CMSPersonas Calle

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 142

Salud en personas

en situación de calle
Pacientes en situación Perspectivas en torno La vida social de los
de calle hospitalizados al “enfermo/a” en cuerpos muertos de
situación de calle personas en
situación de calle

Nº 2, 20 2 0 ; VO L . 6 0 ISSN 0716-1 336


COLEGIO MÉDICO DE Chile (AG)

Presidenta Dra. Izkia Siches Pastén


Vicepresidente Dr. Patricio Meza
Secretario General Dr. José Miguel Bernucci
Prosecretario Dra. Inés Guerrero
Tesorero General Dr. Jaime Sepulveda

Editor Jefe Yuri Carvajal B. Médico Cirujano. Doctor en Salud Pública. Profesor Asistente, Universidad
de Chile.
Editor Asociado Claudio Pérez O. Médico. Residente de Medicina Interna. Universidad de Santiago.
Hospital San José

Comité Editor

María Paz Bertoglia Kinesióloga, Magíster en Epidemiología. Magíster en Bioestadística. Estudiante de docto-
rado en Salud Pública. Escuela de Salud Pública. Universidad de Chile
Sebastián Godoy Rivas Sociólogo. Profesional Departamento de Salud Pública y Planificación Sanitaria, SEREMI
de Salud Valparaíso.
Fabiola Jaramillo Castell Médico Psiquiatra, Magister de Salud Pública y Gestión sanitaria Universidad de Granada
Cleofe Molina Alvarez Médico-Cirujano, Universidad de Chile, Especialista en Pediatría, especialista en Gerencia
para el Desarrollo, Flacso-Chile. Escuela de Medicina. Universidad de Santiago de Chile.
Sebastián Moller Sociólogo. Doctorante en Ciencias Políticas y Sociales, Universidad católica de Lovaina,
Lovaina la Nueva, Bélgica
Carlos Montoya-Aguilar Médico pediatra. Profesor Titular de Salud Pública, Universidad de Chile.
Iván Serra Canales Médico Cirujano. Epidemiólogo. Profesor Titular de Salud Pública, Universidad de Chile.
Jaime Sepúlveda Salinas Médico Pediatra, egresado Magister Sociología, Diplomado en Salud Ocupacional y en Gestión
en Salud. Dpto de Salud Pública, Consejo Regional Santiago. Colegio Médico de Chile
Ruth Urrutia Doctora en Ciencias de la Educación mención Educación Intercultural, Universidad de
Santiago. Magister en Gerencia y Políticas Públicas, Universidad Adolfo Ibáñez. Profesora
de Filosofía, Universidad de Concepción.
Mirtha Parada Doctora en Ciencias Farmacéuticas, Universidad de Chile. Química Farmacéutica, repre-
sentante Colegio de Químicos Farmacéuticos y Bioquímicos de Chile AG.
René Miranda Químico Farmacéutico, representante Colegio de Químicos Farmacéuticos y Bioquímicos
de Chile AG.
Sebastián Villarroel González Médico Salubrista. Servicio de Salud del Reloncaví

Editor adjunto temático

Nelson Arellano-Escudero Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC):


Instituto de Humanidades, NIDAS/DETLA.

Secretaría: Bibliotecaria Jocelyn Novoa J.


[email protected]

Fotografía de portada Patricia García, ilustración de portada del libro Situaciones de Calle, editado por
Fundación Gente de la Calle en 2019
Fotografías de interior Diego Silva Flores. Periodista en práctica Fundación Gente de la Calle
Sebastián Godoy Rivas. Editor CMS

Cuadernos Médico Sociales, revista de salud pública del Colegio Médico de Chile. Fundada en el año 1959.
Publicación trimestral.
Cuadernos Médico Sociales
2020; Vol 60, Nº2

Esmeralda 678, Santiago de Chile.

Producción
Palco Comunicaciones
[email protected]

Impresión
Andros Impresores

Las opiniones expresadas en los artículos son de responsabilidad de los autores.


ISSN 0716-1336
Cuadernos Médico Sociales
2020; Vol 60. Nº2
Acceso al texto completo en el sitio: http://cms.colegiomedico.cl

ÍNDICE
ESPACIO EDITORIAL

Presentación del editor invitado 5


Nelson Arellano-Escudero

ARTÍCULOS ORIGINALES
TEMA ESPECIAL: SALUD EN PERSONAS EN SITUACIÓN DE CALLE

Pacientes en situación de calle hospitalizados, un nuevo desafío para la política pública: 9


Aportes desde trabajo social.
Paulina Valdés Cisterna

Tiempos Críticos. Análisis de la relación entre violencia y personas en situación 23


de calle en contextos de “normalidad” y “excepción”
Gabriela Rubilar, Camila Santibáñez, Verónica Echeverría

Cambio climático: un fenómeno alimentado por la desigualdad 39


Claudia Donoso

Significados que una persona en situación de calle atribuye a sus elecciones 49


ocupacionales en base a su experiencia en un Programa Calle
Francisca Galdames, Noemí Henríquez, Marjorie Leiva, Constanza Toro, Pablo Olivares

Normatividad, normalización e inmunización. Perspectivas en torno 59


al “enfermo/a” en situación de calle.
Carolina Llanos

Estado de excepción y fuerza de ley: La vida social de los cuerpos muertos de Personas en 69
Situación de Calle (2008-2018)
Nelson Arellamo-Escudero

Muerte en situación de calle. Un ensayo sobre personas, pandemia y (des)protección 79


Leonardo Piña Cabrera

DOSSIER PANDEMIA JUNIO 2020

Presentación 95
Yuri Carvajal

La Pandemia por Covid2-2019 97


Carlos Montoya-Aguilar

Un actor-una red: un actante. A propósito de la reflexión de Carlos Montoya… 101


Fabiola Jaramillo, Esteban Figueroa
Reflexiones acerca del artículo de Dr. Carlos Montoya acerca del COVID2-2019 105
Jaime Sepúlveda

La medicina, los Cuerpos de los Seres Humanos y el Coronavirus: un ensayo para pensar las 109
implicancias éticas, políticas y económicas de una pandemia y futuro de los servicios sanitarios
Reinaldo Bustos Domínguez

Aplanar la curva... de los papers. Articulismo científico y extravíos 129


del conocimiento en situación de crisis.
Nelson Arellano-Escudero

ENTREVISTAS

Conversatorio con Marie Andy Sanozier. Asesora legal laboral para inmigrantes Haitianos 133
Fabiola Jaramillo
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 5-7 PRESENTACIÓN
Salud en personas en situación de calle

Presentación del Editor invitado


Dr. Nelson Arellano Escudero1

E n el año 2014 Fundación Gente de la


Calle realizó un llamado público a con-
cursar por un millón de pesos presen-
tando una tesis de cualquier tipo, de cualquier
disciplina o profesión. El resultado, devastador,
Este optimismo necesario, no obstante, no pue-
de soslayar los crudos eventos que desde 2019 se
han venido presentando en Chile como parte del
escenario global. A ojos del siglo XX, el prome-
tedor siglo XXI ha resultado más brutal y sufrido
constató que nadie se presentó al concurso. de lo que se debía hacer. El futuro esplendor con-
Con esa experiencia a cuestas en 2016 se inició tinúa siendo una utopía y las noticias del porvenir
un proceso de convocatoria a investigadores e requieren un estudio detenido y detallado dadas
investigadoras de todas las profesiones y disci- las máximas complejidades a las que hemos arri-
plinas, intentando al mismo tiempo que cono- bado, en términos estructurales como sociedad,
cer la situación de la investigación, promoverla. pero también en la dimensión personal de la mi-
Como resultado de ello en 2019 fue publicado croescala, donde la idea de individuo occidental
Situaciones de Calle. pareciera gobernarlo todo, además de toda la tra-
Es en esta trayectoria que surgió la iniciati- ma institucional en que se articulan las agencias de
va de elaborar un número especial de Salud y las entidades humanas y no humanas.
Personas en Situación de Calle para Cuadernos En el dossier de Cuadernos Médico Sociales
Médico Sociales en este año 2020. Ya en pleno siglo se han reunido las contribuciones de articulistas
XXI los antiguos dramas del siglo XIX siguen que respondieron al llamado a publicar. Al igual
aún muy presentes. Pero cuando empezamos que sucedió con Situaciones de calle, la respuesta
con ello en Junio de 2019 no estaban en el hori- ha sido exclusivamente femenina. Esto no debe
zonte de lo previsible ni la revuelta y el tumulto considerarse un dato espúreo o circunstancial
de Octubre ni que las noticias alarmantes de una pues está directamente asociado con la fenome-
epidemia en China pudieran alcanzar a la pobla- nología que señala Elena de la Aldea en Los cui-
ción en Chile hacia Marzo de 2020. Todo esto ha dados en tiempos de descuido y que constituye toda
producido importantes cambios no solo en los una interpelación a las lógicas patriarcales que
artículos, sino que también en el número com- gobiernan las instituciones.
pleto que aquí se presenta. En el plano profesional el llamado fue res-
Con todo, y a pesar de la larga data del fenó- pondido desde el Trabajo Social, la Terapia
meno, hay indicios que apuntan al agravamiento Ocupacional, la Odontología y la Filosofía, aun-
de la situación en el futuro cercano, de ahí la ur- que, como se verá las aproximaciones tienen un
gencia permanente de insistir en que la calle no interesante e inspirador talante interdisciplinario.
es un lugar para vivir y que tanto profesionales Para situar este número de CMS, tomaremos
como el mundo académico debemos realizar un como referencia en estudios sociales acerca de
aporte contundente para concentrar ideas, es- Personas en Situación de Calle importantes con-
fuerzos, recursos, energías, herramientas alinea- tribuciones que emergieron en Santiago de Chile
das en propuestas que materialicen lo que podría en la década pasada. Se trata de la compilación de
ser el fin de una era. Francisca Márquez y Patricio Toledo Vagabundos y

1 Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC)

5
Andantes. Etnografías en Santiago, Valparaíso y Temuco, se anudan los elementos ambientales con el
y del Número 75 de la Revista de Trabajo Social de la bienestar de una población, entre otras muchas
Pontificia Universidad Católica de Chile, editada reflexiones posibles.
por Margarita Quezada. Luego, Francisca Galdames, Noemí Herníquez,
Estos dos compendios representan a cabalidad Marjorie Leiva, Constanza Toro y Pablo Olivares
los modos de orbitar que las ciencias sociales han abordan desde las preguntas de la Terapia
generado para estudiar fenómenos sociales y que Ocupacional un caso de estudio gracias al cual
bien los explica Peter Burke desde la Historia podemos conocer algunos de los significados que
Social: se trata de la dicotomía de las narrativas una persona en situación de calle elabora en torno
de lo estructural versus la de los acontecimientos. al complejo tema de la ocupación. Este trabajo
Constatamos así que el tratamiento al fenómeno destaca la complejidad de las trayectorias vitales y
de la vida humana, cuyos cuerpos vivos han sido realza las capacidades existentes en la subjetividad
expulsados del ámbito privado y completamente de personas que, no obstante la violencia a la que
entregados al campo de lo público, transita en una se ven sometidas, articulan elementos que no solo
de las tantas dicotomías que no hacen sino desen- implican un potencial de recuperación sino todo
samblar un actor-red que por la fragmentación de un proyecto vital con expectativas de desarrollo
su capacidad de agencia genera consecuencias que que requieren condiciones afectivas capaces de
todavía ni siquiera somos capaces de dimensionar impulsar oportunidades anteriormente negadas.
ni cuantitativa ni cualitativamente. Debe ser dicho El dossier se cierra con dos notas de investiga-
que en Chile ninguna estadística es confiable ni ción que, desde las Humanidades complementan
ningún relato es comprehensivo, hasta ahora. las aproximaciones anteriores desde las Ciencias
En este compendio presentamos 4 artículos y Sociales, y una nota de la contingencia aporta-
2 notas de investigación que profundizan desde da gentilmente por Leonardo Piña.. Los tópicos
distintos ángulos la relación Salud y Personas de inmunización y reproducción son abordados
en Situación de Calle. Paulina Valdés aborda la por Carolina Llanos que problematiza desde
situación de pacientes hospitalizados con un la filosofía, pero con una óptica etnográfica, el
trabajo de campo que desplegó una aproxima- complejo conceptual normatividad-normaliza-
ción cualitativa a partir de la cual fue posible ción-Inmunización. Encontramos aquí elemen-
concluir que resulta necesario implementar dis- tos para el análisis del enfermo en situación de
positivos de cuidados post hospitalarios dadas calle.
las particularidades de la población en situación En penúltimo lugar, la propuesta de aborda-
de calle. je del estudio de la vida social de los cuerpos
En el siguiente artículo, Gabriela Rubilar, muertos de personas en situación de calle. Se
Camila Santibáñez y Verónica Echeverría abor- trata de un proyecto de investigación, a cargo de
dan el caso de una familia en situación de calle y Nelson Arellano, en desarrollo durante 2020 y
realizaron una exploración por la prensa nacio- 2021, cuyo planteamiento revela las dificultades
nal para establecer una relación entre violencia, para establecer criterios de verdad en un regímen
normalidad y estado de excepción, a partir de de veridicción que se esfuerza por desdibujar o
los eventos previos y posteriores al octubre chi- limitar los registros de la trayectoria de los cuer-
leno de 2019 y el estallido social. Este artículo pos de las personas en situación de calle una vez
aporta una mirada necesaria a la violencia es- que han perdido la vida.
tructural y simbólica que se ejerce en la cotidia- No obstante, contando todas estas importan-
neidad de la calle y que en períodos de agitación tes contribuciones, han quedado sin tocar áreas
agudizan sus efectos. significativas, como la salud metal, la vida social
El tercer artículo, de Claudia Donoso, esta- en los centros asistenciales, morbilidad y morta-
blece la indagación necesaria y urgente entre lidad en esta población extremadamente frágil en
los problemas que las poblaciones especialmen- su corporalidad y francamente difusa en su ca-
te vulnerables deben y deberán enfrentar por tegoría social. Entendemos que todo ello y más
efectos del Cambio Climático. Gracias a una es un paso necesario para neutralizar y remontar
síntesis conceptual didáctica la autora nos lle- un desconocimiento que alimenta los prejuicios
va a conectar las dimensiones del Antropoceno y los estigmas no solo a nivel de la vida cotidiana
con los efectos en la vida de las Personas en sino también en el quehacer profesional.
Situación de Calle, lo que se corresponde con Este año 2020, interdicto por el colapso polí-
aquellas miradas de la Salud Pública en donde tico social del Chile de 2019 y el COVID-19, ha

Arellano Escudero N.
6
PRESENTACIÓN
Salud en personas en situación de calle
traído también una brusca reconexión de la agen- • Márquez, Francisca y Toledo, Patricio
da nacional con la Salud Pública, tal vez, dadas (2010) Vagabundos y Andantes. Etnografías
las comparaciones evidentes a nivel mundial para en Santiago, Valparaíso y Temuco, Santiago
todos los Estados (Tian et al., 2020). Aquí desta- de Chile, Universidad Academia de
ca la contribución del Dr. Leonardo Piña Cabrera Humanismo Cristiano.
quien desde la antropología ofrece una descrip- • Martin, Hugo (2020) “Para un prestigio-
ción densa de la afectación que las Personas en so científico argentino, ‘el coronavirus
Situación de Calle han estado viviendo incluso no merece que el planeta esté en un esta-
hasta la muerte en este proceso doloroso de una do de parate total’”, Infobae, sábado 28 de
gestión sanitaria deficiente que ha generado lo marzo de 2020, recuperado de internet
que Lévinas situó como sufrimiento inútil. el 21 de marzo de 2020: https://www.in-
Resulta significativo que, en Chile durante las fobae.com/coronavirus/2020/03/28/
primeras semanas de expansión de una epidemia, para-un-prestigioso-cientifico-argenti-
que no deja de tener tintes polémicos (Martin, no-el-coronavirus-no-merece-que-el-pla-
2020), se haya connotado públicamente que la neta-este-en-un-estado-de-parate-total/
octava persona en morir producto de este virus • Quezada, Margarita (2008) “Fenómenos
y la más joven hasta ese momento haya sido una sociales extremos: Las personas en situa-
persona en situación de calle. ción de calle” [Editorial], Revista de Trabajo
Aún cuando esta sensibilidad puede ser valora- Social [PUC], 75, 5.
ble, esta nueva irrupción del tema en los medios • Huaiyu Tian, Yonghong Liu, Yidan Li,
de comunicación refuerza y sostiene el deber de Chieh-Hsi Wu, Bin Chen, Moritz U. G.
denunciar que los riesgos vitales a los que se ve Kraemer, Bingying Li, Jun Cai, Bo Xu, Qiqi
sometida esta población son permanentes, y debe Yang, Ben Wang, Peng Yang, Yujun Cui,
redoblar el llamado con que nos interpelan or- Yimeng Song, Pai Zheng, Quanyi Wang,
ganizaciones sociales dedicadas a la atención de Ottar N. Bjornstad, Ruifu Yang, Bryan T.
estas personas: la calle no es un lugar para vivir. Grenfell, Oliver G. Pybus, Christopher Dye
(2020) “An investigation of transmission
REFERENCIAS control measures during the first 50 days of
the COVID-19 epidemic in China”, Science,
• Burke, P., & Carazo, J. (1993). La nueva Published Online 31 Mar 2020, DOI:
historia socio-cultural. Historia social, 17, 10.1126/science.abb6105
105-114.
• De la Aldea, Elena (2019) Los cuidados en
tiempos de descuido, Santiago de Chile, LOM
editores.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 5-7


7
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 9-21 ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

Pacientes en situacion de calle hospitalizados, un


nuevo desafío para la política pública:
Aportes desde trabajo social
Paulina Valdés Cisterna1

RESUMEN

E ste artículo se focaliza en la problemática de las personas sin hogar en contextos de pérdida de la
salud, desde la perspectiva de sujetos de derecho. Se caracteriza la situación social de los pacien-
tes en situación de calle hospitalizados en las condiciones de intervención profesional desde la
Unidad de Servicio Social. Se presentan los resultados de investigación social aplicada que se llevó a cabo
durante el período abril del año 2015 a abril del año 2016. La investigación fue realizada en el área de aten-
ción cerrada del Hospital Barros Luco. Concluye con la propuesta de levantar un dispositivo que otorgue a
los usuarios de calle un lugar de atención para cuidados post hospitalarios con impacto en la descongestión
de camas hospitalarias, asegurar atención adecuada de estos pacientes y favorecer su proceso de reinserción
social.

Palabras clave: Personas en Situación de Calle - Hospital Barros Luco - Cuidados posthospitalarios.

1. INTRODUCCIÓN

En la actualidad ya no se habla de “vagabundos” para denominar a las personas que por diversas proble-
máticas sociales y económicas se alojan en la calle, se adoptó el nombre de “personas en situación de calle”
aludiendo a que es una “condición” y que por lo tanto esta puede revertirse, pues es una circunstancia y
no algo estático.
El año 2004 el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de Naciones Unidas (DAES) agrega
la siguiente definición “sin hogar son aquellos, sin refugio, que caen fuera de lo considerado una vivienda.
Tienen pocas posesiones, duermen en las calles, entradas de casas, muelles, o en otro espacio, de manera
relativamente aleatoria” (Ministerio de Desarrolllo Social, 2012).
El año 2011 la Comisión Económica para la Conferencia de Estadísticos Europeos de las Naciones
Unidas, identifica a los sin hogar bajo dos grupos amplios:

- Sin hogar (o techo) primarios. Esta categoría incluye a personas viviendo en las calles, sin refugio que
pueda ser considerado una vivienda.
- Sin hogar secundario. Esta categoría puede incluir personas que no tienen una residencia habitual, que
se mueven frecuentemente entre varios tipos de acomodación (incluyendo refugios e instituciones para
personas sin hogar u otras viviendas) (Ministerio de Desarrolllo Social, 2012).

A nivel nacional, el Hogar de Cristo, es una Fundación que trabaja hace muchos años con esta minoría social y
los define como “aquellas personas que se encuentran en un proceso de exclusión social e indigencia, con caren-
cia de hogar, y ruptura de vínculos con sus familias y con las instituciones sociales”2. Cabe señalar que esta ins-
titución es la que cuenta con la mayor trayectoria y experiencia en la problemática de personas de calle en Chile.

Recibido el 5 de diciembre de 2019. Aceptado el 2 de junio de 2020

1 Trabajadora Social, Magister en Trabajo Social. Correspondencia a: [email protected]


2 Hogar de cristo. 2003. Documento de trabajo. Programa acogida. Santiago. Hogar de cristo. P.2.)

9
Para efectos del censo para personas en situación Al analizar la diferentes definiciones propuestas
de calle realizado el año 2005 en el país el 28 de julio, para personas en situación de calle, vemos como
el Ministerio de Planificación Social (Mideplan), los en todas las acepciones para entender el fenó-
ha definió como: Personas que se hallen pernoctan- meno, se hace referencia no solo a la carencia de
do en lugares públicos o privados, sin contar con una recursos materiales, sino que consideran aspectos
infraestructura tal que pueda ser caracterizada como globales y amplios que vinculan la problemática
vivienda aunque la misma sea precaria. Personas que con la exclusión y la desvinculación social de este
por carecer de alojamiento fijo, regular y adecuado grupo, al considerar el quebrantamiento de los la-
para pasar la noche, encuentran residencia nocturna, zos de estas personas con sus familias, los grupos
pagando o no por este servicio, en alojamientos diri- y la sociedad en general.
gidos por entidades públicas, privadas o particulares
y que brindan albergue temporal, encontrándose en CAUSAS DE LA SITUACIÓN CALLE
esta categoría las personas usuarias de hospederías
solidarias u hospederías comerciales. Por último, De acuerdo a lo señalado por el Ministerio
personas que, por encontrarse sin hogar o residen- de Desarrollo Social se han logrado identificar
cia, y sin apoyo de familiares u otros significativos, las causas5 que originan la situación de calle, re-
dependen de programas sociales que ofrecen resi- conociéndose dos factores principales. (Min.
dencia permanente o por períodos importantes, con Desarrollo Social, 2014).
apoyo biopsicosocial3. En esta categoría se encuentra Causas Estructurales: Se refieren a elementos
las personas en residencias solidarias, beneficiarios del contexto país que propician o no individuos
de alojamiento temporal como arriendo de pieza y con más carencia o vulnerabilidades que pudiesen
los niños y niñas con trayectoria en situación de calle finalizar en situación de calle. Dice relación, en
atendidos con financiamiento de Sename en COD, gran medida, a la oportunidad que tenga la pobla-
CERECO Y CDT. ción a acceder a los servicios básicos, a las opor-
La definición nacional actual planteada por el tunidades que estos tengan, como por ejemplo
Ministerio de Desarrollo Social plantea la siguien- la situación económica nacional, la estructura del
te definición: “Personas y/o familias, que carecen mercado, de la vivienda y del trabajo, las caracte-
de residencia fija y que pernoctan en lugares, pú- rísticas de la legislación e institucionalidad social,
blicos o privados, que no tienen las característi- y de las políticas de reinserción de los egresados
cas básicas de una vivienda, aunque cumplan esa de instituciones como hogares de protección,
función (no incluye campamentos). Asimismo, hospitales psiquiátricos y centros penitenciarios,
aquellas personas que de conformidad con una entre otras.
reconocida trayectoria de situación de calle, según Causas Biográficas: Se refiere a la historia
determine el ejecutor del programa eje, reciben personal de cada sujeto, por ejemplo los proble-
alojamiento temporal o por períodos significa- mas familiares, los antecedentes de salud, la inser-
tivos, provisto por instituciones que les brindan ción al mercado laboral, a adicción a las drogas
apoyo bio-psicosocial”. o el alcohol, todas situaciones que pueden o no
En el caso norteamericano se define a la per- condicionar la situación de calle, pero vinculadas
sona sin hogar (Homeless) como una persona a la biografía de cada persona.
que carece de una residencia permanente, ya sea En los catastros aplicados en Chile, se logró es-
que vive en calle, en un refugio o albergue, o en tablecer que en la mayoría de los casos presentan
espacios abandonados o vehículo (Irrarazabal, historias de vida caracterizadas por la pobreza y
2008.). vulnerabilidad desde la edad temprana. Alrededor
De igual modo, el observatorio europeo de los de un 83% de las personas en situación de calle ha
sin techo, define a las personas en situación de experimentado “sucesos vitales estresantes” en su
calle como “todas aquellas que no pueden con- infancia y el 90% durante su vida adulta. Dentro
servar o acceder a un alojamiento adecuado, per- de las causas biográficas las más comunes son:
manente y que proporcione un marco estable de - Ruptura de los vínculos familiares y perso-
convivencia”4. (Capellini et al., 2012). nales. Se trata de personas que no tienen una

3 Ministerio de Planificación. Gobierno de Chile. 2005. Habitando la calle. Catastro Nacional de personas en situación de calle. Santiago.
P11.
4 Citado por Capellini, Cohen, Wolochin y Escobar, de Centro de documentación en políticas sociales: Los que duermen en la calle.
Un abordaje de la indigencia extrema e la cuidad de Buenos Aires. Documento 19 Buenos Aires
5 Política Nacional de Calle: una estrategia de inclusión para las personas en situacion de calle, Ministerio de Desarrollo Social 2014.

Valdés Cisterna P.
10
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
relación habitual o no mantienen ya ningún con- se caracteriza por menor capital humano y social.
tacto con su familia directa e indirecta. Entre Su participación social se limita a la asistencia de
las causas que producen el distanciamiento iglesias o templos, para la satisfacción de necesi-
se encuentran el fallecimiento de uno o varios dades básicas y el acceso a medios de comunica-
miembros, un problema familiar irreconciliable, ción, pese a cercanía al catolicismo, presenta más
consecuencia de una enfermedad o trastorno fí- grandes problemas de asociación y vinculación
sico o mental, o la distancia física que finalmente con sus pares o amigos, llamado también como
termina con los vínculos, otro de los principales “enclaustramiento individual”. Se encuentran ex-
factores son las adicciones. cluidas en el ejercicio de sus derechos, general-
- Ruptura de los vínculos laborales. Se trata de mente no recurren a los sistemas de seguridad
personas que no tienen un empleo o no tienen un social disponibles.
empleo fijo que les proporcione ingresos estables.
- Ruptura de los vínculos sociales. Muchas de Personas en Autosuficiencia: Estas perso-
las personas en situación de calle pierden los lazos nas presentan mayores niveles de autosuficiencia,
con sus amigos o pueden tener dificultades insti- muchas veces se encuentran categorizados como
tucionales o con la justicia. crónicos o refractarios por su resistencia a las in-
Se ha demostrado que cuando se unen ambas tervenciones sociales, sin embargo, estas personas
causas en una misma persona (biográficas más no requieren de la beneficencia para sobrevivir,
causas estructurales), aumentan considerable- tienen manejo y conocimiento de su cultura, ha-
mente las posibilidades de iniciar el trayecto de la bitualmente con su trabajo cubren precariamen-
condición de calle. te sus propias necesidades. Cuentan con mayor
capital material, poseen medios materiales como
TIPOLOGÍAS DE LOS “SIN HOGAR” carretones, bicicletas u otros o cuentan con traba-
jos informales e ilegal, que si bien no les reportan
Con relación a la capacidad de autosuficien- elevados ingresos, les permiten invertir en merca-
cia y el deterioro psicosocial, Nicolás Rojas derías para comercializarlas de manera ambulante,
Pedemonte6, expone tres tipologías de personas sus actividades recurrentes son comercio ambu-
en situación de calle, (en base a un análisis esta- lante y cuidado de autos, incluso algunos mantie-
dístico7 multidimensional y un modelo de vul- nen niveles de ingresos por sobre la línea de la
nerabilidad AVEO), las que a continuación se indigencia y de pobreza, por lo que otros factores
presentan: podrían explicar la permanencia en calle.
Estas personas no son las de mayor edad en su
Personas en Asistencia: Son personas con al- grupo, no obstante, presentan los mayores niveles
tos niveles de deterioro psicosocial, (enfermeda- de consumo de drogas y alcohol. Generalmente
des de salud mental y física) son personas con es- no presentan discapacidades físicas. Aunque no
trategias de supervivencia menos autosuficientes, evidencian mayores problemas de salud mental,
presentan una tendencia a no sobrellevar la condi- evidencian un profundo deterioro de su autoesti-
ción de calle por sí mismas. Con baja red de apoyo ma y desesperanza aprendida, sin mayor proyec-
familiar y social. Mantienen los más bajos niveles ción hacia el futuro. En cuanto a capital social,
de capital material. Por lo general se encuentran son las menos desvinculadas a la familia, se vin-
excluidas del mercado laboral, del crédito formal culan con otros, amigos o familiares, los cuales
e informal, la mayoría de estos casos viviría de la les reportan cierta red de apoyo y compañía. Son
beneficencia. Habitualmente se dedican a la reco- reacios a solicitar ayuda asistencial, se caracterizan
lección de desechos y a la mendicidad. Destacan por alojar en barrios con alta conectividad, por
en este grupo las mayores trayectorias en situa- lo que no están aisladas territorialmente. Sin bien
ción de calle. Su cuerpo habitualmente se eviden- presentan una amplia trayectoria en calle, estas
cia deteriorado, con problemas de discapacidad muchas veces son intermitentes. Muchos presen-
física y psíquica. Se encuentran muy expuestos tan disconformidad con continuar en condición
a todo tipo de maltratos. En general este grupo de calle y con la vida que llevan.

6 Rojas N. Revista de Trabajo Social PUC. Tipologías de personas en situacion de calle.


7 Investigación estadística, realizada por la unidad de estudios de la Fundación Hogar de Cristo, año 2007, aplicado personas in-
corporadas al proyecto Promueve. Cuyos objetivos fueron 1.- identificar los recursos y estrategias de supervievencia de las perso-
nas en situacion de calle estudiadas, 2.- distinguir, entre las personas en situacion de calle, sus principales tipologías subyacentes,
3.- dilucidar posibles líneas de intervención.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 9-21


11
Personas en Emergencia: Son personas con a este grupo en la opinión pública. Problemática
incipientes trayectorias de calle, con fracturas re- que anterior esa iniciativa, siempre habían sido
cientes de sus redes primarias, son los que más re- abordadas precariamente por ONG, municipali-
curren a las redes de seguridad social, sin embar- dad o particulares, destacando la labor visionaria
go, experimentan en esta emergente condición, del Hogar de Cristo.
grandes necesidades producto de la incipiente El Primer Catastro Nacional de Personas en
crisis que impulso esta condición. Se encuentran Situación de Calle en nuestro país tuvo lugar la
evidenciando recién las inclemencias de esta nue- noche del 28 de julio del año 2005, en 80 comunas
va condición, siendo víctima de los procesos de del país, con más de 40 mil habitantes, alcanzado
exclusión social, por lo que tienen la necesidad gracias al trabajo de cerca de cinco mil volunta-
de buscar resguardo y protección en un escena- rios. Se trató de un hito importante debido a la
rio desconocido, pues no manejan los códigos y amplia convocatoria de organizaciones y la amplia
dinámicas de la calle, encontrándose en un esta- cobertura del proceso. (Ministerio de Desarrolllo
do de profunda indefensión, en este escenario la Social, 2012).
principal red son las hospederías. Su capital mate- El primer censo indicó que se trataba de 7.254
rial consiste principalmente en un poco de dinero, personas, las que se encontraban en situación de
proveniente de su trabajo o gestión de préstamos calle, de ese total un 4,7% vivía en la región me-
que solicitan en su entorno. tropolitana, se constata que el 85% se trata hom-
La mayoría procura mantenerse trabajando, ge- bres y que el 78% tiene 30 y mas, con una edad
neralmente en trabajos menos precarios a la situa- promedio de 47 años. En relación a la situación
ción de calle estrictamente. Además cuentan con educacional, más de 12% no sabe leer ni escribir
un capital educacional mayor que en los tipos an- y un 40% no terminó la enseñanza básica.
teriores, lo que incluso les puede significar discri- Según lo señalado por Andrés Jouannet, de la
minación por parte de sus pares. Habitualmente Pontificia Universidad Católica, los resultados del
mantienen buena condición física y estado higié- primer catastro indican que las PSC en Chile, se
nico, con consumo inicial de abuso de drogas y al- trata de un grupo minoritario y que por tanto las
cohol, sin embrago muchos presentan patologías políticas dirigidas a este grupo deben ser a escala
psiquiátricas identificadas antes de encontrarse en menor en términos presupuestarios, por otro lado
situación de calle. el catastro demuestra una realidad compleja y va-
Ellos acceden a los medios de comunicación, riada para este grupo.
ejercen sus derechos y cuentan con amigos. Su El Segundo Catastro Nacional de Personas en
capital espacio-temporal es muy reducido, a ve- Situación de Calle tuvo lugar en 161 de las 346
ces incluso desconocen la cuidad donde habitan. comunas del país, se inserta dentro de un con-
Habitualmente estas personas son las que presen- junto de acciones que buscan hacer de nuestro
tan mejor indicador de capital humano, con más país un lugar en el que la participación, el pleno
alto autoestima, satisfacción vital y optimismo ejercicio de ciudadanía y la inclusión de todos y
frente al futuro y conciencia de querer salir de la todas sean posibles. Esto supone la generación de
condición de calle. nuevas oportunidades y seguridades para los ex-
cluidos y vulnerables, entre los cuales se cuentan
CATASTROS DE PERSONAS EN las personas en situación de calle. (Ministerio de
SITUACIÓN DE CALLE (PSC) Desarrolllo Social, 2012).
Las instituciones que trabajaron para llevar a
Durante el Gobierno del presidente Ricardo cabo esta iniciativa fueron organizaciones que se
Lagos se evidenció la primera voluntad política dedican históricamente, a atender a las personas
del parte del Estado de querer conocer la reali- en situación de calle: Hogar de Cristo; Fundación
dad de las personas en situación de calle y que- América Solidaria; Fundación para la Superación
rer avanzar en acciones concretas para abordar de la Pobreza; Red Calle; Iglesia Anglicana de
la problemática, dejando en evidencia lo ausente Chile; Vicaría de Pastoral Social; Caritas Chile;
que se encontraba este grupo no visualizado hasta Comunidad de Organizaciones Solidarias;
entonces. Fundación Desafío; además del Instituto Nacional
La aplicación del primer censo configura un de la Juventud y Servicio Nacional de Menores.
evento que marca un hito histórico hacia una Según los datos aportados por el segundo
política dirigida hacia estas personas, pues pone Censo8 aplicado en Chile entre los días 15 y 21 de
8 Ministerio de Desarrollo Social, Subsecretaria de Evaluación Social, Segundo Catastro de Personas en Situación de calle

Valdés Cisterna P.
12
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
agosto del año 2011, sabemos que existen 12.255 ambulante, servicios de aseo industrial o vía pú-
personas sin hogar a lo largo del país, de los cuales blica, cuidado y estacionado de autos, cartoneo y
725 son niñosy un 93% (10.781) nació en Chile. recolección, trabajos esporádicos, carga y descar-
“La distribución de las personas en situación de ga, trabajos agrícolas y construcción.
calle a nivel nacional es similar a la distribución En esta materia de hábitos de higiene y aseo
de la población general, concentrándose un 47% personal, el 42% de las personas en situación de
(5.729) del total en la Región Metropolitana. Pese calle declara ducharse en las hospederías, un 14%
a esto, la densidad de la población en situación de lo hace en la calle o vía pública y el 6% en resi-
calle presenta diferencias relevantes a lo largo del dencias. Un 10% de las personas se ducha en los
país, lo que da cuenta de realidades territoriales de baños públicos o duchas pagadas de un mall, ter-
diversa complejidad” (Ministerio de Desarrolllo minal o bomba de bencina. Adicionalmente para
Social, 2012)9. hacer sus necesidades fisiológicas un 36% declaró
De acuerdo a este censo el 84% corresponde acudir a las hospederías.
a hombres y un 16% a mujeres, de los cuales el Para efectos de cambiarse de ropa el 40% de las
59% (6.842) se declara soltero, un 12% declara es- personas encuestadas se viste o cambia de ropa
tar casado (1.455) y un 14% (1.647) declara estar en hospederías. Respecto al lavado de su ropa, un
separado o divorciado. 33% señaló hacerlo en las hospederías o alber-
En cuanto al promedio de años viviendo en gues, el 19% indicó no lavarla y el 13% hacerlo en
situación de calle, la mayoría se estima en cinco la vía pública.
años. El 28,5% (3.238) se encuentra en situa- Cuando se les consultó en relación a las alterna-
ción de calle hace más de un año, pero un 37,9% tivas viables para poder dejar la situación de calle,
(4.311) lleva cinco años o más viviendo en esta un 44% sostiene que es imprescindible contar con
situación. A su vez, las personas que llevan me- una fuente laboral o al menos conseguir un mejor
nos de un año viviendo en situación de calle se trabajo que el actual, un 8% afirma que el tener
distribuyen de manera homogénea entre los cen- una casa y un 8% declara necesitar sentirse capaz
tros techados y la calle. No obstante, conforme de salir adelante.
aumenta el tiempo que las personas han estado En cuanto al lugar donde les gustaría vivir, un
en situación de calle, disminuye la proporción de 57% declara en mi propia casa, seguido de un
personas que pernocta en una hospedería, centro 14,3% que afirma que en una casa arrendada.
techado o albergue, aumentando el porcentaje Asimismo, una de cada diez personas señala que
que duerme a la intemperie. le gustaría seguir viviendo en situación de calle.
Entre los motivos que los involucrados conside- De acuerdo a lo investigado las diferencias entre
ran que condicionaron esta situación, se encuen- el primer y el segundo catastro, es que este último
tran que el 36,6% presenta problemas familiares, consideró una mayor cobertura geográfica, ade-
el 15,5 lo asocia a problemas de alcoholismo, un más de un mayor tiempo de aplicación y, en el
13% a problemas económicos, un 12,8% a otro caso de los niños y niñas, en esta oportunidad se
motivo, un 8,9 a dependencia de sustancia ilícitas, aplicó una metodología especial, patrocinada por
4,6 a problemas de salud y un 1,8 a problemas con expertos en la materia.
la justicia. Dentro de los principales logros de esta iniciati-
La mayoría de esta población pernocta en dis- va, se encuentran el consolidar el interés político y
tintos sitios de la vía pública y lugares precarios publico por estudiar en esta problemática, la cual
(56,2%) y un 43% se guarece en albergues de la hoy se entiende como un proceso, es decir como
red pública y privada, es decir bajo techo. el resultado de una serie de disfunciones sociales,
En relación a la autoevaluación de su felicidad o que generalmente se inician a muy temprana edad,
calidad de vida, Adicionalmente, Un 25% de ellos donde niños y jóvenes experimentan experien-
se declaró bastante o muy feliz, en oposición a un cias de maltrato, pobreza y abusos de todo tipo.
12%, que sostuvo que era muy infeliz o infeliz. Adicionalmente alcanzar una mayor rigurosidad
En cuanto alguna de las principales estrategias en la metodología en la aplicación de las encuestas,
de subsistencia. El 68% declaró desarrollar algún así como en la interpretación de los datos, generó
trabajo informal que le permitía percibir ingresos, resultados con mayor confiabilidad, que hoy son
lo que equivale a que 7.765 personas asumen al- fundamentales para confeccionar un diagnóstico
guna actividad laboral. Entre las principales ac- veraz de la situación de las personas en situación
tividades que estos realizan se encuentran, venta de calle, que permita impulsar políticas públicas
9 En Chile Todos Contamos Ministerio de Desarrollo Social, 2012. Pag 47.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 9-21


13
tendientes a superar y mejorar la calidad de vida acuerdo, para informar a la Presidenta Bachelet
de estas personas. sobre la urgencia de contar con dispositivos espe-
Como señala agrega Sebastián Zulueta (2008), cializados de salud para personas en situación de
a partir de los datos estadísticos aportados por el calle, particularmente una casa de cuidados post
segundo catastro de calle, se ha logrado levantar hospitalarios y otro para personas con patología
el debate respecto la situación de estas personas. dual.
“las personas en situación de calle, no han perdi- Con el objetivo de facilitar la gestión de ambas
do su condición de ciudadanos, por lo tanto se les iniciativas, la comisión solicito, hacer llegar la ma-
debiese respetar también sus derechos y deberes yor información disponible sobre datos o cifras
cívicos”. “El Pueblo de calle, ha sido histórica- en relación a la problemática, especialmente en
mente invisibilizado en nuestro país, el que no ha- el área de salud, lo anterior para fundamentar la
biendo tomado conciencia de la realidad que este confección de ambos proyectos. De esta perspec-
pueblo vive, ni de las causas que lo llevan a ser tiva, el presente trabajo de investigación desarro-
parte de esta realidad. Se le ha negado su ciuda- llado, se constituyó en un aporte para sistematiza-
danía y se les ha privado de sus derechos.” Siendo ción de información respecto de la problemática.
sujetos de incipientes programas que apuntan
principalmente hacia el asistencialismo. 2. HOSPITAL BARROS LUCO Y LOS
Con fecha 21 de septiembre del 2015, la sus- PACIENTES EN CONDICIÓN DE
crita fue invitada por la Fundación Gente de la CALLE
Calle a una reunión con el Ministro de Desarrollo
Social, Marcos Barraza y el Diputado Daniel Melo El Complejo Asistencial Barros Luco fue crea-
Contreras. La intención de dicha reunión tuvo dos do a través de la Junta de Beneficencia en 1899,
ejes centrales, por un lado “presentar al Ministro con el apoyo del Presidente Ramón Barros Luco,
un proyecto de Ley tendiente a modificar el actual en donde en el año 1911 se realizó la colocación
régimen de internación administrativa no volunta- de la primera piedra y en el año 1917 comienza
ria de personas que padecen una patología mental con el funcionamiento como Policlínico.
y que representen un riesgo para sí mismas o para Durante el año 1919 fallece el Presidente Ramón
terceras personas, sustituyéndola por un proce- Barros Luco y la Junta de Beneficencia acuerda
dimiento especial en los tribunales de Familia” darle el nombre del presidente al Hospital. “En
(Francisco Lagos, 2015 ). 1926 fallece la Sra. Valdez de Barros Luco, la cual
Un segundo eje, fue la solicitud de crear un dis- deja especificado a la junta de Beneficencia como
positivo que garantice a las personas en situación heredera de sus bienes, con la obligación que es-
de calle, que egresen desde los hospitales, conti- tos fueran puestos a disposición del Hospital y
nuidad de cuidados para casos de mediana y baja que este contara con religiosas católicas. En 1930
complejidad, así como dispositivos que asuman se construye la Comunidad y la Capilla. En 1934
la atención de las patologías duales. Cabe señalar se contratan las religiosas “Siervas del Espíritu
que lo solicitado en la oportunidad al Ministro, se Santo”, religiosas argentinas que revalidaron sus
enmarcó desde una perspectiva de derechos, vul- títulos de enfermeras en la Universidad de Chile.”
neración de estos y seguridad social, énfasis que la (Velásquez, 2008).
Fundación gente de la calle ha intentado relevar “En el año 1947 se anexa el Hospital Trudeau,
en la problemática. destinado a tratamiento de tuberculosis, y poste-
El principal logro alcanzado, fue que el Diputado riormente ambos se fundirán en un solo Hospital
comprometiera el patrocinio de ambas iniciativas con todas las especialidades, destinado a ser el
requeridas, para lo cual se presentó un proyecto hospital base y de mayor complejidad para el mi-
de ley a la Comisión permanente de “Desarrollo llón de habitantes de 11 comunas del área sur de
social, pobreza y planificación” de la Cámara de Santiago”. (San Martin y Espinoza, 2007).
Diputados en búsqueda de modificar la interna- Este Centro de Salud está ubicado en Av. José
ción voluntaria de personas que presentan una Miguel Carrera Nº 3204 en la comuna de San
patología mental que representen un riesgo para Miguel y pertenece al Organismo del Ministerio
sí o terceros, facultando a los tribunales de familia de Salud, el Servicio de Salud es un organismo
para que conozcan esta materia y puedan decretar estatal, y cuenta con una Autonomía Relativa,
ingreso a hogares protegidos cuando se configure esto quiere decir que el Hospital puede tomar de-
el abandono de las mismas. cisiones cuando lo estime conveniente, pero igual
Paralelamente patrocinó un proyecto de debe cumplir con las políticas, normas que son

Valdés Cisterna P.
14
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
generados por el Estado, este organismo es su- visualizar el complejo escenario interventivo con
pervisado por la Secretaría Regional Ministerial de este tipo de pacientes.
Salud (Seremi de Salud). A nivel de diagnóstico preliminar de la situación
El Hospital Barros Luco brinda aten- problema que abordó esta investigación se en-
ción a Pacientes Ambulatorios, Urgencia y cuentran las características propias de la personas
Hospitalizados, este centro de Salud es uno de en situación de calle, cuyas historias de vida en
los más grande del País y cuenta con la mayor su mayoría, se encuentran marcadas por la depen-
cantidad de Especialidades Médicas del Servicio dencias al alcohol, la falta de redes de apoyo y en
Metropolitano Sur. El complejo Asistencial atien- ocasiones la resistencia a la intervención social.11
de los 365 días del año y sus principales pacien- Por otro lado, se deben considerar las necesidades
tes son derivados de Consultorios y Hospitales de la institución hospitalaria, la cual requiere que
que forman parte de la Red Asistencial del Área una vez finalizada la atención de salud, sea el pro-
Sur de Santiago. pio individuo y/o su entorno, quien por sus me-
Durante el período de abril del 2015 a abril dios se proporcione la continuidad de cuidados
2016, ingresaron al Hospital Barros Luco 57 pa- indicados, evitando así los reingresos.
cientes identificados en condición de calle, lo an- Esta situación se complejiza, entre otros fac-
terior tuvo un implicancia de 1700 días promedio tores, porque las personas en situación de calle
de hospitalización, alcanzando un promedio de no cuentan siempre con redes de apoyo familiar o
estadía de 30 días camas por cada uno, días que institucionales que apoyen la gestión post-hospi-
no siempre fueron justificados por tratamientos talaria, por lo cual su estadía se prolonga, aumen-
en curso, sino que se trató de estadías prolonga- tando los costos de la intervención clínica y obs-
das por su condición social, por cuidados post taculizando el uso de las ya insuficientes camas en
hospitalarios, que pudieron haberse desarrollado los hospitales.12
en otras instancias, pero que debido a la carencia Este campo de acción, a veces antagónico, en-
de red de apoyo y dispositivos disponibles, debie- frenta al Trabajador Social y su equipo, a diver-
ron continuar en las dependencias del hospital, sos dilemas éticos, como considerar la posibilidad
haciendo de estos centros su hogar. del egreso de estos pacientes al lugar de origen
A modo de ejemplo, en la situación menciona- (la calle) o la posibilidad de inserción en lugares
da, un día cama intermedio promedio tiene un va- informales donde son recibidos por voluntades
lor mínimo de $48.000 pesos, lo que en dinero la individuales que no cuentan siempre con las con-
atención de estos 57 casos, habría significado una diciones adecuadas.
inversión para Minsal de $81.600.000 millones de Como señala el Gestor Social, Francisco Lagos,
pesos, considerando el costo mínimo de atención, de Fundación Gente de la Calle, “Esto afecta gra-
sin contabilizar los costos asociados como recur- vemente la labor desempeñada por los servicios
sos humanos, exámenes, materiales entre otros. sociales de los hospitales, pues no cuentan con una
En la última década Chile ha logrado avanzar en red expedita para derivaciones, lo que suele generar
materias de sensibilización y discusión pública en salidas informales y de corto plazo, lo que a la larga,
relación a las personas en situación de calle, prin- significa que las personas en situación de calle no
cipalmente producto del levantamiento de censos concluirán sus tratamientos, generando una espiral
a nivel nacional que hoy nos aportan datos esta- de ingresos y salidas del sistema, atochando camas
dísticos respecto a este grupo minoritario, como y horas disponibles”13 en los sistemas de salud, in-
su número total, que “alcanzaría” las 12.25510 per- volucrando no solo pérdidas de recursos humanos
sonas sin hogar a lo largo del país y que nos pro- y financieros a los servicios públicos, sino que se
porcionan una mejor compresión de los factores pone en riesgo la protección y derecho a la salud de
que determinan la condición de calle. estas personas, como legítimos ciudadanos.
Por el contexto de vulnerabilidad social asocia- Por la comunicación que mantenemos con la
do, la mayoría de las personas en situación de ca- red calle, sabemos que se encuentran al tanto de
lle son pesquisadas desde los Servicios Sociales, la problemática de los pacientes con alta de los
en los Hospitales Públicos, donde es posible Hospitales, con requerimientos especiales, pero

10 Censo 2011. Ministerio de Planificación Social.


11 Min. Desarrollo Social, 2014
12 Fundación Gente de la Calle. 2014. https://www.gentedelacalle.cl/
13 Lagos F. 2012. Cooperativa.cl. Columna de opinión: “El Desalojo pendiente”. Recuperado de internet el 4 de junio de 2020:
https://opinion.cooperativa.cl/opinion/sociedad/el-desalojo-pendiente/2012-08-28/201511.html

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 9-21


15
que pese a las buenas voluntades y flexibilidades profesional respecto al trabajo en salud que se lleva
que en ocasiones otorgan para recibir a estos pa- a cabo con estos pacientes, gatillando mi inquietud
cientes en los albergues, no es posible responder por conocer de manera más profunda esta realidad,
de forma adecuada a la demanda tal como se ex- de modo de poder aportar a la discusión y concre-
presa en el siguiente extracto: “Durante 2013, la ción de acciones que mejoren su calidad de vida.
Fundación Gente de la Calle recibió más de 30 so- En este contexto en que confluyen, salud pú-
licitudes de información de apoyo para personas blica y personas en situación de calle, creo que es
hospitalizadas que se encontraban en situación de fundamental lo que los Servicios Sociales puedan
calle y que requerían cuidados o reposo tras su in- informar y compartir experiencias, aprovechando
ternación, a los que no siempre es posible dar una el conocimiento que estos dispositivos han ido
respuesta efectiva, pues la mayoría de las institu- construyendo en este campo de acción.
ciones que otorgan servicios de habitabilidad no Con la información producida y analizada a
cuentan con los requerimientos básicos (humanos partir de este estudio, se intenta contribuir no solo
y materiales) para asegurar la permanencia diaria u a profundizar en materias de salud y personas en
otorgar cuidados especiales”.14 situación de calle, sino que además se busca pro-
En este escenario, los Servicios Sociales del área porcionar un respaldo profesional teórico-prácti-
de salud absorben una vasta información acerca de co, que otorgue sustento a los procesos de sensi-
esta problemática, ya que son estos dispositivos los bilización y negociación a nivel central respecto a
que se encargan de la pesquisa de las personas sin estas materias.
hogar con problemas de salud limitantes y realizan Con todo ello esta aproximación tiene por obje-
las primeras gestiones y articulaciones con el obje- tivo caracterizar la situación biopsicosocial de los
tivo de contribuir a la calidad de vida de esta po- pacientes en situación de calle hospitalizados en
blación en estado de vulnerabilidad y marginalidad. el Complejo Asistencial Barros Luco y conocer
la intervención profesional desde la Unidad de
3. TESTIGO Y TESTIMONIO. NOTAS DE Servicio Social.
CAMPO DESDE EL TRABAJO SOCIAL. La presente investigación se puede definir
como una investigación de carácter exploratoria
Como Trabajadora Social me desempeño hace pues: “el objetivo es examinar un tema o pro-
de trece años en el Complejo Asistencial Barros blema de investigación poco estudiado o que no
Luco, en el área de atención cerrada correspon- ha sido abordado antes” (Hernández, Fernández
diente a pacientes hospitalizados, compartiendo el y Baptista, 1998:58), porque el conocimiento de
rol profesional con la Subjefatura de la Unidad. En la situación de vulnerabilidad social de los pa-
mi desempeño profesional en el área de salud, me cientes de calle en el área de atención cerrada
he percatado de la gran problemática socio sanita- en salud ha tenido escasa atención en la literatu-
ria que se desencadena con los pacientes en situa- ra del campo, en la discusión académica y en la
ción de calle que pierden su estado de salud y como profesional. En este escenario, se abordan aspec-
consecuencia de esto requieren ser hospitalizados tos del fenómeno potencialmente significativos
para tratamiento. He sido testigo de los diversos para el personal de la salud vinculado a las áreas
factores intervinientes en esta problemática, el esta- sociales, que puedan apoyar la comprensión
do de vulnerabilidad de estos pacientes, sus necesi- de este fenómeno y que signifiquen un insumo
dades insatisfechas, sus aspiraciones y las injusticias teórico reflexivo para futuras investigaciones y
sociales a las cuales se ven enfrentados, así como la prácticas profesionales.
falta de herramientas públicas e individuales de las
que disponen para favorecer su proceso de recupe- 4. MÉTODO
ración y revertir su situación de vida, evidenciando
que, en la mayoría de los casos, la hospitalización El universo de estudio se constituyó con las
no es más que el síntoma de historias de vida mar- personas en situación de calle que fueron hospi-
cadas por la desigualdad social, de la que muchas talizadas en el Hospital Barros Luco entre abril
veces estas personas han sido víctimas desde etapas del año 2015 y abril del año 2016, cifra que al-
muy tempranas de su vida. canzo los 57 casos en total15, siendo los datos
Este escenario, ha sensibilizado mi atención extraídos de una muestra representativa de más

14 Fundación Gente de la Calle. 2014.


15 Cabe señalar que la derivación de los casos a la Unidad de Servicio Social puede realizarse mediante interconsulta derivada
por el equipo clínico y demanda espontánea realizada por el paciente o pesquisa por las Trabajadoras Sociales de la Unidad.

Valdés Cisterna P.
16
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
del 50% (27 de esos casos), que fueron aquellas conciencia, se solicitó autorización a su familiar
personas dispuestas a participar del estudio y la o apoderado responsable y en el caso excepcio-
mitad de los Trabajadoras Sociales que atienden nal de no contar con familiares u apoderados,
la Unidad de Servicio Social, es decir, 10 profe- se extrajeron los datos de los registros docu-
sionales participaron de la muestra, tras cumplir mentales de la unidad y de sala.
requisitos estipulados por la investigación.
La investigación aplicó un método mixto, com- CONSIDERACIONES ÉTICAS
binando procedimientos cuantitativos y cuali-
tativos. En Metodología Cuantitativa, para las Cabe señalar que la presente investigación so-
personas en situación de calle seleccionadas, la cial, no se llevó a cabo hasta contar con las auto-
investigadora aplicó una encuesta semiestructu- rizaciones pertinentes del Complejo Asistencial
rada, con preguntas cerradas, con alternativas de Barros y Servicio de Salud, correspondientes a
respuestas y un ítem de preguntas abiertas. Con la Unidad de Estudios Asistencial, Comité de
este instrumento se pretendió indagar respecto las Ética y el Departamento de Jurídica, según lo
principales características de estos pacientes. establece el protocolo interno de la institución.
En cuanto a la Metodología Cualitativa, para Para efectos de análisis de este estudio, se man-
la muestra de Trabajadoras Sociales seleccio- tuvo confidencialidad de los datos personales
nadas, la investigadora aplicó entrevistas se- de los participantes.
miestructuradas con preguntas abiertas. Con la Durante el proceso de investigación se apli-
técnica de la entrevista, se buscó capturar la caron consentimientos informados cuando co-
percepción que tienen las trabajadoras sociales rrespondía. Para lo cual se contó con el apoyo
respecto la intervención social que se realiza a de un Ministro de Fe que viso este procedi-
nivel hospitalario con los pacientes de calle, sus miento. Además se comprometió el reporte sis-
principales características, necesidades, proble- temático de los consentimientos aplicados, a la
máticas y cuáles son las principales acciones Unidad de Estudios Asistenciales de Complejo
profesionales que utilizan, en este campo espe- Asistencial Barros Luco.
cifico de acción. Admemás, se procuró la utilización de un
En la fase de producción de Información de lenguaje adecuado, comprensible y legible de
Casos fue fundamental las gestiones previas acuerdo a la capacidad de los sujetos, respetan-
realizadas para contar con las autorizaciones do su comprensión de la realidad, lenguaje e in-
jerárquicas de la institución Hospitalaria que tereses. Para reguardar la dignidad y privacidad
respaldaron la aplicación del proceso investiga- del paciente, los instrumentos de recolección
tivo al interior del establecimiento (Unidad de de datos no se aplicaron en sala en horarios
Investigación asistencial, Comité de Ética y de- de visita o actividades de higiene, procurando
partamento de Jurídica). convenir con los involucrados el momento ade-
Durante esta fase se inició un proceso de cuado según su disponibilidad. Finalmente los
sensibilización y difusión de la investigación a datos obtenidos en esta investigación, fueron
todos los integrantes de la Unidad de Servicio entregados a la Dirección del Hospital para su
Social, de modo de establecer las estrategias de conocimiento.
colaboración Profesional y flujos que permitie-
ran el acceso a los pacientes y despertaran el in- 5. RESULTADOS DE LA
terés de la Trabajadoras Sociales por participar INVESTIGACIÓN
del estudio.
Una vez derivados los pacientes con antece- Para facilitar la compresión del contenido se
dentes de situación de calle (por medio de in- presentan las conclusiones según los objetivos
terconsulta, demanda espontanea, o pesquisa de la investigación. Cabe señalar que el punto
en sala), la investigadora tomó contacto direc- 5.1 y 5.2 dan cuenta de resultados de objetivo
to con ellos, para evaluar las posibilidades de N °1 Caracterizar la situación biopsicosocial de
participación en el estudio. En esta etapa fue los pacientes en situación de calle hospitaliza-
fundamental lograr el consentimiento infor- dos en el Complejo Asistencial Barros Luco, y
mado de todos los participantes. En el caso de el punto 5.3 y 5.4 se refieren a resultados de
pacientes orientados este documento fue auto- objetivo N°2 Conocer y visibilizar la interven-
rizado directamente por el paciente y en el caso ción profesional desde la Unidad de Servicio
de pacientes que presentaron compromiso de Social.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 9-21


17
5.1 Condiciones de salud, los aspectos estado de abandono en que se encontraban ante-
personales, socioeconómicos y psicosocia- rior a la hospitalización.
les de los pacientes en situación de calle En cuanto a las patologías de ingreso, es-
hospitalizados tas fueron de diversa etiología, destacando los
Traumatismos encéfalo craneanos (TEC) por caí-
Los pacientes de calle hospitalizados en el hos- das o golpes proporcionados por terceros, fractu-
pital Barros Luco, presentan características simi- ras en extremidades, principalmente por acciden-
lares a los señalados en los dos últimos censos tes de tránsito, en contexto de estado etílico del
de personas de calle, realizados por el Ministerio usuario y daño hepático crónico, enfermedad que
de Planificación Social y posterior Ministerio de es propiciada por el consumo excesivo de alcohol.
Desarrollo Social. Si bien las situaciones señaladas fueron las princi-
La mayoría de ellos se trata de hombres, adultos, pales causas de ingreso, en la mayoría de los casos
con un promedio de edad de 34 años, solteros se conjugan patologías.
(52%), con enseñanza básica incompleta (48%), Pese al deterioro multiorgánico que presentaron
con historias de vida marcadas por la pobreza y los encuestados, llama la atención que finalizados
la marginalidad desde una edad temprana, con un los tratamientos durante la hospitalización, la ma-
tiempo promedio estimado en calle de entre dos yoría recuperaba su nivel de autonomía básica, un
a seis años. Un 25% lleva menos de un año en 56% de ellos, se encontraba autovalente para rea-
calle (experiencia reciente), un 37% lleva entre 1 lizar actividades básicas de la vida, sin embargo
a 5 años, y solo tres casos reportan más de una otros usuarios sufrieron daños irreparables como
década en situación de calle. amputaciones en un 15%, y un 7% de ellos quedó
Lo que mayormente originó la condición de en condición de paciente postrado.
calle, se sustenta en el consumo problemático de Por su favorable evolución, muchos de ellos,
drogas y alcohol, reconociendo un 41% de los el 83%, no requirió del apoyo de ayudas técnicas
casos haber iniciado la condición calle por esta para su desplazamientos, solo siete casos requirie-
razón, seguido o paralelo a conflictos familiares. ron de silla de ruedas y tres de catre clínico entre
En cuanto al lugar de pernocte, un 48% declaro otros insumos clínicos, como un caso con motor
habitar puntos calle, deambulando la mayoría de for- de aspiración por traqueotomías.
ma intermitente en diversos lugares de la cuidad de En este contexto de fragilidad social, los pa-
Santiago, destacando la comuna de San Joaquín con cientes asumen en su mayoría una postura distinta
la mayor cantidad a adherencia a los puntos calle. a la mantenida en calle. Al preguntarles sobre su
En relación a la actividad laboral, la mayoría se deseo de querer cambiar su condición, asumen
desempeña en trabajos marginales, informales y mal abiertamente la necesidad de querer recibir ayuda
remunerados, destacando tres actividades principa- externa, así como la disposición interna de querer
les: Trabajos menores en ferias libres, Comerciantes salir de la condición de calle, pues perciben duran-
ambulantes y Cuidadores de vehículo. te la hospitalización sus propias limitaciones físi-
Tampoco reciben otro tipo de ingresos median- cas y/o psicológicas. Por lo que la mayoría de los
te programas de seguridad social u otros, 20 casos, casos, equivalente al 89% de la muestra (24 casos)
lo que equivale a que un 74%,refirió no percibir manifestó intención de salir de la condición de ca-
ningún tipo de beneficio estatal y los que reciben lle, aspecto muy relevante ya denota la intención
se concentran en el pilar solidario, beneficiados de estos a cambiar su situación, escenario que re-
con pensiones solidarias de invalidez (18%), evi- leva la importancia del rol de las redes de apoyo.
denciando a su vez, una discapacidad previa a la Durante la hospitalización, surgen entonces
hospitalización. nuevas necesidades tanto afectivas como econó-
En los pacientes entrevistados se evidencia un micas. La mayoría luego de un proceso de hospi-
gran deterioro social y orgánico, producto de his- talización requiere realizar un proceso de rehabili-
torias de vida marcadas por la desigualdad, la vida tación de adicciones -reconocida como una de sus
en calle y el poli consumo asociado, siendo el in- principales obstáculos de crecimiento personal-,
greso al hospital el síntoma del menoscabo en su además refieren al ámbito del trabajo como uno
estado de salud, causado por enfermedades cróni- de sus principales objetivos hacia una reinserción
cas o traumáticas. social una vez terminado su proceso de salud en-
La mayoría de los encuestados, es decir, un 30% fermedad, verbalizando intención de querer vo-
ingreso al hospital traído por Sapu o Carabineros, luntariamente ingresar a centros de rehabilitación
encontrado en la vía pública, lo que evidencia el y/o reinsertarse laboralmente.

Valdés Cisterna P.
18
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
Pese a que se evidenció escasez de proyección En este escenario donde confluye situación de
concreta hacia el futuro, la mayoría respondió que calle y discapacidad, el paciente hospitalario que-
su proyecto ideal al salir del Hospital era la re vin- da al margen de los dispositivos de apoyo de la
culación con su familia y reinsertarse laboralmen- red calle, ya que las instituciones de beneficencia
te, manifestando como necesidad sentida, el reci- y/o gubernamentales disponibles, no logran sol-
bir por parte del estado apoyo para una solución ventar la demanda, por las características parti-
habitacional, por medio de subsidio o asignación culares de estos pacientes, ya que se entrecruza
directa para arriendo. no solo la condición de calle, sino que también se
En el caso de los pacientes secuelados, se suma la falta de autonomía con limitaciones leves
evidencia la necesidad imperiosa de contar con a moderadas.
pensiones de invalidez, todas alternativas econó- Sin la ayuda de estas instituciones, que previo
micas, para resolver la necesidad de obtener un al ingreso sostenían su sobrevivencia en calle y la
refugio u hogar de acogida. evidente carencia de red de apoyo familiar, estos
pacientes quedan en estado de absoluto abando-
5.2 Destino de egreso de los pacientes y las no en los hospitales públicos de nuestro país. La
redes de apoyo y programas que se utilizan. mayoría de los casos una vez terminados sus trata-
mientos médicos se configuran para las estadísti-
Se evidencia que estos pacientes no cuentan con cas de salud pública como casos socios sanitarios.
red familiar de apoyo familiar y en muchos casos
esta es inconsistente. Desgastados los vínculos, 5.3 Metodologías de intervención, técnicas
muchas veces por el propio contexto de consumo y acciones profesionales del Servicio Social.
que poseen algunos de estos pacientes, debido a la
desesperanza aprendida. En relación a la metodologías utilizadas por las
Más de la mitad de los entrevistados, 59%, re- Trabajadoras Sociales con usuarios en situación de
portó no contar con red de apoyo familiar pre- calle, destacan la atención en crisis, por lo agudo
sente y un 56 % declara que el único apoyo que de la enfermedad y el alto grado de vulnerabilidad
reciben es de instituciones externas públicas y/o del paciente, así como el modelo asistencial debi-
privadas principalmente de carácter religioso, las do a las múltiples carencia con las que ingresan,
cuales les aportan elementos básicos de sobrevi- que movilizan al Profesional a ejercer acciones
vencia como vestuario y alimentación. básicas como, gestión de redes intra y extra red
El 67% de ellos no contaba con ninguna lugar para obtención de identidad, cedula de identidad
de egreso al alta, que contara con las condiciones y adquisición de vestuario, acciones que parecen
mínimas de habitalidad acorde a su estado de sa- básicas, pero que son parte esencial para iniciar
lud, siendo esta una de las mayores necesidades de un proceso de reinserción trasversal, que les per-
factor de estrés para los pacientes. mita acceder a los beneficios básicos de seguridad
Por lo anterior, el lugar de egreso fue diverso, social disponibles.
siendo la acogida familiar y los centros de reha- En relación a los aspectos facilitadores preva-
bilitación los predominantes. En ambos casos la lece el trabajo interdisciplinario entre los equipos
Intervención de Trabajo Social, fue fundamental clínicos y las unidades de apoyo (Enfermeras,
para concretar dichas posibilidades de reinserción Matronas, Médicos, Psicólogos, Técnicos de en-
social, como uno de los objetivos fundamental del fermería, Trabajadoras Sociales, etc.). Se observa-
Trabajo Social. ron que en equipos donde existía mayor partici-
Especialmente en los casos que perdieron su pación del Trabajador Social prevalecía una mayor
capacidad total o parcial de autonomía, asumen sensibilidad respecto las problemáticas sociales
la necesidad primaria de un lugar adecuado de de estos pacientes dadas las experiencias y acer-
egreso al momento del alta médica, encontrándo- camiento de los a esta realidad, lo que propicia
se conscientes que luego de la hospitalización, la resultados más efectivos y eficientes.
calle no es un lugar apto para su sobrevivencia. La mayor sensibilidad en torno a la problemáti-
Es por esto que durante la hospitalización ca, se ha ido desarrollando en el último tiempo, a
cuando se carece de red familiar, son princi- partir de los censos y noticieros, ha contribuido a
palmente algunos voluntariados internos del la generación de mayor conciencia social en todos
hospital o externos de corte cristiano/evangé- los niveles jerárquicos hospitalarios.
lico, quienes generalmente los visitan y asisten A su vez el mayor interés profesional y levan-
en los hospitales. tamiento de información a niveles centrales,

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 9-21


19
respecto la intervención con personas en condi-
ción de calle, ha facilitado la intervención social
con dichos usuarios.
Fundamental ha sido el apoyo de programas gu-
bernamentales como noche digna e instituciones
no gubernamentales y los voluntariados existentes,
los cuales llevan la temática como bandera de lucha
desde la perspectiva de sujeto de derechos, fomen-
tando la educación de los profesionales vinculantes.
Sin duda, el mejor facilitador, radica en el
interés y motivación que tenga el paciente en
relación a recibir ayuda externa para generar
mejoras en su calidad de vida, así como los pro-
pios recursos humanos con los que este cuenta
y capacidad de autonomía; en este sentido es
fundamental la prevención del deterioro de esta
población.
En relación a los obstaculizadores se identifi-
ca el rechazo del propio paciente a la interven-
ción social por su carencia de conciencia de en-
fermedad y falta de motivación para adherir a
tratamientos. en condiciones de tomar decisiones por sus
Otro obstaculizador, que en la mayoría de los propios medios.
casos se encuentra presente es la falta de red de Otro dilema ético dice relación con la escasez
apoyo familiar, debido principalmente al desgas- de lugares de egreso y la necesidad del sistema
te familiar y desesperanza aprendida frente a la para evacuar pacientes al momento del alta, por lo
posibilidad del cambio del paciente. que muchas veces se opta por egresos a dispositi-
La carencia de una política pública que abor- vos que no siempre cuentan con las condiciones
de la temática de las personas de calle en estado óptimas que requieren estos usuarios para la con-
de enfermedad, tal como se ha señalado ante- tinuidad de su atención.
riormente es evidente que uno de los principales
obstaculizadores a la intervención social. 6. CONCLUSIONES

5.4 Valoración, presencia de dilemas éti- Luego de aplicados los instrumentos de pro-
cos y desafíos que enfrentan los trabajadores ducción de datos y entrevistas con expertos en
Sociales. el área, este estudio concluye la importancia de
levantar un dispositivo que otorgue a los usuarios
Para la Unidad de Servicio Social, el paciente de calle un lugar de atención para cuidados post
de calle, es sujeto de atención prioritario, consi- hospitalarios, para lo cual se hace imprescindi-
derado según la definición del propio MINSAL ble una política pública intersectorial entre dife-
como el usuario de más alto riesgo socio sanitario. rentes actores como MIDESO MINSAL entre
Por lo anterior el espíritu del trabajo que se otros que absorba estas demandas mediante una
realiza a interior de la unidad, apunta a consi- respuesta residencial donde se considere, a dife-
derarlos como sujetos de derechos, cumplien- rencias de los ya existentes, la condición de calle,
do un rol fundamental el Trabajador Social al sumado al factor discapacidad, ya sea esta transi-
interior del equipo, contribuyendo a una mayor toria o permanente.
sensibilización y comprensión social sobre la Esta instancia debiese contar entre otras carac-
problemática. terísticas con el recurso humano capacitado e ins-
Uno de los principales dilemas éticos, es truido en esta problemática, considerado que el
respetar a estos pacientes como sujetos de presencia aquí es fundamental del Trabajo Social
derechos, resguardando su capacidad de auto- por su experiencia en el tema, para paralelamente
determinación y al mismo tiempo no dejar de realizar un trabajo profesional con las familias de
protegerlos, ya que muchos de ellos por su es- estos usuarios, mediante intervenciones efectivas
tado de vulnerabilidad clínica, no se encuentran que faciliten su reubicación familiar y laboral, una

Valdés Cisterna P.
20
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
vez finalizados los tratamientos post hospitala- contamos, segundo Catastro Nacional de
rios, así como la potenciación y fortalecimiento de personas en situación de calle. Ministerio
sus capacidades de gestionar sus propios recursos de desarrollo social.
humanos. • Gobierno de Chile (2005). Habitando la
La creación de un centro de cuidados post hos- calle, primer Catastro Nacional de per-
pitalarios desde este punto de vista contribuiría a sonas en situación de calle. Ministerio de
tres grandes objetivos, la descongestión de camas Planificación Social.
hospitalarias a nivel central, asegurar atención • Hernández, Collao y Lusio. (2006).
adecuada de estos pacientes y lo más relevante fa- “Metodología de la investigación”.
vorecer su proceso de reinserción social. McGraw-Hill. México 4ª Edición.
Cabe destacar que a partir de la socialización de • Hogar de Cristo. (2003). Documento de
los datos del presente estudio, se constituyeron trabajo. Programa acogida. Santiago. Hogar
mesas de trabajo intersectorial, entre la unidad de de Cristo.http://www.hogardecristo.cl/
Servicio Social, la Dirección del Servicio de Salud wpcontent/files_mf/1453483254Memo-
Metropolitano Sur y el Ministerio de Desarrollo ria2014_8MG.pd
Social, en las cuales trabajamos para poder ge- • Lasic S. y Hirsch N. (2005). Revista ¿Qué
nerar un dispositivo de egreso post hospitalario, respuesta se les da a las personas que viven
comprometiéndose colaboración mutua para la en la calle? Argentina. http://trabajoso-
obtención de autorizaciones pertinentes y recur- cial.sociales.uba.ar/wp-content/uploads/
sos financieros y humanos a un mediano o largo sites/13/2016/03/23.pdf
plazo. • Márquez E. y Rojas N. (2006). Reflexiones
acerca de las personas en situación de calle,
7. REFERENCIAS Santiago de Chile. http://www.redcalle.cl/
descripdecla.asp?ImageID=299
• Arellano S. (2012). Presentación resultados • Ministerio de planificación, Gobierno de
segundo Catastro Personas en situación chile. (2002). Síntesis de los principales en-
de calle. Ministerio de desarrollo Social. foques, métodos y estrategias para la supe-
http://www.ministeriodesarrollosocial. ración de la pobreza. Gobierno de chile
gob.cl/plancalle/docs/En_Chile_Todos_ • Programas Calle (2010). Gobierno de Chile.
Contamos.pdf www.chilesolidario.gob.cl./programa calle.
• Barros, de Los Ríos, Torche. (1996). Gobierno de Chile
“Lecturas sobre exclusión Social” Edición • Trabajo con personas en situación de ca-
OIT. lle. (2010). Panorama y propuestas para el
• Capellini, Cohen, Wolochin, Escobar. trabajo con personas en situación de ca-
(2012). Internación de pacientes en situa- lle. http://www.redcalle.cl/descripdecla.
ción de calle: estrategias de intervención asp?ImageID=303
desde el trabajo social. Revistas Margen Nº • Valerio J. (2006). “Las representaciones
67. Buenos aires. Sociales de la calidad de vida en personas
• Castel R. (2004). Las trampas de la exclu- en situación de calle”. Universidad de Chile.
sión. Trabajo y utilidad social. Edición Santiago.
Buenos Aires. • Zulueta, Sebastián (2008) “Políticas públi-
• De los Ríos, D. (1999). Exclusión social y cas y privadas para personas en situación
política social en OIT. Exclusión social en de calle”, Revista Trabajo Social [PUC], 75,
el mercado del trabajo. El caso de Chile. 27-35.
Edición OIT.
• Gobierno de Chile (2012). En Chile todos

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 9-21


21
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 23-37 ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

Tiempos Críticos. Análisis de la relación entre


violencia y personas en situación de calle en
contextos de “normalidad” y “excepción”
Critical times. An analysis of the relation between violence and homeless
people in contexts of “normality” and “exception”
Gabriela Rubilar1
Camila Santibáñez2
Verónica Echeverría 3
RESUMEN

E ste artículo analiza y problematiza las nociones de normalidad y excepción en el caso de las perso-
nas en situación de calle. Se asume la premisa que, en el estado de excepción, la situación de las per-
sonas que viven en la calle se extrema, producto de la violencia y la invisibilidad de su acontecer. Sin
embargo, la excepcionalidad en la normalidad ofrece un espacio privilegiado para observar las distintas for-
mas de violencia a la que estas personas se ven expuestas y los modos como ellas gestionan su cotidianeidad.
A través del caso de estudio de una familia asistida por el programa Vía Solidaria, testimonios y registros de
prensa obtenidos tras el estallido social de octubre de 2019 se describe la violencia en tiempos “normales”.
Los resultados del análisis permiten iluminar y oscurecer algunos de los debates en torno a intervención con
personas en situación de calle, así como las estrategias seguidas por organismos público/privados para la erra-
dicación de esta problemática en el país. El trabajo concluye con algunos desafíos y proyecciones en torno al
tema y la forma como las personas víctimas de esta situación pueden visibilizar sus derechos, en conjunto con
las demandas y exigencias de una ciudanía que aboga por transformaciones y cambios societales.

Palabras clave: Normalidad, emergencia, crisis, personas en situación de calle, derechos.

ABSTRACT

This article analyzes and problematizes the notions of normality and exception in the case of homeless
people. The study rests on the premise that, in a state of exception, the situation of homeless people beco-
mes extremely hard due to the violence around them and their invisible existence. However, exceptionality
in normality supplies a prime location for observing the multiple forms of violence to which these people
are exposed and the ways in which they manage their quotidian life.
The article employs a case study to describe how violence is observed in “normal times” and also con-
siders personal testimonies and press stories collected during the social eruption of October 2019. The
social eruption is defined as a privileged setting to observe exceptionality and its tensions regarding how
control, social cohesion, and people’s experiences with violence are perceived in times of uncertainty. The
results of the analysis enable us to illuminate and darken some of the debates on interventions aimed at
homeless people as well as the strategies adopted in Chile by public and/or private organizations to eradi-
cate this issue. Finally, the article presents some challenges and projections regarding what is to come and

Recibido el 1 de abril de 2020. Aceptado el 2 de junio de 2020

1 Trabajadora Social, académica Departamento Trabajo Social Universidad de Chile, doctora en metodologías de investigación.
Correspondencia a [email protected]
2 Estudiante Trabajo Social Universidad de Chile, integrante Núcleo I+D Innovaciones efectivas en Políticas Públicas.
3 Estudiante Trabajo Social Universidad de Chile, integrante Núcleo I+D Innovaciones efectivas en Políticas Públicas.

23
the way in which people affected by homelessness Uno de los propósitos de este artículo es tensio-
can make their demands and rights visible in con- nar las concepciones y los discursos sobre norma-
nections with the requirements and demands of lidad y excepcionalidad, analizando los medios y
citizens who expect societal changes. mecanismos por los cuales la violencia es ejercida
hacia los más pobres, vulnerando sus derechos
Key Words: Normality, crisis, emergencies, homeless peo- e invisibilizando sus demandas (Bauman, 2002;
ple, rights Wacquant, 2001). Para ello se desarrolla un aná-
lisis basado en un estudio de caso (Stake, 1998)
1. INTRODUCCIÓN sumado la recopilación de testimonios de perso-
nas en situación de calle durante la crisis social
De acuerdo con la información proporciona- de fines de 2019, que entre otras consecuencias
da por el Ministerio de Desarrollo Social 15.163 ha dejado en evidencia mecanismos de exclusión,
personas se encontraban en situación de calle en aporafobia y criminalización de los más pobres.
octubre de 2019. La mayor parte de estas perso- La normalidad en el caso de las personas en si-
nas son hombres que se ubican en centros urba- tuación de calles es muchas veces la excepciona-
nos de las regiones de Valparaíso, Metropolitana lidad vivida en los últimos meses de 2019, donde
y Bio-Bio, un tercio llevan entre 4 y 5 años vi- la incertidumbre, el temor hacia los demás y los
viendo en la calle y sus edades se concentran en enfrentamientos se vuelven habituales. Violencia
torno a los 30 y 50 años (MDS, 2019). Si bien que para quienes viven en la calle es estructural y
hay debate y algunas controversias en torno a las paradójicamente cotidiana.
cifras de personas que actualmente viven en la El estallido social puso de manifiesto el es-
calle4, hay consenso en reconocer que la crisis tado de irritación de las relaciones sociales
social desencadenada en octubre de 2019 afec- (Araujo, 2019), a partir de una sumatoria de
tó particularmente a estas personas, cuyas ruti- tensiones que se fueron acumulando y contri-
nas se vieron alteradas producto de situaciones buyeron a un “malestar” general que ya había
como: estado de excepción, toque de queda, ac- mostrado algunas de sus expresiones a nivel
ciones de control social de manifestaciones y di- político y social.
suasión de marchas, cierre de espacios o lugares
de atención o de asistencia, transformación de 1.1 Violencia, Normalidad y Excepción
sus lugares habituales de pernoctación, violencia
y detenciones, entre otros. Para contextualizar la discusión se expone el
Este artículo indaga en algunos de los efectos vínculo entre dispositivos de control social del
que ha tenido esta crisis social y política en la Estado y su relación con la estructura de la asis-
vida de estas personas, al mismo tiempo que dis- tencia y los derechos, dando cuenta de algunas
cute la forma como se concibe la violencia en los contradicciones o tensiones, en el sentido pro-
espacios urbanos. Se utiliza como premisa que la puesto por Bergalli (1998) y Garland (2015). En
violencia vivida en los días post-estallido, es la la construcción de este apartado se toma como
violencia a la que cotidianamente se enfrentan referente los modelos clásicos de control social
las personas en situación de calle. Una norma- (Merton, 1964), incluyendo las teorías de la ano-
lidad vivida en tiempos de excepción, diremos mia (Durkheim, 1985/1897), teorías de desvia-
para entender la clave de este artículo, donde la ción (Becker, 1971; Varela y Álvarez-Uría, 1989)
relación de los sistemas sociales y las institucio- y los modelos de etiquetamiento (Goffman,
nes, así como con autoridades y los mecanismos 1970; Alvira, 1975), que dan cuenta del proceso
de control social de los más pobres se amplían a de estigmatización de los más pobres (Álvarez-
otros grupos sociales y a los ciudadanos de a pie, Uría, 1979) y particularmente de quienes enfren-
quienes concurren a las salas de espera de cen- tan las peores formas de exclusión.
tros de salud, a las comisarías, a los juzgados con Así mismo se abordan algunas aproximaciones
diversas demandas o requerimientos de atención más contemporáneas en torno al castigo de la po-
producto de lesiones, denuncias y atropellos a breza (Wacquant 2001 y 2009; Fassin, 2016 y 2017),
sus derechos (INDH, 2019), experimentado en especialmente cuanto esta se desarrolla en grandes
primera persona una realidad cotidiana para las centros urbanos (Cabrera, 2000) dando origen a fe-
personas en situación de calle. nómenos como segregación espacial y aporafobia

4 Las cifras fluctúan entre 12 mil y hasta 43 mil personas, considerando todas las fuentes como el Registro Social de Hogares,
Hogar de Cristo, programas ministeriales permanente, personas en programas invierno y otros (Ibáñez, 2019)

Rubilar G., et al.


24
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
(Cortina, 2018). Es en este contexto, donde los los espacios físicos o urbanos, sino también a las
imaginarios de la violencia dan pie al concepto de personas que son connotadas como peligrosas
una “ciudad blindada o imaginada” que se sitúa al o sospechosas, lo que da origen a una respues-
lado de la ciudad real, más desigual y desagrada- ta institucional que controla y gestiona a los más
ble que la ciudad soñada (Améndola, 2000: 309), pobres, conteniéndolos en residencias, centros de
lo que nos permite hablar de inclusión/exclusión día, espacios de acogida, albergues u otros dispo-
en el mismo espacio territorial, como ocurre por sitivos que eviten su propagación física y social.
ejemplo con las personas en situación de calle que Las teorías criminológicas de contagio delictivo y
habitan en ciudades como Santiago, Valparaíso y de otras formas de desviación que relacionan el
Concepción, o la propia noción de Chile como un delito con la condición social de las personas, pro-
oasis en el contexto Latinoamericano5. pias de las formas de intervenir la pobreza en el
Los límites de esta ciudad o de este país imaginado siglo XIX (Ponce de León, 2012), encuentran te-
se construye a partir de estas desigualdades y en su rreno fértil en estas aproximaciones, tal cual como
capacidad de distinguirse o diferenciarse de los de- la anunciara el intendente de Santiago Benjamín
más, desarrollando una postmoderna paranoia ante Vicuña Mackenna en 1872, cuando hace referen-
lo que se considera extraño o ajeno (Barreiro, 2004), cia a un Santiago en dos ciudades, uno moderno y
categoría que incluye por cierto a las personas en si- próspero y otro decadente y atrasado.
tuación de calle, a los migrantes, a los extranjeros.
El temor a la violencia es uno de los princi- 1.2 Violencia en contextos de “normalidad”
pios ordenadores de esta ciudad contemporánea, y personas en situación de calle
que aboga por formas de control de los cuerpos
desviados, o marginalizados. Las formas de or- Vivir en la calle es una experiencia violenta, lími-
ganización entre vecinos ante las amenazas de te y extenuante en términos físicos y psicológicos,
otros, es tan antigua como la misma ciudad, pero implica gestionar diariamente servicios y bienes
va adquiriendo nuevas significaciones a partir del básicos como alimentación, alojamiento y abrigo.
desarrollo de tecnologías y dispositivos de con- La violencia está presente en las distintas fases de
trol, intensivos en el uso de Tic’s, que incluyen las trayectorias que siguen las personas en situa-
sistemas de seguridad con televigilancia y que ción de calle, y es particularmente evidente en el
permiten el desarrollo de una industria de segu- caso de las mujeres quienes han sido víctimas de
ridad activa y pasiva a nivel de hogares y vecin- episodios sistemáticos de violencia intrafamiliar,
darios (Roitman, 2003). abuso y falta de protección (Núñez, 2013).
La seguridad personal queda en manos de priva- La violencia se vuelve una “normalidad”, dire-
dos, mientras que el Estado asume principalmen- mos en este artículo y las personas en situación
te el control urbano de aquellos espacios que se de calle aprenden a administrarla usando recursos
consideran públicos, donde habitan las personas personales o institucionales que minimizan o com-
sin hogar y los intersticios que la propia ciudad pensan sus efectos. La violencia no disminuye, sino
segmentada genera “entre” barrios integrados y/o que se hace más sutil, se metamorfosea en otros
excluidos, como ocurre por ejemplo con las auto- formatos menos evidentes como la sensación de
pistas urbanas, los parques públicos, algunos cen- indignidad que se vive al momento de “la espera”
tros comerciales, las plazas de estacionamiento. para la obtención de beneficios, de asistencia o
Lo anterior, da cuenta que la crisis de la seguri- atención. La espera de los pobres es un fenómeno
dad está intrínsecamente relacionada con la crisis ampliamente estudiado por Auyero (2013) y obser-
global del Estado, y puede ser entendida como el vado en estudios etnográficos que ponen atención
resultado de la ruptura de los equilibrios garanti- en las burocracias, las formas de atención a la po-
zados por el pacto social (Améndola, 2000). Algo breza y las prácticas de asistencia (Dubois 2018,
se ha quebrado y esa falta de integración o cohe- Rojas, 2019), en este artículo no profundizamos en
sión social, es vista como amenaza de bienestar esta dimensión, pero conectamos esta espera con la
para quienes sienten que sus demandas se dispu- obediencia o sumisión no conciliada, que es vivida
tan o tensionan con los requerimientos de otros. como un tipo de violencia o amenaza a la dignidad
Es importante connotar que la geografía del personal (Araujo, 2016).
peligro en la ciudad no sólo hace referencia a El modelo de desarrollo impulsado en Chile

5 Así lo expresó Alejandro Aravena a CNN a propósito de la convivencia humana en las ciudades y la segregación https://
www.cnnchile.com/programas-completos/alejandro-aravena-arquitecto-la-acumulacion-de-privilegios-lamentablemen-
te-es-a-costa-de-los-privilegios-de-otros_20191027/ [26 de octubre de 2019]

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 23-37


25
en las últimas décadas ha puesto énfasis en las se impulsa el desarrollo de una oferta mínima de
lógicas de gestión de la pobreza y en el empren- atención y asistencia social básica. También per-
dimiento de los propios pobres en las formas mite evidenciar algunas brechas, especialmente
de asistencia de un estado social (Rojas, 2019), significativa en los temas de salud física y mental,
que suele enfatizar deberes por sobre el recono- atención sociosaniaria y la pertinencia o necesidad
cimiento de los derechos. Lo anterior es coinci- de adecuación de algunas intervenciones.
dente con lo planteado por Jouannet (2008) en Al respecto, se constata que un tercio de las
su análisis respecto a las personas en situación personas en situación de calle del país padecen
de calle, donde las necesidades de subsistencia enfermedades crónicas, más de la mitad presenta
son progresivamente reemplazadas por otras consumo de alcohol y tabaco; un cuarto de ellas
necesidades como: la identidad, la libertad y consumo problemático de otras drogas como pasta
también la dignidad. Elemento que ha estado base y marihuana, además de manifiestas dificulta-
especialmente presente en los malestares que des para ver, dormir, caminar, trabajar, estudiar y
desencadenaron la crisis política y social de oc- recordar (MDS, 2019). El 74% de las PSC presenta
tubre de 2019 (Araujo, 2019) y en los análisis algún tipo de dificultad (en una escala de dificultad
que las propias personas en situación de calle extrema/severa/moderada), que no se encuentra
hicieron de su situación (Círculos calle, 2019). suficientemente atendida por los dispositivos de
El reconocimiento de la vulneración de la iden- salud. La salud y la reparación de situaciones que
tidad incluye expresiones como “miedo de la so- afectan la calidad de vida (malnutrición, violencia
ciedad al diferente (…) auto-estigma, vergüenza intrafamiliar, enfermedades crónicas, consumo de
y orgullo que no les permite regresar a su fami- drogas y alcohol), es uno de los aspectos que des-
lia (…) prejuicios de que las personas de la calle tacamos en este artículo, ya que encuentra sintonía
son ladrones lo que genera rechazo social (…) con la línea editorial de la Revista y su propuesta de
discriminación socioeconómica por no pertene- una “nueva salud pública”, en el sentido expresado
cer a una clase social y “segregación social física por Crispi, Franz y Viveros (2018) y Alarcón (2018)
espacial (no vemos al otro)” (Zulueta, 2008: 30). en sus trabajos sobre discriminación por género en
Siguiendo la línea de la indignidad en la cotidia- salud y victimización secundaria de víctimas de
neidad de los pobres, observamos que resulta agresiones sexuales.
violento contar con una identidad estigmatizada Enfatizamos que la violencia es una constante
(Goffman, 1970) y con ausencia de reconoci- en las experiencias de las mujeres que viven en
miento por parte de una institucionalidad que los la calle (Núñez, 2013), ello incluye violencia fí-
invisibiliza o subregistra. sica y simbólica, muchas veces experimentada
En este sentido, el reconocimiento de las perso- con anterioridad a esta situación (Eissman, 2019)
nas en situación de calle y su visibilización como y reproducida en algunas de sus formas en sus
problemática societal emerge como una responsa- trayectorias. La calle es violenta para las personas
bilidad mínima para poder garantizar sus derechos que viven en esta situación y es particularmente
y resguardar una vida digna. Desde este punto de violenta para las mujeres, los más jóvenes y los
vista, la demandas que sustentaron la crisis social más ancianos.
de finales de 2019 representan una oportunidad En este sentido, al referirnos a las expresio-
de transformación de los “contenidos de la dig- nes de violencias en torno a vivir en la calle,
nidad tanto en términos de las provisiones mate- es importante reconocer las diferencias de gé-
riales como de las oportunidades sociales básicas” nero que se observan en esta situación. Las
(Araujo, 2019: 20). mujeres en calle representan el 16% del total
La invisibilidad de las personas en situación de (MDS, 2019), para la mayor parte de ellas, el
calle en los registros y estadísticas censales ha sido origen de su situación de vida en la calle se
una expresión de esta falta de reconocimiento debe a experiencias de abuso o maltrato, su-
(Jouannet, 2008:10). En los últimos 15 años ha mado al no tener casa donde llegar (Núñez,
habido un esfuerzo de la sociedad civil y de or- 2013: 192). Progresivamente el componente
ganismos públicos por catastrar e identificar a las de género ha comenzado a visibilizarse en el
personas afectadas por esta situación6, la cuanti- trabajo desarrollado por algunas instituciones
ficación y caracterización estadística es una for- y organismos, así queda en evidencia en las
ma de visibilizar la magnitud y complejidad de aproximaciones desarrollada por profesiona-
esta problemática social, al mismo tiempo que les de la Fundación Gente de la Calle donde
6 Catastro 2005 y 2011; Registro social de hogares y Censo 2017.

Rubilar G., et al.


26
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
se enfatiza la relación entre la violencia intra- estos elementos, no es algo externo a la socie-
familiar y la situación de calle 7. dad (Fanlo, 2011).
La dependencia económica de las mujeres En este sentido, el Estado de excepción es
respecto de sus parejas, la precarización del em- un dispositivo provisional para situaciones de
pleo, la presencia de doble jornada laboral, su- peligro que debiera ser usado como medio y
mada a las fallas en los sistemas de protección no como fin. En contexto de excepcionalidad,
y atención de víctimas de abusos y mal trato, así la “normalidad” se ve afectada al momento en
como la falta de pertinencia de programas de in- que se suspende el orden jurídico, siendo tam-
tervención según de género8 aparecen como los bién la forma legal de lo que no puede tener,
elementos que gatillan estas situaciones, donde porque es incluido en la legalidad a través de
vivir en la calle termina siendo una “alterativa”, la exclusión (Agamben, 2005). Benjamin se re-
más segura que el hogar o la vivienda de origen9 fiere a un estado de excepción verdadero que
. Lo anterior es coincidente con lo señalado por forma parte esencial de una racionalidad y/o
Alarcón, a propósito de las víctimas de violencia un modo de comprender la política, no es el fin
sexual quienes acuden a los servi¬cios de salud de la política, sino que es un dispositivo a través
en condiciones de alta vulnerabili¬dad (…) es- del cual la justicia hace su entrada en la vida
perando ser atendidas de una manera digna y despolitizada por el derecho (en Atiles-Osoria,
humana que les permita recuperar el control de 2018)10.
sí (…) debe ga¬rantizar un trato digno y conte- Para Ávila (2013) el soberano es el que tie-
nedor (Alarcón, 2018: 58). ne el monopolio para tomar decisiones, deter-
minando qué situaciones quedan dentro del
1.3 Estados de excepción, estados de nor- derecho y cuales queda constituidas como ex-
malidad y control del riesgo cepcional. La diferencia surge en contextos de
incertidumbre o de alta inestabilidad, donde las
En este eje se analiza cómo se presenta la reglas informales ya no existen y se transgreden
violencia en un estado de excepción, para ello los límites. Ricci (2010) plantea que la excep-
se recogen algunos elementos de la noción ción implica la suspensión del ordenamiento
Foucaultiana de violencia como dispositivo de vigente, el derecho queda suspendido frente al
control y poder. Foucault define al dispositivo derecho de intentar sobrevivir. En esta línea ar-
como una relación entre diferentes compo- gumental un estado de excepción se ubica entre
nentes o elementos institucionales que incluye el derecho público y el hecho político, y entre
artefactos como discursos, leyes, medidas ad- el orden jurídico y la vida (...) se presenta como
ministrativas, entre otros. Para este autor el dis- una forma legal de lo que no puede tener forma
positivo mismo es la red que se establece entre legal (Carvajal, 2006: 197)11.

7 Ver noticias y notas web Fundacion Gente de la Calle:


https://www.gentedelacalle.cl/mujeres-en-situacion-de-calle-la-lucha-de-cada-dia/ [8 de marzo de 2017], http://www.
gentedelacalle.cl/que-ocurre-con-las-mujeres-que-viven-en-la-calle/ [28 de marzo de 2017], http://www.gentedelacalle.cl/
video-mujeres-situacion-calle-una-realidad-invisible/ [11 de julio de 2018 ], http://www.gentedelacalle.cl/miradas-urgentes-so-
bre-mujeres-en-situacion-de-calle-en-la-2o-version-de-comunicacion-cultura-y-calle/ [10 de diciembre de 2018], http://www.
gentedelacalle.cl/audio-tratan-los-medios-la-violencia-mujeres-situacion-calle/ [22 de noviembre de 2018], http://www.gentede-
lacalle.cl/personas-en-situacion-de-calle-dejaron-carta-de-denuncia-en-el-servicio-nacional-de-la-mujer/ [9 de mayo de 2019]
https://www.gentedelacalle.cl/el-ministerio-de-desarrollo-social-no-cuenta-con-una-oferta-especializada-para-mujeres-en-situa-
cion-de-calle/ [16 de marzo de 2019], https://www.gentedelacalle.cl/el-femicidio-y-la-situacion-de-calle-dos-escenarios-catastro-
ficos-que-devienen-de-las-violencias-hacia-las-mujeres/ [28 de noviembre de 2019]
8 Ver opinión de María Isabel Robles, directora ejecutiva de Rostros Nuevos en El Mercurio. Disponible en https://www.
hogardecristo.cl/noticias/mujeres-en-situacion-de-calle-cronica-de-un-desconocimiento/
9 En 2018 el Ministro de Desarrollo Social señalaba que “el sistema público de salud es muy deficitario, y el problema son las
esperas, la lentitud. Cuando uno habla de tratamiento de salud mental no es una cosa de visitar una vez a un especialista, se
requiere de permanencia, continuidad. Mayores antecedentes sobre la situación de mujeres en Calle se puede revisar en reportaje
El drama de las mujeres que viven en la calle de canal 13 https://www.youtube.com/watch?v=Es79DOsCRUE [09 de julio
2019]
10 Hemos utilizado la traducción incluida en el texto de Agamben por su claridad y el apartado de Atiles-Osoria por la forma
como se usa el concepto para los fines de este artículo.
11 Perspectiva coincidente con lo señalado por el Senado de Chile (2019), donde se define el estado de excepción constitucio-
nal como un mecanismo en el cual se ven alteradas las situaciones de normalidad y regularidad de los derechos y las libertades
que tienen las personas garantizadas por la constitución política. Este se aplica en casos o hechos extraordinarios que acontecen
dentro de un país y tiene como finalidad el proteger otro bien mayor. https://www.senado.cl/appsenado/index.php?mo=trans-
parencia&ac=doctoInformeAsesoria&id=391 [15 diciembre 2019]

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 23-37


27
En este contexto Beyer (2019) va a plantear que de extirpar y que no se consideran como las epi-
en la excepción suelen proliferar formas de vio- demias como concepto de causa de muerte más
lencia. La suspensión de los derechos fundamen- frecuente” (Foucault, 1976: 21). La biopolítica
tales se ve reflejada en los medios utilizados para no solamente comienza a influir los procesos de
ejercer la violencia en la medida que se impulsan gestión de los pobres y desviados en instituciones
procedimientos mediante los cuales se asegura la asistenciales, sino que se encuentra en mecanis-
distribución espacial de los cuerpos individuales y mos más sutiles de protección social como segu-
la organización, a su alrededor, de todo un cam- ros y sus declaraciones de riesgo, ahorro indivi-
po de visibilidad (Foucault, 1976: 219). En esta- dual, coberturas, exclusiones y restricciones en un
dos de excepción se intenta lograr incrementar la léxico de especialistas que da cuenta de una suerte
fuerza mediante el ejercicio o el adiestramiento de de privatización de las condiciones de vida y de un
los dispositivos de control esto a su vez recibe un aumento de la incertidumbre (Castel, 2015).
nombre de “tecnología disciplinaria”, “Sistema de ¿Alguna vez existió la normalidad en la vida de las
vigilancias, jerarquías, inspecciones, escrituras, in- personas en situación de calle? ¿Cuál es la dignidad
formes” (Foucault, 1976: 223). dentro de esa “normalidad” de quienes se ubican
Podemos notar que “la normalidad es una res- en los extremos? Son algunas de las interrogantes
puesta a una normatividad jurídica y/o social, que impulsaron el desarrollo de este artículo, y que
la cual puede estar directamente ligada a los pa- indagan en las relaciones y tensiones que se gene-
rámetros legales o enmarcarse bajo pautas de ran entre las nociones de normalidad y excepción.
conducta institucionalizadas, que responden a Al estar al margen de la “normalidad” o en sus
un dominio, socialmente construido” (Matus y extremos (de la línea de pobreza), la cotidianidad
Haye, 2015:137) como ocurre por ejemplo con el de las personas en situación de calle se puede ob-
orden público. Es decir, “responden a un domi- servar como la “ausencia de derechos (...) traduci-
nio, donde la normalidad imaginada es sostenida da en exclusiones sociales persistentes de sistemas
por instituciones, discursos y prácticas específicas funcionales tales como, familiar, habitacional, sa-
(…) señala Davis esta opera como una ideología, lud, económico y garantías estatales para resolver-
en donde se encauzan las formas para definir y las” (Fuentes, 2008: 68). Entendida de esta for-
diagnosticar al “desviado” (Davis, 2013 en Matus ma, la idea de “normalidad” busca reencauzar el
y Haye, 2015:137), de ahí la concepción de anor- funcionamiento social, vincular a los sujetos des-
malidad desde las teorías de desviación o anomia. viados, marginalizados o excluidos a los sistemas
La emergencia de la vigilancia como forma de de forma tal que pueda retomar un modo de vida
control social y corrección de la desviación viene y producción social esperada. Lo anterior, nos de-
proliferando cada vez con mayor en las institu- vuelve al concepto de la intervención social como
ciones productoras de bienestar (Estado, merca- dispositivo normativo, que se tensiona con prác-
do y la sociedad civil) engendrado nuevas formas ticas de resistencia y proceso de ciudadanización
de entablar relaciones de poder y coerción social de sujetos y colectivos que reivindican derechos
(Flores, Manríquez y Monroy, 2011). al mismo tiempo que denuncian y acusan graves
El control de los cuerpos de los desviados tiene vulneraciones a los derechos humanos.
señas evidentes, se detectan a través de disposi-
tivos que bloquean el acceso, controlan los flu- 2. MATERIALES Y MÉTODOS
jos y segmentan a las personas. Como ocurre por
ejemplo con los mecanismos de control de acceso Este artículo fue desarrollado a partir de dos
biométrico, que en un primer momento fueron procedimientos principales. El primero consta de
implementados para controlar a los desviados y una revisión bibliográfica y documental de estu-
que ahora se han incorporados a los procesos de dios e investigaciones relacionados con los ejes de
gestión de beneficios sociales, prestaciones públi- análisis presentados en la introducción.
co/privadas, acceso a derechos. Estos materiales se construyen a partir de dos
Este primer ejercicio individual de poder y con- fuentes principales: 1) un estudio de caso y segui-
trol suele ser seguido por procesos colectivos, que miento de proceso de intervención de una fami-
observados desde los enfoques biopolíticos son lia en situación de calle (desarrollado entre abril y
analizados a partir del concepto de endemias, en septiembre de 2019) y 2) testimonios o relatos de
tanto “la naturaleza, la extensión, la duración, la personas en situación de calle tras la crisis social
intensidad de las enfermedades reinantes en una de octubre de 2019 (desarrollado entre octubre y
población, enfermedades más o menos difíciles diciembre de 2019).

Rubilar G., et al.


28
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
El caso de intervención fue trabajado por las 3. RESULTADOS
autoras de este artículo en el marco del programa
Vía Solidaria que desarrolla la Fundación Gente Violencia en tiempos de “normalidad” y “ex-
de la Calle. Se optó por una aproximación de caso cepción”: el caso de la familia Muñoz
único, en el sentido propuesto por Stake (1998) Se escoge a una familia como un caso índice o
como una forma de identificar las situaciones de típico de un grupo de personas que se encuentra
violencia en tiempos de normalidad. en situación de calle y que comparten redes fami-
Las situaciones de violencia en tiempos de ex- liares y de reciprocidad. Esta familia, cuyo apelli-
cepción fueron documentadas a partir de dos do ha sido cambiado, lleva aproximadamente 20
fuentes principales: un seguimiento de prensa a años viviendo en situación de calle, está compues-
las noticias publicadas en el periodo y recopilación ta por cuatro integrantes, un hombre de 64 años
de testimonios de violencia institucional obtenido con epilepsia; su pareja, una mujer de 48 años;
a partir de registros de la Fundación Gente de la una mujer del ruco en el que habitaban quien se
Calle, el trabajo de la Comisión Octubre 2019 y la integró al grupo familiar de 59 años con una dis-
presentación “Estado de excepción y personas en capacidad visible pero no diagnosticada, y un me-
situación de calle” elaborada por la Comunidad nor de edad de 15 años que estudia.
de Organizaciones solidarias y Movidos por Chile La familia Muñoz, llega a la Fundación Gente
ante el Alto Comisionado de Derechos Humanos de la Calle como caso “de contingencia”, dada las
en noviembre de 2019. particularidades de su composición y la condición
Se optó por analizar los materiales empíricos des- de vulneración de los derechos de las personas
de las directrices de los estudios cualitativos-inter- que componen este grupo familiar. Durante el
pretativos, siguiendo con ello la tradición de otros año 2019, a través del programa Vía Solidaria se
estudios o trabajos desarrollados por las autoras asigna una subvención para financiar el pago de
(Rubilar, 2013). Los materiales empíricos del regis- un arriendo a esta familia hasta por 12 meses.13
tro de prensa, testimonios y estudio de caso fueron En sus distintas fases de acompañamiento,
codificadas en forma abierta, y estas agrupaciones el proceso de intervención no estuvo exento de
fueron posteriormente discutidas a la luz del marco problemáticas asociadas a la institucionalidad y la
teórico construido para este trabajo. burocracia. Y ha permitido a las autoras de este
Los resultados de esta aproximación abierta a artículo desentrañar los instrumentos, los disposi-
futuras indagaciones nos permiten plantear una tivos y las formas de intervenir que se encuentran
serie de desafíos y cuestiones en torno a las cuales contenidas en las prácticas de asistencia de los po-
continuar profundizando, con especial énfasis en bres (Rojas, 2019; Dubois 2018). Zulueta señala
temas de violencia y control social en situaciones que, para evitar que se vulneren los derechos de
de “normalidad” y en estados de excepción. Esto las personas en situación calle, además de realizar
se vuelve especialmente relevante ante el esce- servicios directos para una mejor intervención,
nario actual, dado que el 18 de marzo de 2020 también se deben analizar las actuales políticas,
el país vuelve a declarar Estado de Excepción siendo la situación calle un barómetro de la cali-
Constitucional como una forma de afrontar la dad de las políticas públicas (Zulueta, 2008) y del
pandemia de COVID-19. Las personas en situa- sistema de protección social del país.
ción de calle se enfrentan nuevamente a los efectos En la historia de esta familia Muñoz se puede
de una crisis sociosanitaria que los hace especial- testear este barómetro desde el punto de vista de
mente sensible a sus consecuencias dado los bajos la vulneración de derechos y la falta de reconoci-
niveles de protección social que poseen o están miento, en diferentes ámbitos: educación, vivien-
ubicados en espacios segregados o en lugares de da, trabajo y salud (ver tabla 1).
exclusión (Cabrera, 2002) que en contextos de ex- Así ocurre por ejemplo con el joven integrante
cepcionalidad como los vividos en Chile (estallido de esta familia quien cursa segundo año de edu-
social de octubre 2019 y pandemia COVID-19 en cación media en condiciones “normales”, pese a
marzo 2020) les ha dejado especialmente expues- haber vivido toda su vida en situación de calle.
tos a la violencia y sus expresiones estructurales, El colegio al cual asiste este estudiante no está
institucionales y simbólicas12. informado de su condición de vulneración, las

12 Ver: https://www.indh.cl/indh-se-querella-contra-carabineros-por-tratos-crueles-inhumanos-y-degradantes-a-persona-en-si-
tuacion-de-calle/ [18 de abril 2020]
13 Este artículo se terminó de escribir cuando el subsidio había finalizado y por lo mismo, plantea algunas interrogantes acerca
de seguimiento de esta familia y sus proyecciones para 2020 una vez concluida la “excepcionalidad” de esta asignación.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 23-37


29
razones para ello obedecen a los prejuicios que la estacionalidad cuya fecha de caducidad deja en in-
comunidad educativa tiene sobre los más pobres certidumbre la continuidad del proceso de inter-
y el riesgo de discriminación de los demás. En ese vención y las proyecciones que se pueden realizar
sentido el establecimiento no es visto como una en materia económica y laboral. (Tabla 1)
red protectora o un recurso de apoyo, lo que plan- La situación de excepcionalidad de esta fami-
tea interrogantes acerca de la posibilidad de conti- lia (subsidio de arriendo), les permite la seguri-
nuidad y el término de los estudios de este joven. dad temporal de tener un lugar donde pernoctar,
Lo anterior es coincidente con los resultados de pero no soluciona las deficiencias institucionales
un estudio que indica que el 74% de personas en que ha vivido a lo largo de su trayectoria. La in-
situación calle declaran no haber terminado la en- certidumbre sobre el futuro (2020 en adelante) se
señanza media (Zulueta, 2008: 32). entrecruza también con los procesos de restitu-
La salud es un problema especialmente com- ción de derechos y reconexión a redes de salud y
plejo en el caso de los integrantes de este gru- de protección social, lo que supone el desarrollo
po familiar mayores de edad. Su vinculación al de un dispositivo de intervención y de acompaña-
CESFAM es parte del proceso de intervención miento de mediano plazo, que involucre a otros
del Programa, al igual que la gestión para la de- actores e instituciones.
claración de discapacidad de las dos mujeres con
procesos de espera e informes médicos requerido. 4. VIOLENCIA EN TIEMPOS
Al vivir en la calle, el control de la salud de la fa- VIOLENTOS Y LAS PERSONAS EN
milia era nulo, no existía historial ni ficha clínica SITUACIÓN DE CALLE DURANTE LA
por lo que la asociación con el sistema básico de CRISIS SOCIAL DE OCTUBRE DE 2019
salud también resultó compleja, dado que implicó
el aprendizaje de procedimientos burocráticos y El 18 octubre del 2019, se declara estado de
administrativos (Dubois, 2019) que no estaban en excepción en algunas ciudades de Chile, produc-
el repertorio familiar, ni en los dispositivos de in- to de una crisis social y política que tiene como
tervención del centro de atención primaria. preludio el movimiento de evasión de estudiantes
Como elemento de contexto, la protección so- secundarios ante el alza de los pasajes del metro.
cial en Chile se ve directamente vinculada al traba- El establecimiento del estado de emergencia en
jo formal (Castel, 2015), en el caso de las personas distintas ciudades del país permitió a la autoridad
en situación de calle, al no poseer ingresos for- gubernamental “restringir los derechos de reu-
males, la pensión básica solidaria les aporta cuyo nión y movilización de la ciudadanía mediante la
monto no es suficiente para satisfacer las necesi- declaración de un toque de queda nocturno que
dades de subsistencia, el acceso a los medicamen- duró una semana” (Valenzuela, 2019: 216)
tos (Saavedra, et al., 2018) y los cuidados de salud Según lo explicitado por Williams, Trufello y
para los adultos mayores. Situación que se eviden- Álvarez (2019) un estado de emergencia no se
cia especialmente problemática para esta familia puede extender por más allá de 15 días, en ese
con dos integrantes mayores de 60 años y dos periodo se pueden restringir las libertades de lo-
personas en situación de discapacidad funcional comoción y reunión, se designa a un Jefe de la
En cuanto a la vivienda, el término del subsi- Defensa Nacional quien queda a cargo de las
dio entregado a través del Programa Vía Solidaria Zonas afectadas. En los días de estado de emer-
inició una serie de gestiones con la Municipalidad gencia de octubre de 2019 se observaron restric-
para obtener un beneficio equivalente para el año ciones a la libertad de locomoción y circulación
2020, situación que mantiene a la familia y los de las personas, y detenciones arbitrarias que die-
profesionales de apoyo del proceso de interven- ron paso a violaciones de los derechos humanos
ción en incertidumbre y con la constante amenaza durante este período.
de tener que “volver a la calle”. Particularmente el toque de queda nocturno y
El acceso a la vivienda en este caso de estudio las restricciones a la libre circulación plantean in-
se constituye en una “excepción” en compara- terrogantes respecto de las personas en situación
ción con su cotidianeidad que sería la situación de calle. La complejidad de la situación de calle
de calle. La excepción supone la inclusión de los se ve agravada ante la falta de procedimientos de
integrantes de este grupo familiar a los sistemas actuación y la invisibilidad de sus trayectorias, así
de asistencia social, educación y salud, así como queda en evidencia al observar la falta de proto-
el acceso a la vivienda, que no es una condición colos existentes al momento de “toque de que-
garantizada para esta familia, sino más bien una da” y el imperativo de solicitar un salvoconducto

Rubilar G., et al.


30
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

Tabla 1: Resumen características y vulneraciones


Ámbito Tiempos de normalidad Tiempos de excepción
(situación de calle - 20 años) (arriendo con subsidio - 2019)
Dinamica El núcleo familiar se compone por 3 inte- La dinámica familiar de la familia Muñoz se ve
familiar grantes con vínculos de parentesco más amenazada debido a conflictos entre el arrendatario
la compañía de una vecina en situación de y parte de su familia que vive en el mismo lugar
discapacidad. arrendado, en donde existían prácticas de hurto de
especies y violencia intrafamiliar.
Educación Hombre de 64 años con educación básica Hombre de 64 años con educación básica incom-
incompleta. pleta.
Mujer de 59 años tiene educación media Mujer de 59 años tiene educación media incompleta.
incompleta. Mujer de 48 años con educación media completa.
Mujer de 48 años con educación media Adolescente de 15 años inicia su educación media,
completa. asistiendo a primer año medio durante 2019.
Adolescente de 15 años con educación
básica completa.

Habitabilidad La familia vivía en dos rucos en una plaza Subsidio de arriendo de 12 meses financiado de
de carga y descarga de arena y ripio. Vías Chile (gestionada a través del programa Vía
Solidaria de la Fundación Gente de la calle).
Ingreso (por trabajo o La familia no posee ingresos laborales. Ingresos producto de la actividad de comercializa-
subsidios) Asignación bono por hijo (menor de edad) ción informal de frutas y verduras. Actividad suspen-
y Pensión de discapacidad de una de las dida por orden de arrendatario
integrantes. Asignación bono por hijo (menor de edad) y Pensión
de discapacidad de una de las integrantes .

Salud Sin vínculos con el sistema de salud. Vinculación al centro de salud (CESFAM)
Inasistencia a controles de salud, producto del esca-
so manejo administrativo y burocrático del sistema.
Fuente: Elaboración propia en base a seguimiento de caso.

a la policía para poder transitar en horario noc- aumentando cupos y visibilizando la situación a
turno. La indefensión y la vulnerabilidad queda la cual quedaron expuestas quienes no tienen un
en evidencia en el testimonio de un hombre de lugar donde resguardarse en toque de queda15.
Valparaíso, quien en su trayecto nocturno a la Posteriormente en alianza con otras organizacio-
hospedería fue golpeado e insultado por la policía nes de la sociedad civil se organizó una serie de
a pesar de tener un “salvoconducto” (Testimonio, reuniones a nivel nacional y se inició un proceso
Hogar de Cristo, 7 de diciembre 2019). de discusión que culminó en un encuentro na-
En esta crisis social las personas en situación cional el 7 de diciembre de 2019. En paralelo, la
de calle se enfrentaron al toque de queda y a las Fundación Gente de la Calle emitió un comuni-
medidas de control de población en el uso de los cado debido a la falta de transparencia y difusión
espacios públicos, quedando expuestos al criterio del protocolo para el resguardo de las personas en
de las autoridades a cargo, ante la falta de meca- situación de calles, manifestando: “Sabemos que
nismos o repertorios previstos con anterioridad. existe un protocolo de actuación y resguardo para
En este contexto distintas organizaciones de la las personas en situación de calle que no se ha
sociedad civil activaron protocolos y actuaciones hecho público”16.
de emergencia ante esta “excepcionalidad” con El protocolo al cual hacen mención fue diseña-
el propósito de hacer visible la situación de estas do por el Ministerio de Desarrollo Social en coor-
personas, los medios de prensa prestaron colabo- dinación con las organizaciones de la sociedad
ración al respecto con noticias, reportajes y segui- civil con posterioridad a la declaración de Estado
mientos de casos14. de Emergencia del día 19 de octubre. Al final del
El Hogar de Cristo fue una de las instituciones documento se indicaba que: 1) No se podrá hacer
que prestó su red de centros y asistencias para control de identidad en todos los casos, se solici-
alojar a las personas durante el toque de queda, ta especial consideración con la condición en que

14 Ver https://www.biobiochile.cl/noticias/nacional/chile/2019/10/23/los-olvidados-del-toque-de-queda-personas-en-situa-
cion-de-calle-no-tienen-plan-y-denuncian-golpizas.shtml [23 de octubre de 2019]
15 Ver https://www.hogardecristo.cl/noticias/asi-viven-el-toque-de-queda-las-personas-en-situacion-de-calle/ [octubre de
2019]
16 Ver http://www.gentedelacalle.cl/declaracion-publica-personas-en-situacion-de-calle-y-toque-de-queda/ [22 de octubre de
2019]

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 23-37


31
se encuentran las personas en situación de calle perdigón de acero afuera de su ruco en la comu-
(PSC). 2) Si una PSC se encuentra en su “Ruco” na de Lo Espejo. Inmediatamente fue socorrido
se puede considerar como un lugar de pernocta- por sus vecinos, y tras ser atendido en un centro
ción y no se debe obligar a salir de ahí. 3) En caso de salud, es devuelto al mismo lugar donde fue
de que personas en situación de calle se encuen- víctima de la agresión. La situación ocurrió en el
tren en sectores de enfrentamientos o peligro, se contexto del estado de emergencia que decretó el
solicita al personal el traslado de estas personas a Presidente Sebastián Piñera el 18 de octubre pasa-
albergues o comisarías para que pasen la noche. do” (El mostrador, 2019)
4) Existe una lista oficial de personas en situación “A los de la calle nos están pegando. Nosotros
de calle en la región metropolitana y las Fuerzas somos la sombra de la misma oscuridad. Y con
Armadas e Intendencia pueden chequear los RUT nosotros se desquitan porque no nos creen, por-
en este listado17. que vivimos en la calle”. Señaló en un video una
No obstante, durante los primeros días de es- persona en situación de calle que asegura haber
tado de excepción y toque de queda de 2019 se sido golpeado por militares durante el toque de
comenzaron a reportar situaciones de abusos y queda (Biobío Chile, octubre 2019).
violencia física hacia personas en situación de ca- “Han llegado los milicos y han tirado sus bue-
lle. El 23 de octubre Movidos por Chile en coor- nos balazos. Ahora fui a buscar un poco de pan
dinación con el INDH levantaron un formulario y me voy a acostar, porque uno no puede hacer
especializado para recibir denuncias y canalizar nada más”, dice Francisco desde dentro de su
estas situaciones. En un periodo de 5 días (del 23 ruco, ubicado en avenida General Velásquez a
al 28 de octubre de 2019) se recibieron en total 8 pasos de Alameda” (Nota de prensa Hogar de
denuncias que involucraron a un total de 13 per- Cristo, octubre 2019).
sonas en situación de calle en hechos de violencia “Yo estaba durmiendo y uno de ellos me des-
perpetrados por Carabineros o militares quienes pertó a golpes diciéndome que no tenía que estar
emplean uso excesivo uso de fuerza y represión ahí porque estaba en toque de queda”, relata un
(Ibáñez, 2019)18. hombre en situación de calle de Renca que asistió
Posteriormente, durante el primer mes de la cri- el pasado jueves a dependencias de la Fundación
sis social, se contabilizaron 32 casos de personas Gente de la Calle para recibir comida de parte de
en situación de calle agredidas19. Violencia que, la organización y constatar abusos de parte de las
de acuerdo con la premisa de este trabajo, sería fuerzas del Estado” (Fundación Gente de la Calle,
expresión de una relación más bien habitual con 2019).
la institucionalidad y las fuerzas de control del Esta conexión entre control y violencia trabaja-
orden. da en el marco teórico de este artículo se expresa
Esta visión es coincidente con el informe ela- con mucha fuerza en los relatos anteriores, quie-
borado, a finales de octubre de 2019, por la nes como respuesta al temor evitan los espacios
Comunidad de Organizaciones Solidarias donde con presencia de autoridades y se hacen menos
se evidencia que “la mantención del toque de que- visibles dentro de su invisibilidad. La idea es pa-
da exacerbó la vulnerabilidad de las personas en sar desapercibido en un paisaje social que ha sido
situación de calle (…) además se dificultó seria- alterado y cuyo hábitat “la calle” ha sido ocupada
mente la alimentación: vieron alteradas sus rutinas por otros.
laborales y de sobrevivencia (…) lo cual aumentó Una visión más crítica y en algún sentido anti-
la angustia y miedo de estar en las vías públicas cipatoria de esta crisis se encuentra contenida en
durante el toque de queda (Ibáñez, 2019). el testimonio de dos jóvenes en situación de calle,
Los siguientes relatos obtenidos a través de se- quienes relatan la forma como se vinculan con las
guimiento de prensa y seguimiento de redes socia- policías en tiempos de “normalidad”:
les dan cuenta de esta situación “… Esto fue antes que pasara el toque de queda
“El 21 de octubre, en el contexto de estado si, como 5 días antes, los pacos nos habían agarra-
de excepción, Guillermo D. C. (43) recibió un do y nos subieron al carro, a ese carro que andan
17 Ver https://www.theclinic.cl/2019/10/26/13-personas-en-situacion-de-calle-denuncian-maltrato-durante-el-toque-de-que-
da/ [26 de octubre de 2019]
18 Ver Comunicado de Prensa de Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenando uso excesivo de la
fuerza y rechazando toda forma de violencia en el marco de las protestas sociales en Chile http://www.oas.org/es/cidh/prensa/
comunicados/2019/270.asp [23 de octubre de 2019]
19 Ver https://www.elmostrador.cl/noticias/pais/2019/11/21/presentaran-querella-contra-carabineros-por-disparo-a-perso-
na-en-situacion-de-calle/ [21 de noviembre de 2019]

Rubilar G., et al.


32
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
en las marchas y nos empezaron a pegar con los “normalidad” que requieren ser revisados y trans-
electroshocks (…) nos llevaron a la comisaria, nos formados, como ocurre con las situaciones de
pegaron y nos soltaron (…) llegó un sargento y violencia que cotidianamente afectan a las per-
dijo: “¿y estos de adonde vienen?” Na’ estos son sonas en situación de calle, la restricción en el
de acá dijo (de la calle quien los tenía retenidos), acceso a los espacios públicos y la definición de
“suelta altiro a esos cabros chicos, va a venir cual- una oferta de servicios sociales básicos garanti-
quier gente a dar jugo”, porque ya hemos ido an- zado o no condicionado a la capacidad de pago
tes. Ya nos han llevado antes a la 3ra (Comisaría) de los usuarios. Esto es especialmente elocuen-
y por eso damos siempre jugo cuando se llevan a te cuando se observan las largas listas de espera
uno, vamos todos, porque la calle es entera chica que deben enfrentar los más pobres para acceder
y aparte todos los pacos se ponen así, con puras a prestaciones de salud especializadas, vivienda
lumas tapando la puerta” (Joven género mascu- digna y/o educación de calidad. La “espera” de
lino en situación de calle, testimonio Comisión las personas en situación de calle y de los pobres
Octubre 2019). (Auyero, 2003) merece ser revisada no sólo desde
“… O te cargan y te mandan en cana, si son una perspectiva cronológica, sino desde el punto
bastardos a veces...si les creen dicen y no sé de de vista de la pertinencia y calidad de la oferta tras
dónde sacan las w… (se refiere a cuchillos, cor- esa espera.
taplumas u otros objetos) pa cargar a la gente, la Los resultados de este artículo nos permiten
otra vez a un cabro chico de 14 años lo querían mostrar que las personas en situación de calle ha-
cargar con una pistola y 3 balas, son así por ser cen uso de una oferta de servicios públicos y de
de la calle no más” (Joven género femenino en mínimos sociales que muchas veces se ubica en
situación de calle, testimonio Comisión Octubre la línea de su dignidad o en el límite de su condi-
2019). ción de persona. Sus derechos son escasamente
resguardados y en ocasiones directamente vul-
5. DISCUSIÓN nerados por las agencias y los actores responsa-
bles de su seguridad. La seguridad de los otros
El estallido social de octubre de 2019 dejó en aparece como prioritaria ante la “amenaza” y la
evidencia las fracturas de un Chile desigual, mos- “inseguridad” que se ha construidos como imagi-
trando el malestar de los ciudadanos ante la falta nario en torno a las personas en situación de calle.
de integración y las justicias de un modelo que La presencia de un mendigo o de un vagabundo
reproduce desigualdades al mismo tiempo que en un barrio es visto como una alerta, que activa
resta dignidad a los más pobres. Las personas en dispositivos de control y de saneamiento de esta
situación de calle son producto de este modelo situación. La cronicidad de la situación de calle
(Bauman, 2002) y la forma como son tratados da o la existencia de otras problemáticas asociadas
cuenta de la falta de atención y de reconocimiento suelen ser connotadas como factores de contagio,
de derechos de sus cuerpos y trayectorias. que justifican la separación y la exclusión social.
Su visualización como problemática social es un En tiempos de “excepcionalidad” estos elemen-
primer paso en el camino del reconocimiento de tos a veces se exacerban y en otras se mezclan
su condición de persona, pero por cierto insufi- con otras demandas o situaciones como ocurrió
ciente. Que sus vidas cuenten, y que sean censa- tras lo acontecido en octubre de 2019. Al cierre
dos o catastrados es una forma de romper con esta de este artículo observamos un escenario similar,
invisibilidad al mismo tiempo que se evidencian a partir de la declaración de estado constitucional
otras situaciones que requieren ajustes y transfor- de excepción como medida de ante la pandemia
maciones. La falta de pertinencia y continuidad de de COVID-19 y la falta de protocolos o meca-
los programas de asistencia, la necesidad de pers- nismos para promover una cuarentena efectiva
pectiva de género o de atención a la diversidad en personas que no pueden quedarse en casa,
sexual, el perfeccionamiento de las prácticas de precisamente porque carecen de ella. Este es un
atención (buen trato) de los funcionarios del esta- aspecto que este artículo busca transformar, rom-
do y de programas sociales que desarrollan accio- piendo los prejuicios y las estigmatizaciones que
nes de trato directo son algunos de los elementos les atribuyen de manera individual toda la respon-
que requieren ser ajustados y revisados para que sabilidad por la situación que les afecta a las per-
esta normalidad no termine siendo más violenta sonas en situación de calle.
que la propia falta de reconocimiento. Las sociedades son responsables de la produc-
Asimismo, se observan aspectos de esta ción de sus sujetos sociales y de las diferencias

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 23-37


33
que se construyen entre sujetos. Las experiencias cuestión y sus efectos sobre aquellas personas que
de desviación o de anomia requieren ser analiza- enfrentan condiciones de salud precarizadas y sin
das desde estos parámetros de construcción de espacio para vivir su cuarentena.
relaciones sociales y no sólo desde las teorías de No obstante, la mayor parte de las personas en
contagio, que suponen la separación y la segmen- situación de calle no denuncian este tipo de si-
tación de los cuerpos inempleables, inútiles o des- tuaciones por miedo o temor a represalias. Este
cartados (Bauman, 2002). La crisis social de oc- es un aspecto ya estudiado en otros países que
tubre 2019 afectó especialmente a este grupo de han desarrollado campañas contra la aporafobia
personas, lo anterior nos permite aventurar que (Cortina, 2018) y los delitos de odio (Hatento,
el COVID-19 también tendrá efectos en aquellos 2015). En el trabajo desarrollado por Ibáñez en
que no pueden llevar a cabo las medidas de higie- el contexto del estallido social de Chile (2019) se
ne y confinamiento que sugieren las directrices de evidencia que a las personas en situación de ca-
la política sanitaria. lle “les costó mucho atreverse y usar el canal de
Es así como la idea de “normalidad” propuesta denuncia, por medio a represalias y al estado de
en los antecedentes se discute y resuena a la luz indefensión que sienten permanentemente y que
de los elementos que la propia experiencia de “ex- se agudizó en Estado de Emergencia”.
cepcionalidad” ofrece como un espacio privilegia- Si bien las evidencias empíricas y los testimo-
do para observar modos de producción social y nios construidos para este análisis son acotados,
sus posibilidades de transformación de prácticas la mayor parte de ellos muestran coherencia en
y formas de relación que se han ido tensando los temas de violencia y personas en situación
(Araujo, 2019). de calle, aspecto a seguir profundizando. En este
La experiencia de la familia Muñoz ilustra lo an- sentido este estudio se presenta como un primer
terior y expone los desafíos de pensar los proce- aporte al debate y discusión en torno a violencia
sos de intervención más allá de las contingencias, que viven estas personas en tiempos de “normali-
de desarrollar acciones que interrumpan el daño dad” y “excepcionalidad”, observando que la nor-
ocasionado por la falta de pertinencia de otras ac- malidad vivenciada por las personas en calle es en
tuaciones y que por sobre todo permita romper varios sentidos similar a la excepcionalidad vivida
con el determinante de una trayectoria que hoy en por el resto de los ciudadanos tras el estallido so-
día parece irrevocablemente trazada. cial de octubre de 2019 o la crisis sociosanitaria
Se logra dilucidar una débil respuesta estatal que se derivará del COVID-19.
frente a las necesidades y complejidades que las El miedo, la imprevisión, la falta de seguridad y
personas en situación de calle presentan, viéndose la incertidumbre sobre el futuro, parecen ser sen-
reflejado en la fragmentación de la oferta, inicia- timientos compartidos entre sujetos en distintos
tivas de la sociedad civil que no logran hacer eco tiempos sociales (tiempos de estallido, tiempos de
en actuaciones más institucionales y la ausencia pandemia). Su visibilización como problemática
de políticas públicas orientadas a este grupo que nos permite evidenciar estas vulneraciones, evi-
operen en clave de reconocimiento y restitución tar su propagación y desarrollar mecanismos de
de derechos. reparación de los efectos de la violencia sobre los
Los testimonios recogidos tras el estallido social cuerpos físicos y sociales. Los protocolos de ac-
de octubre nos permiten observar cómo la violen- tuación en tiempos de excepción20 nos proporcio-
cia se acompaña en estos casos con faltas a la dig- nan algunas pistas en este sentido, especialmente
nidad, expresadas en malos tratos y abusos injus- a la hora de pensar que la excepcionalidad inclu-
tificados. Las personas en situación de calle están ye otras situaciones potencialmente catastróficas
expuestas cotidianamente a ofensas, intimidacio- necesarias de abordar prospectivamente como:
nes, amenazas y hostigamiento, esto que ocurre desastres naturales y cambio climático, conflictos
en tiempos “normales” se exacerba en contextos armados, desplazamientos forzados, entre otros.
de “excepción” dando origen a situaciones de ma- Una preocupación que surge de manera más
yor gravedad que a nuestro juicio requieren ser inmediata tiene que ver con las transformaciones
revisadas y denunciadas. El tiempo excepcional de de los espacios de pernoctación de las personas
pandemia que hoy nos toca vivir por la presencia en situación de calle. El plan invierno había cul-
del COVID-19, se constituye en un espacio rele- minado 2 días antes del estallido social, y si bien
vante para aportar nueva evidencia en torno a esta se abrieron plazas adicionales en hospederías y

20 En junio de 2020, la Fundación Gente de la Calle en conjunto con la Corporación 4 de Agosto elaboraron un Protocolo para
la detección y reacción ante vulneraciones de derechos humanos a personas en situación de calle.

Rubilar G., et al.


34
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
centros de atención, se constataron casos de per- la articulación de actores y agencias involucradas,
sonas no pudieron concurrir a tales lugares por lo anterior evita la revictimización y la exposición
falta de información, dificultades de desplaza- de las personas vulneradas.
miento en la ciudad, anticipación de los horarios La crisis social y política vivida en Chile en el
de toque de queda, entre otros. Ante la pandemia último trimestre de 2019 ofrece una posibilidad
de COVID-19 se adelanta el plan invierno con el para repensar las prácticas de asistencia y atención
propósito de brindar alojamiento a quienes no lo de las personas en situación de calle, desarrollar
poseen y se habilitan residencias sanitarias para mecanismos para su protección en caso de excep-
los periodos de cuarentena, tal vez sea momento cionalidad y trasformar su violenta normalidad
de hacer de estas medidas excepcionales sistemas con el propósito de dignificar las relaciones que la
más normalizados de asistencia y apoyo para los sociedad establece con ellas.
tiempos que estamos viviendo. Al cierre de este artículo surgen algunas interro-
En este sentido, la existencia de planes de con- gantes acerca del futuro que está por venir y cómo
tingencia ad hoc para situaciones excepcionales se resguardan los avances logrados hasta ahora en
similares se presenta como un desafío en el diseño este campo. Las demandas ciudadanas son múl-
de políticas y planes de asistencia de los más po- tiples tras el estallido y por lo mismo se corre el
bres, especialmente atingente resulta el desarrollo riesgo de invisibilizar (nuevamente) la situación
de iniciativas de salud pública y medicina social de los menos favorecidos, entre ellos las personas
ante escenarios de catástrofes o crisis como los en situación de calles y sus violencias cotidianas.
vividas en el país en los últimos meses, de forma En este sentido, es necesario continuar inves-
tal que los más pobres y las personas en situación tigando en esto a este tema, divulgando los re-
de calle no sean los últimos en llegar y/o en reci- sultados de los trabajos y ofreciendo espacios
bir atención. de discusión y debate como los proporcionados
por este número especial de la Revista Cuadernos
6. CONCLUSIONES Y PERSPECTIVAS Médico Sociales.

Los elementos presentados en este artículo REFERENCIAS


tensionan a la institucionalidad y a los sistemas
de protección social en tiempos de normalidad • Agamben, G. (2005). Estado de excepción:
y más aún en tiempos de excepcionalidad. ¿Qué Homo Sacer ll, l. Argentina: A. Hildalgo
desafíos supone este tiempo para los procesos editores.
de intervención y erradicación de la situación de • Alarcón, C. (2018) Implementación territo-
calles? es la pregunta con la que se cierra este ar- rial de las salas de acogida para la atención
tículo, sugiriendo algunas alternativas y caminos a víctimas de violencia sexual: ¿Es posible
de abordaje para los tiempos de incertidumbre y que las instituciones médicas reduzcan
transformación. la victimización secundaria? Cuaderno
Como se señaló en este trabajo la estigmatiza- Médico Sociales vol.58 (2), 57-62.
ción y el no reconocimiento son factores relevan- • Álvarez-Uría, F. (1979) De la policía de la
tes de atender en los procesos de intervención pobreza a las cárceles del alma. El Basilisco
dirigidos a la situación de calle. El abordaje de 8, 64-71.
estas dimensiones supone incorporar activamente • Alvira, F. (1975). La teoría de la etiqueta y
en los diseños de política y programas sociales un el concepto de conducta desviada. Revista
componente que resguarde derechos y restituya la Española de Opinión Pública 39, 75-87.
dignidad de los sujetos, con independencia de la • Améndola, G. (2000) La ciudad postmo-
situación en la que ellos se encuentren. derna. Madrid: Celeste ediciones.
En este sentido la acción pública orientada a • Atiles-Osoria, J.M. (2018). Walter Benjamin
este tipo de situaciones adquiere una dimensión y el estado de excepción verdadero: apro-
ciudadana y un sentido político que reconoce la ximaciones a una teoría de justicia. En
existencia de fracturas, segmentaciones y separa- Piedrahita, C., Vommaro, P. e Insuansi, X.
ciones entre sujetos sociales, al mismo tiempo que (Ed.) Indocilidad reflexiva: el pensamien-
aboga por su eliminación. Los procesos adminis- to crítico como forma de creacion y re-
trativos y burocráticos que forman parte de es- sistencia (pp.41-50). Clacso. Obtenido de
tas actuaciones pueden revisarse a la luz de estos https://www.jstor.org/stable/j.ctvn5tzs8.6
principios, simplificando trámites y favoreciendo • Araujo, K. (ed) (2019). Hilos tensados para

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 23-37


35
leer el octubre chileno. Santiago de Chile: Cuaderno Médico Sociales vol.58 (2), 17-22.
Editorial USACH. • Dubois, V. (2018). El burócrata y el pobre.
• Auyero, J. (2013). Pacientes del Estado. Relaciones administrativas y tratamiento de
Buenos Aires: Edudeba. la miseria. Valencia: Alfons el Magnànim.
• Ávila, M. (2013). Estado de excepción y • Durkhein, E. (1985) El suicidio. Madrid:
campos de concentración en Chile. Una Akal. Original de 1897.
aproximación biopolítica. Sociedad Hoy • Eissman, I. (2019). Pathways to home-
25, 65-78. lessness of homeless women in Chile.
• Barreiro, F. (2004). Los nuevos vecinos. Dissertation Proposal, documento sin
Metropolización, exclusión social y segre- publicar.
gación urbana en las grandes ciudades. • Fassin, D. (2016). La fuerza del Orden. Una
Boletín Ciudades para un Futuro más sos- etnografía del accionar policial en las pe-
tenible 34: 1-10. Disponible en: http:// riferias urbanas. Buenos Aires: Siglo XXI
polired.upm.es/index.php/boletincfs/ editores.
article/view/2315/2397 • Fassin, D. (2017). Castigar. Buenos Aires:
• Bauman, Z. (2002). Vidas desperdiciadas. Adriana Hidalgo Editora.
La modernidad y sus parias. Barcelona: • Fanlo, L. (2011) ¿Qué es un dispositivo?:
Paidós Foucault, Deleuze, Agamben. Revista de
• Bergalli, R (1998) ¿De cual derecho y de Filosofía A Parte Rei 74, 1-8. Disponible
qué control social me habla? En Young en: http://serbal.pntic.mec.es/~cmu-
(ed.) Sistema penal e intervenciones socia- noz11/fanlo74.pdf
les (pp.13-33). Barcelona: MJ Bosh. • Flores, N., Monroy, P., Manríquez, D.,
• Becker, H. (1971). Los extraños. Sociología Agüero, J. (2011) La ciudad vigilada: una
de la desviación. Buenos Aires: Tiempo aproximación discursiva desde los habi-
contemporáneo. tantes de la Población La Pincoya frente
• Beyer, N. (2019) ¿La encarnación de una al fenómero de la vigilancia pública en el
exigencia contradictoria? Algunas reflexio- sector. Tesis para optar al titulo de soció-
nes en torno a la violencia policial. En logo, Academia de Humanismo Cristiano,
Araujo, K. (ed). Hilos tensados para leer el disponible en: http://bibliotecadigital.aca-
octubre chileno. (pp. 353-368). Santiago de demia.cl/handle/123456789/130
Chile: Editorial USACH. • Foucault, M. (1976). Defender la Sociedad:
• Bravo, R. (2008) Personas en situación de Curso en el Collège de France (1975-1976).
calle y trabajo. Revista Trabajo Social 75, Buenos Aires: FCE.
43-48. • Fuentes, L. (2008). Diferenciando la com-
• Cabrera, P. (2000) Exclusión, deviación, po- plejidad: Tipologías de personas en situa-
breza. En RAIS (ed.) Miradas en el encuen- ción de calle e intervención social de cali-
tro: acortando distancias, construyendo dad. Revista Trabajo Social, (75), 67-82.
relaciones (pp. 15-21). Madrid: Fundación • Garland, D. (2015) Castigar y asistir. Una
Rais, Fundación Caja Madrid. historia de las estrategias penales y sociales
• Cabrera, P. (2002). Cárcel y Exclusión. del siglo XX. Buenos Aires: Siglo XXI.
Revista del Ministerio del Trabajo y Asuntos • Goizueta Vertiz, J. (2016). Los estados de
Sociales 35, 83-120. excepción en América Latina: Los controles
• Castel, R. (2015). La inseguridad social desde el derecho internacional. Revista de
¿Qué es estar protegido? Buenos Aires: la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas,
Manantial. (98), 183 - 215.
• Carvajal, I. (2006). Agamben, Giorgio, • Goffman, E. (1970). Estigma: La identidad
Estado de Excepción (homo sacer II, 1). deteriorada. Buenos Aires: Amorrotou.
Revista chilena de derecho, 33(1), 197-205. • Hatento (2015). Los delitos de odio con-
• Cortina, A. (2018). Aporafobia, el rechazo tra las personas sin hogar. Observatorio
al pobre. Un desafío para la democracia. de Delitos de Odio contra las Personas Sin
Santiago de Chile: Paidos. Hogar, Revista de Servicios Sociales 59,
• Crispi, F., Franz, N. y Viveros, G. (2018). 79-92.
“En Salud También”: Acoso sexual y discri- • INDH (2019) Informe anual sobre la situa-
minación de género en la práctica médica. ción de los derechos humanos en Chile en

Rubilar G., et al.


36
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
el contexto de la crisis social. 17 de octu- Etnografía del Estado social y las prácticas
bre al 30 de noviembre. Santiago: Instituto de asistencia. Santiago de Chile: Ediciones
Nacional de Derechos Humanos. Universidad Alberto Hurtado.
• Ibáñez, M.A. (2019) Presentación Estado • Rubilar, G. (2013) Imágenes de Alteridad.
de excepción: Personas en situación de calle. Reflexiones y aportes para el trabajo so-
Santiago: Comunidad de Organizaciones cial en contextos de exclusión. Santiago de
Solidarias - Proyecto Juntos en la Calle. En Chile: Ediciones Universidad Católica.
Reunión de la sociedad civil con ACHNUR, • Saavedra, I.; Jara, N.; Ireland, H.; Vargas,
Santiago de Chile: CEPAL. P. (2018). Acceso de los chilenos a medi-
• Jouannet, A. (2008). Personas en situación camentos y a Farmacia. Cuadernos Médico
de calle: Una oportunidad para nuestro Sociales, 58 (2), 99-106
país. Revista Trabajo Social 75, 9-16. • Stake, (1998). Investigación con Estudios
• Matus, C.; y Haye, A. (2015). Normalidad de Casos. Madrid: Morata.
y diferencia en la escuela: Diseño de un • Valenzuela, M. (2019). “La marcha más
proyecto de investigación social desde el grande de Chile”. Un viernes 25 de octu-
dilema político-epistemológico. Estudios bre de 2019 en la plaza Italia. En Araujo,
pedagógicos, 41, 135-146. K. (ed). Hilos tensados para leer el octubre
• Merton, R. (1964). Teoría y estructuras so- chileno. (pp. 315-322). Santiago de Chile:
ciales. México: Siglo XXI. Editorial USACH
• MDS (2017). Registro Social Calle. • Varela, J. y Álvarez-Uría, F. (1989). Sujetos
Presentación de resultados. Fase imple- frágiles. Ensayo de sociología de la desvia-
mentación. Santiago de Chile: Ministerio de ción. México: FCE.
Desarrollo Social, Gobierno de Chile. • Wacquant, L. (2001) Parias urbanos.
• MDS (2019) Registro Social personas en si- Marginalidad en la ciudad a comienzos del
tuación de calle, octubre de 2019. Santiago milenio. Buenos Aires: Manantial.
de Chile: Ministerio de Desarrollo Social. • Wacquant, L. (2009) Castigar a los pobres.
• Núñez, C. (2013). Mujeres en situación de El gobierno neoliberal de a inseguridad so-
calle más allá del andar cotidiano. Revista cial. Barcelona: Gedisa.
Sociedad y Equidad 5, 188-212. • Williams O., Truffello G., Álvarez D; y
• Ponce de León, M. (2012). Gobernar la Wilkins, J. (2010). Causales para decretar el
pobreza. Prácticas de caridad y beneficen- estado de excepción constitucional de emer-
cia en la ciudad de Santiago, 1830-1890. gencia. Asesoría Técnica Parlamentaria,
Santiago de Chile: Editorial Universitaria. Biblioteca del congreso nacional de Chile.
• Ricci, E. (2010). Historia y Análisis Jurídico Santiago de Chile: Biblioteca del Congreso
de los Estados de Excepción Constitucional https://www.bcn.cl/obtienearchivo?id=re-
en Chile. El Rol de las FF.AA. Revista positorio/10221/27946/1/BCN_estado_
Marina, 127(916), 219-231. de_emergencia_02.pdf
• Roitman, S. (2003). Barrios cerrados y • Zulueta, S. (2008). Políticas públicas y pri-
segregación urbana. Scripta Nova Vol.7 vadas para personas en situación de calle.
146(118). Disponible en: http://www. Revista Trabajo Social, 75, 27-35.
ub.edu/geocrit/sn/sn-146(118).htm
• Rojas, C. (2019). Ayudar a los pobres.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 23-37


37
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 39-47 ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

Cambio climático: Un fenómeno


alimentado por la desigualdad
Climate Change: a phenomenon fueled by inequality
Claudia Donoso S.1
RESUMEN

A ctualmente el cambio climático antropogénico –comprendido como la manifestación más difun-


dida del Antropoceno– es catalogado como el mayor desafío de nuestro tiempo, debido a los impac-
tos que sobre el bienestar y funcionamiento de las comunidades y los ecosistemas tiene el aumento
anormal de la temperatura ambiental. Sin embargo, en este escenario no todos los países ni todas las personas se
hallan expuestas al mismo tipo y grado de riesgo. Al respecto, la literatura es enfática en sostener que los efectos
del cambio climático reproducen las desigualdades entre ricos y pobres, pues los grados de vulnerabilidad, ca-
pacidad de adaptación y mitigación expresan una relación inversamente proporcional a la riqueza de los países y
las personas. Esta es la razón por la cual las personas más precarizadas, y dentro de estas, las personas de la calle,
son quienes experimentan con mayor rigurosidad los efectos derivados de este fenómeno.

Palabras clave: Cambio climático, Antropoceno, desigualdad, pobreza.

ABSTRACT

Currently, the anthropogenic climate change –understood as the most widespread manifestation of the
Anthropocene- is classified as the greatest challenge of our time, due to the impact that the abnormal rise in
environmental temperature has on the well-being and running of communities and ecosystems. However, in
this situation, not all countries nor all people are exposed to the same type and degree of risk. In this regard,
the literature is emphatic in upholding that the effects of climate change reproduce the inequalities between
rich and poor since the degrees of vulnerability, adaptability, and mitigation express an inversely proportional
relationship to the wealth of countries and people. This is why the most precarious people, including the
homeless, are those who experience the effects of this phenomenon with greater rigor.

Keywords: climate change, Anthropocene, inequality, poverty

1. UN ESCENARIO QUE SE APROXIMA

Doce de diciembre, año 2100. La humanidad no fue capaz de detener el avance del calentamiento global
y la temperatura media del planeta sobrepasó con creces los 2°C.
En este escenario, las olas de calor y los incendios forestales son cada vez más frecuentes (IPCC, 2018).
Las precipitaciones extremas azotan con especial rigor las latitudes altas del hemisferio Norte, del este de
Asia y de América del Norte. En tanto la sequía se convierte en la nueva normalidad en Europa meridional,
Centroamérica y el Norte de África (IPCC, 2018). Simultáneamente los océanos continúan su proceso de
calentamiento, el hielo marino del Ártico prácticamente ha desaparecido y el nivel del mar se incrementa
en varios metros (IPCC, 2018).

Recibido el 1 de abril de 2020. Aceptado el 2 de junio de 2020

1 Cirujano-Dentista, Mg en Bioética, Mg en Filosofía, profesora conferenciante Facultad de Ciencias de la Salud. Universidad de


Talca. Correo electrónico: [email protected]

39
La crisis alcanza cada vez mayor complejidad. desigualdades entre ricos y pobres, pues los gra-
Hay poca agua, especialmente en las regiones se- dos de vulnerabilidad, capacidad de adaptación y
cas subtropicales, y los conflictos por la apropia- mitigación tienen una relación inversamente pro-
ción de los escasos recursos hídricos disponibles porcional a la riqueza de los países y las personas.
marcan pauta a nivel internacional. El calor, la fal- En pocas palabras, a mayor pobreza mayores
ta de agua, los eventos meteorológicos extremos, riesgos, dada la menor capacidad técnica y fi-
las inundaciones y la alteración de los ecosistemas nanciera de las partes para enfrentar los daños
han afectado directamente la productividad de los y las pérdidas. Por ejemplo, de los diez países
cultivos, y con ello la estabilidad de los precios. más afectados por las consecuencias del cambo
Las enfermedades por vectores aumentan ex- climático entre los años 1999 y 2018, siete son
ponencialmente, tanto así, que solo en América países en desarrollo de ingreso bajo o medio
Latina se registran 8 millones más de casos anua- bajo; dos son países de ingreso medio alto, y
les de dengue. La gente, más pobre y vulnerable solo uno es una economía avanzada de ingre-
primero, como siempre, comienza a perecer, ya so alto (Eckstein, Künzel, Schäfer & Winges,
sea porque no soportó el calor, no logró escapar 2020, p.4).
de los incendios, o de la inundación según sea De esta manera el cambio climático antropó-
el caso, no contó con el dinero suficiente para geno en particular, así como la crisis ecológica
comprar alimento y agua o, simplemente, porque en general, nos enfrenta directamente con el or-
contrajo una enfermedad derivada de las condi- den político, social, económico y ecológico que
ciones precedentes. Los y las migrantes ya no se sustenta y se alimenta de la desigualdad (Piketty,
movilizan exclusivamente debido a los conflictos 2019).
bélicos desarrollados en sus países, sino también
porque el cambio climático volvió inhabitable 2. ANTROPOCENO Y CAMBIO
los territorios o, peor aún, el mar se apropió CLIMÁTICO: FENÓMENOS
de estos (IPCC, 2018). Por su parte, las distin- AMPLIFICADORES DE LA
tas regiones sujetas a movimientos nacionalistas DESIGUALDAD
exacerbados, escasez de recursos hídricos y ali-
mentarios, crisis económicas y sobrepoblación Corría el año 2000, y los científicos Paul Crutzen
no querrán hospedarlos. La tensión crece día a y Eugene Stoermer publican un breve artículo,
día, y finalmente se desata la guerra. ¿Nuclear?, de solo dos páginas, titulado “The Anthropocene”.
posiblemente. Mediante el neologismo introducido en este tra-
Contrariamente a lo que pudiera imaginarse, bajo los autores buscaban dar cuenta de una nue-
este relato no corresponde a la sinopsis de una va época geológica caracterizada por el impacto
película hollywoodense de corte apocalíptico, de las actividades humanas sobre el globo (pp.17-
sino a las proyecciones estimadas por parte del 18). Concretamente, el Antropoceno corresponde
Grupo Intergubernamental de Expertos sobre a una nueva época terrestre “dominada por las ac-
el Cambio Climático de Naciones Unidas (IPCC tividades humanas y sus consecuencias (…) fue-
por sus siglas en inglés), ante los fracasos en el ra de los márgenes de variabilidad climática que
control de las emisiones. Sin embargo, y a pesar vieron crecer y propagarse a la especie humana”
de lo que pudiera suponerse, este panorama no (Gallardo, 2016, p.2).
peca de alarmista, por el contrario, la cautela es Al respecto es importante señalar que si bien la
la rúbrica que guía el diseño de tales estimacio- abundante literatura científica dedicada al estudio
nes. De hecho, investigaciones recientes sostie- del Antropoceno ubica su origen a fines del siglo
nen que dichos modelos podrían estar subesti- XVIII, esta datación aún carece de las condicio-
mando el real alcance del calentamiento, ya que nes que las ciencias estratigráficas reclaman para
las temperaturas, en razón de los procesos de re- el establecimiento de una nueva época geológica.
troalimentación, podrían incrementarse en torno Por lo tanto, pareciera que el Antropoceno más
a los 4 y 5 grados celcius para fines de este siglo que encontrar su fundamento en el registro es-
(Wallace-Wells, 2019, p.23). tratigráfico, lo halla en la observación directa de
En este contexto, es claro que no todos los los impactos sobre el Sistema Terrestre (Finney
países ni todas las personas se hallarán expuestas & Edwards, 2016, p.4). Sin perjuicio de lo ante-
al mismo tipo y grado de riesgo. Al respecto, la rior, es necesario destacar que recientemente la
literatura es enfática en señalar que los peligros subcomisión de Estratigrafía Cuaternaria de la
asociados al cambio climático profundizan las Sociedad Geológica de Londres recomendó, pero

Donoso C.
40
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
solo preliminarmente, establecer el 16 de julio del unitaria, ya que ello supone pasar por alto las des-
año 19452 como fecha de inicio del Antropoceno igualdades que han de tenerse en cuenta si se quiere
(Ruddiman, Ellis, Kaplan & Fuller, 2015, p.38). efectuar un análisis integral del asunto (Brondizio
Mas, dicha recomendación no acaba con las dis- et al., 2016, p.322). Por ejemplo, la misma palabra
crepancias, pues al analizar el asunto desde otra Antropoceno da cuenta de esta situación, pues el
perspectiva, se presenta la problemática en torno anthropos detonante de esta nueva época no es la
al hecho de ubicar al Antropoceno como una épo- civilización que emerge hace 12.000 años, sino la
ca situada a continuación del Holoceno, o bien, desarrollada a partir del siglo XVIII, más concre-
como una nueva edad dentro del Holoceno, con tamente la que irrumpe desde la segunda mitad
propuestas de origen que van desde finales de la del siglo XX (Gran Aceleración)3, y en especial la
última glaciación hasta inicios de la década de los de los últimos 25 años (responsable de la mitad de
años 60 (Helmuth, 2017, p.48; Lewis & Maslin, todas las emisiones producidas durante la historia
2015, p.171). humana). La misma que, por adquirir la condición
En esta misma línea, Lewis y Maslin sostienen de agente geológico, fue capaz de disolver irrevo-
que esta falta de congruencia respecto a las con- cablemente la distinción entre historia natural y
diciones necesarias para reconocer una nueva humana (Chakrabarty, 2009, p.57, Wallace-Wells,
época geológica, o para establecer sus orígenes, 2019, p.83).
puede tener implicancias más allá de lo discipli- De igual manera dicha civilización (la del siglo
nar o académico. “Por ejemplo, definir una fecha XXI) tampoco ha de ser conceptualizada como
de inicio temprano podría, en términos políticos, una fuerza geológica actuando como un todo,
‘normalizar’ el cambio global del ambiente; mien- pues de ser así se esperaría una yuxtaposición
tras que un acuerdo de inicio tardío relacionado entre las tasas de crecimiento poblacional y las
a la Revolución Industrial podría, por ejemplo, emisiones, cuando más bien dichas estimaciones
ser usado para atribuir responsabilidad histórica han demostrado la existencia de relaciones inver-
de las emisiones de dióxido de carbono a países samente proporcionales.
o regiones en particular durante la era industrial” Lo anterior, porque una parte de la humani-
(2015, p.171). De hecho, olvidar los orígenes dad –coincidente con la más pobre que registra
históricos del Antropoceno, asignando a este un a su vez las más altas tasas de crecimiento po-
principio de naturalización, implica por una parte, blacional– no participa de la economía de los
reconocer una suerte de inevitabilidad en su des- combustibles fósiles, ya que “la distribución de
pliegue y, por otra, negar las relaciones de poder las tecnologías que depende de los combustibles
determinantes de las condiciones naturales y las fósiles coincide, en gran medida, con el poder
vulnerabilidades diferenciadas. Específicamente, adquisitivo” (Malm y Hornborg, 2014, pp.3-4).
conceptualizar el Antropoceno como una era De igual manera, el incremento en las tasas de
coextensiva al Holoceno asienta la idea de que emisones registradas a partir de los primeros
esta nueva época no es más que una suerte de años del siglo XXI por parte de los países po-
“gradualización” de la precedente. Esto quiere bres y emergentes –ejemplo de ello es la actual
decir que el Antropoceno ya no es comprendido posición detentada por China (30%) como el
como una ruptura, causada principalmente por mayor emisor mundial de gases de efecto in-
la quema de combustibles fósiles, sino como un vernadero, superando a Estados Unidos (15%)
fenómeno progresivo resultado de la expansión ubicado en el segundo lugar, seguido por India
incremental de la influencia humana sobre el pai- (7%) que registra el tercer lugar4 en el ran-
saje (Malm & Hornborg, 2014, pp.5-6; Hamilton king (United States Environmental Protection
& Grinevald, 2015, pp.8-9). Agency, 2020)– hallan su origen en la mayor
En este mismo sentido, el rol de la humanidad producción de bienes exigidos por parte de
en el despliegue de esta nueva época, o edad geo- los países desarrollados (Steffen, Grinevald,
lógica, no debiera ser comprendido de manera Crutzen & McNeill, 2011, pp.853-854).

2 Momento correspondiente al día en que se realizó la primera prueba de la bomba nuclear en Nuevo México, y cuyos subpro-
ductos isotópicos dejaron un registro distintivo en los núcleos de hielo, suelo, sedimentos oceánicos y lacustres (Ruddiman et al,
2015, p.38).
3 Segundo periodo del Antropoceno (1945-2000), caracterizado por la notoria amplificación que experimentaron los distintos
indicadores asociados al crecimiento económico (Steffen, Crutzen & McNeill, 2007, p.618).
4 Si los países que conforman la Unión Europea son considerados en su conjunto, aquella ocuparía el tercer lugar con un 9%
de las emisiones. No obstante, si la lectura se realiza analizando los países individualmente, India queda ubicada en la tercera
posición (EPA, 2020).

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 39-47


41
En este sentido, la “profunda desigualdad global modelo que ha pauperizado la vida de millones
distorsiona la distribución de los beneficios de la y expulsado a otros tantos a las calles, o sea, de
Gran Aceleración y confunde los esfuerzos para lo que hablamos cuando hablamos de cambio cli-
lidiar con los impactos en el Sistema Terrestre” mático y su abordaje (o cuando nos referimos a la
(Steffen, Broadgate, Deutsch, Gaffney & Ludwig, crisis ecológica) es de nada más y nada menos que
2015, p.91). Como tal, el Antropoceno podría de un asunto de justicia social de alcance global.
entenderse como un fenómeno ocasionado fun- Es por ello que la implementación de los
damentalmente por los países del norte, resulta- arreglos necesarios para lograr una adaptación
do “de una particular historia de arreglos econó- profunda a los efectos adversos del cambio cli-
micos y políticos”. Esta es la razón por la cual mático, nos enfrenta directamente con las des-
resulta perentorio comprender el Antropoceno igualdades que hemos desarrollado y normaliza-
ya no solo desde una perspectiva antropogénica, do como sociedad. Porque es claro que “para
sino también desde una visión sociogénica5, a fin producir una sociedad desigual hay que ‘hacer’
de volver la mirada hacia las diferencias en las algo, no es un resultado natural. Es igual de na-
relaciones de poder que resultan cada vez más tural producir una sociedad muy desigual que
relevantes en la determinación de las condicio- una muy igualitaria. Por tanto, se gasta energía
nes naturales, así como en las vulnerabilidades (dinero, poder) en producir desigualdad” (Mayol,
diferenciadas. De hecho, olvidar los orígenes 2012, p.74), y violencia en mantenerla.
históricos del Antropoceno, asignando a este un En relación a la cuestión de la violencia, es im-
estatus de naturalización, implica reconocer una portante señalar que a diferencia de la decapita-
suerte de inevitabilidad en su despliegue, blo- ción característica de la sociedad de la soberanía
queando así las perspectivas de cambio (Malm dominada por la figura de la sangre; y en contras-
& Hornborg, 2014, pp.5-6). Ello pone en evi- te, a la deformación presente en la sociedad disci-
dencia la importancia que reviste la integración plinaria dirigida por la ortopedia social; la depre-
de los distintos saberes y narrativas como condi- sión es la forma que toma la violencia en la actual
ción para el abordaje efectivo de este fenómeno sociedad del rendimiento. Una, en la que cada su-
(Brondizio et al., 2016, p.319). jeto compitiendo compulsivamente consigo mis-
mo, gracias a la internalización de una coacción
3. POBREZA Y CAMBIO CLIMÁTICO autoimpuesta disfrazada como libertad, desarrolla
una relación consigo que toma rasgos autodes-
En este escenario, el cambio climático6 antropó- tructivos (Han, 2016, pp.11, 21, 55, 61, 136). En
geno –comprendido como el aumento anormal consecuencia, y considerando que al día de hoy
de la temperatura ambiental y posicionado como nadie escapa a la figura violenta de la “positividad
la manifestación más conocida del Antropoceno– del poderlo-todo” (Han, 2016, p.124), pareciera que:
no ha hecho otra cosa más que profundizar las
cargas sistemáticamente impuestas sobre aquellos “En la actualidad todos nos hemos convertido en zom-
y aquellas hombres y mujeres incapaces de parti- bies de rendimiento. Las víctimas de esta violencia sisté-
cipar del competitivo juego de bienes y servicios. mica no son los excluidos Homines sacri, sino el sujeto de
En el entendido de que si el cambio climático en rendimiento integrado en el sistema, que, como soberano,
particular, así como la crisis ecológica en gene- como empresario de su yo, no está sometido a nadie, y en
ral, es el resultado del crecimiento desmesurado este sentido es libre, pero a la vez es el Homo sacer de sí
de una economía que ubica al anhelo como pilar mismo” (Han, 2016, p.123).
de la realidad (Bauman, 2007), aquel no ha de ser
comprendido como una simple externalidad liga- Sin embargo, hay algunos, a saber, los pobres,
da al funcionamiento de la economía de mercado y en especial quienes habitan las calles, los que
contemporánea, sino más bien como un asunto ni siquiera pueden ser categorizados bajo la figu-
directamente relacionado al funcionamiento del ra del zombie del rendimiento, o sea, individuos

5 Asimismo, se ha propuesto pensar en términos de Econoceno, a la luz de los efectos de la globalización de la actividad econó-
mica. Otras propuestas acuñan los neologismos Capitaloceno y Tecnoceno (Malm & Hornborg, 2014, p.6).
6 Cambio climático “cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la
atmósfera mundial y que se suma a la variabilidad natural del clima observada durante períodos de tiempo comparables”. Por
efectos adversos del cambio climático se entienden “los cambios en el medio ambiente físico o en la biota resultantes del cambio
climático que tienen efectos nocivos significativos en la composición, la capacidad de recuperación o la productividad de los eco-
sistemas naturales o sujetos a ordenación, o en el funcionamiento de los sistemas socioeconómicos, o en la salud y el bienestar
humanos” (ONU, 1992, p.3).

Donoso C.
42
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
“demasiado vivos para poder morirse, y demasia- de adaptación y mitigación, son, a la fecha, los
do muertos para poder vivir” (Han, 2016, p.197). menos perjudicados. Por el contrario, los países
Por el contrario, aquellos serán conceptualizados más pobres del planeta, cuyas tasas de emisiones
como puro Homine sacri, seres completamente constituyen solo una pequeña fracción de la de
desechables, “pura vida expuesta a la muerte”, ya los países desarrollados, ven significativamente
que la mercantilización absoluta del mundo “ex- afectadas sus condiciones de supervivencia9 –bas-
pulsa y aniquila todo lo que no sea trabajo, be- te para ello atender la plaga de langostas que a
neficio, capital, eficiencia y rendimiento” (Han, inicios de año afectaba a Kenia, Etiopía y Somalía,
2016, p.187). Todos estamos mal, pero pareciera cuyos trece millones de personas se encontraban,
que hay algunos y algunas especialmente mal, o tanto por la plaga como por la vulnerabilidad
mejor dicho trágicamente mal, a saber, los que ex- climática que ya venían experimentando (lluvias
perimentan con todo la violencia objetiva, ya en escasas, sequías), al borde de la hambruna. De he-
sus formas sistémica o simbólica7, impuesta por cho, el aumento de la temperatura en los océanos
el capital8 (Žižek, 2017, pp.9-10). fue lo que permitió el incremento en la frecuencia
Luego, esta violencia generada y normaliza- de los ciclones que a su vez creó las condiciones
da, no solo produce ganadores y perdedores de favorables para que la plaga se reprodujera (ONU,
bienes y servicios, sino que también ganadores y 2020)–, mas ello, no solo por las consecuencias
perdedores de las consecuencias ecológicas que la físicas directas del cambio climático10, sino tam-
provisión desmesurada de productos, orientados bién por las crisis políticas11 propiciadas en países
al mejoramiento constante del capital personal, con una estructura institucional deficiente, o sea,
trae consigo, es decir, un Homine sacri doblemente el clima ha de ser entendido como la chispa que
expuesto a la muerte, porque detona el conflicto, ya que son precisamente estas
catástrofes las que colocan en evidencia la rela-
“Los más pobres son quienes viven en las marismas, ción funcional o disfuncional de una sociedad12
las zonas pantanosas, los terrenos inundables, los lugares (Welzer, 2010, p.50).
que reciben una irrigación insuficiente con la infraestructu- Y son también estos mismos pobres quienes
ra más vulnerable; en conjunto, un inadvertido apartheid habitarán por obligación las llamadas zonas de
medioambiental (…). Aquellos con menor PIB serán los sacrificio. Curiosa palabra la empleada para dar
que más se calienten. Y eso a pesar de que, hasta la fecha, cuenta de una realidad que habla lisa y llanamen-
buena parte del sur global no ha contaminado tanto la te de cuerpos desechables y sacrificables. ¿Será
atmósfera del planeta” (Wallace-Wells, 2019, p.36). que el Estado entiende a estos cuerpos a la ma-
nera de una ofrenda ritual otorgada a la divini-
Efectivamente, los países más ricos del globo, dad ya en su forma de utilidad, modernización,
coincidentes con los que históricamente reportan capital o progreso?, ¿una especie de relato de
las más altas tasas de emisiones, mejor capacidad Abraham en pleno siglo XXI?
7 La violencia simbólica corresponde a la “encarnada en el lenguaje y sus formas”, en tanto, la violencia sistémica corresponde
a las “consecuencias a menudo catastróficas del funcionamiento homogéneo de nuestros sistemas económico y político” (Žižek,
2017, pp.9-10).
8 Luego, “la esencia de la violencia no tiene nada que ver con la violencia óntica, el sufrimiento, la guerra, la destrucción, etc.; la
esencia de la violencia reside en el carácter violento de la imposición/fundación real del nuevo modo de la Esencia – revelación
del ser comunitario– en sí misma” (Žižek, 2017, p.71).
9 Situación que también se presenta al interior de países que, pese a ser desarrollados, presentan importantes situaciones de des-
igualdad. Ejemplo de ello es lo ocurrido el año 2015 en Nueva Orleans a causa del huracán Katrina. A partir de tal experiencia se
acuñó el término “refugiado climático”, es decir, “una persona en situación de fuga a causa de un suceso climático. Se estima que
unos 250 mil ex habitantes de Nueva Orleans no regresaron a la ciudad tras la evacuación”. Este suceso sirve para ejemplificar
la ceguera de la autoridad frente a las advertencias que, desde hace bastante tiempo, se venían formulando respecto al riesgo de
inundaciones que podía experimentar esta ciudad (Welzer, 2010, pp.48-49).
10 Tales como: sequías, alteración de la frecuencia de precipitaciones, avance de la desertificación, disminución de fuentes de
agua dulce, degradación de los suelos, afectación en el rendimiento de los cultivos, incremento en la ocurrencia de fenómenos
meteorológicos extremos, propagación de enfermedades infecciosas, etc.
11 Tales como: migraciones masivas, resurgimiento de nacionalismos, tensiones étnicas, genocidios, guerras por recursos esca-
sos, guerras civiles, conflictos limítrofes, protestas sociales al alza, violencia estatal y extraestatal, terrorismo, etc.
12 Las catástrofes, los desastres y las emergencias se definen de acuerdo al nivel de respuesta social que generan. Por ello el con-
cepto semántico de catástrofe natural no corresponde, porque la naturaleza no es sujeto y como tal no puede experimentar una
catástrofe. En estricto rigor solo puede ser considerada como un detonante. Por lo mismo, las consecuencias, por ejemplo, de
un huracán o un terremoto dependerán del nivel de organización social. De hecho, el cambio climático no ha de ser considerado
como un detonante natural, sino más bien como un proceso antropogénico, pues los procesos de desequilibrio son de origen
humano (Welzer, 2010, pp.49, 52).

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 39-47


43
“Toma ahora tu hijo [le dice el capital al Estado] (…) Valparaíso” es tal, que organizaciones medioam-
a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí bientales identifican al sector de Quintero-
en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré. Y Puchuncaví como el Chernóbil chileno (Larsson,
Abraham se levantó muy de mañana, y enalbardó su asno 2020).13
[tomó las industrias], y tomó consigo dos siervos suyos [en Al respecto, baste recordar cómo las noticias del
la forma de legislaciones convenientes al “desarrollo”], y a martes 24 de agosto del año 2018 mostraban a
Isaac su hijo [ciudadanos y ciudadanas]; y cortó leña para más de 40 estudiantes, funcionarios, funcionarias
el holocausto, y se levantó, y fue al lugar que Dios le dijo [el y transeúntes ingresando a los centros asistenciales
más conveniente, donde la gente sea pobre, y por lo mismo, de Quintero con claros signos de intoxicación. En
con escaso poder político y económico]” (Génesis, 22:2-3). este escenario, el gobierno junto a declarar alerta
amarilla decidió suspender las clases, pero no pa-
El asunto, es que aquí la historia cambia, porque no lle- ralizar el funcionamiento de las fábricas, que por
gó ningún ángel a impedir el sacrificio. No existió ninguna un lado anuncian su compromiso con el medio
orden que dijera: “Abraham, Abraham (…) no extiendas ambiente, y por otro, lavan sus pecados en países
tu mano sobre el muchaho, ni le hagas nada” (Génesis, que consideran, prudente y oportuno, sacrificar
22:11-12). Ilustremos de mejor manera este asunto. unas cuantas vidas en nombre del tan anhelado
crecimiento y progreso económico. Precisamente
La región de Valparaíso en Chile, incluye dos en un país que, años más tarde, se posicionaba
localidades ubicadas a solo dos horas de Santiago como el anfitrión de la fallida COP 25.
llamadas Quintero y Puchuncaví. En este sector O sea, es justamente el mismo modelo produc-
operan algunas de las industrias más grandes y su- tivo que luego de empujar hacia los márgenes a
cias, existiendo alrededor de 20 instalaciones in- los cuerpos incapaces de participar del competi-
dustriales “construidas como parte de los planes tivo juego económico, el que, más temprano que
estatales para impulsar la producción”. Mismas tarde, los grava con los resultados ecológicos de
que haciendo caso omiso de las advertencias re- su “progreso”. En otras palabras, los precari-
lativas a los impactos que sobre las personas y los za doblemente, primero, cuando los excluye del
ecosistemas tiene su funcionamiento, provocaron juego financiero, impidiéndoles muchas veces el
un proceso de contaminación tan alta que la natu- acceso a bienes básicos ampliamente privatizados,
raleza y las personas han terminado por ser expul- y luego, cuando los grava con las consecuencias
sadas de los territorios. Un lugar donde “el medio directas de la crisis ecológica asociada al desarro-
ambiente se rompe sin reparación (…) y la gente llo del modelo, logrando de esta manera que la
es sacrificada” (Larsson, 2020). Así, ya vulnerabilidad deje de ser un riesgo para consti-
tuirse en un hecho, es decir, ya no serían cuer-
“A finales de los años 60 hubo informes de muertes de pos vulnerables sino lisa y llanamente vulnerados.
ganado vacuno y caballos, con tierras cada vez más infér- Recordemos que la precariedad:
tiles. Hoy la gente cuenta historias que se han vuelto casi
mitológicas, como los ‘hombres verdes’ que trabajaron en “Designa una condición impuesta políticamente merced
la refinería de cobre y luego murieron de cáncer. Según los a la cual ciertos grupos de la población sufren la quiebra
informes, sus órganos tenían pigmentaciones verdes debi- de las redes sociales y económicas de apoyo mucho más que
do a la contaminación. En 2013, los cuerpos de cuatro otros, y en consecuencia están más expuestos a los daños, la
trabajadores fueron exhumados; metales pesados como el violencia y la muerte” (Butler, 2019, p.40).
arsénico y el mercurio se detectaron en sus huesos (…) Las
alergias están muy extendidas. A veces, los escolares no ¿O acaso no es esto lo que nos ha enseñado
pueden pasar sus descansos para almorzar en el patio de la pandemia? De hecho, los escenarios que hoy
recreo porque los niveles de contaminación son demasiado en día, ya por obligación o ya por temor, nos en-
altos. También hay frecuentes accidentes industriales, in- contramos habitando, podrían ser comprendidos
cluidos tres grandes derrames de petróleo que afectaron la como una suerte de etapa preparatoria para el
bahía en los últimos seis años” (Larsson, 2020). sufrimiento que el cambio climático traerá con-
sigo. Ya a fines del año pasado más de 11.000
De hecho, el nivel de contaminación desarro- científicos y científicas de todo el mundo advirtie-
llado en el “barrio industrial de la costa norte de ron, explícitamente, que la emergencia climática

13 Al respecto, además de la existencia de una amplia literatura que estudia las contaminaciones en Puchuncaví-Quintero, ver
Cuadernos Médico Sociales, Vol 59, N° 2: http://cms.colegiomedico.cl/wp-content/uploads/2020/01/CuadMedSocChi-
le2019592.pdf. Nota del Editor.

Donoso C.
44
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
tiene altas probabilidades de llevar a la “huma- Montreal, Florida, Delaware, Luisiana, New
nidad a un sufrimiento indecible” (Ripple, Wolf, Jersey, Carolina del Sur, Rhode Island, Maryland,
Newsome, Barnard & Moomaw, 2019). Y, al igual San Francisco, Sacramento, Nueva York,
que la pandemia, este fenómeno no será ni demo- Filadelfia, Providence, Houston, Seattle, Virginia
crático ni igualitario. En la primera línea estarán Beach, Manaos, Buenos Aires, Asunción, Dublín,
todas aquellas personas sin la capacidad técnica Bruselas, Ámsterdam, Copenhague, Estocolmo,
y financiera para enfrentar los daños y las pérdi- Riga, Helsinki, San Petesburgo, Estambul, Doha,
das; las que carecen de los medios para proveer Dubai, Karachi, Calcuta, y de Bagdad hasta Pekín
de sustento a sus familias; las que se albergan en quedarán sino total, al menos parcialmente su-
viviendas sin las condiciones mínimas que garan- mergidas. En este escenario, quién podrá recibir
ticen la seguridad de quienes las habitan; las priva- tal cantidad de contingente humano, el asunto
das del poder político y económico necesario para se vuelve simplemente surrealista. Al respecto
exigir el cumplimiento de los acuerdos climáticos Naciones Unidas proyecta 200 millones de refu-
firmados por las partes. Asimismo, al interior de giados climáticos para el año 2050, ubicando el
este conglomerado, existirá un grupo que expe- extremo superior de lo que es posible en torno
rimentará con especial rigor las inclemencias del a los 1000 millones o más (Wallace-Wells, 2019,
modelo y del clima, a saber, las llamadas personas pp.18, 80, 83-84).
de la calle. Porque serán estas, las que sin poder La decisión es simple y, a la vez, colmada de
refugiarse en un ambiente adecuado, morirán por complejidades: el capitalismo o el clima. Imagino
el calor, ahogadas por una inundación, víctimas que la gran mayoría de nosotros y nosotras elegirá
de un diluvio, presas de un incendio o un tornado, el clima. Es imperioso que los Estados, con ur-
afectadas por una enfermedad derivada, directa o gencia, elijan pronto en favor de este, porque “lo
indirectamente de las condiciones precedentes, o que el cambio climático nos tiene preparado (…)
simplemente al borde de la inanición. no es una Gran Recesión o una Gran Depresión,
Lamentablemente, y pese a la abundante evi- sino una Gran Agonía (Wallace-Wells, 2019,
dencia científica, los cambios societarios no pare- p.137): muertes por calor, incendios, falta de agua,
cen producirse con la celeridad y magnitud reque- inundaciones, conflictos bélicos, nacionalismos
rida. Ello, debido a que el año 2019 fue el año más extremos, aire irrespirable, plagas, hambre, colap-
caluroso desde que se tienen registros, los gases so económico, colapso energético, terrorismo y
de efecto invernadero, así como el contenido de un gran etc., y todas ellas distribuidas, como era
calor del océano y el nivel global del mar volvie- de esperar, desigualmente. Una desigualdad que
ron a aumentar alcanzando cifras récord. Además, ubicará a los pobres y a la gente de la calle en la
el “Informe especial sobre el océano y la criósfera primera línea de la eventual catástrofe.
en un clima cambiante” del IPCC (2019) fue lapi-
dario al respecto, al sostener que los cambios en REFERENCIAS
los océanos ya son irreversibles y continuarán al
alza. Por consiguiente, de seguir una trayectoria • Bauman, Z. (2007). Vida de consumo.
de emisiones como la actual, posiblemente las zo- México: Fondo de Cultura Económica.
nas de sacrificio dejarán de ser la excepción para • Brondizio, E., O’Brien, K., Bai, X.,
convertirse en la norma. Un escenario donde la Biermann, F., Steffen, W.,
gente de la calle ya no será la que se quedó sin casa • Berkhout, F., (…) Chen, CT. (2016). Re-
resultado del perverso juego económico, sino a la conceptualizing the Anthropocene: A call
que lisa y llanamente se le inundó el territorio. Un for collaboration. Global Environmental
panorama en el cual Manhattan, Londres, Miami, Change, 39, 318-327.
Bangkok, Shangai, Bombay podrían transformar- • Butler, J. (2019). Cuerpos aliados y lucha
se en las Atlántidas del siglo XXI, si la plataforma política: hacia una teoría performativa de la
de hielo de Groenlandia continúa su nivel de de- asamblea. Buenos Aires: Paidós.
rretimiento (actualmente se derrite a una veloci- • Chakrabarty, D. (2009). Clima e historia:
dad diaria de 1000 millones de toneladas de hielo). cuatro tesis. Critical lnquiry, 35, 51-68.
Seis metros es la elevación estimada en el nivel del • Crutzen, P. & Stoermer, E. (2000).
mar en caso de ocurrir el fenómeno antes menta- The “Anthropocene”. Global Change
do. ¿Y si subimos la temperatura a tres grados? El Newsletter. The International Geosphere-
nivel del mar podría elevarse hasta 50 e incluso 80 Biosphere Programme, 41, 17-18.
metros. Aquí el mundo se vuelve irreconocible: • Eckstein, D., Künzel, V., Schäfer, L., Winges,

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 39-47


45
M. (2020) Global Climate Risk Index 2020: • Larsson, N. (2020, 24 february). The bru-
Who suffers most from extreme weather tal reality of inside one the world’s most
events? Weather-related loss events in 2018 polluted cities. The Wire. Recuperado
and 199 to 2018. Berlín: Germanwatch. de: https://www.wired.co.uk/article/
• Finney, S. & Edwards, L. (2016). The chile-quintero-pollution
“Anthropocene” epoch: Scientific decision • Lewis, S. & Maslin, M. (2015). Defining the
or political statement? Geological Society Anthropocene. Nature, vol. 519, 171-180.
of America Today, vol. 26(3-4), 4-10. • Malm, A. & Hornborg, A. (2014). The
• Gallardo, L. (agosto, 2016). Antropoceno geology of mankind? A critique of the
en Chile y oportunidades para un desarro- Anthropocene narrative. The Anthropocene
llo sostenible y resiliente. Una contribu- Review, XX(X), 1-8.
ción a la tercera sesión del ciclo de charlas • Mayol, A. (2012). El derrumbre del mode-
“Reforma Constitucional y Protección del lo: la crisis de la economía de mercado en
Medio Ambiente: un debate pendiente” el Chile contemporáneo. Santiago de Chile:
organizada por la Facultad de Derecho LOM.
de la Universidad de Chile, el Centro de • Organización de las Naciones Unidas
Derecho Ambiental, el Centro de Derechos (2020, 10 de febrero). La plaga de langos-
Humanos y el Centro de Ciencia del Clima tas del desierto pone en riesgo la alimen-
y la Resiliencia. tación de millones de personas. ONU.
• Hamilton, C. & Grinevald, J. (2015). Recuperado de: https://news.un.org/es/
Was the Anthropocene anticipated? The story/2020/02/1469391
Anthropocene Review, 1-14. • _______________ (1992). Convención
• Han, B-C. (2016). Topología de la violencia. Marco de las Naciones Unidas sobre el
Barcelona: Herder. Cambio Climático. Recuperado de: http://
• Helmuth, T. (2017). El Antropoceno, ¿un unfccc.int/portal_espanol/informacion_
concepto geológico o cultural, o ambos? basica/la_convencion/items/6196.php
Desacatos. Centro de Investigaciones y • Piketty, T. (2019). Capital e ideología.
Estudios Superiores en Antropología Social Buenos Aires: Paidós.
Distrito Federal, México. 54 (mayo-agosto), • Reina-Valera. (1960). Santa Biblia.
40-57. Sociedades Bíblicas Unidas.
• Intergovernmental Panel of Climate Change. • Ripple, J., Wolf, C, Newsome, T., Barnard,
(2019). Summary for Policymakers. In Pörtner, P., Moomaw, W. (2019). World Scientists’
H.O., Roberts, D.C., Masson-Delmotte, Warning of a Climate Emergency.
V., Zhai, P., Tignor, M., Poloczanska, E., BioScience, 70(1), 8-12.
Mintenbeck, K., Nicolai, M., Okem, A., • Ruddiman, W., Ellis, E., Kaplan, J. & Fuller,
Petzold, J., Rama, B., Weyer, N. (Eds.). IPCC D. (2015). Defining the epoch we live in is
Special Report on the Ocean and Cryosphere a formally designated “Anthropocene” a
in a Changing Climate, 42pp. good idea? Science, 348(6230), 38-39.
• _______________ (2018). Summary for • Steffen, W., Broadgate, W., Deutsch, L.,
Policymakers. In Masson-Delmotte, V., P. Gaffney, O. & Ludwig, C. (2015). The tra-
Zhai, H.-O. Pörtner, D. Roberts, J. Skea, jectory of the Anthropocene: The Great
P.R. Shukla, A. Pirani, W. Moufouma- Acceleration. The Anthropocene Review,
Okia, C. Péan, R. Pidcock, S. Connors, 2(1), 81-98.
J.B.R. Matthews, Y. Chen, X. Zhou, M.I. • Steffen, W., Grinevald, J., Crutzen, P. &
Gomis, E. Lonnoy, T. Maycock, M. Tignor, McNeill, J. (2011). The Anthropocene:
and T. Waterfield (Eds.), Global Warming conceptual and historical perspectives.
of 1.5°C. An IPCC Special Report on the Philosophical Transactions of The Royal
impacts of global warming of 1.5°C abo- Society A: Mathematical, Physical and
ve pre-industrial levels and related global Engineering Sciences, 369, 842-867.
greenhouse gas emission pathways, in the • Steffen, W., Crutzen, P. & McNeill, J.
context of strengthening the global respon- (2007). The Anthropocene: Are humans
se to the threat of climate change, sustai- now overwhelming the great forces of na-
nable development, and efforts to eradicate ture? Ambio, 36(8), 614-621.
poverty, 32pp. • United States Environmental Protection

Donoso C.
46
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
Agency. (2020). Global Greenhouse • Welzer, H. (2010). Guerras climáticas: por
Gas Emissions Data. Recuperado de: qué mataremos (y nos matarán) en el siglo
https://www.epa.gov/ghgemissions/ XXI. Buenos Aires: Katz Editores.
global-greenhouse-gas-emissions-data • Žižek, S. (2017). Sobre la violencia.
• Wallace-Wells, D. (2019). El planeta inhóspito: Barcelona: Paidós.
la vida después del calentamiento. Barcelona:
Debate.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 39-47


47
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 49-57 ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

Significados que una persona en situación de calle


atribuye a sus elecciones ocupacionales en base a su
experiencia en un Programa Calle
Engagement in a Programa Calle. Meanings that a homeless person assigns
to their occupational choice regarding their experience in a “Programa Calle”
Francisca Galdames Baumann1
Noemí Henríquez Garrido2
Marjorie Leiva Castro3
Constanza Toro Molina4
Pablo Olivares5

RESUMEN

E l presente estudio de caso tuvo por objetivo indagar en los significados que una Persona en
Situación de Calle otorga a sus elecciones ocupacionales, con relación a su experiencia de vida y
en el contexto de participación en un Programa Calle. Se utilizó una metodología cualitativa, con
un enfoque fenomenológico para el análisis, a partir de la aplicación de 3 entrevistas semiestructuradas. Los
principales hallazgos apuntan a la importancia que se da a la posibilidad de poder desempeñar ocupaciones
en espacios seguros y a la articulación en el apoyo desde diversas redes. Como conclusión, se comprende
que los significados de sus elecciones ocupacionales son importantes para su motivación y la intervención
del programa es coherente con su historia de vida.

Palabras Clave: Personas en situación Calle, Elección Ocupacional, Programa Calle.

ABSTRACT

Objective: To look into the meanings that a homeless person assigns to his occupational choices, regar-
ding his experience and participation in a Programa Calle. Method: A qualitative research, with a phenome-
nological approach and 3 semi structured interviews. Findings: Our main findings lies in the importance
that the interviewed person assigns to the possibility of being able to perform in significant occupations
within safe spaces and the articulation of several support networks around him. Conclusion: The mea-
nings of his occupational choices are important to his motivation and the intervention is coherent with
his background.

Keywords: Homeless people, Occupational Choice, Programa Calle.

Recibido el 1 de abril de 2020. Aceptado el 2 de junio de 2020 (acorde a formato de otros artículos)

1 Estudiante de Terapia Ocupacional, Universidad de Chile, [email protected]


2 Estudiante de Terapia Ocupacional, Universidad de Chile, [email protected]
3 Estudiante de Terapia Ocupacional, Universidad de Chile, [email protected]
4 Estudiante de Terapia Ocupacional, Universidad de Chile, [email protected]
5 Sociólogo, académico de la Escuela de Terapia Ocupacional de la Universidad de Chile, e-mail: [email protected]

49
1. INTRODUCCIÓN

Durante la década de 1970 se produjo un cam- al verse con la cultura tradicional de las personas
bio en el contexto económico e ideológico a nivel “con techo” (Ravenhill, 2003). Además de ser un
internacional, transitando a un Estado benefactor problema social, es un problema en salud y sobre-
en países más desarrollados y a uno neoliberal en todo en salud mental, llegando a observarse en
países con menor desarrollo (Huerta, 2005). En esta población altas tasas de abuso de sustancias
Chile, con la dictadura militar, surge una reestruc- y trastornos mentales como la esquizofrenia y el
turación estatal que da paso a un estado subsidia- trastorno bipolar (Folsom, et al., 2005).
rio, que por una parte focaliza el gasto social a El Programa Calle, desarrollado por el Ministerio
personas más desfavorecidas, y por otra privati- de Desarrollo Social (2014), aborda el problema
za ciertas áreas de la política social como vivien- de la exclusión social y vulnerabilidad, brindando
da, salud, educación y previsión, traspasando a acompañamiento especializado a PsC mayores de
la propiedad privada y al mercado su asignación 18 años durante dos años, en las áreas psicosocial y
(Mideplan, 1991). Esto se tradujo en un bajo aporte sociolaboral. Tiene por objetivo que estas personas
de gasto social y un régimen basado en la capacidad mejoren su bienestar en ámbitos de salud, vincula-
individual, donde las políticas públicas relacionadas ción, vivienda, entorno, ingresos, educación, traba-
con la exclusión social pasan a tener un enfoque me- jo y seguridad social, y es ejecutado por un equipo
ritocrático (Mota & Vidal, 2005), lo que implica que profesional multidisciplinario (trabajadores/as so-
el sistema de protección no sea universal e igualita- ciales, psicólogos/as, entre otros), en municipalida-
rio, y que se deleguen responsabilidades que se en- des y organizaciones sin fines de lucro (Ministerio
contraban en manos del Estado. de Desarrollo Social, 2020).
Estas políticas meritocráticas, llevadas al mar- Pese al gran avance en esta temática, existen va-
co nacional en cuanto a Personas en situación de riados aspectos por mejorar, como menciona la
Calle (en adelante PsC), poseen un enfoque de Política Nacional Calle 2018, ya que se encuentran
“Modelo escalera”, que busca erradicar la situa- significativas problemáticas en el marco legal en
ción de calle a través del avance progresivo de eta- cuanto a la coordinación de las acciones del Estado
pas dentro de las intervenciones, siendo el primer y privados hacia esta población, lo que provoca que
eslabón “la calle” (Cabrera y Bachiller, 2017). En estas acciones sean aisladas, sin propósito común y
dicho modelo, los usuarios deben ir progresando, descoordinadas. Además, se entiende que los pro-
recibiendo acompañamiento terapéutico y acep- gramas existentes no incluyen soluciones perma-
tando los objetivos que dicte el programa, hasta nentes, ni tienen metas asociadas a la eficacia del
llegar a convertirse en una persona preparada para sistema de atención a estos sujetos.
conseguir y mantener una vivienda permanente. Una de las estrategias para comprender y cuan-
Bajo esta forma de trabajar, el techo deja de ser tificar este fenómeno, y que a la vez sirvió de insu-
considerado un derecho para convertirse en una mo para la creación del Programa Calle en Chile,
recompensa al mérito y los usuarios son vistos fue la implementación de 2 catastros naciona-
como incapaces para hacer frente a una vivienda les. El primero fue realizado por el Ministerio de
autónoma (Busch-Geertsema, 2012). Planificación el año 2005 y contabilizó 7.250 perso-
De acuerdo con la Política Nacional de Calle nas que habitaban en las calles, en tanto, el segun-
(Ministerio de Desarrollo Social, 2014), PsC es do, llevado a cabo por el Ministerio de Desarrollo
toda aquella que pernocte en lugares públicos o Social el año 2012, contabilizó 12.255. En com-
privados, sin contar con una infraestructura que plemento, el año 2016, surge un apartado “Calle”
pueda ser caracterizada como vivienda. Tirado & en el Registro Social de Hogares, para caracterizar
Correa (2009), por otra parte, proponen al habi- en una base de datos a esta población, registrán-
tante de la calle como aquella persona de cualquier dose 10.610 PsC (Ministerio de Desarrollo Social,
edad que generalmente ha roto en forma definiti- 2017). Un informe publicado por el ministerio de
va los vínculos con su familia y hace de la calle su Economía en el 2019 estima que la población de
espacio permanente de vida. La situación de calle personas en situación de calle asciende a 17.722
también se plantea como una cultura alternativa, (Impacta Consultores Spa, 2019).
compleja y sinérgica en su naturaleza (Roszak, Dada la gran cantidad de personas que forman
1968), que implica dificultades inmensas y mul- parte de la cultura de calle, la escasez de evidencia
tidimensionales, las que las personas que están en primera persona en el contexto nacional y la
saliendo de la situación de calle deben enfrentar continua necesidad de incorporar los intereses de

Galdames F., et al..


50
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

las PsC en los programas ejecutados por la políti- ocupacional (Townsed & Wilcock, 1993) a tra-
ca nacional se hace indispensable levantar conoci- vés de la satisfacción de necesidades, y no sólo
miento desde un enfoque cualitativo que, contem- planteen abordajes con el fin de hacer desertar
plando las experiencias de los protagonistas de a las personas de la calle o lograr una reinser-
este fenómeno, incluya una mirada desde la cien- ción laboral.
cia de la ocupación. Este tipo de estudios pueden A partir de los antecedentes y la problemática
permitir complementar la Política Nacional de expuesta, se planteó como objetivo general de
Calle existente, en específico al Programa Calle, esta investigación: Indagar en los significados
con un enfoque centrado en los protagonistas del que la PsC otorga a sus elecciones ocupacio-
fenómeno. Es por lo expuesto anteriormente, que nales, con relación a su experiencia y participa-
en la presente investigación se realizó un estudio ción en un Programa Calle. A su vez, los obje-
de caso, profundizando en la experiencia de vida tivos específicos son: Por un lado, conocer la
de una PsC y los significados que atribuye a sus historia de vida de una PsC y los significados
elecciones ocupacionales mientras participa de un atribuidos a estas elecciones ocupacionales, y
Programa Calle. por otro, conocer la experiencia de la PsC en
Desde un análisis ocupacional, un concep- un Programa Calle del sector poniente de la
to central a trabajar es la elección ocupacional. Región Metropolitana.
Mientras que Bourdieu (2002) habla de habitus,
Martínez (2017) lo desarrolla como un conjunto 2. MÉTODO
de principios de percepción, valoración y actua-
ción, consecuencia de la socialización generada Se utilizó un método cualitativo de investiga-
en el origen y la trayectoria social de una persona ción, desde un paradigma interpretativista, pues
o comunidad. Galvaan (2012), describe elección se pretende encontrar sentido a los fenómenos
ocupacional como una situación compleja, influi- en función de los significados que las personas
da por una variedad de factores que van desde lo les otorguen (Hernández, Fernández y Baptista,
particular del individuo, como sus habilidades, a 2014, p.9). Esto permite abordar la problemática
lo global o extrapersonal, que se vincula con la desde la perspectiva de los propios involucrados,
disponibilidad de recursos del entorno. Rolack, permitiendo una mejor comprensión del fenó-
Triviños & Troncoso (2015) añaden que el con- meno, con un acercamiento fenomenológico a la
texto social, económico, político y las elecciones subjetividad de la persona (Hernández, Fernández
ocupacionales interactúan de maneras dinámi- y Baptista, 2014).
cas, lo que va a determinar si esta va a permitir Se utiliza la técnica de entrevista semiestructu-
o restringir la participación, produciéndose de la rada, la cual se caracteriza por ser flexible y no
última manera una situación de injusticia ocupa- directiva, lo que nos permite conocer e indagar
cional, que Galvaan (2012), identifica como una en la historia de vida del sujeto y en su experien-
falta de oportunidades en la elección de ocupacio- cia en un Programa Calle, centrado en sus elec-
nes. Cabe destacar, que las PsC en general tienen ciones ocupacionales, por otro lado, nos entrega
sus elecciones ocupacionales limitadas (Thomas, la posibilidad de adaptarnos a ellos (Díaz-Bravo,
Gray & McGinty, 2011). Torruco-García, U., Martínez Hernández, M.,
Analizar la situación de calle, y todas las decisio- Varela-Ruiz, M., 2013). Dicha entrevista fue reali-
nes y procesos que este fenómeno conlleva, per- zada a una persona con los siguientes criterios de
mite tener una visión más crítica, lo que diversi- inclusión: un rango de edad de 20 a 50 años, que
fica y facilita su comprensión. Este conocimiento haya participado de algún Programa Calle (o que
en términos generales busca aportar a la política esté participando en uno desde hace más de un
pública sobre calle, promoviendo que los progra- año), que no presente un consumo problemático
mas enfocados en la situación de calle aborden de drogas y/o una situación de salud mental que
esta problemática de manera integral, consideran- dificulte de sobremanera el curso de la entrevista.
do aquellos factores de la estructura social que También se realizaron entrevistas exploratorias a
inciden en ella. una Terapeuta Ocupacional (T.O) y a un Psicólogo
Es importante que estos programas otor- del centro con la finalidad de comprender el fun-
guen oportunidades y condiciones a cada per- cionamiento y la logística de los Programas Calle.
sona para ocuparse, promoviendo la justicia Los criterios de ética considerados en este

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 49-57


51
trabajo fueron acordados con las personas invo- Aquí se muestra uno de los aspectos crudos del
lucradas a través de consentimientos informados, vivir en calle, momento en que E.L. tiene que de-
que explicitan las implicancias de participar en esta cidir entre dos actividades básicas de la vida diaria,
investigación, la cual no conlleva ninguna respon- comer o dormir bajo un techo, porque no contaba
sabilidad que comprometa a la persona (desistir es con el dinero suficiente para cubrir ambas.
libre y voluntario en cualquier etapa del proceso), El entrevistado menciona que cuando se encon-
respeta por mantener anónima la identidad de los traba en situación de calle vendía productos, lo que
y las participantes (así como los lugares específi- le permitió conocer a distintas personas y lugares.
cos en los que se obtuvo la información), no colo- Así como refiere Wilcock (1993) en su teoría6, esta
ca en riesgo la integridad en ningún sentido, y sus exploración despertó en él una mayor necesidad
resultados serán devueltos a quienes participaron de ocuparse (no solo laboralmente) para lograr sa-
brindando información para este artículo. tisfacción personal, lo que le permitió indagar en
sus intereses, desarrollar habilidades y participar
3. RESULTADOS en actividades significativas para él. Así descubre el
teatro, que, junto con la poesía, fueron experiencias
Con el fin de resguardar el anonimato del en- gratificantes que le brindaron contención y sentido,
trevistado, se utilizará el pseudónimo E.L. para motivo que le llevó a continuar desenvolviéndose y
hacer referencia a este. A partir de los criterios expresándose a través del arte.
de inclusión, se invitó a E.L. a participar de este Se considera la calle como un ámbito proble-
estudio de caso. Es un hombre santiaguino de 53 mático para el desenvolvimiento de la PsC, debi-
años. Se encontraba participando en la etapa final do a que no cumple los requerimientos mínimos
de un Programa Calle al momento de la entrevis- necesarios que permitan considerarla un lugar de
ta (2019). Además, trabajaba de manera indepen- habitación que reporte bienestar y calidad de vida
diente y dedicaba gran parte de su tiempo al arte, (Tirado & Correa, 2009). Pese a estos escenarios
la poesía, el canto y el teatro. a los que se vio enfrentado, para E.L. la calle fue
A lo largo de la entrevista se abordaron distintas un lugar donde exploró y se desenvolvió en ocu-
temáticas, las cuales fueron separadas en catego- paciones diferentes, conociendo además personas
rías de análisis. Estas son: Elección Ocupacional, y lugares, donde adquirió aprendizajes que hoy en
Experiencia en el Programa Calle, Historia de día manifiesta agradecer.
vida y finalmente una Categoría Emergente que
aborda críticas hacia la realidad social y actualidad. 3.2 Experiencia en el Programa Calle

3.1 Elección Ocupacional En cuanto a su participación dentro del Programa


Calle, E.L. lo menciona como un lugar acogedor.
Según las experiencias narradas por E.L., se Desde que llegó a la organización, le brindaron
puede decir que sus elecciones ocupacionales apoyo y proporcionaron información sobre el pro-
estuvieron condicionadas por distintos facto- grama y albergues a los que podía acceder para dor-
res, algunos, producto de influencias personales, mir, algunos de ellos gratuitos. Se transformó en
otros, del entorno. Aunque estas prácticas sean un espacio seguro, de confianza, el cual le permitió
concebidas como decisiones libres por parte del explorar nuevas ocupaciones y, por ende, llevar a
actor social, desde el punto de vista del análisis cabo nuevas elecciones ocupaciones.
sociológico, éstas se conciben como limitadas por Bajo el mismo lineamiento, E.L. destaca que
su posición y momento social (Martínez, 2017). desde el Programa apoyaron y validaron su in-
Decisiones como: dónde dormir, comer, asearse, terés por el teatro y la poesía, inclinaciones que
trabajar esporádicamente y tener una ubicación habían sido postergadas a lo largo de su vida
durante la noche, pasaron a ser las tareas que, des- escolar. Desde la organización consideraban y
de el abandono, la soledad y la exclusión, tuvo que potenciaban las motivaciones en cada uno de
enfrentar (Montecino, 2008). los participantes, además de validar los tiem-
pos personales, lo que les facilitaba mantener
“El dinero que tenía solamente después me servía para jornadas en algunos trabajos esporádicos y/o
comer. O comía o pagaba el lugar donde quedarme” distribuir su tiempo según sus ocupaciones. Por

6 Plantea la ocupación como un aspecto central de la experiencia humana. Debate que la ocupación cumple con necesidades
humanas básicas esenciales para la supervivencia, provee mecanismos para que las personas desarrollen y ejerzan capacidades
innatas de naturaleza biológica, social y cultural, para adaptarse a cambios ambientales y prosperar como individuos.

Galdames F., et al..


52
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
su parte, E.L. recalca que se sentía visto como en el proceso de vida de la persona, y deberían
una persona adulta, capaz de tomar sus propias ser facilitadores/as de esta construcción de sig-
decisiones, con contención y libertad de elegir nificados, brindando herramientas y oportuni-
aquellas ocupaciones más afines a sus intereses, dades para desenvolverse en la sociedad, tal y
lo cual le otorgó herramientas que aumentaron como hace alusión E.L:
su autorrealización.
“Y estos muchachos, todos los que trabajan en [institu-
“Lo bueno es que a mí me recibieron bien, no tengo nada ción], todos amorosos, como contenedores”
que decir... son muy contenedores, escuchan, te guían... no
te imponen nada, uno toma la decisión, y ellos te ponen En resumen, es fundamental recalcar la impor-
como un abanico de posibilidades” tancia de los/as profesionales que trabajan interdis-
ciplinarmente para favorecer el proceso de las PsC.
Lo anterior se vuelve fundamental, ya que cada Son facilitadores de la red de apoyo y contención,
persona tiene experiencias de vida distintas, por así como de la exploración de ocupaciones durante
lo que sus intereses no son los mismos. Además, los dos años que se extiende el programa.
el estar en situación de calle induce la adquisición
de nuevas pautas de funcionamiento social que, 3.3 Experiencias/historia de vida
en mayor o menor proporción, dependiendo de
cada vivencia particular, sustituyen los mode- En esta categoría se abordaron tres aspectos:
los propios de ámbitos “familiares” (Saucedo & las vivencias que fueron dejando huella en E.L.,
Taracena, 2011), por lo que indagar en esto es un el significado que este atribuye a su estancia en
modo de encarar el mundo de la interioridad de calle y cómo estas experiencias desembocan en su
los sujetos sociales y de las relaciones que se es- panorama actual.
tablecen entre los contextos y con otros actores En relación con su experiencia de vida7, dentro
sociales (Galeano, 2004). del relato se aborda su sentir y cómo este recorri-
Es importante tener en cuenta que la pérdida do, desde su infancia hasta su situación actual, se
de significado en las ocupaciones diarias puede fue forjando en torno a situaciones de privación de
llevar a severas crisis existenciales, ya que son derechos e injusticia ocupacional. En sus palabras,
poderosos agentes que nos ayudan a organizar su infancia y juventud estuvieron marcadas por las
nuestras vidas, les dan significado y crean iden- escasas muestras de afecto por parte de su familia:
tidad (Gómez, 2003). Es por esto, que se torna
esencial reconocer la importancia de un abordaje “Yo estaba estudiando y no se acercaban a decirme ¿qué
desde la ocupación (entiéndase ocupación como te falta? ¿cuadernos? Nunca. O “No tengo dinero, pero
actividad con sentido, propósito y significado), en salgamos, caminemos a la plaza” Nunca, ¿Entiende? yo
donde los y las terapeutas ocupacionales pueden encuentro que me faltó amor”
crear ambientes y oportunidades que faciliten el
compromiso ocupacional de la PsC (Roy, 2017). A partir de su relato se rescata que la familia tie-
Es decir, que su rol como acompañantes en este ne un papel fundamental en el desarrollo cognitivo
proceso de reestructuración de rutinas y explora- y socioemocional durante la niñez (Divulgación
ción de ocupaciones, favorecerá la reorganización Dinámica, 2018), por lo que cuando se ve afecta-
de la cotidianeidad de la persona. da puede convertirse en un factor de riesgo para el
Las crisis existenciales dejan en desventa- desenvolvimiento del niño/a en las distintas ocu-
ja y pueden llegar a privar a la persona de una paciones propias de la edad (juego, exploración de
exploración ocupacional. Ante esto, se vuelve roles y vínculo con la familia). Es en este contexto
importante considerar la justicia ocupacional donde se establecen las primeras relaciones inter-
como un elemento clave, pues impulsa la faci- personales y donde tienen lugar las primeras per-
litación de oportunidades y recursos, teniendo cepciones que generan de sí mismos y del entorno.
en cuenta las diferencias individuales resultan- En cuanto al significado de su experiencia
tes de la interacción biológica y humana con en calle, sus vivencias desencadenaron en él
su medioambiente natural (Kronenberg, Simó un sentimiento de pena y angustia, ya que se
& Pollard, 2006). Por esto, los/as profesionales vio forzado a subsistir en su día a día. Sin em-
se convierten en una red de apoyo fundamental bargo, fueron estas experiencias, junto con el

7 Las experiencias de vida corresponden a las vivencias que dejan huella en una persona, influyendo, de alguna u otra manera,
en su desarrollo (Vygotsky, 1996).

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 49-57


53
teatro y las artes en general, las que le entre- Seguridad Social de las personas desde la niñez.
garon mucho aprendizaje para su crecimiento En el relato se destaca la importancia de la en-
personal: trega de herramientas y promoción de diversos
estilos de aprendizaje y gamas de intereses desde
“Me da angustia, me da pena lo que he vivido, pero bue- la niñez, con énfasis en la prevención de situacio-
no, en este momento me siento fortalecido, esa es la realidad nes de vulnerabilidad en la infancia para detener
de lo que viví y que ahora no me cuentan cuentos de vivir los ciclos de transmisión de riesgos y fortalecer
así esa experiencia extrema, ahora yo elijo vivir en paz, habilidades consideradas blandas, como “el amor,
vivir tranquilo, y con el teatro, el arte, cantar” el compañerismo, la unión de la familia y trabajar
desde el interior de la persona, no desde fuera”
A lo largo de la vida de una persona hay múlti- (E.L.)
ples factores, humanos, ocupacionales y ambien- En cuanto al rol del Estado, lo posiciona como
tales que pueden alterar su calidad de vida, afec- una figura alejada de lo cotidiano y del impacto
tando la realización independiente o funcional de directo en la vida de las personas, más bien lo en-
las ocupaciones y repercutiendo en las distintas tiende como un ente frío que asigna recursos y
áreas en las que ésta se desempeña (Universidad apoyos monetarios. En contrapartida, E.L. resalta
de Pamplona, 2011). En la narración de E.L. se la importancia del papel que juegan lo comuni-
aprecian problemáticas que influyeron en su bien- tario y la familia en el desarrollo de una persona,
estar y le produjeron estados de inestabilidad, entregando contención, cariño y empatía.
pero que también fueron su motivación para ex-
plorar en actividades significativas, formando una “Tiene que ser mucho más profundo, el Estado claro…
manera particular de comprender su vida. puede dar una casa, un lugar donde vivir, una habitación,
Gracias al apoyo de distintas redes (entre ellas algo digno, ellos van a ver en ese sentido, porque el Estado
el Programa Calle y una institución benéfica pú- es una entidad, y algo frío. Yo hablo más desde el corazón,
blica), logró acceder a un curso de formación de de la perspectiva del corazón”
guardia de seguridad, donde le entregaron apoyo
monetario por asistir y posteriormente un empleo En esta línea, existiría la posibilidad de utilizar los
en un centro comercial de la capital. Esto, sumado Programas Calle como espacios seguros y dotados
a sus trabajos esporádicos en venta de productos, de oportunidades para promover la participación
le permitió acceder al arriendo de una pieza en comunitaria. Así como dar la posibilidad a la PsC
una comuna del sector sur de Santiago. de ser actores sociales en sus propios términos, re-
Además de experimentar ocupaciones conside- levando la importancia de los lazos y por qué no, la
radas como normativas, pudo explorar distintas familia formada en la calle. Por otra parte, la acción
áreas de conocimiento, como primeros auxilios, de un Estado o un Ministerio se percibe como leja-
legislación relacionada a la seguridad, habilidades na, fría, sin relaciones concretas con la realidad del
blandas y defensa personal. En este proceso tam- individuo. Con esto, se da cuenta que no se perci-
bién fue fundamental el arte, ya que, en coheren- be de qué manera, en el actual modelo de Estado
cia con lo que señalan Thomas, Gray & McGinty subsidiario, se ejecuta la bajada de la acción de un
(2011), este tiene el potencial de incrementar las Ministerio, a la seguridad social en concreto. Dicha
habilidades interpersonales y la participación so- seguridad social debería proveer un piso mínimo
cial, además provee medios para expresar signifi- de dignidad y estabilidad a los/as ciudadanos/as y
cado en la PsC. Las ocupaciones artísticas aportan familias. Asegurando esto se podría proporcionar
un punto de partida para la participación en co- mayor estabilidad y lazos familiares seguros. Así
munidad y promueve la construcción de nuevas opera la prevención que E.L. cree tan importan-
identidades, roles y rutinas por parte de la PsC. te para evitar situaciones de riesgo y promover las
fortalezas de cada individuo.
3.4 Categoría Emergente: Críticas hacia la
realidad social y actualidad 4. CONCLUSIONES

Esta categoría surge espontáneamente, sin ha- Los significados que le otorga la PsC entrevista-
ber sido considerada en la construcción de la en- da a sus elecciones ocupacionales, es el desarrollo
trevista. Se da cuenta de la visión del entrevistado de su propia identidad y proyectos vitales a través
sobre la realidad social, la concepción del Estado de estas actividades significativas que realiza, al te-
y las medidas preventivas que deben resguardar la ner oportunidades disponibles para involucrarse

Galdames F., et al..


54
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
en las ocupaciones que él desea (relacionadas al Homelessness, 6 (2), 209-216.
arte, al teatro y la poesía, por ejemplo), además de • Cabrera y Bachiller (2017). “Informe
apoyo de índole socioeconómico, como pensio- Nacional Chile. Diagnóstico, recomenda-
nes y viviendas a precios accesibles. ciones y sugerencias” de Red Calle.
Vivir en calle afectó profundamente la visión de • Díaz-Bravo, L., Torruco-García, U.,
vida de E.L. Con el apoyo psicosocial y vinculación Martínez Hernández, M., Varela-Ruiz, M.
de diversas instituciones y actores sociales, logró (2013). La entrevista, recurso flexible y diná-
cuestionar y reflexionar sobre su vida en retrospec- mico. Departamento de Investigación en
tiva y asimilar vacíos afectivos que acarreaba desde Educación Médica, Facultad de Medicina,
su infancia. Junto al soporte de estas organizacio- Universidad Nacional Autónoma de
nes y sus propias habilidades, logró adoptar nue- México, México D.F, México.
vos patrones de comportamiento y eventualmente • Divulgación Dinámica. (2018).
salir de la situación de calle. Cabe mencionar que Divulgación dinámica, The Education
es en la articulación de todas las redes y no en el Club. Obtenido de https://www.
actuar individual de cada una por sí misma, como el divulgaciondinamica.es/blog/
Programa Calle, que se logra mejorar la calidad de la-familia-primer-agente-socializacion/
vida de la persona, proceso en el cual puede o no • Folsom, DP., Hawthorne W., Lindamer L.,
ser un fin dejar de vivir en calle, validando las metas Gilmer T., Bailey A., Golshan S., … Jeste,
que la persona, en coordinación con las redes y la D., et al. Prevalence and risk factors for ho-
comunidad, va colocando para su vida. melessness and utilization of mental health
En relación a esto último, y según Galvaan services among 10,340 patients with serious
(2012) escoger ocupaciones es un asunto comple- mental illness in a large public mental heal-
jo y situado socioculturalmente, en el que mientras th system. Am J Psychiatry 2005; 162 (2):
menos variedad hay en el abanico de oportunida- 370-6. DOI: 10.1176/appi.ajp.162.2.370
des de ocupaciones en las que se puede desempe- • Galeano, M. (2004). Significados de la sa-
ñar un individuo, más cerca se está de la injusticia lud para los niños de la calle en Medellín
ocupacional. De acuerdo con esto, cuestiones de (Colombia). Index de Enfermería, 20(3),
equidad en el acceso y justicia deben ser tomados 147-150. http://dx.doi.org/10.4321/
en cuenta en cualquier discusión sobre qué es la S1132- 12962011000200002.
elección ocupacional y cómo ocurre. • Galvaan, R. (2012). Occupational choice: The
Dentro de los factores que limitan los resultados significance of socio-economic and political factors.
de esta investigación, se puede mencionar la dificul- • Gómez, S. (2003). La Ocupación y su
tad que tuvo la persona entrevistada para dimensio- Significado Como Factor Influyente de la
nar la cantidad de tiempo que estuvo en cada lugar Identidad Personal. R e v i s t a
durante su vida en la calle, por las características mis- Chilena de terapia Ocupacional,
mas que tiene ese estilo de vida en lo cotidiano, en el N°3, Recuperadode: http://web.uchi-
que a veces perdía la noción del tiempo. l e. c l / v i g n e t t e / t e r a p i a o c u p a c i o n a l /
Como proyección se propone seguir profundi- CDA/to_completa/0,1371,SCID=617
zando en la temática con una mirada cuantitativa, 6%26ISID=290,00.html
pues los estudios mixtos tienen un alcance más in- • Hernández, R., Fernández, C. y Baptista, P
tegral y coherente con la realidad (Muñoz, 2013). (2014). Metodología de la investigación. Santa Fe,
Además, reflexionar alrededor de lo distinto que México: McGRAW-HILL / Interamericana
son las experiencias de ser mujer y hombre en calle, Editores, S.A. DE C.V.
y la importancia de profundizar en esta área con • Huerta, M. (2005). Política y Cultura. El
enfoque de género, “ser mujer y estar en calle es neoliberalismo y la conformación del
ultra violento y vulnerado por todas partes” (T.O). Estado subsidiario. (24),121-150. ISSN:
0188-7742.
REFERENCIAS • Impacta Consultores SpA (2019). Estudio
de factibilidad de la implementación de un
• Bourdieu, P. (2002). Questions de sociolo- Contrato de Impacto Social para la Superación
gie. Paris: Les éditions de miuit. de la Situación de Calle. Recuperado de: ht-
• Busch-Geertsema, V. (2012). The Potential tps://www.economia.gob.cl/wp-content/
of Housing First from a European uploads/2019/08/Informe-de-Factibilidad-
Perspective. European Journal of CIS-Situaci%C3%B3n-Calle.pdf

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 49-57


55
• Kronenberg, F., Simo, S. & Pollard, N. aproximación a sus ventajas y limitaciones en la in-
(2006). Terapia ocupacional sin fronteras: vestigación de sistemas y servicios de salud. Revista
Aprendiendo del espíritu de sobrevivien- Chilena de Salud Pública, Vol. 17 (3): 218-223.
tes. [Catalogación en Publicación de la • Ravenhill, Megan Honor (2003) The cultu-
Biblioteca Nacional] https://books.google. re of homelessness: An ethnographic study. PhD
cl/books?id=0ZsCYHlLWgIC&printse- thesis, London School of Economics and
c=frontcover&hl=es&source=gbs_ge_ Political Science, United Kingdom.
summary_r#v=onepage&q&f=false • Rolack, S., Triviños, V & Troncoso P.
• Martinez, J. (2017). Revista Internacional de (2015). Revista Chilena de Terapia Ocupacional.
Sociología. El habitus. Una revisión analítica. La influencia del sistema neoliberal en las
Universidad de la Laguna, España.75 (3). elecciones ocupacionales y el impacto en la
• Mideplan (1991). Evaluación de las políticas salud y bienestar desde una perspectiva cua-
sociales en Chile, 1920-1991. Documentos litativa. Vol. 15 (2).
Sociales. Santiago: MIDEPLAN. • Roszak, T. (1968). El nacimiento de una
• Ministerio de Desarrollo Social (2012). En Contracultura. Barcelona: Kairós.
Chile Todos Contamos. Segundo Catastro • Roy, L. (2017). Occupation-based practices
Nacional de Personas en and homelessness: A scoping review .Canadian
Situación de Calle. Recuperado Journal of Occupational Therapy , 98-110.
de: http://www.ministeriodesarrollosocial. • Saucedo, I. A., & Taracena, B. E. (2011).
gob.cl/btca/txtcompleto/midesocial/en- Habitar la calle: pasos hacia una ciudadanía a
chletodosconta mos-2catastrocalle.pdf partir de este espacio. Revista Latinoamericana
• Ministerio de Desarrollo Social - Oficina de Ciencias Sociales, 1(9), 269-285.http://
Nacional de Calle. (2014). Política Nacional biblioteca.clacso.edu.ar/Colombia/
de Calle, Una estrategia para la inclusión de las alianza-cindemz/20140402011822/art.
personas en situación de calle. Recuperado de: IvanAlejandroSaucedo.pdf
http://www.desarrollosocialyfamilia.gob. • Tirado, A. & Correa, M. (2009).
cl/btca/txtcompleto/midesocial/politnac_ Accesibilidad de la población habitante
calle.pdf de calle a los programas de promoción y
• Ministerio de Desarrollo Social y Familia. prevención establecidos por la resolución
(2018). Política Nacional de Calle. desarro- 412 de 2000. Pereira : AREANDINA.
llosocialyfamilia.gob.cl/btca/txtcompleto/ Fundación Universitaria del Área Andina.
midesocial/politnac_calle.pdf • Thomas, Y., Gray, M., & McGinty, S. (2011).
• Ministerio de Desarrollo Social y Familia. Homeless adults engagement in art: first
(2020). Chile Seguridades y Oportunidades. steps towards identity, recovery and social
Recuperado de: http://www.chilesegurida- inclusion. Australian Occupational Therapy
desyoportunidades.gob.cl/programa-calle Journal, 429-36.
• Ministerio de Desarrollo Social y Familia. • Townsed, E & Wilcock, A. (2004). Canadian
(2019). Registro Social de Hogares. Journal of occupational therapy. Occupational
Recuperado de: http://www.registrosocial. justice and client-centred practice: A dialo-
gob.cl/ gue in progress. Vol 71 (2), 75-87.
• Ministerio de planificación (2005). • Universidad de Pamplona. (2011). Obtenido
Habitando la calle. Catastro Nacional de de Línea de Investigación: Universidad de
Personas en Situación de Calle. Pamplona. (2020). Obtenido de http://
Chile. http://www.nochedigna.cl/wp-con- www.unipamplona.edu.co/unipamplona/
tent/uploads/2017/03/1.Primer_ portalIG/home_59/recursos/01gene-
Catastro_Nacional_Perso nas_Situacion_ ral/15082012/linea.jsp#
Calle_2005.pdf • Vygotsky, L. (1996). La crisis de los siete
• Mota, R., Vidal, F. (2005): Cuadro 1. años. En Segarte, A. (comp.) Psicología del
Tipología multidimensional de regímenes desarrollo. Selección de lecturas. Tomo I.
de bienestar. Sesión 2ª: Diversidad y rees- Editorial Félix Varela. La Habana.
tructuración regímenes de bienestar.Curso • Wilcock, A. (1993). A theory of the hu-
Tendencias actuales en política social, XIII man need for occupation. Journal of
Escuela de Verano Cáritas. Occupational Science, 1(1), 17-24, DOI:
• Muñoz, C. (2013). Métodos mixtos: Una 10.1080/14427591.1993.9686375

Galdames F., et al..


56
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 59-67 ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

Normatividad, normalización e inmunización.


Perspectivas en torno al “enfermo/a”
en situación de calle
Regulations, normalization and immunization.
Perspectives around the “sick person” on the street

Carolina Llanos1

RESUMEN

E l siguiente escrito, corresponde a una nota de investigación que pretende dar cuenta de un proce-
so en curso, iniciado en la Fundación Gente de la Calle, acerca de la salud y enfermedad en este
grupo de personas. Tal proceso, pretende alcanzar una fundamentación teórica en clave biopolíti-
ca, que permita una mayor profundidad en el conocimiento de la problemática en términos estructurales, y
que pueda materializarse en una mejoría en las herramientas de trabajo para quienes se vinculan con los en-
fermos en situación de calle. En el presente texto, se esboza una primera aproximación a tal investigación,
que través de tres nudos críticos, expone el problema de la invisibilización de la enfermedad como una
condición de “normalidad” de la vida en calle, así como también, la exclusión que viven estas personas.
A partir de esto, se propone hablar de “enfermo/a” en situación de calle considerando: la normatividad
biológica y la normalización biopolítica, para posteriormente posicionar el tema de la enfermedad de las
personas en situación de calle como un problema social que ha sido abordado desde el paradigma de la
inmunización.

Palabras clave: Enfermo/a en situación de calle, normatividad, normalización - inmunización

El desafío de tal ejercicio de fundamentación, radica en que éste debe presentar cohesión entre las
vivencias empíricas que las y los trabajadores de la FGC y otras instituciones enfrentan al momento de
relacionarse con las PSC; así como también, una cohesión consistente respecto de las experiencias que las
mismas PSC van reportando cuando recurren a tales espacios. En ese sentido, este proceso reflexivo inten-
ta constituirse como un puente entre la perspectiva que por una parte, proviene desde la institucionalidad
médica sumada a aquella otra, de quienes trabajan acompañando a la vida en situación de calle; y por otra,
la de los mismos sujetos que viven en calle.
La valoración de la perspectiva biopolítica por sobre otros enfoques, responde principalmente a dos
elementos. En primer lugar, la elección se sustenta en el hecho de que en la biopolítica hay un abordaje de
la imbricación que se establece entre la vida y la política (Lemke, 2017), que permite referir a dinámicas de
carácter estructurales que impactan en la salud, por ejemplo, el Estado subsidiario en la Constitución de
1980 y el derecho a elección entre los sistemas de salud público y privados (Goyenechea, 2019). Elementos
como estos, que requieren ser considerados a través de una matriz crítica, acerca de cómo operan las re-
laciones de poder mediante la gubernamentalidad y la institucionalidad en la sociedad (Foucault, 1995),
nos desafían a abandonar estructuras represivas y disciplinarias, para aproximarnos a otras formas de
organización, que cuiden y respeten la vida de las personas (De la Aldea, 2019), justamente lo que las PSC
parecieran necesitar.
Recibido el 1 de abril de 2020 . Aceptado el 3 de junio de 2020

1 Área de Estudios Fundación Gente de la Calle. Correspondencia a: [email protected]

59
En segundo lugar, hay que considerar para la normalizadas en su condición de vida en calle
elección de este enfoque, que en la historia de la como enfermo-as, donde tal condición provoca
aparición del concepto biopolítica, el léxico de la una respuesta “inmunizante”, por parte de la co-
inmunización de vertiente médica y los temas vin- munidad en su totalidad.
culados con el inicio y fin de la vida (Esposito,
2005; 2011), posicionan a la medicina como un 2. PRIMER NUDO CRÍTICO:
factor elemental para comprender tales perspecti- ATISBOS DE LA EXCLUSIÓN,
vas, donde eugenesia, higienismo, natalidad, mor- LA NORMATIVIDAD Y LA
tandad, control de la población, entre otros, se NORMALIZACIÓN
vuelven nociones fundamentales. En ese sentido,
el cruce entre la dimensión médica y jurídica que Cuando Canguilhem profundizaba el vínculo
ofrece el paradigma de la inmunización, posibilita entre cultura y medicina en su obra Lo Normal
un abordaje profundo de la problemática en tor- y lo patológico (2011), no sospechaba la fuerza y
no a la salud y enfermedad de las PSC. claridad de expresión que tal afirmación alcan-
La mirada biopolítica, posibilitaría entonces zaría desde la óptica de Foucault. El maestro y el
considerar cómo el concepto de salud contie- discípulo, ocupados en una profunda reflexión
ne en sí una larga historia, donde disposiciones sobre la vida, que inicia con una clara intención
específicas, van configurando a los sujetos, sus epistemológica, pero que se desarrolla en cla-
cuerpos y sus subjetividades, insertos en un am- ve ética, ponen el foco en cómo la cultura en
biente natural, cultural y político, que será deter- Cangilhem y la política en el caso de Foucault,
minante para su desarrollo vital, de manera que abordan la vida desde el enfoque médico.
la biopolítica2 y la gubernamentalidad en sentido En la medida que Canguilhem va analizando di-
foucaultiano, donde la primera alude a grandes versas teorías entre lo que en medicina se conside-
rasgos a un control de los procesos vitales de la ra “normal” y “patológico”, va esbozando cómo
población (Foucault, 2006b, p. 148) y esta última estos términos se definen en función de la varia-
corresponde a una técnica de gobierno que inci- bilidad de un viviente en relación con el medio en
de en las conductas de los sujetos y que al mismo que se desenvuelve, afirma:
tiempo opera como una racionalidad que posibilita
un nuevo orden propio de las sociedades discipli- “‘La medicina, dijo Sigerist, es una de las cosas más
narias (Foucault, 2006b), adquiere una notable ma- estrechamente vinculadas con el conjunto de la cultura,
terialidad en el caso de las personas en situación puesto que toda transformación en las concepciones médicas
de calle, implantándose así un nuevo régimen de está condicionada por transformaciones en las ideas de la
veredicción donde según Preciado interpretando a época’ [107,42]. La teoría que acabamos de exponer – al
Foucault “la tarea misma de la política es fabricar mismo tiempo médica, científica y filosófica- verifica perfec-
un cuerpo” (2020, p.164). tamente esta proposición” (2011, p 74).
En lo que sigue, se presentarán tres nudos
críticos que operan como motor reflexivo para Idea que aparece constantemente a lo largo
desarrollar la investigación que en este texto se del texto, cuando señala que, además de poner
anuncia, así como también, sus respetivas hi- énfasis en la relación que se da entre medicina
pótesis de trabajo y decisiones metodológicas. y la cultura de su época, Canguilhem refiere a
Dado que este proceso investigativo se encuen- la enfermedad de un modo diferente al paradig-
tra en un estadio inicial, su presentación no ma previamente dominante, de carácter monista,
utilizará una estructura rígida. Contrariamente, que proponía a la enfermedad desde una prima-
se desarrollará en vistas de una exposición de cía de lo cuantitativo por sobre lo cualitativo,
carácter reflexivo y problematizador que invi- como una variación del estado fisiológico de sa-
te a la reflexión, donde la hipótesis que siem- lud, con lo que Canguilhem (2011) abre una nue-
pre se pretende abordar, señala que las PSC son va perspectiva sobre la consideración del estado

2 Biopolítica en un concepto de amplio desarrollo en la obra de Foucault, que podría leerse en al menos cuatro sentidos desde
la interpretación que realiza Edgardo Castro. Se puede considerar a la biopolítica como una consecuencia del surgimiento de
una medicina social, como una especie de transformación de la guerra de razas, desde la voluntad de saber como la soberanía
respecto de hacer vivir-dejar morir o como la gubernamentalidad liberal. Ver Castro, E (2008) Biopolítica de la soberanía al go-
bierno. En Revista Latinoamericana de filosofía, vol xxxiv, N°2. Estas diferentes perspectivas en torno a la biopolítica, aparece-
rían de un modo asistemático y fragmentario a lo largo de la obra de Foucault, debido a la positividad de su análisis. Esa misma
lógica de análisis es la que se pretende rescatar para los efectos de la investigación que aquí se propone, a partir de la considera-
ción de prácticas específicas en la temática de salud y enfermedad, acerca de las personas en situación de calle.

Llanos C.
60
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
patológico. Ya no se trata de una variación del nacimiento de la clínica publicado en 1963 (2001),
estado normal, idea que surge como consecuen- puede ya encontrarse la idea de que el lenguaje
cia de considerar la medicina desde el racionalis- opera como un dispositivo de poder en la institu-
mo de Broussais -quien señala que no existe una cionalidad médica, que posteriormente se extra-
realidad del mal- sino que se trata de entender pola a lo social. En La historia de la locura (1993),
que estar enfermo “significa verdaderamente también puede encontrarse mecanismo que van
para el hombre vivir una vida diferente inclu- configurando desde el saber, como se delimita
so en el sentido biológico de la palabra” (p.60), lo “anormal” y en Seguridad, territorio y población
con lo que la enfermedad debe entenderse como (2006b) afirma:
otro estado del viviente, que existe por sí mismo
y no como variación. “La disciplina fija los procedimientos de adiestramiento
Si bien, en perspectiva de Canguilhem es di- progresivo y control permanente y por último, y a partir de
fícil afirmar que existen ciencias encargadas de ahí, distingue entre quienes serán calificados como ineptos e
estudiar lo normal y lo patológico, el autor re- incapaces y los demás. Es decir que sobre esa base hace una
conoce que en el plano empírico, todas operan partición entre lo normal y lo anormal. La normalización
bajo alguna preconcepción de lo que se entiende disciplinaria consiste en plantear ante todo un modelo, un
como normal o sano, donde justamente estarían modelo óptimo que se construye en función de determina-
actuando de manera imbricada, contenidos mé- do resultado y la operación de normalización disciplinaria
dicos y culturales. Por lo tanto, precisa que lo pasa por intentar que la gente, los gestos y los actos se ajus-
normal, es un concepto equívoco que puede defi- ten a ese modelo, lo normal es precisamente, lo que es capaz
nirse como aquello conforme a la regla o norma, de adecuarse a la norma y lo anormal, lo que es incapaz
lo que debe ser promovido, o lo que mantiene de hacerlo” (p. 75)
su justo medio. En medicina, refiere a una con-
dición ideal a la que se aspira, un valor, lo que Esta normatividad que se establece por una
se diferencia de normatividad en la medida que tendencia específica de la vida biológica en
“En el pleno sentido de la palabra, normativo Canguilhem, opera de un modo diferente en la
es aquello que instituye normas. Y en ese senti- vida cultural, y podríamos decir política, en pers-
do, nos proponemos precisamente hablar de una pectiva de Foucault. La normatividad es en este
normatividad biológica” (2011:92). contexto una normalización siempre disciplina-
En razón de esto, Canguilhem observa que la ria, que opera como aquello a lo que la norma
vida es un estado de lucha que siempre tiende tiende, pero ya no en clave biológica, sino que
a la normalidad específicamente en términos conforme a una voluntad de poder que instaura
biológicos (aquí se apoya en Bichat) -- pues hay sentido (Foucault, 1995), delimitando aquello que
patología biológica y no química o física-- por debe entenderse por normal-anormal, y que es
lo que concluye que biológicamente la vida es puesto en marcha a través del ejercicio del poder
la prolongación de esa lucha por alcanzar un mediante las instituciones, estableciendo todo un
estado positivo, y por consiguiente, se mueve régimen de veredicción.
no desde una indiferencia biológica, sino que En la Historia de la sexualidad (2006a), escri-
desde una normatividad vital, donde lo normal to trece años más tarde que el Nacimiento de la
es aquello capaz de ser normativo de darse la clínica3, Foucault explica con gran lucidez la
norma. Resulta así posible afirmar, que no exis- progresión que hay desde un tiempo históri-
te un hecho normal o patológico propiamen- co donde la sexualidad se vivía libremente, a la
te tal, puesto que la normalidad o lo normal, instauración de una censura que procede por
proviene de su normatividad. Entonces cabe la “blanqueamiento del discurso”, eliminando del
pregunta ¿Cómo opera el concepto de normati- lenguaje todo aquello relacionado con la sexuali-
vidad biológica en el ámbito cultural y como esto dad. Posteriormente, a partir del siglo XVIII se
afecta al viviente en situación de calle? Foucault lo implementa un movimiento contrario que tiene
explica refiriendo a los procesos de normalización la forma de una “proliferación de los discursos”,
desde la relación saber-poder, por ejemplo, en El que corresponde a la incitación institucional,
3 El Nacimiento de la clínica es uno de los primeros trabajos de Foucault y es rescatado aquí en tanto pone en evidencia la in-
fluencia que recibe de Canguilhem, aunque puede apreciarse con matices en otras de sus obras. Esto es muy relevante para la re-
cepción biopolítica de su obra. Según Adán Salinas, es posible afirmar que la recepción foucaultiana se desarrolla principalmente
en las líneas de los estudios de gubernamentalidad del ámbito anglosajón y la recepción biopolítica realizada por autores italianos
pero con difusión mucho más amplia y traducciones a diversos idiomas, donde precisamente ésta se vincula con la inmunización.
Ver Salinas, A (2014) La semántica Biopolítica. Foucault y sus recepciones. Viña del Mar, Cenaltes ediciones.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 59-67


61
de carácter racional, al hablar de sexualidad, no “La enfermedad es aún norma de vida, pero es una
para producir un efecto liberador, sino que con norma inferior en el sentido de que no tolera ninguna
la finalidad de conocer, “saber”, cómo se vive la desviación de las condiciones en las que vale, puesto que
sexualidad en la población y desde ahí, establecer es incapaz de transformarse en otra norma. El ser vivo
normas, conceptos y categorías que delimitan enfermo está normalizado en condiciones de existencia de-
y disciplinan las conductas que deben tomarse finidas y ha perdido la capacidad normativa, la capacidad
como “normales” y aquellas que deben consi- de instituir diferentes normas en condiciones diferentes”
derarse como “patológicas” o “desviadas” como (Canguilhem, 2011, p.139).
ocurrió con la homosexualidad, donde opera
la misma censura, pero esta vez transfigurada Son entonces pertinentes las preguntas acerca
(2006a:34). Este ejercicio genealógico sobre lo de si la enfermedad es un estado normal, pero
que el autor denomina La historia de la sexua- inferior del viviente, donde éste ha perdido la
lidad, revela como la estructura de poder-saber, capacidad de normatividad ¿quién normaliza al
opera en distintos ámbitos de la sociedad, don- enfermo-a en situación de calle? Estar enfermo-a
de el discurso se posiciona como mecanismo de es la normalidad de los sujetos en calle, su lucha
disciplinamiento, constituyendo así, campos de constante y su estatuto ontológico inferior, por
inclusión de lo normal y exclusión de lo anor- tanto, la enfermedad es potencial de crítica y una
mal, delimitando sentidos y transmitiéndolos fisura respecto de como el saber-poder disciplina
hasta la aceptación de su condición de norma a estos sujetos ¿Existe conocimiento médico-so-
por toda la población. cial que se dirija al entendimiento de tal situación?
La normatividad biológica explicada por ¿Ese conocimiento se instituye desde la exclusión
Canguilhem, alcanza una dimensión política o profundización de la problemática? ¿Cuáles son
con la normalización en sentido foucaultiana, los elementos u omisiones que desde la medici-
que mediante el ejemplo de la sexualidad, deja na van excluyendo al enfermo-a en situación de
ver un control de los cuerpos y las subjetivida- calle? ¿Son efectivamente elementos médicos u
des, mediante la gestión del género y la especie. otros que exceden el campo de lo médico? En
Tres ideas fuerza podemos extraer del binomio este punto es importante reconocer que las accio-
normatividad-normalización aplicado al enfer- nes y exigencias de los médicos al vincularse con
mo-a en situación de calle, además de una im- los enfermo-as en situación de calle y los recla-
portante tarea. mos provenientes desde la sociedad civil a favor
En primer lugar hay que pensar y re-pensar, el de ellos, constituyen acciones de visibilización
estatuto ontológico del enfermo-a en situación de que desde sus posibilidades, demandan un trato
calle. Así como curre con la enfermedad, conce- digno para los sujetos. Tales acciones se posicio-
bida en principio como variación y por ello desde nan como una especie de resistencia a la estruc-
una no entidad o no existencia; ocurre también tura de la implementación de política de salud en
con el enfermo-a en situación de calle invisibili- Chile, que es de carácter altamente excluyente y
zado ¿existe el enfermo-a en situación de calle? selectiva, y que además mercantiliza los derechos
¿Qué elementos respaldan su condición? Al pa- básicos de las personas, de una mera tan radical,
recer no es suficiente plantear el problema en tér- que lo político mismo pareciera diluirse.
minos de dignidad humana por lo que al menos A la consideración del estatuto ontológico y la
se debe pensar en ¿cómo se visibiliza el enfermo-a lucha por la vida del enfermo-a en situación de ca-
en calle desde el campo de la medicina? ¿Con pro- lle, hay que agregar el desplazamiento que sufren
tocolos de intervención, estudios de mortandad estas personas, en cuanto quedan excluidas pro-
y/o conocimientos respecto de sus enfermedades ducto de un proceso de normalización en sentido
predominantes? foucaultiano, donde las PSC forman parte de la
Tanto la enfermedad como la categoría en- sociedad, pero relegadas a un ámbito muy especí-
fermo-a en situación de calle, poco a poco van fico, el de lo enfermo, lo anormal, lo “insalubre”
apareciendo como una condición que debe abor- e “indeseado”. En este punto surge el peligro o
darse por sí misma y no únicamente como des- situación límite respecto del abordaje de la cate-
viación de la norma relegada al campo de la ano- goría del enfermo-a en situación de calle, puesto
malía; donde la normatividad biológica en tanto que siempre puede resultar contraproducente el
lucha por la vida, es a su vez la forma de vida nombrar y abrir líneas de acción que, más que fo-
como constante lucha que sostienen las PSC, lo calizar la enfermedad como una constante de la
que se expresa en: situación de calle con la finalidad de trabajar por

Llanos C.
62
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
la restitución de derechos de tales sujetos, opere de aquellas acciones que afirman esos procesos
como un elemento estigmatizador. Más que una excluyentes de normalización en la construcción
nueva normalización, en este caso, el saber debe del “enfermo-a en situación de calle”. Tal acción
estar orientado al potencial uso que reporta desde deja ver además un escorzo ético, en tanto auto-
una mirada socio-educativa, puesto que abre pers- res como Agamben y su concepto de nuda vida
pectivas en torno a qué hace una fundación, un entendida como “vida desprotegida a la que cual-
albergue, un cesfam, un-a trabajador-a social ante quiera puede dar muerte” (2006:18) o Améry, tor-
un “enfermo-a en situación de calle” con especial turado en Auschwithz, señalan que la sistematici-
atención en su condición. dad de prácticas violentas a las que son sometidos
Tal perspectiva se explica con mayor claridad, al los sujetos bajo ciertas condiciones, pueden llevar
mirar el contexto macroestructural en que se dan a la destrucción o vaciamiento total de su volun-
las relaciones entre el enfermo-a en situación de tad, de su subjetividad, reduciéndoles a materiali-
calle y el médico o funcionario con que el sujeto dad pura, en palabras de Améry: fui obligado a ser
se vincula y aquí es donde el bíos de la biopolítica lo que no era (2013).
se expresa con fuerza: el enfermo-a en situación
de calle, es una persona en una especial condición 3. SEGUNDO NUDO CRÍTICO
de vulneración, en tanto sus derechos no han sido ¿CUÁNDO LA ENFERMEDAD EN
garantizados por el Estado, al mismo tiempo que SITUACIÓN DE CALLE CONSTITUYE
presenta una fragilidad vital dada por su estado pa- UN PROBLEMA SOCIAL? EL
tológico, donde todo lo que ocurra desde que el PARADIGMA DE LA INMUNIZACIÓN
sujeto se percibe enfermo y acude a algún centro
hospitalario, hasta que recibe el cuidado pos hos- A fines de 2019 se realizó la primera sesión de
pitalario y mejora su estado de salud, son fragili- trabajo del grupo de estudios de la FGC, focali-
dades que fácilmente pueden caer en el maltrato y zada en esa ocasión en la temática de salud y en-
las violencias. En otras palabras, visibilizar la con- fermedad en situación de calle. De entre todos los
dición de enfermo-a en situación de calle, obliga a testimonios entregados por los trabajadores, dos
la personas que se relaciona con él a comprender ideas se reiteran y conducen el diálogo: “de todas
que ambos están inmersos en una relación de po- las áreas en que he trabajado colaborando con PSC,
der en la cual se puede actuar como represor desde la salud siempre es problemática, siempre presenta
perspectivas excluyentes, o como agente capaz de algún conflicto…” y por otra parte, “es diferente
generar una ruptura humanizante, en medio de tal cuando las PSC van solos a hacer algún trámite o a
entramado de exclusión normalizada. pedir medicamentos, no lo consiguen. Cuando los
El enfermo-a en situación de calle, es profun- acompaña un trabajador social es distinto”.
damente vulnerado cuando su condición no se Entre algunos de los casos que se problema-
reconoce ni visibiliza, porque hay que considerar tizaron, destaca el de una persona enferma en
que en su trayectoria vital ha sido disciplinado-a situación de calle en la localidad de Curacaví,
por una burocracia que muchas veces le niega la donde por acción de terceros, es ingresada a un
atención médica o el trato digno, introyectando en centro médico. Según registros de la institución,
su subjetividad, la creencia de que es mejor resol- la persona es atendida, “evidencia lucidez ab-
ver tal situación por sí solo, sin recurrir a la ins- soluta”, pero posteriormente se fuga del lugar.
titucionalidad médica, donde se va construyendo En el momento en que las trabajadoras de la
la imagen de que él es el único responsable de su Fundación acuden al lugar, encuentran a la PSC,
situación y que la gran cantidad de personas en- sin identificación, desorientado, con “alteracio-
fermas en situación de calle, no corresponde a un nes en su estado de salud mental”, movilidad re-
problema del ámbito social. ducida y en condiciones de insalubridad que son
En la relación de poder, el enfermo-a en situa- evidenciadas por la Trabajadora social del centro
ción de calle es el débil. La tarea se dirige enton- médico: “la persona está hedionda” . El pro-
ces, a la identificación de aquellas acciones prove- blema que surge, es que al momento de reunir
nientes de la institucionalidad médica y jurídica, la información, van apareciendo relatos contra-
que construyen al enfermo-a en situación de calle dictorios por parte de carabineros, la trabajadora
como excluido y responsable de su situación, tan social y otros funcionarios de la institución, que
funcional para el contexto neoliberal. El desafío finalmente conducen a levantar una sospecha
metodológico en este punto, es lograr la integra- acerca de lo ocurrido con esa persona, donde
ción de teoría y praxis, a través del reconocimiento la credibilidad del sujeto en situación de calle

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 59-67


63
parece no tener ninguna relevancia en el asunto. aludida. Es en este sentido en que es posible
Finalmente, no se esclarece si recibió atención o afirmar que los problemas de los enfermos-as
si efectivamente se fugó del lugar. en situación de calle, si bien se relacionan con la
La complejidad de esta situación, radica en que medicina fisiológica, trascienden a este campo
ella no es un hecho aislado, mas bien, se constituye para insertarse en el ámbito político-social de
como el reflejo de toda una institucionalidad que la praxis médica. De esta manera y más allá del
muchas veces abandona a las personas en situa- caso de “abandono” en la atención del hombre
ción de calle. Sea por falta de recursos, de conoci- antes mencionado, la enfermedad en las PSC
mientos, de respaldos legales, de incumplimiento se posiciona como un tema de interés público,
del trabajo, de empatía, etc. Los enfermos-as en únicamente cuando genera otros problemas o
situación de calle, ven mermadas sus oportunida- amenaza la vida en “común”, es decir, que se
des de acceso a salud primaria de calidad. actúa no por ellos, si no por los otros.
Una hipótesis fuerte en relación con la atención Un caso ejemplificador es el hecho de que a ini-
médica y las decisiones institucionales de carác- cios del año 2019, hubo una proliferación de car-
ter político respecto de las PSC, es que tras este pas como mecanismo de refugio que utilizaban y
tipo de acciones u omisiones, estaría operando el utilizan al día de hoy las PSC, particularmente en
paradigma de la inmunización, considerado como el sector de la “Alameda”. A partir de esto, se ge-
una profundización o radicalización del binomio neraron una serie de acciones que tenían por obje-
normatividad-normalización. tivo que las PSC salieran de ese lugar. Claramente
La inmunización corresponde a una categoría no para promover su bienestar, sino que la razón
que se alimenta tanto de un léxico biológico-mé- se encontraba fundamentalmente, en los proble-
dico, como de uno jurídico-político y se expresa mas que generaban a la comunidad, entre ellos in-
mediante relación entre ley y violencia, donde al salubridad y suciedad. Esta situación, interpretada
peligro que amenaza lo común en el sentido de co- desde el paradigma de la inmunización, señala que
munitario (Esposito, 2012), le corresponde la de- cuando la vida en comunidad es insostenible o se
fensa cada vez más concreta de lo inmune, puesto encuentra en peligro, “debe ser esterilizada pre-
que la inmunización tiene la figura dialéctica de la viamente contra su inherente contenido relacio-
exclusión incluyente, en tanto afirma negando. Es nal. Inmunizada contra el munus que la expone
una estrategia, una metodología que aparece como al contagio con aquello que la sobrepasa desde
una reacción, más que una propia fuerza y opera su propio interior” (Esposito, 2012:24), de esta
como un contragolpe que impide a su contrario manera se intenta “eliminar” a las PSC, pero no
manifestarse. Por lo tanto, presupone la existen- “erradicar la situación de calle”, clara expresión de
cia de aquello que debe confrontar, como un mal, la perversión de una inmunización radicalizada.
en este caso la situación de calle que nadie quie- La pregunta investigativa se dirige nueva-
re padecer; se reproduce en forma controlada ese mente hacia el reconocimiento de aquellos ele-
mal del que se debe proteger, avanzando en una mentos, que tanto en la praxis médica, como
confrontación que no es frontal sino que procede la experiencia vital del enfermo-a en situación
desde el rodeo y la neutralización. Esto significa de calle, coincidan en su interpretación desde la
que existe un carácter estructuralmente aporético inmunización, lo que exige un profundo cono-
del procedimiento inmunitario, pues no alcanza su cimiento tanto de los testimonios de los sujetos
objetivo de manera directa, donde el enfermo-as en en calle, como del funcionamiento más concre-
situación de calle, es depositario de esa exclusión y to de los centros hospitalarios que se relacionan
normalización estigmatizadora antes mencionada, con enfermo-as en situación de calle.
donde se le construye como un “mal” una inmuni- Finalmente, es relevante enunciar en este se-
zación exagerada y de connotación negativa. gundo nudo crítico, que el ejemplo más claro de
En el caso de las PSC, tanto en salud como en inmunización hacia los enfermos-as en situación
otras dimensiones de su vida, como por ejem- de calle, particularmente en Chile, es observa-
plo la seguridad social o el acceso a la vivienda, ble en tiempos de pandemia, puesto que, en caso
es posible apreciar que existe una instituciona- de que exista una preocupación médica por la
lidad que opera a través de medidas que van condición de salud y enfermedad de las PSC ¿se
gestionando la vida de estas personas, pero que trata de un intento por mejorar sus condiciones
finalmente no trabaja por la erradicación de tal de vida o más bien de una medida de protección
situación, más bien “soporta” la existencia de del resto de la sociedad en tanto operan como
tales sujetos como aquella negatividad antes foco o vectores de contagio?

Llanos C.
64
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
Considerados estos puntos, es posible poner no es solo eso, a la enfermedad física y mental, así
de relieve cómo la salud pública tiene una tre- como también a los cuidados.
menda potencialidad para que desde su cono- Al mismo tiempo, es reiterativo el hecho de que
cimiento y praxis, pueda contribuir a las mejo- vivir en situación de calle en estado de enferme-
rías en las condiciones de salud de los sujeto-as dad, es un elemento que dificulta salir de ella, ya
enfermo-as en situación de calle, a partir de la sea porque le resta autonomía los sujetos, les difi-
incidencia y posicionamiento de la temática, culta el ejercer trabajo y el acceso al empleo e in-
como un asunto de interés público, reconocien- clusive, porque limita las posibilidades de ingreso
do que la raigambre del problema es de corte a residencias o albergues; a partir de lo que resulta
político y de carácter urgente. posible constatar, cómo la enfermedad va fijando
Metodológicamente, y para efectos de la inves- y cronificando a las personas en tal condición. De
tigación en curso, el cruce entre los testimonios esta manera, se reafirma la idea de que la enferme-
de los enfermo-as en situación de calle, de los dad en situación de calle o la enfermedad como
trabajadores que realizan acompañamientos y de causa de ella, se constituye como un hito decisivo
la institucionalidad médica, se constituye como en la vida de estas personas y se expresa como
un diálogo que ayuda a transparentar las condi- una constante, evidenciando una asociación “casi
ciones reales de inmunización en que se encuen- constitutiva” entre vida en calle y estado patoló-
tran inmersos los sujetos que viven, enferman gico, en palabras de Canguilhem, la enfermedad
y mueren en calle, entendiendo que en el actual es la norma sin normatividad biológica y norma-
contexto de neoliberalismo, se presenta una radi- lizada socialmente. A lo que agregamos luego de
calización de factores des-humanizantes en des- abordar los nudos críticos anteriores: desde un
medro de aquellos gestos de humanidad. perspectiva de la cual es necesario inmunizarse,
lo que es asumido por la PSC con una profundi-
4. TERCER NUDO CRÍTICO ¿DE QUÉ dad tal, que muchas veces se expresa en el hecho
HABLAMOS CUANDO HABLAMOS DE de que la preocupación del día, gira en torno a la
SALUD Y ENFERMEDAD EN LAS PSC? posibilidad de conseguir medicamentos o acceso
a la atención, configurándole el sentido vital del
Sin duda que al plantear el tema de la salud y día al enfermo-a.
enfermedad en las PSC estamos refiriendo a los Según los datos que arroja el Registro Social Calle
sujetos y a una dimensión vital en ellos de carácter (en adelante RSC), encontramos que en su actualiza-
fisiológica, más específicamente. No obstante, es ción vía transparencia a mayo del 2019, de las 14.239
importante destacar que tales sujetos se encuen- PSC entrevistadas, el 53,27% de los encuestados se-
tran en una condición particular de precarización ñala que posee alguna dificultad física permanente,
de su vida, por lo que no enferman como enfer- de los cuales el 42% no recibió tratamiento en los
mamos todos, ni mueren como morimos el co- últimos 12 meses. Cuando se trata de enfermedades
mún de las personas que no vive en la calle. Estas crónicas, el 39,7% indica no haber recibido trata-
particularidades, como un mínimo gesto ético e miento en los últimos 12 meses y al abordar el tema
inclusive como un recurso médico a la hora de de salud mental, sólo el 17,4% señala que recibe tra-
realizar la atención, deben ser visibilizadas4 y res- tamiento (MIDESO, 2019). A estas cifras que ayu-
tituida la salud como derecho. dan a construir una visión sobre los estados de salud
Una constante que aparece tanto en los testi- y enfermedad en calle, pero que deben ser revisadas,
monios de las PSC, como en el de los trabajado- hay que sumar otros factores que dificultan la vida
res de la FGC, es que aunque se reconozca que de las PSC, como por ejemplo el consumo proble-
la situación de calle es un fenómeno complejo y mático de alcohol y otras drogas duras, las adversida-
multicausal, la salud puede constituirse como una des que presenta la temporada de invierno, la situa-
causa de llegar a encontrarse en situación de calle, ción de los adultos mayores, el caso de las mujeres y
específicamente cuando se trata de enfermedades el embarazo y anticoncepción en situación de calle,
catastróficas de otros, a quienes se debe cuidar y la prostitución, la cronificación en calle, las escasas
que reportan grandes gastos económicos; o en condiciones de higiene y deficiente alimentación,
casos como cuando se habla de adicciones y pro- etc. De esta manera, es posible observar que aunque
blemas vinculados a la salud mental, pero la salud el concepto de salud se ha ampliado y enriquecido

4 En esta línea, la Fundación Gente de la Calle propone caracterizar complejidades y diferenciar vulnerabilidades. Ver https://
www.gentedelacalle.cl/wp-content/uploads/2017/11/Propuesta-Nacional-Erradicaci%C3%B3n-Situaci%C3%B3n-Calle-Fun-
daci%C3%B3n-Gente-de-la-Calle-Octubre2017.pdf

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 59-67


65
para la mayoría de los ciudadanos, en el caso de las conjunto de factores dados por el saber médico,
PSC sigue limitándose a la enfermedad, pero de un las leyes, las políticas públicas y las atribuciones
modo complejo, en tanto el problema de la salud y del entorno social; por otra parte, valorizando la
enfermedad en las PSC, no se reduce a lo fisiológico autopercepción de las PSC, desde la configura-
ni puede abordarse de un modo individualizado, ya ción de sus subjetividades, vinculando esto con
que se encuentra entramado con muchos otros ele- un tercer insumo, dado por el análisis crítico de
mentos propios de las dinámicas de la situación calle quienes constantemente se relacionan con ellos
y de la organización social. como trabajadores. Esto implica reconstruir un
Tales cifras, apoyan la idea de que estas perso- tejido de significaciones múltiples mediante un
nas viven la mayor parte de su vida desde estados ejercicio de valoración del testimonio como
de enfermedad. Por esta razón, surge la necesidad una especie de memoria o vivencia que expre-
de trabajar con la categoría de “enfermo-a en si- sa y construye realidades, donde la subjetividad
tuación de calle” tal como aquí se ha presenta- del enfermo-a en situación de calle, no es in-
do, poniendo énfasis en el estado patológico, en troyectada desde el exterior. Tal decisión meto-
cuanto en ella hay un reconocimiento y afirma- dológica, opera como una estrategia de visibi-
ción de que éste corresponde a la constante de la lización de la situación concreta de la salud en
vida en calle. Esta categoría, no es tomada de las situación de calle, que valoriza la materialidad
ciencias sociales ni del paradigma de la inmuniza- de los sujetos, en contraposición a una perspec-
ción, tampoco de estudios que aluden a la proble- tiva de carácter más institucional, que no menos
mática calle, más bien, se propone como uno de importante, se posiciona como predominante.
los desafíos que intenta abordar la temática, desde El enfoque anterior, que podría señalarse como
la visibilización de la precariedad en que sobre- de carácter metodológico, se apoya en el linea-
viven tales sujetos, valorando el nombrar la en- miento que desde hace algunos años viene tra-
fermedad, por sobre la ambigüedad o positividad bajándose en la FGC y que en algunos casos es
que pudiese representar el apelativo “situación de tendencia a nivel regional (Arellano, 2019), que
calle”, que finalmente se traduce en la atenuación consiste en acompañar y promover experiencias
de los problemas que se están evidenciando, en que potencien procesos de empoderamiento de
torno a la salud. De manera que la categoría “en- los sujetos, con la finalidad de promover la au-
fermo-a en situación de calle” invita a que al me- tonomía de las personas en situación de calle, en
nos contemos con una caracterización objetiva y vistas de autopercibirse como sujetos de dere-
consistente del sujeto en cuestión. chos, donde el trabajo se desarrolla bajo una pers-
El hecho de reconocer la particularidad de la pectiva no tutelar ni asistencialista (Di iorio en
vida en calle desde la categoría “enfermo-a” en Arellano, 2019). Las principales líneas de acción,
situación de calle, opera por otra parte, como estarían constituidas en este punto por el rescate y
un reposicionamiento compensatorio, que busca sistematización de relatos de PSC, así como tam-
visibilizar y valorar la dignidad de las PSC como bién, por la experiencia que los trabajadores de la
sujeto-as de derechos, específicamente en mate- FGC, particularmente el área socio jurídica y el
rias de salud pública y valorando a la medicina en voluntariado Fraternidad, comenzaron a realizar
su praxis ética, en tanto “es un arte destinado a en conjunto con centros hospitalarios desde al
responder al llamado de un viviente humano en año 20105 (FGC, 2011).
estado de desamparo” (Lecourt, 2008, p.49).
Ahora bien ¿cómo se construye esa categoría? 5. CONSIDERACIONES FINALES
Es el desafío que viene. Se propone que su abor-
daje corresponde a una tarea que debe realizarse Si bien, la vida de las PSC es una materialidad
siempre analizando como mínimo dos ejes: por que en muchos aspectos se resiste en su aborda-
una parte reconociendo tanto los elementos que je, con lo señalado anteriormente se adelanta la
son externos al sujeto y que van configurado relevancia de al menos pensar la enfermedad en
su construcción “social”, como por ejemplo el calle desde una perspectiva biopolítica orientada
5 Ver Memoria 2011 “La Fundación Gente de la Calle inició en el transcurso del año 2010 un esfuerzo de acercamiento con al-
gunos servicios públicos de salud con el objeto de facilitar el acceso de sus usuarios a diversas prestaciones en medicina general,
geriátrica, enfermedades respiratorias, VIH, salud mental, desintoxicación y otras urgencias. Entre otros, con el Instituto José
Horwitz Barak, el Instituto Nacional del Tórax, la Posta Central de Santiago, el Consultorio de Recoleta, el Consultorio Padre
Orellana de Santiago y el Complejo Hospitalario San José. En este contexto, se constató la presencia de Personas en Situación de
Calle, no sólo en las inmediaciones y dependencias de algunos servicios, sino también, como pacientes hospitalizados, lo que, en
ambos casos, tenía múltiples implicancias tanto para las Personas en Situación de Calle como para los propios centros de salud”.

Llanos C.
66
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
al reconocimiento de la lógica inmunitaria, como las ciencias de la vida. Madrid, Amorrortoru
afirma Preciado en su reflexión a propósito de la Editores.
pandemia por covid-19: • Castro, E. (2008) Biopolítica de la sobera-
nía al gobierno. En Revista Latinoamericana
“Roberto Esposito nos enseña que toda biopolítica es de filosofía, vol xxxiv, N°2.
inmunológica: supone una definición de la comunidad y el • De la Aldea, E. (2019) Los cuidados en tiempos
establecimiento de una jerarquía entre aquellos cuerpos que de descuido. Santiago de Chile, LOM.
están exentos de tributos (los que son considerados inmu- • Espósito, R. (2005) Inmunitas Protección y ne-
nes) y aquellos que la comunidad percibe como potencial- gación de la vida. Buenos Aires, Amorrortoru
mente peligrosos (los demuni) y que serán excluidos en un Editores.
acto de protección inmunológica” (2020, p. 165). • (2011) Bíos Biopolítica y filosofía. Buenos
Aires, Amorrortoru Editores.
La perspectiva biopolítica inmunitaria, es una • (2012) Comunitas Origen y destino de la comuni-
de las lecturas posibles tras la recepción biopolíti- dad. Buenos Aires, Amorrortoru Editores.
ca foucaultiana, que nos posibilita develar la vio- • Foucault, M. (2001) El nacimiento de la clínica.
lenta estructura que subyace a la sociedad en que Buenos Aires, Siglo XXI editores.
vivimos y el sentido desde el cual configuramos la • (1985) La microfísica del poder. Buenos Aires,
comunidad y todos sus elementos constitutivos, Siglo XXI editores.
donde es necesario reconocer que la exclusión in- • (1993) Historia de la locura I. México, Fondo
clusiva a la que están sometidas las PSC, ocurre de cultura económica.
en la lógica de una violencia estructural que urge • (2006a) Historia de la sexualidad. La voluntad
ser cuestionada y revertida, en tanto “Comunidad de saber. Madrid, Siglo XXI.
e inmunidad comparten una misma raíz, munus, • (2006b) Seguridad, territorio y población.
en latín el munus era el tributo que alguien debía Buenos Aires, Fondo de cultura económica.
pagar por vivir o formar parte de la comunidad” • Fundación Gente de la Calle (FGC) (2011)
(2020:165). Trabajar sobre la categoría del enfer- Memoria Institucional. Chile. Recuperado
mo-a en calle, su normalización en sentido polí- de internet el 20 de marzo de 2020: http://
tico y su exclusión inmunizadora, constituye una www.g entedelacalle.cl/w p-content/
posibilidad de abordaje crítico en el entramado uploads/2014/12/Memoria_2011.pdf
de la institucionalidad médica y de la biopolítica • Goyenechea, M. (2019) Estado subsidiario
que hoy está aconteciendo desde su cariz más segmentación y desigualdad en el sistema
negativa. de salud chileno. Cuadernos médico sociales, 59,
2, 7-12.
REFERENCIAS • Lecourt, D. (2008) Georges Canguilhem.
Buenos Aires, Ediciones Nueva Visión.
• Agamben, G. (2006) Homo sacer. El poder • Lemke, T. (2017). Introducción a la biopolítica.
soberano y la nuda vida. Valencia: Editorial México D. F., Fondo de cultura económica.
Pre-textos. • Ministerio de Desarrollo Social (MIDESO)
• Améry, J. (2013) Más allá de la culpa y la ex- (actualizado Mayo 2019) Registro social
piación. Tentativas de superación de una víctima Calle. Chile.
de la violencia. Valencia, editorial Pre-textos. • Preciado, P. (2020) Aprendiendo del virus.
• Arellano, N. (2018) Situaciones de calle. En Sopa de Wuhan Pensamiento contemporáneo
Abandonos y sobrevivencias miradas desde la en tiempos de pandemia. ASPO.
praxis. Chile, Argentina, Costa Rica, México. • Salinas, A. (2014) La semántica Biopolítica.
Santiago de Chile: Ril editores. Foucault y sus recepciones. Viña del Mar,
• Cangilhem, G. (2011) Lo normal y lo patológi- Cenaltes ediciones.
co. Madrid, Siglo XXI editores.
• (2005) Ideología y racionalidad en la historia de

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 59-67


67
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 69-77 ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

Estado de excepción y fuerza de ley:


La vida social de los cuerpos muertos de
Personas en Situación de Calle (2008-2018)1
State of emergency and force of law: the social life of the dead bodies of
Homeless Persons (2008-2018)
Nelson Arellano Escudero2

RESUMEN

E l problema de las vidas en estado de excepción y sometidas a la violencia de la fuerza de ley nos si-
túa en la necesidad de dimensionar y conocer en primer lugar el alcance y magnitud de unas muer-
tes que quedan subsumidas en estadísticas que no prestan atención a la peculiaridad del modo
de vida de las PSC, tal como tampoco lo hacen los censos nacionales que, desde el siglo XIX, insisten en
eliminar evidencia de su existencia. Se abre aquí la pregunta por la vida social de los cuerpos muertos de las
PSC y la necesidad de retratar un proceso mortuorio y funerario que no ha sido abordado. Combinamos
elementos del estudio de los ritos relativos a la funebria con una historiografía cementerial sostenidos por
una lectura de la historia social e historia de la ciencia y la tecnología.
El estudio es de carácter exploratorio-comprensivo y recurre a la triangulación de métodos cuantitativos,
cualitativos y de humanidades para responder al objetivo general que persigue describir los flujos de los
cuerpos muertos de personas en Situación de calle en Chile, del que se desprenden 2 objetivos específicos:
1. Conocer el volumen de Personas en Situación de Calle fallecidas en el periodo 2008-2018 en Chile según
los criterios de Fundación Gente de Calle y de acuerdo a las bases de datos disponibles; y, 2. Identificar
el tránsito y destino de los cuerpos de las personas en situación de Calle fallecidas entre 2008 y 2018. El
Plan de Análisis requiere de la participación de múltiples actores para reunir estadígrafos, producción de
información a través de entrevistas y juicio experto de la sociedad civil.
Los resultados de esta investigación podrán colaborar a la sensibilización académica, del ámbito público
y la sociedad en general acerca de una temática de difícil tratamiento y respecto de la cual parece posi-
ble una reivindicación que vincule el quehacer universitario con la constitución de lo político a través de
las personas cuyos derechos han sido conculcados al punto de su invisibilización, incluso después de su
muerte.

Palabras clave: Personas en Situación de Calle – Estado de Excepción – Muerte – Chile.

2. MUERTE EN CALLE Y EL TRÁNSITO DE LOS CUERPOS.

En la labor de la Fundación Gente de la Calle han emergido variados temas asociados a los problemas de
sustentabilidad de las ciudades, en Santiago de Chile, Valparaíso, Concón, Curicó, Rancagua, entre otras, lo
que representa un aspecto de los conflictos urbanos en los que el fenómeno de la situación de vida en la
calle expresa la complejidad de la configuración social del Chile del siglo XXI.

Recibido el 1 de abril de 2020. Aceptado el 2 de junio de 2020

1 Proyecto N° 2019-02-05 Fondos Institucionales de Investigación y Creación (FIIC) de la Universidad Academia de Humanis-
mo Cristiano (UAHC) a ejecutarse en el período 2020-2021.
2 Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC): Instituto de Humanidades, NIDAS/DETLA.
Correo: [email protected]

69
Entre otros aspectos, el de la muerte es una di- obliterado en el patrón de la vía chilena a la recon-
mensión que ha cobrado relevancia dada la fre- ciliación (Lira y Loveman, 1999 y 2000).
cuencia con se presentan situaciones en las que En el plano empírico Fundación Gente de la
la ruptura del lazo social produce la activación de Calle ha presentado antecedentes que demuestran
una serie de enlaces institucionales para atender el la necesidad de focalizar interés en el problema
problema de la disposición de los cuerpos muer- de la muerte de Personas en Situación de Calle,
tos de personas en situación de calle. Una arista reportando a Servicios Públicos cifras que de-
de ello, por ejemplo, ha sido el Proyecto Dignidad ben ser corroboradas: un 20% de 1000 personas
de Fundación Gente de la Calle, que busca cons- atendidas en 4 años fallecieron y el promedio de
truir un mausoleo en el Cementerio General de vida llegó a los 44 años, teniendo el conjunto de
Santiago de Chile destinado a PSC(PSC). Este las personas una esperanza de vida 20 años me-
proyecto ha considerado un catastro por par- nor que el estándar nacional (Monreal, Saldivia y
te de la Escuela de Arquitectura de la Pontificia Bravo, 2015).
Universidad Católica de Chile, que ha revelado Emerge entonces la pregunta que nos guía:
dos datos importantes: aproximadamente un cen- ¿Cuál es la vida social de los cuerpos muertos de
tenar de cuerpos de un total de 222 se encuentran las PSCen Chile? La propuesta busca elucidar el
dispersos en diversas tumbas y que, dado que la problema de la justicia en una funebria generada
mayoría entra allí en condición de gratuidad, la por la tanatopolítica desplegada en la década de
permanencia máxima de los cuerpos es de 2 años, 2008 a 2018, como pasado reciente.
luego de lo cual son destinados a la fosa común.
Sin embargo, no existe información sistemática al 2.1 Justicia.
respecto.
Un proyecto de investigación acerca de la vida Siguiendo a Borja Castro en su análisis de
social de los cuerpos muertos de las personas que “Fuerza de ley” de Derrida (1997), podemos sos-
en vida entraron en un estado de excepción, como tener algunas distinciones acerca de los modos en
es la vida urbana en situación de calle, requiere que persiste la violencia en el Estado a través del
la comprensión de dos elementos: la justicia con derecho y la aplicación de la ley (la forma abstrac-
respecto a esas personas sometidas a la tanatopo- ta de querer ser justo), aunque obviamente se dis-
lítica y las políticas de la muerte con su funebria. tingue de la violencia que es anterior a la del dere-
Esto es también un problema de sustentabilidad cho, aquella con la que se suele explicar el origen
que podemos categorizar como metabolismo ur- del Estado, que sería el nacimiento de la autoridad
bano (Díaz, 2014) y problemas de desigualdad fundada en el piso del derecho.
(González Meyer, 2008). No obstante, Derrida distingue a la justicia, de
La mayor parte de los estudios nacionales recien- toda aplicabilidad de la fuerza de la ley y su vio-
tes, según scielo.cl, acerca de la muerte y ritos fune- lencia, “sea directa, indirecta, física o simbólica,
rarios ha tenido un carácter arqueológico (Muñoz, exterior o interior, brutal o sutilmente discursiva
2012 y 2017; López et al., 2017; Osorio, 2014; –o incluso hermenéutica-, coercitiva o regulativa,
Rojas, 2016; Umire, 2013, Romero et al., 2004; etc.” (p.16). En síntesis, cuando se pregunta por
Andrade et al., 2018). Benavente (2006) realiza una la justicia, no cabe sino un cuestionamiento y dis-
incursión antropológica con énfasis simbólico esta- tinción, al igual que Esposito, respecto al sujeto
bleciendo un recorrido temporal colonial-republi- de derecho, al sujeto de la moral, lo que termina
cano para concluir que la muerte en Chile adquirió estableciendo un gesto deconstructivo hacia el de-
un carácter científico durante el siglo XX. Por otra recho y la política que lo sostiene. Pareciera que
parte, constatamos que la situación específica de la la justicia se traiciona al querer ser justo, y es el
muerte de las PSCha sido materia de investigación derecho el que podría operar pragmáticamente.
fuera de Chile (Alfonso, 2019). Ese gesto complejo nos hace pensar que se
En Chile la investigación acerca de PSC ha sido puede intentar diferenciar las leyes (o la cuestión
bastante acotada y presenta un carácter antropo- del derecho) de la justicia, lo que permite com-
lógico si seguimos los proyectos financiados por prender que se requiere de otra institucionalidad,
FONDECYT (Montecino, 2007; Piña, 2014; Rojas, incluso otro marco democrático, para pensarla (p.
2000) y una acotada producción académica o asi- 27-29-32). Dicho de otro modo, nada garantiza la
milable (Arellano, 2019; Piña, 2010a y 2010b). Esta justicia, por lo mismo, es que requerimos también
situación revela la amplia brecha de investigación pensar otro tiempo y otro entramado institucio-
en un tema social sensible que ha sido silenciado u nal para la justicia, pues existiría un silencio en el

Arellano Escudero N.
70
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
“golpe de fuerza” que implica el derecho y la apli- y las disciplinas de la comunicación dejan en evi-
cación de la ley, y ese silencio sería un fundamento dencia la existencia de una población local que
místico de una autoridad que se requiere para fun- se encuentra en una posición de frontera interna
dar este tipo de institución (p.32-33), implicando pero que ninguna cartografía podría graficar de
una violencia sin fundamento. De este modo, para una manera lineal o modélica.
Derrida, lo único deconstruible/criticable es la Al estudiar este lado, el del control, no es difí-
‘justicia como derecho’, lo que puede abrir una cil adentrarse en las analogías con el arquetipo de
oportunidad política en tanto se comprende que Auschwitz-Birkenau y la industria del exterminio
la justicia en sí no es abordable de forma abstracta (Agamben, 1998, 2000 y 2003). Es que se trata
y universal (p. 35-36) como lo hace el derecho. ya no sólo del problema del gobierno de la vida,
la biopolítica que señalara desde Francia Paul-
2.2 Tanatopolítica y funebria Michel Foucault, o, a la chilena, el gobierno de la
pobreza (Illanes, 2001a 2001b, 2006, 2009 y 2010;
Según se ha establecido en Fundación Gente de Ponce de León, 2011). La muerte de, o el verda-
la Calle (Arellano, 2019) en 2016 hizo un recuen- dero proceso de exterminio de, las personas en si-
to de personas atendidas entre los años 2011 y tuación de calle, podemos considerarlo un evento
2015. El resultado fue un número cercano a las de la imposición de la tanatopolítica, es decir, de
1.000 personas. La cifra ya es estruendosa, si se la administración de la muerte que impulsan las
piensa que esta es solo una de una de las docenas mentalidades del higienismo social y cuyo queha-
de instituciones que brindan apoyo y asistencia a cer no solo es producto de acciones, sino también
las personas que no tienen hogar en Santiago de de una parte más amplia y mucho menos estudia-
Chile. Pero fue todavía peor cuando descubrieron da del comportamiento humano que es la inac-
que 222 de esas personas habían fallecido. Las ción. El universo de los/as habitantes de la calle
edades además muy por debajo de la esperanza es, entre otras cosas, un resultado de las rupturas
de vida que les correspondía. Quedó consignado de los lazos sociales o, en los términos radicales
entonces que vivir como gente de la calle es letal. de la Nuda vida, la pérdida de valor político de
Desde luego es un problema urbano acrecenta- la vida biológica y, por lo tanto, su restricción o
do en las metrópolis y megápolis y que es una no- reducción a la condición ya no de interdicto/a si
ticia bien conocida que no requiere de una extensa no a la de sin voz reconocible.
presentación en tanto la opinión pública cuenta La existencia de este fenómeno en su conjunto
con suficiente información acerca de la existencia puede ser entendido como un trauma social severo,
del fenómeno en una escala internacional e inter- uno que provoca silencio, desconcierto y complici-
continental (Barreiro, 2017) En la contingencia dad en la negación. Su existencia puede despertar
del 2020 dada la pandemia de COVID-19 esto ha sentimientos y emociones de vergüenza e indigna-
vuelto a ser parte de la agenda nacional de Chile ción, pero ello no altera el curso de los aconteci-
luego que se confirmara por parte de las autori- mientos. Esto es necesariamente una muestra de la
dades de salud que: “La octava persona fallecida violencia de la que es capaz el terrorismo de Estado
es una mujer de 44 años de la región del Maule, y la connivencia de la nación.
270 kilómetros al sur de la capital, “en situación En las reglas de hablar y callar que la sociedad del
de calle que llegó grave al Hospital de Curicó” espacio territorial chileno se ha dado encontramos
(EFE, 2020) Además, muchos episodios trágicos un hecho que no puede quedar en el silencio: la aca-
se vienen sucediendo desde el siglo XIX, como el demia, aunque no ha dejado de prestarle atención
que provocó los hechos de la llamada “Isla de los a este complejo fenómeno que es la vida sin casa
caníbales” en la entonces Unión Soviética (Geyer, en la ciudad, en Chile no ha llegado a constituir un
& Fitzpatrick, 2009) que dejan en evidencia la corpus capaz de acompañar las labores de quienes
obsesión oligárquica y plutocrática por la elimi- intentar paliar o revertir el sufrimiento inútil, según
nación de los/as sin casa del paisaje de las ciuda- Emmanuel Lévinas, de las personas que han sido
des. La aspiración es común a todas las formas de arrojadas al pozo de los sin derechos.
gobierno, lo que cambia son sus métodos, don- Aún cuando la producción académica ha existi-
de a través del tiempo se han venido reuniendo do, el diálogo entre los actores sociales y el apor-
las fuerzas de la historia en el darwinismo social, te que allí pudiera ser fructífero, más bien parece
el higienismo y la eugenesia (Leyton y Huertas, que está por iniciarse simplemente porque no ha
2012; Leyton, Palacios, & Sánchez, 2015). La re- habido la densidad de interacción que se requiere.
unión de las humanidades, ciencias sociales, artes El Estado ha realizado inversiones en la labor de

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 69-77


71
comprender el fenómeno de aquellos/as a quienes 2014). Hasta donde ha sido posible pesquisar, las
ya no queremos llamarles vagabundos ni torrantes medidas anunciadas en el oficio 2607 de 2015 no
, mendigos o pordioseros y que, aunque estigma- han sido implementadas, aunque existen bases de
tizados/as, sabemos no son delincuentes, pero datos con las cuales sería posible organizar el re-
cuya categoría social resulta esquiva y equívoca. gistro de personas atendidas por programas so-
Como ya fue descrito, en este estado de calami- ciales orientados a PSCque hayan fallecido en el
dad rutinaria, tramitada por burocracias somno- rango de 2008 a 2018.
lientas y expuestos a la intemperie bajo el sambe- El problema de la vida social de los cuerpos
nito de la condena social que se impone a los y las muertos en el caso de las Personas en Situación
fracasados/as es que se propone reunir diversas de Calle, como ha quedado establecido, constitu-
aproximaciones de disciplinas de lo social y la in- ye un campo de investigación no tratado respecto
tervención social, cuyo lugar de trabajo de trin- del cual cabe concentrar atención.
chera les otorga un lugar que aunque doloroso no La pregunta que esta investigación quiere res-
dejar de ser privilegiado. Son testigos Terstis, en ponder es: ¿Cuál es la vida social de los cuerpos
clave de Giorgio Agamben. Son testigos terceros. muertos de las PSC en Chile? La respuesta a esta
En cierta medida, son Superstes, sobrevivientes a pregunta será capaz de comprender el proceso
los eventos de los que han sido parte, en tanto no mortuorio y funerario de PSC. Se combinan aquí
se puede ocultar el hecho que situarse en la zona elementos del estudio de los ritos relativos a la fu-
de habitabilidad de las PSCconlleva riesgos labo- nebria con una historiografía cementerial sosteni-
rales, generalmente nunca asumidos, pero que en dos por una lectura de la historia social e historia
realidad no tienen el mismo nivel de amenaza que de la ciencia y la tecnología.
para los y las verdaderos/as sobrevivientes, que
son las personas despojadas de acceso a propie- 3. CONOCER UNA VIDA SOCIAL
dad privada para dormir y almacenar enseres. SILENCIADA.
Un punto de partida de ello es el resumen eje-
cutivo del informe Evaluación programas guber- La combinación interdisciplinaria desde una
namentales (EPG), del Programa noche digna sensibilidad etnográfica con un encuadre socioló-
del Ministerio de desarrollo social, Subsecretaría gico en términos de sujeto-Sociedad, abrirá paso
de servicios sociales (Monreal, Saldivia y Bravo, a la interpretación herméutica de la construcción
2015) se incluye el Oficio Ordinario número 2607 heurística de los datos, lo que es posible armoni-
del 11 de septiembre de 2015, rotulado como zar en el registro clave de Peter Burke y su Formas
“Respuesta a Informe Final de evaluación al pro- de hacer historia, donde la historia oral y la historia
grama noche digna de DIPRÉS”, en el que el desde abajo aportan herramientas analíticas y pro-
Ministro Marcos Barraza Gómez se dirige al di- cedimentales capaces de gestionar los objetivos
rector de Presupuestos, Sergio Granados Aguilar. que emanan de la pregunta de investigación.
En este documento se consigna: El propósito de conocer la vida social de los
cuerpos muertos de las PSCpretende describir los
“En relación al número de PSCfallecidas, el Ministerio flujos esos cuerpos muertos en Chile, por lo que
ha desarrollado acciones para determinar la cantidad con se requiere conocer el volumen de PSCfallecidas
exactitud. Desde el inicio del programa, los datos fueron en el periodo 2008-2018 en Chile según los crite-
registrados a partir de las notas de prensa que reportaron rios de Fundación Gente de Calle y de acuerdo
fallecimientos en la vía pública, no obstante, este proce- con las bases de datos disponibles en el país. Así,
dimiento se modifica en 2014. A partir de esa fecha se con la información anterior se pretende identi-
realiza un recuento de fallecidos de acuerdo a la informa- ficar el tránsito y destino de los cuerpos de las
ción registrada en el Sistema Integrado de Información PSCfallecidas entre 2008 y 2018.
Social (SIIS), lo que permite justificar la variación de la Para responder a la pregunta de investigación a
cifra. Bajo la misma línea, se generará un protocolo de través de los objetivos de investigación se ha pre-
registro y sistematización de las PSCfallecidas y causas de visto un diseño de 3 fases:
muerte, para comprobar con ello, el impacto concreto del
programa”. 3.1 Fase Cuantitativa:

Este campo institucional interesa tensionarlo en Se buscará el acceso al Sistema Integrado de


relación al marco analítico que aglutina una con- Información Social (SIIS), bases de datos del pro-
dición de Análisis Social Multicriterio (Arellano, grama Chile Solidario que cubren rangos temporales

Arellano Escudero N.
72
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
distintos. SIIS desde 2006 a 2018 y Chile Solidario y lugar de muerte, además de otras variables.
desde 2015 a 2018, aunque en realidad existe una Este perfil podrá permitir la selección de un
continuidad entre las bases de datos que debe ser rango de 10 a 20 casos en los que se pueda es-
esclarecida. El propósito de estas bases de datos, no tudiar: Lugar de fallecimiento, levantamiento del
obstante, define también ciertos alcances y limitacio- cuerpo, recorrido del cuerpo por las institucio-
nes, en tanto su diseño estaba orientado a generar nes mortuorias y el destino final del cuerpo.
medios de verificación para el control de gestión de El seguimiento de estos casos permitirá esta-
organismos colaboradores del Estado. blecer no solo la trazabilidad sino los códigos y
En contrapartida a lo anterior, y de mane- significados que operan en torno a la situación
ra algo paralela, se mantiene el Registro Social de Estado de Excepción que se constituyó en
de Hogares y también del Registro Nacional el cuerpo de la persona en situación de calle y la
de personas en situación de calle, acotado a las Fuerza de Ley que operó en los procedimientos
personas que han sido atendidas por programas institucionales de administración de la vida so-
sociales abocados a la atención de Personas en cial de su cuerpo una vez muerto.
Situación de Calle. Se estima que esta informa- La fase cualitativa se orienta por una lógica in-
ción tiene carácter público y, por tanto, puede ductiva de integración de fuentes de información
ser accesible, entre otras vías gracias a la Ley primaria y secundaria capaz de contrastar la histo-
de Transparencia de la Función Pública y de ria oral a través de entrevistas a informantes cla-
Acceso a la Información de la Administración ve con el análisis de archivo y/o prensa, registros
del Estado (Ley 20.285). Se estima que podría gráficos o visualidades en general, que permitan la
haber un total de 40.000 casos pertinentes para restitución de la memoria social contrastada con la
los fines de esta investigación. regulación de las defunciones según las leyes asi-
No obstante lo anterior, si esta fuente de in- milables al tema: Código Sanitario, Reglamento de
formación registrase algún tipo de impedimento, Cementerios, Decreto Ley N° 3.500 (Sistema de
Fundación Gente de la Calle podrá disponer de Pensiones de Vejez, de Invalidez y Sobrevivencia),
una base de datos con cerca de 4.000 casos y se Ley N° 20.255 (Seguridad Social; Reforma
estima que otras organizaciones de la Sociedad Previsional) y Ley N° 19.451 sobre trasplante y
Civil interesadas en los resultados de esta inves- donación de órganos.
tigación podrían llegar a suministrar datos de La producción de estos datos se reconoce como
15.000 casos. Estas coberturas apuntan a la tota- información sensible y, por tanto, requiere un tra-
lidad del territorio nacional, pero principalmente tamiento de confidencialidad y apego a las con-
en Santiago de Chile. venciones de ética de investigación.
En esta fase de la investigación una dosis re-
levante de tiempo se debe destinar al análisis de 3.3 Triangulación para conocer los flujos de
la información que suele distorsionar los datos: los cuerpos muertos de PSCen Chile.
por ejemplo, se sabe que los registros de perso-
nas que mueren en albergues, en ocasiones son Esta tercera fase, no consecutiva, comenzará
consignadas como domiciliadas por cuanto falle- con el hito de un Workshop transdisciplinar en
cieron bajo techo, a pesar de no tener hogar. Otro el que participen el equipo de investigación, in-
caso es el de las personas no identificadas y que, vitados de organizaciones de la Sociedad Civil
por lo tanto, se les rotula como “NN”, que es un dedicadas al tema de PSCy personas naturales
grupo donde tanto puede haber PSC como no. que se estime oportuno invitar en función de su
La corrección de estos datos exigirá una revisión conocimiento y/o experiencia en el tema.
manual para su aclaración. En la oportunidad se presentará un informe
de primeros resultados que articule la discusión
3.2 Fase Cualitativa y al mismo tiempo se pueda establecer una vi-
gilancia en el desempeño ético del equipo de
La producción de datos cuantitativos que per- investigación.
mitan establecer el volumen de PSCfallecidas Uno de los hitos con que concluirá la investi-
entre 2008 y 2018 es un excelente referente gación es la edición de un libro que compendie
para establecer categorías relativas a un mues- los principales resultados para favorecer su di-
treo estructural intencionado en el que se com- vulgación y, desde luego, promover la profun-
binen indicadores como sexo, edad a la fecha de dización en el estudio de este tema complejo y
muerte, ubicación geográfica, escolaridad, causa difícil.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 69-77


73
REFERENCIAS

• Agamben, Giorgio (1998) Homo sacer. El • Reflexiones, experiencias e intervenciones,


poder soberano y la nuda vida, Pre-Textos. Viña del Mar, Sangría Editores, 21-42.
Valencia, Traducción: Antonio Gimeno • Derrida, J. (1997). Fuerza de ley El fundamen-
Cuspinera. to místico de la autoridad. Madrid: Technos.
• Agamben, Giorgio (2000) Lo que queda de • Díaz Álvarez, C. J. (2014). Metabolismo ur-
Auschwitz. El archivo y el testigo. Homo bano: herramienta para la sustentabilidad
Sacer III. Pre-Textos. Valencia, Traducción: de las ciudades. Interdisciplina, 2(2) 1-16.
Antonio Gimeno Cuspinera. • EFE (2020) “Los casos de COVID-19 ro-
• Agamben, Giorgio (2003) Estado de ex- zan los 2.500 en Chile y se registra la octava
cepción. Homo sacer II, 1, Pre-Textos. muerte”, Agencia EFE Edición Amériva,
Valencia 2003. Traducción: Antonio Santiago de Chile, 30 de mazo de 2020.
Gimeno Cuspinera. Recuperado de internet el 1º de Abril de
• Alfonso, R., Óscar, A., Barrera, R., Bernal 2020: https://www.efe.com/efe/america/
Forero, P. I., Camargo, D., & Garzón, L. sociedad/los-casos-de-covid-19-rozan-2-
(2019). El ciclo mortal de los habitantes de 500-en-chile-y-se-registra-la-octava-muer-
calle en Bogotá. Teorías, olvidos, políticas te/20000013-4208724#
y desenlaces fatales, Revista de Economía • Falabella, Gonzalo (1970) Desarrollo del
Institucional, 21(41). capitalismo y formación de clase: el to-
• Andrade, Pedro Et Al. (2018) Patrones rrante en la huella, Revista Mexicana
Funerarios E Imposición Colonial En El de Sociología, 32, 1, Memorias del IX
Biobío: El Caso De La Misión San José De Congreso Latinoamericano de Sociología,
La Mocha, Concepción (Siglos Xvii Al Xix). 2 (Jan. – Feb.) 87-118.
Atenea (Concepc.), Dic., no.518, p.133-149. • Geyer, M., & Fitzpatrick, S. (2009). Beyond
ISSN 0718-0462 totalitarianism: Stalinism and Nazism com-
• Arellano, Nelson (2019) Situaciones de ca- pared. Cambridge University Press.
lle: abandonos y sobrevivencias. Miradas • González Meyer, R. (2010). Economía, po-
desde las praxis. Chile - Argentina - Costa lítica y cultura de la desigualdad de ingresos
Rica - México. Santiago de Chile, RIL en Chile. Revista de Economía del Caribe,
Editores. (1), 184-215.
• Arellano, Nelson (2014) Análisis social • Illanes, María Angélica (2001b) “Ella en
multicriterio: reflexiones en torno a la ins- Lota-Coronel: poder y domesticación: el
titucionalidad ambiental en la región de primer servicio social industrial de América
Valparaíso, Chile. Trabajo Social [UNC], Latina”, Mapocho, 49, 1, 141-148;
16(16), 175-186. • Illanes, María Angélica (2001a) En el nom-
• Barreiro, Ramiro (2017) “Cómo sobreviven bre del pueblo, del estado y de la ciencia:
al frío los sin techo de Buenos Aires. El in- historia social de la salud pública Chile
vierno marca temperaturas bajo cero y en 1880/1973: hacia una historia social del si-
la capital argentina 4.400 personas viven en glo XX. Santiago de Chile, segunda edición.
la calle”. El País (España), Buenos Aires 20 Ministerio de Salud;
JUL 2017 • Illanes Oliva, M. A. (2006). Cuerpo y san-
• Benavente Aninat, M. A. (2005). La con- gre de la política. La construcción históri-
cepción de la muerte y el funeral en Chile, ca de las Visitadores Sociales (1887-1940).
Revista Chilena de Antropología. Nº 18, Santiago de Chile: LOM Ediciones;
2005-2006. pp. 93-104. • Illanes, M. Angélica (2009) “Alicias ante
• Castro-Serrano, Borja (2019) “De violen- el espejo. Trabajadoras sociales en busca
cias e instituciones: por otros ajustes tem- de la participación. Chile en los sesenta.”
porales”, Seminario Filosofía y Trabajo Nomadías, 9, 61-91.
Social, 11 y 12 junio 2019, UNAB-UAH, • Lepin, Cinthya y Montecino Soto, Lésmer
Santiago de Chile. (2010). La delincuencia en el discurso de
• De la Aldea, Elena (2008) “Capítulo I. La PSCde Santiago de Chile. Literatura y
importancia de pensar la violencia en su lingüística, (22), 93-102. https://dx.doi.
multiplicidad”, La violencia, las violencias. org/10.4067/S0716-58112010000200007

Arellano Escudero N.
74
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

• Leyton, César, y Huertas, Rafael (2012). • Osorio Gálvez, Camilo and Guerrero
Reforma urbana e higiene social en Lira, Cristián Exequias dedicadas el día
Santiago de Chile: La tecno-utopía libe- 4 de Noviembre de 1817 por el Supremo
ral de Benjamín Vicuña Mackenna (1872- Gobierno de Chile a la Ilustre Memoria de
1875). Dynamis, 32(1), 21-44. los Mártires de la Libertad en la Sangrienta
• Leyton, C., Palacios, C., & Sánchez, S. D. Batalla del 1 y 2 de Octubre de 1814 en
(Eds.). (2015). Bulevar de los pobres: racis- la Ciudad de Rancagua. Cuadernos de
mo científico, higiene, y eugenesia en Chile Historia, Dic 2014, no.41, p.175-188. ISSN
e Iberoamérica siglos XIX y XX. Ocho 0719-1243
Libros; Claudia Araya, César • Panizo, Laura Marina (2016) “Cuerpos
• Leyton, Marcelo López, Cristián Palacios, muertos, violencia y sacrificio: diferen-
Marcelo Sánchez (2016) República de la tes sentidos en el marco de la Guerra de
salud. Fundación y ruinas de un país sani- Malvinas”, Amerika [En ligne], 15, mis en
tario. Chile siglos XIX y XX, Ocho Libros ligne le 25 décembre, consulté le 04 juin
Editores. 2020: http://journals.openedition.org/
• Lira, Elizabeth y Brian Loveman, Las sua- amerika/7698
ves cenizas del olvido. Vía chilena de re- • Piña Cabrera, L. (2010a). Calle y escritura
conciliación política 1814-1932, Santiago, como espacio y campo de acción: El testi-
LOM Ediciones-Dirección de Bibliotecas, monio de Carolina María de Jesús, mujer,
Archivos y Museos, 1999, 350; negra y cartonera. Polis (Santiago), 9(25),
• Lira, Elizabeth y Brian Loveman, Las ar- 487-513;
dientes cenizas del olvido. Vía chilena de • Piña Cabrera, L. (2010b). Calle y casa:
reconciliación política 1932-1994, Santiago, Aprontes teóricos para una comprensión
LOM Ediciones-Dirección de Bibliotecas, de la situación de calle desde sus actores.
Archivos y Museos, 2000, 601. Polis (Santiago), 9(26), 315-336.
• López M, Patricio et al. Pequeñas Tumbas • Ponce de León, Macarena (2011). Gobernar
En La Colina: Aportes Al Conocimiento la pobreza. Prácticas de caridad y benefi-
Del Período Alfarero Temprano En El cencia en la ciudad de Santiago, 1830-1890.
Valle De Mauro (31° S) Desde La Funebria. Santiago de Chile: Editorial Universitaria,
Estud. atacam., 2017, no.54, p.65-84. ISSN DIBAM, Centro de Investigaciones Diego
0718-1043 Barros Arana;
• Monreal, Verónica; Saldivia, Sandra; y • Rojas Bahamonde, Pablo. El Rito Fúnebre
Bravo, Javiera (2015) “Resumen Ejecutivo Mapuche Del Descanso: De La Muda
Evaluación Programas Gubernamentales Ontológica Al Árbol De Los Ancestros.
(EPG). Programa Noche Digna”, Chungará (Arica), Dic 2016, vol.48, no.4,
Ministerio De Desarrollo Social, p.657-678. ISSN 0717-7356
Subsecretaría De Servicios Sociales. Enero • Romero G., Álvaro et al. Túmulos, Idelogía
– Agosto. Y Paisaje De La Fase Alto Ramírez Del
• Muñoz Ovalle, Iván. Agua y Valle De Azapa. Chungará (Arica), Set
Monumentalidad En El Valle De Azapa: 2004, vol.36, suppl.espect1, p.261-272.
Indicadores Del Uso Del Espacio En ISSN 0717-7356
Las Poblaciones Alto Ramírez, Período • Umire Álvarez, Adán. Rasgos Funerarios
Formativo, Norte De Chile. Chungará Chinchorro En La Costa Del Extremo Sur
(Arica), 2012, vol.44, no.4, p.571-591. ISSN Peruano. Chungará (Arica), 2013, vol.45,
0717-7356 no.2, p.209-235. ISSN 0717-7356
• Muñoz Ovalle, Iván. Espacios Fúnebres, • Werth, Nicolas (2007) Cannibal Island:
Prácticas Mortuorias y Cronología En El Death in a Siberian Gulag. Trans, from the
Cementerio Azapa-115: Aproximaciones French, Rendall Steven. Foreword, Jan T.
En Torno A La Estructura Social De Los Gross. Human Rights and Crimes against
Agricultores Prehispánicos Del Período Humanity. Princeton: Princeton University
Medio. Estud. atacam., 2017, no.54, p.5-36. Press.
ISSN 0718-1043

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 69-77


75
PROYECTOS FONDECYT

El Discurso de las Personas en Situacion de Leonardo Año: 2014 N° de proyecto: 11140871


Calle en Santiago de Chile. Autor: Montecino- Institución Responsable: Universidad Alberto
Soto, Lesmer Año: 2007, N° de proyecto: 1071094 Hurtado;
Pupilas Vacías, o el acto de observar puertas Lustrabotas, corteros y vendedores: El traba-
adentro de la calle. Un Estudio Comparativo jo infantil en las calles. Chile, 1900-1950. Autor:
de Fotografía Participativa, Representaciones Rojas-Flores, Jorge Año: 2000 N° de proyecto:
Sociales y Situación de Calle, Autor: Piña-Cabrera, 1000085

Arellano Escudero N.
76
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 79-91 ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle

Muerte en situación de calle.


Un ensayo sobre personas, pandemia y
(des) protección1
Death in homelessness.
An essay on people, pandemic and (dis) protection
Leonardo Piña Cabrera2

RESUMEN

A partir del fallecimiento de una persona en situación de calle el pasado mes de abril en la ciudad
de Coyhaique, en este artículo se reflexiona acerca del lugar que en nuestras sociedades ocupa
esta población, más aún en momentos de crisis como los actuales. Ocurrida precisamente en la
calle, en él se ensaya una perspectiva crítica con respecto al tipo de atención que se le brinda –estacionaria y
sensacionalista–, sosteniéndose que es la muerte, más que la vida, el foco de dicho interés. La pandemia, en
tal sentido, no señalaría ninguna gran diferencia sobre aquella preocupación, quedando a la vista no solo el
doble vínculo de dicha relación, sino el efecto dos veces precarizante de esa construcción: como objeto de
violencia, por una parte, y como sujetos de una singular ciudadanía no agencial, por la otra.

Palabras clave: Personas en situación de calle, muerte, vida, covid.

1. LLEGAR TARDE

«Los marginales no tienen nombre»


(Carolina María de Jesús)

Llegamos tarde, dice no sin pesar, el jefe de Operación Social del territorio Aysén del Hogar de Cristo (El
Desconcierto 2020, abril 21). Llegamos tarde, vuelve a argumentar, y en ello alude no solo a la institución
de que es parte, sino al conjunto de actores que pudieron/debieron hacerlo antes de la tragedia que estaba
por ocurrir. Llegamos tarde, resuena en la escucha, y la muerte de Juan Carlos Aguilar, antiguo residente de
la hospedería de calle Simpson en la ciudad de Coyhaique, termina de concretarse como un hecho consu-
mado y cuya responsabilidad nos interpela y cabe a todos.
Ocurrida en las afueras del albergue que solía ocupar, las palabras de uno de los referentes del lugar
sitúan en el entramado local, y a través suyo de las políticas intersectoriales, la responsabilidad de su falleci-
miento. En cuarentena preventiva las hospederías de la institución por más de dos semanas ante la amenaza
de la pandemia, esa misma determinación lo dejó fuera del umbral de la protección una vez que, como se
informa por el mismo funcionario, decidiera romperlo para salir (ibid). Sin poder reingresar, lo siguiente es
historia conocida y su nombre uno más, que en poco tiempo olvidaremos.

Recibido el 2 de Junio de 2020. Aceptado el 20 de junio de 2020

1 El presente ensayo constituye una ampliación de una columna de opinión publicada en el diario electrónico El Desconcierto, el
10 de mayo de este año, bajo el título Llegar tarde (https://www.eldesconcierto.cl/2020/05/10/llegar-tarde/). Reproducida con
ligeras variaciones en el apartado uno, es su texto el que se emplea acá, como pretexto, para reflexionar acerca del lugar que en
nuestras sociedades ocupan las personas en situación de calle, especialmente en momentos de crisis como los actuales.
2 Antropólogo social, Profesor Departamento de Antropología Universidad Alberto Hurtado, Doctor en Antropología,
[email protected].

79
Llegamos tarde, reflexiono, aunque quizá no abril 8). El toque de queda del actual estado de
es tan así sino a la misma hora de siempre: la que excepción constitucional también, al restringir su
cada año, muerte tras muerte, cobra la vida de esta movilidad durante la noche, que es cuando mu-
población. Esa hora que a golpe de reloj, y de la chos de ellos se dedican al trabajo de recolección
mano de una preocupación que es solo estacional o reciben la compañía de las organizaciones que
y a veces ni siquiera eso, hemos terminado por na- les visitan, en los llamados recorridos solidarios.
turalizar como la acostumbrada. O la hora negra, Sin esa posibilidad, o muy disminuida en la
como podría decir Vallejo: las 09:31 en este caso; práctica, la apertura de 130 refugios adicionales
cualquier otra, en todos los demás. para esta población a partir del miércoles 15 de
Ni un minuto antes, ni un minuto después, decir abril (Cooperativa 2020, abril 10), veintidós días
que fue tardía nuestra llegada, o que su muerte después de que se hiciera conocida una carta
estuvo más allá de lo realizable, puede llamar a pública que así lo solicitaba al gobierno (Diario
engaño, sin embargo, al diluir la responsabilidad UChile 2020, marzo 24), parece a lo menos tar-
de cada uno de los interpelados. De nadie, al em- día, máxime si se tiene que para esa fecha ya se
plazarse en todas y en ninguna parte, su compar- había producido el fallecimiento en la VII Región,
tida responsabilidad ya no lo es ni lo parece; lo referido más arriba (24 Horas 2020, marzo 30), y
mismo la efectividad de su llamado de atención otro en la vecina Región de Ñuble, el 4 de abril
al no estar exactamente dirigido, ni ser posible de siguiente (Cooperativa 2020, abril 4).
desandar, y esto es lo terrible, en lo que todavía no Con 44 y 39 años de edad, respectivamente, que
acaba de ocurrir. entre las medidas adoptadas la línea de prioriza-
¿Qué hora es esa, empero, que conocida no ción se fijara en los 60 años tampoco resulta muy
puede ser mejor esperada por quienes han de dar- entendible, si se ha dicho y hasta repetido, que la
se cita al son de su campanilla? ¿Podría serlo si, calle adelanta el envejecimiento en unos veinte
como ya se sabe, tendrá el mismo resultado donde años como promedio, o que actúa como un ace-
sea que fuese, y por la razón que sea? lerador entrópico en lo biológico, social y psico-
«Tres personas en situación de calle han muerto lógico (Ruiz 2013). Preocupante, igualmente lo es
en La Araucanía en las últimas 48 horas», titula la tardanza del protocolo con recomendaciones
Cooperativa, en su página de regiones, el pasado para la prevención y atención del COVID-19 en
24 de abril (Cooperativa 2020, abril 24). «Persona los centros del Programa Noche Digna, difundi-
de 44 años y en situación de calle es el octavo do catorce días después de detectarse el primer
fallecido por COVID-19 en Chile», por su par- caso en el país, tal como se lee en la señalada carta
te informa el portal de noticias 24 Horas, el 30 de la Fundación Gente de la Calle (2020).
de marzo (24 Horas 2020, marzo 30). «Hombre Tardías como medidas de urgencia, y tardías
en situación de calle fue atacado en Parque Los también como señal de atención, el dolor que
Reyes: está grave», a su vez escribe La Nación, expresa la declaración con que se inicia esta re-
durante la mañana del último martes (La Nación flexión no puede sino compartirse. Llegamos
2020, mayo 6). tarde. Todos lo hicimos. Una constatación terri-
El listado, que tristemente podría ser más largo, ble, un verbo implacable en su conjugación: yo lo
es solo una muestra de lo que cada año en la esta- hice, tú lo hiciste, nosotros lo hicimos... Solo él o
ción de invierno, o en cualquier momento en ri- ella muere.
gor, se prevé que sucederá. No mejor preparados,
el arribo a nuestro país de la actual crisis sanitaria 2. ESPERAR FUERA
que atraviesa el planeta, no solo no varía las cosas
en su habitual número y curva de reacciones, sino «Afuera es el fin del mundo»
que las puede empeorar más al sobre exponer a (Grafitti, Santiago)
estas personas: primero, a la posibilidad del conta-
gio mismo y, después, a la respuesta del resto de la Con más de quince años en la calle, según la nota
población y a las medidas que sobre el particular de El Desconcierto (2020, abril 21), Juan Carlos
toma o pudiese tomar el Estado. había suscrito motu proprio la cuarentena adopta-
El caso de una persona que estando en esta si- da en la hospedería que muchas veces le abrió las
tuación fue desalojada de la iglesia evangélica en puertas, tanto para salir como para volver a entrar.
que residía por resultar covid positiva, en la co- No el caso la noche de ese día lunes, su búsqueda
muna de Pedro Aguirre Cerda el 8 de abril, es uno de alojamiento no logró traspasar el umbral de su
de estos lamentables ejemplos (24 Horas 2020, anterior decisión, y la calle, como otras veces, fue

Piña Cabrera L.
80
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
la encargada de recibirlo. La sucesiva concurrencia, población señalada tantas veces como vulnera-
en distintos momentos de esa jornada, del perso- ble, y a la que, por el contrario, no ofrece nada a
nal de turno del lugar, carabineros y el servicio de cambio. Arrojando literalmente sus pertenencias
atención médica de urgencia, solo acompañó lo y comida a la basura, su mensaje no es sino el de
que después, y no antes ni tampoco entonces, ter- lo desechable, doble práctica tanto en su tipo de
minaría por llamar nuestra atención. violencia material y simbólica, como en el carácter
El lamento de su hermana, que por su parte del vínculo que les dedica.
reproduce un medio local, no solo testimonia el Tampoco una práctica nueva, esa suerte de pri-
dolor de su pérdida, sino una cierta sensación vatización del espacio público que está en uno de
de impotencia ante lo que se concibe como in- sus fondos, ya ha sido observada antes en lo hecho
evitable. Dicha sensación, que de otra forma es por Rescate Social y otros municipios (The Clinic
de indignación por la inefectividad hasta del es- 2006; T13 2019; Delpin 2019), tanto dentro como
tado de catástrofe recientemente dictado, deja a fuera del país (Bachiller 2008; Bufarini 2010; Piña
la vista el adelgazamiento de nuestros sistemas de 2013). Sea en lógica privada o pública, y con cargo
protección (Castel 2004) y de muchas de las deter- a ese (Público 2012; Presidencia 2019) u otro afán
minaciones que en la urgencia se han venido to- (Alexandri, González & Hodkinson 2016), de su
mando: «Nadie hizo nada por él, ni Carabineros, escasa discusión y abordaje por los medios se po-
ni los militares, ni la PDI, así que no sé qué pasó dría decir que es responsable recursiva de que siga
habiendo toque de queda, cómo no lo fueron a ocurriendo; y en días de crisis como estos, cuando
levantar y lo llevaron a otro lado. Eso me indigna» la protección debería ser más que una declaración,
(El Divisadero 2020, abril 28). no ofrecer alguna alternativa bajo techo (léase,
¿Cómo pudo ocurrir, entonces, si todo lo hacía no cautelar el derecho a la vida), hasta podría ser
o debería haberlo hecho imposible? ¿Cómo una constitutivo de delito al faltar, a lo menos, a las
decisión que era de resguardo, terminó por des- convenciones internacionales que sobre el parti-
vestir el mismo sentido que la había impulsado? cular se han suscrito.
¿Por qué el llamado contexto de la protección esa «¿Cómo no les da vergüenza, cómo no se mue-
noche no lo fue, para quien hoy día nos llena de ren de la vergüenza, venir a sacar a las personas
interrogantes? que están viviendo en la calle?», observa en este
Sin casos activos al 19 de abril en la ciudad, de sentido una conmovida vecina de la comuna de
acuerdo al Décimo Informe epidemiológico del Santiago, que más tarde sería conducida a una
Ministerio de Salud, y tan solo tres acumulados comisaría por no contar con un permiso indivi-
hasta entonces (Minsal 2020a), Coyhaique ni dual que la autorizase a estar fuera de su casa (El
toda la región de que es cabecera administrativa Mostrador 2020, mayo 20). «¿A dónde se van a
registran decesos a la fecha (Emol 2020, mayo ir con esta lluvia? ¿Ustedes les van a ofrecer un
22). Tampoco consecuentemente al momento de lugar donde ir?», insiste, trayendo a colación el rol,
decretarse el confinamiento (Minsal 2020b), tal más allá de lo policial, que la autoridad debería
determinación resultó, a la postre, contraria a lo cumplir.
que se quería evitar. ¿Podría haber sido de otro Fuera del alcance de una cámara, y también re-
modo? La pregunta, que a todas luces es imposi- presentativo de este doble accionar, otras cuatro
ble de responder, sí puede ayudar a la reflexión, personas que están en esta situación en la comuna
por ejemplo la relativa a los usos que se da a la de Providencia refrendan lo anterior, cuando se les
excepcionalidad constitucional o a la confianza pregunta por sus necesidades y la relación que a
que suscita el manejo de los datos, dos aspectos este efecto han mantenido con la alcaldía o alguna
de la crisis que apenas se abordan en los medios otra autoridad sanitaria: «el otro día no más vinie-
masivos de comunicación. ron a sacarnos, con camiones y los pacos [jueves
Cuestión de mirada, o de estar ahí para verlo, 21 de mayo]. Después volvimos, siempre es así»
el diario electrónico El Mostrador (2020, mayo (Comunicación personal, mayo 23 de 2020). Con
20) y el portal 360 Noticias (2020, mayo 20) re- poco más de dos meses instalados en ese lugar, en
producen las imágenes que, desconcertados, veci- el caso de una de las dos parejas consultadas por
nos y paseantes registran del desalojo que de esta no poder pagar el arriendo una vez decretado el
población hiciera la municipalidad de Santiago y toque de queda, su testimonio es indicativo de las
carabineros, el pasado miércoles 20 de mayo. Con dos caras del Estado, puesto que no hacía mucho
camiones de aseo y bajo la primera lluvia del año, les habían venido a visitar para vacunarlos contra
es la autoridad local y policial la que expulsa a una la influenza.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 79-91


81
Concordante con lo señalado por Bourdieu vaya a albergues y que no pase a la intemperie»
(2002) cuando habla de las dos manos del Estado, (ibid)–, la aludida autoridad pública nada dice de
una que busca contener y otra detener, de otra la desigualdad que está detrás, o los dos países que
forma también lo es de lo dicho por Butler (2006) seríamos, a que sí se referiría el otro: «construi-
cuando apunta a la construcción del sujeto vulne- mos dos Chiles. Un país súper inequitativo. Es
rable como una condición que siendo primaria, un desafío a la manera de entender el desarrollo»
descubrirá a unos y a otros en desigualdad para (Cooperativa 2012, julio 6). Sin aludir, asimismo,
enfrentarla. Vital dicha vulnerabilidad, en sus pa- a la alimentación de la vulnerabilidad que por ese
labras «algunas vidas estarán muy protegidas y sus camino se produciría, lo suyo aparece muy lejos
exigencias de inviolabilidad bastarán para mo- de entender la ‘precaridad’ como una condición
vilizar a las fuerzas de la guerra. Otras vidas no políticamente inducida de la ‘precariedad’, tal
tendrán un amparo tan rápido ni tan furioso, y como Butler (2010) desarrolla al distinguir ambos
ni tan sólo serán consideradas como merecedoras conceptos:
del duelo» (p. 44). Con ello, el desigual acceso a «La precaridad [precarity, en inglés] designa esa
las formas de significación, o a su control en la condición políticamente inducida en la que ciertas
lógica saber/poder, emerge como plausible en la poblaciones adolecen de falta de redes de apoyo
consideración de sus pertenencias como una no sociales y económicas y están diferencialmente
pérdida, cada vez que les son arrebatadas y ter- más expuestas a los daños, la violencia y la muer-
minan en un vertedero; lo mismo sus vidas, que te. Tales poblaciones se hallan en grave peligro de
vistas fuera de los marcos aceptados, incluso se enfermedad, pobreza, hambre, desplazamiento y
las llega a tener como menos reales y verdaderas: exposición a la violencia sin ninguna protección.
«A nivel del discurso algunas vidas no se consi- La precaridad también caracteriza una condición
deran en absoluto vidas, no pueden ser humaniza- políticamente inducida de la precariedad [preca-
das; no encajan en el marco dominante de lo hu- riousness], que se maximiza para las poblaciones
mano, y su deshumanización ocurre primero en expuestas a la violencia estatal arbitraria que, a
este nivel. Este nivel luego da lugar a la violencia menudo, no tienen otra opción que la de apelar
física, que, en cierto sentido, transmite el mensaje al Estado mismo contra el que necesitan protec-
de la deshumanización que ya está funcionando ción. En otras palabras, apelan al Estado en busca
en nuestra cultura» (p. 45). de protección, pero el Estado es, precisamente,
En camino de ‘desrealización’ sus vidas, en el aquello contra lo que necesitan protegerse» (pp.
decir de esta autora (p. 48), el aumento en las ci- 46-47).
fras de fallecimiento de esta población durante la Sí recogido en lo actual por el ya referido ex
temporada de invierno, no obstante el relativo in- capellán, su reconocimiento del asistencialismo
terés mediático que eventualmente pueda cobrar, como un acto de vulneración que no dignifica (La
no ha supuesto ningún gran impacto en términos Tercera 2020, mayo 26)3, señala a toda la situa-
de ocurrencia y reacción. Año a año básicamente ción, su estadística y sistemática repetición, como
las mismas, en 2012 por ejemplo, y tras producirse marcas de un accionar difícilmente no calificable
una segunda muerte por hipotermia en una misma como violento. Igual cosa con la indolencia de la
semana (Cooperativa 2012a, julio 5), el entonces autoridad, lo sucedido en otras latitudes, en par-
capellán del Hogar de Cristo afirma que sumar ticular Uruguay donde se ha llegado a pedir la re-
catorce decesos debería ser motivo de duelo na- nuncia de la titular del ministerio respectivo tras
cional (Cooperativa 2012, julio 6), un día después, producirse el fallecimiento de seis personas en
precisamente, que el ministro de Hacienda de la 2011 por efecto del frío (El País 2011, julio 11),
época confesara estar conmovido por lo mismo pone en cuestión la normalizada ocurrencia de es-
(Cooperativa 2012b, julio 5). tas muertes, más todavía si un año después se or-
Apuntando, este último, al esfuerzo que en el dena la habilitación de la residencia presidencial, y
ámbito social debía hacerse –«para mí, es un tra- otros bienes de la infraestructura pública, en caso
bajo que debemos hacer. Hay toda una política de ser insuficiente la oferta de alojamientos (26
del Gobierno, de estimular, de entregar recursos Noticias 2012, junio 6).
a las instituciones de ayuda social, de la gente que Sujetos de derecho en grado inédito para los

3 Señalado a propósito de las cajas de mercadería anunciadas por la Presidencia para la población más vulnerable (El Desconcierto
2020, mayo 19), su crítica a esta medida pone en relación la actual crisis con la experimentada desde el 18 de octubre pasado, en
su argumentación, «porque deja al vulnerado en una situación de dependencia, de inferioridad, endureciendo esa asimetría clasista
que hoy comienza a dar asco y que está en la raíz del ‘estallido social’» (La Tercera 2020, mayo 26).

Piña Cabrera L.
82
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
estándares de nuestro país, tal escalada y natu- dramática persistencia, más que de la muerte, que
ralización –que en 2010 llegó a 150 fallecimien- de cualquier modo es parte de la vida, de un tipo
tos según el entonces ministro de Planificación de tratamiento por los medios que enfatiza la des-
(Cooperativa 2011, junio 23)–, tampoco ha estado protección de la calle y de esta población4. Cierto
exenta de relativo debate y atención, en especial de muchas terribles maneras, el hecho que siga
en casos como el de Juan Carlos: al alcance de la ocurriendo no puede ocultar que siempre suceda
acción de alguna institución; fuera de las puertas, fuera de alguna puerta, y que en ello dicha imagen
por lo tanto, de la denominada protección social. es corresponsable de que se fomente la espera y
El 26 de abril de 2010, por ejemplo, un hom- la acción por parte de un tercero, valga decir, la
bre de 60 años, aproximadamente, es encontra- desatención (la de todos). Adelantado en un es-
do muerto a pocos metros de la ex Posta Central, tudio hecho en Inglaterra (Hodgetts, Hodgetts
en Santiago (Cooperativa 2010a, abril 26). & Radley 2006), su representación como una po-
Desconociéndose su identidad, la nota de pren- blación distinta de la domiciliada, pero también
sa que da cuenta de este hecho indica que habría como «personas enfermas, pasivas, sin voz y que
llegado hasta el recinto asistencial en la madru- son sobre dependientes de la asistencia y el ma-
gada de ese día, en busca de atención y un lugar nejo de instituciones de caridad» (p. 498), algo
para pernoctar, sin ser admitido por el personal dice al respecto, igualmente que se les represente
de seguridad. Tal circunstancia, que es desmen- como seres unidimensionales que «llevan consigo
tida horas después por la institución al asegurar la desventaja social y cuyos problemas deben ser
que en sus registros no había nada en ese sentido explicados, prevenidos y curados por las organiza-
(Cooperativa 2010b, abril 26), no es muy distinta ciones de caridad, los profesionales de la salud y el
de la que se produciría en el Hospital San José, gobierno» (p. 498).
algunos meses más tarde, con la muerte de Luis Objeto de un tipo de ciudadanía asistida o por
Salgado, un hombre de 40 años de edad (Emol mano de un tercero que se estima autorizado, tal
2011, enero 11); en las afueras de la Clínica Santa efecto se puede observar, de un modo muy terri-
María, pasado un par de años, con un hombre de ble, en el deceso de Eduardo Kifafi, ocurrido en
80 años tampoco identificado (Cooperativa 2014, octubre del año 2010, en un conocido paseo pea-
junio 2); o bien en las afueras de la Fundación Las tonal de la ciudad de Puerto Montt (El Llanquihue
Rosas, hacia junio de 2011, con otro adulto mayor 2010, octubre 27). Que así fuese, y que sucediera
sin identificación (Cooperativa 2011a, junio 22). durante las horas de mayor afluencia de público,
Tras una espera de más de tres horas en la ur- enfatiza aún más ese estado de desprotección, en
gencia, el primero, y sin que funcionara el teléfo- este caso porque el hecho muestra sin ambages su
no de emergencia dispuesto para la eventualidad, doble cualidad de invisible e inevitable: «él murió
en el caso del segundo, ambos son representativos frente a los transeúntes y nadie se dio cuenta», al
de un tipo de atención preferente, más declarado respecto dice el asistente social que lo encontró;
que efectivo. La catalogación de ‘escasa gravedad’ «llegó en la mañana y se acomodó, incluso le tra-
en una urgencia colapsada, en uno, y la imposibi- jeron un té», por su parte informa un comerciante
lidad de conseguir auxilio a través del dispositivo del lugar, precisando que después «se quedó dor-
que se había previsto, en el otro, levantan serias mido y falleció en el sueño» (ibid).
dudas, además, acerca de la capacidad de acción Consumado aún antes de llegar a producirse,
de nuestro sistema de protección, situación doble- tal hecho, y que a través suyo se logren apreciar
mente preocupante en momentos de crisis como responsabilidades de diferente tipo, además de re-
los que actualmente estamos viviendo. Y que en el levar la naturaleza compleja del mismo, hace ma-
caso del último, y que luego también desmentiría nifiesto lo equivocado de pensarlas en un único
la institución aludida (Cooperativa 2011b, junio lugar. No privativas de la autoridad o alguna ins-
22), remarca a su acontecimiento como un hecho, titución en particular, el reclamo o sorpresa que
más que sucedido en la calle, ocurrido afuera de eventualmente se pueda ocasionar cada vez que
uno de los techos de la protección. esto ocurre, muestra ese corrimiento o pérdida de
La ejemplificación, que otra vez podría ser lazo social, pero ya no en esta población como
interminable, muestra en todos los casos la mucha de la literatura de la desafiliación insiste,

4 En ningún caso privativo de los medios, el mismo tipo de tratamiento se puede observar en varias campañas de sensibilización
acerca del tema –Sin tu ayuda volvemos atrás, en nuestro país por ejemplo, o La indiferencia mata, en Francia–, cuyo mensaje
actúa como amplificador de esta representación dominante, en concordancia con lo dicho por Romaní (1996) cuando habla de las
retóricas de la marginación como coproductoras de los fenómenos de que tratan.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 79-91


83
sino en el conjunto de la sociedad que deja de ac- hospitalario, según informa un ex funcionario de
tuar y movilizarse al respecto. O que lo hace, por gobierno especialista en el tema (Comunicación
el contrario, pero para manifestar su inconformi- personal, mayo 27), tal conjunto de cosas eviden-
dad por su presencia en la ciudad. cia el tipo y muy secundario lugar que en la escala
Observado hacia 2007 a propósito de la nega- de la ciudadanía se les confiere:
tiva de los vecinos del barrio Rondizzoni, en la «Ayuda!! Somos un grupo de amigos que asisti-
ciudad de Santiago, a que se abriera una hospede- mos a personas en situación de calle del sector de
ría en el sector luego de expirar el contrato entre Providencia (donde hay muchísimas personas sin
la Intendencia Metropolitana y Chiledeportes, en techo). Con mucho dolor e impotencia nos en-
orden a seguir ocupando el estadio Víctor Jara teramos que dos de ellos están contagiadas con
para ese efecto (La Nación 2007, agosto 12); ello COVID (con examen probatorio), nos llamaron
mismo puede verse en infinitud de notas y repor- ayer del CESFAM Alessandri para que ‘nosotros
tajes que a la vez que informan y alimentan dicho les fuéramos a avisar y que no se desplazaran
rechazo, acentúan al factor individual como res- mucho para evitar la propagación del contagio’
ponsable directo del fenómeno (Chilevisión 2015, [...] Han pasado las horas y, a pesar de saber que
junio 27). Siendo esta población la causante de su eran POSITIVOS al COVID (autoridades mé-
situación, y habiéndose cristalizado ello como esa dicas y municipales ya que ellos NO FUERON
suerte de teoría del sentido común que son las re- NOTIFICADOS) los dejaron dormir en la calle
presentaciones sociales (Moscovici 1979; Jodelet [...] Realmente estamos desesperados, impotentes
2008), lo siguiente es la naturalización de la ex- pero haremos lo imposible porque reciban una
pulsión como sui generis solución de aquello que atención digna… Al parecer no hay ambulancias
se entiende (solo) como problema (El Llanquihue ni helicópteros para todos. ¿Deberá ser normal
2008, julio 26; El Llanquihue 2009, abril 21). Lejos morir en la calle?» (Romero 2020).
de acá o no en mi patio trasero, como se ha lla- Sin una respuesta oportuna y ellos mismos des-
mado a este tipo de reacción, tal fórmula no solo plazados de la cadena decisoria, su no inclusión
simplifica su complejidad sino que está a la puer- como población prioritaria, y lo parcial, no espe-
ta, como desentendimiento (El Mercurio 2015, cializado y otra vez tardío actuar del llamado plan
enero 26), de hacer cierto lo dicho tras la muerte Protege Calle COVID-19, no hace muy esperan-
de Juan Carlos: llegamos tarde, no era nuestra esa zador el resultado de lo que acá pudiese ocurrir.
responsabilidad. Poco auspicioso al centrarse en la realidad intra
hospederías, de acuerdo a una de las críticas de la
3. MORIR Y MORIR EN LA CALLE Fundación Gente de la Calle (Diario UChile 2020,
marzo 24), lo mismo cabría decir de la no dispo-
«La muerte no es democrática» sición de residencias sanitarias y la insuficiente
(Byung-Chul Han) oferta de camas país para hacer frente a la even-
tualidad. La colisión, asimismo, entre los distintos
Siempre afuera de una puerta, o con alguien accionares del Estado que mientras avanza de un
dentro que no la abrió o siquiera se enteró, la modo retrocede de otros, lo hace aún menos ha-
muerte se ha venido instalando como otro más lagüeño, pero ahora por la desconfianza que todo
de los elementos que caracterizan la vida en si- ello coadyuva a alimentar.
tuación de calle (Cooperativa 2020, mayo 16). No Por otra parte, y aunque los albergues 24/7
muy diferente en contexto de pandemia, que a pe- emergen como alternativa por la gestión del ries-
sar de su alarma sanitaria no ha impactado sobre go que ahí se puede hacer, lo ocurrido en ellos
esa ecuación, la estrecha relación entre una y otra también los muestra vulnerables a los peligros que
salta a la vista con la lentitud, si no indolencia, de se experimentan fuera. El caso de la hospedería
la respuesta destinada a esta población. El caso de Padre Lavín, en la comuna de Santiago, donde el
dos personas que tuvieron que seguir durmiendo 90% de sus ocupantes llegó a estar contagiado
en la calle no obstante ser diagnosticadas con la (El Mostrador 2020, mayo 21), no solo remarca
enfermedad, en la comuna de Providencia, mues- la alta transmisibilidad del virus sino lo permea-
tra la escasa importancia que reviste, más todavía ble, y por tanto expuesta, que es esta población.
si se tiene que no fue a ellos a quienes se les comu- Con escasa información, sin embargo, de lo que
nicó el resultado de sus exámenes (El Ciudadano está ocurriendo en otros albergues del país, lo vi-
2020, mayo 23; El Desconcierto 2020, mayo vido en el exterior ayuda a poner en relación y
24). Trasladados varios días después a un centro dimensionar el alcance de estas determinaciones.

Piña Cabrera L.
84
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
En el Gran Buenos Aires, por ejemplo, el rápido Estado-nación; así pues, basarse en el Estado-
aumento de los contagios al interior de uno de nación para protegerse contra la violencia es, pre-
sus centros de inclusión social, también llamados cisamente, cambiar una violencia potencial por
paradores (Tiempo 2020, mayo 11), ha obligado otra» (Butler 2010, p. 47).
al cierre temporal y traslado de sus ocupantes al Insoluble de muchas formas en lo habitual, por
sistema extra hospitalario, como extrema medi- qué tendría que serlo menos en tiempos de crisis.
da de protección ante lo que ello podría suscitar ¿Los ventiladores mecánicos y las camas críticas,
(Tiempo 2020, mayo 12). como antes la vivienda y la mirada justa, serán más
Con 79 de los 92 usuarios contagiados, en el asequibles ahora si la lógica de la escasez, entién-
caso del parador de Retiro, y a la espera de co- dase ganancia, sigue detrás y organiza muchas de
nocerse el resultado del margen restante (ibid), lo las decisiones que en materia sanitaria se adoptan?
ocurrido en dicho dispositivo es paradigmático de ¿Por qué, de otra manera, tendría que ser menos
lo complejo que es, y puede llegar a ser, el aborda- complejo el tema y más simple su solución; o sus
je sanitario de la emergencia. En este sentido, las muertes, a las que nos hemos habituado, motivo
palabras de uno de los representantes comunita- de llanto en medio de esa danza de números a que
rios del lugar resultan muy iluminadoras de dicha cada mañana asistimos, con la esperanza, quizá,
complejidad, más aún por tratarse de un profe- de verlos bajar y que no sean los nuestros los lla-
sional de la salud que pone el foco no solo en la mados a engrosarlos?
dimensión biológica de la situación: «Aquellos cuyas vidas no se ‘consideran’ suscepti-
«Las personas en los paradores tienen mucho bles de ser lloradas, y, por ende, de ser valiosas, es-
miedo. Por un lado a la enfermedad y por otro a tán hechos para soportar la carga del hambre, del
que no sean atendidos a tiempo. A que los aban- infraempleo, de la desemancipación jurídica y de la
donen. Desde que empezó la pandemia de esta exposición diferencial a la violencia y a la muerte», a
enfermedad nueva, de la que los médicos incluso este efecto reflexiona Butler (p. 45). Tal destino, que
estamos estudiando e investigando, de lo único que se corresponde con el que marca esta pandemia en
se tenía certeza era de que los lugares de hacina- sus cifras, como dice Byung-Chul Han (Efe 2020,
miento son los que garantizaban contagio, y estas mayo 12), es el de los socialmente más débiles, aque-
altas tasas de positividad se están haciendo eviden- llos cuyas vidas elevan los costos de la política social
tes en paradores y barrios populares. El gobierno y reducen las ganancias de la apropiación privada:
porteño debería haber puesto prioritariamente su «La vulnerabilidad o mortalidad humanas no
mirada y acción en ellos» (Tiempo 2020, mayo 11). son democráticas, sino que dependen del estatus
Apuntando a la aglomeración como factor de social. La muerte no es democrática. La Covid-19
contagio, pero también a la desconfianza en la no ha cambiado nada al respecto. La muerte nun-
atención como su aspecto quizá más crítico, la ca ha sido democrática. La pandemia, en parti-
apertura de nuevas plazas para esta población no cular, pone de relieve los problemas sociales, los
resulta, en opinión de este comunero, en una al- fallos y las diferencias de cada sociedad. Piense
ternativa que por sí sola o automáticamente vaya por ejemplo en Estados Unidos. Por la Covid-19
a ser frente al problema5. Más bien lo contrario, están muriendo sobre todo afroamericanos. La si-
y extrapolado ya a toda la situación, la crisis que tuación es similar en Francia. Como consecuencia
actualmente estamos viviendo a la vez que lo agu- del confinamiento, los trenes suburbanos que co-
diza, deja en evidencia lo indispensable de una nectan París con los suburbios están abarrotados.
acción articulada y de conjunto. Una transforma- Con la Covid-19 enferman y mueren los trabaja-
ción de perspectiva donde esta población no solo dores pobres de origen inmigrante en las zonas
comience a ser reconocida y tenga algo que decir, periféricas de las grandes ciudades. Tienen que
sino donde las dos manos del Estado, más que trabajar. El teletrabajo no se lo pueden permitir
dejar de oponerse en sus lógicas, avancen tam- los cuidadores, los trabajadores de las fábricas, los
bién en la no precarización de su situación: «Estar que limpian, las vendedoras o los que recogen la
protegidos contra la violencia del Estado-nación basura. Los ricos, por su parte, se mudan a sus
es estar expuestos a la violencia ejercida por el casas en el campo» (ibid).

5 Poco tiempo antes de esta situación, la prensa trasandina había informado de la apertura de 960 plazas en ocho nuevos centros,
que sumados a los 2.099 de los 32 ya existentes, esperaban ser una respuesta a las 1.146 personas en situación de calle contabili-
zadas, según la Dirección General de Estadísticas del Gobierno, o las 7.251 de acuerdo al Censo Popular, un relevamiento hecho
por la Presidencia de la Auditoría General de la Ciudad, el Ministerio Público de la Defensa porteño y organizaciones sociales
(Clarín 2020, abril 30).

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 79-91


85
Con la sobrevivencia, entonces, como el estado coronavirus/expulsan-a-hombre-en-situa-
que parece imponerse tanto en su diaria búsqueda cion-de-calle-con-covid-19-positivo-de-un-
de sostenimiento como en su más amplio escape templo-evangelico-4086180> Consultado
a la muerte, las palabras de este filósofo relevan la 06/05/20.
creciente pérdida de soberanía personal al situar, • 24 Horas (2020, marzo 30). «Persona de 44
cada vez más, en el saber médico y en el poder años y en situación de calle es el octavo fa-
político el control de la vida. Con ello, y siendo llecido por COVID-19 en Chile». 24 Horas,
algunas vidas más iguales que otras, como irónica- Nota de prensa. <https://www.24horas.cl/
mente nos dejara Orwell (2003) para indicar exac- coronavirus/persona-de-44-anos-y-en-si-
tamente lo contrario, la posibilidad de responder tuacion-de-calle-es-el-octavo-fallecido-por-
positivamente a las preguntas de más arriba se covid-19-en-chile-4059960> Consultado
reducen dramáticamente al mínimo. ¿Por qué ten- 06/05/20.
dría que ser distinto si, tal como parece decir la • 26 Noticias (2012, junio 6). «Ante la ola de
institucionalidad económica global, el valor de la frío en Uruguay, Mujica alojará a indigentes
vida es caro en contraposición al de la muerte?6 en la residencia presidencial. Medida para
¿De qué manera una vida en situación de calle, pasar el invierno». 26 Noticias, Nota de
por duro que pueda ser, podría escapar a los cál- prensa. <http://www.26noticias.com.ar/
culos de tan excluyente racionalidad? ante-la-ola-de-frio-en-uruguay-mujica-alo-
Concentrados los poderes médico y político, jara-a-indigentes-en-la-residencia-presiden-
y remarcada la segregación de las poblaciones cial-152863.html> Consultado 06/06/12.
como consecuencia también de la pandemia, la • 360 Noticias (2020, mayo 20). «En ple-
pregunta por el gobierno de la muerte como un na lluvia alcalde Alessandri ordena ex-
accionar biopolítico, e incluso tanatopolítico, no pulsar decenas de indigentes y lanzan sus
debiera extrañar a nadie. Que sea una que se le- cosas a la basura». 360 Noticias, Nota de
vanta acá, siguiendo a Adorno (2010) a propósi- prensa. <https://360noticias.cl/en-ple-
to de su resonancia con la fórmula ‘hacer vivir y na-lluvia-alcalde-alessandri-ordena-expul-
dejar morir’ de la modernidad, aún menos dadas sar-decenas-de-indigentes-y-lanzan-sus-co-
las estadísticas mortuorias que se acumulan con sas-a-la-basura/> Consultado 21/05/20.
o sin COVID-19 al interior suyo. Abandonados • Adorno, Francesco (2010). «Poder sobre
a su suerte de muchos modos, siendo expulsados la vida, política de la muerte: sobre las for-
y no priorizados, tal razonamiento no parece tan mas de resistencia al biopoder en Foucault».
descabellado, es decir que sea «una política que, en Michel Foucault: neoliberalismo y biopolí-
la medida que debe gestionar la vida, optimizarla, tica. Ediciones UDP, Santiago de Chile (V.
hacerla productiva, garantizar, si se puede decir Lemm, Ed.), pp. 433-452.
así, su buena salud, no puede ignorar la necesidad • Alexandri, Georgia; González, Sara &
de sacrificar una parte de la población» (p. 443). Stuart Hodkinson (2016). «Geografías del
El hecho que no pare de ocurrir, como el fa- desplazamiento en el urbanismo de América
llecimiento de un hombre en las afueras del me- Latina». Revista INVI, 31, 88, 9-25.
tro estación Santa Lucía, en la ciudad de Santiago • Bachiller, Santiago (2008). Exclusión social,
(Cooperativa 2020, junio 1), no hace sino sostener desafiliación y usos del espacio. Una etno-
su posibilidad. Que la nota no incluya identifica- grafía con personas sin hogar en Madrid
ción y la causa de muerte esté por establecerse, (Tesis doctoral). Universidad Autónoma de
todavía más. Madrid, Madrid.
• Bourdieu, Pierre (2002). «La mano izquier-
REFERENCIAS da y la mano derecha del Estado». Revista
Colombiana de Educación, 42.
• 24 Horas (2020, abril 8). «Expulsan a hom- • Bufarini, Mariel (2010). «Las personas sin
bre en situación de calle con COVID-19 po- hogar en Rosario. Consideraciones so-
sitivo de un templo evangélico». 24 Horas, bre los usos del espacio público urbano».
Nota de prensa. <https://www.24horas.cl/ CUHSO, 19(1), 67-74.

6 «El FMI pide bajar pensiones por ‘el riesgo de que la gente viva más de lo esperado’», titula El País (2012, abril 12), en una nota
que llama a no perder de vista los costos del aumento de la esperanza de vida: «‘Vivir más es bueno, pero conlleva un riesgo finan-
ciero importante’. ‘Nos va a costar más como individuos, a las corporaciones y a los Gobiernos. Por eso debemos preocuparnos
ahora por los riesgos de la longevidad, para que los costes no nos atosiguen en el futuro’».

Piña Cabrera L.
86
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
• Butler, Judith (2006). Deshacer el género. • Cooperativa (2020, abril 4). «Una per-
Paidós, Barcelona. sona en situación de calle falleció por el
• Butler, Judith (2010). Marcos de guerra. Las Covid-19 en Ñuble». Cooperativa, Nota
vidas lloradas. Paidós, Ciudad de México. de prensa. <https://www.cooperativa.cl/
• Castel, Robert (2004). La inseguridad so- noticias/sociedad/salud/coronavirus/una-
cial. ¿Qué es estar protegido? Manantial, persona-en-situacion-de-calle-fallecio-por-
Buenos Aires. el-covid-19-en-nuble/2020-04-04/204752.
• Chilevisión (2015, junio 27). «Plaza tomada html> Consultado 04/04/20.
en Santiago». Chilevisión, Reportaje perio- • Cooperativa (2014, junio 2). «Indigente
dístico de A. Valenzuela y A. Palacios. murió en las afueras de la Clínica Santa
• Clarín (2020, abril 30). «La situación social. María». Cooperativa, Santiago de Chile,
Coronavirus en Argentina: 835 personas Nota de prensa. <https://www.cooperati-
que vivían en la calle hacen la cuarentena en va.cl/noticias/pais/policial/indigente-mu-
los ocho nuevos paradores de la Ciudad». rio-en-las-afueras-de-la-clinica-santa-ma-
Clarín, Nota de prensa. <https://www. ria/2014-06-02/222204.html> Consultado
clarin.com/ciudades/coronavirus-argen- 02/06/14.
tina-835-personas-vivian-calle-hacen-cua- • Cooperativa (2012, julio 6). «Capellán del
rentena-nuevos-paradores-ciudad_0_Vn-_ Hogar de Cristo: las muertes por frío dan
i9hbn.html> Consultado 13/05/20. para duelo nacional». Cooperativa, Nota de
• Cooperativa (2020, junio 1). «Hombre en prensa. <https://www.cooperativa.cl/no-
situación en calle murió afuera del Metro ticias/pais/tiempo/capellan-del-hogar-de-
Santa Lucía». Cooperativa, Nota de pren- cristo-las-muertes-por-frio-dan-para-due-
sa.<https://www.cooperativa.cl/noticias/ lo/2012-07-06/084429.html> Consultado
pais/policial/hombre-en-situacion-en- 11/06/12.
calle-murio-afuera-del-metro-santa-lu- • Cooperativa (2012a, julio 5). «Indigente
cia/2020-06-01/212438.html> Consultado es la segunda víctima fatal del frío esta
01/06/20. semana en Santiago». Cooperativa, Nota
• Cooperativa (2020, mayo 16). «Hombre en de prensa. <https://www.cooperativa.
situación de calle fue encontrado muerto cl/indigente-es-la-segunda-victima-fa-
en Temuco: SML investiga presencia de tal-del-frio-esta-semana-en-santiago/
Covid-19». Cooperativa, Nota de prensa. prontus_nots/2012-07-05/095426.html>
<https://www.cooperativa.cl/noticias/so- Consultado 05/07/12).
ciedad/salud/coronavirus/hombre-en-si- • Cooperativa (2012b, julio 5). «Ministro
tuacion-de-calle-fue-encontrado-muer- Larraín manifestó estar conmovido por
to-en-temuco-sml/2020-05-16/132215. muerte de indigentes a causa del frío».
html> Consultado 17/05/20. Cooperativa, Nota de prensa. <https://
• Cooperativa (2020, abril 24). «Tres per- www.cooperativa.cl/ministro-larrain-ma-
sonas en situación de calle han muerto nifesto-estar-conmovido-por-muer-
en La Araucanía en las últimas 48 horas». te-de-indigentes-a-causa-del-frio/pron-
Cooperativa, Nota de prensa. <https:// tus_nots/2012-07-05/194932.html>
www.cooperativa.cl/noticias/pais/re- Consultado 06/07/12.
gion-de-la-araucania/tres-personas-en-si- • Cooperativa (2011, junio 23). «Ministro
tuacion-de-calle-han-muerto-en-la-arau- Kast: 150 compatriotas murieron en la ca-
cania-en-las/2020-04-24/093235.html> lle por frío en 2010». Cooperativa, Nota
Consultado 24/04/20. de prensa. <https://www.cooperativa.
• Cooperativa (2020, abril 10). «Adelantan cl/ministro-kast-150-compatriotas-mu-
Plan Invierno para prevenir contagios de rieron-en-la-calle-por-el-frio-en-2010/
Covid-19 en personas en situación de calle». prontus_nots/2011-06-23/080937.html>
Cooperativa, Nota de prensa. <https:// Consultado 23/06/11.
www.cooperativa.cl/noticias/sociedad/ • Cooperativa (2011a, junio 22). «Ola
salud/coronavirus/adelantan-plan-invier- de frío cobró la vida de indigente en
n o - p a r a - p r e ve n i r- c o n t a g i o s - d e - c o - Independencia». Cooperativa, Nota de
vid-19-en-personas/2020-04-10/182424. prensa. <https://www.cooperativa.cl/
html> Consultado 10/04/20. ola-de-frio-cobro-la-vida-de-indigen-

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 79-91


87
te-en-independencia/prontus_nots/2011- j6O91xv77ERrHLja932MAcA41fhaazc>
06-22/102106.html> Consultado Consultado 14/05/20.
22/06/11. • El Ciudadano (2020, mayo 23). «Providencia:
• Cooperativa (2011b, junio 22). «Fundación Denuncian que dos personas sin techo con-
Las Rosas: El indigente que falleció no está tagiadas con Covid-19 siguen en la calle». El
en nuestros registros». Cooperativa, Nota Ciudadano, Nota de prensa.<https://www.
de prensa. <https://www.cooperativa.cl/ elciudadano.com/chile/providencia-de-
fundacion-las-rosas-el-indigente-que-fa- nuncian-que-dos-personas-sin-techo-con-
llecio-no-esta-en-nuestros-registros/ tagiadas-con-covid-19-siguen-en-la-ca-
prontus_nots/2011-06-22/134026.html> lle/05/23/> Consultado 24/05/20.
Consultado 23/06/11. • El Desconcierto (2020, mayo 24).
• Cooperativa (2010a, abril 26). «Las bajas «Providencia: Dos personas sin techo con-
temperaturas cobraron su primera víctima tagiadas con COVID-19 llevan tres días sin
fatal del año en Santiago». Cooperativa, Nota ser admitidos en una residencia sanitaria».
de prensa. <https://www.cooperativa.cl/ El Desconcierto, Nota de prensa. <ht-
las-bajas-temperaturas-cobraron-su-pri- tps://www.eldesconcierto.cl/2020/05/24/
mera-victima-fatal-del-ano-en-santiago/ providencia-dos-personas-sin-te-
prontus_nots/2010-04-26/102812.html> ch o - c o n t a g i a d a s - c o n - c ov i d - 1 9 - l l e -
Consultado 26/04/10. van-tres-dias-sin-ser-admitidos-en-una-re-
• Cooperativa (2010b, abril 26). «Posta sidencia-sanitaria/> Consultado 24/05/20.
Central descartó cualquier responsabili- • El Desconcierto (2020, mayo 19). «Caja
dad en muerte de indigente». Cooperativa, de mercadería anunciada por el gobierno:
Nota de prensa. <https://www.cooperati- Entérate qué contiene, quién la recibe y
va.cl/posta-central-descarto-cualquier-res- cuándo se entrega». El Desconcierto, Nota
ponsabilidad-en-muerte-de-indigente/ de prensa. <https://www.eldesconcierto.
prontus_nots/2010-04-26/173314.html> cl/2020/05/19/caja-de-mercaderia-anun-
Consultado 26/04/10. ciada-por-el-gobierno-enterate-que-contie-
• Delpin, Felipe (2019, abril 11). «Hoy rea- ne-quien-la-recibe-y-cuando-se-entrega/>
lizamos un operativo de retiro de las Consultado 19/05/20.
personas en situacion de calle en con- • El Desconcierto (2020, abril 21).
junto con Concesionaria ruta maipo» «‘Llegamos tarde como institución’: Hogar
[Publicación de estado]. Facebook. <ht- de Cristo se lamenta por muerte de indi-
tps://es-la.facebook.com/felipe.delpin/ gente afuera de una de sus residencias en
posts/2512369395462320?__tn__=-R> Coyhaique». El Desconcierto, Nota de
Consultado 11/04/19. prensa de Carolina Ceballos. <https://
• Diario UChile (2020, marzo 24). «Personas www.eldesconcierto.cl/2020/04/21/
en situación de calle y COVID-19: la ur- llegamos-tarde-como-institucion-ho-
gencia de medidas para garantizar cui- g ar-de-cristo-se-lamenta-por-muer-
dados e información». Diario UChile, te-de-indigente-afuera-de-una-de-sus-re-
Nota de prensa de Andrea Bustos. <ht- sidencias-en-coyhaique/> Consultado
t p s : / / r a d i o. u ch i l e. c l / 2 0 2 0 / 0 3 / 2 4 / 22/04/20.
personas-en-situacion-de-calle-y-co- • El Divisadero (2020, abril 28). «Hermana
vid-19-la-urgencia-de-medidas-para-ga- de Juan Carlos Aguilar: ‘Nadie hizo nada
rantizar-cuidados-e-infor macion/> por él’». El Divisadero, Nota de pren-
Consultado 25/03/20. sa. <http://www.eldivisadero.cl/noti-
• EFE (2020, mayo 12). «Byung-Chul Han: cia-56678> Consultado 05/05/20.
Viviremos como en un estado de guerra • El Llanquihue (2010, octubre 27). «El ‘se-
permanente». Agencia EFE, Entrevista ñor de los perros’ falleció en Paseo Talca.
de Carmen Sigüenza y Esther Rebollo. Indigente murió en medio de transeúntes y
<https://www.efe.com/efe/espana/ nadie se percató». El Llanquihue, Nota de
destacada/byung-chul-han-viviremos-co- prensa, p. A10.
mo-en-un-estado-de-guer ra-per ma- • El Llanquihue (2008, julio 26). «Dramático
nente/10011-4244280?fbclid=IwA- caso a metros de Intendencia. Indigente
R3azzXroKtFTiMIgL-2HvsqgQwF- soporta el frío y la lluvia en el cerro de

Piña Cabrera L.
88
ORIGINALES:
Salud en Personas en Situación de Calle
calle O’Higgins a 50 metros de la casa del tres-horas-atencion-medica-en-hospital-
Gobierno Regional». El Llanquihue, Nota san-jose.html> Consultado 11/01/11.
de Marcelo Galindo, p. A11 y portada. • Fundación Gente de la Calle (2020).
• El Llanquihue (2009, abril 21). «Peladeros, Carta Humanitaria para enfrentar la Crisis
drogas y alcohol. Ranking de los sitios eria- Sanitaria. Carta pública, PDF.
zos en Puerto Montt». El Llanquihue, Nota • Hodgetts, Darrin; Hodgetts, Andrea &
de prensa de Luis Toledo, p. A11. Alan Radley (2006). «Life in the shadow
• El Mercurio (2015, enero 26). «Ex Posta of the media: Imaging street homelessness
Central prohíbe que indigentes duerman en in London». European Journal of Cultural
recintos». El Mercurio, Nota de prensa de Studies, 9/4, 497-516.
S. Salazar, p. C6. • Jodelet, Denise (2008). «El movimien-
• El Mostrador (2020, mayo 21). «Los con- to de retorno al sujeto y el enfoque de
trastes de vivir en una hospedería con y las representaciones sociales». Cultura
sin COVID-19». El Mostrador, Nota de y Representaciones Sociales, Revista
prensa. <https://www.elmostrador.cl/no- Electrónica de Ciencias Sociales, 3(5),
ticias/pais/2020/05/21/los-contrastes-de- 32-63.
vivir-en-hospederia-con-y-sin-covid-19/> • La Nación (2007, agosto 12). «Blanca mi-
Consultado 21/05/20. seria». La Nación, Columna de opinión de
• El Mostrador (2020, mayo 20). «Santiago: Rafael Cavada, p. 22.
Desalojan a personas en situación de calle en • La Nación (2020, mayo 6). «Hombre en
plena crisis sanitaria». El Mostrador, Nota de situación de calle fue atacado en Parque
prensa de Nicolás Bravo. <https://www.el- Los Reyes: está grave». La Nación, Nota de
mostrador.cl/noticias/pais/2020/05/20/ prensa de Patricia Schüller. <http://lana-
santiago-desalojan-a-personas-en-situa- cion.cl/2020/05/06/hombre-en-situacion-
cion-de-calle-en-plena-crisis-sanitaria/> de-calle-fue-atacado-en-parque-los-reyes-
Consultado 21/05/20. esta-grave/> Consultado 06/05/20.
• El País (2012, abril 12). «El FMI pide ba- • La Tercera (2020, mayo 26). «¿Por qué llora
jar pensiones por ‘el riesgo de que la gen- la señora de la tele?». La Tercera, Columna
te viva más de lo esperado’». El País, Nota de opinión de Pablo Walker. <https://
de prensa de Sandro Pozzi. <https:// www.latercera.com/opinion/noticia/
elpais.com/economia/2012/04/11/ac- por-que-llora-la-senora-de-la-teleKIHDD-
tualidad/1334133453_457282.html> 4QXXNDHFKHTZRWBFP3U6Q/>
Consultado 31/05/20. Consultado 26/05/20.
• El País (2011, julio 11). «Remueven a Ana • Minsal (2020b). Informe epidemiológi-
Vignoli del Mides; la sustituye Olesker». co No 4 Enfermedad por SARS-CoV-2
El País, Nota de prensa. <http://www. (COVID-19) Chile 06-04-2020. Ministerio
elpais.com.uy/110711/ultmo-579117/ de Salud, Departamento de Epidemiología,
ultimo-momento/remueven-a-ana-vig- Santiago de Chile.
noli- del-mides-la-sustituye-olesker/> • Minsal (2020a). Informe epidemiológi-
Consultado 06/06/12. co No 10 Enfermedad por SARS-CoV-2
• EMOL (2020, mayo 22). « El dispar presen- (COVID-19) Chile 20-04-2020. Ministerio
te entre la Región de Valparaíso que superó de Salud, Departamento de Epidemiología,
los 2 mil casos y la de Aysén que cumple 15 Santiago de Chile.
días sin contagios». EMOL, Nota de prensa • Moscovici, Serge (1979). El psicoanálisis,
de Juan Peña. <https://www.emol.com/ su imagen y su público. Huemul, Buenos
noticias/Nacional/2020/05/22/986929/ Aires.
Valparaiso-contagios-covid19-Aysen. • Orwell, George (2003). Rebelión en la gran-
html> Consultado 22/05/20. ja. Ed. Destino, Barcelona.
• EMOL (2011, enero 11). «Hombre murió • Piña, Leonardo (2013). Calle y casa. La si-
tras esperar por más de tres horas aten- tuación de calle como fenómeno de fron-
ción médica en Hospital San José». EMOL, tera. Puerto Montt, avances para una com-
Nota de prensa. <https://www.emol.com/ prensión desde sus actores (Tesis doctoral).
noticias/nacional/2011/01/11/457695/ Universidad de Tarapacá y Universidad
hombre-murio-tras-esperar-por-mas-de- Católica del Norte, Arica.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 N°2: 79-91


89
• Presidencia (2013, agosto 22). El Poder cursarán multas de hasta $240 mil a quie-
Ejecutivo promulgó Ley sobre Faltas nes instalen carpas en la alameda y plazas».
y Conservación de Espacios Públicos. T13, Nota de prensa. <https://www.t13.
Uruguay Presidencia. <http://www.presi- cl/noticia/nacional/estacion-central-cur-
dencia.gub.uy/Comunicacion/comunica- saran-multas-240-mil-quienes-insta-
cionNoticias/ley-de-faltas-promulgada> len-carpas-alameda-y-plazas> Consultado
Consultado 02/04/19. 03/04/19.
• Público (2012, abril 28). «Hungría crimina- • The Clinic (2006, junio 15). «¡Se llevaron
liza a los ‘sin techo’ con penas de hasta 6 al Anticristo! Municipalidad lo internó en
meses de cárcel». Público, Nota de prensa. una clínica siquiátrica». The Clinic, Nota de
• Romaní, Oriol (1996). «Antropología de la prensa de Leo Marcazzolo, pp. 6-7.
marginación. Una cierta incertidumbre». • Tiempo (2020, mayo 11). «Preocupa la
Ensayos de antropología cultural. Ariel, crecida de casos de covid en parado-
Barcelona, pp. 303-318. res de CABA». Tiempo, Nota de prensa
• Romero, Caro (2020, mayo 23). « Ayuda!! de Gustavo Sarmiento. <https://www.
Somos un grupo de amigos que asistimos a tiempoar.com.ar/nota/preocupa-la-creci-
personas en situación de calle» [Publicación da-de-casos-de-covid-en-paradores-de-ca-
de estado]. Facebook.<https://m.fa- ba> Consultado 13/05/20.
cebook.com/story.php?story_fbid=10 • Tempo (2020, mayo 12). «Cierran el pa-
220930048296690&id=1105111522> rador para gente en situación de calle
Consultado 24/05/20. de Retiro por 79 casos de coronavirus».
• Ruiz, Alí (2013). La velocidad de la muerte. Tiempo, Nota de prensa. <https://www.
La intervención institucional con jóvenes tiempoar.com.ar/nota/cierran-el-pa-
en situación de calle como desaceleración rador-para-gente-en-situacion-de-ca-
de la entropía (Tesis doctoral). Universidad lle-de-retiro-por-79-casos-de-coronavirus>
Nacional Autónoma de México, Ciudad de Consultado 13/05/20.
México.
• T13 (2019, abril 3). «Estación Central:

Piña Cabrera L.
90
Especial Pandemia
La Pandemia por Un actor-una red: un Muerte en situación de
Covid2-2019 actante. A propósito de calle. Un ensayo sobre
la reflexión de Carlos personas, pandemia y
Montoya… (des)protección

DO S S I E R J UNIO 2 0 2 0 ; VOL . 6 0 ISSN 0716-1 336


Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1) DOSSIER PANDEMIA

Presentación
Yuri Carvajal Bañados1

E ste segundo dossier sobre pandemia es-


peramos sea señal de cierre de este ciclo
monográfico editorial. Algunos países
que entraron en el ciclo epidémico próximos a no-
sotros, siendo más poblados que Chile, salen ya de
En la incapacidad de ser parte del eslabón de
lo cuantitativo, nos quedamos con las sabias pa-
labras de nuestros articulistas. La propuesta alter-
nativa de Carlos Montoya, apretado resumen de
más de 6 décadas de trabajo salubrista. O la eru-
la crisis con un balance escueto de 102 muertos. dita apertura de Reinaldo Bustos. La primera nos
Mientras la edad promedio de la gripe española ha servido para un diálogo sostenido por Fabiola
fue de 28 años, aún no logramos saber cuál es la Jaramillo, Esteban Figueroa y Jaime Sepúlveda. El
edad media de los muertos por sexo y comuna de segundo texto queda presentado como una invi-
nuestro país, ni la sobremortalidad comunal por tación a un diálogo mayor. Nelson Arellano nos
otras causas, ni la proporción de seropositivos por hace remirar la figura de nuestras ciencias tercer-
comunas. Hasta hace dos meses todo el afán en mundistas para hacer frente a un problema real,
salud era por eficiencia. Hoy ni siquiera sabemos de nuestras instituciones y de nuestro saber.
la efectividad de las medidas tomadas. No es fácil trabajar editorialmente en estas con-
La incertidumbre es parte de la realidad, pero diciones. Mientras producíamos este número, he-
podría ser menor. Todo el resto de las cuestiones mos palpado la generosidad enorme de los equi-
pueden ser sobrellevables, sobre todo para aque- pos de salud de hospitales y atención primaria,
llos que ni siquiera hemos tenido un coriza. Pero una tenacidad increíble frente a las dificultades.
cifras serenas, estables, construidas con voluntad Sin embargo, ni las personas ni las ideas pueden
de componer un espacio público nos han hecho dejar de ser tocadas por tanto encierro.
falta quizás más que las palabras.

1 Director Cuadernos Médico Sociales

95
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1) DOSSIER PANDEMIA

La pandemia por COVID2-2019


Dr. Carlos Montoya-Aguilar1

E stá siendo difícil dominar el fenómeno en Chile, en este 2020. Hay dos problemas graves: (A)
una colisión con el enorme centralismo o macrocefalía (ausencia mórbida de planificación
territorial). La otra, (B) un intento de manejo de la epidemia por la vía casi exclusiva de la
administración sanitaria.
El centralismo dificulta la participación de la gente y el actuar de los responsables locales; fortalece la
autoridad técnica única. El empleo de la gestión fuerte para manejar la epidemia está resultando en que el
virus maneja la situación, y no los gestores. La autoridad centralizada –Ministerio- dice en voz alta que los
chilenos tienen hoy un intenso temor a la muerte, que alcanza a los niños y que durará por generaciones.
Que aumenta la pobreza. Que la necesidad económica impide el cuidarse y cuidar. Destaca la violencia.
¿en aumento? Que hay o habrá guerra – por ventiladores, por las futuras vacunas. El ministro formula una
analogía con un rumor de apocalipsis: Radek, Sarajevo. Los éxitos, aparentes en un momento, se esfuma-
ron con la semana santa (abril 10) y se justifica el pesimismo. La población chilena no ve cuándo ni cómo
terminará el túnel en que estamos, con una cantidad de infectados igual a la de China y sin visos de bajar.
No percibe que, en España, que llegó a tener miles de fallecidos, los nuevos positivos bajaron a fines de
mayo a apenas 132; y según los expertos “es muy probable que en dos o tres semanas más el patógeno sea
absolutamente marginal, y las mascarillas sean innecesarias” (infectólogo de Barcelona, 25.05.2020) y que
se abran las playas.
Falta en Chile la aplicación y difusión suficiente del pensamiento epidemiológico: comprender la epide-
mia, el agente y el sustrato. Y hacerlo con participación local y con leguaje tranquilo. El gerente pone los
recursos donde están los pacientes, y es lógico. El epidemiólogo, en cambio, formula preguntas, y busca
respuestas con las personas, con el espacio y el tiempo.
En reuniones locales, a lo largo de Chile, nos preguntaríamos:
¿Qué ocurre? ¿Qué problemas afectan a la población, al grupo? ¿Cuál es su importancia relativa? ¿Qué
subgrupos (con qué características) son afectados por cuáles subproblemas? ¿Dónde ocurren los proble-
mas y cuándo (con qué frecuencia)? ¿Dónde está el mayor impacto? ¿Cómo evitar nuevos casos, aquí?
¿Qué iniciativas locales están resultando Y por qué? ¿Están siendo publicitadas? Las preguntas apuntan a
la formulación de hipótesis acerca de las causas y factores probables del problema o problemas, y sobre
soluciones.
Estas hipótesis se conversarían con la población en cada localidad y en conjunto se contrastarían con
los hechos observados. Se procesarían los datos recogidos: registros, tests, mapas, gráficos temporales
(curvas), tasas, perfiles de salud local.; esta información indicará cuándo y dónde introducir o intensificar o
suspender medidas de control, como el aislamiento, medidas de higiene personal o vacunas.
Este enfoque también puede servir para motivar a voluntarios para que ejecuten actos de control de la
trasmisión y sus rutas, y de identificación de casos de riesgo (p.ej. cuidadores de enfermos, personas con
otros riesgos laborales, gente indiferente, alcohólicos, gente sometida a hacinamiento, migrantes); de via-
jeros, de comerciantes, de conductores de camiones o de trenes, O puede servir también para organizar
campañas de emulación entre comunas y distritos que logren mantenerse libres de nuevos casos.
Una fuente de conocimiento a la vez gerencial y epidemiológica es el grado y modo de utilización de
los consultorios públicos (atención primaria) y privados y de las farmacias, a donde pueden (o no) acudir
personas con sus síntomas y sus contactos, con sus necesidades, sus actitudes y sus conductas.
La epidemia y los esfuerzos por controlarla nos han brindado un repaso vivo de la epidemiología de las

1 Médico pediatra. Profesor Titular de Salud Pública, Universidad de Chile.

97
enfermedades infecciosas causadas por virus de Unidos. Vale la pena discutir esas cifras en las
alta transmisibilidad y de los modos más o menos localidades: ¿con qué sucesos coincidieron? Un
efectivos de orientar dichos esfuerzos. análisis epidemiológico puede ayudar a trazar
La gestión centralizada pone énfasis en el temor. las rutas del virus, identificar factores pronósti-
El ministro de salud había explicado en una entre- cos y evaluar las medidas de control que se han
vista del 23.05, “tal vez nos calmamos, dejamos de ejecutado.
asustar a la gente”, y el 27 de mayo, luego de reco- Para ponderar la situación relativa de dicha pan-
nocer, con franqueza encomiable, que “sus pro- demia en Chile – y supongo que la misma preocu-
yecciones se han derrumbado” y que desconocía pación ha asaltado a otros salubristas de la Región
la magnitud de la pobreza y del hacinamiento de la – quise ver qué pasa con las demás causas de mor-
población de Santiago, da lugar a que el diario La bilidad y mortalidad. No encontré cifras recientes
Tercera diga que “el jefe del Ministerio sí parece en los sitios web del Ministerio. Al formular la
haber dado en el blanco en que, dada la conducta demanda en inglés aparecieron en internet, en el
de la ciudadanía, tal vez sea mejor apelar al miedo sitio de una empresa privada (Statista.com) las ci-
de la población”. fras más recientes de muertes por grandes grupos
El Mercurio del 24 de mayo refuerza la alar- de causas de Chile (2017). Sumaban “más de 106
ma al titular “Casos de covid-19 en la Región 000”. Lo importante es que en este período de la
Metropolitana podrían ser 7,6 veces más de los pandemia –y así lo ha apreciado el ministro (El
que ya han sido detectados”, “según un estudio Mercurio, 23.04-2020), han disminuido las con-
realizado por la Universidad DD”, “estudio que sultas y controles por esas grandes causas y las de
aún no está terminado” pero a partir del cual un carácter preventivo que corresponden a niños y
académico de otra Universidad privada deduce gestantes. Es tarea de los responsables de los res-
que “vamos a tener que seguir aumentando los pectivos programas promover que la población
testeos, y si se detectan más personas positivas, no postergue – por el “factor coronavirus”, que
se debe tener más capacidad para aislarlos”. Y desordena nuestras actividades-- tales consultas y
el aislamiento es lo más difícil de imponer y de los exámenes pertinentes. De lo contrario, apare-
mantener. cerá en el futuro próximo un empeoramiento de
El 29 de mayo se supo por la prensa que el mi- nuestros indicadores de salud y una sobrecarga de
nistro de salud había contratado – con sueldos de trabajo del sector público del sistema de atención
hasta $ 900 mil - a 800 personas adicionales para de salud, que se sumará a la demanda incremen-
reforzar la tarea de trazar a los contactos de los tada por las secuelas físicas y psicológicas de la
casos positivos para el virus. Hasta ahora eran 80 epidemia.
los funcionarios encargados de esta labor y evi- Es muy importante el lenguaje que emplean
dentemente no daban abasto. Al día siguiente, al- los gobiernos. Por ejemplo, el Presidente López
gunos alcaldes ya reclamaban por el retraso en la Obrador, que da una conferencia diaria al pueblo
entrega de las cajas de alimentos prometidas por de México, llama a no relajar la “sana distancia”;
el gobierno central para paliar el recrudecimiento pero les dice “ya vamos de salida”, y también, “el
de la pobreza, vinculado al aislamiento simultáneo 1 de junio se informará sobre cómo se reiniciará
decretado para millones de personas. la apertura gradual del país, según el semáforo por
Cabe insistir en que este y otros problemas hu- regiones…se informará sobre la posibilidad de re-
bieran sido menores si, desde un comienzo, se hu- greso a clases en algunas regiones, de acuerdo con
biera utilizado el pensamiento epidemiológico-so- maestras, maestros, padres de familia y autorida-
cial y se hubiera convocado a la participación de la des locales. Hay un plan para reactivar 2 millones
atención primaria y de los organismos y dirigen- de empleos para fines de 2020. A partir del 01.06,
tes de la comunidad, debidamente informados y nueva normalidad”.
motivados, a actuar, en uso de su conocimiento
y relaciones locales, en el control de la pandemia. ¿CÓMO SACAR PROVECHO DE
Las cifras publicadas diariamente por el ESTA EXPERIENCIA PARA LA POST
Ministerio de Salud relatan bien el proceso de PANDEMIA?
contagios y de fallecimientos por el Covid-19,
ocurridos a partir del 4 de marzo del 2020 en Por ejemplo, en la campaña contra el virus, he-
Chile. Como producto de la estrategia nacional, mos aceptado la importancia de definir distritos
los incrementos cuotidianos no han sido “explo- y sus poblaciones para adoptar medidas como
sivos” como en Italia, Francia, España y Estados cuarentenas o cordones sanitarios. Estas áreas

Montoya Aguilar C.
98
DOSSIER PANDEMIA

podrían ser autosustentables y autogobernadas en aproximadamente cien mil residentes, con


varios sentidos. Gente que nunca se había recono- sectores de quince mil habitantes o cinco mil
cido antes y ahora enfrenta un enorme problema hogares.
común se ven obligadas a discutir y tomar deci- En los cabildos o talleres de autogobierno parti-
siones: a gobernarse. Los mecanismos pueden cipativo, los participantes pensarán lo que es posi-
llamarse cabildos, comités, talleres, grupos de ble hacer y lograr poniendo TODOS los recursos
trabajo. En cuanto al cuidado de su salud física y locales en juego. Estos se asignarán a las activida-
mental habrán de ver cómo cumplir con eficacia des según criterios lógicos consensuados. El re-
y eficiencia las directivas técnicas del ministerio, sultado de comerciar los productos se distribuirá
y cómo adaptarlas si fuese necesario. según criterios económicos: inversión, consumo,
En las demás materias, cada distrito semi-ais- necesidad, mérito.
lado muy pronto deberá resolver los temas de Como se ve, estamos en la Utopía de Moro, o
la producción y del empleo, precisamente a cau- en la Isla del Sol, de Campanella; siempre ha sido
sa del aislamiento relativo al que la pandemia éste un paso intelectual inevitable, al pensar en
obliga. el progreso social. Pero es una utopía corregida
¿Qué producir? La respuesta depende de los por la dura experiencia: el “estallido social”, los
recursos con que se cuente localmente: recursos “procesos constituyentes”, la “evaluación de los
humanos, materiales, financieros, técnicos, lega- avances y retrocesos de la pandemia”.
les, patrimoniales/históricos. Nos moveremos hacia objetivos compartidos,
Pueden producirse tejidos, ropa, cerámica, sin desviarnos mucho del principio de la partici-
máquinas, textos, mobiliario, programas infor- pación inteligente, del uso de TODOS los recur-
máticos, edificios, caminos, puentes, parques, sos locales para efectuar TODAS las actividades
defensas contra incendios, según lo que se productivas en forma planificada.
necesite. La pandemia, como el estallido social, será, ya
Para diversificar su capacidad, cada distri- es, un actor más de los distritos o Silos.
to debería ser urbano y rural. Con el objeto
de facilitar su administración, debería estar
sectorizado.
En Regiones con un millón de habitantes,
los distritos (o silos: sistemas locales), tendrán

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


99
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1) DOSSIER PANDEMIA

Un actor-una red: un actante


A propósito de la reflexión de Carlos Montoya …

Fabiola Jaramillo Castell1


Esteban Figueroa Oliva2

A ratos pareciera que se ha liberado un malvado de “mal genio” entre nosotros, desarticulando
nuestras certezas y llevándonos a nuevos escenarios ontológicos. Los esfuerzos técnicos, polí-
ticos, económicos se presentan débiles frente a la nueva realidad social; mientras que el empleo
de la gestión fuerte para manejar la epidemia no está entregando el resultado esperado y devolver a los
gestores el control de la situación.
El salto ontológico ocurre en un momento en que los seres humanos hemos dado por sentado muchos
de los procesos de nuestro contexto inmediato. La sociedad y la producción de conocimiento funcionan
como una caja negra donde a pesar de desconocer el funcionamiento de las complejidades nos confor-
mábamos con identificar datos de entrada y datos de salida bajo principios de linealidad, causa – efecto
y, principalmente desde una posición de privilegio en la que diferenciamos y separamos la realidad entre
“objeto y sujeto”.
La emergencia del virus SARS-COV-2 (COVID-19), destruye la caja negra, la descompone y aquello
que estaba invisibilizado e irreconocible emerge rebelándose del esencialismo simplista. Aquí parece in-
teresante comprender el ruido que se produce al desensamblar la silenciada complejidad contenida en la
caja; transformar el ruido hacia una resonancia con sentido será solo posible si encontramos una forma de
reensamblar las piezas del mecanismo, actualmente dispersas.
Aproximaciones como la Teoría del Actor Red (TAR) puede permitir apreciar la complejidad y dinamis-
mo de la realidad, que difícilmente serían captados por aproximaciones metodológicas que buscan aproxi-
maciones causales para su estudio.

DESDE UNA MIRADA DEL TIEMPO NO LINEAL:

La TAR nos resulta especialmente útil para entender fenómenos no lineales cuando el foco no se sitúa
en las personas y/o las tecnologías sino en todo aquello (humano y no humano) que da soporte a la presta-
ción sanitaria (equipo, equipamiento, dispositivos, infraestructura, etc.), así como también en lo que éstos
se convierten como resultado de su posición en la red (ontología relacional), generando la emergencia de
entidades con poder de agencia, resultado de la configuración dinámica de actores humanos y no humanos.
El diseño espacio temporal de las entidades que se relacionan entre sí son para (Latour, 2007) una red “más
flexible que la noción de sistema, más histórica que la de estructura, más empírica que la de complejidad”.
Latour, citado por Moreira (2011) da cuenta que, esta red heterogénea será precisamente el actor-red, la
entidad indeterminada a ser estudiada. Se trata de dar cuenta acerca de cómo aquellos entramados de investigaciones y
tecnologías forman parte de una red sociotécnica, que no es ni tecnología, ni ciencia, ni sociedad por separado, sino una nueva
entidad.
Para Latour (2007) cualquier entidad que produzca una relación o adquiera valor de significación será
un actante. El actante se definirá por la capacidad de producir una acción dentro de una trama y de pasar
rápidamente de un estatus a otro siendo precaria su determinación (Tirado & Domènech, 2005); para la
TAR la trama será el propio el actor-red. Dicho esto podemos observar en la gestión de esta crisis el rol

1 Médica Psiquiatra, Máster en Salud Pública y Gestión Sanitaria, Doctoranda en Economía.


Correspondencia a: fabiolaj77@ gmail.com
2 Antropólogo, Magíster Gestión en Salud

101
predominante de los actantes no humanos (test, El científico de la TAR (Moreira, 2011) estudiará a
los ventiladores mecánicos, los equipos de ima- las asociaciones de actantes, trazando las redes que éstos
genología, etc.) y ciertos actores humanos como configuran (siendo estos propios actantes redes conectadas
personal sanitario de los hospitales y clínicas; sin que conforman otras redes o actor-red). Su objetivo será
embargo están totalmente ausentes de este ma- la descripción del funcionamiento de dichos co-
nejo los actantes humanos que conforman la lectivos: Diversos elementos, metas, acciones da-
APS, comunidad organizada, comunidad científi- das en otros tiempos y diferentes espacios coexis-
ca, entre otros y otros no humanos que nombra ten comprimidos, plegados, en un único actante.
Montoya como datos, registros y mapas elabora- Callon y Latour (1990) citados por (Moreira, 2011)
dos con datos gubernamentales; esto se une a otro abogan por el abandono de las nociones de naturaleza y
actante que menciona Montoya: la información, la sociedad como principios de explicación, dejando entrever la
gran cantidad de información y la cuestionable ca- emergencia de una nueva entidad, la socio-natural, una red
lidad, de la misma. Se define como Infodemia la de asociaciones que liga humanos y no humanos.
excesiva cantidad de información sobre un tema
(tanto la fiable y creíble como la falsa y manipula- EL ESPACIO-TIEMPO
da). Aquí merece la pena detenerse a pensar en la EPIDEMIOLÓGICO:
intención detrás de ésta, cuando es abiertamente
falsa para generar confusión (Fake-News) tanto Es una mezcla de relaciones de elementos hu-
como cuando la credibilidad de la información manos y no humanos. Una entidad mediadora
esta tan desacreditada, como es el caso de varios con capacidad de agencia como el Virus SARS-
gobiernos en este contexto. COV-2 COVID 19 es capaz de producir trans-
El sesgo de sobre confianza que supone asumir formaciones y cambios en los demás actantes de
que las enfermedades infecciosas estaban supera- la red, siendo estos humanos y no humanos. En
das, nos llevaba paradójicamente a insistir en las definitiva, (Palacio, 2015) es importante conocer
estrategias de abordaje farmacológicas de las en- quienes a través de su acción inciden en los terri-
fermedades crónicas no transmisibles, asumiendo torios, con quién, dónde y cuándo llevan a cabo
que las infecciosas se limitaban a una clase social sus acciones y que alianzas y conflictos (contro-
empobrecida o a otros países, usándose incluso versias) emergen de ellos. Para Latour (2007), las
de excusa xenofóbica a la migración desde países controversias nos señalan las ocasiones que las
pobres. Supondría también asumir que el aborda- distintas entidades tienen para establecer contac-
je exclusivamente hospital céntrico respondería to. Hay que reconocer que la complejidad socio
adecuadamente. El antídoto a la sobre confianza técnica requiere de la historicidad, y de una com-
parece ser la conexión con el territorio y las nece- prensión diferente a la linealidad del tiempo.
sidades de respuestas locales.
Ilustración 1: Representación de la complejidad
La TAR ayuda a conceptualizar como diferen-
sociotécnica en la respuesta sanitaria, en el te-
tes realidades son experimentadas por diferentes rritorio. Cada nodo y sus relaciones constituyen
actores, estableciendo un dibujo más nítido de sus actantes que al relacionarse dan forma a nuevas
relaciones dinámicas, algo fundamental dado el entidades. Siguiendo procesos no lineales. Ela-
carácter continuamente cambiante de la atención borado por E Figueroa y Fabiola jaramillo, con
GEPHI 1.2 (Jaramillo, 2019)
sanitaria, en especial con iniciativas de cambio
establecidas por las organizaciones sanitarias que
generan también cambios en las posiciones de po-
der. Frente al abordaje de la emergencia sanitaria,
la fragmentación entre autoridad sanitaria y redes
en el ministerio supone importantes efectos en la
falta de coordinación entre los distintos niveles y
dispositivos de atención, con la correspondiente
duplicación de servicios (la vigilancia epidemioló-
gica, por ejemplo) y donde las prestaciones se rea-
lizan en el lugar menos apropiado, generalmente
en los hospitales. Implicando un encarecimiento
de los costos y lo que aún es más grave, el aumen-
to del riesgo para las personas que hacen uso de
los servicios de salud.

Jaramillo Castell F.
102
DOSSIER PANDEMIA

EN RESPUESTA A LA PREGUNTA
CRUCIAL DE CARLOS DE ¿QUÉ
PRODUCIR? REFERENCIAS

Un camino autárquico local parece razonable Francisco Tirado, M. D. (2005). Asociaciones


pero quizá la respuesta debería pasar por preservar Heterogéneas y Actantes: EL giro Postsocial de la teo-
y proteger lo humano, en un entorno donde los ría actor red. Madrid: Revista de Antropología
actantes no humanos cada vez son más determi- Iberoamericana . Obtenido de https://www.re-
nantes. Algo que parece sumamente complejo, en dalyc.org/pdf/623/62309905.pdf
una crisis que paradójicamente, es esencialmente Jaramillo, F. (2019). Teoria del Actor Red: una posi-
humana: donde los que mueren son humanos, los bilidad de análisis de la integración, en la red de salud
que cuidan y atienden también lo son, los que vi- mental en la Provincia de Palena (Servicio de Salud del
ven las cuarentenas, tanto los que se pueden que- Reloncaví, Chile) tras la implementación del Modelo
dar en casa como para los que aquello es un lujo de Redes Integradas de SAervicios de SAlud (RISS).
inalcanzable. Latour (2007) nos propone una nueva Trabajo Fin de Máster (TFM), Escuela Andaluza
constitución3 alternativa a la constitución moderna. de Salud Pública, Granada.
A esto Latour (Moreira, 2011) agrega: 1) la no se- Latour, B. (2007). Nunca fuimos modernos. Siglo
parabilidad de la producción de las sociedades y las veintiuno editores Argentina S.A.
naturalezas, 2) asumir la transcendencia de la natu- Moreira, G. M. (2011). El concepto de mediaciópn
raleza y la inmanencia de la sociedad, pero sin se- técnica en Bruno Latour. Montevideo: Facultad de
pararles, 3) la redefinición de la libertad entendida Psicología Universidad de la República.
como una capacidad de selección de combinacio- Palacio, D. C. (2015). Redes, actores y gobernanza
nes de híbridos que no depende de un flujo tem- desde un enfoque relacional. (P. Ungar, Ed.) Hojas
poral homogéneo y 4) la producción de híbridos de ruta, Guía pare el estudio socioecológico de la alta mon-
explícita y colectiva en tanto objeto de una demo- taña en Colombia.
cracia ampliada. Esta alternativa es la explicitación
política de la TAR que sin lugar a duda redimensio-
na el propio concepto de política.

3 (Moreira, 2011) Ésta se postula en cuatro garantías, a saber, a) el carácter trascendente de la naturaleza pero movilizable, por
tanto inmanente, b) el carácter inmanente de la sociedad pero que nos supera, por tanto trascendente, c) la distinción entre na-
turaleza y sociedad, de ahí la negación de la relación entre el trabajo de purificación y el de mediación y d) la ausencia de un dios
que no obstante sigue regulando las dos ramas del gobierno, la naturaleza y la sociedad.

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


103
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1) DOSSIER PANDEMIA

Reflexiones acerca de artículo de


Dr Carlos Montoya acerca del COVID2-2019
Dr. Jaime Sepúlveda1
03/06/2020

E l documento resume la mirada de un salubrista de larga trayectoria, lo que en principio garantiza


el rigor epidemiológico social con el cual el autor se acerca a la temática en cuestión. En líneas
generales se hace un cuestionamiento al centralismo de las decisiones técnico administrativas en
el manejo de la epidemia y las dificultades que esto supone a la participación de la gente y el actuar de los
responsables locales. Llama la atención al discurso un tanto catastrofista de la autoridad sanitaria que
se repite en los medios de comunicación, buscando disciplinar la conducta de la gente y atrayendo
la atención a la preparación para una respuesta asistencial ante la presión de una demanda inevita-
ble. Reclama la aplicación y difusión suficiente del pensamiento epidemiológico razonado y actuado
desde la realidad local con la participación de la población y en un lenguaje tranquilo. Al respecto se
refiere a problematizar la situación a nivel regional y local, con un buen manejo de la información e
incorporando a todos los actores (consultorios públicos y privados, farmacias). Subraya el análisis
del comportamiento del brote epidémico que ayude a trazar las rutas del virus e identificar factores
que puedan influir su curso y las medidas de control a ejecutar. También hace mención a cuidar el no
postergar acciones sanitarias que atienden regularmente las necesidades de la población (control de
salud, manejo de crónicos, etc.)
Habla de aprovechar de la experiencia de la campaña, considerar, por ejemplo, la importancia de de-
finir distritos (Silos) y sus poblaciones para adoptar medidas como cuarentenas, cordones sanitarios.
A respecto sugiere pensar en la autosostenibilidad y autogobierno de los territorios con amplia parti-
cipación de la gente, para lo cual dice podría promoverse la conformación de comités, talleres, grupos
de trabajo. En su momento estima que estos distritos, cuasi aislados por el avance de la pandemia,
deberían plantearse el tema de la producción y al respecto la sitúa dependiendo de lugar, recursos,
giro de la economía local, etc.
En síntesis, en estos cabildos o talleres de autogobierno participativo se desarrollaría una gestión
integral, descentralizada y planificada del control de la pandemia, relevando el principio de la partici-
pación inteligente y el uso de todos los recursos locales.
Mi comentario a la propuesta: Me parece acertado el enfoque que pone el énfasis en la gestión
socio sanitaria descentralizada, a nivel territorial, incorporando la participación de los actores locales
e incluyendo todos los recursos. Comparto la exigencia de un pensamiento epidemiológico amplio,
aplicado en función de una planificación estratégica de los recursos disponibles. Sin embargo, -en-
frentar condiciones muy adversas, sumado a que no se han entregado respuestas oportunas frente al
agresivo avance del virus- hace temer un pronóstico no auspicioso2.
En este sentido y con criterio de factibilidad de una propuesta, estimo que no debe quedar fuera el
análisis sociopolítico de las circunstancias históricas en que se desenvuelve la pandemia: Hegemonía
de un modelo de sociedad que presenta desigualdades estructurales que impactan las condiciones
de vida y salud de un elevado porcentaje de la población, concentración del poder económico y
político, ideología donde permea el individualismo, la insolidaridad, el consumo, con un Estado sub-
sidiario que ha llevado a la precarización de los bienes públicos, mercantilización de la salud, en

1 Médico Pediatra, egresado Magister Sociología, Diplomado en Salud Ocupacional y en Gestión en Salud. Dpto de Salud
Pública, Consejo Regional Santiago. Colegio Médico de Chile
2 El día 4 de junio Chile registraba 118.292 casos, 6.192 por millón de hab., proporcionalmente la cifra más alta de las Américas.

105
particular. Ciudadanía despolitizada y carente en su capacidad de autodefensa de sus derechos
de organización. y carente de una férrea organización a nivel lo-
Resultado de esto y en la coyuntura de la cal, que asegure se pueda responder oportuna
pandemia: grandes sectores de población en si- y efectivamente ante el desafío de la pandemia.
tuación de pobreza multidimensional, elevada En este escenario, el problema está en poder
precarización del empleo, marginalidad, etc , hacer factible el actuar con urgencia, reorien-
todo lo cual la lleva a ser población muy vulne- tando acciones y recursos al nivel local convo-
rable al contagio. Por otra parte, un modelo de cando y logrando una protagónica presencia de
salud fragmentado, hospitalocéntrico, fuerte- la ciudadanía en la autodefensa de su salud.
mente privatizado, con una Atención Primaria Todo lo anterior, entre otras razones, me lleva
postergada, falta de recursos y de capacidad de siendo realista a pensar la necesidad de fórmu-
resolución. No planificación sanitaria en la asig- las más complejas que contengan la dimensión
nación de los recursos. Debilidad del poder lo- socio-política sanitaria con visión estratégica,
cal municipal (inequidades en la distribución de que nos permita soñar y hacer factible la utopía
recursos entre municipalidades de altos y de ba- a la que nos invita el Dr. Montoya.
jos ingresos) y, sobre todo, ciudadanía restada

Sepúlveda J.
106
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1) DOSSIER PANDEMIA

La medicina, los Cuerpos de los Seres Humanos y el


Coronavirus: un ensayo para pensar las implicancias
éticas, políticas y económicas de una pandemia y
futuro de los servicios sanitarios
Dr. Reinaldo Bustos Domínguez1

I.- INTRODUCCIÓN:

M irada en una perspectiva histórica, el cuerpo de los seres humanos siempre ha estado expuesto
al contagio o la expresión de la enfermedad como individuos o como sociedad. La medicina,
ha sido la respuesta cultural a la incertidumbre y caos que implica la aparición del sufrimiento,
la enfermedad y la muerte en todas las sociedades humanas conocidas. La historiografía moderna abunda
en estudios que dan cuenta de las interrelaciones de la salud individual y colectiva y los sistemas de cono-
cimientos y valores desde la antigüedad hasta los recientes brotes epidémicos y pandémicos de comienzos
del siglo XXI. En la Grecia clásica, para considerar un punto de referencia relativamente conocido, los escritos
hipocráticos dan cuenta de la justificación moral y espiritual de cuerpos higiénicos y ambientes limpios. Sin que
exista un desarrollo histórico lineal de las prácticas de curación y provisión de servicios sanitarios para los indivi-
duos, los grupos sociales o las poblaciones en el largo período que se ancla en la antigüedad hasta nuestros días,
se sabe que la práctica política de contar con médicos para la atención pública era una realidad en las ciudades-es-
tados griegas imitada y expandida en el proceso de helenización del Imperio Persa y más tarde en el Imperio
Romano hasta fines del siglo XX de nuestra era en oriente y occidente. En distintos momentos de este recorrido,
hubo reformulaciones políticas, económicas y administrativas muy definitorias e importantes. Ocurrieron en pe-
ríodos diferentes de la historia tanto durante el apogeo de la medicina islámica entre los siglos VII y XIII, como
posteriormente durante la Revolución Francesa, la Segunda Guerra Mundial en Inglaterra con el origen de un
Sistema Nacional de Salud, que fuera duplicado en nuestro país en 1952, que definió una estructura política-ad-
ministrativa sanitaria a escala geográfica espacial para toda la población del territorio nacional, el SNS.
Con el objetivo de dar cuenta de las complejas interrelaciones entre la salud individual y colectiva en sus di-
mensiones políticas, económicas y morales con ocasión de la pandemia de Coronavirus (COVID-19), en este
breve ensayo, hemos considerado que un esbozo genealógico de la categoría del cuerpo humano2, --de como
este se ha construido como referencia de la medicina y se ha transformado en un espacio de saber-hacer de las
políticas sanitarias en su relación con la economía y las técnicas de gobierno en la actualidad,-- es de gran utilidad
y potencialidad explicativa de las implicancias éticas y de sentido para la medicina y la política en el siglo XXI.

II.- DE LOS CUERPOS CÓSMICOS AL CUERPO MOLECULAR

En todas las tradiciones antiguas de pensamiento, el cuerpo de los individuos formaba parte de la natura-
leza y estaba sujeto a las influencias de los fenómenos naturales y mágico-religiosos en todos sus procesos
de salud y enfermedad. Los textos pre-hipocráticos3 que se conservan testimonian la presencia de relacio-
nes y analogías, correspondencias e influencias de fenómenos climáticos sobre la salud y enfermedad de los

1 Psiquiatra. Magister en Sociología U.C de Chile. PhD en Salud Pública-Bioética U.C. Lovaina
2 “Contemporary sociology has little to say about the most obvious fact of human existence, namely that human beings have,
and to some extent are, bodies”, Cf. Turner, B.S. The Body & Society. Explorations in Social Theory, 3rd Edition, SAGE Publi-
cations Ltda, Londres, 2008.
3 Cf. Hippocrates in contex. Papers read at the Collloquium University of Newcastle upon Tyne, 27-31 august 2002. Edited by
Philip J. van der Eijk, Brill-Leiden-Boston, 2005

109
cuerpos en relación con el sistema humoral y los pertenece naturalmente y que configuran el am-
ciclos de vida, estacionales, cualidades primarias biente en que vive, desde las estaciones del año al
de los frio y lo caliente, y los cuatro elementos de lugar físico donde habita, todas influyendo sobre
la naturaleza4 que, al mismo tiempo proveen los su salud o enfermedad8.
elementos representacionales para el tratamiento En el “El tratado sobre la naturaleza del hom-
curativo de los males. Asimismo, las relaciones del bre”9, que pertenece al Corpus, se articulan las
medio interno con el ambiente exterior enfatizan nociones señaladas en el sistema humoral que co-
la homeostasis y los regímenes profilácticos de la difica de manera paradigmática la naturaleza del
dieta o los regímenes de abstinencia frente a los cuerpo humano constituido por sangre, flema,
excesos, dentro de un sistema amplio de co-per- bilis y atrabilis, que en armonía de propiedades,
tenencia del cuerpo y la naturaleza en su conjunto mezclas y cantidades produce salud, y enferme-
que afirma la relación entretejida de los cuerpos al dad cuando se pierde la proporción, todo en co-
cosmos y a las divinidades. rrespondencia con las cuatro estaciones del año
Posteriormente, el Corpus Hipocraticum, con- y las propiedades del calor y el frío, lo seco y lo
junto de textos compilados por varios autores de húmedo. Esta correspondencia entregaba las ba-
la comunidad médica griega, absorben los cono- ses de un tratamiento racional para la enfermedad
cimientos anteriores y desarrolla prácticas que se que buscaba restaurar la homeostasis interior del
asocian a escuelas de pensamiento (empirismo y cuerpo, fin último de la terapéutica. Con la publi-
dogmatismo), en su visión del conocimiento mé- cación del Anonimus Londinensis10 papyrus en
dico y terapéutico en cada uno de los aspectos 1893, se ha podido comprender mejor la medicina
relevantes de la relación entre teoría y práctica, el hipocrática, sobre todo en relación a los factores
lugar de los pacientes y médicos, los significados causales de la enfermedad, las cuales pueden ser
de la enfermedad, los tipos de terapia, etc., siendo producidas por residuos, productos patológicos o
la interpretación de los síntomas especialmente secreciones naturales del cuerpo o cambio de sus
sugestiva de las diferencias5. También, las tesis de elementos, explicaciones enteramente naturales,
fondo sobre la correspondencia estructural entre la que según Vivian Nutton11, fueron aceptadas
el carácter del hombre, sus enfermedades y el me- prácticamente por todos los médicos de las distin-
dio ambiente, recogidos en el “Tratado sobre los tas escuelas médicas de la Grecia clásica, aunque
aires, las aguas y los lugares”6 que forman parte pudieran diferir en sus interpretaciones.
del Corpus Hipocraticum, tienen una sorpren- Las observaciones climatológicas contenidas en
dente actualidad a juzgar por las representaciones la serie de libros que forman “Las Epidemias”12,
que los hombres contemporáneos tienen de sus abundan en consideraciones sobre la variación de
procesos de salud y enfermedad7, y dicen relación los vientos y sus efectos en diversas manifestacio-
con el hecho de que al hombre se le considera nes patológicas.
dentro de un conjunto de circunstancias a las que En general, los médicos hipocráticos explican
4 Nutton, V. 2004. Ancient Medicine. London / New York: Routledge, pp. 24-25
5 En términos breves, se circunscriben a que los dogmáticos consideran los síntomas como efectos directos o causas próximas
y los empiristas la visión opuesta, es decir los síntomas son tal como se presentan a la observación directa. La primera, la dog-
mática, en cuya lógica se reconoce una mirada de superficie, el cuerpo exterior visible, que remite a un cuerpo interior, invisible,
donde yacen las causas de las enfermedades, los humores, comprende un momento diagnóstico y un razonamiento causal,
origen del pensamiento de la medicina que se desarrollará como representación hegemónica en occidente. Por ello, el postulado
diagnóstico es la delineación de la cadena causal del fenómeno patológico en medicina hasta hoy y herencia en sus comienzos de
la comprensión de la lógica silogista de Aristóteles que permitió a los dogmáticos una clasificación elemental de las enfermeda-
des, las que se podrían deducir de la expresión de sus síntomas externos.
6 Cf. Greek Medicine from Hippocrates to Galen. Select papers by Jacques Jouanna. Brill, Leiden-Boston, 2012, pp 155 y ss.
7 Cf. Herzlich, C., Pierret, J. Malades d’hier, malades d’aujourd’hui: de la mort collective au devoir de guérison. Payot, Paris,
1984. También; Laplantine, E., Anthropologie de la Maladie. Payot, Paris, 1986
8 Línea de pensamiento que se actualiza con desarrollos como los de la epigenética actual. Cf How biology became social, and
what it means for social theory. Cf. Maurizio Meloni. The Sociological Review, Vol. 62, 593–614 (2014) DOI: 10.1111/1467-
954X.12151
9 Cf. Jouanna, Jacques. 2012g. ‘The Legacy of the Hippocratic Treatise The Nature of Man: the Theory of the Four Humours’.
In Philip Van der Eijk, ed., Greek Medicine from Hippocrates to Galen. Selected Papers (Leiden / Boston: Brill, 2012), pp. 335-
59.
10 Cf. Jordi Crespo. New Lights on the Anonymus Londiniensis Papyrus, Saumell Università degli Studi di Cagliari doi.
org/10.11606/issn.1981-9471.v11i2p120-150, 2017, consultado marzo, 2020
11 Nutton, V. Cap. 5 Hippocratic theories
12 Cf. Volker Langholf. Medical Theories in Hippocrates Early Texts and the ‘Epidemics’. Walter de Gruyter · Berlin · New
York, 1990

Bustos Domínguez R.
110
DOSSIER PANDEMIA

las enfermedades como el resultado de trastornos Los escritos rescatados, escasos y fragmentarios,
del sistema de fluidos y conductos corporales, en hablan con claridad de una polaridad fría/caliente
correspondencia con las variaciones cósmicas o en la clasificación y terapéutica de las enfermeda-
geográficas, lo que sugiere que sin que haya ha- des, que las asemeja a las interpretaciones de la
bido una práctica sistemática de disección de los medicina griega presocrática16.
cuerpos referida en el Corpus, hubo una compren- En el cuerpo humano del mundo nahualt el
sión básica del funcionamiento y su organización equilibrio es la salud, y la ingestión de alimentos
interna, como queda de manifiesto en la pruebas apropiados significa la conservación de la ar-
ofrecidas por el autor de la enfermedad sagrada, monía. Una dieta sana obliga en cada comida la
para sustentar su teoría de que la epilepsia era el inclusión de productos fríos y calientes, que uni-
producto del exceso de flema en las cavidades ce- dos se neutralizan. En la misma forma, cuando
rebrales13 observaciones quizás obtenidas de au- el cuerpo humano no se encuentra equilibrado,
topsias o extrapoladas de disecciones en animales. es necesario suministrar al enfermo alimentos o
Por el contrario, un cuerpo sano era aquel don- medicamentos de calidad contraria a la del mal,
de los fluidos se encontraban en armonía o si- que restablecerán el orden. Esta adecuación, sin
metría, en una combinación “buena”, conocida embargo, no es tan sencilla como pudiera creerse,
como eucrasia, pero la salud era siempre un es- porque en algunas ocasiones la regla tiene excep-
tado precario, afectada por el aire circundante y ciones y prescribe el uso de hierbas que a primera
las formas de vida que pueden generar cambios, vista pueden parecer contraindicadas17. Respecto
los que a su vez pueden predecir la aparición de la de su etiología, las enfermedades frías “por regla
enfermedad, la que puede ser prevenida con una general, se producen por la intrusión de la calidad
adecuada profilaxis14. fría”18 que puede llegar al organismo por medio
La vitalidad intelectual de la medicina hipocrá- de una corriente de aire en el momento en que
tica y su variedad, ampliamente documentada en el hombre se encuentra débil, o por la ingestión
Nutton que habla de la complejidad y desarrollos de algún alimento frío. Estas enfermedades se
posteriores de ramas que se desprenden de las dos presentan como fenómenos de incapacidad, que
escuelas antes señaladas como por ejemplo los es- aminoran o anulan las funciones sensoriales y mo-
cépticos, también registra una rica práctica tera- toras19. Las enfermedades de naturaleza caliente,
péutica que cura por la dieta (dietética), fármacos en cambio, se generan en el interior mismo del
(farmacología) o por las manos (cirugías). cuerpo o provienen de la exposición prolongada
Si volvemos la mirada a nuestro continente nos a los rayos solares20.
encontramos, por ejemplo, con los nahuas en- Esta división dual de la enfermedad, de los ali-
tre los que se encontraban los mexitin o aztecas, mentos y las medicinas se extiende a la comunidad
agrupaciones de hombres que llegaron a consti- y al mundo concebido en una polaridad de frío y
tuir el estado más poderoso de Mesoamérica en calor, constituyendo un conjunto equilibrado por
los siglos XV y XVI, y desarrollaron la existencia el transcurso de los días (calientes) y las noches
de conceptos teóricos, procesos curativos mági- (frías), en un sistema de pensamiento indígena
cos o supuestas enfermedades de entidades aní- americano que algunos suponen derivado “de la
micas muy generalizados no sólo en el periodo doctrina hipocrática de los humores, basando su
clásico, sino a partir de épocas que no pueden pre- dicho en una sospechosa homogeneidad que existe
cisarse y que se prolongan hasta nuestros días15. en la medicina popular actual, desde México hasta

13 Idem, Nutton, p. 77
14 Idem, Nutton, p.83.
15 Cf López Austin “Textos de medicina náhuatl” Alfredo López Austin (compilación e introducción) Cuarta edición México
Universidad Nacional Autónoma de México Instituto de Investigaciones Históricas 1993
16 O. Lewis, Tepoztlán. Un pueblo de México, México, Editorial Joaquín Mortiz, S. A., 1968, 224 p., íls., p. 61. Cit. En López
Austin, p. 14 y ss
17 Foster, G. “Relationships between Spanish and Spanish-American folk medicine”, Joumal of American Folklore, v. 66, n.
261, July-September, 1953, p. 201-217, p. 205), También Isabel Kelly, Héctor García Manzanedo y Catalina Gárate de García,
Santiago Tuxtla, Veracruz. Cultura y salud, edición mímeográfíca, abril de 1956, v-160 p., p. 83. Ambos citados en López Austin,
Op. Cit.
18 Cf López Austin. Op cit. P.17 y ss.
19 Richard L. Currier en “The hot-cold syndrome and symbolic balance in Mexican and Spanish-American folk medicine”,
Ethnology, Pittsburgh, v. V, n. 3. July, 1966, p. 251-263, p. 252. p.17.
20 Cf. Diana Ryesky, Folk medicine in Huixquilucan, thesis for the degree of Master of Arts (Anthropology) at the University
of Wisconsin, 1969,Ryesky, op. cit., p. 150. Cit. En López Austin

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


111
Chile21 y otros suponen auténticamente originaria22 médica en dos culturas comparadas como lo son
basándose precisamente de la gran difusión de es- Grecia y la China antiguas, que gira fundamental-
tas ideas en suelo amerindio23 (p. 27-28). Sin ánimo mente en torno a las diferencias en la percepción
de dilucidar esta duda, si es importante señalar las que reflejan modos distintos de sentir y de apre-
sorprendentes imbricaciones de las relaciones pre- hender la corporalidad, se ilustra de manera clara
hispánicas, “como las de humedad, lluvia, enfer- las diferencias culturales en las respuestas alterna-
medades frías, posesiones de seres sobrenaturales tivas a la identidad de un individuo en un lugar de-
acuáticos, remedios por calor de fuego o de aguas terminado, y sus diferentes modos de hablar y es-
termales, con las supuestas de la medicina hipocrá- cuchar que conforman el modo de representación
tica son demasiado sospechosas. La “chipilez”, mal y de habitar el cuerpo, como ha quedado expuesto
en el que se cree, con toda certeza, desde los tiem- tanto para el mundo nahualt como para el guaraní
pos prehispánicos, se explica actualmente causada o incluso, para nuestro propio pueblo mapuche. La
por el cambio de naturaleza de la leche materna, manera de tomar el pulso es para el autor la forma
que suponen se hace caliente debido a un nuevo de aprehender el lenguaje de la vida sana y enferma,
embarazo”24. ¿Carecía esta enfermedad de una teo- y es la manifestación de cómo se revelan las distin-
ría sustentante? O caso contrario, ¿perdió su teoría tas perspectivas, que, en el caso de la griega, nos
para cambiarla por la europea? No es verosímil se- permitirá después alumbrar el desarrollo histórico
gún López Austin. Más aún, si existen registros de del cuerpo de la medicina occidental.
las discrepancias prácticas en la cura de las enfer- Los médicos griegos y chinos conocían el cuer-
medades entre los indígenas y españoles que testi- po de forma diferente porque lo sentían de manera
monia una cosmovisión diferente de conquistados diferente y de esta manera se empieza a distinguir
y conquistadores, dual de los primeros, cuádruple con claridad el “porqué” en la tradición occiden-
de los segundos. De este modo, queda la impresión tal se impone el razonamiento y el juicio, lo que
que culturas indígenas como la nahualt, más allá del no significa superioridad lógica si no simplemente
origen divino, humano o natural de las enfermeda- una manera diferente de percibir y hablar.
des, desarrollaron una teoría médica y terapéutica, Pero las diferencias en la percepción del cuerpo
un pensar sobre el diagnóstico y el pronóstico de y sus implicancias para la medicina no se detienen
los males del cuerpo humano, reveladores de las aquí. Otras fuentes que permiten conocer el cuer-
complejas relaciones culturales de la medicina con po provienen de la acción externa a ellos, tanto del
su entorno, pero semejante a la medicina humoral medio ambiente que varía con el aire, los lugares y
de los griegos. Algo similar a lo anterior se encuen- los vientos, o la influencia de los alimentos en par-
tra en la medicina guaraní 25, mucho más al sur de la ticulares circunstancias, ¿Por qué se desarrolló la
tierra azteca, donde la relación del cuerpo humano visión de un cuerpo anatómico en una cultura y se
y la cultura, la salud y la enfermedad responden a desdeñó en otras como la amerindia azteca, donde
una cosmovisión semejante como lo recoge el ma- los cuerpos sacrificados brindaban una oportuni-
nuscrito del Poha Ñana26. Algo parecido encontra- dad única para el conocimiento de la interioridad
mos en nuestra cultura mapuche27. del cuerpo? La evidencia histórica parece sustentar
En una cosmovisión diametralmente distinta se que todas las culturas tuvieron la motivación para
encuentra la relación del cuerpo y la medicina en conocer sus secretos, pero no todos vieron lo mis-
la China tradicional, como lo encontramos en el li- mo ni lo hicieron de la misma manera. Se desarro-
bro de Kuriyama28. En este texto en que se explora lló en distintas culturas un estilo visual particular,
la divergente geografía corporal de la imaginación quizás basados en fines distintos. La mirada médica

21 Foster, G. “Relationships between Spanish and Spanish-American folk medicine”, Joumal of American Folklore, v. 66, n.
261, July-September, 1953, p. 201-217
22 Isabel Kelly, Folk practices in North Mexico. Birth customs, folk medicine, and spiritualism in the Laguna :wne, Austin,
Texas, Institute of Latin American Studies, The University of Texas Press, 1965, viii-166 p., p. ll8
23 López Austin, pp. 27-28
24 Idem, pp 29.
25 F. Obermeier. (ed.) Jesuit colonial medicine in South America. A multidisciplinary and comparative approach., Kiel 2018
26 Angélica Otazú Melgarejo, « Contribución a la medicina natural: Pohã Ñana, un Manuscrito inédito en Guaraní (Paraguay, S.
XVIII) », Corpus [En línea], Vol 4, No 2 | 2014, Publicado el 22 diciembre 2014, consultado el 27 marzo 2020. URL: http://
journals.openedition.org/corpusarchivos/1301 ; DOI : https://doi.org/10.4000/corpusarchivos.1301
27 Bustos M., D. salud, enfermedad y etnicidad: representaciones sociales en mapuches urbanos migrantes. Tesis de psicología,
PUCV, 2008
28 The Expressiveness of the Body and the Divergence of Greek and Chinese Medicine. Kuriyama, Shigeshi. 1999. New York:
Zone Books.

Bustos Domínguez R.
112
DOSSIER PANDEMIA

que describirá Foucault para el nacimiento de la clínica embargo entre los últimos una curiosidad espe-
moderna obviamente remite a la exhaustividad del cial por comprender la estructura somática de los
conocimiento del objeto en sí, en ver para conocer cuerpos, más allá de la compartida inspección en
y usar ese conocimiento para actuar médicamente. búsqueda de relaciones divinas o mágicas de las
Sin embargo, el mundo antiguo no tenía esa urgen- enfermedades o afecciones humanas.
cia, pues la terapéutica de la enfermedad estaba ra- En el Renacimiento, como período histórico,
dicada en el manejo de la dieta, las purgaciones o ya con un marcado acento en la función o en el
la sangría. espacio, Leonardo pintó la musculatura del brazo
En la miríada de observaciones de Kuriyama se en distintas posiciones, pero el deseo de disecar
analizan otras similares a la demostración de la re- para conocer los cuerpos, que concedió a la ana-
latividad del pulso, como formas diversas de expre- tomía una autoridad y preeminencia en occidente
sión del cuerpo en dos tradiciones culturales que lo a diferencia de la civilización china o del antiguo
lleva a preguntarse por .los comienzos, ¿porque por México basada en un estilo visual diferente, con
ejemplo, si la medicina antigua occidental y asiática claro interés médico, fue un proceso lento y com-
surgió de la misma fusión de religión, espiritualidad plejo. Nuestra hipótesis es que tal desarrollo surge
y proto-ciencia y las representaciones e ilustracio- en el contexto del tránsito del orden medieval a la
nes anatómicas del cuerpo reflejan estructuras si- modernidad, debido a la gran crisis de autoridad
milares, los énfasis fueron tan distintos?¿cómo se que sufre la Iglesia tanto en el orden intelectual
desarrolló el cuerpo anatómico en occidente que se como político y la necesidad del hombre de cons-
recoge en las ilustraciones del Tratado de Vesalio truir un tipo de pensamiento radicalmente distin-
que documenta detalladamente sus formas muscu- to, que por sí mismo debe ser capaz de proveerse
lares? ¿Qué motivó al conocimiento de la muscu- de sus propias fuentes de legitimidad. Fue necesa-
latura humana si la medicina se guiaba por prin- ria la aparición de la filosofía moderna en conti-
cipios humorales que no requerían ese detallado nuo diálogo con la ciencia para sentar las bases de
conocimiento? ¿qué motivó a los antiguos médicos un conocimiento cierto. La noción de espacio in-
griegos a la disección anatómica? En el Corpus vita al descubrimiento y la investigación del mun-
Hipocraticum, de acuerdo a García Ballester29, no do que se abre a lo infinito. El mercado y las leyes
se encuentra una sistematización de conocimientos económicas aparecen como él espacio donde se
anatómicos concretos, sino solamente rudimentos verifican los intercambios de bienes y servicios,
de saberes sin una orientación definida con datos constituyéndose el dinero como el medio gene-
que si bien fueron reapropiados posteriormente, ralizado de intercambio y también el cuerpo hu-
no reconocieron una terminología científica ni re- mano, como una preciosa máquina, que se debe
cogidos con una metodología suficiente, así como cuidar y curar, en cuanto rentabiliza con su fuerza
tampoco integrados a un esquema ordenador que de trabajo los bienes de capital. Con la ayuda de
pudiera servir de núcleo a la estructuración de los la ciencia, el mundo moderno desarrolla un ideal
datos, falencia de los médicos post-aristotélicos del progreso humano, gracias a la posibilidad de
que no supieron incorporar a la medicina la obra verificar ciertos hechos de la realidad, que tendrá
morfológica de Aristóteles, con consecuencias que a la medicina, como una tecnología-madre, como
extienden más allá de Galeno. Si la anatomía en sí un soporte al servicio de la construcción de un
misma no fue una finalidad del conocimiento mé- orden social por oposición el caos que representa
dico griego, aunque si formó parte de la motiva- la enfermedad en el espacio social30.
ción científica e intelectual de Aristóteles y algunos
médicos de Alexandría, el desarrollo de la disección CAMINOS QUE SE BIFURCAN: LA
la encuentra Kuriyama en el arte. Curiosamente el LENTA CONSTRUCCIÓN DEL CUERPO
renacimiento del interés por el cuerpo surge en el PARA LA MEDICINA EN OCCIDENTE
Siglo XV-XVI en occidente por el arte.
Evidentemente, la medicina china, egipcia, Si en todas las tradiciones antiguas de pensa-
ayurvédica como la amerendia, incluyendo a los miento, el cuerpo poroso de los individuos for-
griegos, no necesitaron de la anatomía para desa- maba parte de la naturaleza y estaba sujeto a las
rrollar una rica práctica diagnóstica y terapéutica. influencias de los fenómenos naturales y mági-
En un momento de la historia antigua, surgió sin co-religiosos en todos sus procesos de salud y

29 Cf García Ballester, L. Los orígenes del saber anatómico occidental. Revista de estudios históricos informativos de la Medici-
na. Barcelona, junio de 1973
30 Cf. Bustos, R. Las enfermedades de la Medicina (El sacrificio del sujeto en las prácticas médicas modernas). CESOC, 1998

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


113
enfermedad, la modernidad, al contrario, impone Bichat y Claude Bernard, que terminan por con-
una necesidad práctica de conocer la anatomía y solidar a la medicina como ciencia positiva, des-
fisiología corporal: uno de los fenómenos más plegándose soberanamente en el espacio social
dramáticos en la historia de la humanidad que in- como una eficaz aliada del orden. La clave de este
fluye en la mentalidad científica y médica es la proceso fue la construcción del cuerpo anatomo
aparición de la peste bubónica a fines de la edad fisiológico. Nos ocuparemos más detenidamente
media (año 1348 D. C) que estimuló una variedad de ésta última vertiente, expresión hegemónica de
de respuestas sociales desde brutales persecucio- la medicina actual, que se ha caracterizado como
nes a iniciativas en prevención de la enfermedad una medicina biológica y molecular.
y activo compromiso gubernamental en la cons- Este cambio paradigmático de pensamiento
trucción de certidumbres esenciales para la vida hacia una forma científica fue desarrollándose
colectiva, que conocemos hasta hoy. De acuerdo a gradualmente durante varios siglos y culminó de
Siraesi31, surge en las principales Universidades de forma brillante con las aportaciones de la escue-
la Baja Edad Media un interés por el conocimien- la francesa como lo destaca Michael Foucault34 y
to médico del cuerpo. Y también un fenómeno de Othman Keel, con matices35. Este camino iniciá-
proto-medicalización de la sociedad. ¿Cómo par- tico será el que transitemos hasta sus ramificacio-
ticipa la medicina del nuevo orden social emer- nes finales para dar cuenta de las aporías y dilemas
gente en el mundo moderno? El proceso gradual políticos y bioéticos de la medicina actual, ya a
de su inserción en la gestión política del orden dos décadas de iniciado el siglo XXI.
social se verificará plenamente en el siglo XVIII La medicina, de acuerdo a Klein36 se enfrenta a
y XIX, pero comienza a perfilarse ya en el siglo V fines del Siglo XVIII a un doble desafío para ser
AC, con los desarrollos de las doctrinas del humo- una disciplina que aspire a participar activamen-
ralismo, naturalismo y la racionalización del co- te en el orden moderno naciente; primero, debe
nocimiento científico, médico y anatómico de los ser capaz de integrarse a las normas epistemoló-
griegos, enriquecido por las raíces árabes de nues- gicas y ontológicas del nuevo mundo, y segundo,
tra medicina, que a través de Toledo y Córdoba se producir un modelo de hombre, el hombre “nor-
expanden a toda Europa a fines de la edad media. mal”. No será un proceso fácil. Para comprender-
Tomará dos formas que describiremos brevemen- lo será necesario recorrer el camino que inaugu-
te. La primera, de la cual es ampliamente tributa- raron anatomistas como Morgagni hasta llegar a
ria la Salud Pública como rama de la medicina, se Bichat, Pinel y otros médicos y filósofos de ese
remonta a la noción hipocrática de Hipócrates de tiempo, culminando con Claude Bernard; ir desde
polución del aire que produce pestilencias, reafir- la visibilidad del cadáver hasta la invisibilidad del
mada por Galeno en la forma de una generalizada tejido, elemento común que une la anatomía con
corrupción atmosférica que produce la corrup- la fisiología, unificando la muerte y la vida en una
ción de los cuerpos, y retomada por Fracastoro sola concepción de los seres vivos, es decir una
en 1546 en su obra “On Contagion, Contagius nueva antropología: así se constituyó la positivi-
Diseases and their Treatment”32. La segunda, cuya dad de la medicina a la altura de la física que inau-
inspiración se puede reconocer en Descartes33 , gura Newton. Se trata de comprender entonces,
otras figuras del renacimiento italiano y el desa- el proceso de ruptura epistemológica de la medi-
rrollo del conocimiento anatómico con Harvey y cina moderna con el modelo escolástico y la teoría
Vesalio, reforzado con la revolución científica y aristotélica de las cuatro causas.
filosófica del siglo XVII con figuras tan extraordi- Al primer desafío responde Morgagni, que im-
narias como Galileo, Bacon, Newton, para seguir pulsó el cambio de paradigma que permite pasar
mutando cualitativamente en el siglo XVIII con de los signos y síntomas a las manifestaciones
31 Siraisi, N. History, Medicine, and the Traditions of Renaissance Learning. Ann Arbor: University of Michigan Press, 2007.
32 Cf. Henríquez Garrido, R. J.j. El problema de la transmisión a distancia de las enfermedades contagiosas en el De Contagio-
ne de Girolamo Fracastoro. Ludus Vitalis 24(45):75-100 · June 2016. También Nutton, V. The Reception of Fracastoro’s Theory
of Contagion: The Seed That Fell among Thorns? Osiris Vol. 6, Renaissance Medical Learning: Evolution of a Tradition (1990),
pp. 196-234
33 Cf.- Canguilhem, C. Descartes e a técnica. Trad. de Lígia Fraga Silveira. Trans/Form/ Ação, São Paulo, 5: 111 -122, 1 982.
34 Cf. Foucault, M. La naissace de la clinique. PUF, Paris, 1963
35 Cf. Keel, Othmar, 2001, L’avènement de la médecine clinique moderne en Europe. 1750-1815, Genève, Georg éditeur,
Presses Universitaires de Montréal
36 Cf. Alexandre Klein. Du corps médical au corps du sujet. Etude historique et philosophique du problème de la subjectivité
dans la médecine française moderne et contemporaine.. Histoire, Philosophie et Sociologie des sciences. Université de Lorraine,
2012

Bustos Domínguez R.
114
DOSSIER PANDEMIA

morfológicas de la enfermedad en un proceso sintomáticas sin ruptura, como formando par-


histórico bajo varias modalidades de pensamien- te de una sola y misma enfermedad. El méto-
to. La primera modalidad dice relación con la idea do analítico es fundamentalmente un proceso
de “solidismo”, término acuñado para sostener inductivo que permite la emergencia de casos
que la enfermedad es una manifestación primaria particulares desde leyes generales, permitiendo
de los órganos corporales, que se constituirá en el vínculo entre la observación de las lesiones
la razón clave para el origen de la anatomía pato- por la anátomo-patología y la observación de
lógica como una ciencia clínica. La segunda mo- los signos vitales por la clínica, en opuesta po-
dalidad obedece al cambio en la concepción de sición al método sintético del neo-hipocratismo
le enfermedad desde los síntomas y signos a las anterior. Las leyes que vinculan las afecciones
lesiones corporales subyacentes, lo que creó las orgánicas a las manifestaciones vitales se fun-
condiciones para hacer de la anatomía patológi- dan en la repetición de la correlación entre dos
ca una ciencia básica. Sin embargo, las observa- tipos de observación, y a partir de ellas invertir
ciones anatómicas no bastan por sí mismas para el proceso para ir desde las manifestaciones vi-
sostener un conocimiento suficiente para fundar sibles (clínicas) a las lesiones patológicas invisi-
una nueva ciencia, ya que la persistencia de la bles (lesiones orgánicas).
teoría humoral constituía un obstáculo, todavía Para ello es necesario encontrar un vínculo en-
la sola idea mediante la cual se interpretaban los tre los visible y lo invisible, el cadáver y el hombre
hallazgos anatómicos en una simple respuesta enfermo, la vida y la muerte. La complejidad y el
causal de la muerte, bajo la tradicional y general esfuerzo de este proceso reposa en las ideas fi-
teoría humoral. losóficas y científicas de la ilustración, de lo que
La tercera modalidad, de la mano de será más adelante un saber-hacer capaz de ofrecer
Morgagni, consistió en establecer correlaciones un principio de certidumbre que oponer a aquella
sistemáticas entre las observaciones anatómicas parte del caos que representa la enfermedad, el
de enfermedad y manifestaciones clínico-pa- sufrimiento y la muerte para el hombre moderno.
tológicas. No obstante, la explicación de los Las sucesivas formaciones discursivas de la
síntomas y signos de la enfermedad basada en medicina a través de los siglos continúan trans-
gruesas referencias anatómicas deberá esperar formándose con el conocimiento anatómico
a una conjunción de otros elementos que serán y su mapeo iconográfico del cuerpo, que busca
desarrollados por la Escuela de Paris, en el con- comprender su organización y funcionamiento
texto de la Revolución Francesa que proveyó interior.
las condiciones epistemológicas, ontológicas
e institucionales para el desarrollo de una me- UN CUERPO PARA LA MEDICINA
dicina cualitativamente distinta y una moder- CLÍNICA
na concepción de enfermedad. Esta reflexión
ontológica y epistemológica para hacer creíble El eslabón central, a juicio de Klein, que requie-
una medicina para todos nace con Pinel y su re la medicina moderna para continuar constru-
obra publicada en 1797 “Nosographie philo- yendo su cientificidad es el de una pato-fisiolo-
sophique ou la methode de l’analyse appliqué gía que explique las lesiones vitales que están a
a la médicine”, al proponer un método analí- la base de la enfermedad, sus verdaderas causas,
tico que orientará a la medicina hacia la cien- ya que tanto las lesiones orgánicas y los síntomas
tificidad y la experimentación a la manera de son sólo la expresión de sus efectos, ¿Cómo ha-
la metodología científica de las ciencias natu- cerlo? ¿Cómo corregir la anátomo-patología de
rales y matemáticas, descomponiendo el todo Morgagni, medicina basada en los hallazgos ca-
en sus partes con la finalidad de comprender davéricos sin verdadera correlación con la clínica
el funcionamiento orgánico, comparando los de los seres vivos? ¿cómo construir una epistemo-
elementos observados y estableciendo relacio- logía coherente que permita a la anatomo clínica
nes y analogías, regularidades y diferencias. Es configurarse como una medicina de los hombres
el método cartesiano en su esencia, que rompe vivos? Si las lesiones orgánicas son sólo los efec-
explícitamente con la escolástica y la teoría aris- tos de una lesión más profunda y los síntomas su
totélica de las cuatro causas. El énfasis se situa- expresión más visible, será necesario un cambio
rá en la cadena causal más que en las causas, de escala y buscar en otro nivel de organicidad
y en un concepto de temporalidad que unifica aquella causa que permita comprender el modo
la enfermedad y permite pensar las relaciones de afección de los órganos y su expresión vital. La

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


115
solución surge de los estudios histológicos37 al re- herramienta indispensable para naturalizar la so-
velar que los diferentes órganos del cuerpo están ciedad y combatir aquella parte del caos que re-
constituidos de ciertos tipos de membranas o teji- presenta la enfermedad en el nuevo orden social.
dos que pueden explicar por qué en una enferme- Es lo que después conoceremos como medicali-
dad, dos o más órganos pueden alterarse simultá- zación de la sociedad, regulación de los cuerpos
neamente. La noción de tejido permitirá pensar en el tiempo y el espacio ahora mediados por el
el cuerpo como un espacio, donde la enfermedad conocimiento médico emergente, desplegando
encontrara su lugar no en referencia a órganos es- el cuerpo anátomo-fisiológico al todo social, un
pecíficos sino a una cartografía tisular que implica cuerpo colectivo necesario de cuidar.
reconocer otro tipo de alteraciones y lesiones que ¿Cómo se concreta un desarrollo de un saber
dependen de la similitud de los tejidos y, al médi- unificado del hombre y la relación con su cuer-
co, comprender el porqué, en algunas afecciones po, una antropología del hombre normal, nece-
existen alteraciones parciales de los órganos, se- saria a la nueva medicina social? Ya se ha dicho
parados unos de otros. Esta es la obra de Bichat. que la positividad del saber médico implica una
Su gran mérito no sabría reconocerse en una lec- ruptura con los métodos de la medicina antigua,
tura tradicional, lineal de sus descubrimientos que donde Condillac aparece como el padre del mé-
comienzan con Morgagni y Haller, y se prolon- todo analítico, que funciona según la inducción
gan más allá de su existencia sino se incluye en sintética apto para hacer aparecer casos particu-
la revolución epistemológica que se produce en lares de leyes generales al vincular las lesiones
medicina y el desarrollo de su cientificidad en el observadas por la anatomo-patología a la obser-
contexto de un programa de trabajo que introdu- vación de los signos vitales por la clínica, la esen-
ce al conocimiento médico de le enfermedad den- cia de un procedimiento científico.
tro de un marco fisiológico sistémico y positivista, Pero el nuevo método tiene otras exigencias
con importantísimas repercusiones que unen en que deben ser satisfechas para una epistemología
el tiempo nombres como Claude Bernard, Comte, médica que debe permitir comprender las rela-
Watson y Creek, hasta llegar a la biomedicina mo- ciones entre la vida y la muerte en una fisiopato-
lecular contemporánea, cuyas características y logía coherente que explique el vínculo sistemá-
consecuencias abordaremos posteriormente. tico y eficiente de como la enfermedad alcanza al
La primera forma de medicina anotada se re- ser vivo y puede dar origen a las lesiones vitales
monta a Hipócrates y se apropia del cuerpo indi- que se representan finalmente en lesiones orgá-
vidual para cubrir un cuerpo social, (y se constitu- nicas y signos recogidos con el método anato-
ye en los orígenes de la Salud Pública moderna). mo-clínico. La idea de tejido con Bichat, hemos
Para lograrlo se requiere el esfuerzo intelectual de visto, permite resolver el problema. El tejido re-
producir un modelo de hombre, el hombre “nor- presenta una organización de las funciones de
mal”. Este proyecto toma concreción en medici- los vivos al mismo tiempo que el desarrollo de
na con la reforma iniciada por Vicq d’Azyr38 en una ontología explicita que adquiere la forma de
Francia, que consideró tanto las instituciones hos- una antropología fisiológica que desembocará en
pitalarias como el avance de las ciencias médicas, el asentamiento del individuo sobre la distinción
cuyas posibilidades son desde entonces, ejemplo de lo normal y lo patológico, la que abre simul-
de una indefinida perfectibilidad. Cabanis39, su táneamente la vía a una ciencia médica de lo in-
cercano colaborador, ejemplifica la imagen del dividual y de lo colectivo. Foucault lo explica en
médico que, más allá del puro conocimiento de su obra “El Nacimiento de la Clínica” y en la
los cuerpos, intenta extender las relaciones físi- serie de conferencias dictadas en Brasil40, donde
cas y morales al interior de las posibilidades éti- desarrolla los temas de la emergencia de la me-
cas y políticas de una futura ciencia médica como dicina social en Francia, Inglaterra y Alemania,

37 Cf. Bichat, X. Traité des membranas en général et de diverses membranas en particulier. Paris, 1816. Source gallica.bnf.fr /
Bibliothèque H. Ey. C.H. de Sainte-Anne. Recuperado marzo 2020. También, Keel O. John Hunter et Xavier Bichat: les rapports
de leurs travaux dans la constitution de la pathologie tissulaire. En: 27 Congreso Internacional de Historia de la Medicina. Acta,
2. Barcelona 1981, 535-549./390
38 Cf. Peumery JJ. Vicq d’Azyr et la Révolution française. Hist Sci Méd. 2001; 35:263-70.
39 Cf. Cabanis, P.J.G., Rapports du physique et du moral de l’homme et lettre sur les causes premières (1993), Gallica. BNF.
fr. También, Naomar Almeida-Filho, Mariano Di Pasquale. El impacto de la reforma Cabanis en la formación histórica de la
universidad argentina y en la educación superior en salud. Salud Colectiva | Universidad Nacional de Lanús | ISSN 1669-2381 |
EISSN 1851-8265 | doi: 10.18294/sc.2019.2106, Recuperado marzo 2020
40 Cf. Foucault, M. La naissance de la médicine social. Dits et écrits II, 1976-1988. Paris, Gallimard, 2001, pp 207-228

Bustos Domínguez R.
116
DOSSIER PANDEMIA

para destacar el desarrollo de una medicina de la el intervencionismo médico en función de la


epidemias, donde aparece una nueva concepción política, la economía o la tecnología, originando
de la enfermedad basada en la idea de afección serios cuestionamientos bioéticos y aporías de
de un grupo de individuos, que implica una for- sentido de nuestra medicina45.
ma cuantitativa de manifestación mórbida que se
distribuye geográficamente y que desplaza el ras- EL CUERPO MOLECULAR:
go de la esencia o naturaleza de la enfermedad SUS RELACIONES CON LA
hacia sus determinantes ambientales y sociales, GUBERNAMENTABILIDAD
que dará origen a un aparato burocrático de ges- CONTEMPORÁNEA
tión y vigilancia, al origen de la salud pública y la
medicalización de la sociedad. El desarrollo anterior nos ha permitido cono-
Así, para Bichat, si la salud es equivalente a la cer la construcción de un cuerpo sólido para la
vida como realización libre de las funciones vi- medicina, en el marco de las relaciones de saber y
tales y plena posesión de sus fuerzas, la enfer- poder que juega un rol doble: un cuerpo fisioló-
medad es solo una variación de la vida: ya no gico que da sustento y credibilidad de la medicina
hay naturalezas distintas entre salud y enferme- como ciencia positiva que en sucesivas fases de
dad sino simples desplazamientos cuantitativos. transformación del conocimiento conserva una
Las enfermedades como la salud son parte de misma base epistemológica desde el órgano al te-
la vida, expresiones vitales que aparecen en la jido, desde el tejido al medio interno de Bernard y
naciente modernidad separadas por “lo normal desde ahí pasando por la inmunología hasta llegar
y lo patológico” donde el individuo es pensado a la genética y la molécula como estructura última
como historia natural en equilibrio dentro de que explica la enfermedad. Y en el otro extremo,
un mundo acósmico, necesario para desarrollar un cuerpo que desdoblado espacialmente cumple
la idea de caso clínico, es decir, un modelo abs- el rol de un sujeto-ciudadano que se cruza con la
tracto para la ciencia médica, que desprovisto de población que le permite a la medicina y la salud
singularidad y contenido cualitativo, inscribe al pública cumplir con un rol disciplinario y norma-
enfermo en un espacio observable para la medi- lizador, al servicio del orden social y la ideología
cina, una función reducida a la objetividad de un política económica que lo sustenta. Ambos, sin
caso accidental de la enfermedad que lo habita, embargo, participan de una dinámica compleja
construido sacrificando la subjetividad del sujeto ensamblados a los desarrollos biotecnológicos,
singular41, al servicio de una espacialidad mayor, económicos y de gobernabilidad actuales, recon-
la población de los vivos: es la gran paradoja de figurando constantemente lo normal y lo patoló-
la medicina moderna que hace de la enfermedad gico. Por razones de claridad, nos detendremos
una abstracción que no existe sino que en fun- primero en el momento culminante de la evolu-
ción de la multitud de otros casos que permite su ción del cuerpo anatomo-fisiológico, el cuerpo
reconocimiento y tratamiento como caso clínico que Rose ha definido como molecular, y luego,
individual, y al mismo tiempo ofrece un cuerpo en las implicancias de esta opción metodológica
abierto a todo tipo de colonizaciones, apto para de la medicina moderna en sus relaciones con
el despliegue de una geometría masiva en el decir la dimensión política y económica en la cultura
de Foucault. Este autor nos ofrece una “caja de contemporánea.
herramientas” conceptuales tales como biopo- Nikolas Rose es un sociólogo ingles que ha
der42, biopolítica43 y población44, para visualizar trabajado desde fines de la década del 90 en una

41 Cf. Bustos, R. O p. Cit.


42 Cf. Castro, E. El vocabulario de M, Foucault. Biopoder: A partir del siglo XVII, el poder se ha organizado en torno de la
vida, bajo dos formas principales que no son antitéticas, sino que están atravesadas por un plexo de relaciones: por un lado, las
disciplinas (una anatomo-política del cuerpo humano), que tienen como objeto el cuerpo individual, considerado como una má-
quina; por otro lado, a partir de mediados del siglo XVIII, una biopolítica de la población, del cuerpo-especie, cuyo objeto será
el cuerpo viviente, soporte de los procesos biológicos (nacimiento, mortalidad, salud, duración de la vida) (HS1, 183)
43 Cf Idem. Biopolítica: Hay que entender por “biopolítica” la manera en que, a partir del siglo XVIII, se buscó racionalizar los
problemas planteados a la práctica gubernamental por los fenómenos propios de un conjunto de vivientes en cuanto población:
salud, higiene, natalidad, longevidad, raza
44 Cf. Idem. Población: El problema mayor que la modernidad planteó a las tecnologías del gobierno ha sido la acumulación
de individuos… La población se convertirá, entonces, en el objetivo último del gobierno: “mejorar la suerte de la población,
aumentar sus riquezas, su duración de vida, su salud …”
45 Cf. Bustos, R. op. Cit; Kottow, M. Cf. Kottow, M. “From Justice to Protection. A Proposal for Public Health Bioethics”.
Springer Briefs in Public Health, 2012

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


117
línea que se reconoce ampliamente tributaria de político, es una entidad viviente marcado con una
M. Foucault, focalizándose en temas vinculados a cierta dualidad: funciona como un objeto social
la salud en aspectos que llama “de la vida misma o en cuanto dice relación con la sociedad, pero al
de la vida en sí”46. De acuerdo a su interpretación, mismo tiempo retiene un estatuto subjetivo como
la mirada tecnocientífica en medicina ha alcanza- disposición del self. La biopolítica que engloba el
do un nivel molecular, es decir el último umbral desarrollo de la medicina biotecnológica es así un
conocido de la materia viva. Esto le permite ex- campo constituido por lo molecular de los cuer-
tender la discusión a un ámbito contemporáneo pos y el riesgo inherente a la vida, cruzado por las
de las relaciones “biopolíticas” del poder moder- implicancias éticas y políticas que se desprenden
no en todo lo que dice relación con la salud hu- de la intervención sobre estos elementos, estimu-
mana e intervención sobre la vida en un momento lados sobre todo por la racionalidad económica
histórico donde prima una racionalidad guberna- de una gubernamentalidad neoliberal.
mental diferente a las analizadas por Foucault. El La complejidad que alcanza su visión de la
objetivo de la medicina molecular en esta fase tar- biopolitica contemporánea en torno a los proce-
día del desarrollo económico-social, deja de ser la sos vitales requiere que nos detengamos en los
relación binaria salud/enfermedad para construir aspectos centrales mencionados. Primero, so-
un espacio complejo de problematización donde bre el aspecto molecular de la biopolítica actual.
lo central es la intervención sobre los cuerpos Para comprender esto se requiere retrotraerse a
buscando una transformación cuanti-cualtitativa la constitución del cuerpo fisiopatológico del si-
de los procesos vitales con objetivos de maximi- glo XVIII que estudiáramos a propósito del naci-
zar las capacidades humanas (y en beneficio de miento de la medicina científica y los desarrollos
un neo capitalismo). Así se desprende de la lec- epistemológicos de las ciencias de la vida, especí-
tura de su texto47 que sugiere que la biopolítica ficamente de la biología. Como sabemos, con el
actual ha entrado en una fase de transformación advenimiento de la biología moderna basada en
profunda, donde la biología y las ciencias funda- la división orgánico/inorgánico, ser vivo/no vivo,
mentales están empeñadas en una empresa que se superó la etapa clasificatoria según caracterís-
puede cambiar la naturaleza y la significación de la ticas observables, propia de la historia natural.
vida humana. Esto en relación a que el sistema de A esa nueva etapa de comprensión orgánica de
regulación antes centrada en el Estado (medicina la vida, Foucault la denomino epistemología de
liberal del siglo XIX hasta 1970 del siglo XX), se la profundidad donde las leyes subyacentes a la
ha fragmentado al igual que el cuerpo humano, en superficie corporal determinan los procesos vita-
un campo de estrategias y prácticas diversas que les, reproduciendo lo que había sostenido en el
responden a autoridades heterogéneas, (llámense Nacimiento de la Clínica, centrada en el funciona-
mercado, intereses científicos, del complejo bio- miento tisular de órganos y sistemas corporales.
tecnológico, gubernamentales, a veces conver- Para Rose, una nueva transformación epistemo-
gentes o a menudo con intereses contrapuestos). lógica se produce en el siglo XX, mediados por la
Reelaborando los conceptos foucaldianos, entien- tecnología médica que permite recoger bajo una
de el biopoder como una perspectiva o más bien mirada submicroscópica fenómenos vitales antes
una herramienta teórica para hacer comprensible inaccesibles al ojo clínico y sus prolongaciones
o coherente el conjunto de prácticas y relaciones técnicas vigentes. El desarrollo de la microsco-
de poder que tiene por objetivo las características pia electrónica permite ahora conocer la vida en
vitales de la vida humana. términos de transcripción y expresión genética,
Por lo tanto, el campo de la biopolítica, se ex- reconocimiento de neurotrasmisores o proteínas
presa en Rose en una intervención sobre los cuer- de base, lo cual lo lleva a nominar como “vida
pos humanos a un nivel que alcanza la estructura molecular” el fundamento de la vida biológica.
genética y, en este sentido molecular de la vida, Ello también implica una nueva forma de com-
otorgar una posibilidad a la tecnociencia médica, prensión de la vida misma, concebida ahora como
que pretende estratégicamente diluir el riesgo in- un código o trasmisión de información a la mane-
herente a la vida, haciendo de la salud y el bienes- ra de la lingüística en la medida que es el código
tar de los individuos y de la sociedad en su con- genético, el genoma humano, su punto de referen-
junto, un objetivo a dominar. Lo anterior, dado cia. Esta nueva profundidad que alcanza la mirada
que el cuerpo, desde un punto de vista cultural o médica científica, cuyos modelos explicativos se

46 Cf. Rose, N. (2012). Políticas de la vida. Biomedicina, poder y subjetividad en el siglo XXI..Ed. Universitaria La Plata
47 Idem. Rose, N. op. Cit, p 3

Bustos Domínguez R.
118
DOSSIER PANDEMIA

sustentan en procesos de regulación, expresión y capacidad de intervención a nivel molecular, las


transcripción de genes, son tan avanzados que se tecnologías de la vida operan en colusión con el
está frente a la posibilidad abierta por el nuevo mercado y una nueva definición antropológica del
conocimiento tecno-médico que permite el aisla- hombre contemporáneo, el “homo económicus”,
miento y manipulación de los diversos elementos que siendo empresario de sí mismo busca mejorar
del cuerpo a nivel molecular, alcanzar un grado sus posibilidades en un mundo pleno de compe-
de intervención inédito de procesos vitales, que tencias. De aquí la transformación en consumi-
van desde la reproducción, (fragmentada en diver- dores de productos biotecnológicos, por ejemplo,
sos momentos o fases), hasta la intervención del vía supermercados y revistas de publicidad, donde
material genético, (que se puede ser almacenado se definen las necesidades médicas de la pobla-
en bancos y ser objetos de transformación). Sin ción. Pero en esta transformación se juega tam-
duda, con ello aparece la posibilidad abierta a la bién la identidad y el sentido de la medicina y la
biopolítica contemporánea de manipular la vida a práctica médica actual.
esos niveles de determinación, lo que implica un El análisis de Rose sobre el carácter molecu-
cambio ontológico del cuerpo humano que obli- lar de la biopolítica contemporánea es sin duda
ga a una reflexión política y ética profunda, más un fértil campo de cuestionamientos bioéticos y
allá de una bioética funcional a sus desarrollos. De propiamente políticos de la medicina, en la medi-
hecho, la tecno ciencia médica parece ciega frente da que las posibilidades técnicas de transformar
a sus propios desarrollos que buscan, sobrepasan- la vida en si misma conlleva una redefinición de
do lo propiamente terapéutico, controlar proce- quienes somos. En la medida que la biomedicina
sos vitales del cuerpo y de la mente48. profundiza la mirada en un cuerpo cada día más
En general, esto significa que la medicina ha expuesto a la colonización, uso y abuso biopolí-
abandonado su rol tradicional de restauración de tico de estos que se apoya en el deseo de los se-
la salud combatiendo las enfermedades y los fac- res humanos como expresión de la subjetividad
tores de morbilidad que pueden afectar el equi- post-moderna y estimulado por el neuromarking,
librio propio de un hombre en salud, es decir la la “vida misma” será un continuo de riesgo y
capacidad del individuo de mantener sus propias transformación perpetua.
normas de funcionamiento. Las nuevas posibilida- Pero esta ilusión de control voluntario de la en-
des biomédicas, irán más allá de esta búsqueda de fermedad que moviliza esperanzas e inversiones se
equilibrio en la medida que buscan instaurar otra ha revelado limitada. La pandemia de COVID-19
normatividad, ya no naturales de procesos vitales y la impotencia biotecnológica de dominarla, se
corporales y también mentales. Precisamente, a constituye como un límite real a la perspectiva
esta capacidad de redefinir la normatividad bio- profundamente reductora que la sustenta. Pero
lógica mediante esta panoplia de capacidades téc- hay otro límite que surge de la propia biología: la
nicas, instrumentos, discursos y relaciones, Rose epigenética. Su conocimiento nos permitirá esbo-
la llama tecnologías de la vida, entendidas funda- zar las implicancias éticas, políticas y sociales de
mentalmente en una dimensión de optimización, la biopolítica que conduce el desarrollo actual de
ya sea de identificación y tratamiento de patolo- nuestra medicina.
gías susceptibles de aparecer (riesgos predictibles)
en el horizonte vital de los individuos (medicina LA EPIGENÉTICA: DE VUELTA A LOS
predictiva y terapia génica, nanomedicina) o, de COMIENZOS
maximización o extensión de capacidades corpo-
rales o psíquicas. En el entrecruce de estas posi- El desarrollo de la genética en el siglo XX que
bilidades se encuentra la investigación científica, culmina con la decodificación del genoma huma-
la práctica médica y el mercado bajo el signo de no hacía creer que los procesos vitales estaban
la esperanza, el bienestar o el rendimiento en un controlados por los genes, y la transferencia de
mundo completamente abierto hacia el futuro, DNA era una explicación definitiva para explicar
utopía ahora posible y soñada a comienzos de la la herencia biológica de los seres vivos. La téc-
modernidad por Condorcet49. no-ciencia molecular posibilitaba el diagnóstico
En este contexto utópico, además de la predictivo de enfermedades y las alternativas de la

48 Por ejemplo, un análisis biopolítico de la fertilización humana de tipo artificial o de la incipiente medicina genómica, estre-
chamente vinculada a incentivos económicos, sería muy necesarios de desarrollar.
49 Cf Taguieff, P-A. L’idée de progrès. Une approche historique et philosophique. Les cahiers du CEVIPOF, Setembre
2002/32

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


119
terapia génica alumbró la medicina genómica y las no se explican por la secuencia del DNA. Otros
esperanzas puestas en las terapias personalizadas autores importantes agregan que no solamente el
de todos los males: un viejo sueño moderno. cambio epigenético se produce en la fase mitóti-
Varios fenómenos sustentados en hechos bioló- ca de las células somáticas, sino que también en
gicos y genéticos se oponen a esta visión lineal del la fase meiótica, es decir, luego de la producción
desarrollo médico-científico. Primero, una gran de gametos por las células reproductoras, lo que
parte de los genes no se expresan y sus funciones permite concebir la posibilidad de que exista una
permanecen ocultas a la mirada del investigador; trasmisión directa de las variaciones adultas a los
segundo, la mayoría de las enfermedades no son hijos. ¿Cómo se producen estos cambios? Entre
determinadas por un solo gen y un solo gen pue- los tipos de mecanismos epigenéticos estudiados
de codificar varias expresiones fenotípicas; terce- y mejor comprendidos destacan dos: 1) la metila-
ro, la expresión de los genes puede ser modificada ción del ADN y 2) Las modificaciones post-tra-
por el medio ambiente y además esas expresiones ducionales de las histonas.
pueden ser hereditarias: este fenómeno nuevo
constituye una revolución científica y ha recibido METILACIÓN DEL ADN
el nombre de epigenética.
¿Qué es la epigenética? Este nuevo campo de La metilación es una reacción bioquímica que
investigación y conocimiento tiene una vida breve se produce en el ADN celular. Recordemos bre-
que nace con el siglo XXI, con una historia que se vemente que el genoma humano es el alfabeto
remonta a 1942 en relación a estudios de biología en que inscribe la memoria genética de los seres
evolutiva en el cruce de la embriología, la genética humanos, cuya información se empieza a develar
y la ecología. Conrad Waddington50, llamó epige- con el desarrollo del Proyecto Genoma Humano,
nética a los procesos biológicos que permiten el esfuerzo científico mundial que concluyó con la
paso de lo genotípico a lo fenotípico que se pro- secuenciación de todos los genes el año 2003, es
duce durante el desarrollo o el curso de la vida. decir, el conocimiento de las secuencias de bases
En otros términos, revelaría los mecanismos cau- de los 23 pares de cromosomas que tiene el nú-
sales de este tránsito que permitiría comprender cleo de las células de cada ser humano. El ADN
los procedimientos por las cuales las células del es la molécula básica empaquetada dentro de los
organismo biológico son orientadas a cumplir una cromosomas que contiene esa información. Tiene
función precisa, luego de ser diferenciadas. La vi- una estructura química constituida por una doble
sión de Waddington, de naturaleza geno-céntrica, hebra que adquieren la forma de una escalera de
se ha modificado en estas dos décadas del siglo dos brazos de tipo helicoidal, unida por peldaños
XXI. constituidos por bases nitrogenadas en parejas
En una revisión de la literatura51 encontramos unidas por un puente de hidrogeno. Estas bases
que desde los años 90 del siglo pasado, el con- (adenina, guanina, citosina y timina) son altamen-
cepto de epigenética se ha usado para señalar los te específicas y complementarias, dispuestas en
fenómenos no genéticos de la herencia a lo largo secuencias en una hebra lo que permite descifrar
de las divisiones celulares y más recientemente la secuencia de la otra hebra de la molécula que
entre organismos. Simultáneamente, la definición está orientada en sentido opuesto, dado este prin-
de la epigenética se ha transformado desde la ori- cipio de complementariedad. Su estructura única
ginaria concepción de Waddintong, para destacar permite su autocopiado durante la división de las
un carácter persistente de modificaciones inhabi- células mediante un proceso de separación tem-
tuales del epi-genotipo, lo que pone de relieve las poral de cada una de sus hélices. Cuando se trata
implicancias que tienen los mecanismos epigené- de fabricar una proteína que debe cumplir una
ticos en la regulación de la expresión de los ge- función vital específica, un fragmento específico
nes, mediante su activación o represión selectiva. del ADN sirve como plantilla. De esta manera se
De esta manera, una definición más precisa sería construye todo el cuerpo humano. Ahora, desde
la entregada por Holliday52, de cambios en la ex- el punto de vista epigenético y sin alterar las se-
presión genética que traducido en términos con- cuencias de las bases del ADN, los genes pueden
cretos debe entenderse y reducirse a cambios que alterarse en su expresión o represión selectiva. La

50 Cf. Maurizio Meloni (2015) Epigenetics for the social sciences: justice, embodiment, and inheritance in the postgenomic age,
New Genetics and Society, 34:2, 125-151, DOI: 10.1080/14636778.2015.1034850
51 Para una completa revisión de la epigenética en medicina, Cf. Trygve Tollefsbol. Medical Epigenetics. Academic Press, 2016.
52 Cf Holliday R., 1994. Epigenetics: an overview. Dev. Genet. 15: 453–457.

Bustos Domínguez R.
120
DOSSIER PANDEMIA

metilación es uno de los mecanismos que posibi- epigenéticas previstas por el genotipo de un in-
lita esta alteración y consiste en una reacción bio- dividuo, es decir obligatorias, la segunda agrupa
química que forma un vínculo covalente, con una aquellas funciones facilitadas por el genotipo,
gran fuerza de activación, difícil de quebrar, por y la tercera, independientes del genotipo, hacen
lo tanto, de gran estabilidad. Esta metilación pue- su aparición de forma aleatoria o a consecuen-
de aparecer en una de las hebras del ADN, pre- cias de diversas formas de exposición ambiental.
cisamente sobre las bases nucleotídicas citosinas, Asimismo, poseen también propiedades únicas
formando una agrupación que se agrega a una ex- que las distinguen de las mutaciones genéticas.
tremidad de esta base, formando una estructura Pueden ser, por ejemplo, gatilladas por el medio
química que se posa en la región promotora de un ambiente en un periodo social corto, como una
gen, rico en cortas secuencias de bases C-G. Si la hambruna, y también reinvertidas por acciones
región promotora de este gen está muy metilada, humanas a través de cambios en los hábitos de
la maquinaria celular encargada de la activación vida o a consecuencias de políticas de salud, as-
del gen queda paralizada, lo que implica la repre- pectos que analizaremos posteriormente por las
sión del gen, silenciándolo. Este es un mecanismo importantes implicancias políticas y éticas que
común en los cuerpos humanos, que permite el conllevan. Con todo, lo que interesa subrayar es
control de la producción de proteínas a lo necesa- el carácter plástico, modificable y flexible de estos
rio a la función propia de cada una de las células cambios. Estos fenómenos, que no responden a
somáticas. Cuando este mecanismo natural falla, la lógica mendeliana clásica de transmisión here-
se produce el cambio epigenético. ditaria a despertado un interés teórico e investiga-
tivo en el campo de las ciencias humanas, junto a
2) Las modificaciones post-traduccionales la explicación molecular de tipo epigenético que
de las histonas. hemos esbozado, que permite un nuevo diálogo
entre las ciencias biológicas y sociales, entre la na-
Este es otro mecanismo epigenético que parti- turaleza y la cultura.
cipa activamente en la modulación de la estructu-
ra tridimensional de la cromatina celular y en la IV. LOS CUERPOS POROSOS:
expresión de los genes. Son grupos de diferente IMPLICANCIAS SANITARIAS, ÉTICAS,
naturaleza (químicos o proteicos) que se agregan POLÍTICAS Y ECONÓMICAS
a la proteína con la ayuda de algunas enzimas
como las quinasas o las metiltransferasas. Estas Con las evidencias recogidas en la investigación
modificaciones influencian las características de epigenética, los cuerpos de los seres humanos re-
una proteína, modulando sus funciones celulares. velan una biología porosa, expuesta y sensible a
Regularmente, las modificaciones no son estáti- los cambios medioambientales y las experiencias
cas, sino que dependientes del contexto celular. culturales, a un nivel de registro molecular. Con
De esta manera, las células pueden hacer uso de ello, aparece la posibilidad de reescribir un desti-
las proteínas para producir respuestas y adecuarse no antes considerado natural. Problematizar este
rápidamente a cualquier estimulo. cambio epistémico se revela hoy, a la luz de una
Este proceso no hace intervenir el ADN, sino pandemia mundial, una urgencia intelectual
que se localizan en las colas N-terminales de las Desde los años 2000 se viene acumulando un
histonas, que son pequeñas proteínas estructura- cuerpo de evidencias de que no solamente el ce-
les que tiene la forma de un octómero, alrededor rebro es un órgano plástico y abierto a lo externo,
de las cuales se enrrolla el ADN. Al modificar bio- sino que también el microbioma y el epigenoma
químicamente las histonas se altera la carga elec- es moldeable por el impacto de los alimentos, los
troestática del nucleosoma, y con ello condensar estilos de vida, el estrés, las toxinas químicas y los
o detener el ADN en el espacio del núcleo celular, factores socio-económicos53. En este sentido, la
impidiendo que los genes próximos puedan ex- epigenética ambiental y social reconoce un interés
presarse, por ejemplo, para suprimir la expresión emergente en la corporeización de la experien-
de tumores. cia social y la apreciación de un poder del medio
Considerándolas en conjunto, estos dos tipos externo que ingresa en el cuerpo constituyendo
de modificaciones epigenéticas principales se re- cuerpos post-genómicos, con límites borrosos o
agrupan en tres clases en función de su depen- estructuras porosas. El ambiente exterior no es
dencia al genotipo: la primera agrupa las marcas un mero contenedor donde se expresa el material
53 Cf.Nikolas Rose, Joelle M. Abi-Rached, ‘Neuro: The New Brain Sciences and the Management of the Mind. Princeton, 2013

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


121
genético de los individuos, sino una fuerza pro- El ejemplo más conocido es el de las consecuen-
ductiva de cambios biológicos. En medicina y cias producidas por la hambruna sufrida por la
patología humana, se reconoce desde entonces el población holandesa durante la segunda gue-
impacto de las modificaciones epigenéticas en nu- rra mundial en los años 1944-5, donde 50 años
merosas enfermedades que previamente se pensa- después se pudo comprobar que la exposición
ban atribuibles a factores propiamente genéticos. prenatal a esa hambruna se asoció con diversos
Un resumen de la literatura muestra que todos los trastornos metabólicos y riesgos de obesidad y
sistemas corporales pueden ser afectados o in- enfermedades cardiovasculares, así como a de-
fluenciados por procesos epigenéticos provocan- presión y esquizofrenia55. Estudios realizadas en
do patologías médicas o sufrimientos humanos. poblaciones ucranianas56 y chinas57 sometidas a
Los cambios epigenéticos comprometen la hambrunas, muestran resultados similares que
salud humana desde los comienzos. Esto es así identifican la exposición prenatal a las carencias
por la vulnerabilidad de la especie a las influen- nutritivas correlacionadas con niveles decrecien-
cias externas desde la gametogénesis y temprana tes de metilación del factor de crecimiento (IGF
embriogénesis que provocan cambios epigenéti- 2) similar a la insulina, que cumple un rol sustan-
cos que se mantienen durante la división celular cial en el desarrollo y crecimiento humano. Un
somática54. Una vez establecidas, las marcas epi- estudio reciente demuestra que los efectos mórbi-
genéticas se mantienen de forma estable en todas dos están concentrados en aquellos que sufrieron
las divisiones de células somáticas. Durante la ma- deprivación nutricional en el primer trimestre de
duración de las células germinales, se lleva a cabo la gestación58, la etapa mas vulnerable del periodo
la desmetilación del ADN en todo el genoma, se- gestacional. El asma, enfermedad que se consti-
guida de la re-metilación antes de la fertilización. tuye en un factor de riesgo relevante de gravedad
La embriogénesis temprana se caracteriza por una para las personas en la pandemia de coranovirus,
segunda onda de desmetilación del genoma com- también se correlaciona con la polución ambien-
pleto, y los patrones de metilación se restablecen tal en el período pre y post natal inmediato. Recién
después de la implantación. Es probable que las nacidos cuyas madres habían sido sometidas a al-
fases de desmetilación y re-metilación durante el tas concentraciones de hidrocarburos policíclicos
período posterior a la fertilización desempeñen aromáticos, presentaron hipermetilación de una
un papel en la eliminación de las modificaciones sustancia involucrada en la patogénesis del asma,
epigenéticas adquiridas que pueden estar influen- en el DNA de la sangre del cordón umbilical59.
ciadas por factores genéticos y ambientales indivi- Lo que ocurre con la exposición que sobrepasa a
duales. En los humanos, la ventana de plasticidad los niveles naturales de metales pesados como el
del desarrollo epigenético se extiende desde la cadmio en el medio ambiente y sus efectos en la
preconcepción hasta la primera infancia. Algunas salud renal y ósea mediados por cambios epige-
modificaciones se pueden extender a lo largo de la néticos ha sido demostrado en un estudio argen-
vida y producir cambios patológicos evidenciados tino60. La exposición al arsénico ingerido en ali-
en estudios de asociación del epigenoma. mentos o en el agua se han encontrado en la orina
Estudios de cohorte proporcionan evidencia de de mujeres gestantes, y se correlaciona con me-
los efectos de la desnutrición en el primer estadio tilación del DNA del cordón umbilical de recién
del desarrollo en la salud posterior de los sujetos. nacidos, en mayor proporción de hombres que
54 Cf. Cunliffe, V. T., WIREs Systems Biology and Medicine, Volume 7, Issue 2. Overview “Experience-sensitive epigenetic
mechanisms, developmental plasticity, and the biological embedding of chronic disease risk”, 2015
55 L.H. Lumey, Aryeh D. Stein, and Ezra Susser. Prenatal Famine and Adult Health. Annu. Rev. Public Health 2011. 32:237–62
First published online as a Review in Advance on January 3, 2011. Recuperado marzo 2020.
56 Vaiserman AM, Khalangot ND, Strele I, Lumey LH. Early-life exposure to the Ukraine famine of 1933 and type 2 diabetes
in adulthood. In: Lumey LH, Vaiserman AM, editors. Early life nutrition and adult health and development. Lessons from chan-
ging diets, famines, and experimental studies. Hauppauge, New York, USA: Nova Science Publishers; 2013. p. 145–60.
57 Li Y, Jaddoe VW, Qi L, He Y, Wang D, Lai J, Zhang J, Fu P, Yang X, Hu FB. Exposure to the Chinese famine in early life and
the risk of metabolic syndrome in adulthood. Diab Care 2011;34:1014–8.
58 Tobi EW, Slieker RC, Stein AD, Suchiman HE, Slagboom PE, van Zwet EW, Heijmans BT, Lumey LH. Early gestation as
the critical time-window for changes in the prenatal environment to affect the adult human blood methylome. Int J Epidemiol
2015; 44:1211–23.
59 Perera F, Tang WY, Herbstman J, Tang D, Levin L, Miller R, Ho SM. Relation of DNA methylation of 59-CPG is-
land of ACSL3 to transplacental exposure to airborne polycyclic aromatic hydrocarbons and childhood asthma. PLoS One
2009;4:e4488.
60 Hossain MB, Vahter M, Concha G, Broberg K. Low-level environmental cadmium exposure is associated with DNA hypo-
methylation in Argentinean women. Environ Health Perspect 2012;120:879–84.

Bustos Domínguez R.
122
DOSSIER PANDEMIA

mujeres provocando disfunciones placentarias61. conocimiento, tanto desde el punto de vista


La exposición al plomo en el aire o los alimen- de la medicina como de la perspectiva crítica
tos y sus consecuencias derivadas de neurotoxi- social.
cidad es bien conocida. La exposición prenatal y A nuestro juicio, la ciencia médica puede eng-
el deterioro en el desarrollo neurológico y déficits lobar estos conocimientos de la epigenética en el
cognitivos, es un campo de análisis epigenético marco de desarrollo de dos líneas de acción:
necesario en nuestro país. 1.- En la de una ultraespecialización de la me-
El efecto del uso de alcohol y otras drogas du- dicina y continuar extremando una pretensión
rante el embarazo, clínicamente relacionadas con utópica de control de las patologías humanas a
el Síndrome Alcohólico Fetal, dado que se conoce través de una neo-medicalización social siguiendo
que esta sustancia cruza la barrera hematoence- el análisis de Rose, que destaca el ensamblaje en-
fálica, se ha encontrado capaz de desarrollar un tre industria, economía neoliberal, determinación
amplio rango de anormalidades del desarrollo, es- de factores de riesgos y los deseos del “homus
pecialmente en el periodo de pre-implantación y economicus”, y que desarrolla Cooper64. En este
gastrulación, especialmente sensible a los efectos texto se pone de manifiesto que en la medida que
teratogénico de su uso. Incluso, algunos estudios los ámbitos de la biología y la acumulación del ca-
demuestran que el uso crónico de alcohol en hom- pital se mueven juntas, se hace difícil pensar en
bres se asocia a hipometilación encontrada en el las ciencias de la vida sin invocar simultáneamente
esperma de estos en comparación con individuos los conceptos tradicionales de economía política:
no bebedores, lo que lleva a suponer mecanismos producción, valor, crecimiento, crisis, resistencia y
epigenéticos paternos pre-concepcionales en la cambio. Al mismo tiempo debe considerarse que
vida posterior de sus hijos62 la expansión de los procesos comerciales en torno
En el campo de nuestra especialidad, la psi- “a la vida misma”, los transforma cualitativamen-
quiatría63, también a desarrollado una línea te. Esto lo podemos apreciar al hacer una sumaria
de investigación consistente con los cambios distinción entre la medicina liberal y post-liberal
epigenéticos subyacentes a las principales pa- 65
que se ha desarrollado con fuerza en EEUU y
tologías: esquizofrenia, trastornos bipolares se ha extendido a los países de la perisferia, entre
y depresión. Estos trastornos son altamente ellos Chile, después de la privatización de los ser-
complejos y heterogéneos, resultados de inte- vicios sanitarios que identifica cinco procesos de
racciones genéticas y ambientales, dónde los transformación histórica:
mecanismos epigenéticos aparecen como me- • La reconstitución política económica del
diadores de cambios a distinto nivel, desde lo vasto sector de la biomedicina;
molecular a lo funcional. Sin hacer una revisión • El enfoque en la salud a nivel de la vida mis-
exhaustiva sólo destacamos que los mecanis- ma (de tipo molecular) y la elaboración de
mos epigenéticos juegan un papel relevante en categorías de riesgo y vigilancia al mismo
el desarrollo del cerebro durante la diferencia- nivel;
ción celular neural y glial, como asimismo en • La naturaleza cada vez más tecnológica y
regulación de la neuroplasticidad, formación de científica de la biomedicina;
la memoria, regulación emocional y neurogéne- • Transformaciones en cómo se producen,
sis en la etapa adulta. distribuyen y consumen los conocimientos
Con lo sostenido, estamos en condiciones biomédicos, y en la gestión de la informa-
de hacer un balance de la importancia éti- ción médica;
ca y política de estos nuevos desarrollos del • La transformación de las identidades

61 Broberg K, Ahmed S, Engström K, Hossain MB, Jurkovic Mlakar S, Bottai M, Grandér M, Raqib R, Vahter M. Arsenic
exposure in early pregnancy alters genome-wide DNA methylation in cord blood, particularly in boys. J Dev Orig Health Dis
2014;5:288–98.
62 Ouko LA, Shantikumar K, Knezovich J, Haycock P, Schnugh DJ, Ramsay M. Effect of alcohol consumption on CpG me-
thylation in the differentially methylated regions of H19 and IG-DMR in male gametes: implications for fetal alcohol spectrum
disorders. Alcohol Clin Exp Res 2009;33:1615–27.
63 Cf: Kundakovic, M. Epigenetics of Psychiatric Disorders. En Trygve Tollefsbol. Medical Epigenetics. Academic Press, 2016,
c. 19.
64 Cf. Cooper, M, “Life as Surplus Biotechnology and Capitalism in the Neoliberal Era” University of W a s h in g t on Press,
Seattle and London, 2008
65 Cf. Biomedicalization: Technoscientific Transformations of Health, Illness, and U.S. Biomedicine Author(s): Adele E. Clarke,
Janet K. Shim, Laura Mamo, Jennifer Ruth Fosket, Jennifer R. Fishman Source: American Sociological Review, Vol. 68, No. 2
(Apr., 2003), pp. 161-194

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


123
corporales individuales y colectivas como desde los tiempos de la peste en Atenas, pasando
expresión del control de los cuerpos a tra- por la peste negra medieval, la mal llamada gripe
vés de técnicas de medicalización. española y la actual, seguirá asolando a la huma-
2.- De posibilitar, abriendo un campo de sana nidad68, marcando los límites a nuestra utopía de
crítica de tipo ética y política, una reflexión que progreso indefinida que sustenta la visión “mole-
considere coherentemente la historia y la biología cular” de la biomedicina.
del cuerpo que hemos sintéticamente expuesto, Desde nuestro punto de vista, y sin ignorar la
en una perspectiva no dicotómica de la medicina importancia del avance científico en medicina,
y de las prácticas médicas. quisiéramos destacar algunas dimensiones a con-
siderar en el desarrollo de nuestra medicina y los
Esta dimensión es la que nos interesa comentar: servicios sanitarios.

Siguiendo a Meloni66, es sorprendente que es IMPLICANCIAS ÉTICAS Y POLÍTICAS


desde el año 2000, se hayan producido una im- DE LOS CUERPOS POROSOS
presionante rehabilitación de ideas que solo hace
tres décadas encontraríamos inaceptables: básica- Los conocimientos de los efectos epigenéticos
mente, que podría haber algo más que la trans- del medio-ambiente sobre el cuerpo humano, do-
misión de ADN en la herencia biológica. Estos cumentados a nivel molecular, implican lógicamen-
puntos de vista postgenómicos ya están dando te un cambio epistemológico de importancia. Si re-
forma a reflexiones antropológicas o económi- trocedemos al comienzo de la medicina moderna,
cas sobre la raza y el capital humano, a menudo encontramos a Descartes quién radicalizó el dua-
mediadas por programas de investigación como lismo filosófico que venía desarrollándose desde
el del estudio del origen del desarrollo de la salud la filosofía griega clásica, separando mente y cuer-
y la enfermedad (DOHaD, de la U. Cambridge)67 . po, el cuerpo que tenemos y el cuerpo que somos.
En esta línea de pensamiento es necesario re- Descartes no es ajeno a la medicina. De acuerdo
cordar la relación colusiva que puede acompañar a V. Aucante69, los escritos médicos de Descartes
a la ciencia y a las disciplinas tributarias de ella ocupan un lugar importante de su obra total, con
como la medicina con las ideologías en boga, referencias a la fisiología, anatomía y embriología.
cuando no se somete a una crítica desde las cien- Al comparar el cuerpo humano a una máquina y
cias sociales o la política en un sentido amplio. dialogando con la ciencia y la anatomofisiología de
En su libro Political Biology, Meloni presenta una su época (Fernel, Willis, Vesalio, Galileo, etc.) inte-
completa exposición del impacto ideológico de gra el conocimiento adquirido en un esquema fun-
los conceptos de la herencia humana desde sus cional que excluye toda fuerza oculta, separándose
orígenes hasta la aparición de la epigenética, en de la escolástica aristotélica, de la cual no se pudo
torno a las tensiones entre una genética dura de alejar Harvey en su explicación del descubrimiento
tipo mendeliana y una suave de tipo lamarckia- de la circulación sanguínea en la misma época. Su
na, que desembocó trágicamente en las políticas método analítico que insta a descomponer lo com-
eugénicas nazi, como ejemplo paradigmático de plejo para comprender lo simple, es claramente el
la instrumentación de la ciencia por parte de la camino seguido por la ciencia positiva que nos ha
ideología. Lo mismo está ocurriendo en otro sen- conducido a la medicina del cuerpo molecular.
tido en muchos países, entre los cuales se incluye Con la epigenética, de una manera opuesta, el
Chile, por el uso abusivo de la ideología económi- cuerpo humano se revela permeable tanto al medio
ca neoliberal en las políticas de salud. Por ello, y ambiente físico-químico (mecánico natural) como
reiterando la necesidad de apropiarse de un marco al psicosocial (cultural) poniendo en duda este radi-
reflexivo amplio, queremos relevar el aporte his- cal dualismo que separa mente y cuerpo, naturaleza
tórico del estudio del cuerpo, junto a los avances y cultura. Es lo que hemos evidenciado antes, en
en el campo de la epigenética y la constatación de relación a las enfermedades humanas (mentales y
la impotencia médica frente a una pandemia viral orgánicas) derivadas de cambios en su epigenética.
como lo es la COVID-19, que seguramente como Por lo tanto, aparece una integración mayor, una

66 Meloni, M. Political Biology: Science and Social Values in Human Heredity fron Eugenics to Epigenetics. Palgrave, 2016
67 Cf Developmental Origins of Health and Disease (DOHaD). Programa de investigación de la U de Cambridge
68 Fauci AS, Morens DM (2012) The perpetual challenge of infectious diseases. NEJM 366:454–461
69 Aucante, V. “Descartes, Écrits physiologiques et médicaux, présentation, textes, traductions, notes et annexes” , Paris, PUF,
coll. Épiméthée , 2000

Bustos Domínguez R.
124
DOSSIER PANDEMIA

imbricación de lo biológico y lo cultural en la ex- problemas: la evolución de las ciencias y las tec-
presión de la salud y enfermedad de los cuerpos nologías bio-médicas y, la evolución de la socie-
concebidos como unidades abiertas. En suma, los dad que se pueden sintetizar en tres indicadores
sistemas biológicos son complejos, organizados en de cambios principales vinculados a los derechos
multicomponentes a distintos niveles, con variadas civiles, el surgimiento de un pluralismo moral y la
dependencias no lineales. A ello se suma, que tales actitud frente a la muerte. Organizada en Centros
sistemas no se pueden disociar del medio ambiente. de Investigación (Hasting Center, por ejem-
También la epigenética complejiza las teorías plo), Comisiones Nacionales (como el CNNE
de la causalidad de los fenómenos mórbidos, ex- francés), o grupos institucionales de Colegios
plicados antes en una linealidad mecánica. Con la Profesionales, se han dado a la tarea de discutir
epigenética nace una reevaluación de las etapas y proponer criterios éticos para el desarrollo de
de la vida, gestacional, de la adolescencia, de la la investigación científica y aplicación del conoci-
vida adulta, definidas por sus tasas de metilación, miento, y particularmente en el caso europeo, in-
en razón de los efectos del tiempo y los impactos tentando uniformar la legislación de los distintos
ambientales que se inscriben en el cuerpo como países miembros. El nuevo término de bio-medi-
lo hemos anotado. El impacto sobre las políticas cina es muy adecuado para dar cuenta del desafío
públicas es el corolario obligado, si se considera de la bioética: responder a desarrollos actuales de
por ejemplo la importancia que tiene el primer la actividad médica en el marco de los estrechos
trimestre del embarazo en las consecuencias de vínculos que se tejen entre la biología y la medici-
la carencia alimentaria. Con ello se hace necesa- na, por un lado, y el desarrollo de las ciencias y las
ria una reflexión epistemológica nueva sobre el teconologías biomédicas por el otro. La amplitud
carácter del cuerpo, la apropiación de los nuevos de este desarrollo es de tal magnitud, que se pue-
conocimientos y la aplicación que se puede hacer de hablar de una revolución biomédica en curso
de ellos que escapa a nuestro propósito actual. como lo ha detallado Rose y Clarke, que sobre-
Una de las consecuencias de la investigación en pasan ampliamente técnicas y descubrimientos a
epigenética y la etio-patogenia de las enfermeda- los que estábamos habituados, para transformar
des que antes se ha revisado permite sustentar con o modificar los componentes propios de los or-
fuerza el impacto del medio ambiente en la géne- ganismos humanos, sus genes o su cerebro, y no
sis de la salud y enfermedad, tales como la expo- simplemente objetos exteriores al cuerpo huma-
sición a ambientes tóxicos. El derecho a vivir en no. Todo esto estimulado por el mercado y la ra-
un medio libre de tóxicos se traduce una exigencia cionalidad gubernamental de tipo neoliberal.
de justicia ambiental (caso de Quintero). En otro Hasta el momento, las respuestas que ha entre-
contexto surge la demanda de justicia social en la gado la bioética no son necesariamente suficientes
medida de que la existencia de factores socio-am- y satisfactorias. Particularmente en nuestro país,
bientales nocivos para los individuos vinculados la referencia bioética más concreta es la que ha
a las desigualdades históricas se traducen en ries- sido incorporada a la ley No 20.584 del año 2012,
gos estructurales para ciertas poblaciones. Las que “Regula los derechos y deberes que tienen las
desigualdades socio-económicas frente a salud o personas en relación con acciones vinculadas a su
a la posibilidad de enfermar y morir es un tema atención en salud”72, complementadas con otras
antiguo en salud pública70. La justicia distributiva disposiciones legales y normativas, dónde se des-
debe ser rediscutida a la luz de estos avances en tacan referencias en relación a la práctica clínica de
investigación epigenética71. Otro, es el problema la medicina, relevando el respeto a la autonomía
de la equidad en el acceso a servicios sanitarios de las personas en su atención en salud y su dere-
cho a la información reservada, oportuna y nece-
BIOÉTICA Y POLÍTICAS DE SALUD saria que le permita ejercer dicha autonomía. Sin
duda, el esfuerzo ético-legal está dirigido en esta
La bioética es una disciplina que nace contem- perspectiva a responder cuestiones referidas a las
poráneamente a la biología molecular y la gené- decisiones, incertidumbres, conflictos de valores y
tica, y en respuesta a dos grandes categorías de dilemas que surgen frecuentemente en relación a
70 Rothstein, M., Cai, Y. & Marchant, G. Ethical implications of epigenetics research. Nat Rev Genet 10, 224 (2009). https://
doi.org/10.1038/nrg2562
71 Meloni, M. Epigenetics for the social sciences: justice, embodiment, and inheritance in the postgenomic age. New Genetics
and Society, 34 (2), 2015, pp. 125-151
72 Cf. Ley 20.584, “REGULA LOS DERECHOS Y DEBERES QUE TIENEN LAS PERSONAS EN RELACIÓN CON
ACCIONES VINCULADAS A SU ATENCIÓN EN SALUD”. Ultima Publicación del 13-dic-2019

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


125
un caso clínico en particular, de ahí que el método universalidad y accesibilidad independientemente
más utilizado en nuestro medio es el de la bioéti- de los medios con los que cuente el individuo. Los
ca clínica y el texto usado sea el Beauchamp and medios técnicos y de gestión deben subordinarse
Childress. Pero, de acuerdo a lo desarrollado antes, a los fines de la organización. En Chile, el trabajo
los cambios tecno-científicos de la biomedicina académico de M. Kottow74, debe considerarse un
comprometen los valores y las creencias de toda esfuerzo sistemático de pensar la bioética en este
la sociedad y, los progresos logrados en el campo sentido.
de la quimioterapia o el desarrollo de técnicas de
prolongación de la vida, transplantes de órganos, V.- CONCLUSIONES
la reproducción, el consejo genético y la medicina
predictiva tienen un alcance colectivo y de bien La genealogía del cuerpo en medicina nos per-
común que dice relación con la promoción de un mite extraer varias conclusiones que requieren un
bien común. La pandemia de COVID-19 es reve- estudio y profundización mayor.
ladora de esta dimensión: de la necesidad de pen-
sar en instituciones sociales como la educación o 1.- La categoría analítica “cuerpo” es central a la
los sistemas sanitarios en su conjunto, que es algo medicina en el contexto de su desarrollo cultural
más que la estructura material (hospitales o clíni- e histórico, como también a la teoría social para
cas), sino que en la función y el orden que deben comprender las interrelaciones sociales, políticas
ocupar en la sociedad, donde la bioética sea algo y económicas de la práctica médica
más que una ética aplicada a una situación parti-
cular. En una reciente publicación73, se analizan 2.- En general, a lo largo del desarrollo histórico
importantes tópicos sociales acerca de derechos y cultural de la medicina, podemos distinguir tres
reproductivos, explotación, comodificación, in- concepciones del cuerpo, que remiten a diferen-
vestigación médica, protección del medio ambien- tes formas de gobernar sus procesos de salud y
te entre otros temas de indudable interés, pero su enfermedad:
enfoque conceptual está fundamentalmente defi-
nido por una orientación liberal y basado en los • El cuerpo cósmico: propio de la medicina
derechos individuales. Cuando se observa la ex- griega clásica y de otras culturas, que se
periencia inédita de países como España e Italia, extiende hasta el siglo XVIII en occiden-
enfrentados a la pandemia de COVID-19, defi- te, incluso con ramificaciones actuales. Su
niendo hacer vivir/dejar morir, para retomar una fisiología humoral inestable y en equilibrio
fórmula de Foucault que caracteriza la biopolítica precario en constante relación y poroso al
contemporánea, de sistemas sanitarios en proceso medio externo, exigía a la práctica médica
de privatización (pese a pertenecer a países con una constante vigilancia y monitoreo de los
una cultura política que aprendió tempranamente signos y síntomas de las enfermedades, lo
a comienzos del siglo XX que la desigualdad so- que permite construir una rica fenomeno-
cial y económica creciente como producto de la logía clínica y desarrollar una terapéutica
industrialización de sus países debía compensar- compleja para recuperar el balance necesa-
se con dos sistemas “buffer”: salud y educación rio a un cuerpo saludable, en estrecha rela-
de acceso universal y a bajo costo, pensamos que ción con una filosofía natural. El resultado
este problema es un problema bioético necesario fue una medicina a nivel micro-político (de
de discutir en nuestro país, más allá de aspectos los individuos) que llamaba a la auto-mode-
de gestión u económicos-administrativos, que ración a través de varios regímenes sanita-
han caracterizado las discusiones de reforma al rios que ofrecían guías de comportamiento
sistema sanitario en Chile. Un principio de equi- físico y moral y en general invitaban a la
dad y de justicia “real” para todos los ciudadanos temperancia como prevención de la enfer-
debiera presidir la estructura del servicio sanita- medad o prescripción de una vida saludable.
rio, que debiera caracterizarse por su globalidad,
73 Cf Eduardo Rivera-López • Martin Hevia Editors “Controversies in Latin American Bioethics”, Springer, 2019
74 “Health and health care gradients and disparities are on the rise, fueled by an epidemiological turn from infectious to chronic
degenerative diseases that are associated with socioeconomic determinants and aggravated by man-made risks, such as accidents,
ecological deterioration, violence, health disrupting life styles, and unwholesome individual behavior. The reassessment of
cultural and personal values indicates the need for applied ethical perspectives to become incorporated into the deliberations of
public policies, thus bringing to the forefront the development of bioethics in public health”. Cf. Kottow, M. “From Justice to
Protection. A Proposal for Public Health Bioethics”. Springer Briefs in Public Health, 2012.

Bustos Domínguez R.
126
DOSSIER PANDEMIA

• El cuerpo anátomo-fisiológico: El despla- forma de desarrollo neocapitalista y una


zamiento del cuerpo cósmico-humoral a filosofía fundada en el “homus economi-
una forma corporal sólida fue un proceso cus”, que estimula el deseo y el consumo
largo y difícil que remonta a los griegos de salud, incorporando a la medicina en un
(Herófilo, Erisestrato), a la filosofía aristo- complejo mundo de intereses e inversiones
télica y posteriormente (vía la medicina ára- que desvirtúa sus fines.
be) llega a occidente con el Renacimiento
italiano y los primeros artistas-anatomistas, 3.- El desarrollo de un nuevo campo de conoci-
entre ellos Leonardo, Harvey y Vesalio. mientos, --la epigenética—, pone en duda la posi-
La revolución científica del siglo XVII ción central del cuerpo molecular en el desarrollo
(Galileo, Newton), en conjunción con la de la medicina y salud pública actual, asociada a la
filosofía moderna naciente (especialmente individualización y al mercado neoliberal, y pone
Descartes), permitió la idea de espaciali- de relieve un cuerpo poroso, permeable a las con-
zación del cuerpo y de una nueva mirada diciones ambientales y sociales que explican des-
anatómica y clínica, sustentada en una aná- igualdades y vulnerabilidades a la enfermedad y la
tomo-fisiología tisular que da respuesta a la muerte. Paralelamente, la aparición de una nueva
etiología de la enfermedad, y facilitando el pandemia viral (COVID-19), además de ratificar
reconocimiento de regularidades y relacio- las influencias del medio externo a la corporali-
nes entre la clínica y las lesiones subyacen- dad, ha revelado las insuficiencias y disparidades
tes para dar origen a una medicina científi- de acceso a una atención sanitaria, que tiende a la
ca y positivista, que conocemos hasta ahora privatización y responsabilización individual del
como eficaz reguladora del desorden social riesgo en momentos de desastres epidemiológi-
que implica la enfermedad. Paralelamente, cos, donde la medicina molecular es impotente
la irrupción del mercado y las leyes eco- de controlar el caos que implica la enfermedad.
nómicas y filosóficas de tipo liberal, reco- Una nueva epistemología de la medicina se hace
nocen los cuerpos como cuerpos valiosos, necesaria.
necesarios de cuidar y preservar en salud, lo
que permite el despliegue del cuerpo ana- 4.- La bioética, como respuesta al desarrollo
tómico como cuerpo colectivo que fija es- bio-político en medicina, ha quedado atrapada en
tándares de normalidad y anormalidad apli- una bioética clínica, funcional a un pensamiento
cable a todos los seres humanos y en todos individual propio de una filosofía liberal que exa-
los tiempos, dando origen a una disciplina cerba la autonomía de la voluntad como principio
médica y a una proto medicalización social, regulador de las relaciones de la medicina con los
una especie de Salud Pública incipiente, que individuos, en detrimento de una bioética pública
se desarrollara plenamente en el siglo XX, que dé cuenta de las desigualdades e iniquidades
como políticas preventivas y políticas pú- de las políticas públicas de orientación neolibera-
blicas, con el reconocimientos de derechos les frente a la enfermedad y el riesgo que revela la
individuales y colectivos a la salud asocia- epigenética molecular y la aparición de pandemias
dos a una macro-política regulada por la como la de COVID-19.
economía.
5.- Finalmente, la genealogía del cuerpo en sus
• El cuerpo molecular: es el que preside el relaciones con la medicina, la política y la econo-
desarrollo de la medicina bio-tecnológica mía, hace necesaria una discusión profunda sobre
actual que considera a la genética y el cono- los fines de la medicina y las prácticas médicas
cimiento molecular como el último umbral contemporáneas.
conocido de la vida, y la fuente de certi-
dumbre o verdad del gobierno de la salud y Santiago, 30/3/2020
enfermedad. En estrecha relación con una

Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1)


127
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1) DOSSIER PANDEMIA

Aplanar la curva... de los papers. Articulismo


científico y extravíos del conocimiento en situación
de crisis
Nelson Arellano-Escudero1

E n la página web de revista Science Magazine Jeffrey Brainard (2020) es reconocido como editor
asociado de noticias en 2017. Aclaran que cubre una variedad de temas y edita la sección Breve en
la revista impresa. El 13 de Mayo de 2020 fue publicado su artículo-post: “Scientists are drowning
in COVID-19 papers. Can new tools keep them afloat?”.
El viejo problema del iceberg de la producción de literatura vuelve a encarar al Titanic de la ciencia. El
llamado de atención de Brainard acerca de que los/las científicos/as se están ahogando en los artículos
producidos en relación a COVID-19 busca una respuesta en las nuevas herramientas para mantenerlos a
flote.
Pero, tal como nos enseña Elena de la Aldea (2019) y ella con Ignacio Lewkovic (2014) la urgencia, esa
tramposa, tiene una doble faz en esta ocasión. Una de las urgencias por la crisis de 2019-2020 y otra por el
cruce del río Leteo: las formas del olvido (1998) en relación al problema de la producción de conocimiento.
Brainard destaca que en Enero 2020 las estimaciones calcularon 23.000 artículos relacionados con
COVID19 y que cada 20 días esta cifra se duplicaba. Aparentemente una proyección alarmista que hablaba
de millones de artículos científicos para mediados de 2020 fue eliminada de esta publicación (esto quizás
asociada a esta correción: “*Correction, 15 May, 10 a.m.: This story has been updated to remove an inco-
rrect statement that the CORD-192 data set holds exclusively English-language papers.”)
Las cifras, de cualquier manera, son abrumadoras y, como se señala allí, para algún especialista signifi-
caba enfrentarse a una producción de 4.000 artículos por semana. Desde luego, simplemente imposible
de procesar, pero, la otra faceta del problema es la calidad de esa información. Esto es un asunto de data
mayor y revela que la contingencia se ve prisionera de un problema estructural: al menos el 20% de las
publicaciones se encuentra bajo barreras de pago, es decir, un conocimiento científico que no es gratuito.
Añadamos a ello, que la pesquisa necesaria para ratificar la calidad de la producción de conocimiento es
un desafío de gran alcance y de larga data (Brainard & You,2020).
El problema en Chile ha tenido otro carácter que ni siquiera llega a tocar los aspectos de vigilancia epis-
temológica o metodológica, sino que refiere al complejo y difícil campo del manejo político de los datos,
los aspectos políticos de la ciencia y la ciencia en la política (Mechanic, 1974), en lo que podremos incluir
subcampos como el de la diplomacia y la ciencia (Turekian & Neureiter, 2012).
Agrupaciones como Ciencia con Contrato (2020), red de Investigadoras (2020), entre otras3, muestran
no solo las constantes en las formas de discriminación y menoscabo a las comunidades científicas, sino
que en estos meses han dejado en evidencia las complejas relaciones de poder en las formas de manejo de
dato en situaciones de crisis (Gutiérrez, 2020).Son, también, las consecuencias que nos dejan autoridades
que juegan a construir castillos de naipes.

1 Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC): Instituto de Humanidades, NIDAS/DETLA. Correspondencia a:


[email protected]
2 Open Research Dataset Challenge (CORD-19)
3 De manera plural se deben considerar voces como las provenientes de: Redes Chilenas (RECH), Asociación Nacional de
Investigadores de Postgrados (ANIP), Asamblea por el Conocimiento (ACI), Frente por el Conocimiento (FPC), Asociación de
Artes y Humanidades (AyH), Más ciencia para Chile (+Ciencia), Las asambleas de postgrado de las distintas universidades y las
asociaciones de funcionarios, sin que este listado sea exhaustivo.

129
REFERENCIAS

• AUGÉ, Marc (1998) Las formas del ol- • Heroica. Buenos Aires: Editorial Los
vido, Barcelona, Gedisa. Les formes de Talleres.
l’oubli, París, Editions Payot, 1998 • De la Aldea, Elena (2019) Los cuidados
• Brainard, Jeffrey (2020) “Scientists are en tiempos de descuido. Santiago de
drowning in COVID-19 papers. Can Chile: LOM editores.
new tools keep them afloat?”, May. 13, • Gutiérrez, Claudio (2020) Gobierno y
2020 , 12:15 PM, Posted in: Scientific datos del Covid-19: secretismo, mani-
Community Coronavirus doi:10.1126/ pulación y democracia, publicado en
science.abc7839 CIPER-Chile el 21.04.2020, recuperado
• Brainard, Jeffrey & You, Jia (2020) “What de internet el 27 de mayo de 2020: ht-
a massive database of retracted papers tps://ciperchile.cl/2020/04/21/gobier-
reveals about science publishing’s ‘death no-y-datos-del-covid-19-secretismo-ma-
penalty’”, Oct. 25, 2018 , 2:00 PM Posted nipulacion-y-democracia/
in: Scientific Community doi:10.1126/ • Mechanic, D. (1974). Politics, medicine,
science.aav8384 and social science (pp. 271-278). New
• Ciencia con Contrato (2020) cuenta de York: Wiley.
Twitter @CienciaContrato, recuperada • Red de Investigadoras (2020) Quienes
de internet el 27 de mayo de 2020: ht- Somos, recuperado de internet el 27 de
tps://twitter.com/CienciaContrato?ref_ mayo de 2020: https://redinvestigadoras.cl/
src=twsrc%5Egoogle%7Ctwcamp%5E- • Turekian, V. C., & Neureiter, N. P. (2012).
serp%7Ctwgr%5Eauthor Science and diplomacy: The past as
• De La Aldea, Elena y Lewkovic, Ignacio prologue. Chemistry in Australia, (Dec
(2014) Cuidar al que cuida. Subjetividad 2012), 26.

Arellano-Escudero N.
130
Cuad Méd Soc (Chile) 2020, 60 (Suplemento 1) DOSSIER PANDEMIA

Conversatorio con Marie Andy Sanozier.


Asesora legal laboral para inmigrantes Haitianos
Buenas tardes,

Mi nombre es Marie Andy Sanozier de nacionalidad Haitiana, con 34 años, pronto cumpliré 4 años aquí
en Chile. Soy asesora social laboral, trabajo como relatora de idiomas, imparto clases de español para mi-
grantes haitianos y Kreyòl, hispanohablantes.
Hoy quiero hablar de los migrantes durante la pandemia. No soy nadie para hablar en nombre de “todos
los migrantes”, pero si por las experiencias vividas como asesora socio laboral que trabaja directamente
con migrante. Durante la pandemia, con un grupo de amigos, nos unimos para poder brindar un poco
de apoyo a algunas personas con un poco de comida que han sido donadas a por algunos empresarios.
Gesto que agradecemos con el alma, ya que muchos en este momento están pasándolo mal debido a varios
sucesos, uno de ellos el Covid-19 a nivel mundial, el estallido social en Chile que también nos dejó con
mucho dolor de cabeza, sobre todo a las personas migrantes que perdieron sus empleos, son personas que
trabajan para ayudar a sus familiares tanto acá como en sus países.
Desde el principio del mes de marzo apareció en Chile el Covid-19 que trajo consigo muchos cambios
que ha perjudicado al mundo entero, pero también a nosotros los migrantes, sobre todo los que estamos
en Chile. La tan rápida expansión de dicho virus causó además de la crisis sanitaria, ha afectado la econo-
mía y la estabilidad emocional de las personas. Todos los migrantes que están, -para no generalizar- pero
gran parte de los migrantes están en otro país trabajamos para mejorar nuestro futuro y el de nuestra
familia
En Chile ha sido súper complicado la obtención de la cedula de identidad para muchos. La pandemia
demostró que había forma de agilizar los procesos de solicitud. Los extranjeros han tenido que soportar
desde madrugadas bajo cero grado hasta meses de espera para solicitar el pago de una multa. Tantas
penurias solo para poder conseguir un pequeño plástico, sin eso, uno no es nadie. El tenerlo tampoco
garantiza una estabilidad ya que algunos lo tienen pero tampoco pueden conseguir un empleo debido a las
tantas brechas que existe en el sector empresarial.
La incertidumbre y la angustia de no saber cuándo acabara todo eso, perturbado emocionalmente y
económicamente a todos.
Con la resolución n° 34 que salió unos meses atrás, muchos extranjeros creyeron haber visto la luz al final
del túnel. Se suponía que sería de gran ayuda para los que tienen meses sin poder trabajar esperando que
se le otorgue el nuevo documento. En Chile la temporaria dura un año y después hay que postular para la
visa definitiva, o postular para otra temporaria, depende de la que obtuvo al principio. De lo mencionado
anteriormente, no ha sido respetado por ninguna institución, sobre todo las públicas, yo creo que la única
institución -donde yo he escuchado- que reciben ese documento es en la AFC y los bancos (en algunos
bancos), para las empresas y el mismo SENCE, no está permitiendo que las personas puedan capacitarse
para poder obtener mayor posibilidad.
Encuentro súper injusto, súper mal pensado, muy inhumano hacer que una persona dependa en estos
momentos de crisis de un plástico -de verdad-, sabiendo que hay muchas personas pasando hambre, mu-
chas personas que no tienen cómo pagar el arriendo, que están durmiendo en la calle de hecho porque
no tiene cómo pagar el arriendo... porque tuvieron que desalojar donde estaban viviendo y si solicitan un
empleo, lo condicionan a un plástico,
De verdad no entiendo hasta donde llega la maldad, la mala fe de las personas ver o escuchar a las perso-
nas que te digan “mi empleador me despidió”, “mi empleador me obligó a firmar mi renuncia”, conozco
personas haitianas quienes han sido despedidas u obligadas a firmar su auto despido sin conocimiento de

133
lo que están firmado. Encuentro que es un crimen disfrutarla porque donde vive el dueño le ha dado
de parte de algunas personas. fecha para desalojar, sin saber para donde va ir, y
El viernes lloré demasiado, lloré lloré... lloré, no tiene otro lugar para vivir ni dinero para regre-
tuve mucha rabia! Ver que nadie está hablando de sar a su país.
eso, es cierto que estamos en momentos de crisis, Son temas muy importantes que se deberían
pero está también la necesidad de las personas, visibilizar para que podamos tener una mejor
que no se llenan con una simple caja, de qué sir- sociedad.
ve tener una caja de alimentos si no hay gas para
poder cocinar, de qué sirve tenerla y no poder Muchas gracias.

Andy Sanozier M.
134
INSTRUCCIONES A LOS AUTORES
ALCANCE Y POLÍTICA EDITORIAL

Cuadernos Médico Sociales publica trabajos originales sobre Salud Pública y Medicina Social, en
español, inglés o portugués, en cuatro números al año (marzo, junio, septiembre, diciembre).
Dentro de los objetivos de Cuadernos Médico Sociales se encuentra estimular la reflexión y la in-
vestigación científica en el ámbito de la Salud Pública y de la Medicina Social, difundir temas relevantes
a estas áreas del conocimiento, donde se integren quienes estudian o trabajan en las distintas disciplinas
(ciencias naturales, biológicas, sociales y/o de la conducta, humanidades médicas y otras) e instituciones
relacionadas con la salud colectiva. Hacer llegar a las autoridades, dirigentes, profesionales y estudiantes de
postgrado aquellas experiencias, análisis y resultados de investigaciones que contribuyan a desarrollar una
concepción integral de la salud y de la atención de salud.
Se preferirá resultados de investigaciones y/o experiencias en torno a ámbitos específicos de la Salud
Pública y de la Medicina Social, tanto de metodología cuantitativa como cualitativa, que contribuyan a
desarrollar una concepción integral de la salud y de la Atención de Salud. Se publican también Notas,
Comentarios, Reseñas y Cartas al editor.
Los trabajos que cumplan con los requisitos formales, serán sometidos a revisión por expertos. La nó-
mina de revisores consultados se publica una vez al año. La revista se reserva el derecho de hacer modifi-
caciones de forma al texto original.

FORMA Y PREPARACIÓN DE MANUSCRITOS

Un Manuscrito en proceso de revisión en Cuadernos Médico Sociales no podrá ser enviado a otro me-
dio de publicación para los mismos fines. Se sugiere que los trabajos enviados se ajusten a las siguientes
instrucciones:
1. 1. La extensión máxima será de 20 páginas a espacio sencillo1, tipo Arial 11 con un margen de 3 cm.,
incluyendo tablas y gráficos. Las ilustraciones y tablas deben enviarse en páginas separadas, indican-
do claramente el título, Tabla xx o Figura xx. En el caso de los cuadros en su parte superior y de las
figuras en su parte inferior, numeración, fuentes y el sitio en que serán intercaladas; deben venir en el
archivo original y no ser insertados como “objetos”. No se usarán colores. Las notas al texto deben
venir al final de cada página con números correlativos. Las tablas no deben contener grises en su
interior, ni líneas verticales. Una línea horizontal sobre los títulos de las columnas y otra debajo. La
tabla termina con una línea horizontal. No incorpore más líneas en su interior.
2. Los artículos de investigación deben dividirse en las siguientes secciones:
a. Título y autores. El título puede tener hasta 84 caracteres, incluyendo los espacios entre las
palabras y además debe estar traducido al inglés. Los autores figurarán con el nombre y apellido; en
nota al pie se consignará la profesión, cargo y principal grado académico. Se colocará la dirección
electrónica del autor a cual deberá dirigirse la correspondencia.
b. Resumen. No debe tener más de 250 palabras, con los objetivos, métodos, resultados y conclu-
siones principales. Agregar una versión en inglés. Colocar entre dos y seis palabras clave (descripto-
res), según la nomenclatura consignada en: http://decs.bvs.br/E/homepagee.htm
c. Introducción. Describa brevemente el objetivo de la investigación y explique su importancia.
d. Material y Métodos. Describa los procedimientos y materiales utilizados, incluyendo los deta-
lles necesarios que permitan repetir la experiencia en futuras investigaciones.
e. Resultados. Presente sus resultados en secuencia lógica. No repita en el texto todos los datos
presentados en tablas o ilustraciones. Enfatice o resuma solamente las observaciones importantes.
f. Discusión. Enfatice los aspectos nuevos e importantes del estudio y las conclusiones derivadas
de ellos. Incluya en esta sección las implicancias de sus hallazgos, tanto como sus limitaciones. Evite
detalles ya presentados en las secciones Introducción y Resultados.
g. Conclusiones y perspectivas

1 Los autores que deseen enviar trabajos más extensos, serán recibidos por el comité, para una evaluación especial.
h. Referencias. Limite las referencias (citas bibliográficas) idealmente a 30. Incluya las referencias
aparecidas en revistas chilenas, incluyendo las publicaciones pertinentes aparecidas Cuadernos
Médico Sociales. Las eferencias deben seguir formato APA. Incluirlas en el texto con el apellido
del pirmer autor entre paréntesis.

Autoría
RESPONSABILIDAD DE AUTORIA
El siguiente documento debe ser completado por todos los autores de manuscritos.

TITULO DEL MANUSCRITO:

DECLARACION: Certifico que he contribuido directamente al contenido intelectual de este manuscrito,


a la génesis y análisis de sus datos, por lo que estoy en condiciones de hacerme públicamente responsable
de él y acepto que mi nombre figure en la lista de autores.

Conflicto de intereses: NO: SI: (Explique):

NOMBRE Y FIRMA DE CADA AUTOR CODIGOS DE PARTICIPACION

Mail para correspondencia:

Además cada autor deberá especificar Institución de afiliación, si trabaja en más de una, especificar la
principal o la que el autor desea que aparezca. Indicar además ciudad y país.

ENVÍO DE MANUSCRITOS

Los artículos deben enviarse al correo electrónico de la secretaría de Cuadernos Médico Sociales al co-
rreo-e: [email protected]
Cada autor tendrá derecho a un ejemplar del número en que aparece su artículo, sin costo. Los apartados
deberán solicitarse al momento de enviar el trabajo; su costo será de cargo del autor.
Cuadernos Médico Sociales, revista de salud pública del Colegio Médico de Chile.
Fundada en el año 1959.
Publicación trimestral.
Cuadernos Médico Sociales
2020; Vol 60, Nº2

Fotógrafía de portada: Patricia García, ilustración de portada del libro Situaciones de Calle,
editado por Fundación Gente de la Calle en 2019
Fotografías de interior: Diego Silva Flores. Periodista en práctica Fundación Gente de la Calle
Sebastián Godoy Rivas. Editor CMS

Esmeralda 678, Santiago de Chile.

También podría gustarte