del grupo rico del grupo rico

Patrón relativo Patrón absoluto

Fuente: Hsee et al. (2009)

Para construir estos patrones, se conceptualizan dos países: uno La figura 2 ejemplifica cómo se incentiva la comparación entre
pobre y uno rico, donde en cada uno existen habitantes pobres y ri- miembros de un mismo grupo e imposibilitaba aquella entre miem-
cos. Dentro de cada país, los habitantes conocen el nivel de ingreso, bros de distintos grupos. El primero de estos aspectos es necesario
posibilidades de adquisición y productos consumidos de los otros en las instancias en que la felicidad es relativa, pues tiene que ver con
habitantes. Sin embargo, los habitantes de un país desconocen el ni- la comparación con los demás. El segundo aspecto, cuando la felici-
vel de ingreso, posibilidades de adquisición y productos consumidos dad es absoluta, permite identificar aumentos en ésta en la medida
del otro país. en que un grupo tiene mejores condiciones que el anterior.
Entonces, si la felicidad fuera absoluta, ésta debería seguir el pa- En la etapa del ingreso, los alumnos recibieron cupones a manera
trón creciente mostrado con las barras oscuras, es decir, el patrón ab- de representar dinero. En el grupo pobre se entregaron cupones con
soluto mantiene una tendencia ascendente de un grupo al siguiente. un valor nominal de 1 y 2 y en el rico, de 3 y 6. En el grupo pobre, los
Por otro lado, si la felicidad fuera relativa, queda señalado cómo, a miembros pobres recibieron los cupones con valor de 1 y los miem-
36 Luis Butten y Reto Felix ¿Absoluta o relativa? La felicidad en función... 37

Gráficamente, las barras de la figura 8 demuestran que la felicidad al nivel de materialismo se muestran en la tabla 1. Aquellas que es-
es absoluta en función del consumo, siguiendo su respectiva tenden- tán en función de la clasificación de maximizadores o satisfactores se
cia presentada en la figura 1. Como se pudo esperar, los miembros muestran en la tabla 2.
ricos de cada grupo se sintieron más felices con sus paletas que los
Tabla 1. Medias de la felicidad, en cada etapa, en función del materialismo
miembros pobres. Específicamente, los miembros ricos del grupo
rico se sintieron más felices que los miembros pobres del grupo rico Ingreso Adquisición Consumo
(8.84 contra 8.49), y los miembros ricos del grupo pobre se sintieron Menor nivel de 6.76 7.42 8.07
más felices que los miembros pobres del grupo pobre (8.11 contra materialismo
6.89). Mayor nivel de 6.95 7.54 8.23
Sin embargo, a diferencia de las dos fases anteriores del estudio, materialismo
los miembros pobres del grupo rico se sintieron más felices que los
miembros ricos del grupo pobre (8.49 contra 8.11). Así, contrario al
ingreso y la adquisición de un bien, la felicidad con el consumo de un La tabla 1 demuestra cómo, en cada etapa del experimento, las
producto parece ser absoluta y no relativa. personas con un mayor nivel de materialismo reportaron ser más feli-
ces que las que eran menos materialistas. Aunque, en primera instan-
Como explicación de este efecto se puede suponer que en el con- cia, estos resultados parecerían contradecir la noción generalizada
sumo, la felicidad está determinada en virtud de una escala innata, de que mientras más materialista es una persona, menos feliz va a ser,
estable y común (en este caso las papilas gustativas), mientras que las cifras podrían ser explicadas por dos aspectos a considerar.
en el ingreso y la adquisición de un bien, la felicidad se determina
más bien en la comparación con otros miembros del grupo. El primero es que tal noción parte de una evaluación subjetiva ge-
neral de la vida y, en esta investigación, la felicidad se basó en un mo-
Además de evaluar su felicidad, en cada etapa del experimento, mento específico del tiempo. El segundo parte de lo propuesto por
los participantes también contestaron dos cuestionarios adicionales. los investigadores Kara Chan y Gerard Prendergast, quienes afirman
El primero de ellos, desarrollado por Marsha Richins, mide el nivel de que los individuos que son más materialistas tienden más a compa-
materialismo de una persona. El segundo, de Barry Schwartz y sus rarse con otros. Así, son precisamente ellos, los más materialistas,
colegas, mide el nivel de maximización de un individuo y lo clasifica quienes derivan una mayor satisfacción en situaciones donde la feli-
como maximizador o satisfactor al tomar una elección de compra. cidad es relativa (el ingreso y la adquisición) y donde la comparación
La información proveniente de las escalas del materialismo y la social es fundamental.
maximización permitió dividir la muestra en tres partes iguales. De Tabla 2. Medias de la felicidad, en cada etapa, en función de la maximización
la muestra total de 131 personas, 41 tenían un alto nivel de materia-
lismo; 45, uno medio; y 45, uno bajo. Para detectar diferencias entre Ingreso Adquisición Consumo
estos grupos más fácilmente, se consideraron solamente los dos ex- Satisfactor 8.10 7.57 8.29
tremos y se descartó el grupo con un nivel medio en materialismo.
Siguiendo el mismo procedimiento, se consideraron solamente los Maximizador 6.70 7.49 8.00
grupos en los extremos en la escala de maximización, resultando en
una muestra de 43 satisfactores y 42 maximizadores.
Las medias de la felicidad en cada etapa del proyecto y de acuerdo
38 Luis Butten y Reto Felix ¿Qué es la felicidad? 39

La tabla 2 evidencia, también en cada fase de la investigación, deduce que para que el alumnado de una universidad o de un país,
cómo las personas clasificadas como satisfactores consistentemente en general, sea más feliz deben mejorarse los aspectos que engloban
reportaron ser más felices que los maximizadores. Esto quiere decir el consumo, en vez de aquéllos pertenecientes al ingreso o a la ad-
que los satisfactores se conformaron con la paleta que adquirieron, la quisición, por las razones antes mencionadas.
que hubiera sido. Al contrario de los maximizadores, ya que su deseo
Se considera que para que la felicidad fuera absoluta al ingreso y
por encontrar “lo mejor”, al verse incumplido en la realidad, repercu-
a la adquisición, la sociedad tendría que contemplar un cambio en la
tió negativamente en su nivel de felicidad.
escala de valores. Considerar que, para realmente ser más felices, el
El estudio demostró que la felicidad es relativa al ingreso y a la ad- enfoque debe estar en la misma persona, en vez de la carrera sin fin
quisición, y absoluta al consumo. El que la felicidad haya resultado que resulta de compararse con los demás. Obviamente, éste no sería
ser relativa en el ingreso y la adquisición demuestra que, realmente, un cambio fácil, tampoco uno que pueda llevarse en poco tiempo;
no importa con cuánto ingreso se cuente, ni cuáles sean las opciones quizá no sea posible del todo. Por lo tanto, y en nuestra opinión, el
a disposición para comprar, puesto que lo que determina el nivel de cambio debe empezar por uno mismo, para ocuparse de uno mismo.
felicidad es la comparación social. En ambos casos, la felicidad está Así, en la medida en que el individuo en cuestión se involucre con su
dada por el hecho de saber que se posee más, o mejores cosas, que propio progreso, sin tomar en cuenta el de los demás, será cada vez
los demás. más feliz, de acuerdo a lo que la información recabada apoya.
Este hecho implica que la creencia de que más dinero traerá la fe-
licidad es, en realidad, ilusoria, ya que el parámetro de comparación
también aumenta, dejando a la persona tan feliz o infeliz que antes.
Lo mismo podría aplicar para la convicción que sostenga que con tal
artículo o con tal otro producto se acercará uno a la felicidad. Ambos
casos pueden justificar, en cierta medida, muchas de las estrategias
de mercadotecnia que observamos cotidianamente. “Gana más y se-
rás mejor” y, especialmente, “compra esto y serás feliz” son las prome-
sas que más de una empresa hace a su mercado meta alentando algo
que, en la práctica, es un juego de suma cero. Dado precisamente ese
hecho, e independientemente del aspecto ético de tal acción frente
a lo que la evidencia sugiere, seguir tales pautas resulta redituable
para la empresa, pues promueve las ventas. La noticia, sin embargo,
no es tan buena para el consumidor final, quien se encuentra en un
círculo vicioso.
En cuanto al consumo, la tendencia es distinta. Se constata cómo
la felicidad aumenta progresivamente en función del mejor desem-
peño de un producto. Éste, a su vez, está dado en virtud de quiénes lo
recibieron, pues tanto miembros pobres y como ricos del grupo rico
fueron más felices que todos los miembros del grupo pobre, aspecto
que no se observa cuando la felicidad es relativa. Así, por ejemplo, se
La felicidad y el dinero
Nicole C. Fuentes

L
a prosperidad económica se ha convertido en uno de los as-
pectos más importantes de las sociedades actuales. Hoy en día,
más individuos desean un ingreso lo suficientemente alto para
comprar una casa grande, un auto último modelo y para viajar por el
mundo. Como resultado de este fenómeno, el éxito de una persona
o de un país muchas veces es medido en términos de su capacidad
para generar o incrementar la cantidad de dinero disponible.
La relación entre el dinero y la felicidad ha sido ampliamente es-
tudiada y es, sin duda, uno de los temas que más debate han gene-
rado en la historia del estudio científico de la felicidad. Aunque, la
literatura acerca de dicha relación es muy extensa, gran parte del co-
nocimiento que hoy existe sobre esta vinculación puede organizarse
alrededor de cuatro preguntas fundamentales: 1) ¿Son más felices las
personas que viven en los países más ricos?, 2) ¿Dentro de cada país,
son más felices las personas que más dinero tienen?, 3) ¿Aumenta la
felicidad cuando crece el ingreso? y; finalmente, 4) ¿Por qué más di-
nero no necesariamente se traduce en más felicidad? A continuación
revisaremos brevemente la literatura relacionada con estas interro-
gantes.

1. ¿Son más felices las personas que viven en los países


más ricos?
La respuesta a esta primera pregunta es afirmativa. La mayoría de
las investigaciones muestran una fuerte correlación positiva entre el
ingreso promedio de los países y la felicidad promedio de sus habi-
tantes. Es decir, el porcentaje de gente que dice ser muy feliz es ma-
yor en las naciones económicamente más fuertes –en Noruega, por
ejemplo, hay más gente feliz que en Armenia.
En general, el ingreso per cápita de los países es uno de los deter-

41
42 Nicole C. Fuentes La felicidad y el dinero 43

minantes más importantes del bienestar subjetivo de las naciones. de Monterrey reveló que las personas que ganan una cantidad su-
Sin embargo, es importante resaltar que los países desarrollados, perior a los 50 mil pesos mensuales son en promedio más felices. Sin
además de tener mayores ingresos, tienen características que condu- embargo, la felicidad promedio de las personas en México no es tan
cen a un mayor bienestar para la sociedad. En estos países, las insti- grande como la diferencia en sus niveles de ingreso. La felicidad pro-
tuciones políticas y sociales son más efectivas, la confianza es alta, la medio de una persona que gana entre 1,250 y 2,400 pesos mensua-
corrupción es baja y tienen mejores indicadores de alfabetización, de les es únicamente 0.76 menor, en una escala del 1 al 10, a la de una
salud e igualdad. Vivir en una sociedad rica es benéfico para la felici- persona que gana más de 50 mil, a pesar de que la diferencia en sus
dad. En contraste, los países menos desarrollados, además de tener ingresos es de casi 20 veces. Como dice Diener, cuando las personas
ingresos extremadamente bajos, por lo general son políticamente piensan en la felicidad y el dinero generalmente recuerdan las cosas
inestables, experimentan situaciones de conflicto dentro del país y bonitas que el dinero puede comprar.
con las naciones vecinas, tienen condiciones de salud lamentables
Además, existen intangibles, como el estatus, que la gente rica
y altos niveles de corrupción. Dichos problemas pueden crear una
recibe. Entonces resulta natural asumir que las personas que tienen
cultura en la cual la gente experimenta poca felicidad, incluso una
mucho dinero son más felices. Sin embargo, el bienestar económico
vez descontados los efectos del ingreso.
es solamente uno de muchos componentes del bienestar subjetivo
Si bien la tendencia a encontrar más gente feliz en los países más y “es posible que las personas muy ricas sacrifiquen otros tipos de
ricos es clara e indiscutible, existen excepciones interesantes. En un riqueza para conseguir más dinero y desarrollen actitudes infelices
estudio realizado por Inglehart, trece países de América Latina, entre mientras construyen sus fortunas”. Veenhoven señala que el ingre-
ellos México, reportaron un nivel de bienestar subjetivo o felicidad so incrementa la felicidad únicamente si éste permite a las personas
muy por encima del nivel pronosticado por sus niveles económicos. satisfacer sus necesidades esenciales –por ejemplo, alimentación,
En la última ola de la Encuesta Mundial de Valores (2005), México re- vestido, vivienda. Entonces, cuando el ingreso es bajo y amenaza la
sultó ser el país con la felicidad promedio más alta, a pesar de tener un satisfacción de necesidades básicas, estar económicamente mejor se
nivel de desarrollo económico mucho menor al de otros países indus- traduce en un bienestar mayor; sin embargo, cuando la mayoría de
trializados. En materia de felicidad, México rebasa las expectativas. las necesidades primarias pueden costearse, la afluencia económica
influye sorprendentemente poco en la felicidad.

2. ¿Dentro de cada país, son más felices las personas que


más dinero tienen? 3. ¿Aumenta la felicidad cuando crece el ingreso?
De acuerdo con resultados de muchos estudios, la respuesta a esta Los economistas siempre han asegurado que los cambios en la felici-
pregunta es “no necesariamente”. En general, no existe una relación dad de una nación están directamente relacionados con los cambios
importante entre el dinero y la felicidad en las personas de un mismo en el poder adquisitivo de sus ciudadanos. Con más dinero la gente
país; pobres y ricos pueden ser igualmente felices. Las personas muy puede consumir más, satisfacer un mayor número de necesidades
ricas tienen mucho más que el individuo promedio; sin embargo, y ser más feliz. De aquí las recomendaciones en materia económica
las investigaciones muestran que aunque la gente más rica tiende a dirigidas a incrementar el ingreso nacional. Sin embargo, hallazgos
ser más feliz, no es mucho más feliz. El caso de México constituye un recientes en estudio de la felicidad ponen en tela de juicio la receta
buen ejemplo de lo anterior. de los economistas para la obtención de la felicidad, dado que cam-
bios importantes en el ingreso nacional de los países no han estado
Un estudio realizado en 2008 por investigadores de la Universidad
44 Nicole C. Fuentes La felicidad y el dinero 45

acompañados de incrementos significativos en la felicidad promedio es suficiente o insuficiente. En una encuesta a nivel nacional realizada
de sus habitantes. en México en 2003, el dinero ocupó el quinto lugar en importancia
El caso de los Estados Unidos representa un claro ejemplo de lo en una lista de seis aspectos. La familia resultó el valor más importan-
anterior; en los últimos cuarenta años el ingreso real per cápita en te para los mexicanos entrevistados en dicha encuesta.
este país se ha duplicado; sin embargo, el porcentaje de personas Materialismo. El materialismo explica también en cierta medida
que se considera muy feliz ha permanecido estable. Este fenómeno por qué un mayor ingreso no necesariamente se traduce en mayor
también es cierto para Japón y otras sociedades occidentales, y se le felicidad. Kasser argumenta que los jóvenes de hoy tienden a ser me-
conoce como la paradoja del ingreso y la felicidad. A nivel individual, nos felices en comparación con sus abuelos y tienen una propensión
mayor ingreso tampoco parece traducirse en un incremento sustan- mayor a estar deprimidos, a pesar de haber crecido en una sociedad
cial de la felicidad. Estudios realizados con ganadores de la lotería, más afluente. Kasser concluye que las personas que tienen como
por ejemplo, muestran que estas personas reportan el incremento meta tener más dinero, son más propensos a ser menos felices. Como
esperado de su felicidad durante las primeras semanas después del dice Diener, el materialismo puede ser tóxico; otorgar mucha impor-
evento. Años más tarde, sin embargo, estas personas generalmente tancia a los bienes materiales es nocivo pues tenerlos todos es un
registran un nivel de felicidad menor, posiblemente congruente con objetivo inalcanzable dado que siempre existirán bienes y servicios
el que tenían antes de ganar la lotería. Estos resultados van en contra adicionales que una persona no tiene y probablemente no pueda
de la creencia popular que afirma que más ingreso conduce a más conseguir aunque sea rica.
felicidad y han dado lugar a una gran cantidad de estudios orienta-
Comparaciones sociales. La evidencia sugiere que la gente no
dos a explicar la incapacidad del ingreso adicional para incrementar
gasta el dinero extra en formas que le proporcionen aumentos sig-
la felicidad de las personas. Esto nos lleva a nuestra última pregunta.
nificativos y permanentes en la felicidad. Cuando la mayoría de los
conocidos de una persona maneja un auto pequeño, ésta puede sen-
tirse satisfecha con el suyo. Pero cuando algunos cambian su auto
4. ¿Por qué más dinero no necesariamente se traduce en
pequeño por una camioneta de lujo, se pregunta si debe seguir su
más felicidad? ejemplo y también cambiar su auto por una camioneta. Si los papás
Muchos estudios han tratado de explicar la incapacidad del ingre- de los compañeritos de la escuela ofrecen fiestas de piñata cada vez
so adicional para aumentar la felicidad de las personas. Los valores, más sofisticadas para sus hijos, el resto de las personas siente la nece-
el materialismo, las comparaciones sociales, la trampa del estatus, el sidad de organizar fiestas más sofisticadas para sus propios hijos. Los
proceso de habituación y la “carrera de ratas” contienen parte de la deseos y necesidades de los individuos están altamente influencia-
respuesta. dos por lo que tienen los integrantes de su círculo social cercano o gru-
po de referencia (familiares, amigos, compañeros de trabajo, vecinos).
Valores. Algunos autores sugieren que la falta de una relación im-
Las personas viven en contextos sociales determinados y constante-
portante entre el dinero y la felicidad pudiera ser explicada por el
mente se comparan con sus semejantes. En el caso del ingreso, por
papel que juegan la cultura y los valores en la vida de las personas. En
ejemplo, los individuos comparan su ingreso con el de aquellos en su
algunas culturas el éxito puede definirse con base en la cantidad de
grupo de referencia y no con el de una estrella de cine. Y en esta com-
dinero que alguien tiene o el tipo de casa y de automóvil que puede
paración no es importante la cantidad absoluta de dinero que tienen,
comprar. Entonces, dependiendo de valores intrínsecos, una persona
sino la cantidad relativa; no importa cuánto sea nuestro ingreso total,
puede definir felicidad en términos de dinero o no y entonces ser feliz
siempre y cuando sea mayor al de los demás, aunque sea poquito.
o infeliz si considera que la cantidad de dinero que tiene disponible
46 Nicole C. Fuentes La felicidad y el dinero 47

En un experimento realizado en la Universidad de Harvard se pidió que son usados su impacto sobre la felicidad se diluye. El auto nuevo
a los participantes que respondieran en donde preferirían vivir, en un huele a nuevo solamente los primeros meses, y con el tiempo la casa
mundo donde ganaran 50 mil dólares al año y todos los demás habi- grande deja de parecer grande. La felicidad que otorgan estos bienes
tantes 25 mil dólares, o un mundo donde ganaran 100 mil dólares al es pasajera. A este fenómeno se le conoce como habituación. Algu-
año y el resto 200 mil. La mayoría de los participantes eligió el primer nos bienes tienen un efecto más positivo y de mayor duración sobre
mundo, donde ganarían menos pero más que los demás. Evidencia el bienestar, por lo que sería más rentable gastar el dinero adicional
abundante en el área del bienestar subjetivo muestra que las perso- en el cultivo de los mismos. Tomar unas vacaciones con la familia, ha-
nas que consideran tener un ingreso más alto o tener una cantidad cer ejercicio, desarrollar un pasatiempo, son ejemplos de actividades
mayor de bienes materiales en comparación con las personas a su que contribuyen positivamente y durante más tiempo al bienestar.
alrededor son, en promedio, más felices que aquellos que consideran
Carrera de ratas. Decimos que una persona participa en una ca-
tener menos que los demás.
rrera de ratas cuando es incapaz de disfrutar lo que está haciendo en
Trampa del estatus. Con frecuencia las personas gastan dinero en el presente y tiene la firme creencia de que una vez alcanzada cierta
bienes de posicionamiento; es decir, bienes que indican a los demás meta en el futuro será feliz. Cuando compre un carro de lujo, cuando
su posición en la sociedad (ropa de marca, automóviles de lujo, te- compre una casa más grande, cuando conozca París. En una carrera
léfonos celulares, etcétera). Una bolsa de lujo cumple la función de de ratas, la felicidad está siempre a la vuelta de la esquina, y para
guardar artículos personales tan bien como una bolsa económica. alcanzarla solamente hay que trabajar un par de horas extra para
La diferencia está en que la bolsa de lujo además confiere estatus a ganar un poco más y poder comprar una cosa más. El problema es
quien la porta. Cuando muchas personas comienzan a tener la mis- que la esquina siempre se aleja. Después de comprar la casa grande
ma bolsa, ésta pierde su función como bien de posicionamiento y es necesario ponerle alberca, después de conocer París hay que ir a
ahora es simplemente una bolsa que sirve para guardar cosas, pero Egipto. La afluencia económica ha crecido en los países industriali-
que costó una fortuna. Cuando los individuos gastan más en estos zados y junto con ésta se ha elevado el nivel promedio de aspiracio-
bienes y su estatus mejora, su felicidad aumenta. Sin embargo, cuan- nes. Lo que antes era un lujo, por ejemplo tener dos autos, ahora se
do el resto de las personas aumentan también su gasto en bienes de ha convertido en una necesidad. Schor revisó evidencia sobre lo que
posicionamiento, el resultado inevitable es que su posición social re- los americanos consideran debe ser parte de la “buena vida”. Entre
lativa permanece, pero en el camino gastaron el dinero adicional. La 1987 y 1991, el porcentaje de gente que eligió la opción “casa para
lección dicta que si las personas quieren que su ingreso extra tenga vacacionar” aumentó 84%; en el periodo de 1987 a 1994, el ingreso
un impacto mayor y más permanente en su felicidad deben evitar las “necesario” para “vivir la vida de tus sueños” creció de 50 mil dólares a
comparaciones sociales y la trampa del estatus. Entre más compara- 102 mil dólares, mucho más que la tasa de inflación. Las personas tie-
ciones sociales hacen, más vulnerables son a encontrarse en situa- nen expectativas y deseos crecientes que compensan negativamen-
ciones desfavorables. La realidad es que no importa que tan exitoso te los efectos positivos de los incrementos en el ingreso; están en una
o rico sea un individuo invariablemente se topará con alguien que lo especie de caminadora hedónica donde deben seguir satisfaciendo
sea aún más. sus nuevas necesidades para conservar su nivel de felicidad. En esta
Habituación. Las personas gastan una buena parte de su ingreso carrera de ratas se han incrementado las condiciones materiales y, al
en bienes materiales a los que se acostumbran rápidamente (autos, mismo tiempo, se han deteriorado las condiciones sociales. Los indi-
ropa de marca, joyas, casas, por ejemplo). Este tipo de bienes brin- viduos pasan más horas trabajando y tienen menos tiempo disponi-
dan mucha satisfacción cuando recién son adquiridos, pero a medida ble para la familia, los amigos, el entretenimiento o el descanso. La
48 Nicole C. Fuentes

La calidad de vida en México y el mundo


evidencia sugiere que si las personas desean que la aportación del
dinero adicional a su felicidad sea mayor, deben bajarse de la cami-
nadora y empezar a visualizar su felicidad como un viaje y no como José de Jesús García Vega
un destino.

M
ucho se ha escrito a lo largo de la historia en términos de lo
Conclusiones que es importante para el ser humano. Para muchos, el pro-
De la literatura y los hallazgos acerca de la relación entre el ingreso y greso material es lo que debe de dominar la agenda de toda
la felicidad podemos derivar algunas conclusiones. En primer lugar, sociedad, mientras que, para otros, los aspectos más “suaves” como
vivir en países desarrollados es positivo para la felicidad; el porcenta- la felicidad, la espiritualidad o la convivencia pacífica representan el
je de gente muy feliz es más alto en países con ingresos altos. A nivel ideal de la raza humana. El tema no es trivial ya que los gobiernos de
personal, el ingreso es importante cuando las condiciones de vida todos los países centran sus esfuerzos y destinan sus recursos para
son de subsistencia; cuando las necesidades básicas son satisfechas, alcanzar los objetivos que lleven a una buena vida de los ciudadanos.
el ingreso adicional aporta muy poco a la felicidad. La gente más rica Es evidente que la satisfacción de las necesidades primarias como
tiende a ser más feliz pero no mucho más feliz. Por otro lado, incre- el comer, el dormir y el vestir son elementos que no admiten discu-
mentos importantes en el ingreso nacional de algunos países no han sión y a los cuales los gobiernos deben de poner especial atención
estado acompañados de aumentos en la felicidad. Los valores y el a la satisfacción de estos aspectos del bienestar. Si una persona no
materialismo explican, en parte, la falta de capacidad del incremento satisface dichas necesidades, podemos inmediatamente inferir que
del ingreso para mejorar la felicidad. Además, las personas gastan el esa persona no goza de un bienestar mínimo. Por otro lado, aspectos
dinero adicional en bienes de posicionamiento o en bienes de rápida como la salud, la seguridad y la educación figuran también como as-
habituación que no aportan un incremento duradero en la felicidad. pectos obligados a incluir en el bienestar de una sociedad.
Finalmente, las aspiraciones crecientes, la trampa del estatus y la ca-
rrera de ratas son algunas de las causas que explican por qué más Además de los aspectos antes mencionados, existen otros para los
dinero no necesariamente se traduce en mayor felicidad. cuales quizá no exista consenso universal. Pero si bien la definición
del bienestar o la falta del mismo es un asunto de controversia, pro-
bablemente no exista mucha discrepancia en cuanto a la labor de los
gobiernos. Podría decirse, sin temor a equivocarse, que una de las
labores principales de los gobiernos es generar y conservar el bienes-
tar de los ciudadanos. En ese sentido, es probable también que todos
los ciudadanos consideremos al bienestar como una meta común de
todos los que formamos parte de una sociedad.
Dentro de las doctrinas económicas que se utilizan para la defi-
nición de la labor pública destaca la llamada teoría utilitarista. Bajo
esta línea de pensamiento, el mejor gobierno es aquel que genera
el mayor bienestar al mayor número de personas. Si adicionamos el
concepto de sustentabilidad, podemos complementar la definición
anterior y afirmar que el mejor gobierno será el que provee el mayor
49
50 José de Jesús García Vega La calidad de vida en México y el mundo 51

bienestar al mayor número de personas durante el período más ex- ignorar los indicadores subjetivos se tiene el riesgo de pasar por alto
tenso, esto es, el gobierno debe de ser consciente del aspecto de la lo que es importante para los ciudadanos y generar una percepción
conservación y preservación de los recursos que se usarán para ge- negativa del gobierno. Esta situación conlleva el riesgo de dañar la
nerar el bienestar de los ciudadanos de las presentes y futuras gene- participación democrática de los individuos.
raciones.
La búsqueda de indicadores de tipo social es producto de una in-
Asociado al bienestar, está el concepto de progreso. Pareciera quietud que ha crecido a nivel mundial en las últimas décadas. Desde
que todos los seres humanos tenemos una fascinación en cuanto al hace tiempo, se ha gestado un movimiento de indicadores sociales
progreso. Si en un determinado período no detectamos que hemos que busca medir los aspectos cuantitativos y cualitativos de las socie-
progresado, pensamos que el esfuerzo ha sido en vano y que hemos dades para poder medir el avance en las mismas. Una de las contri-
fracasado. El progreso no sería del todo malo si pudiéramos asociarlo buciones más importantes en este sentido la constituye un artículo
a un mayor bienestar. Sin embargo, hoy en día y tal vez por mucho publicado en 1974 por el Dr. Richard Easterlin (también colaborador
tiempo, la definición de progreso estará asociada a la controversia en este volumen), en el cual se destacaba la nula relación existente
dados los diferentes enfoques que existen para su medición. Nueva- entre el incremento en la riqueza de un país y la felicidad de sus ha-
mente, este asunto no es de menor importancia ya que si los gobier- bitantes. Esta publicación sembró la semilla para reconocer la nece-
nos y las sociedades buscan un progreso constante y sostenido, la sidad de desarrollar mediciones del bienestar subjetivo en los países.
definición del progreso y su relación con el bienestar resultan de vital Una gráfica que muestra esta relación aparece más adelante en esta
importancia. Si no existen indicadores precisos de estos conceptos, contribución.
las acciones de la sociedad y de los gobiernos nos pueden llevar por
Este movimiento ha tenido eco en la formación de asociaciones
el rumbo equivocado.
profesionales que buscan avanzar en el tema. Ejemplo de ello lo re-
La medición de indicadores ha sido siempre una herramienta va- presentan las organizaciones como la International Society of Quali-
liosa para la generación de información usada en la toma de decisio- ty of Life Studies y el Community Indicators Consortium, entre otras.
nes. La actividad de la medición no puede ser tomada con trivialidad, Otro ejemplo lo representan las publicaciones en el tema como las
ya que, en la práctica, sólo lo que medimos podemos administrarlo, revistas internacionales Social Indicators Research, el Journal of Hap-
corregirlo o celebrarlo; en una palabra, somos lo que medimos. Lo piness Studies y el Journal of Applied Research in Quality of Life. A nivel
que medimos es un indicador del avance hacia nuestra meta. Por oficial, se han desarrollado iniciativas como el Índice de Desarrollo
otro lado, si lo que medimos tiene una relevancia enorme, la forma Humano promovido por el Programa de las Naciones Unidas para el
de cómo lo hacemos y de cómo usamos estas mediciones es también Desarrollo (pnud) y la Declaración de las Metas del Milenio, hecha por
muy importante. Para saber si estamos progresando es imprescindi- la propia Organización de las Naciones Unidas. En el caso de la ocde,
ble que seleccionemos los indicadores adecuados, los midamos en bajo el auspicio de su proyecto “Measuring Progress” y su base de
forma correcta y los usemos también propiamente. datos “Wikiprogress” se han llevado a cabo 4 foros mundiales y una
En términos de política pública, una de las preguntas más rele- gran cantidad de foros y seminarios regionales con el fin de encon-
vantes sería: ¿cuáles son los indicadores que importan para llevar a trar nuevas medidas de progreso que integren los aspectos que real-
cabo en forma adecuada la función pública? O bien, ¿cómo podemos mente representan el bienestar de los individuos. Recientemente, la
ocde ha puesto a consideración del público en general, el Better Life
saber si la sociedad efectivamente está avanzando? En general, los
indicadores oficiales se han centrado en los aspectos materiales y los Index (Índice para una Vida Mejor) en el cual incluye una serie de as-
aspectos subjetivos del desarrollo han sido más bien ignorados. Al pectos que buscan reflejar el bienestar en una forma integral.
52 José de Jesús García Vega La calidad de vida en México y el mundo 53

Dentro de los avances en el tema, destaca también el proyecto cado al cuidado de la familia y las labores del hogar. Por otro lado, la
emprendido por el presidente francés Nicolás Sarkozy, quien preo- construcción de cárceles, la tala indiscriminada de árboles y el consu-
cupado por la brecha existente entre la percepción del bienestar por mo excesivo de gasolina constituyen adiciones al pib que no necesa-
parte de la gente y las estadísticas oficiales, formó la Comisión sobre riamente se traducen en aspectos positivos para el ser humano.
la Medición del Desempeño Económico y el Bienestar Social. La tam-
Lo anterior no implica que la medición del pib, o éste como medi-
bién llamada “Comisión Stiglitz”, estuvo integrada con más de veinte
da de desarrollo, sea inútil o negativa. Este indicador se introdujo a
destacados científicos, entre ellos el propio Joseph Stiglitz y Amart-
principios del siglo xx para proveer a los gobiernos de información
ya Sen, ambos Premio Nobel de Economía. Las recomendaciones de
precisa para la toma de decisiones en materia económica. Hasta la
esta comisión se centran en una revisión del Producto Interno Bruto
fecha, esta medida es un auxiliar muy importante para este tipo de
como medida del progreso y en una reorientación de la medición
decisiones y es un parámetro que sirve de referencia para estable-
hacia el bienestar de la gente.
cer el desempeño de la economía de un país. Ciertamente, si todo
Una de las aportaciones más interesantes del llamado “Reporte lo demás permanece constante, es más deseable que un país tenga
Stiglitz” es la recomendación que se hace en cuanto a la orientación una mayor producción de bienes y servicios, ya que esta actividad
que deben de tener los sistemas de medición públicos. En el párrafo económica se traduce en más empleo y más disponibilidad de bienes
21 del resumen de dicho reporte se establece que: “el tiempo es muy y servicios para la población. Sin embargo, esta medida no toma en
propicio para que nuestro sistema de medición cambie su énfasis de cuenta el daño que se genera en el medio ambiente, producto del
la medición de la producción económica hacia la medición del bien- crecimiento de la actividad económica, ni tampoco especifica si el
estar de las personas”. desarrollo y la producción está distribuida en forma equitativa entre
En los siguientes párrafos se abordará el tema del bienestar y su el total de la población.
relación con conceptos sugeridos como el pib per cápita de un país, En la gráfica 1 se presentan los diez países con mayor pib per cápita,
la felicidad de sus habitantes y la calidad de vida. Se presentarán al- expresado en términos del poder de paridad de compra. Se presenta
gunos datos para ubicar a algunos países bajo estos parámetros para también el dato de México para efectos de comparación. Como se
después presentar una medida que busca aportar una alternativa a la puede observar, México ocupa la posición número 61 con un ingre-
medición del progreso en los países. so per cápita de 14 mil 406 dólares internacionales, lo que represen-
ta menos de la tercera parte de lo que obtiene Hong Kong (45,944),
poco más de la cuarta parte de lo que obtiene Singapur (56,694) y
El pib como medida del bienestar menos de la sexta parte de lo que obtienen en Qatar (88,222). De
El Producto Interno Bruto (pib) per cápita es quizá la medida más utili- hecho, según los datos que arroja el análisis del Fondo Monetario In-
zada para juzgar el progreso y el bienestar de un país. Este indicador, ternacional, para 2010 más de 30 países obtienen un pib per cápita
como medida de progreso, ha desatado varias críticas en los años re- superior al doble de lo que obtienen los mexicanos. Usted, amable
cientes, primordialmente porque se concentra sólo en la producción lector, puede actualizar estos datos en las páginas del Fondo Mone-
de bienes y servicios dejando fuera muchos de los aspectos impor- tario Internacional, las cuales seguramente no cambiarán sustancial-
tantes del bienestar del ser humano, al mismo tiempo que incluye mente de un año a otro.
otros aspectos que no son del todo deseables. Por ejemplo, dentro
de la estimación del pib no se contabiliza el trabajo voluntario de las
personas, el tiempo dedicado al desarrollo personal o el trabajo dedi-
54 José de Jesús García Vega La calidad de vida en México y el mundo 55

Gráfica 1. PIB per cápita de los países, expresado con base en el poder de paridad Producto Nacional Bruto per cápita y la percepción de la felicidad en
de compra los Estados Unidos a lo largo de un período de 30 años.
100,000 Gráfica 2. GDP per cápita y felicidad en Estados Unidos
90,000 88,222 81,466
80,000 3.00 35,000
70,000 33,000
56,694 51,959 2.80
60,000

GDP Per Capita (1996 Dollars)


48,333 47,439 46,860 45,944 2.60 31,000
50,000 41,950 40,973

Mean happiness
2.40 Happiness 29,000
40,000
30,000 2.20 27,000
20,000 14,406 2.00 25,000
10,000 1.80 23,000
1.60 21,000
(1) 2) (3) 4) 5) (6) ) 8) 9) ) )
tar rgo( ur a( ei ( es os (7 g( iza( a (10 (61 1.40 GDP Per Capita 19,000
Qa p g n b nid on nd co
bu ga rue Bru Ára sU gK Su la éxi 1.20 17,000
xem Sin No os o Ho
n Ho M
Lu i rat ad 15,000
Em Est 1.00
1972 1974 1976 1978 1980 1982 1984 1986 1988 1990 1992 1994 1996 1998 2000 2002
Year
Fuente: Fondo Monetario Internacional
Fuente: Davis y Smith, 2002; Buró del Censo de los EEUU, 2003
¿Quiere decir lo anterior que el bienestar de los mexicanos está
muy por debajo de los países anteriormente mencionados? La res-
Esta figura muestra una ausencia de correlación entre la felicidad
puesta es “no necesariamente”. Aun y cuando muchos investigadores
y el ingreso de un país, expresado en términos del Producto Nacio-
defienden el pib per cápita como medida del bienestar de las perso-
nal Bruto per cápita. Esta ausencia de relación entre estos dos con-
nas, al evaluar este aspecto se debe de considerar un mayor número
ceptos ha dado origen a lo que se ha denominado la “paradoja de
de elementos, como se discutirá más adelante.
Easterlin”, en virtud de que en economía se espera que el incremento
Sin tratar de menospreciar la utilidad del pib como medida de de- del ingreso de las personas genere un incremento en el bienestar.
sarrollo económico, vale la pena recordar que uno de los precursores Aun y cuando la aportación original de Richard Easterlin, menciona-
de esta medida, Simon Kuznets, declaró en su tiempo lo siguiente: da anteriormente, se realizó en 1974, la comparación entre estas dos
“El bienestar de una nación puede inferirse apenas vagamente con la variables es muy similar y este fenómeno se replicó en otros países
medición del ingreso nacional. Las metas para un mayor crecimiento en diferentes periodos de tiempo. Nuevamente, si se considera a la
deben de especificar el qué y el para qué”. Por otro lado, en un discur- felicidad como una parte importante del bienestar de las personas,
so memorable, el que fuera candidato a la presidencia de los Estados tenemos entonces que el aspecto material no es suficiente para re-
Unidos a fines de los años 60, Robert F. Kennedy expresó lo siguien- flejar dicho bienestar.
te: “El pnb (Producto Nacional Bruto) no mide nuestra inteligencia ni
nuestro coraje, ni nuestra sabiduría ni nuestro aprendizaje, tampoco
nuestra compasión ni nuestra devoción por nuestro país. En resu- La felicidad como medida del bienestar
men, mide todo, excepto lo que hace que la vida valga la pena”. Si bien el pib per cápita es una medida parcial del bienestar de los se-
Aun cuando este ensayo no pretende ahondar en el tema de la res humanos, sería también muy difícil expresar que la felicidad es la
felicidad y el dinero, en la gráfica 2 se muestra una relación entre el alternativa única y precisa. Ciertamente, la felicidad es un elemento
56 José de Jesús García Vega La calidad de vida en México y el mundo 57

muy importante para el bienestar, pero no es lo único. Aun y cuando de partida para acercarnos a la evaluación subjetiva del bienestar de
algunos investigadores a nivel internacional defienden el concepto las personas.
de felicidad como el indicador principal de bienestar (Richard Layard
Otra limitante importante en el uso de la felicidad para generar
y Ruut Veenhoven, entre otros), como se verá en párrafos posterio-
información útil relacionada con el progreso de las sociedades lo re-
res, al igual que las medidas materiales, los indicadores subjetivos
presenta el uso indebido de los resultados de las encuestas. La rea-
requieren de una complementación para capturar los elementos im-
lización de encuestas sobre la felicidad podría dar pie para que los
portantes que inciden en el bienestar de las personas.
gobernantes o los políticos utilizaran los resultados de una manera
La felicidad es un concepto muy importante. En varios estudios sesgada, esto es, el hecho de que un buen número de habitantes se
se ha demostrado que la gente feliz tiene ciertas ventajas sobre sus consideren felices daría elementos a un gobernante para decir que
contrapartes infelices. Por ejemplo, la gente feliz se enferma menos, su desempeño ha sido aceptable. Carlos Fuentes lo expresa de ma-
es más productiva, dura más tiempo casada y es mejor compañero nera irónica en su novela La voluntad y la fortuna en un diálogo del
de trabajo, entre otras ventajas. Un resumen muy interesante de los gobernante hacia uno de sus asistentes: “Hay que medir el placer, la
beneficios objetivos de la felicidad se presenta en el World Happiness felicidad, el gusto de la gente. Yo no quiero que los mexicanos sean
Report, publicado en septiembre de 2013 por la Organización de las ricos. Yo quiero que sean felices”. A pesar de este riesgo, países como
Naciones Unidas. Inglaterra, Canadá y, recientemente, en México han iniciado las me-
La importancia de la felicidad se ha destacado desde hace mucho diciones de la felicidad y el bienestar subjetivo en forma oficial con el
tiempo, siendo Aristóteles quizá el primero que destacó la trascen- fin de que los resultados sean parte de los elementos utilizados en la
dencia del tema al afirmar que el fin último del hombre lo constituye toma de decisiones de política pública.
la felicidad. Más recientemente, hace un par de siglos, en la Decla- Analizando algunas estadísticas de felicidad, se puede observar
ración de la Independencia de los Estados Unidos se reconoce la que México es de los países que consistentemente sale bien evalua-
búsqueda de la felicidad como un derecho inalienable de los seres do. No existen muchas mediciones que se hagan en forma sistemáti-
humanos. Adicionalmente, en el primer intento de constitución del ca a nivel mundial sobre el tema de la felicidad, pero una de las más
México independiente, la Constitución de Apatzingán de 1814, se antiguas y más regulares la constituye la Encuesta Mundial de Valo-
reconoce a la felicidad del pueblo como uno de los derechos que res. Otra fuente la constituyen las encuestas que realiza Gallup; aun-
deben de ser conservados íntegramente por la institución de los go- que más que medir la felicidad, en estas encuestas se mide el grado
biernos y debe ser el único fin de las asociaciones políticas. de alcance de esa vida ideal que tenemos todos nosotros.
Por otro lado, el uso de la felicidad como indicador de bienestar En la más reciente ola de la Encuesta Mundial de Valores, realizada
tiene algunas limitaciones. Destacan dos de ellas que parecen ser de 2005 a 2008, México obtiene los puntajes más elevados. Al combi-
las más relevantes. La primera está relacionada con la validez de su nar las dos preguntas que buscan medir el bienestar subjetivo, senti-
medición. Muchos investigadores sostienen que no es posible cap- miento de felicidad y satisfacción con la vida, México ocupa la primer
turar los niveles de felicidad de una persona ya que este concepto posición, tal y como se observa en la gráfica 3.
es puramente subjetivo. Años de estudio, sin embargo, han podido
demostrar que las encuestas reflejan de una manera adecuada, si no
precisa, los niveles de satisfacción subjetiva de las personas. Aun y
cuando hay un buen camino que recorrer en este sentido, los avan-
ces en la medición de la felicidad nos proporcionan un buen punto
58 José de Jesús García Vega La calidad de vida en México y el mundo 59

Gráfica 3. Felicidad y satisfacción con la vida de The Economist, y el ya mencionado Better Life Index de la ocde,
entre otros.
10
9 8.48 8.34 8.14 8.14 8.09 8.06 8.05 7.92 7.87
El objetivo primordial de estos esfuerzos es la generación de un ín-
8
7.81
dice compuesto que pueda representar el bienestar de las personas
7
6 en forma integral. Una controversia natural que surge regularmente
5 en este tipo de indicadores es la selección de los elementos que ha-
4
3
brán de incluirse para representar el bienestar de las personas. Y si ya
2 de por sí, lo anterior representa un reto formidable, surge otra fuente
1 de discusión al tratar de definir si los pesos asignados a cada uno de
los elementos seleccionados deben de ser iguales o diferentes.
xic
o bia za nd
a cia a a ia sil a
Mé om Sui ela Sue retañ land land Bra ent
in
Co l aZ nB Ho Fin Arg Dejando de lado la segunda controversia, la cual representa un as-
Nuev Gra
pecto más técnico que el primero, es importante mencionar que el
Fuente: World Values Survey, 2005-08 proceso para definir los elementos que integran el bienestar de las
personas ha logrado avanzar, aunque no se puede decir que se haya
logrado un consenso. Y tal vez, como se comentará más adelante,
Al ver esta gráfica, surge nuevamente la pregunta si los países que este consenso no se logre nunca. Dentro de los avances logrados, el
ocupan las primeras posiciones efectivamente ofrecen a sus ciudada- Reporte de la “Comisión Stiglitz”, previamente mencionado, nos ofre-
nos el mayor bienestar en el mundo. La respuesta nuevamente es no: ce una alternativa, si bien general, de los aspectos a considerar al eva-
no se puede depender de un solo elemento para evaluar el bienes- luar el bienestar del ser humano. En este reporte se concluye que el
tar de las personas. Además de la apreciación subjetiva del bienestar bienestar requiere de una definición multidimensional. Los dominios
personal, se requiere de otros elementos, mismos que se discutirán clave identificados por esta comisión son:
más adelante. 1. Estándares de vida material (ingreso, consumo y riqueza)
2. Salud
3. Educación
La calidad de vida como un indicador integral de bienestar
4. Actividades personales, incluyendo el trabajo
Las desventajas de considerar un solo aspecto de la vida de las per- 5. Voz política y buen gobierno
sonas para evaluar su bienestar nos orillan a buscar indicadores com- 6. Conexiones y relaciones sociales
puestos e integrales. Afortunadamente, existen ya algunos esfuerzos 7. Medio ambiente (condiciones presentes y futuras)
hechos en este sentido. Quizá el más destacado y aceptado a nivel 8. Seguridad, de naturaleza económica y física
internacional, como se mencionó anteriormente, es el realizado por
Por otro lado, como se mencionó anteriormente, la ocde lanzó
el pnud (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) cuyo
en mayo de 2011 la iniciativa denominada The Better Life Index, la
producto, el Índice de Desarrollo Humano (idh) considera, además
cual busca también avanzar en la definición de nuevas medidas de
del aspecto económico, la salud y la educación en los países. Otros
progreso. En este índice, se consideran once elementos que son: vi-
esfuerzos que buscan medir el bienestar de las personas en forma
vienda, ingreso, trabajo, comunidad, educación, medio ambiente,
integral lo representan el National Well Being Index, el Index of Eco-
gobierno, salud, satisfacción con la vida, seguridad y balance entre
nomic Well Being, el Johnston QOl Index, el Índice de Calidad de Vida
el trabajo y la vida.
el porqué una persona con unas condiciones objetivas plenas no se
siente feliz. La respuesta puede ser que la causa de la insatisfacción se
deba a un mal servicio prestado por el gobierno. Sin embargo, puede
ser también que el gobierno esté ofreciendo un servicio muy bueno,
pero tal vez no sea lo que los ciudadanos necesitan en ese momento.
Por último, puede ser que esle ofrezca al ciudadano algo bueno y
el porqué una persona con unas condiciones objetivas plenas no se
siente feliz. La respuesta puede ser que la causa de la insatisfacción se
deba a un mal servicio prestado por el gobierno. Sin embargo, puede
ser también que el gobierno esté ofreciendo un servicio muy bueno,
pero tal vez no sea lo que los ciudadanos necesitan en ese momento.
Por último, puede ser que esle ofrezca al ciudadano algo bueno y
64 José de Jesús García Vega ¿Qué es la felicidad? 65

con esa función. A pesar de que este indicador no refleje precisamen- incrementar el bienestar de los ciudadanos que la componen, es pre-
te la evolución del bienestar de cada persona, se puede construir una ciso entonces contar con indicadores claros y que reflejen los valores
medida que refleje el sentir del promedio de la población. Ejemplos y características del grupo a considerar. Si bien hace más de un siglo
de este tipo de esfuerzos los podemos encontrar en el índice de in- Einstein consideraba que no todo lo que medimos es importante y
flación, de desempleo y muchos otros que se toman como referencia que no todo lo importante puede ser medido, hoy en día contamos
para la toma de decisiones de política pública. con herramientas estadísticas y de recopilación de información que
La segunda ventaja es que, si el indicador se conforma de acuerdo hace posible captar lo que es importante para el ser humano. No ha-
a las preferencias de los ciudadanos, el ejercicio democrático adquie- cerlo es tratar de esquivar la responsabilidad que conlleva la función
re un mayor impulso. Preguntar a los ciudadanos lo que realmente pública. Y eso, seguro, no abona a la credibilidad de los gobiernos.
les interesa y medir estos aspectos representan una expresión demo-
crática muy pocas veces vista y llevada a cabo en la realidad actual.
Adicionalmente, al publicar los resultados de este índice, los ciudada-
nos pueden saber qué es lo que está pasando con lo que ellos apre-
cian. Una tercera ventaja es que la rendición de cuentas puede hacer-
se más transparente, esto es, los resultados periódicos de este índice
pueden ofrecer información acerca de los funcionarios que están y
los que no están haciendo adecuadamente su trabajo. Finalmente, la
información obtenida del índice de calidad de vida puede orientar el
ejercicio de la función pública, enfocando los esfuerzos en las áreas
que así lo requieren y que los ciudadanos consideran que son impor-
tantes para su bienestar.
Un primer intento de construir un índice de calidad de vida para
México lo hizo en el año de 2008 el Centro de Estudios sobre el Bien-
estar de la Universidad de Monterrey. En un proyecto coordinado con
el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de
Diputados, se realizaron una serie de actividades para la construc-
ción y aplicación de este índice a nivel nacional. Para ello, se aplicó
una encuesta a 1200 participantes en todo el país. Los resultados de-
tallados de este estudio pueden consultarse en el Libro Bienestar y
Calidad de Vida en México, publicado en 2011 por la udem y el cesop y
coordinado por José de Jesús García Vega y Francisco J. Sales Here-
dia. Adicionalmente, Tapia y García Vega hicieron un breve resumen
de los hallazgos más relevantes de este estudio en la contribución
titulada “Crisis económica en México y calidad de vida”, que también
forma parte de este volumen.
Si pensamos que el objetivo de toda sociedad es el de preservar o
Religión y felicidad en México:
10 años de estudio
Alejandro Tapia Vargas

El Evangelio de Juan cuenta la historia cuando Jesús de Nazaret hace


llenar con agua seis tinajas de piedra, y después pide se sirva a los
comensales, sólo que al sacar el agua de las vasijas lo que obtuvieron
fue vino. Este capítulo de la vida de Jesús es reproducido en la pelí-
cula de 1988 La última tentación de Cristo, dirigida por Martin Scorse-
se, donde se ve a un Jesús feliz, bailando y participando de la fiesta,
conducta quizá muy semejante a la que vivimos los mexicanos en los
días de fiesta. Y es que, en México, la religión es una fiesta.

México y las fiestas religiosas


Pensar la religión en México es pensar en la tradición vinculada al
catolicismo y, específicamente, ligada al folclore: fiesta popular y tu-
rismo. Los medios de comunicación se han encargado, año tras año,
de trasmitir reportajes sobre la fiesta del 12 de diciembre y las proce-
siones a la Basílica de Guadalupe; o bien, las de de Semana Santa en
el centro del país como lo es la que se realiza al Cerro de la Estrella,
en Iztapalapa, Ciudad de México, donde se representa la pasión de
cristo cada año con un hombre que es torturado y fijado a una cruz. O
como aquélla en el poblado de Taxco, en el estado de Guerrero, don-
de los hombres se autoflagelan y cargan a cuestas un madero con es-
pinas. Éstos por citar los casos más difundidos. La religión en México
es considerada sincrética, pues es una mezcla de las prácticas rituales
del México novohispano y las costumbres religiosas europeas del si-
glo xvi vinculadas al culto a los santos (Rubial, 1999 y Gruzinski, 1991).
Las festividades religiosas de los pueblos indígenas de todo el país
han sido foco de interés de los investigadores sociales: Collin (1994)
estudió el cambio social entre los otomíes y purépechas, al norte
del Estado de México y Michoacán, respectivamente, mientras que

67
68 Alejandro Tapia Vargas Religión y felicidad en México 69

Bonfiglioli (1995) se enfocó a la estructura de las danzas y las fiestas Tabla 1. Proporción de la membresía religiosa en México
entre los raramuri al noroeste del país; así mismo, Rubio (1995) estu-
dió la formas de organización ceremonial al sureste. Marion (1994), Denominación %
por su parte, analizó las funciones sociales de distintos ritos de paso Ninguna 13.2
al sur del país, y Millán (1993) ahondó en el papel del rito en la cons- Católica 77.26
titución y consolidación de la estructura social. Ésta es la religión que
se vive en México, de una tradición y relevancia a niveles locales y de Protestante 3.44
gran impacto entre sus creyentes. Evangélica 3.71
Sobre la religión se ha escrito bastante, principalmente sobre las Judía 0.14
fiestas patronales y sus expresiones populares, pero se ha estudiado Musulmana 0.04
poco la relación entre la religión y otras variables, conductas o proce- Hindú 0.02
sos cognitivos específicos, como son los niveles de satisfacción con Budista 0.10
la vida o el bienestar subjetivo del creyente, por mencionar un ejem-
plo. Los temas que han atraído a los investigadores se caracterizan
Otro 1.08
por centrarse en sus manifestaciones sociales, pero no en aspectos No aplica 0.98
privados y subjetivos de la experiencia religiosa. De hecho, los estu- Total 100
dios sobre la felicidad en México son escasos y específicamente los
relacionados con la religión son difíciles de encontrar. Uno lo pode- Fuente: Inglehart et al. (2000)
mos obtener de la Encuesta Mundial de Valores llevada a cabo por
Inglehart y sus colaboradores (2000) y otros dos, llevados a cabo en Tabla 2. Proporción de católicos en México
el Centro de Estudios sobre el Bienestar y reportados a nivel local y
nacional. Denominación %
Por ello, se busca hacer énfasis aquí en los datos que al respecto Católicos 88.75
existen en México; y para lograrlo, hemos elegido los datos con los No católicos 7.7
que contamos en el Centro de Estudios Sobre el Bienestar de la udem,
Sin religión 3.5
a los que se les suman algunos otros, como la Encuesta Mundial de
Valores y los del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Infor- Total 100
mática (inegi) del gobierno de México.
Fuente: INEGI (2000)

Panorama religioso en México.


En la Encuesta Mundial de Valores, Inglehart y sus colaboradores
Los mexicanos, en general, se consideran religiosos y en su mayoría (2000) encontraron que sólo 60% de los mexicanos dice tener con-
se dicen católicos (ver tablas 1 y 2); sin embargo, las características de fianza en las organizaciones religiosas, lo cual explica que únicamente
su práctica religiosa son muy diversas. una minoría se diga ser miembro voluntario de alguna organización
con fines religiosos. Cerca de la mitad de los mexicanos ha dejado de
creer en el infierno y poco más de 70% cree en el cielo y el pecado, y
70 Alejandro Tapia Vargas Religión y felicidad en México 71

generalmente asisten a los servicios religiosos una vez a la semana, Los análisis de contigencia de los tres años de colección de datos
sin importar la edad. Las evidencias no reflejan alguna relación entre de las muestras tomadas por el equipo de Inglehart (2000) en 1981,
la asistencia a los servicios y el estado civil de los mexicanos. 1990 y 1995-1997 reflejaron una tendencia hacia la baja en el com-
Los datos del Centro de Estudios sobre el Bienestar indican algu- portamiento religioso de los mexicanos. Pese a que hubo más mexi-
nas diferencias en cuanto al género (ver tablas 3 y 4). En términos canos activos (en lo que a religiosidad se refiere) entre 1995 y 1997
generales, en México es más probable que un hombre asista a los que en los años anteriores, hubo una disminución de quienes se con-
servicios religiosos menos de una vez al año y que una mujer lo haga sideran religiosos y forman parte de una religión, y hubo un aumento
una vez a la semana. Aunque, las mujeres con más años de educación de 2.5 a 5.1% de quienes se dijeron ateos. Así también se registró
formal tienden a asistir menos de una vez al año. 1.7% de quienes reportaron dudar de la existencia de Dios, duda no
expresada en los años anteriores. También para 1995 y 1997 se regis-
Tabla 3. Asistencia a servicios religiosos en México (N) tró una disminución de la cantidad de mexicanos que se dijeron ca-
Periodicidad % tólicos, hubo un aumento la comunidad judía y protestante, mientras
que las religiones consideradas evangélicas no sufrieron cambios.
Prácticamente nunca 8.4
Aunque la mayoría de la población se diga católica, los índices de
Menos de una vez al año 1.2
mexicanos católicos cambian a lo largo del territorio de la República.
Una vez al año 7.1 Según fuentes del Censo General de Población del Instituto Nacio-
Sólo en días festivos 15.3 nal de Estadística Geografía e Informática, los estados con población
Una vez al mes 20.4 católica por encima de 95% son Aguascalientes, Jalisco, Querétaro y
Una vez a la semana 38.3 Zacatecas mientras que los más bajos, entre 63 y 73%, son Chiapas,
Tabasco, Campeche y Quintana Roo, en dicho orden. En estos últimos
Más de una vez a la semana 9.3 estados, también se reportan los índices más altos de religiones no
católicas (entre 11 y 13%) y reportan tener población que se dice no
Fuente: Tapia y Fuentes (2004)
tener religión.
Tabla 4. Asistencia a los servicios religiosos por grupos de edad Esta variedad religiosa invita a identificar si es que regionalmente
podríamos tener datos diferenciados en función de la distribución
Edad Es más probable que asistan* de esta diversidad religiosa. Suárez en 1997 publicó un estudio en el
18-24 Una vez al mes cual reconocía, entre otros, cuatro regiones de diversidad religiosa
claramente definidas. Por nuestra parte, en el Centro de Estudios so-
25-34 Sólo en días festivos bre el Bienestar de la udem, hicimos una regionalización en función
35-44 Sin relación de los datos reportados por Suárez y la información de inegi (2003), y
45-54 Más de una vez a la semana dividimos el país en cinco regiones (ver tabla 5): Bajío, Centro, Norte,
55-64 Una vez a la semana Pacífico y Golfo-Península considerando los siguientes argumentos:
el Bajío es una zona caracterizada por poca heterogeneidad religiosa,
65- Más de una vez a la semana
hubo movimiento cristero, hay un alto catolicismo y baja penetra-
ción de religiones minoritarias; el Centro, se conforma por estados
Fuente: Tapia y Fuentes (2004) *X2 observada 76.43 > X2a 50.892 (a=.01) con una diversidad religiosa moderada, integrados espacialmente al
72 Alejandro Tapia Vargas Religión y felicidad en México 73

centro y con una práctica popular tradicional (folclore) vinculada al El mexicano y sus valores
catolicismo, a excepción del sur de Veracruz que tiene una alta diver-
Otros datos que han sido considerados por los investigadores son
sidad religiosa; el Norte posee poblaciones más bien homogéneas
los valores. Al respecto, en la encuesta realizada por el Centro de Es-
en cuanto a que se dicen católicos y hay escasa tradición en compa-
tudios sobre el Bienestar, Tapia y Fuentes reportaron, a partir de los
ración con los del centro; y hay una moderada penetración religiosa;
análisis, que 97% de los mexicanos creen que la familia es importan-
el Pacífico, tienen una diversidad de culturas autóctonas, tienen en
te, mientras que sólo 67% considera que el dinero es relevante y 64%
común decirse católica y tener una moderada penetración religiosa,
dijo que los bienes materiales son significantes.
a excepción de Oaxaca que es más alta que el resto de los estados de
esta región, sobre todo al este del estado; y la Península, que contie- Para toda la muestra hay una correlación positiva entre la asisten-
ne los estados con más alta penetración en México de religiones no cia a sus servicios religiosos y el valor del servicio. Entre más asisten
católicas, a excepción de Yucatán. a su iglesia los mexicanos le dan mayor importancia al servicio. No se
encontraron diferencias en cuanto a la frecuencia con que asisten a
Con todos los defectos que puede tener cualquier regionalización
sus servicios religiosos y la importancia que le atribuyen a la familia o
del país, consideramos que los criterios ya señalados nos permiten
el dinero; únicamente las personas que casi nunca asisten a sus ser-
tener un panorama religioso del territorio mexicano tal como que-
vicios religiosos, le dan más importancia a los bienes materiales, pero
dan identificados (ver figura 1, pág. 75). Nuestros análisis indican
este dato sólo aparece en comparación con aquellos que asisten sólo
que regionalmente los mexicanos asisten a sus servicios religiosos
en días festivos.
de manera distinta, al menos en tres de estas regiones: en el Bajío y
la zona del Pacífico es más probable que asistan una vez a la semana Otro aspecto a destacar, en la relación entre la asistencia a los ser-
mientras que en la región Centro suelen hacerlo una vez al mes o sólo vicios religiosos y los valores, el cual resulta de momento inexplicable
en días festivos. –y quizá se deba a una relación espuria–, es que sólo las mujeres ca-
sadas que asisten más de una vez a la semana consideran el valor de
Tabla 5. Regiones según conformación religiosa en México
ser libre como “muy importante”.
1. Bajío 2. Centro 3. Norte 4. Pacífico 5. Península
Aguascalientes Ciudad de Baja California Guerrero Campeche ¿Y son felices los mexicanos?
México Norte
Colima Estado de Baja California Michoacán Chiapas En términos generales, los mexicanos se refieren a sí mismos como
México Sur gente feliz. La encuesta mundial del valores, en sus tres registros
Guanajuato Hidalgo Chihuahua Oaxaca Quintana Roo (1980, 1990 y 1995-1997) reflejó que los mexicanos se dicen ser muy
felices y “casi muy felices” alrededor de 70%. La Encuesta Nacional
Jalisco Morelos Coahuila Tabasco
del Centro de Estudios sobre el Bienestar de 2003 indica que 81% de
Nayarit Puebla Durango Yucatán los mexicanos dice tener altos niveles de felicidad y los monitoreos
Querétaro Tlaxcala Nuevo León semanales nacionales de Saba Consultores, más recientemente han
San Luis Potosí Veracruz Tamaulipas reportado que los mexicanos se dijeron altamente felices (81%).
Zacatecas Sinaloa En el trabajo realizado por Inglehart y sus colaboradores (2000), a
Sonora los mexicanos no los hace más ni menos felices confiar en la iglesia
como organización, y reportan ser más felices los que no tuvieron
74 Alejandro Tapia Vargas Religión y felicidad en México 75

una membresía (ni activa o inactiva) en una organización voluntaria giosos una vez por semana, los de la capital lo hacen una vez al mes
con fines religiosos. Tanto los ateos convencidos como las personas y los nuevoleoneses no tienen un patrón específico de asistencia. Así
consideradas como religiosas y los considerados como no religiosos mismo, los niveles de felicidad indican que sólo los nuevoleoneses
se reportaron igualmente felices, lo cual sugiere que el ser una perso- reportaron sentirse más felices que los de los otros dos estados. Da-
na religiosa o no (incluso ser ateo), no tiene un impacto en los niveles tos que indican que la frecuencia con que alguien asiste a sus lugares
de felicidad identificados. Así mismo, las personas se dijeron igual- de culto no está relacionada con el nivel de felicidad percibida.
mente felices independientemente de que reportaran encontrar
Figura 1. Regiones según conformación religiosa en México
confort en su religión o no. Incluso, para la encuesta de 1995-1997
(en comparación con la de los años anteriores) disminuyó la cantidad
de personas que dicen encontrar confort en su religión y 8.1% no
supo dar respuesta a esta pregunta. Norte
SR: NS
En su relación con Dios, la Encuesta Mundial de Valores refleja que F: Más felices que los del
los mexicanos que le otorgaron a Dios mayor importancia en sus vi- Bajío y el Centro
das, se dijeron muy felices en comparación con aquellos que se dije-
ron casi muy felices o poco felices; sin embargo, comparando a los
muy felices con quienes reportaron no serlo tanto, los dos grupos
le dieron igual importancia a Dios en sus vidas. Al parecer quien es
“tibio” en cuanto al nivel de importancia otorgado a Dios también lo
es en cuanto a nivel de felicidad reportado. Lo cual, indica que esta Centro
Bajío SR: 1x mes y días
relación tiene que ver, no tanto con las variables involucradas en sí, SR: 1x semana festivos
sino con el carácter o los rasgos de la persona que contesta de una F: NS F: NS
manera más o menos consistente.
Península
Los análisis de la base de datos del Centro de Estudios Sobre el SR y F: NS
Abreviaturas Pacífico
Bienestar indican que por regiones hay diferencias en cuanto al ni- SR y F: NS
vel de felicidad. Los pobladores de la región Norte reportaron tener SR: Asisten a servicios religiosos
mayores índices de Felicidad en comparación con los pobladores del F: Felicidad Percibida
Bajío y de Centro del país, donde se registraron los índices más bajos NS: Datos no significativos en comparación
de felicidad reportada. Recuérdese que en el Bajío suelen asistir una con las otras regiones
vez a la semana a los cultos religiosos y en centro del país lo hacen
una vez al mes o en días festivos. Entre el resto de las regiones no se
registró diferencia alguna (ver figura 1). Para 2003, tampoco existía relación alguna entre la variable de la
frecuencia de asistencia a su servicios religiosos y el nivel de felici-
Incluso, al hacer comparaciones entre los estados (Estado de Mé- dad reportado. Los análisis estadísticos reflejaron otro dato, también
xico, Jalisco y Nuevo León) que contienen a las poblaciones econó- inexplicable: solamente las mujeres que asisten una vez al año re-
micamente más importantes y más habitadas (la Ciudad de México, sultaron ser menos felices, pero sólo en comparación con aquellas
Guadalajara y Monterrey), se identifican algunas diferencias: mientras mujeres que nunca asisten a la iglesia.
que es más probable que los jaliscienses asistan a sus servicios reli-
76 Alejandro Tapia Vargas Religión y felicidad en México 77

Un caso particular: la zona metropolitana de Monterrey varias veces al día, ya que también resultó significativo este dato para
A finales de 2002, en el Centro de Estudios sobre el Bienestar se dise- los de 18 a 25 años como entre los que tienen entre 36 y 45. ¿Quizá el
ñó un estudio para la zona metropolitana de Monterrey. Entre otros género podría darnos una idea de quién reza más frecuentemente?
elementos, la encuesta medía la satisfacción y la importancia hacia la No, en realidad, tanto hombres como mujeres resultaron rezar o ha-
religión, la frecuencia de oración y la frecuencia en la asistencia a los cer oración con la misma frecuencia y de la misma manera tanto en
servicios religiosos, así como la concepción que tenían de Dios. Esta ocasiones especiales, como varias veces por semana, una vez al día o
encuesta estuvo dirigida a la población mayor de 15 años y se selec- varias veces durante día.
cionó una muestra por conglomerados geográficos de toda la zona Por otra parte, indicaron ser los más felices aquellos que dieron
metropolitana de la ciudad de Monterrey. a la religión una importancia alta (de 90 a 100 puntos). Quienes re-
Dicha encuesta arrojó algunos datos muy particulares. Del total de portaron estar “altamente satisfechos” con su religión resultaron ser
las personas encuestadas, 87.81% dijo pertenecer a una religión y el estadísticamente más felices sólo en comparación con aquellos que
porcentaje restante (12.19%) se dijo no pertenecer a religión alguna. reportaron una “satisfacción media baja” y “baja”, pero no hubo dife-
Así también, del total de la muestra, 85.6% afirmó creer en Dios y no rencias con aquellos que se dijeron medianamente satisfechos. Hay
tener dudas al respecto. 45.5% asiste a sus servicios religiosos de una que destacar aquí que esto no es exclusivo para las personas que se
a más veces por semana, mientras que el porcentaje restante lo hace dijeron tener religión, ya que hubo quienes reportaron sentir una
menos de esa frecuencia. Mientras que casi 60% reza o hace oración satisfacción “baja” o “alta” con su situación religiosa, independiente-
de una a varias veces al día. mente de si pertenecían o no a una religión.

En este punto de la lectura es posible que el lector ya haya empe- Aquellos que atribuyeron una importancia “alta” a Dios, también
zado a hacer algunas inferencias como “el porcentaje que no tiene re- resultaron ser más felices que aquellos que le atribuyeron importan-
ligión es posible que sea el que no cree en Dios” y “los que no tienen cia “media alta” y “media baja” y, por paradójico que parezca, no hubo
religión no rezan”. Nada más equivocado. El análisis estadístico nos marcadas diferencias en cuanto al nivel de felicidad reportado por
indicó que resultaron iguales las posibilidades de que las personas quienes le dan a Dios importancia “baja” y aquéllos que le atribuye-
pertenezcan o no a una religión para: 1) no creer en Dios, 2) creer en ron importancia “alta”. Un elemento que resultó ser relevante, en la
Dios y no tener dudas al respecto, y 3) no creer en Dios como per- relación con Dios y la felicidad, es la concepción que se tiene de Él,
sona, pero sí creer en un poder superior. Así mismo, tanto entre las ya que resultaron ser menos felices aquellos que dudan de su exis-
personas que pertenecen a una religión como entre las que no, hay tencia en comparación con los que no tienen duda. Así también, no
quienes nunca rezan o hacen oración, y claro, también hubo quien lo hubo diferencias significativas en la felicidad entre los grupos que
hace de una a varias veces al día. no creían en Él, los que afirmaron no saber quién es (y no creían que
hubiera manera de saberlo), los que lo conciben como poder supe-
Es posible que pueda suponerse que las personas que más rezan rior y los que saben que existe (y no tenían dudas al respecto). Lo que
son las mayores, como lo sugieren algunos resultados informados parece ser evidente aquí, es “la duda”, el hecho de estar inseguro res-
por Craig, pero nuestros resultados no sustentan esta opinión, al me- pecto a Dios, es lo que hace a una persona menos feliz. Vale destacar
nos no para el estudio hecho en la zona metropolitana de Monte- aquí que la importancia asignada a Dios no depende del concepto
rrey. Veamos: entre el grupo de las personas mayores de 55 años hay que se tiene de Él, pues hubo quienes le asignaron una importancia,
quienes rezan varias veces al día como entre los que sólo lo hacen en independientemente de su opinión de Dios.
ocasiones especiales. Sin embargo, no fue el único grupo que reza
Referente a la frecuencia de la asistencia a los servicios religiosos,
78 Alejandro Tapia Vargas Religión y felicidad en México 79

resultaron ser más felices las personas que iban de una a más de una diametralmente opuestos. La muestra de estudiantes de la capital
vez por semana en comparación con los que nunca o prácticamente del país reportó que les gusta menos su religión, dijeron conocerla
nunca asistían a ella. Como sólo esta combinación hizo la diferencia, menos y también es el grupo que resultó con una actitud menos fa-
el dato nos indica que, el estado de felicidad de las personas no varía vorable hacia la religiosidad, creen menos en Dios, Jesús, la Iglesia y la
entre quienes van menos de una vez al año y quienes van más de una liturgia, y reportaron sentir menos pertenencia religiosa, en compara-
vez por semana. La diferencia radicó sólo en los grupos extremos. ción con la muestra de universitarios tomada de Monterrey.
Por último, resultó ser irrelevante la frecuencia de rezos u oración Tabla 6. Actividades que los universitarios hacen explícitamente para sentirse
que una persona realiza y su nivel de felicidad reportado. No resul- felices
taron ser ni más ni menos felices por esta causa. Lo cual indica que
en nuestra muestra, rezar o hacer oración no es un indicador de la Categoría Descripción Testimonio
felicidad.
Interacción Explícita la interacción “Hablo con mis amigos y familia”
Como comentario final, podemos decir que, para el caso regiomon- social con los demás “Estar con mi pareja”
tano o la zona metropolitana de Monterrey, sí existe relación entre las “Mejorar mis relaciones interper-
variables de felicidad y la religión. La felicidad resultó estar positiva- sonales”
mente relacionada con la importancia otorgada a su religión y nega- Recreativa Aquellas que son “Pintar, cantar, bailar”
tivamente con el hecho de dudar de la existencia de Dios. Aunque, Cultural para entretenimiento “Deportes”
pertenecer o no a una religión, como el tener una particular forma de “Voy a fiestas”
concebir a Dios, no hace ni más ni menos felices a los encuestados. Personal Centrado en la actividad “Ver películas”
per se “Ir al salón de belleza”
“Hacer algunas actividades”
Religiosidad entre estudiantes universitarios
Abstracta Relacionados con un orden “Reconciliarme conmigo mismo”
Con la intención de conocer algunas de las características de los estu- subjetivo para la persona “Olvidar a una novia(o)”
diantes de psicología, en relación con la religiosidad, se hicieron un par “Poner orden”
de sondeos en una institución de inspiración católica en Monterrey. Profesional Vinculadas con aspectos “Hacer mi tarea”
A grandes rasgos, los datos obtenidos indicaron que, del total de académicos o laborales “Iniciar con mi programa de
estudiantes encuestados, 92% fueron criados como católicos, pero maestría”
sólo 86% sigue siéndolo; 69% se considera practicante y 82% resultó “Iniciar un empleo”
tener una religiosidad intrínseca. Entre las actividades que explícita- Religiosa La práctica de algún “Ir a misa y orar”
mente los estudiantes realizan para sentirse felices, reportaron que elemento de su fe “Confesarme y orar”
las religiosas, pese a ser consideradas en menor medida, están entre “Ir a la iglesia”
las principales. Véase la tabla 6 donde se expone el tipo de activida-
des que los estudiantes realizan y que contribuyen a su felicidad. En fin, estos datos ya nos dicen algo acerca de la religiosidad y la
Al hacer un estudio comparativo entre la población de una univer- felicidad en nuestro país. Como podemos ver, los datos sugieren que
sidad de inspiración católica de Monterrey con estudiantes de una las variables de religión y felicidad en México sí están relacionadas; sin
laica de Ciudad de México, llama la atención que los resultados salen embargo, las diferencias encontradas en todo el territorio nacional, en
80 Alejandro Tapia Vargas

Crisis económica en México


general, y la zona metropolitana de Monterrey, en particular, indican
que hay patrones y comportamientos específicos a nivel local que
no puedan ser generalizables a nivel nacional. Lo cual se explica por
la diversidad religiosa, las distintas formas de culto que prevalecen
y calidad de vida
en México y la percepción que de las doctrinas religiosas hacen los Alejandro Tapia Vargas y José de Jesús García Vega
creyentes. Por ello, tratar de relacionar la religión de manera general
con el bienestar subjetivo o felicidad percibida, sin especificar creen-

E
cias o comportamientos religiosos en particular, se hace inexplicable; n Cien años de confusión: México en el siglo xx, Macario Schettino,
es como si los galileos de las bodas de Caná hubieran querido llenar nos dice que, 1) la economía mexicana no se colapsó durante la
los odres viejos con vino nuevo, carece de sentido, a riesgo de echar revolución, aunque hubo años verdaderamente complicados y
a perder el resultado. Así que, como podemos ver, aún hay mucho 2) la crisis más profunda tuvo que ver con el sistema financiero, pero
camino por recorrer. Y estos datos, apenas empiezan a señalarnos al- eso se vino pocos años después. Dice, “...el valor de la moneda, en
gunas vías por seguir. particular del papel moneda, depende de la estabilidad política la
cual desaparece entre 1914 y 1916. En esos años, los precios y el tipo
de cambio se dispararon, pero el restablecimiento del estado permi-
te una relativa, rápida recuperación de la economía; sin embargo, el
fin de la Primera Guerra Mundial provoca una caída en el precio de
los bienes primarios, por ejemplo, el henequén y el algodón lo que
impide un mejor desempeño en esos años... Y para fines de la década
de los 20, la Gran Depresión vuelve a hundir la economía mexicana...
De hecho, México apenas recupera el nivel que tenía en 1910 para
mediados de la década de los 30. Estabilidad que viene a decaer con
la Segunda Guerra Mundial”.
De entrada, esta idea de que la crisis económica viene desde la
época de la Revolución o un poquito más para acá, hace sentido con
lo que popularmente se escucha “Nosotros en México, como que es-
tamos más o menos acostumbrados a esta idea de crisis”. A principios
de los 90 hubo otra crisis, en los 80 hubo otra crisis, esto es, hemos te-
nido una serie consecutiva de “crisis”. De entrada, esto nos hace pre-
guntarnos algo. ¿Cuando hablamos de crisis económica, hablamos
de una crisis económica o de diferentes crisis económicas? Por ello, lo
primero que consideramos importante aclarar, es esta idea de crisis.
Existen diferentes crisis. No existe “una” crisis, solemos hablar de
ella en función del Producto Interno Bruto (pib), cuando el pib baja
quiere decir que la producción nacional es menor, entonces estamos
hablando que empieza a haber problemas económicos. Cuando hay

81
82 Alejandro Tapia Vargas y José de Jesús García Vega Crisis económica en México y calidad de vida 83

una inflación, los precios de los bienes de consumo suben, entonces nacional decrece. Empezamos a hablar de crisis económica, cuando
también hablamos de crisis económica, pero es una diferente. A ve- esta productividad o el Producto Interno Bruto está por debajo del
ces hay problemas de administración del dinero que impactarían en promedio nacional alrededor de cuatro o cinco trimestres; o sea, es-
una crisis, que afecta el flujo del dinero, que sería una crisis financiera tamos hablando de un año a un año y medio. Y hablamos de depre-
y, por consiguiente, estamos hablando de diferentes crisis, no de una. sión económica cuando esto dura más de un año y medio y puede
Por eso es que, en los 90, podemos hablar de una crisis que tenía durar varios años, como la que ocurrió en la década de los 30 del siglo
que ver más con la inflación, y ahora, pasada la primera década del pasado, la cual duró alrededor de 6 años.
siglo xxi, estamos hablando de otra. De entrada, entonces, la crisis Otro tema importante que vale la pena destacar, sobre todo para
que vivimos en los albores del siglo xxi es más bien una crisis de con- hablar del tema asociado al bienestar, es que la crisis no nos impac-
fianza. Hemos leído de ello en los periódicos, y esto vendría a ser lo ta igual a todos. Es curioso cómo hemos estado oyendo a nuestros
que se deriva en una crisis financiera. ¿Qué es esto? Si yo soy un inver- colegas hablar de “el congreso en el que estuve”, o decir “viajé el mes
sionista y empiezo a sentir desconfianza en el mercado, ¿qué hago? pasado a tal lugar”, esto es, seguimos viajando pese a la crisis. Podría-
Empiezo a retirar mi dinero de los bancos. Al retirar mi dinero de los mos incluso preguntarle a nuestro lector, si debido a la crisis de esta
bancos, el banco ya no tiene dinero para prestar y, por consiguiente, época dejó de viajar, de consumir, de pagar colegiaturas. Quizá lo he-
llega un empresario que quiere iniciar una producción o aumentar su mos hecho o no, pero todos lo hicimos o incluso tuvimos todavía la
productividad o iniciar una nueva empresa, solicita dinero al banco. posibilidad de seguir consumiendo. Probablemente no de la misma
¿Y éste qué le dice?, “pues no tengo mucho dinero que prestarte”, si manera a como lo hacíamos antes de 2008 y hemos empezado a gas-
no hay mucho dinero que prestar entonces ya no se puede aumen- tar menos, seguimos gastando, pero es cierto, lo hacemos menos.
tar la producción; si no se puede aumentar la producción, entonces Uno de los elementos de la crisis, es que es relativa, de entrada es-
ya no se tienen las mismas posibilidades para seguir manteniendo a tamos hablando de crisis desde 2008, pero ese año México no había
los empleados. ¿Entonces qué se puede hacer? Pues probablemente entrado en crisis económica sino a partir de 2009, oficialmente. Otros
empezar a despedir gente y recortar el personal. Si se empieza a des- países habían empezado desde antes. En Alemania, los bancos ha-
pedir gente y la gente está empezando a tener problemas económi- bían empezado a cerrar desde 2008. Cada país tiene sus propias for-
cos, ¿qué va a ocurrir? Pues va a ocurrir que tampoco va a poder com- mas de administración, sus propios sistemas de producción, y cuenta
prar bienes y, por consiguiente, como no va a poder comprar bienes con recursos para hacer frente de manera diferente a estas crisis.
porque no tiene suficiente dinero, entonces también va a tener que
sacar su dinero del banco o empezar a consumir sus ahorros. Total, Un dato interesante ocurrió en la industria de la decoración. Tuvo
que tenemos una espiral que nos va llevando hacia abajo. Un espiral cierto crecimiento, a pesar de la crisis. Cuando uno está en casa, la
que, en este caso, empezó a mediados de 2008. primera impresión que a uno se le viene a la mente es: bueno, ya no
estamos saliendo tanto, estamos pasando más tiempo en casa, nos
Eso es lo que pasó con esta crisis en particular. Y algunos dicen que estamos dando cuenta de los desperfectos que hay en nuestro do-
esta crisis empezó por la construcción de la vivienda. Se construye- micilio, en el portón, en las llaves de agua, en algún lugar y entonces
ron muchas viviendas y no había quién las comprara; así se viene el empezamos a voltear a ver también la pintura, el techo, etc. La in-
resto de la espiral y todo el problema de la crisis que se vivió a nivel dustria de la decoración parece ser que es otra de las industrias a las
mundial, no sólo en México. que no les impactó tanto la crisis. Estamos más tiempo en casa y nos
Llegados a este punto hace falta aclarar algunos conceptos. Habla- estamos fijando en otras necesidades que antes no nos fijábamos.
mos de recesión económica cuando en dos trimestres la producción
84 Alejandro Tapia Vargas y José de Jesús García Vega Crisis económica en México y calidad de vida 85

Supongamos que somos estudiantes, nuestros padres nos finan- pancias múltiples, sobre la influencia de la percepción del dinero, es
cian los estudios profesionales. Por consiguiente, no estamos te- el siguiente. Una cosa es lo que yo tengo, lo que necesito, lo que quie-
niendo tanto el problema del dinero. A veces nos dicen “no estés ro o lo que me merezco. Entre más grande o más larga sea la distancia
gastando tanto”, “si querías salir, no se puede”. A quienes les pega pro- entre lo que tengo con cada uno de estos tres factores, entonces me
bablemente más la crisis es a los proveedores del hogar y no tanto a puedo sentir que estoy siendo una persona con problemas econó-
los adolescentes o a los estudiantes de profesional. Igual ocurre con micos. Si yo gano, aunque sea cinco pesos y es lo que yo necesito,
aquellas personas que no han perdido el empleo, las personas que ya entonces está bien. Si el ingreso de estos cinco pesos, no es lo que
perdieron el empleo entonces están sufriendo la crisis de una forma yo quiero, y deseo un poquito más, pero no tengo una idea clara de
distinta. Si yo perdí mi empleo y tengo ahorros, probablemente pue- cuanto más quiero, entonces no está tan mal que gane esos cinco
da mantenerme dos o tres meses con mis ahorros para conseguir o pesos cuando es lo que necesito para vivir. Pero si dijéramos “Oye, yo
mientras consigo algún otro empleo o algún subempleo o empiezo gano cinco pesos, pero me merezco, mínimo, treinta pesos”, enton-
a ver qué hago para ganar dinero. Y entonces, no me está pegando la ces nos podemos dar cuenta de este puente que existe entre lo que
crisis igual que a mi vecino. merezco, lo que necesito y lo que quisiera. Por consiguiente, estos
Sabemos que todo es relativo, en psicología decimos que “todo son otros factores que están mediando esta idea de la percepción
depende”, incluso el dinero es relativo. Cuando estoy pensando en del dinero.
que todo es relativo, hasta el dinero, es que el dinero per se no vale La felicidad, entonces, depende de estos y otros factores más. La
lo mismo para cada uno de nosotros. Yo puedo ganar cinco pesos y adaptabilidad es uno de estos factores. Pongamos un caso extremo:
mi vecino cinco pesos también, y yo puedo decir que cinco pesos es podemos perder el empleo de muy alto nivel y tal vez encontremos
muy poquito, mientras que mi vecino puede decir que “bueno no es uno de muy bajo nivel que no va con el estatus al que estábamos
mucho, pero no está tan mal”. acostumbrados. Los estudios nos dicen que terminamos por adap-
La percepción del dinero depende de varios factores. Uno de los tarnos a la situación. Esto es, probablemente nos sentimos muy mal
factores de los que depende la percepción del dinero es que sole- el primer semestre, es más, tal vez los primeros dos semestres, pero
mos compararnos con otros. Generalmente vivimos en un barrio con a partir del primer año, entre el primer año y el segundo, ya estare-
la gente que suele dedicarse y a tener un nivel económico de vida mos adaptados a esta nueva situación de vida. Y esto sucede no sólo
más o menos semejante al nuestro. Si yo veo que mi vecino se está cuando perdemos en términos económicos, sino también cuando
quedando sin trabajo y ha estado teniendo problemas con la crisis y ganamos. Imagínense ustedes que de repente empiezan a recibir el
veo que yo no estoy teniendo tanto estos problemas, entonces digo triple de lo que reciben mensualmente. ¡Maravilloso! ¿No es cierto?
“bueno, quizá ganaremos lo mismo o gano yo un poquito más, por ¡Lo que harían con ese dinero! Después de dos años, después de es-
consiguiente no estoy tan mal”. Si yo, en comparación con los demás, tar ganando esa cantidad, ya no será suficiente, porque ese sueldo
me estoy dando cuenta de que los demás se están cambiando de se convertirá en su línea base, y medirán todo con ese ingreso. Así,
casa, se están yendo a vivir a un lugar mejor, o están ampliando sus terminamos por adaptarnos tanto a una situación crítica en nuestra
casas o comprando coches, es ahí cuando empiezo a decir “parece vida, como a una situación de opulencia económica.
ser entonces que yo estoy funcionando mal”, esto es, la percepción Otro elemento que está en juego es la percepción subjetiva en sí.
del dinero, de alguna manera depende de la comparación con los Consideramos que con el dinero podemos comprar estatus social, en
otros. la medida que consumimos cosas caras, la gente lo nota, habla de
Otro factor que Alex Michalos considera en su teoría de las discre- nuestro poder adquisitivo; igualmente, alguien puede regalar cosas
86 Alejandro Tapia Vargas y José de Jesús García Vega Crisis económica en México y calidad de vida 87

porque supone que así obtendrá el cariño de la pareja o los hijos, en este mismo volumen, relativa a Alex Michalos, el autor hace una
familiares compañeros, amigos y demás. La felicidad, si alguien es fe- precisión al respecto. Cuando tenemos condiciones materiales su-
liz viajando o haciendo algo y puede viajar y hacer eso que quiere y ficientes y podemos hacer muchas cosas con ellas, estamos en un
puede pagárselo, bueno, dirá que el dinero le hace feliz. Y, por último, “paraíso real”; pero cuando no tenemos dinero y tampoco podemos
indiscutiblemente, está el factor de la salud, si nosotros o algún ser hacen mucho con lo escaso que tenemos, Michalos considera que
querido se enfermara, el dinero serviría para solventar los gastos mé- estamos en el “infierno real”, pero ¿qué pasa cuando tenemos de uno
dicos y para no preocuparse por los costos hospitalarios y de trata- y del otro no? Ahí las cosas cambian. Si tengo buenas condiciones
miento. Pero si tengo mucho dinero y además buena salud, entonces materiales de vida o altos ingresos, pero no puedo hacer mucho con
el dinero no es una variable que me preocupe en este sentido. lo que tengo, entonces, nos dice, vivimos en el “infierno de los tontos”
Es por estas percepciones subjetivas del dinero que empiezan a y, por el contrario, cuando decimos que hacemos mucho con lo poco
hacer sentido frases como “no es rico el que más tiene, si no el que que tenemos pero realmente nuestras condiciones materiales son
menos necesita” o “el dinero no es la felicidad, pero como ayuda” y a escasas, es que vivimos en el “paraíso de los tontos”. Esto quiere decir
entender por qué los medios dicen que “la crisis no se siente tan gra- que el bienestar y la felicidad están relacionados con un elemento
ve para algunos” y por qué –y aquí estamos cambiando de tema– “la material objetivo y con una contraparte subjetiva.
felicidad no es un buen indicador del bienestar”. Y con esto entramos De ahí se desprenden propuestas como las de Cummings o Sirgy
al segundo elemento de estas reflexiones. quienes nos dicen que la calidad de vida tiene que medirse con va-
Resulta ser que la felicidad de una persona no tiene que ver del riables objetivas y materiales. De tal suerte que tenemos autores que
todo con el dinero. A la felicidad generalmente se le ha confundido hablan de la felicidad, el bienestar o la calidad de vida e incorporan
con dos elementos: los placeres y las gratificaciones. Sí, los placeres elementos tanto subjetivos como objetivos en su concepción. Por
es todo aquello que nos gusta, que pasa por nuestros sentidos, como ello, instituciones como el Centro de Estudios sobre el Bienestar de la
udem, se han dado a la tarea de medir estos elementos desde el con-
ver un atardecer, oler lo fresco del jardín por la mañana, sentir una
caricia o escuchar la música que nos mueve, todos ellos son placeres cepto calidad de vida, pues es lo que integra elementos materiales y
y el cuerpo los disfruta cuando los percibe o los siente. Por eso aso- subjetivos del bienestar.
ciamos la felicidad con ellos. Por otro lado, tenemos las gratificacio- Como lo menciona García Vega, este centro construyó un modelo
nes, es lo bien que nos sentimos emocionalmente por realizar las co- de calidad de vida basado en siete componentes: 1) la economía,
sas que nos gustan, por involucrarnos en actividades que nos hacen como tal, el ingreso y las pertenencias materiales, 2) la salud y el ac-
sentir partícipes o donde podemos echar a andar nuestras habilida- ceso a los servicios médicos, 3) la educación y la percepción de la
des. Practicar un deporte, estar con nuestros seres queridos, trabajar calidad de las escuelas, 4) el gobierno y nuestra percepción de si es-
o incluso estudiar, hay gente que lo disfruta, porque lleva implícito tamos siendo gobernados por servidores públicos capaces o no, 5) el
hacer algo que nos gusta. La felicidad también se ha asociado a las medio ambiente, si la calidad del ambiente es importante y no sólo
gratificaciones. Ya Martin Seligman nos ha hablado de esto. Y de ahí la contaminación, 6) comunidad, al hablar de la seguridad de nues-
viene toda una línea de investigación que se ha estado desarrollando tro vecindario y población donde vivimos y, por último, 7) bienestar
desde hace más de diez años. ¿Y dónde entra el dinero en todo esto? personal, donde expresamos qué tan satisfechos estamos con lo que
Pues no, en poco de esto hace falta el dinero. tenemos. A continuación se presentan algunos de los resultados ob-
Aún más, retomando la referencia que hace García Vega en su con- tenidos de la aplicación de este índice a nivel nacional en 2008.
tribución, titulada “Calidad de vida en México y el mundo”, incluida En general, los resultados nos indican que los puntajes más altos
92 Ruut Veenhoven Felicidad: lecciones de la investigación empírica 93

social. La palabra también se utiliza en el sentido más específico de Esta conceptualización de la felicidad se analiza con más detalle
la apreciación subjetiva de la vida y eso es de lo que este capítulo se en un artículo mío publicado en 1984. Hay evidencia de que la expe-
trata. La felicidad se define como el grado en que un individuo juzga riencia afectiva domina la evaluación global de la vida, que se ajusta
la calidad general de su propia vida como un todo favorable. En otras a la teoría de que los afectos son el sistema de orientación básica de
palabras: cuánto le gusta a uno la vida que lleva. los mamíferos y que el conocimiento desarrollado más adelante en la
evolución funciona como un complemento y no como un sustituto.

Componentes de la felicidad
Los seres humanos son capaces de evaluar su vida de dos maneras. 2) ¿Puede medirse la felicidad?
Tenemos en común con todos los animales superiores el hecho que Puesto que la felicidad se define como algo que tenemos en la men-
podemos apreciar nuestra situación afectivamente. Nos sentimos te, puede medirse por medio de preguntas. Una pregunta común
bien o mal de las cosas particulares y nuestro nivel de estado de áni- es:
”Considerando todos los aspectos, ¿qué tan satisfecho está usted
mo son señales de adaptación general. Al igual que en los animales, con su vida como un todo en estos días?
estas valoraciones afectivas son automáticas, pero a diferencia de
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
éstos, los humanos podemos reflexionar sobre esta experiencia. Te-
nemos una idea de cómo nos hemos sentido durante el último año, Extremadamente no satisfecho Extremadamente satisfecho
mientras que un gato no. Los seres humanos pueden juzgar la vida
cognitiva mediante la comparación de la vida “como es” respecto al
“como debe ser”. Me refiero a estas evaluaciones como el nivel hedó- Este tipo de pregunta, común en las encuestas, como puede ser la
nico de afecto y alegría, el cual puede verse como un subtotal en la Encuesta Mundial de Valores y la Encuesta Mundial de Gallup, sigue
evaluación global de la vida, a la que llamo la felicidad general. siendo muy criticada.

Nivel hedónico de afecto: El nivel hedónico de afecto es el gra-


do en el que varios efectos de las diversas experiencias personales Validez
resultan agradables, lo que se refleja normalmente en “estado de áni-
Aunque estas preguntas son bastante claras, las respuestas pueden
mo”. El nivel hedónico promedio de una persona puede ser evalua-
verse afectadas en varios aspectos. Las respuestas pueden reflejar
do en diferentes períodos de tiempo: una hora, una semana, un año,
qué tan feliz cree la gente que debería de ser en vez de que tan fe-
así como durante toda la vida. El foco aquí está en el nivel hedónico
liz es en realidad, y es probable que las personas se describan más
“característico”. Eso es, por así decirlo, la media de un período prolon-
felices de lo que en realidad son. Estas sospechas han dado lugar a
gado, como un mes o un año. El concepto no supone la conciencia
numerosos estudios de validación. He revisado estas investigaciones
subjetiva de ese nivel promedio.
y he concluido que no hay pruebas de que las respuestas a estas pre-
Satisfacción: La satisfacción es el grado en que un individuo per- guntas midan algo distinto de lo que se quiere medir. Aunque esto
cibe que sus aspiraciones se cumplen. El concepto presupone que el no garantiza que las investigaciones no revelan una deficiencia, por
individuo ha desarrollado algunos deseos conscientes y se ha forma- el momento podemos confiar en estas medidas de la felicidad.
do una idea de su realización. Que tan correcta es esta idea es algo
que no está en juego. El concepto se refiere a la percepción subjetiva
del individuo.
94 Ruut Veenhoven Felicidad: lecciones de la investigación empírica 95

Confiabilidad historia diferente. Si la felicidad no se puede comunicar en una escala


La investigación también ha demostrado que las respuestas se ven equivalente, habrá poca correlación entre la felicidad subjetiva y la
afectadas por variaciones menores en la redacción y el orden de las objetiva de las condiciones de vida. Sin embargo, las investigaciones
preguntas, así como por factores situacionales, tales como la raza del demuestran varias correlaciones significativas, algunas de las cuales
entrevistador o el clima. Por lo que, una misma persona puede tener se presentan en las tablas contenidas en este ensayo.
una puntuación de 6 en una investigación y 7 en otra. Esta falta de Por último, existe cierta reserva metodológica acerca de los posi-
precisión obstaculiza los análisis a nivel individual. Es un problema bles sesgos culturales en la medición de la felicidad, debido a pro-
menor cuando se compara con la felicidad promedio de grupos, ya blemas con la traducción de palabras clave y la variación cultural en
que las fluctuaciones aleatorias tienden al equilibrio. Este suele ser el las tendencias de las respuesta. Se ha buscado evidencia empírica de
caso cuando la felicidad se utiliza en la evaluación de políticas. estas distorsiones, pero no se ha encontrado ninguna.

Comparabilidad 3) ¿Qué tan felices somos?


Una objeción que se hace a las encuestas es que las respuestas a las A continuación se muestra la respuesta a una pregunta acerca de la
preguntas formuladas no son comparables, debido a que una pun- felicidad en México, en una escala del 1 a 10. Las opciones elegidas
tuación de 6, por ejemplo, no significa lo mismo para todos. Un opi- con mayor frecuencia son 8, 9 y 10; sólo 11% de las puntuaciones
nión común para argumentar esta posición es que la felicidad de- están por debajo de 6. El promedio es de 8.2 que, si se extiende a la
pende de la realización de las necesidades y que estas necesidades escala de 0 a 10, es igual a 8.0.
difieren entre las personas y las culturas. Sin embargo, no es en ab-
Figura 1. Felicidad en México
soluto seguro que la felicidad depende de la realización de lo que
se quiere. Los datos disponibles concuerdan más con la teoría de la
40,0%
satisfacción de las necesidades universales.
30,0%
Una duda relacionada con lo anterior sostiene que la felicidad es
un concepto típico occidental que no se reconoce en otras culturas. 20,0%
Sin embargo, la felicidad parece ser una emoción universal que se
10,0%
reconoce en la expresión facial en todo el mundo y es un sentimiento
para el cual existen palabras en todos los idiomas. En consecuencia,
No satisfecho 2 3 4 5 6 7 8 9 Satisfecho
la falta de una respuesta a la pregunta acerca de la felicidad resulta
ser baja en todo el mundo.
Otra objeción es que la felicidad es una experiencia única que no ¿En qué rango de la felicidad se encuentra México en comparación
se puede comunicar en una escala equivalente. Las raíces de esta con otras naciones? Algunos resultados ilustrativos se presentan en
observación están en la visión constructivista del ser humano. Sin la figura 2. La calificación de 7.9 de México es un promedio de tres en-
embargo, desde el punto de vista evolutivo, es poco probable que cuestas con una pregunta similar en este período. México está entre
difieran mucho. Al igual que en el caso del dolor, habrá un espectro los más altos del mundo. Como se puede ver, la felicidad media varía
común de la experiencia humana. Los datos también muestran una entre 8.3 (Dinamarca) y 3.0 (Zimbabwe).
96 Ruut Veenhoven Felicidad: lecciones de la investigación empírica 97

Figura 2. La felicidad en las naciones en 2000-2009; promedio en la escala de 0 a 10 lo tanto, las posibilidades de “eventos gratificantes” y “eventos desa-
gradables” no son las mismas para todos. Esto se conoce comúnmen-
te como oportunidades de vida; por ejemplo, Max Weber enfatiza las
diferencias en el acceso a los escasos recursos. Las oportunidades de
vida presentes están arraigadas en el pasado y en las estructuras de
oportunidad, así como en la historia de la sociedad y el desarrollo
individual.
Un ejemplo puede ilustrar este modelo de cuatro pasos: las opor-
tunidades de vida de una persona pueden ser pocas, porque vive en
una sociedad sin ley, se encuentra en una posición sin poder en esa
sociedad, y no es personalmente ni inteligente ni agradable (paso 1).
Esa persona se encontrará con muchos eventos adversos. Este indivi-
duo puede ser asaltado, engañado, humillado y excluido (paso 2). Por
lo tanto, con frecuencia se siente ansioso, enojado y solitario (paso 3).
Con base en este flujo de la experiencia de esa persona, ésta juzgará
negativamente la vida como un todo (paso 4).
4) ¿Por qué somos más felices o menos? Figura 3. Evaluación de la vida: un modelo de secuencias de condiciones y procesos
Una vez establecido que las personas difieren en la felicidad, la si-
guiente pregunta es por qué. Varios factores están implicados, tales
como la acción colectiva y el comportamiento individual, simple ex-
periencias sensoriales y la cognición superior, características estables
del individuo y su medio ambiente, así como los monstruos de la
suerte. La figura 3 presenta un orden tentativo de los factores y pro-
cesos en un modelo de secuencia.
El modelo supone que la evaluación de la vida se basa en las ex-
periencias de la vida diaria, en particular experiencias positivas y ne-
gativas, las cuales son una reacción mental para el curso de los acon-
tecimientos vitales. Esto incluye los eventos más importantes que
sólo ocurren una sola vez, como el matrimonio o las migraciones; así
como repetitivos eventos, como levantarse por la mañana y lavar los
platos. Los acontecimientos que suceden en la vida son en parte una
cuestión de buena o mala suerte, como en el caso de los accidentes.
Estos acontecimientos también dependen de determinadas condi-
ciones y capacidades. Los accidentes de tráfico son menos frecuentes
en las sociedades bien organizadas y entre las personas atentas. Por
98 Ruut Veenhoven Felicidad: lecciones de la investigación empírica 99

Felicidad en la sociedad Modernidad


¿Por qué la felicidad difiere tanto entre las naciones? La figura 4 pre- Escolaridad +.56 138
senta algunas de las cualidades sociales que hay detrás de la felici- Urbanización +.58 137
dad. Gran parte de estos factores forman parte del síndrome de la
Varianza explicada (R2 ajustada) 75%
“modernidad”. Mientras más moderno sea el país, mayor el grado de
felicidad de sus ciudadanos. Este hallazgo resulta una sorpresa para Fuente: World Database of Happiness, Data File
los profetas de la fatalidad, que asocian la modernidad con la deca-
dencia, y también contradice las intuiciones de varios científicos so-
ciales. Freud, en su obra Das Unbehagen in der Kultur (1930) –cono- Posición social
cido en español como El malestar en la cultura–, argumentó que el
Además de los hallazgos sobre las diferencias en la felicidad prome-
desarrollo social requiere la inhibición de los impulsos primitivos, los
dio en los diferentes países, también hay una gran cantidad de inves-
cuales consideró como esenciales para la felicidad. Del mismo modo,
tigación sobre las diferencias en la felicidad individual dentro de los
Durkheim (1893: 230) en su obra De la division du travail social argu-
países. Dado que la mayoría de estos estudios están inspirados en la
mentó en contra de los economistas que alaban los beneficios de la
política social igualitaria, a menudo se hace hincapié en las diferen-
división del trabajo. Aunque la modernización puede implicar pro-
cias sociales, tales como el ingreso, la educación y el empleo. Contra-
blemas, sus beneficios son claramente mayores.
rio a las expectativas, estas diferencias posicionales tienen poca rela-
Figura 4.
Felicidad y la sociedad en 146 naciones 2000-2009 ción con la felicidad, al menos en la sociedad moderna. Las variables
posicionales explican no más de 10% de la varianza en la felicidad.
Características de la sociedad Correlación con N Las principales conclusiones se resumen en la Figura 5.
la felicidad
Riqueza +.69 136 
Figura 5.
La felicidad y la posición en la sociedad: resumen de resultados de la in-
vestigación
Estado de Derecho
Derechos civiles +.50 131
Correlación intra Similitud de
Corrupción -.69 137 naciones occidentales correlación entre
todas las naciones
Libertad
Rango social
Económica +.63 135
Ingresos + -
Política +.53 131
Educación +
- -
Personal +.41 83
Igualdad Prestigio + +
Desigualdad de ingreso -.08 119 Participación social
Desigualdad por género -.21 110 Empleo +
- +
Diversidad Participación en asociaciones + +
% Inmigrantes +.29 126
Tolerancia a las minorías +.49 77
100 Ruut Veenhoven Felicidad: lecciones de la investigación empírica 101

Red primaria Personalidad


Cónyuge ++ + Control interno + +
Hijos 0 ? Extraversión + +
Amigos + + Conciencia + ?
Arte de vivir
Leyenda:
Deseo de aceptación + +
++ Positivo fuerte + Correlaciones similares
Sociabilidad ++ +
+ Positivo +
- Que varía
0 Sin relación - Diferentes correlaciones Leyenda:
- Negativo ++ Positivo fuerte + Correlaciones similares
? Aún no investigado ? No hay datos + Positivo +
- Que varía
0 Sin relación - Diferentes correlaciones
Fuente: World Database of Happiness, collection Correlational Findings
- Negativo
? Aún no investigado ? No hay datos
Habilidades de vida
Las correlaciones más fuertes se observan en el nivel psicológico: las Fuente: World Database of Happiness, collection Correlational Findings
personas felices están mejor dotadas que las infelices. La varianza co-
mún explicada por esas variables tiende a ser alrededor de 30%. Al- 5) Posibilidad de ser más felices
gunas de las conclusiones principales se resumen en la figura 6. Gran
¿Pueden las políticas públicas crear una mayor felicidad? Varios cien-
parte de las conclusiones sobre la variación individual en la felicidad
tíficos no lo creen así. Algunos psicólogos sostienen que la felicidad
se resumen a una diferencia en la capacidad de controlar el medio
es gran parte innata o al menos que está integrada en una personali-
ambiente y este patrón parece ser universal.
dad estable. Por lo tanto, una mejor sociedad no producirá ciudada-
Figura 6. 
La felicidad y las habilidades de vida: resumen de resultados de la nos más felices. Este punto de vista se conoce como la teoría del “set-
investigación point” o “punto de referencia”. Algunos sociólogos llegan a la misma
conclusión, porque piensan que la felicidad depende de la compa-
Correlación intra Similitud de ración social y que no están en mejor situación que los vecinos si las
naciones occidentales correlación entre
todas las naciones condiciones para todo el mundo mejoran. En ese sentido, el caso de
Estados Unidos es a menudo mencionado como un ejemplo, ya que
Competencias
aun cuando la riqueza material se haya duplicado en algunos perio-
Salud física + + dos, la felicidad media parece haber permanecido en el mismo nivel.
Salud mental ++ + Sin embargo, desde mi punto de vista, estos científicos se equivocan,
IQ 0 + tanto empírica como teóricamente.
102 Ruut Veenhoven Felicidad: lecciones de la investigación empírica 103

Indicadores empíricos Figura 7. Evolución media de la felicidad en tres países


Hay una clara relación entre la felicidad promedio y la calidad de la
sociedad. Piense en el caso de Zimbabwe en la figura 1, donde este 9.00
país se encuentra en la parte inferior de nivel de felicidad con un pro- Dinamarca
medio de 3.3. Al parecer la gente no puede vivir feliz en un estado 8.00
fallido, aun cuando sus vecinos sufren lo mismo. Las correlaciones en
México
la figura 4 muestran que ésta no es la excepción, las diferencias en la 7.00
calidad de la sociedad explican alrededor de 80% de la variación en
la felicidad media en el mundo actual. 6.00
La felicidad promedio ha cambiado en la mayoría de las naciones
5.00 Rusia
y, por lo general, muestra mejoría. La figura 7 presenta un aumento
gradual de la felicidad en Dinamarca en los últimos 30 años y una caí-
da dramática de la felicidad media en Rusia, a raíz de la crisis del rublo 4.00
en 1995. Es evidente que la felicidad no está fijada a un set-point o
punto de referencia. 3.00

La figura 7 ilustra también que mayores grados de felicidad son 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010
posibles en la mayoría de las naciones del mundo. La felicidad media
más alta en la actualidad está en Dinamarca, con un promedio de 8.2.
Lo que es posible en Dinamarca también debe ser posible en otros
Fundamentos teóricos
países. No se puede argumentar que la felicidad en Dinamarca sea
una cuestión de herencia genética o el carácter nacional, pues la figu- La idea equivocada de que la mayor felicidad no es posible tiene
ra 3 muestra que la felicidad ha mejorado en Dinamarca desde 1973. raíces en las teorías erradas sobre la naturaleza de la felicidad. Una
de estas teorías es que la felicidad no es más que una cuestión de
La felicidad en la actualidad en Dinamarca puede estar cerca del
actitud ante la vida y que esta perspectiva se establece en las dis-
nivel máximo posible. Si es así, todavía hay un largo camino por reco-
posiciones fijas que forman parte de la personalidad individual, así
rrer para la mayoría de las naciones de este mundo, ya que la media
como del carácter nacional. Otra teoría, igualmente errónea, dice que
mundial es ahora de 5.5. Si alguna vez podría llegar al máximo, toda-
la felicidad resulta de la comparación cognitiva, en particular, de la
vía existe la posibilidad de ampliar su duración y crear más años de
comparación social. En otros estudios he demostrado que estas teo-
vida feliz para un mayor número de personas.
rías no son válidas.
Mi teoría alternativa de la felicidad sostiene que valoramos la vida
sobre la base de información afectiva. Vivimos situaciones tanto posi-
tivas, como negativas, y en la evaluación de cuánto nos gusta la vida
que vivimos, estudiamos hasta qué punto lo malo supera lo bueno.
En esta teoría encaja la idea de Bentham que considera que la feli-
cidad es “la suma de placeres y dolores”. En mi opinión, lo positivo y
104 Ruut Veenhoven

negativo afecta la señal de la satisfacción de las necesidades huma-


nas básicas, por lo que la felicidad final es determinada por la gratifi-
cación de las necesidades.

Conclusión
La felicidad se puede definir como el disfrute subjetivo de la vida
como un todo. Los estudios empíricos sobre la felicidad muestran
una diferencia considerable, tanto en la felicidad promedio entre los
países como entre los ciudadanos de cada país. En su etapa actual,
nuestra comprensión de la felicidad ya muestra, en principio, que la
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