Las 7 Ventanas 2023 A PDF

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© 2006 Edgar Efren Delgado Orea

Primera edición Enero 2006 Pino Giordano Editore


Edición digital Febrero 2023 ampliada Jesús De Mula
Fotografía de portada: Edgar Delgado
Maquetación portada: Stefania D’Amico

www.chamanazul.com

Todos los derechos reservados.

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LAS 7 VENTANAS DEL
CHAMANISMO

La danza con la muerte


y el reencuentro con la vida

Libro I
Agustín Chamán

Agustín
CeAcatlItzcoatlPapalotzin
Edgar Delgado

3
INDICE

Agradecimientos ……………………………………….…. Pag. 5


Notas del autor ………………………….………………… “ 8
Prefacio …………………………………………………… “ 9
Listado de ahorro de energía (Ejercicio I) …….….………. “ 12
Sentimientos y emociones ……………………..…………. “ 16
Buena suerte y mala suerte.……………………..………… “ 19
Energía ………………………………………….………… “ 21
La concepción ……………………………………..……… “ 22
La danza con la muerte …………………………………… “ 24
El día de tu entierro …………………………………..…… “ 27
Meditación de la muerte ……………………………...…… “ 27
La despedida y el poema ……………………………..…… “ 29
El Juicio. ……………………………………………..…… “ 38
Poemas de amor a la vida ………………………………… “ 43
Círculo de sanación …………………………………..…… “ 45
Intercambios de energía …………………………………… “ 47
100 personas (Ejercicio II). ………………………….…… “ 53
Los vampiros energéticos …………………………….…… “ 57
Estrategias chamánicas (Ejercicio III)…… ………….…… “ 60
Los cuatro círculos de acción……………………………… “ 62
Las frases directivas (Ejercicio IV)……… ………….…… “ 69
La cosmovisión del nacimiento…………………………… “ 73
Las 7 puertas del nacimiento…………………………….… “ 74
El libro de la vida………………………………………..… “ 78
Cortando telarañas energéticas..…………………………… “ 80
Meditación del bosque y de los padres……………….…… “ 80
Cambiando el libro de la vida……………………….…….. “ 86
Capítulo final……………………………………………… “ 87

TAREAS…………………………………………………… “ 89

Libros recomendados………………………………….…… “ 95

Apéndices…………………………………………………… “ 96

4
5
Agradecimientos

A Lucy Santoro, Tonalli Delgado y Nagualli Delgado.

A Mino Molfeta y Verena Wildmer.

A Jaime Delgado, Elizabeth Orea, Pablo Delgado, Ivonne Delgado, Elizabeth


Delgado y Sandra Delgado.

Mariví De Teresa, Carlos Castaneda, Florinda, Taisha, Rosa Coll, Guillermo


Díaz, Lidia del Monte, Jesús miguel Pérez Sáez y Octavio Retting.

A Antonio Bravo y Montse Canellas, Enrique de Soto y a Pino Giordano.


A Jauma Codina, Paco Zarate.

A Josu, Marian y Nati, y a Angélica Catzor.

A Luis Puerta, Rosa, Minerva, a Jorge Selfa y Manuela García, a Jesús de Mula
y Paqui Cano, a Joanna Crowson y Christopher Davison, Merry Davison y Claudia
Kaiser.

A Anae Delgado, a Montse y Patricio San Román, Sureisha Delgado, Claudia


Panarese, Carmencita García y Natalia.

A Carmen Yoldi y Esperanza Yoldi. Teresa López, Antoni Canalejos, Belén


Austin, Eduardo Urías, Ricard Clavens, Susana Riopedre, Marisol Olivoto, Elisa
tTsta, Eliisa Aspareto, Marias Said, Aurelia Alberti, Sila felicita, Emanuelle Ricci,
Marco Bobe, Nicol, David Ortega y Achim.

Un agradecimiento especial a Chiara Pavoni

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Estela no.1
Grupo de Macanxoc, Coba
Yucatán, México
Cultura maya

29 de enero de 653
29 de junio de 672
28 de agosto de 682
21 de diciembre del año venidero 2011

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NOTAS DEL AUTOR

Cuando tenía dieciocho años, comencé a impartir una serie de cursos con mi
amigo y maestro Víctor Sánchez. Éramos un par de muchachos soñadores y llenos de
energía. Leíamos libros y aplicábamos las técnicas. Después, con lo aprendido,
preparábamos seminarios y dábamos clases. Hacíamos un equipo perfecto: él era el
líder, el intelectual, la vanguardia, yo, su fiel Sancho lleno de creatividad a la hora de
trabajar y poner en práctica los ejercicios. Aquellos cursos se llamaban “Reencuentro
con la mente y el espíritu humano”. Ahora que tengo cuarenta y dos años y han
pasado 24 desde aquellos primeros cursos, me doy cuenta de que todos aquellos
ejercicios y aquella información, están aún vigentes en mis seminarios. La creatividad
que desplegaba a la hora de idear nuevas dinámicas, existen en el día de hoy casi
íntegramente.

He hecho escuela, he recorrido el mundo, he buscado maestros y he encontrado


alumnos. He copiado conceptos y métodos, y realmente no sé a quién. No sabría decir
aquí, en este libro, cuáles son mis palabras y cuáles han sido tomadas de otros. Son
frases y conceptos que he repetido durante 24 años. He creído, y creo, en lo que está
aquí escrito y doy las gracias a aquellas personas de las que tomé prestado el
conocimiento que ahora hago mío.

Lo escrito en este libro sólo es un manual para aquellas personas que quieran
profundizar más en el chamanismo azul.

Ahora puedo decirles que este libro, a diferencia de los otros que he escrito, no
es un libro de entretenimiento. Así advertidos, tómense su tiempo.

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PREFACIO

Mi nombre es José. Nací en México capital. Tengo cuarenta y tres años y hace
diez, a los treinta y tres (la edad de Cristo), comencé mi aprendizaje chamánico. He
ganado mucho y he perdido más. No he perdido nada que no hubiera querido perder,
pero, si lo tuviera hoy aquí, seguro que creería que estoy mejor así… bueno eso es lo
que mi parte débil quiere creer.

Mi maestro y benefactor se llama Bekech, un indio lacandón que ha


modificado la visión del chamanismo clásico a su antojo.

-“El conocimiento es para transgredirse” -me dijo un día- “El conocimiento me


pertenece y puedo hacer con él lo que quiera”.

Un día, escuchando mis continuas quejas de “lo que yo era” o creía ser y sentía
haber perdido; escuchando mis quejas en las que extrañaba aquella vieja personalidad
de cuando yo era una persona normal, común y corriente, mi maestro Bekech, me
dijo:

- “Si sacara mi varita mágica y pudiera llevarte a lo que eras antes


de conocerme, y te dejara tal y como te conocí hace 10 años ¿aceptarías
regresar a ser lo que fuiste?”
- No maestro, nunca. Extraño lo que no quiero por vicio y por tonto
-dije mirando al suelo y una vez más avergonzado por mi propia estupidez-.

Comencé mi camino, como muchos otros de mis compañeros, sin saber por
qué. Me gustó la imagen de los indios y de los chamanes viviendo libres, haciendo

9
ceremonias, entrando en otras realidades paralelas. Me enamoré de libros de
escritores como Edward S. Curtis y sus fotografías; el Dr. Watson y sus
investigaciones antropológicas acerca de Huautla; de Jiménez y María Sabina. Me
fascinó Carlos Castaneda y su personaje, mitad mito mitad real, Don Juan Matus o
Víctor Sánchez con su metodología de cómo abordar la anti-antropología y su forma
de transformarnos de acuerdo al conocimiento indígena: El Anti-chamanismo.

Era como muchos buscadores del conocimiento: quería mejorar mi vida,


triunfar sin soltar prenda y sin cambiar mi condición humana, sin tener que hacer un
esfuerzo existencial. Era un gran buscador de papel, leyendo, imaginando, hasta que
llegó una ola y me arrastró sin poder evitarlo.

El chamanismo me atrapó; me atrapó de la misma manera en que una serpiente


atrapa a un ratón hipnotizándolo. Y yo quedé, como ese ratón, mirando maravillado y
aterrorizado las fauces de la serpiente que me iba a devorar. Existe un abandono
completo dejándose engullir, sabiendo que uno se va a arrepentir, que va ser
devorado triturado y transformado.
Así me sentí yo en el estómago de la serpiente: sin saber si estaba muerto o
vivo, atrapado en mi creencia errónea de que no era capaz de salir de allí. Siempre
creí que un ratón dentro de una serpiente era un ser muerto en su totalidad. Siempre
di por sentada esa creencia, como todas las personas que conozco. Ahora, hasta esa
creencia tan sencilla, ha sido puesta en solfa ¿Realmente está muerto el ratón que está
dentro de una serpiente? ¿Realmente aquel hombre que fue engullido por el
chamanismo, está vivo en este mundo? ¿Dónde estoy? ¿Es esto un sueño como me ha
afirmado infinidad de veces mi maestro? Si esto es un sueño, mi capacidad como
chamán ya me permite mover ese sueño a capricho, pero sigo en un sueño ¿Dónde
está el soñador de este sueño exquisito? ¿Dónde estoy yo realmente dormido? ¿Por
qué no puedo o no quiero despertar? ¿Acaso algún día podré despertar en una
realidad en la que el ratón sale vivo del estómago de la serpiente? ¿Acaso podré
despertar en una realidad en la que elijo dejar este sueño? Mi maestro, ante estas
preguntas, solamente me daba una fecha: 21 de diciembre del año 2011.

El chamanismo es lo mejor que me ha pasado, pero nada me ha dolido más que


descubrir que existe el mundo que busqué. Existe y es tal y como lo imaginé,
hermoso, vasto, libre…Pensé que era otra mentira más de las que nos cuentan cuando
somos niños. Pensé que sería como el cielo y sus ángeles: un placebo mental para no
tenerle miedo a la muerte, a las fauces de la serpiente, a Dios. El ratón cree que
después de ser comido, será llevado al cielo de los ratones, le pondrán unas diminutas
y hermosas alas y desde allí podrá reírse de los que están abajo.

- “Para recibir tus alas, ratón, sólo hace falta aplomo, dejar que la
muerte te mate lentamente y tú resignarte a eso, no hagas nada. Yo, el Dios de
los ratones, me hago cargo de todo”

10
La vida es solitaria. El camino chamánico lo es más aún y, sin embargo,
gracias a la disciplina de mis primeros años, es lo mejor que he encontrado jamás.

Fue mi mejor inversión, pero ahora estoy aquí en la nada absoluta sin
problemas ni preocupaciones, sin aspiraciones mundanas y, sin embargo, si me ven
como un hombre común y corriente, verán la fachada de un triunfador, y seguramente
es lo que soy: un triunfador que habita y viaja en solitario por el mar de los misterios.

Todo existió dentro y floreció gracias a mi maestro Bekech. Él, con sus
organizadores, amigos y alumnos, crearon una familia de chamanes. Un linaje en el
que la senda ardua del conocimiento tenía que caminarse tomado de la mano de la
alegría y de la belleza.

- “Este camino no es para sacrificarte por los demás; este camino es


para que los demás disfruten de ti, de tu conocimiento, de tu bienestar, de tu
grandeza”.

Bekech era un hombre presente y lejano al mismo tiempo. Mano de hierro,


guante de seda.

- “Yo soy tu maestro, pero en el chamanismo no hay maestros. Es


una paradoja que tendrás que descubrir. Tu camino será solitario, todo lo que
ganes o pierdas será tu responsabilidad. Yo seré tu apoyo si sabes apoyarte en
mí. Yo estaré presente en tus pensamientos si sabes hablar conmigo. Primero
serás un desconocido, después tal vez un alumno, después un amigo y
finalmente un aprendiz. Así es el nuevo chamanismo”.

Bekech no daba segundas oportunidades, sabia apoyarte cuando en sus


creencias te veía trabajar. A él solo le importaban los resultados, no los buenos
intentos.

El chamanismo no es una religión,


nunca podrá ser una religión.
Es un camino solitario con pausas a seguir.
Es una filosofía, una manera de percibir la realidad.
Es una revolución perceptual

Es un camino a la libertad
donde respetas el deseo de los demás
a vivir esclavizados en su mundo existencial.

Códice Tonalli Tonanzin


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EL CURSO INTRODUCTORIO

Ejercicio I

LISTADO DE AHORRO DE ENERGIA

- “Es importante -comenzó Bekech- que sepas que todo lo que


avances en el camino del conocimiento no depende de tu buena voluntad o del
amor que te tiene El Espíritu. Todo depende de la cantidad de energía libre de
que dispones (Poder Personal) y de tu Conciencia (tu capacidad de manejar a
tu antojo esa energía, de acuerdo a las leyes que rigen el mundo)”.

Reí con su comentario. No estaba mal para comenzar mi aprendizaje.

- “Tú eres el alumno caprichoso y consentido de Dios. Eres la


vanguardia existencial en este planeta y ni siquiera lo sabes. Ser el niño
mimado del Espíritu no te sirve de nada si no aprendes a manejar tu energía”.

Rió como si hubiera hecho una gran broma. Yo le miré con enfado.
Demasiadas libertades.

- “Lo importante, mi joven aprendiz, es la energía. Sin energía no


hay forma de avanzar. Tú tienes más de lo normal, mucho más que cualquier
persona, pero esa energía, en vez de darte buena suerte o transmutarla en poder
personal, la canalizas hacia la mala suerte y hacia el absurdo, hacia la estupidez
humana. Eso se debe a que la tienes dispersa, gastas más energía de la que
recibes, toda tu vitalidad energética ya está ocupada en un mundo
intrascendente. La idea ahora es que ahorres energía para poder costear con ella
la búsqueda y el descubrimiento de los misterios de tus orígenes cósmicos”.

Me gustaba como jugaba Bekech conmigo.

- “Comenzaremos tus tareas. Sé que odias los deberes y la escuela,


sé que el sistema occidental de estudios te traumatizó, pero esos traumas aquí
12
sobran, la tarea que te voy a dejar tienes que hacerla por escrito, presentada en
una forma perfecta e impecable. No podemos ir por ahí diciendo: “Pobre Josè,
no pudo avanzar en el camino chamánico porque no tenía energía para sentarse
a escribir en unas hojitas” ¿Verdad?

Reí de su broma. Él sabía cuánto odiaba los deberes en el colegio, los


exámenes y las responsabilidades. Él sabía que sentarme a hacer este trabajo por
escrito, requeriría más de mi parte que cruzar el desierto de San Luis a pie.

“Tienes que hacer dos listas”:

Qué me da energía : Qué me quita energía:


_______________ __________________
_______________ __________________
_______________ __________________

“Tienes que ser muy concreto, es un inventario exacto y detallado de cómo se


dispersa y se distribuye tu energía”.

“Esta es la parte más importante de tu aprendizaje. Comienzas la observación


de ti mismo, tienes que ser meticuloso hasta que encuentres fugas mínimas de tu
energía. Fugas insignificantes que, con el paso del tiempo, se convierten en un vicio
de desgaste”.

- Dame un ejemplo Bekech.


- Por ejemplo, fumar.
- Pero es absurdo, yo no fumo.
- Pero te has oído criticando a los que fuman o al cigarro o cuando
hay humo de cigarro y te ahogas por falta de aire. Pero cuando hay humo de
copal o de damiana tú respiras, te limpias y te llenas de energía. No es el
tabaco el que te hace perder energía, es la creencia, críticas y enojos que él
provoca.

Me quedé pensando. Era realidad lo que decía.

- Obsérvate a ti mismo y contéstame ¿Hoy, dónde se te ha fugado la


energía?
- Criticándome a mí mismo -dije pausadamente-.
- El deporte nacional de este país: la crítica -dijo Bekech con risa y
satisfacción- Especifica un poco más.
- Me critico por criticarte.
- A ver, eso está bueno, continúa.

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- Criticándote, maestro, sintiendo culpa de criticarte. Sabiendo que
lo que haces es por mi bien, mi mente se dispersa buscando contradicciones o
mentiras en lo que dices. Sé que es absurdo pensarlo y por eso me critico.
- Bien, eso es conciencia ¿Dónde más sientes que se te fuga la
energía?
- Creo que mi principal fuga de energía es preocuparme por lo que
ocurre en el mundo. Entonces critico a los gobiernos, a los industriales, a
aquellos que maltratan este planeta hermoso. Critico todo lo que se me pone
por delante.
- Bien, continúa.
- Si sigo tus planteamientos, esa preocupación sólo es una fuga de
energía, porque realmente no hago nada por el mundo. Estoy sentado aquí
disfrutando tu enseñanza y siento culpa por no hacer nada por ayudar a esta
humanidad. Pero preocuparme por lo menos me hace sentir bueno.
- Bien, me has mareado con tu perorata, pero veo que tomas el hilo
del aprendizaje. Se te fuga la energía criticándote, criticando al mundo,
lamentándote de que no cumples la tarea por la que naciste. Gastas energía
preocupándote y creyendo que eso te hace bueno. Continúa.
- Soy consciente de que mi energía está dispersa en mil
pensamientos inútiles; en mil sentimientos que no valen la pena, en mil
justificaciones de mi absurdo personal. Soy consciente de que me despierto
lleno de energía y me acuesto a dormir cansado y no he hecho nada productivo
durante el día.
- Esas miles de cosas son las que tienes que escribir detalladas, mi
querido aprendiz. Haz un inventario día a día, por escrito, en un cuaderno que
se llame “Inventario de energía”.

Personas buenas, personas no felices.


Personas sin energía, personas sin felicidad.
Primero energía,
luego felicidad

de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

Bekech me dio una lista básica y yo tenía que especificar exactamente dónde se
me fugaba la energía y cuándo:

Toda nuestra energía ya está distribuida


Necesitamos redistribuir
y ahorrar energía.

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Especifica en dónde se te fuga la energía en esta lista:

Ejemplo:
Cuándo… Dónde … Cómo…
Criticas criticas criticas
Tienes celos dónde… cómo…
Tienes envidia dónde… cómo…
Tienes rencor
Te enfadas dónde… cómo…
Te justificas
Tienes deseos pasionales.
Tienes masturbaciones mentales.
Te auto-criticas.
Haces crítica constructiva.
Te auto-agredes.
Te boicoteas.
Boicoteas los sueños de los demás.
Expresas sentimientos en los que no crees.
Te desilusionas.
Tienes bajas pasiones.
Lees literatura de desgaste.
Tienes mala alimentación.
Te permites el caos y la desorganización.
Tienes frustraciones.
Tienes sentimiento de culpa.
Te atrapa el miedo.
Criticas a los políticos.
Defiendes un partido o una idea.
Defiendes tu moral.
Pierdes tu ética.
Defiendes valores en los que no crees.
Te preocupas sin ocuparte.
Eres irresponsable.
Tienes responsabilidades obsesivas.
Quieres imponer tus creencias a los demás.
Te atrapa el fanatismo.
Tienes sexo de baja calidad.
Te comprometes a algo que no vas a hacer.
Cambias compromisos.
Mientes.
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Te Mientes a ti mismo y crees tus mentiras.

- Bekech, esta es una tarea titánica, voy a tener que estar


observándome 16 horas al día -dije con un sentimiento de cansancio, que me
entraba cada vez que tenía que hacer un trabajo que me llevara a un
sobreesfuerzo, y sin entender para qué me iba a servir o qué provecho sacaría a
corto plazo-.
- No tienes que esforzarte 16 horas al día -me dijo con voz suave-,
tienes que esforzarte 25 horas diarias. Tu inventario también incluye las fugas
de energía que se producen en la noche mientras duermes -dijo Bekech con
gran alegría-.
- ¿Estás de broma, verdad?
- El chamanismo es una broma muy seria, mi querido alumno.
- Va… te prometo que lo voy a intentar.
- No me vengas con mediocridades, José -dijo Bekech con tono
molesto- No quiero que lo intentes, quiero que lo hagas bien, impecablemente
bien. No quiero sueños, quiero realidades.
- Tienes razón -dije finalmente sabiendo que, si me esforzaba, lo
lograría-.

SENTIMIENTOS Y EMOCIONES
Me di cuenta de que las principales fugas de energía no eran las físicas sino
mentales. Me impresionaba la cantidad de energía que gastaba en pensamientos
absurdos. También me di cuenta de aquellas cosas que me daban energía. De hecho,
descubrí que los pensamientos que yo entendía como pensamientos de calidad me
daban energía, y el actuar, no sólo evitaba que pensara, sino que me restablecía la
energía.

Que me da energía: Que me quita energía:

El amor. Sufrir por el amor a una persona.


Desilusionarme si no me quieren.
Amar a quien no me ama.
Despreciar a quien sí me ama.
Cuidar a quien amo. Controlar a quien amo.
Confiar. Dudar.
Hacer ejercicio. Sentarme a pensar en lo que tengo que
hacer y no hacerlo.
Sexualidad. Bajas pasiones, pornografía etc.
Ser responsable de mis actos. Sentimientos de culpa.
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Una buena alimentación. Mala alimentación.
Decir cosas bonitas a las personas. Criticar a las personas.
Hacer Chi kung. Enojarme.
Leer libros. Leer el periódico.
Caminar por el bosque. Lamentar mi vida.
Ganar dinero. Sufrir por el dinero.
Meditar. Agobio mental.
Observar. Critica compulsiva.
Motivarme. Criticarme.
Descansar. Vaguear.

Empecé mi lista con cosas muy sencillas pero, poco a poco, iba profundizando.
Me daba cuenta, por ejemplo, de que empezar una tarea y acabarla me daba mucha
energía. Empezar cosas y dejarlas a la mitad me quitaba mucha energía, sobre todo en
las justificaciones mentales, aludiendo a la falta de tiempo o de ayuda. Me daba
cuenta de cómo se me fugaba echándole la culpa a los demás por las cosas que yo no
hacía y quería hacer. Si yo tomaba las riendas y la responsabilidad de un objetivo o
una tarea, observaba cómo, poco a poco, se me incrementaba la energía y la buena
suerte o cosas que parecían lo mismo, pero en un momento podían ser una fuga de
energía y en otro un magnifico abastecedor de la misma. Cómo la sexualidad, la
coquetería y la pareja podían ser en un momento lo mejor, y en otro el principal
desgaste. Los matices eran muy sutiles y, poco a poco, aprendía a verlos, entenderlos
y aplicar mi conocimiento a mi favor.

- Tus eres hombre de entendimiento y perfeccionista, José. Primero


tienes que entender y luego actuar cuando tu mente racional entiende algo. Vas
a descubrir, en este camino, que hay cosas que sólo se entienden después de
que las has hecho..

Yo no alcanzaba a entender qué hacía ahí aprendiendo con tanto interés de


Bekech.. Me daba cuenta de que, día a día, buscaba una razón que me permitiera
darme el gusto de estar ahí, con mi maestro, pero… ¿y si algún día no encontraba una
razón para estar con él? Lo admiraba y sobre todo me daba cuenta de que había un
sentimiento que no podía entender, estaba ahí porque me gustaba estar ahí.

- Mira esta sala. Si la observas puedes ver si te gusta o no te gusta.


Puedes ser consciente y tomar conciencia de lo que hay aquí. La conciencia
siempre te dará energía. Si la criticas, si dices: “Que feo, qué mal decorado,
que desagradable, que porquería de lugar”, esto ya implica una fuga de energía.
Es el tono, el sentimiento, ver qué no te gusta y luego machacarlo. La
conciencia es lo que hace la diferencia. Solo toma conciencia de que no te
gusta y punto. Para una persona común y corriente, observar y criticar pueden
ser lo mismo, pero para una persona que anda en el conocimiento, la diferencia
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es inmensa e importante, y la diferencia es la energía. Miras el lugar y tomas
conciencia: “No me gusta”. Y no tienes que criticar o insultar.

Encuentra la sutil diferencia entre:

Justificación y entendimiento.
Preocupación y miedo.
Crítica y observación.
Depresión y tristeza.
Pereza y descanso.
Envidia y deseo.
Odio y enojo.

- Verás que unos son sentimientos y otros son emociones. Las


emociones primero pasan por el pensamiento, como los celos, la envidia, la
depresión, el rencor. Trata de deprimirte sin pensar, trata de tener celos sin
pensar. Cuando pensamos es cuando nos obsesionamos y es ahí donde se fuga
la energía.
- Pero, y la tristeza, ¿no es una fuga de energía?
- No, la tristeza, la añoranza, la nostalgia, el vacío, el miedo son
sentimientos del alma. La tristeza es algo creativo; la depresión es algo que
destruye. Un hombre deprimido puede destruir todo lo que está a su alrededor
o matarse. La tristeza, por el contrario, te lleva a la creatividad. Cuando estás
triste, mi querido aprendiz, ¿acaso no te dan ganas de escribir un poema o
componer una música o ir a tu mujer y darle un gran abrazo? ¿acaso no me has
dicho que la tristeza, la añoranza y la nostalgia han sido los sentimientos que te
han traído a mí para tomar este camino? Son la inspiración del poeta, del
artista.
- Pero parecen lo mismo, dije sorprendido.
- Pero no lo son, y ese matiz tan pequeño es algo que debes
aprender urgentemente en esta tu primera etapa de aprendizaje.
- Pero el miedo. No puedes decirme que el miedo te da energía o te
da creatividad -dije pensando que al fin lo había atrapado en una equivocación-
.
- Hay dos tipos de miedo: el del cuerpo, que da energía. Y el de la
cabeza, que sólo son pensamientos. El miedo de la cabeza son ideas y
conceptos que no te permiten avanzar en la vida, te alejan del atrevimiento. Tu
cabeza está llena de miedos y esos miedos no te dejan avanzar. Hay un miedo
que es visceral. Un día me dijiste: “Maestro, tengo miedo a fracasar en esta
vida”. No era un pensamiento, era un sentimiento que te ha llevado a la acción.
Te lo explico de otra manera: Si un tigre te quiere comer, no te pones a hablar
con el: “Mira tigre, no tienes derecho a comerme, yo soy un chamán”. No te
pones a dialogar con el tigre con un miedo intelectual. El miedo va a
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desparramar la adrenalina y vas a salir corriendo. Es un miedo que te lleva a
actuar.

Bekech me cuestionaba y dejaba que yo llegara a mis propias conclusiones. Era


consciente de que, gran parte de mi energía, se me iba en pensamientos sexuales,
masturbaciones mentales, fantasías eróticas y románticas y masturbaciones físicas.
Me puso la tarea, durante dos meses, de no tener un pensamiento o una connotación
que tuviera que ver con el sexo. También observé que la coquetería sana me daba
mucha energía, se lo comente.

- La coquetería te da energía. Los pensamientos, los sentimientos, el


cortejo, la desilusión y los problemas de pareja son los que quitan energía. En
el coito, mi querido aprendiz, es donde se pierde menos energía. Es antes y
después cuando se dan las fugas de energía. Mira, es notorio cómo se ha
acrecentado tu energía, es notorio que intentas aplicar la tarea que te dejé hace
dos meses.

Realmente comprendía lo que me decía. Mi mayor miedo era ser como era, un
mediocre más del montón. Ese miedo siempre me empujó a perfeccionarme, a
mejorar, a buscar dónde poder ocultarme y sentirme protegido. Bekech estaba
convirtiendo en palabras algo que, de alguna manera, sabía o intuía, mi miedo me
llevaba a actuar, me hacía estar ahí, en el aprendizaje.

Ese día, no sé de qué manera, me hice el compromiso, conmigo mismo y con


El Espíritu, de ahorrar energía y de vivenciar ese poder personal.

BUENA SUERTE Y MALA SUERTE

Cada quien tiene lo que se merece,


ni más ni menos.
Solo tú eres responsable de tu buena
o mala suerte.
Y quien dirige todo es tu poder personal.

de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

- Toda tu energía ya está distribuida en un pensamiento, en un


sentimiento, en una creencia o en una acción. Cuando comienzas a ahorrar
energía, ésta se convierte en una fuerza que llamamos “Poder Personal”. Es
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energía libre y acumulable, y es tu primer objetivo. Cuando uno gasta más
energía de la que obtiene, se crea una energía que te rodea de mala suerte; va
acompañada de situaciones desastrosas. La falta de energía siempre afecta a
nuestro destino y a nuestra capacidad de alcanzar objetivos; a nuestra
capacidad de atrapar oportunidades. No importa si tienes buenos sentimientos
o das tu energía en actos de amor o de ayuda a la humanidad, una pérdida de
energía es una pérdida de energía. La mala suerte es un lujo que no nos
podemos permitir. Ahorrar energía es como ahorrar dinero en el banco: un día
sacas un poco y te compras algo que te gusta mucho; algo que has anhelado,
una vida que vale la pena, por ejemplo. Pero si en el banco siempre estás con
números rojos, siempre estás con deudas, y tienes ganas de comprar algo (el
triunfo o la felicidad, por ejemplo) no tendrás liquidez y sólo te vas a quedar
con las ganas de conseguirlo. Así ocurre con la mayoría de la gente.
- “Entonces, no pensar da energía”…- dije comprendiendo -.
- Un pensamiento de calidad es tan importante como no pensar. Al
acrecentar la conciencia podrás darte cuenta de lo que es un pensamiento de
calidad y también podrás vaciar tu mente, silenciarla, elegir tus pensamientos.
El Poder Personal es como el silencio interno: son energías acumulables que,
poco a poco, van dejando rendimientos en nuestra vida. Cada vez que logras
ahorrar una partícula de energía, se va acumulando hasta crear ese Poder
Personal. No es fácil, pero es posible lograrlo trabajando 25 horas diarias.

“A Aquellos que tienen energía se les dará más


y tendrán buena suerte.
A Aquellos que no tienen, incluso la que creen tener, les será retirada
y tendrán mala suerte”.

Dijo Bekech riendo de su ingenio.

- Pero eso no es tuyo -dije reconociendo la frase -.


- Como Chamán tengo el derecho de transformar las cosas a mi
gusto. El que yo juegue con las palabras no le quita realidad a la realidad, mi
querido aprendiz.

20
ENERGÍA

Cada persona nace con una cantidad limitada de energía.


Unos nacen con más,
otros con menos.
Cada día el Espíritu nos da una cantidad de energía por derecho.
Está pactado antes de nuestro nacimiento.

Cómo gastas o distribuyes


tu energía es tu responsabilidad.
A mayor cantidad de energía
mejor suerte.
A menor cantidad de energía,
mala suerte.
La acumulación de energía disponible
se llama Poder Personal.
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

Nos encontrábamos sentados en una plaza, en un céntrico restaurante del barrio


de Coyocacan (Ciudad de México), contemplando a la gente que pasaba. Vimos a un
muchacho joven, tal vez veintidós años, muy moreno, que llevaba consigo dos perros
escuincles (perros sin pelo).

- Hay personas que nacen con más o con menos energía -me dijo
Bekech mirando al muchacho y a su canes-.
- ¿A qué te refieres?
- No todos nacen con la misma energía.
- ¿Y de qué depende?
- Del momento de la concepción.
- ¿Del momento de la concepción? -pregunté perplejo-.
- ¡Sí!. En el chamanismo -continuó hablando de una manera muy
retórica- es tan importante el momento de la concepción como el momento del
nacimiento. Es de gran importancia averiguar la cantidad de pasión que
invirtieron tus padres en el coito y la calidad de las energías que lo envolvían.
- Pero yo no sé cuándo ni cómo fui concebido.
- Claro que lo sabes, pero no tienes ni la curiosidad ni la conciencia
para recordarlo. Y sobre todo el valor de preguntárselo directamente a tus
padres, dijo riendo de su propio comentario.
- Dame un ejemplo Bekech ¿Cómo es eso del momento de la
concepción?
- Te doy varios ejemplos, pero te aseguro que es una maraña de
circunstancias. No existe una ley única.

21
LA CONCEPCIÓN Y LA GESTACIÓN
Ejemplo 1

Imagina a una pareja llena de vitalidad, de amor, de deseo sexual, haciendo el


amor en el auto o detrás de unos arbustos o un día de visita en casa de unos amigos
que, por el deseo tan intenso, se esconden en el closet para hacer el amor y,
chimpampúm, orgasmos y más orgasmos. Nueve meses después nace un niño lleno
de energía y vitalidad; los padres tendrán problemas para educarlo.

A eso le llamamos una concepción orgásmica.

Ejemplo 2

Suponte una pareja con más de 10 años de matrimonio. La relación entre ellos,
más que ser una relación hombre mujer, ha pasado a ser una relación de buenos
“hermanitos” con esporádicos encuentros sexuales. Imagina a la mujer saliendo de la
ducha desnuda y pasando por delante de la televisión. El marido, sentado en la cama
mirando un partido de fútbol, de pronto se encuentra con una erección y, por no
dejarla pasar, comienza un acto de reproducción. Ella acostada esperando que termine
pronto porque tiene que hacer la cena, y él sin dejar de ver su partido de fútbol. De
repente: eyaculación y gol al mismo tiempo. Ambos sienten una oleada de energía
producida, no por un orgasmo, sino por el gol del partido de fútbol. Nueve meses
después nace un bebé con poca energía vital.

A esto le llamamos una concepción con alto grado de civilización.

De la pasión del momento de la concepción y de la cantidad de energía de que


disponen en ese momento los padres, depende la cantidad de energía vital con la que
nacen los hijos. De la intensidad del deseo de la llegada del hijo, depende la calidad
de su energía. Este deseo marca facetas de nuestra personalidad. Es importante,
entonces, si el hijo ha sido muy deseado o no.

Ejemplo 3

Una mujer que ha sido seducida, enamorada y engañada. Un hombre que está
lleno de energía, de fuerza y de pasión y gasta hasta su última partícula energética en
conseguir su objetivo. La mujer enamorada e ilusionada, el hombre lleno de fuerza.
Hay pasión y mucha energía. Al saber que ella está embarazada el hombre huye. El
hijo no es deseado y recibe el rechazo social de la familia de la mujer. Nace un niño
con mucha energía, pero con poca calidad; un niño conflictivo. Rechazará el orden
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social así como ha sido rechazado él, y al mismo tiempo tratará de pagar la culpa (que
no cometió) por haber echado a perder la vida de su madre. Siempre tendrá ese
rechazo y ese sentimiento de culpa. Buscará inútilmente la aceptación de la imagen
paterna.

La pasión da la energía
Y el deseo de que nazca el bebé da la calidad

Ejemplo 4

Este ejemplo es especialmente interesante y tiene que ver mucho con la gente
de nuestro linaje, la Familia Azul:

Un matrimonio normal espera un hijo normal. Es el primer parto y nace una


niña. El padre, en su subconsciente, espera y desea un varón. Durante miles de años,
en las culturas terrestres se espera un “primogenitito” que ayude en la cacería, en la
defensa del hogar o que supla al padre en el caso de fallecer éste. Todavía, en culturas
como la Inuit del polo norte (esquimales), los Yanomamis del Amazonas o en
algunos pueblos de China, se acostumbra a sacrificar a las niñas primogénitas. Es un
deseo muy arraigado en el subconsciente masculino: “Deseo tener un primogénito”.

Cuando en occidente nace como primogénita una niña, el padre, contento y


desilusionado, dice: “No importa, la vamos a querer igual”. Y es probable que la
quieran igual o hasta más, pero la energía ya quedó marcada en la luminosidad de la
niña. Te explico: De acuerdo a la creencia chamánica, el alma ya está dentro de la
madre desde el segundo mes del embarazo - antes solo había hecho acto de presencia
en el momento de la concepción - . Después del segundo mes, el feto ya percibe todo
lo que pasa a su alrededor: el miedo de la madre, el amor del padre, la desilusión que
va a tener el padre al encontrarse con una niña - la niña, dentro de la matriz, sabe que
va decepcionar a papá ( o a mamá en algunos casos) - El karma (destino) y la energía
de esa niña quedan marcados, de forma que buscará siempre la aceptación paterna y,
por añadidura, la de los hombres. Muchas de estas niñas, al no encontrar la
aceptación que buscan, acaban cultivando un alto grado de rebeldía. El karma de la
niña queda atado al padre. Si se da el caso de que nunca nace un niño varón, ella, en
su subconsciente, sentirá la obligación de suplir al niño que nunca nació; es parte de
su karma. Tratará de copiar a los varones: niñas muy masculinas, espaldas anchas,
caderas pequeñas; muy mentales o muy intelectuales. La niña nace con cuerpo
femenino y alma masculina.

Si se da el caso contrario: ya nació un niño y se espera una niña (para tener la


parejita) y en vez de nacer una niña nace un niño, éste tendrá cuerpo masculino y
alma femenina: será más sensible de lo normal, humanista, romántico, poeta. El
karma del niño queda atado a la madre porque casi siempre es ella la que más desea
la parejita.
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Hay niñas con alma de hombres
y niños con alma de mujer.
Hay mujeres con alma femenina
y hombres con alma masculina

Hay muchos factores y muchos ejemplos. Para el chamanismo es más


importante la concepción y el embarazo que el mismo nacimiento. Es importante para
un alma la cantidad de energía que se invierte en la concepción, las condiciones
energéticas de lo que ocurre alrededor y, sobre todo, el deseo de los padres para que
nazca; la aceptación incondicional y la felicidad de toda la comunidad por el
nacimiento. Pocos occidentales nacen y son concebidos en condiciones perfectas, y
cuando se da el caso, es difícil tener una comunidad alrededor de ti que permita a tu
alma desarrollar la genialidad. Pero se da, te lo digo yo.

No todos aceptan el sexo que les tocó.


Es posible que en sus vidas pasadas
tuvieran el sexo opuesto
Antes fuiste hombre hoy eres mujer
Antes fuiste mujer hoy eres hombre
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

LA DANZA CON LA MUERTE:

- Hoy tendrás tu primera iniciación -me dijo seriamente Bekech- Es


una iniciación de muerte y renacimiento. No es una broma lo que va a ocurrir
hoy. Si te dejas llevar por el poder, nada en tu vida volverá a ser lo mismo. No
es una broma. Aunque tenga la apariencia de un simple psicodrama, te aseguro
que es más que eso. Te vamos a poner en contacto con el Poder.

Viaje de México DF a Cuernavaca (Morelos). Nos encontramos con Jorge, un


buen amigo de Bekech, y 39 alumnos más.

- Jorge y yo hemos quitado de esta ceremonia toda la paja


prehispánica, los rituales que sobran, y hemos compactado en un fin de semana
este ritual mágico. Es un ritual y un acto de poder. También es teatro
chamánico.

Estábamos en un gran recinto. Había exactamente 42 personas. Jorge, al fondo


con una máscara que representaba a la muerte y una gran capa negra. Tres tambores

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huehuetl de un metro de altura (tambores rituales de madera finamente tallada que,
ancestralmente se tocaban con las manos y ahora se tocan con palillos de madera
forrados de piel) y tres músicos, con taparrabos y la cara pintada de negro y blanco,
representando calaveras.

En el centro del recinto, 42 velas colocadas en círculo. Todas las personas allí
reunidas estaban descalzas y vestidas de blanco, con cinta roja en la cintura y
paliacate (pañuelo mexicano) en la cabeza. Había el mismo número de hombres que
de mujeres. Reconocí a algunas personas; sabía que también eran aprendices de
Bekech. Nos saludamos con amabilidad, gran respeto y cariño. Se respiraba
adrenalina en el ambiente.
Hubo una serie de explicaciones y comentarios acerca de las fechas y
posiciones planetarias, y luego Bekech contó una historia:

Rodrigo González
Tenía un amigo. Le llamábamos Redrogonzalez porque le gustaba fumar
hierba. Un día, entrando a su casa, en el centro de la Ciudad de México, miró la pared
junto a la escalera que llevaba a su piso y dijo:

- “Si hay un terremoto en esta ciudad, compadre, no salgo vivo de


aquí”.

Él, sin saberlo, había escuchado al Mensajero de la Muerte que le avisaba de


que ella lo estaba mirando. En tres ocasiones distintas le oí hacer comentarios
parecidos.
Un día, sin más ni más, hay un terremoto que encuentra desprevenidos a mi
amigo y a su esposa. El edificio donde viven cae como un acordeón en cuestión de
segundos y la muerte los encuentra dormidos. Cuando un grupo de rescate nos
acercamos al siniestro y sacamos sus cuerpos, estaban hechos pulpa entre los
amasijos de la cama. La historia no hubiera pasado de ahí: un muerto más entre los
25.000 de las cifras oficiales - la muerte tuvo mucho trabajo esos días -. Pero ocurrió
algo muy interesante. Yo tenía una amiga llamada Carmen Colmenares que también
era muy amiga de Rodrigo y continuamente soñaba con él:

- Carmen: No sé por qué los amigos ya no me hablan -le decía


Rodrigo en sus sueños- Ya no me invitan a las serenatas a tocar con ellos ¿Qué
pasa Carmen? Voy caminando por la calle y es como si la gente no me mirara.
Quiero hablar con los amigos y me ignoran como si yo fuera un fantasma.
¿Qué pasa Carmen, están enojados conmigo? ¿Por qué tú sí me puedes ver y
oír, qué pasa?

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Carmen se ponía a llorar, sabía que Rodrigo estaba muerto y él mismo no se
había enterado.

- ¿Qué ocurre Bekech?


- Rodrigo estaba en un viaje astral, en una ensoñación, cuando
ocurrió el terremoto. Cuando su cuerpo astral quiso entrar en su cuerpo físico
ya no había cuerpo físico. Entonces Rodrigo, sin ser consciente, ha estado
vagando como un alma en pena por toda la ciudad, buscando quién le explique
lo que pasa.
- ¿Entonces, es un fantasma? Preguntó Carmen asustada.
- Sí, su cuerpo astral quedó atrapado entre dos mundos, quedó
atrapado en el limbo. No está abajo, no está arriba. No puede cruzar al otro
lado a donde van los desencarnados. Tampoco puede estar por más tiempo en
este plano.
- ¿Pero por qué se comunica conmigo?
- Porque tú entras fácilmente en el astral y ahí te ve y busca tu
ayuda. Cuando tú ves a Rodrigo sabes que estás en un sueño.
- Sí, es cierto, sé que es un sueño, pero es tan real… además lo
siento junto a mi durante el día. Incluso anoche, precisamente, lo sentí sentarse
en mi cama y tocar mi brazo. Cuando abrí los ojos no había nadie.
- La próxima vez que sueñes con él, primero toma conciencia de
que estás viva y toma conciencia de que él está muerto. Acto seguido invocas
al poder de tu Dios; el Dios de los cristianos, y abres una puerta que lo lleve al
cielo. Imagina que dos ángeles vestidos de sol descienden dentro de una lluvia
de luz. Tomas de las manos a Rodrigo y le dices: “Rodrigo, estás muerto. Ya
dejaste tu cuerpo en el corazón de la madrecita tierra. Es momento de que
vayas a descansar con Dios”. Y deja que los ángeles lo lleven al otro lado.

Finalmente Carmen me hizo caso y ayudó a Rodrigo a seguir su camino, pero


ella quedó tocada por la conciencia de la muerte.

Hay muertos que no saben que están muertos.


Hay vivos que no son conscientes de que están vivos.
Hay vivos que están más muertos que vivos
y hay muertos que están más vivos que los vivos (los maestros del astral)

de Los recuerdos robados a las estrellas muerta.

26
EL DIA DE TU ENTIERRO

¿Cuántas personas van a venir a tu entierro?


¿Vendrán acaso todas las novias que has tenido?
¿Los amigos que te han querido?
¿La gente con la que has trabajado?
¿Habrá alguien que se alegre de tu muerte?
La cosecha de amigos en tu vida la verás el día de tu entierro
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

Había muchas esterillas en el suelo sobre una gran moqueta. Cada uno de los
participantes se acostó en una de ellas. El salón era grande; una nave industrial
acondicionada, de unos 150 metros cuadrados. Era el lugar donde Jorge realizaba su
enseñanza, su sala de trabajo o “templo”, que era la manera en la que Bekech se
refería siempre a los lugares donde daba sus cursos.

- Vamos a comenzar la ceremonia con una “dormitación” -dijo


Jorge- y Bekech rió la broma.

MEDITACION DE LA MUERTE

Se escuchaba una música prehispánica con sonidos de caracolas, tambores y


flautas.

Respira profundo y relájate, relájate, relájate… Vas a entrar en un estado en el


que no estás dormido y no estás despierto, donde eres consciente de todas las
indicaciones pero en el que no puedes mover tu cuerpo. Profundo, profundo,
profundo. Dormita, dormita, dormita. Tu cuerpo es como si fuera de plomo, pesado y
vacío, como tubos de plomo, pesados y vacíos. Tu alma es muy ligera, tu cuerpo muy
pesado. Los brazos parecen tubos de plomo pesados, muy pesados, las piernas
parecen tubos de plomo, pesados, mucho muy pesados, pesados, pesados. Tu cuerpo
parece una caverna de plomo, pesado mucho muy pesado, vacío y pesado. Tu cabeza
parece una bola de plomo, vacía y pesada, vacía y pesada.

Sientes cómo tu cuerpo es tan pesado que te hundes en la tierra, te hundes en el


suelo, te hundes en la moqueta.

Sientes como entras dentro de la tierra. La tierra parece gelatina y tú te hundes


dentro de ella, desciendes medio metro.

Siente, imagina, piensa, ¿Cómo te hundes dentro de la tierra? ¿Cómo un


sentimiento o un pensamiento intelectual, como una imagen o como una idea? Te

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hundes profundamente, un metro dentro de la tierra, miras el contorno de tu cuerpo
dejado en la superficie.

Respira profundo y haz más clara la imagen, la sensación o el pensamiento.


Metro y medio, miras desde el fondo un cielo azul y te hundes más todavía. Dos
metros y ves hierbas que asoman y raíces en la tierra. Nubes en el cielo, y el contorno
de tu cuerpo toma una forma rectangular y alargada. Dos metros y medio, tres metros
dentro de la tierra, miras y tomas conciencia, es una tumba, es tu tumba.

Hoy es el día de tu entierro. Miras y observas. Escucha, hay gente llorando allá
arriba. Hoy es el día de tu entierro. No importa si tu querías que te cremaran,
finalmente te han enterrado. Miras los terrones de tierra que quedaron prendidos a las
raíces, miras la hierba verde que sobresale allá arriba en el rectángulo azul de la vida.
Tomas conciencia de tu ataúd de madera hermosamente decorado.

Tu cuerpo es muy pesado, pero tu alma muy ligera y se desprende. Sientes


ahora una gran ligereza dentro de ti, una gran ligereza. Es como si estuvieras flotando
dentro de una nube y comienzas a ascender como si fueras un globo.

Escuchas a la gente llorar allá afuera y tu alma se asoma por el agujero de tu


tumba.

Ahora toma conciencia: ¿Hay mucha gente en tu entierro? ¿Cuánta gente vino
a despedirse de ti, hay cien personas, hay 10? ¿Quién te va a echar de menos?

Hoy es el día de tu entierro… pero ¿Qué pasó?

Mira a cada una de las personas que están allí y despídete de ellos, dales las
gracias por venir a despedirte.

Pero ¿Qué pasó? ¿Qué fue lo que hizo que tu energía menguara y te llevara a la
muerte? ¿Qué rompió tu burbuja luminosa? ¿Cuál fue la principal fuga de energía que
propició este desenlace?

Despídete del mundo. Hay una luz azul que desciende sobre ti, te lleva al otro
lugar, con el gran Espíritu, con el Señor Dios. Te lleva al centro de la gran Madre
Creadora del universo. Despídete del mundo.

Pero ¿Qué ocurrió? Antes de ascender toma conciencia de cómo fue tu muerte.
Regresa tres días atrás. Estás en una ceremonia, comenzando un ritual. Para ti es un
juego, para la muerte es algo real. Regresa al momento en el que moriste. Regresa a
esa sala con Bekech, con Jorge. Regresa al día de tu muerte.

28
LA DESPEDIDA Y EL POEMA

Soy el mensajero de la muerte


y vengo a decirte
que hoy es tu último día sobre la Tierra.
La muerte viene de camino.
Si haces tu última danza impecablemente bien,
la muerte te dará otra oportunidad de existir.

Nos levantamos a la indicación de Bekech. La mitad de los que estábamos


presentes teníamos lágrimas en los ojos.

Recogimos las esterillas.

- Soy el mensajero de la muerte -dijo Jorge que apareció con una


careta de calavera y una capa negra- Soy el mensajero de la muerte y te digo
que la muerte se dirige a este lugar.

No sabía si asustarme o reír. Un escalofrió me recorrió el cuerpo.

- Soy el mensajero de la muerte y vengo a avisarte. Lo que vas a


hacer en este momento es posible que sea lo último que hagas en la vida.

El mensajero caminaba mirando a cada persona. Les miraba fijamente a los


ojos diciendo:

- La muerte te acecha ¿Estás preparado para tu última batalla? Hoy


vas a bailar, y el baile es con ella. Hoy bailarás con la muerte.

Jorge, en su papel de mensajero de la muerte, miraba a cada uno de los


participantes. Bekech nos daba una pequeña vela que encendíamos y colocábamos en
el centro creando un círculo. Acto seguido comenzamos a caminar hacia la izquierda.

- La muerte nos visita por la izquierda -dijo Bekech con voz


potente- Hoy van a bailar la danza de la muerte. Cada uno de ustedes tiene que
prepararse para la danza, estirar los músculos y adoptar el estado de ánimo
necesario para librar la batalla. Hoy librarán una batalla de vida o muerte.

Ceremoniosamente encendí mi vela y me preparé para la danza. No alcanzaba


a comprender todavía lo que ocurría, pero me gustaba.
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- Camina en círculos lenta y suavemente -nos decía Bekech- Ten
una actitud elegante, mete el estómago, saca el pecho, pon los hombros hacia
atrás, mira al frente, estira el cuello y levanta la barbilla. Camina despacio con
elegancia y fuerza.

Mi cuerpo obedecía a Bekech de una manera automática. Sabía que algo


importante iba a ocurrir. Me permitía entrar en la dinámica. Comencé a tomármelo en
serio.

- Como pueden atestiguar -dijo Bekech señalando al mensajero de


la muerte-, la muerte ronda nuestros talones. La muerte es una fuerza que ataca
el centro de nuestra energía. Nos morimos cuando menos lo esperamos, como
mi amigo Rodrigo González. En el chamanismo no podemos ni deseamos
morir dormidos y sin conciencia. Deseamos mirar a la muerte cara a cara y
hacer que le cueste trabajo llevarnos; que nuestra última batalla con ella sea
una danza de guerra florida, donde puedas dar lo mejor de ti, sabiendo que,
tarde o temprano, ella será la ganadora absoluta.

- Soy el mensajero de la muerte -gritó Jorge con una voz que ya no


era la suya- y te digo que si tu danza es impecable, es perfecta; si tu danza es
digna de admiración, la muerte te dará el respeto que mereces y otra
oportunidad de vivir.

Al final de la sala aparecieron tres personas más vestidas de indios, con


maquillaje mortuorio. Comenzaron a tocar los tambores y las caracolas marinas. Eran
impresionantes. Comencé a sentir miedo. Un escalofrío y un aliento helado tocaron
mi rostro. Miré a Jorge y lo sentí; supe que era el verdadero mensajero de la muerte.

Bekech nos puso una serie de ejercicios de calentamiento, bastante difíciles por
cierto, y nos enseñó unos pasos de baile que cansaban especialmente las pantorrillas.

- ¡Caminen! -grito Bekech-.

Entendimos que debíamos caminar alrededor del círculo. Era una forma de
descanso y de darnos tiempo para entrar en el estado de ánimo que necesitábamos

- Hoy es el último día de tu vida. Escúchalo bien. Llénate de energía


y de ligereza, despídete de la gente que amas y perdona a quien necesites
perdonar. Revístete con tu mejor estado de ánimo e invoca a tu Yo superior, a
tu guerrero, a tu amazona. Invoca a la parte más luminosa de tu conciencia.

Comenzó la danza. Era agradable, pero cansada. Las personas de menor


condición física y mayor edad, no podían adaptarse al ritmo de los más fuertes.
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- ¡Alto! - grito Bekech -tómate un momento para escribir tu epitafio
o una carta de despedida al mundo.

Poema funerario:

¿Por qué? ¿Para qué?


¿Por qué hago lo que hago?
¿Es acaso tan grande mi satisfacción?
¿Por qué mejor no todo deshago
y busco mi realización?

Dejar todo y comenzar de cero.


Tendré la energía suficiente,
no estoy hecho de acero
y tengo miedo de bailar contigo, muerte.

Aconséjame, muerte, pero no sesgues mi vida.


Sesga mis miedos, mis temores
Déjame encontrar dicha y alegría
Cultivar sentimientos sinceros, sinceros amores.

Pero tengo que comenzar de la nada?


No tengo que dejar lo que amo? O si!
A dónde será mi vida lanzada
Necesito ligereza, no puedo morir así.

Me miro a los ojos


Sostengo la mirada
No me siento dichoso
No siento absolutamente nada.

José, con lágrimas en los ojos, terminó de escribir su poema.

Los tambores iban aumentando su ritmo. Los demás aprendices, ya bailaban al


compás de la música. El sonido frenético y rítmico, el sudor, el cansancio, la sed, la
falta de oxígeno. Bekech les hacía saltar y brincar. Les ponía en cuclillas y les hacía
dar vueltas alrededor de la sala. Las pantorrillas comenzaban a endurecerse por las
difíciles posiciones a las que eran sometidas.

- Es importante - nos gritaba - que sientan en las pantorrillas y en


los antebrazos como dos bolas, dos manzanas, dos pelotas de músculos
endurecidos y cansados. De ahí saldrá la energía que necesitan para sobrevivir.
Es el segundo aire. Den su máximo esfuerzo, den lo mejor de ustedes mismos.
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De cuclillas, mirando el círculo de velas que estaba en el suelo, extendimos los
brazos, extendimos los dedos y las palmas de las manos y comenzamos a cerrar los
puños para, momentos después, volver a estirar los dedos a su máxima extensión.

- ¡Abre y cierra, abre y cierra, abre y cierra! - gritaba Bekech - Haz


que tu vida sea algo que valga la pena. No permitas que llegue la muerte a ti y
te lleve en un estado de queja y de flojera. Esfuérzate, que la muerte se acerca.

Cuando parecía que ya no podíamos más, cuando los dedos y las manos ya no
querían responder entumecidos de cansancio, y las pantorrillas eran dolor puro,
Bekech nos hizo levantar para nuevamente comenzar a bailar las danzas aztecas. Nos
movíamos con frenesí, con rostros de dolor, con ganas de vivir.

- ¡Soy el mensajero de la muerte! - gritaba Jorge - y vengo a decirte


que la muerte se acerca, que viene a tocarte. Vengo a decirte que ésta que estás
librando es tu última batalla sobre la tierra. Si la muerte ve que tu danza es
impecable puede, amablemente, darte otra oportunidad de vivir.

Yo sentía que no podía más: el cansancio, la sed, el dolor…, aun así intentaba
dar mi mejor esfuerzo. Miraba a los demás y sabía que sufrían igual o más que yo.
Era estimulante verlos. El porte y la elegancia de sus cuerpos, la actitud con la que
confrontaban su muerte, me daba ánimos para seguir. Para ellos era una realidad, la
muerte los miraba y ellos danzaban con ella. Grité y saqué energía de mi grito. Vi
enfrente de mí a mi muerte. ¡Me estoy muriendo!-grité-, y comencé a danzar con más
fuerza y coraje. Voy a morir pero a la muerte le va a costar trabajo llevarme. Entré en
un frenesí: vi un túnel de luz y al Espíritu.

- ¡Caminen! - grito Bekech rompiendo mi estado de trance-

Pude observar a mis compañeros y compañeras. Eran hermosos. Bekech


irradiaba fuerza y brutalidad, era sublime. Mis ojos lloraban. Yo ya no era yo. Miré a
Bekech.

- ¡No me mires! - me gritó -, concéntrate en tu presente.

Mi cuerpo comenzó a caminar con gran lentitud. Mis hombros se echaron para
atrás dejándome sacar el pecho de una manera relajada y retadora. Mi estómago se
endureció y mis ojos brillaron; mis ojos brillaron como nunca antes lo habían hecho.
Era consciente de que estaba vivo y consciente de que estaba muriendo.

- ¡Actitud! - grito Bekech - ¡ Sólo se están muriendo!. Metan el


estómago, saquen el pecho, los hombros hacia atrás. Llenen sus ojos de fuego
interno de amor a la vida. Pongan la mirada del tigre, la mirada del águila. Que
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la muerte no encuentre a un grupo de fracasados. Que la muerte encuentre
guerreros y guerreras orgullosos que venden cara su vida…actitud…

Me di cuenta de que me adelantaba un segundo a sus órdenes y sonreí.

- Bien, muy bien. Ahora sonrían y saquen fuerza de donde puedan


porque vamos a volver a comenzar. Sonrían.

Sus palabras no fueron vanas. Así, entre él y Jorge, nos pusieron a bailar, como
locos, cerca de dos horas más. Mi camisa, empapada de sudor, comenzó a rasgarse
por las costuras. La transpiración entraba en mis ojos haciendo que ardieran de una
manera insufrible.

La actitud de todos los aprendices era perfecta. Cada uno, a pesar del dolor, el
cansancio y el esfuerzo, manifestaba con todo su ser el deseo de esforzarse y de morir
luchando.

- ¡No me miren! - grito Bekech-. Concéntrense en la mirada. No


miren al suelo que no son unos fracasados. No miren al techo que no van de
paseo. Dejen que el brillo de los ojos los lleve a la actitud del Guerrero Azul.

El muchacho que tocaba el tambor, tomó una flauta y comenzó a interpretar


una melodía muy triste.

- Soy el mensajero de la muerte - dijo Jorge - y vengo a decirte que


la muerte se acerca a ti en este momento. Vengo a avisarte de que te prepares y
aligeres tu alma…

Bekech nos había dado la orden de caminar en círculo. Nuestra mirada se


perdía en un horizonte ficticio buscando el infinito; conectando con la esencia
verdadera.

- Despídete de la gente a la que amas - continuó hablando Bekech -


Despídete de cada persona que sientas que amas o que te quiera a ti. ¿Quién es
la persona a la que más amas en la vida? ¿Quién es la persona que más te
quiere? Despídete de ellos; de las personas que has amado y con las que te has
enojado. Este es el momento de despedirte, de perdonarlos y de pedirles perdón
por haber cargado con tu enojo ¿A quién hiciste daño y desilusionaste en
conciencia? Es el momento de pedir disculpas y despedirte.

La música era realmente triste. En ese momento supe que quería


verdaderamente; que era muy afortunado por el amor que daba y por el amor que
recibía. También pude perdonar a quienes nunca pensé que fuera a hacerlo en mi
vida.
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- ¡La muerte se acerca! - gritó Jorge - Se acerca. Máxima
impecabilidad, máximo esfuerzo. Bailen. Muévanse, luchen, vivan…

Los tambores comenzaron a tocar nuevamente. Mis ojos brillaban. Mi cuerpo


estaba exhausto. Bailé como nunca había bailado en mi vida. Grité, salté, entumecí
mi cuerpo y también se entumeció mi mediocridad. Sentí en ese momento mi fuerza
protectora; mi yo superior. Sentía que realmente no podía más. Mi corazón latía y
parecía que se iba a salir del pecho. Mi respiración quemaba mis pulmones. Sólo
sabía una cosa: Si este era mi último acto sobre la tierra, iba dar mi máximo esfuerzo.

Algo ocurrió dentro de mí: desapareció el cansancio. Algo descendió a mi


cuerpo que lo hizo liviano. Sentí la muerte, pero también sentí a Dios.

- ¡La muerte se acerca! - gritó Jorge - ¡Esfuérzate, despídete,


entrégate!.

Como una sola persona, todos comenzamos a gritar. Pero mi grito ya no era de
dolor ni de frustración, era de despedida y agradecimiento al universo por la mágica
oportunidad de ser consciente de la vida y de la muerte.

- ¡Al suelo! - gritó Bekech -.

Todos caímos como fulminados por un rayo.

Yo me encontraba tendido boca abajo. Mi mejilla, empapada de sudor, sentía la


transpiración que había mojado el suelo, el olor a pies sudados, el aire enrarecido.
Una situación que antes hubiera sido desagradable, ahora me era indiferente. Nada
importaba ya, estaba muerto.

- Estás muerto - continuó Jorge - Soy el mensajero de la muerte y te


digo que la muerte ni siquiera ha tenido que detenerse. En un pequeño
movimiento ha acabado con tu vida, pero no con tu conciencia.
- Despídete de este mundo hermoso - dijo Bekech - Despídete de la
oportunidad de cumplir la tarea para la que naciste, despídete. ¿Qué era lo que
más te gustaba comer?... nunca más. ¿Cuál era tu olor favorito? …nunca más.
¿Cuál era tu sitio de poder? …nunca más. ¿Cuál era el lugar del mundo que
más revitalizaba tu alma y tu cuerpo?... despídete de él porque nunca más lo
volverás a ver.
- Muy lentamente dijo Jorge: “Siente cómo tu alma se desprende de
tu cuerpo. Muy lentamente te vas poniendo de pie”.

Obedecí en medio del cansancio más absoluto. Mi cuerpo no quería responder.


Me levanté como un autómata. Todo era igual, pero nada era igual.
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- Estás en el limbo, dijo Bekech. No estás vivo, no estás muerto. Camina
despacio y toma conciencia de tu muerte. Has entrado en otra realidad.

Jorge repartió unas hojas de papel de arroz y nos pidió que escribiéramos
nuestro epitafio y después lo pegáramos en una pared.

Los epitafios del resto de los compañeros, y el mío:

Pasa transeúnte
Ya no tengas miedo de mí
Ya estoy muerto
Al fin lo conseguí
Luis

Aquí descansa la mujer


que baila con las hadas
Vanesa

Aquí duerme el hombre


que escribió su vida
con letras de fuego
Chusmi

Lo intenté
Lo intenté
Pero finalmente fracasé
Jorge Merino

Dejo mi cuerpo porque voy


a buscar mis alitas.
Al rato regreso
como unicornio o como hada.
Paqui

Sólo soy un rayito de Dios


que pierde la oportunidad de estar viva.
Minerva
Me mintieron.
Pensé que la vida era eterna.
Amo a este mundo.
Tengo miedo.
No me quiero ir.
Juan
35
Ya que yo llego primero,
pues tu estás leyendo esto,
te espero y te cuento
lo mágico de este viaje.
Manuelita

Nací en la cárcel más hermosa.


Soy extranjero en mi cuerpo.
Te lo devuelvo vida.
Me lo prestaste y te lo regreso en buen estado.
José

La música llenó el lugar; la flauta tocaba lentamente. Alguien había puesto


copal en unas ahumadoras. La habitación estaba llena de un humo perfumado. Las
velas centellaban. Me di cuenta de que, escribir el epitafio y colocarlo en la pared,
nos daba unos momentos de descanso activo.

Una mujer con ropa blanca y una máscara negra, pasaba repartiendo agua y
trozos de manzana a los participantes. Realmente parecíamos muertos. Poco a poco
comenzamos a caminar alrededor de las velas.

- Bekech ¿Puedo ir al baño?- pregunté con miedo y reverencia -.


- Aunque estemos en el limbo, los intestinos necesitan limpiarse,
corre.
Salí corriendo y fui detrás de los arbolitos. Vi lo hermosos que eran los
jardines. No había nada en ese momento que yo pudiera criticar. Comencé a llorar.
Entré en el salón con lágrimas en los ojos. ¡Cómo me gustaría tener una nueva
oportunidad! - me dije a mi mismo -¡Es tan hermoso este mundo! ¿Por qué sólo
muertos lo apreciamos?

- Estamos en el limbo - dijo Bekech - Es casi idéntico al mundo de


todos los días. Tu cuerpo está tirado allá abajo. Moriste de un infarto, bailando.
Por eso después del cansancio vino esa relajación y esa fuerza que salió de la
nada. Estás muerto.
- Algunos pensarán - dijo Jorge - que yo no soy el mensajero de la
muerte. Algunos pensarán que realmente están vivos. Ahora están como
Rodrigo González, que no sabía que estaba muerto y que era un fantasma
vagando sin conciencia por el universo. Se acabó.
- ¡No! - dijo Bekech - ¡Pidan otra oportunidad!

36
Nosotros caminábamos en círculo, como zombis, alrededor de las velas,
poniendo todo nuestra concentración en nuestros maestros.

- Se acabó tu tiempo en la tierra, la mediocridad no merece una


segunda oportunidad.
- ¡No! - gritó Bekech - ¡Pidan otra oportunidad, invoquen al Señor
Dios. Llámenlo y exijan una oportunidad! ¡Argumenta a favor de otra
oportunidad de vida! ¡Lucha nuevamente!.
- ¿Acaso creen que merecen una segunda oportunidad? - gritó el
mensajero de la muerte - ¡Tomen conciencia de lo inservibles que han sido en
el mundo!.

Dentro de mi alma invoqué al Espíritu; a Dios, a la Gran Madre creadora del


universo. Pedí una nueva oportunidad y expliqué para qué la quería.

- ¡¿Por qué merecen una nueva oportunidad para vivir?! - gritó


Bekech - ¡Díganlo!.

Se escucharon rumores en la sala. La gente que estaba allí realmente quería


vivir.

- ¡¿Por qué merecen una nueva oportunidad de vivir?! - gritó por


segunda vez Bekech -
- ¡No merecen ninguna oportunidad! - vociferó el mensajero de la
muerte - Mira como han desperdiciado su vida ¿Quién de ustedes ha cumplido
la tarea de su nacimiento? ¡No merecen vivir!. ¿Cuántos de ustedes han herido
a las personas que aman? ¡No merecen vivir! ¡No más inútiles en el mundo!
- ¡Pidan un juicio! - voceó Bekech – en el que puedan explicarle al
universo para qué quieren una nueva oportunidad. Qué van a hacer en caso de
que se les permita regresar al mundo de los encarnados

¡Queremos un juicio!- comenzamos a clamar -.

37
EL JUICIO

Hay una ley universal de causa y efecto.


Hay una ley humana del amor.
Hay una Ley que es la fuerza de la gravedad.
El bien y el mal son estados primitivos de conciencia
y tú estás en medio de estas fuerzas.
Es tu deber aprenderlas y dominarlas.
Tú tienes el poder de la invocación:
si invocas tonterías estas leyes te darán tonterías
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

Estábamos sentados. en grupos de tres, formando un triángulo. Mis


compañeros eran Pilar y Manolo Pablos. Mirábamos a una pequeña vela que se
encontraba en el centro.

- Lo que vamos a hacer es un psicodrama. Esto es el teatro


chamánico - dijo Bekech -. Hay tres personajes: La defensa (el Yo superior), el
juez (La Muerte) y el fiscal (los desgastes energéticos). Cada uno interpretará
por turno un rol determinado, y deberá defender su papel impecablemente. La
defensa (el yo superior) hablará en primera o en tercera persona, y explicará
por qué aquella forma que esta allá abajo; en el plano terrestre (nosotros
estamos en el limbo), merece vivir. Cuáles son sus razones y qué es lo que va a
hacer en caso de que logre una nueva oportunidad.

Yo era la defensa; era el yo superior de José. Mi deber era regresarlo al mundo


humano, conseguir para él una nueva oportunidad en la tierra. Frente a mí estaba
Manolo Pablos con una careta de calavera: era la muerte que me miraba. A un lado
estaba Pilar, que le acusaba de desperdiciar su vida. Debía encontrar la manera de
probar que José merecía una nueva oportunidad para hacer que su vida valiera la
pena.

- ¿Por qué mereces vivir? - dijo la voz de Manolo Pablos detrás de


la calavera - Su palabras eran secas, ásperas, sin sentimiento. Un escalofrió
heló mi cuerpo.
- Merezco vivir porque quiero triunfar en la vida. Quiero bajar al
mundo y tener una familia, una esposa, unos hijos. Merezco vivir porque
quiero estar con las personas que amo y decirles cuánto las quiero en palabras
y actos. Merezco vivir porque tengo que cumplir mi tarea como Chamán en el
mundo…

Hablé cerca de dos minutos hasta que me interrumpió el fiscal.

38
- Señora muerte: - dijo Pilar mirándola a los ojos -… (El fiscal y la
defensa nunca se miraban ni se dirigían la palabra, solo miraban y dialogaban
con la muerte) Este hombre no merece vivir. Es el más claro ejemplo de
mediocridad. Mire en esta lista cómo se le fuga la energía. Vive en un
abandono continuo. Quiere ser útil a la humanidad y mire lo que hace con su
vida.

Para mi asombro, el fiscal, que tenía la lista que yo había dado a Bekech donde
explicaba minuciosamente cuáles eran mis fugas de energía, fue enumerando
lentamente los ejemplos más claros de mi abandono humano.

- Merezco vivir porque quiero bajar para cambiar mi condición


humana. Quiero bajar para cambiar a ese hombre que está cansado de sí
mismo. Él - dije señalando el suelo imaginando que allá abajo estaba el plano
terrestre - es un ejemplo de lucha y esfuerzo. A pesar de sus condiciones de
vida ha logrado crecer y aspirar a más de lo que el orden social le ofrece.
- ¿Qué vas a hacer en el mundo si te doy otra oportunidad para
vivir? - dijo la muerte interrumpiéndome -.
- Comenzaría por escribir un libro antes de fin de año. Les escribiría
una carta de amor a aquellas personas que han sido importantes en mi vida. Iría
a pedir disculpas a…(enumeré una serie de personas) por haberlas defraudado
y lastimado. Perdonaría de todo corazón a aquellas personas que detesto y por
quienes me siento ofendido. Trabajaría y tendría un empleo normal, con un
sueldo normal. Bajaría al mundo para ponerme en paz con el dinero y ganar
mensualmente más de dos mil euros. Tendría una relación estable con una
pareja; sólo con una. Dejaría mis coqueterías y mis vicios. Dejaría mis
masturbaciones mentales. Abriría una consulta los fines de semana y trabajaría
como curandero. Si tuviese una nueva oportunidad de vivir, una vez al año iría
a un país exótico y aprendería. Si tuviera una nueva oportunidad, sería un
alumno perfecto, trabajador e impecable. Acabaría cada cosa que empezase y
la disfrutaría al máximo. Cuidaría mi alimentación y reiría más; no me tomaría
a mí mismo tan en serio y me importaría menos lo que la gente pensara de mí.
Si pudiera bajar nuevamente al mundo, me daría el permiso de amar
incondicionalmente a aquellas personas que están a mí alrededor. Si tuviera
una nueva oportunidad de vivir…, viviría la vida.

Me sentía contento por mi perorata.

- Señor juez - me interrumpió el fiscal mientras yo limpiaba un par


de lágrimas que resbalaban por mis mejillas -, este hombre no merece vivir.
Vea en la página segunda. Una de sus mayores fugas de energía es soñar que
va a hacer cosas y nunca las hace. No merece vivir.

39
- Precisamente es una de las cosas a las que ahora puedo
comprometerme. Ahora soy consciente y sé cómo cambiar. Tengo mucho que
hacer, mucho. Es una tarea descomunal, pero quiero y debo bajar
- Vea, señor juez, cuántos asuntos dejó pendientes en vida cuando
murió; cuantas cosas comenzó y no acabo ¿De qué puede estar orgulloso?
¿Acaso no dice aquí que una de sus fugas de energía es su deseo de morir y
dejar este plano? Este hombre hizo su “promesa al fracaso” y la ha cumplido.
En el mundo no debe haber fracasados. Él tiene todos los defectos, señor juez.
El Espíritu lo bendijo y él emplea toda su capacidad en fracasar. No merece
vivir.
- No, su señoría, deme una oportunidad. Tengo que bajar y romper
esa “promesa al fracaso”. Era muy niño cuando la hice*(consultar libro de
Carlos Castaneda y la historia del niño con nariz de botón). Ahora estoy listo
para hacer mi promesa de triunfo. Hoy, aquí, toda mi totalidad, mi cuerpo, mi
mente, mi espíritu aglutinan la energía en mi “intento”, e invoco la capacidad
de triunfo: Quiero, puedo y merezco triunfar en el mundo. Voy a triunfar.
Mírame, muerte. Mírame a los ojos, voy a bajar al mundo a cumplir la tarea
para la que nací.
- No merece vivir señor juez - dijo gritando el fiscal-.
- ¡Claro que merezco vivir! Voy a vivir y voy a triunfar. Esa lista de
energía; esas pruebas que se usa en mi contra, hoy por hoy son mi mejor
herramienta. Lo que dice esa lista, puedo firmar en este momento, es lo que
voy a dejar de hacer en menos de un año. Yo quiero, puedo y merezco triunfar
en la vida. Merezco otra oportunidad para bajar al mundo.

El juicio se prolongó; fue largo y cansado. El fiscal sacaba siempre mis trapos
sucios; algunos eran sólo recuerdos dolorosos del pasado. Yo me defendí. Mi vida,
mi destino estaban en peligro y sabía, con la totalidad de mi alma, que así era; no
podía darme el lujo de perder el juicio. Cuando yo terminé continuamos con Manolo
Pablos y después con Pilar. El proceso fue largo y cansado. Cada uno de nosotros
jugó los tres papeles; el más difícil era el de fiscal.

Bekech nos llamó a todos los que habíamos hecho la primera ronda de defensa.
Nos puso de pie en el centro, mirando la vela en la oscuridad. La sala estaba
impregnada de olor a copal y amor a la vida. Mis pies temblaban; había una
nerviosismo estático en todo mi ser; sabía que ese momento era uno de los más
importantes de mi vida.

- Invoca a los poderes del universo, José - dijo en forma ritual


Bekech- Invoca a tus protectores, ángeles, maestros del astral, animales de
poder, aliados. Invoca a la Gran Madre creadora del universo; aquella energía
que armoniza el todo. Lleva toda tu energía al ombligo, al “intento”, y deja que
de allí salga un cordón umbilical que te conecte con el centro del universo.
Ahora, pausadamente, di en voz alta por qué mereces vivir, qué es lo que vas a
40
hacer en el mundo si la muerte te da otra oportunidad. Todo lo que digas en
este momento será una orden, un pacto con el infinito. Lo que hagas a partir de
hoy en tu vida, quedará escrito para siempre en el universo.

Hablé y hablé. Dije cosas que me sorprendieron a mí mismo. Era como si otra
persona hablara por mí. Hablé de cosas muy concretas, como comprar una casa, y de
cosas abstractas, que en ese momento no entendía, sobre cómo regresar a mis
orígenes cósmicos. El tiempo se detuvo. No sé cómo ni cuánto duró, sólo sé que
Bekech me tomó del codo y me llevó; me sentó, me puso una máscara de calavera y
comenzó el juicio de Pilar. Regresé a mi conciencia. Cuando escuché mi voz fue
como un jarro de agua fría: ¿Por qué mereces vivir Pilar? ¿Cuáles son las razones por
las que quieres otra oportunidad para bajar a ese planeta? Recuerdo que Pilar lloró
mucho. Al principio no quería bajar al mundo; quería quedarse en ese plano como un
fantasma vagando por el universo. Entre el fiscal y yo, a base de cuestionamientos,
logramos hacer que dijera lo que tenía miedo de decir: Amaba la vida; la amaba sobre
todas las cosas y finalmente logró comprometerse. Con manolo Pablos fue distinto.
Yo era el fiscal, él el acusador, y sabía que mi deber era empujarlo, acorralarlo,
desnudarlo para que se atreviera a comprometerse.

No sé cuánto duró el juicio de los tres. Fue agotador. Me encaminé al baño


para lavarme la cara. Cuando regresé, la gente del grupo caminaba nuevamente en
círculos alrededor de las velas que estaban en el centro de la sala.

- Están cansados - dijo Bekech -, están cansados… Saquen fuerzas


de flaqueza porque nos queda mucho todavía por trabajar.
- ¡Soy el mensajero de la muerte! - grito Jorge - y te digo que vamos
a repetir la danza de la muerte; vamos a bailar nuevamente. Quiero revalidar
tus palabras con actos. Prepárense para sudar y sufrir bailando nuevamente.

Me horroricé sólo de pensar en tener que repetir toda la danza. Aun así, me
revestí con mi mejor estado de ánimo y me preparé tarareando una vieja canción
popular:

“Valentina, Valentina,
por ti yo he de morir.
Si me han de matar mañana,
que me maten de una vez”

- Siente el miedo en tu cuerpo - dijo Bekech -. Recuerda el dolor en


las piernas, en las pantorrillas, en los antebrazos. Recuerda el cansancio, el
sudor, la falta de aire, la sed. Recuerda la batalla que viviste y no le tengas
miedo. Deja que tus ojos brillen, deja que tu alma se llene de poder. Prepárate
para la danza de la vida. Sé consciente de que ahora el baile será más duro.

41
Y acto seguido sonó una música folklórica mexicana; una música de fiesta y de
baile.

- ¡Bailen! - gritó -, ¡Bailen! Es la danza de la vida.

La alegre música nos atrapó; bailamos unos con otros. Hubo muchas risas.
Parecía una fiesta. No hubo tortura pero sí sudor y falta de aire. Mi cuerpo sudaba,
pero mi rostro resplandecía de amor a la vida. Era como un juego hermoso. Bailamos
por largo tiempo y quedamos exhaustos. Fue una danza infinitamente hermosa.

- ¡Al Suelo! - gritó Bekech -.

Todos nos tiramos al suelo. Habíamos vuelto a sudar, pero el cuerpo se sentía
mejor; fortalecido y pleno.

- Soy el mensajero de la muerte y vengo a decirte que la muerte te


da otra oportunidad para vivir. Vengo a decirte que, tarde o temprano, tendrás
otra batalla con la muerte. No sabes cuándo, mañana o en veinte años. No
sabes cómo va a ser tu última danza con la muerte. Cualquier cosa que hagas;
cualquier pequeño acontecimiento puede muy bien ser tu último acto sobre la
tierra, así es que, hazlo bien; impecablemente bien. La muerte te observa y
vendrá a pedirte cuentas de aquello a lo que te has comprometido en el limbo.
Voy a estar cerca de ti recordándote tus compromisos.

- Pónganse en posición fetal - nos dijo Bekech -. Tomen conciencia


de esto:

“Hoy es el primer día de tu nueva vida.


Todo parece lo mismo pero ya nada será igual”

- Siéntense en el suelo - dijo con voz paternal -.

Una mujer se acercó ofreciéndonos un cuenco con semillas, almendras,


nueces, pipas de girasol, algunos frutos secos, y un vaso de agua. Nos tapó con
una manta y nos dio unas hojas en blanco y un lápiz.

- En esas hojas tienen que escribir todo lo que han dicho ustedes en
el juicio: por qué merecen vivir y qué es lo que van a hacer ahora en su nueva
vida. Escriban su poema de existencia y una carta de amor a la vida o a una
persona concreta.

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Poemas de amor a la vida:

Eccomi qui da te
Prezioso mistero
Regalo della meraviglia

Eccoci qui a farci dono l’una


Dell’altra

Io amo ed onoro te
Eternità dell’ infinito
Bellezza pura e perfetta
Io sento e so che tu ami me
Tua creatura
Umile ed imperfetta

Che delizioso sentire


Che poesia che incanto
Che ineffabile sensazione
Di felicità

I migliori pensieri
Le luci più protettrici
Tutto intorno a me
Più lontano che si può
Sorriso di comprensione
Nella dualità accettata
Lucy S.

Muy cerca de mi ocaso yo te bendigo, vida


Porque nunca me diste ni pena ni esperanza fallida
Y porque al final yo fui arquitecto de mi propio destino
Cuando sembré rosas coseché siempre rosas
Amé y fui amado, el sol acarició mi faz
Más a mis lozanías llegó el invierno
Vida, nada me debes, vida, estamos en paz
Amado Nervo

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El día más importante de su vida
Fue el de su muerte
Silvio Rodríguez
Te hago la promesa Señor Dios
De que voy a triunfar en esta vida
Te hago la promesa
De que me voy a convertir en mi mejor amigo

Te hago la promesa y juro por lo más sagrado


Que voy a hacer que mi vida sea algo que valga la pena
La próxima vez que te vea
Me sentiré orgulloso de lo que he vivido en la tierra
José

Date cuenta para que sientas:

La belleza increíble que impregna


De grandeza invisible a cada persona
Esa entereza insondable de tus actos
De lo inimaginable de ti en el cosmos

Date cuanta para que sientas:

Del misterio de la muerte


De la suerte que todos tenemos
Del albedrío inerte
Del canto blasfemo
Edgar

Quiero nacer cuando comience el día


Junto al mar y con la cara al cielo
Y no escuchar en ese instante
Más sonidos o cantos sollozantes
Que el majestuoso tumbo de las olas
Y cuando el sol se asome
Tras las redes verdes del mar
Y ser como el
Algo majestuoso que renace
Manuel Gutiérrez

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Nos quedamos sentados escribiendo cerca de una hora. Algunos salieron a
escribir a los jardines que rodeaban la casa.

CÍRCULO DE SANACIÓN

No eres consciente,
pero hay fuerzas en el universo que te cuidan.
A veces son peligrosas
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

Al final, nos tomamos de la mano e hicimos un círculo de sanación. Cada vez


que creía que íbamos a acabar, Bekech nos daba una nueva tarea. ¿Cuándo vamos a
terminar?- me preguntaba a mí mismo una y otra vez- .
Dejamos que la energía circulara de mano izquierda a mano derecha. Era tan
abundante que me entumecía los dedos.

Bekech puso una música de piano muy hermosa que nos acompañó en toda la
ceremonia. El autor era Ralph Zurmühle con su disco Between.

TRANCE LIGERO

- Voy a enseñarles algo que se llama “trance ligero”. Cierren los


ojos, estiren el cuello y mantengan la columna vertebral recta. Las rodillas
ligeramente dobladas, con los talones mirando ligeramente hacia fuera. Los
ojos como mirando a las cejas, parpados cerrados. La punta de la lengua
pegada al paladar en una pequeña hendidura natural. Respiran profundo
contando hasta 8 y luego dejan salir el aire, muy lentamente, sin contar. Dejen
que su cuerpo se balancee adelante y atrás o haciendo pequeños círculos, lenta
y suavemente.

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Bekech ya me había explicado antes esta posición. Me había dicho que
permitía, de forma casi automática y con gran rapidez, pasar de un estado cotidiano a
un estado Alfa. Permitía a la mente descansar y abrir los dos hemisferios cerebrales,
creando un puente con lo abstracto. A Bekech también le gustaba llamarlas
meditaciones en movimiento por el balanceo del cuerpo.

- Respiren muy profundo y llenen su burbuja luminosa de vitalidad


y energía. Llenen todos los depósitos de su cuerpo de energía. Concéntrense.

Era una muy agradable sensación y sorprendía ver como el cuerpo se


restablecía y desaparecía el cansancio.

- Canalicen toda la energía e imaginen que estamos dentro de un tubo de luz


que nos une con la Gran Madre creadora del universo. Sientan cómo nos
armonizamos con lo abstracto.

Al cerrar los ojos, era consciente de que no veía las sugerencias de Bekech en
mi mente como una imagen, sino como pensamientos y sentimientos. Y en ellos me
concentré. Sabía que los demás podían visualizar sin problemas. Yo no podía hacerlo
y, por primera vez, me sentí indiferente ante este problema.

- Ahora imagina a aquellas personas que amas; la persona que más


te quiere en el mundo y la persona a la que más quieres. Sus “yo superiores”;
sus almas, están en el centro del círculo. Deja que ellos se revitalicen también
con la energía.

Inmediatamente pensé en mi madre.

- Imagina que se llenan de energía. Que tú eres un canal con tu amor


por ellos. Ahora, mentalmente, diles que les quieres y que les amas. Díselo,
manifiesta tu amor hacia ellos.

Las palabras fluían con facilidad de mi boca. Nunca supe si realmente las
pronuncié en voz alta, pero era muy intenso y muy emocional. En mi mente, poco a
poco, iban apareciendo más nombres de personas a las que quería dedicarles mi amor
y hacer que se llenaran de energía allí conmigo. Mientras más personas invocaba,
más energía se percibía.

Después de algunos minutos, que a mí se me hicieron muy cortos, Bekech


continuó hablando.

- Si conoces a alguna persona a la que quieras y que esté enferma,


imagina, siente o piensa que está en el centro de este círculo, y entre todos
invocamos el callejón de los milagros para que esta persona se restablezca, se
46
llene de energía y se cure. Vamos a canalizar todo este poder para aquellas
personas que lo necesiten.

Pensé en una antigua amiga, Ainia. Sabía que estaba muy enferma. Para mi
sorpresa la vi una semana después de la ceremonia y la encontré con un magnifico
estado de salud. Le hablé de la ceremonia y ella me confirmó que había sido esa
misma noche cuando su cuerpo comenzó a restablecerse de una manera más que
inusual.

Al finalizar la ceremonia, ya sin la máscara ni la capa, Jorge invitó a todos los


participantes a despedirnos con un abrazo. Fueron 42 abrazos con el siguiente
comentario: ¡Felicidades, estás vivo!

Salí del lugar, lleno; con muchas cosas escritas, mucha claridad y también
mucha confusión. Sabía qué quería y qué no quería. Sin embargo, no sabía cómo
conseguir aquello que deseaba. Cuando le comenté a Bekech mi dilema, en forma
amable encogió los hombros y dijo: “Así es la vida, bienvenido al mundo de los
adultos”. Y se echó a reír de su broma que yo no entendí.

INTERCAMBIOS DE ENERGÍA
LOS HILOS ENERGÉTICOS

- “Somos burbujas luminosas, y la energía que hay dentro de


nosotros se interrelaciona con las demás personas con las que convivimos.
Cada uno damos parte de nuestra energía o tomamos energía de los demás y la
metemos dentro de nuestra luminosidad. Cada uno de nosotros hemos tomado
energía de los demás y cada uno de nosotros a dado un trozo de nuestra alma a
los demás”.

Nos encontrábamos reunidos con el grupo. Realmente todos éramos los


mismos, pero ya no éramos igual. Irradiábamos “un no sé qué, que qué sé yo, que yo
qué sé”.

- “Trato de explicarme: Una parte de ti, de tu energía, de tu alma,


está ahora dentro de otra persona y viceversa”.
- Bekech, ¿Estás seguro de que no fumas marihuana ni te drogas? -
dije en broma, sorprendido por la ligereza de mi comentario-.
- “Te aseguro que he tocado las plantas de poder sólo en tres
ocasiones”, -dijo Bekech sin sentirse ofendido por el comentario-.

47
Reímos. Después de la noche anterior había quedado entre nosotros un
ambiente de camaradería y alegría; reíamos por las cosas más insignificantes.

- “Trato de explicarlo nuevamente -dijo entre sonrisas- ¿Quién ha


sido tu primer amor, José?”

Todos me miraron y comenzaron a reír. Yo no le veía la gracia a esa pregunta.

Pensé en aquella muchacha que se llamaba Armeni. Había sido una relación
realmente pasional; una relación intensa y llena de fuerza. Nunca sentí dolor más
grande que con ella.

- “Le diste a ella el trozo más grande de tu corazón. Nunca te has


enamorado de igual forma y, ahora que la menciono, sientes un gran vacío en
el pecho y ganas de llorar y esa alegría desaparece. ¿Es así mi querido José?”
- Si, efectivamente, mi alma se llena de ese vacío que no he dejado
de sentir desde que terminé mi relación de pareja con ella, -dije realmente
sorprendido por el cambio de mis sentimientos-.
- “Cuando estabas lejos de ella, lo único que querías era ir a
abrazarla. Y cuando estabas demasiado tiempo con ella chocabas y discutías” -
Bekech hablaba mientras sus ojos me veían con la mirada desenfocada. Sabía
que me estaba viendo por dentro -. “No podías estar cerca de ella y tampoco
podías estar lejos”.
- Efectivamente.
- “Cuando te enamoraste de ella, mi querido José, la entregaste una
gran porción de tu corazón. No es una metáfora. Le diste una proporción
gigante de energía de tu corazón. Tan grande que ha quedado un vacío en tu
pecho”.
- Sí, es cierto, -dije-. Pero ella también me entregó parte de su
corazón.
- “Sí, y se ha convertido para ti en una carga durante los últimos
años. Es una pesadez en tu pecho, un sentimiento de culpa, como un plomo que
cubre el vacío de tu pecho. Un sentimiento de no ser merecedor de enamorarte
de nuevo y de haber echado a perder todo entre ustedes. Te sientes culpable
porque no supiste qué hacer con el corazón de la mujer que confió en ti. Porque
confió tanto en ti, que puso su corazón en tus manos y, ya ves, la defraudaste a
ella y a tu Dios”.
- ¿Cómo diablos sabes eso, Bekech? ¿Por qué? ¿Qué derecho tienes
a abrir una herida que nunca ha cicatrizado en mi vida?
- “Es exactamente lo que trato de decirte. Tú crees que nadie nota
esa herida, incluso crees que tú ya la olvidaste, pero te digo que esa herida está
ahí y la punta de la lanza también. Si tú me lo permites. Mejor, si me lo pides,
yo intentaré ayudarte. Pero te aviso de que al principio duele. El pasado no está
en el pasado, está en el presente marcado en tu burbuja luminosa”.
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- Adelante Bekech, continúa con tus enseñanzas -dije casi
mecánicamente, pero con un pequeño ápice de conciencia de lo que decía- Mi
alma se hunde en recuerdos, sentimientos, imágenes de ese amor que tuve y
destruí. Hubo un momento, Bekech, en el que, si alguien mencionaba su
nombre, yo sentía como se me desgarraba el alma (la burbuja luminosa) y
sentía como toda mi energía desaparecía de mi cuerpo y de mi ser. Tuve que
renunciar a todos los amigos que teníamos en común. Dejar mi trabajo e irme a
vivir a un pueblo remoto. Y como tú dices, desde entonces siento un vacío y
una pesadez que no existían antes en mi alma. Si eso es amor, yo no quiero
saber nada del amor.
- “Eso no es amor, José, te lo aseguro. Eso es una fuga de energía
que te aleja del amor verdadero -dijo Bekech con gran seguridad- ¿Qué edad
tenías?, preguntó”.
- Casi veintiséis años.
- “Ya mayorcito para ser tu primer amor”.
- Si, era la primera vez que me sentía enamorado -contesté mirando
al suelo-.
- “Entre esa mujer y tú hay un hilo de luz que los ata. Ese hilo es
muy hermoso, muy hermoso, pero también muy peligroso. Es tu deber y tu
obligación cortar la cuerda que los une, por amor a ella y por necesidad
personal. Además le vas a hacer un gran favor”.
- Pero no quiero renunciar a ese amor.
- “Al amor no se renuncia, se renuncia a las cargas energéticas y a
las ataduras, y de paso recuperas parte de tu luminosidad”.

HISTORIA DE INMA

Bekech nos contó esta historia suya, muy personal:

“Era muy joven en aquel entonces, veintinueve años. Estaba en mi consulta de


sanación, cuando entró una de las mujeres más bonitas que había visto en mi vida.
Se llamaba Inma y era alpinista profesional de Pamplona; una españolita linda.
Venía con frecuencia a México para escalar el Popocatepetl y el pico de Orizaba,
montañas de más de 5.000 metros de altura. La había conocido hacía tiempo y
tuvimos un romance.

Entró en mi consulta y, para mi sorpresa, no me reconoció o, como yo creía en


ese momento, hizo como que no me conocía.

La exploré; hice un diagnóstico chamánico impecable y la cobré mis


honorarios.

49
Antes de irse me preguntó si conocía a un chamán que se llamaba Jaime.

- Si, la dije, lo conozco muy bien, es mi mejor amigo.


- Hace 5 años, en mi primer viaje a México, lo conocí. Era
realmente encantador conmigo; me escribió unos poemas hermosos que
todavía conservo enmarcados en mi casa. También me regaló unos perfumes.
Se comunicaba conmigo todos los días y un día, simplemente desapareció,
nunca supe más de él.
- Es increíble, yo soy Jaime.
- ¿Tú? Pero no te pareces en nada.
- Cuando me conociste llevaba barba, el cabello corto y vestía con
los mejores trajes y corbatas que se vendían en México. Ahora me ves con el
pelo largo, con guaraches (sandalias toscas de cuero) y sin barba. Realmente
ya no soy el mismo, ni me llamo igual.
- Pero, ¿Qué pasó, por qué nunca más te comunicaste conmigo?-
Me preguntó Inma, que no daba crédito a mis palabras-.
- Un día te hablé y tú, muy seria, incluso tosca (por no decir
grosera), me preguntaste cuáles eran mis intenciones. Realmente me resultó
tan desagradable la forma en que lo dijiste que, al despedirme de ti y colgar,
hice mil añicos el papelito donde estaba tu teléfono. Después me arrepentí,
pero ya no había nada que hacer.

Mantuvimos un micro-romance de cuestión de minutos. Como tenía la consulta


llena de pacientes, la dije que la llamaría al mediodía del día siguiente a su hotel,
para ponernos de acuerdo y salir a cenar, después de una conferencia que yo tenía
que dar por la noche.

Al día siguiente terminé un poco tarde mis consultas y la llamé. Eran las 14:30
de la tarde. Ya no estaba en el hotel. Dejé 4 mensajes esperando encontrarla en la
conferencia.

A mitad de mi charla sobre “El camino del Mago”, apareció Inma. La miré y
me di cuenta de que algo andaba mal.

Al acabar me desembaracé de las personas que me rodeaban, tomé a Inma de


la mano y me la llevé a tomar un café. Me preocupó: la mujer hermosa del día
anterior había desaparecido.

- Esperé tu llamada, -dijo con frialdad-.


- Te llamé.
- Me dijiste que lo harías a medio día.
- Lo hice poco después de las 14:30, eso es mediodía.

50
- Yo esperaba tu llamada a las 12:00,- dijo con sorpresa-. En
España las 12:00 es medio día. Puso cara de susto comprendiendo su error.
- Ya ves lo que se pierde por una confusión.
- Me quedé dos horas mirando al teléfono esperando tu llamada.
No pude más y me fui del hotel muy enfadada.
- Ya veo que has estado discutiendo mentalmente conmigo.
- Si Bekech, realmente…Entiéndeme: yo lo único que quiero saber
es si puedo fiarme de ti.

En ese momento descendió el Espíritu y tuve claridad sobre la situación.

- No Inma, no puedes fiarte de mí.- la contesté en tono paternal-.

Nos sentamos en el banco de un parque.

- Inma, te prometo que eres la mujer más hermosa que conozco,


pero déjame explicarte ¿Puedo?
- Si, -dijo molesta pero intrigada-. Su cara parecía la de una niña
que espera una reprimenda.
- Tú quieres saber si puedes fiarte de mí para poner tu corazoncito
en mis manos. Quieres saber si lo puedo cuidar y llevarte a donde tú deseas ir
en la vida. Si yo tomo tu corazoncito, tendré derecho a compartir tu intimidad
y tu cama. Después yo continuare mi vida; seguiré caminando lo que marca mi
destino. Inma comenzó a llorar.

- Si yo tomo tu corazón, tarde o temprano te vas a dar cuenta de que lo


llevo en dirección contraria a la que tú quieres ir. Entonces, molesta, me
arrebatarás tu corazón y buscarás a otra persona de la que te puedas fiar. De ahí
viene ese enojo y esa tosquedad, de las desilusiones de que los hombres no sepan
a dónde llevar tu corazoncito. Inma, realmente me agradas y mucho, pero tú eres
la encargada de tu vida; de llevar tu corazón a la felicidad. No puedes confiar en
ningún hombre hasta que tú no puedas confiar en ti misma. Es la ley”.

Bekech terminó su relato. La alegría había desaparecido. Yo era la víctima de


ese juego, pero veía que casi todos se habían identificado con parte de él o de mi
historia. Bekech, con gran sabiduría, me tomó como ejemplo para los demás.

- “Tú, mi querido José, tienes una ventaja: te da igual que hable bien
o mal de ti en público. Eso, te lo aseguro, es un gran logro chamánico”.

No tuve mucho ánimo para continuar hablando del tema con Bekech. Le di las
gracias y regresé a mi casa. Cuando llegué escuché un mensaje en el contestador.
Para mi asombro era de Armeni.

51
- “Hola José, soy Armeni. Tal vez te acuerdes de mí, yo me he
estado acordando mucho de ti, sobre todo hoy. Bueno, sólo quería que supieras
que pienso en ti. Un beso y ojalá algún día nos encontremos”.

¡Hacía años que no sabía nada de ella y, de pronto, estaba allí! Comprendí,
como me había enseñado Bekech, que eso era indiscutiblemente un augurio del Poder
para mí.

- “Sólo hace falta que Dios te mande un ángel y te grite al oído:


“Limpia tus lazos energéticos con esa mujer, tarado””. Me dijo Bekech cuando
le conté la extraña coincidencia.
- “Entre ella y tú hay un hilo telepático. Ella no quiere volver a
verte, pero tampoco quiere dejarte marchar. Eres su mejor recuerdo, José”.
- Bekech, yo tampoco quiero cortar esos lazos…. o sí…?
- “Si dudas ya es ganancia, -dijo mirándome con consideración-. De
cada persona salen esos hilos de luz que nos atan a nuestros semejantes. Vamos
por la vida atándonos. Llega un momento en el que son tantos los hilos que
pierdes movilidad por completo, quedas atrapado como una mosca en una
telaraña. De ahí viene la neurosis, la frustración. Para que tú puedas vivir la
vida que quieres vivir, hay que ir cortando, con mucho cuidado, esas telarañas
energéticas.

La neurosis tan generalizada de la gente de hoy en día


(No estudiaron lo que querían estudiar,
no trabajan donde querían trabajar,
no se casaron con quien querían casarse,
no viven donde les gustaría vivir),
es porque no pueden vivir la vida que quieren vivir
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

- “Una persona en estas circunstancias tiene toda la razón del


mundo para estar neurótica. El sólo hecho de que sienta que triunfa en algo ya
es un sedante que le permite vivir o sobrevivir. Para poder escapar de esa
neurosis y de esa frustración hace falta algún sedante”.
- ¿Hay distintas tipos de telarañas?.
- “Claro, y distintos tipos de densidades de esas telarañas”, contestó.
“La telaraña que te ata a esta Carmen es de color rosa. Es hermosa pero
peligrosa. Es una unión verdadera, pero finalmente un lazo, una atadura”.

52
Ejercicio II

LAS CIEN PERSONAS QUE MÁS HAN INFLUIDO EN TU VIDA

- “Haz una lista de las personas, físicas o representativas, que hayan


condicionado tu vida; una lista sencilla para empezar y después haces un
pequeño comentario” -me dijo al mes siguiente cuando nos vimos-.

El suceso de Armeni había movido mucho mis sentimientos. Me daba cuenta


de que, desde el día en que escuché el mensaje en el contestador, ella y su recuerdo se
habían convertido en mi principal fuga de energía. Luchaba por detener esa fuga y era
consciente de cómo me ataba y la influencia que tenía en mi vida y en mi destino.
Eso no me gustaba.

Estamos condicionados por las personas


que dejan huella en nuestro subconsciente
y en nuestra luminosidad.
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

- Cien personas son muchas -comenté enseñándole mi lista y


esperando que pudiera orientarme mejor-. Creo que he llegado sólo a cincuenta
personas, incluyendo mi perro.
- “Bien, empezaste por tu madre y por tu padre”, me contestó
mirando la lista. “Ya te darás cuenta al ir aumentando tu conciencia y tu
capacidad de cortar telarañas, de que en realidad son pocas”.

Ejemplo 1:

- “¿Quién influyó en ti para decidir tu carrera universitaria?”.


- Es algo que decidí yo, no tengo duda de ello.
53
- “Lo sé. Pero la pregunta es quién influyo en ti para que tomaras
esa decisión”.
- En el bachiller tenía dos amigos, mis mejores amigos, Víctor y
Jorge. Ellos se habían apuntado a la carrera de antropología social. Me
hablaban mucho muy motivados por sus respectivas visiones académicas.
- “Mira en tu lista, ellos no están ahí, y es por ellos por los que
comenzaron tus andanzas por los pueblos mexicanos, los desiertos y el
conocimiento indio. ¿Ves su influencia? Digamos que son dos telarañas
amarillas que siguen influyendo en ti”.
- ¿Vale la pena cortar esa influencia? -comenté a guisa de protesta-.
- “Desde luego. En el pasado esa influencia fue muy útil para ti.
Ahora, en tu presente inmediato, es una carga que fija tu personalidad”.
- ¿Pero en qué sentido es una carga?
- “La rebeldía que aprendiste de ellos, útil en el pasado, ahora es
una carga. Tus principios sociales estaban bien para un muchacho de diecisiete
años. Ahora esos principios sociales te estorban; hay una cantidad inmensa de
cosas que no puedes hacer por esos principios”.

Ejemplo 2:

- “Tu economía ¿Quién influyó en que tu economía siempre te


llegue al cuello?... estás enojado con el dinero” -Afirmó Bekech-.

Este asunto de pensar tanto me estaba fastidiando. Yo tenía la idea del camino
chamánico como un camino de acción y conciencia, no de darle tantas vueltas al
cerebro.

- “No te disperses en tus quejas -me detuvo Bekech en pleno tren de


pensamientos-, concéntrate. Este no es un camino de fe, tienes que tener claro
dónde diablos te vas a meter. ¿Quién influyo en la precariedad de tu
economía?”
- Mi maestra de meditación. Siempre decía que el dinero era malo.
Ella sólo pedía en sus meditaciones lo necesario para vivir y nada más. Me
comentó muchas veces que tuviera cuidado para no dejarme atrapar por el
dinero.
- “¿Entiendes lo que te digo? Estás cansado de ser un pobretón y no
sabes cómo dejar de serlo ¿Qué edad tenías cuando tomabas clase con tu
maestra?”
- Dieciséis años –contesté-.
- “Ese es un hilo gris que te ata y te aleja de la abundancia”.

Estamos en un universo de abundancia

- ¡Vaya! El nombre de tu maestra tampoco está en la lista.


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Ejemplos varios:

- ¿Quién es tu escritor favorito?


- Carlos Castaneda y su personaje don Juan Matus.
- Anda. ¿Acaso estás seguro de que don Juan es un personaje?
- ¿Acaso lo conociste, Bekech?
- Claro, mi querido aprendiz. Pero regresemos a lo nuestro.
Tampoco están en tu lista, y muchas veces me has comentado su influencia y
cómo quieres parecerte a estas dos personas.

- ¿A quién rechazas más que a nadie en el mundo? ¿Quién es la


persona a la que más detestas? ¿Quiénes son tus enemigos; los que te han
hecho daño? Son telarañas negras que te atan al lado oscuro de la realidad, al
enojo, al odio, al deseo de venganza. ¿Quién es tu actor favorito? ¿A quién te
gustaría parecerte en personalidad o en físico? ¿Quién es la persona a la que
más amas? ¿Quiénes son las personas que te han amado? ¿Quién te ha
enseñado a ganar esa disciplina que tienes? ¿Quién es la persona, fuera de tu
círculo familiar y de pareja, que más te ha desilusionado? ¿Quién es el político
al que más admiras? ¿Quién es el político al que más detestas? ¿Y tu personaje
histórico favorito? ¿De qué actriz de cine te has enamorado? Como puedes ver,
hay una maraña de personas.

Estamos educados a base de reflejos condicionados


Fueron aquellas personas que tuvieron influencia en nosotros
Antes éramos unos niños, no teníamos manera de defendernos
Ahora somos chamanes, todo lo podemos transformar
Comenzó la revolución de los antirreflejos condicionados
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

Pasó otra semana y le entregué a Bekech una lista de 150 personas.

Comencé a escribir y me di cuenta de que tenía influencias tan directas y


marcadas como la de mi señor abuelo y ni siquiera lo había conocido. En mi lista
descubrí personajes tan variopintos como protagonistas de cómic que adoraba y
veneraba en mi infancia. Había uno en particular, un ladrón de guante blanco llamado
Fantomas, que robaba cuadros de arte para su colección privada; así descubrí al
Greco y a Velázquez. Y sin yo siquiera saberlo, ese personaje había influido siempre
en mi vida, transmitiéndome el deseo de tener algún día mi colección de arte y mi
refugio privado donde guardarla. Esa telaraña tiene que ser dorada, Bekech, y

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realmente tiene que ver con mi futuro y con el mayor de los placeres que siento en mi
vida, mi amor al arte y a los grandes pintores ¿Debo cortarla?
- Deja que sea la última, pero sí, debes cortarla. Me contestó.
- ¡Maldición! ¿Y si no quiero?
- Entonces no la cortes. ¡Ahora resulta que defiendes más a un
personaje de cómic que al amor de tu vida! -reímos los dos-. Cuando tu
conciencia o la necesidad lo requiera, sabrás que ha llegado su fin. Pero te
recuerdo, cortar esa telaraña energética no alterará tu capacidad de apreciar el
arte, pero sí tus creencias sobre arte.
- Hay unas telarañas que faltan en tus listas, mi trabajador aprendiz.
No veo a Jesús el Cristo o a Dios. Incluso se te ha olvidado ponerme a mí y a
Jorge. ¿Acaso no eres consciente de la influencia que tenemos en tu vida y en
tu destino? También falta un personaje bíblico, Moisés y sus principios. Los
diez mandamientos están completamente implícitos en tu forma de conducta
¿Acaso no me dijiste alguna vez que de adolescente ibas para santo?
- Pues si vamos a eso, pongo también el nombre de mis personajes,
de mis fantasías o el nombre de mi protector o de mi amor platónico, que
nunca conocí.
- No es mala idea. Creo que entiendes lo que digo -dijo para mi más
completo fastidio, y se echó a reír-.

Hay hilos de luz que nos atrapan,


nos atan a las personas,
a las ideas,
a los sentimientos,
a las creencias religiosas.

Nos dan un margen tan corto de maniobra,


que no nos permiten movernos,
creando un sentimiento de impotencia
y de frustración.

56
LOS VAMPIROS ENERGETICOS

Los vampiros energéticos son personas normales


No son malos, no son buenos,
son peligrosos porque debilitan tu luminosidad.
Y maltratan la confianza en ti mismo

de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

- Hay personas a las que das energía, como en el caso de Armeni.


Pero también hay personas que te roban energía. A estas las llamamos
vampiros energéticos. Son telarañas negras, a veces muy negras, y otras veces
increíblemente hermosas.
- ¿Cómo es posible eso?
- Los vampiros energéticos buscan sistemáticamente a alguien para
abastecerse de energía. No son malos, sólo son peligrosos. No están
absorbiendo o maltratando tu energía constantemente. Pero exagerando un
poco, y repito, exagerando, podemos hacer esta clasificación:

Vampiros depresivos:

Son aquellos vampiros que solo vienen a contarte sus problemas. Les das
consejos y nunca los siguen. Por consiguiente, nunca salen de sus problemas. Los
vampiros energéticos utilizan frases como: “Tú eres la única persona que me
entiende” “Tú eres la única persona que me puede ayudar” “Tú eres una de las pocas
personas en quien confío” Son personas que en un momento dado, no pudiendo
generar energía, han encontrado la manera de dar lástima y hacer chantajes
sentimentales para poder absorber la energía de la gente.

Vampiros agresivos:

Estos son peligrosos, te pueden agredir física o emocionalmente. Mientras más


te agreden, mayor es la energía que adquieren. Tú te debilitas y ellos se fortalecen.
Buscan continuamente el choque frontal sin que exista una razón real. Mientras más
discuten, más se fortalecen.

Vampiros manipuladores:

Buscan la manera de manipularte física y emocionalmente. Son maestros en los


chantajes sentimentales para conseguir apoyo o hacer que la gente trabaje para ellos,
ahorrando así su propia energía. Siempre te dejan la sensación de que abusan de ti;
persiguen siempre sacar provecho.

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Vampiros amorosos:

Van suplicándote que los quieras, que los ames, que los aceptes. Te empalagan
con su amor, te cansan y luego no sabes qué hacer con ellos. Te atrapan con su amor;
son empalagosos a más no poder. No importa cuánto amor les des nunca les parece
suficiente. Siempre te dejan la sensación de cansancio y de ganas de salir corriendo.
Son maravillosos para quejarse.

Vampiros críticos:

No importa lo que hagas, lo critican. Son muy agotadores para la energía. Te


rompen la confianza en ti mismo. Hagas lo que hagas es casi imposible complacerles;
siempre encuentran lo que está mal. Y cuando no hay nada mal, lo inventan.

Vampiros que siempre tienen razón:

Son vampiros de una gran capacidad mental y una gran facilidad para
almacenar datos. Saben jugar con las palabras. Aunque sepan que están equivocados,
juegan con las ideas y finalmente parece que siempre lo saben todo. No ves
congruencia entre sus palabras y sus actos. Es imposible vivir y llenarte de energía
conviviendo con una persona que siempre quiere tener razón.

Vampiros sexuales:

Necesitan tener relaciones sexuales contigo para abastecerse de una energía


vital, que sólo se da dentro de la sexualidad. Sientes una pérdida significativa de
vitalidad después del acto sexual. A veces ocurre que dos vampiros sexuales se
encuentran en la misma cama; es un desgaste completo para los dos. Los vampiros
sexuales tienen una gran capacidad de cambiar de pareja o de tener varias parejas al
mismo tiempo.

Vampiros comerciales:

Dan poco y toman mucho. Siempre tienes la sensación de que das más de lo
que recibes.
Vampiros que dan lástima:

Van buscando que la gente se compadezca de ellos: “¡Pobrecito de mi, que mal
me trata la vida!”.

Vampiros incomprendidos:

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Siempre se quejan de que no les comprendes, de que no los apoyas, de que no
haces nada por ellos. Van por la vida buscando quién les comprenda, y quieren
obligarte a hacerlo, cuando ellos mismos no son capaces.

Vampiros que se están muriendo o Vampiros ancianos y seniles:

Hay vampiros que te toman de la mano y no te puedes soltar de ellos


fácilmente.
Se aferran a ti porque saben que en ello les va la vida.

- Cada uno de nosotros tenemos algo de vampirismo: un día me


tomas energía tú, otro día yo tomo tu energía. Se crea un intercambio, a veces
incluso sano; una simbiosis energética. Pero finalmente quedas atrapado en la
maraña de hilos y dependencias energéticas; el mundo depende de ti y tú del
mundo.
- ¿Qué pasa con los curanderos?
- Muchos de ellos venden su energía a vampiros enfermos o
vampiros psicosomáticos que buscan alguien que reafirme sus problemas.
- Pero entonces, Bekech, visto desde tu punto de vista, todos somos
un poquito vampiros.
- Todos no, te lo aseguro.

Rió mirándome con cara de malicia. Sopesó lo que iba a decir. Sabía que tenía
que prepararme. Tenía una gran capacidad para medir mi resistencia.

- Tú no eres un poco vampiro, tú eres un gran vampiro energético.


¿No te das cuenta de las peripecias que tengo que hacer para no perder mi
energía en la interacción contigo? Eres un gran alumno, pero también un gran
vampiro.

Siempre, después de darme una pedrada, me daba una rosa. Aun así, su
comentario me ofendió. Me molesté con él a pesar de que sabía que tenía razón,
yo mismo se lo había dicho. Pensé en castigarlo con mi desprecio y mi rechazo;
pensé en dejar de admirarlo, cuando interrumpió la ola de sentimientos desatados
diciéndome:

- Si no tienes cuidado, te vas a convertir en un vampiro ofendido que busca


cualquier excusa para sentirse receloso cuando el mundo no reconoce lo que cree
saber; cuando el mundo no reconoce su valía.

Me reí de él, me reí de mí. Era como mirarme en un espejo; sabía en ese
momento lo que no quería ser.

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- José -dije en tono casi suplicante-, yo no quiero ser así. Mejor
dicho, estoy harto de ser así. Me gustaría acelerar mi transformación;
evolucionar más rápidamente.

Por primera vez vi cómo le brillaban los ojos a Bekech al mirarme de soslayo.
Creo que empiezas a captar la esencia de lo que está debajo del agua.

No hay peor cárcel que la que te gusta


de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

Ejercicio III

ESTRATEGIAS CHAMÁNICAS

Finalmente entregué a Bekech una lista de más de 500 personas, con la


referencia de por qué influían en mi vida, por qué eran importantes o por qué
intercambiábamos energía. Encontré nombres de políticos o de personajes
históricos. De personas con las que sólo conviví un par de horas o personas que
descubrí que, día a día, estaban presentes en mi vida, en mis pensamientos y en
mis sentimientos. Entendí por qué Bekech lo comparaba con una telaraña. Yo
realmente estaba influenciado por los demás. Era como una mosca en mitad de
una telaraña, inmóvil, pero, eso sí, feliz. Esta era la realidad o lo que siempre
había creído.

Casi cualquier persona


puede moverte de tu tranquilidad y de tu estabilidad.
Dependes de la aceptación o del rechazo de los demás
de Los recuerdo robados a las estrellas muertas

- Cada uno de nosotros tiene que tener una estrategia de vida -


comentó Bekech en forma solemne- Ahora todo tu ser entiende la maraña en la

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que hemos caído al nacer en este lugar. Cada uno ha diseñado una o dos
estrategias para manipular a los demás. Algunas son efectivas, pero, en su
mayoría, caducan con el tiempo. En nuestras estrategias buscamos agradar a
los demás o agradar a Dios para que vea que somos buenos cristianos y nos
recompense como a Job. Unas estrategias son las de los seductores, otras las de
los estudiosos o los comerciantes o los empresarios o los políticos. Cada una se
mueve en función de lo que somos o queremos ser.

Bekech y Jorge habían reunido nuevamente al grupo con el que habíamos


hecho la danza de la muerte para trabajar el fin de semana:

Bekech y Jorge procuraban siempre reunir a un grupo de 42 personas para


trabajar. Nos encontrábamos sentados en un claro del bosque. Un lugar sencillo, de
buen gusto, verde y acogedor. Ellos sentados sobre de unas piedras y nosotros tirados
en la hierba. Miré a Bekech. Su rostro de indio lacandón, su cabello largo, su cuerpo
delgado, su mirada, dejaban ver una profunda soledad. Parecía cansado y
desilusionado de sus aprendices. Jorge me había contado que en su juventud había
sido un alumno perfecto, siempre dispuesto a hacer lo que el maestro le dijera. Era el
orgullo de todos y siempre el ejemplo a seguir. Me daba cuanta que lo admiraba,
aunque alcanzaba a distinguir un amor-miedo; un amor-rechazo hacia su persona y
hacia lo que él representaba.

- Cortar esos hilos de luz requiere la destreza de un cirujano


plástico; cualquier pequeño error desfiguraría tu rostro.

Jorge rió de la broma que yo no entendí.

- Si no, miren a Jorge. Debieran haberlo conocido en su juventud.


Era el niño hermoso de Dios. Ahora vean como quedó. Ustedes pueden quedar
peor.

Todos reímos de lo cómico del comentario. Era hermoso estar con ese
grupo, en ese lugar, con esas enseñanzas. Pero algo se me escapaba dentro de toda
esta cosmovisión del mundo.

- Aunque haya quedado desfigurado por el conocimiento, - dijo


Jorge con una sonrisa de oreja a oreja y sin la más mínima impresión de
haberse sentido molesto u ofendido- por primera vez me gusto a mí mismo
cuando me miro al espejo.

Jorge era alto y de facciones refinadas. Su cuerpo era grande y fornido. Sus
ojos brillantes y su eterna sonrisa daban la impresión de ser una persona que no
tuviera nunca problemas en la vida; siempre tan decente, tan trabajador. Todo lo

61
sabía hacer bien. A diferencia de Bekech, Jorge me transmitía una gran
tranquilidad.

- Lo que les voy a enseñar ahora se llama una estrategia chamánica.


Bekech hablaba continuamente mientras yo los observaba. Es el principio de
una larga lucha. Bailar con la muerte ha sido como un sueño raro que nos ha
llevado a un cambio en nuestra existencia. La estrategia chamánica es lo que
nos permitirá realmente cambiar nuestra vida y darle una nueva dirección.

LOS CUATRO CÍRCULOS DE ACCIÓN

Tú le enseñas al mundo la manera de tratarte


y escoges a la gente que quieres que tenga influencia en tu vida.
La manera en que te trates a ti
es la manera en que los demás te van a tratar

de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

- Coge (toma) la lista de las 50 personas que más influencia tienen


ahora en tu presente. -dijo Bekech-

Mal asunto, yo tenía una lista de 500 personas, pero no la lista de las 50 que
más influyen en mi presente.

Comenzaremos por la manera más sencilla de alejarnos de los vampiros


energéticos, y es: ¡Alejándonos!

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TERCER CÍRCULO DE ACCIÓN

Es para aquellas personas, parásitos, vampiros;


seres nefastos de los que debes alejarte discretamente y sin que ellos lo
sepan, vean o perciban. En el tercer círculo neutralizas las telarañas energéticas
alejándote de ellas hasta que se disuelvan o hasta que se rompan.
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

- En el tercer círculo vamos a poner a todas aquellas personas a las


que vamos a dejar de ver. Personas a las que consideramos parásitos para
nuestra vida; aquellas personas a las que consideremos nefastas o inservibles
en el mejor de sus defectos.
- ¡Fuera drogadictos, pendencieros, vampiros críticos, violadores y
asesinos! - dijo Jorge con una cara que hizo que todos nos echásemos a reír.
- El tercer círculo es el basurero. Se van a alejar de todas esas
personas que deterioran su energía. A estas personas simplemente no las van a
ver ni siquiera para tomar café. Van a dejar de hablar con ellas; simplemente
las hacen desaparecer de su existencia, inmediatamente.
- ¿Y si me los encuentro en la calle? -dijo con voz tímida Jorge
imitando a alguno de sus aprendices-.
- Entonces les saludas con mucho cariño y mucha amabilidad -
contestó muy ceremoniosamente Bekech-.
- ¿Y si después de dos años en los que no he visto a mis amigos
drogadictos a los que tanto quería en la universidad, me invitan a una
fiestecita? -preguntó Jorge imitando a una mujer que quiere divertirse un poco-
.
- Entonces vas a una fiesta, ¡pero sólo a una! - dijo Bekech
hablándole a Jorge como si fuera un papá exigente-.
- ¿Y mi jefe, y mi padre? - dije pensando que no podría dejar de
verlos-. No puedo dejar de ver a mi jefe, me despiden del trabajo y luego ¿qué?

Bekech y Jorge se miraron a los ojos y luego se echaron a reír.

- ¿A dónde vamos a poner a este sabio -dijo Jorge a Bekech- no


podemos deshacernos de él, si no, de qué vivimos, quién va a pagar por venir a
nuestros cursos?
- ¿Qué te parece Jorge -le dijo Bekech al oído como si quisiera
decirle un secreto que yo no pudiera oír - qué te parece si inventamos un
segundo círculo para poner a Josè en él?

63
- Si -dijo Jorge continuando con su broma -, es verdad ¿Qué hago
con mi jefe o con mi esposa, con mis hijos, con el presidente del país, qué hago
con mi abuelita?¿La puedo llevar a una fiestecita conmigo, a una sola, y luego
dejo de verlos?.

Todos reímos de la comicidad de Jorge, pero también nos dábamos cuenta de


que sus bromas eran muy serias.

- Sí, vamos a inventar el segundo círculo -contestó Jorge-, para


congelar a los pesados como José -rieron mientras me miraba-.

SEGUNDO CÍRCULO DE ACCIÓN

Son personas a las que no puedes dejar de ver.


Tienes que neutralizarlos urgentemente,
no dejar que afecten en lo más mínimo a tu vida.
No son personas buenas o malas, son peligrosas.
Casi siempre son vampiros energéticos o gente que te quiere.
Tú no puedes sentir nada bueno por ellas o nada malo.
Cultivas la indiferencia, la astucia, el control.

de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

En el segundo círculo, vamos a poner a aquellas personas que logran jugar con
nuestros sentimientos, nuestras emociones, nuestro destino. Personas que tienen
poder sobre tu vida. Escucha bien: Tienen poder sobre ti.

- Bekech, realmente mi jefe es despreciable ¿Cómo es posible


conseguir que no me importe lo que él haga? -preguntó Adela-.
- Mira Adela -contestó Bekech -, si en este momento llegara tu jefe
y te dijera: “¡Señorita este trabajo es una porquería!”… te echaría a perder el

64
día. Este hombre, con su frase, ha robado tu energía y tu estabilidad, tu respeto.
Tú se lo permites y le das todo el poder.
- A ti, Joel. Si Jorge te dice que eres el que peor ha trabajado en este
grupo (lo que desde luego no es cierto porque eres el mejor) él ya ha tomado el
poder sobre ti. Te pondrías a dudar y a cuestionarlo a él y a ti. El comentario
que acabo de hacer (de que eres el mejor), igual es suficiente como para echar
a perder tu aprendizaje sólo por alimentarte la importancia personal.
- José, he visto cómo manejas tu automóvil. Si una persona te toca
el claxon y te recuerda a tu madre -rió de su propia broma- ese desconocido
tiene tanto poder sobre ti que te enojarías, te indignarías y perderías el control.
Discutirías o pelearías a golpe de claxon con ese desconocido.
- Tú, Rocío,-continuó Bekech- ¿Acaso el amor que sientes por tu
pareja no está condicionado a que te quiera? Cuando tu pareja te trata bien, eres
feliz. Cuando es insoportable (por sus problemas personales), tú te llenas de
angustia y de problemas emocionales. Tu capacidad de aprendizaje está
supeditada a su estado de ánimo.
- Pero yo no lo quiero perder, -se quejó Rocío-.
- Yo no hablo de perder a nadie, sino de que tú recuperes la
capacidad de controlar tus sentimientos y, por consiguiente, tu vida. Tú le diste
a él tu corazoncito y cuando está de buen humor (casi siempre, ¡bendito sea
Dios!) lo cuida con esmero, pero cuando se queja, critica o está de mal humor,
hace pedazos tu energía y tu autoestima.
- ¿Pero acaso podemos vivir sin sentir? -dije bastante molesto- Tu
propuesta es que nos convirtamos en máquinas insensibles.
- No, mi propuesta es exactamente lo opuesto: quiero que se
conviertan en seres humanos que puedan decidir qué sentir en cada momento
de su vida; que sus sentimientos no sean sólo respuesta a los estímulos de los
demás.
- El segundo círculo es para quitarle el poder a los demás y
recuperar las riendas de tu propia vida, -concluyó Jorge-.

- No me he olvidado de tu pregunta Adela -le dijo guiñándole un


ojo-, espera a que lleguemos a las frases directivas.
-

Tú no eres consciente,
pero la mayoría de la gente que está a tu alrededor,
tiene poder sobre ti;
sobre tus sentimientos,
sobre tus actos.

De Los recuerdos robados a las estrellas muertas

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PRIMER CÍRCULO DE ACCIÓN

En este círculo solo vas a colocar a las personas que embellecen,


engrandecen
y fortalecen tu existencia.
Son personas en las que puedes confiar plenamente;
son personas a las que se tiene que tratar con mucho amor y cuidado.
Son la flor y nata de tu mundo, lo mejor de tu existencia.

- En este círculo -comenzó hablando Bekech-, sólo debes poner a


aquellas personas que son exquisitas, tus verdaderos amigos, tus consejeros,
tus maestros. Son personas que, a pesar de sus defectos personales, tienen la
función de engrandecer tu existencia, de enseñarte y apoyarte en tu mejor
intención. Son los amigos entrañables que durarán toda la vida.
- Yo aquí meto a Bekech sin dudarlo - dijo Jorge abrazando
orgulloso a Bekech- y a Manuelita, Coral y a Jesús y a Paqui y a Luis y a Chari
y Minerva y a Joanna y a Christopher; a Eva a Toni, a Agustín, a Ju, a Alberto,
Esperanza; a Montse a Verena… y siguió con un larguísimo etc.
- Jorge empezó a enumerar a cerca de unas cincuenta personas y a
comentar cómo confiaba en ellas y por qué. Bekech, muy paciente, lo miraba
con orgullo y aceptación.
- Eres muy afortunado. Realmente Dios te quiere mucho al haber
puesto tanta gente hermosa a tu alrededor – dijo Bekech imitando las bromas
de Jorge-. Yo a mis amigos los cuento con los dedos de una mano.
- Afortunado, afortunado ¡Una mierda! - dijo Jorge actuando como
si montara en cólera - Jorge no es ningún afortunado, le dijo a Bekech
señalándolo con el dedo y hablando en tercera persona- Su trabajo le ha
costado. Es un chamán de primera. Él ha elegido y ha cuidado a cada una de
las personas que están en su círculo. Tener a tanta gente ahí ha implicado un
trabajo de muchos años, y mucha dedicación.

Jorge me miró a los ojos un día y me dijo: “Tú estarás en mi primer círculo de
acción, pero todavía no”. Y todos rieron.

- Dime, José: ¿Quién de este grupo crees que te va a poner hoy en


su primer círculo? -me dijo Bekech mientras miraba con cara de complicidad a
Jorge- ¿Quién va a volver a confiar en ti y a poner su corazón en tus manos?

66
Yo pongo mi corazón en las manos de Jorge; sé que nunca me dará una
puñalada por la espalda y que siempre me dirá las cosas con franqueza. Pero en
ti ¿Quién?
- Yo pondría a José en mi primer círculo, dijo Adela tratando de
rescatarme de la situación donde me habían puesto, y participando de la broma
seria a la que era sometido.
- Muy bien señorita - Bekech miró de pies a cabeza a Adela- ¿Sabe
usted lo que implica meter a una persona dentro de su primer círculo? : es casi
como si fuera su responsabilidad y su obligación que sea feliz cuando esté
cerca de usted. Elegir a una persona se trata de una simbiosis de oro. ¿Acaso
alguno de ustedes se ha dado cuenta de la finura con la que trata Jorge a las
personas que mencionó? Realmente a veces suda la gota gorda para cuidarlos
sin perder su temple e indiferencia.
- ¿Y si alguna de esas personas que he colocado en mi primer
círculo de pronto se convierte en una persona insoportable? - pregunté un poco
temeroso de lo que fueran a decirme-.
- Vaya, al fin una buena pregunta -dijo Bekech mientras reía
mirando a los demás-.

Empezaban a cabrearme

- Así no va a querer meterme en su primer círculo -le dijo Bekech al


oído a Jorge-.
- Pues no vuelvas a hacerle bromas - le dijo Jorge haciendo la
pantomima de que nadie le escuchaba- , las aguanta casi todas.
- Casi. Ya lo dijo Buda: “Si aflojas las cuerdas del violín,
desentona. Pero si pones mucha presión, se rompen”.

CÍRCULO 1 ½

En este círculo mueves a las personas a tu gusto


del primer círculo al segundo.
Siento cuando eres exquisito.
Estoy en paz interna cuando pierdes tu tranquilidad

- Existe el círculo 1½ -dijo Bekech- No es una broma, va en serio.


Les doy un ejemplo sencillo: Cuando mi esposa es maravillosa está en mi
primer círculo, pero cuando se queja o es insoportable la pongo en el segundo
círculo. ¡Qué fácil!, ¿No creen?

67
- ¡Eso es una maravilla! - interrumpió Jorge- si eres maravilloso te
quiero y te cuido y si eres insoportable no siento nada ni digo nada, te meto al
congelador.
- Esto, escúchenlo bien – continuó Bekech -, es para cuidar a las
personas a las que quieres; es para cuidarlos de ti y para cuidarlos de ellos
mismos. A veces una persona maravillosa dice una tontería: en ese momento
no sientes nada; y cuando es maravillosa, sientes mucho.
- Si yo soy indiferente con mi novio -dijo Rocío- se va a enojar más.
- Probablemente sea así, Rocío, hasta que lo eduques -continuó
Bekech - En nuestra sociedad existe un pequeño problemita: Cuando yo estoy
bien y tú estás mal, yo siento y me resiento mucho de tu malestar. Cuando tú
estás bien o maravillosamente bien, normalmente estoy demasiado ocupado,
cansado o trabajado como para poder disfrutar de tu bienestar. A veces, la
pareja misma, la persona a la que más amas, con un gesto o un tono de voz o
un simple comentario fuera de lugar, te roba el gusto de estar con ella. Nuestra
idea es invertir la situación. ¡Es tan fácil robarnos el gusto de amar a quien
amamos!. Necesitamos disciplina; mucha disciplina y una estrategia. Esta es
nuestra estrategia chamánica.
- ¿Y dónde me coloco a mí misma?, preguntó Adela.
- ¿En dónde te puedes colocar, cariño?
- Si no cambio, si sigo como estoy siendo, acabaré poniéndome a mí
misma en el tercer círculo de acción.
- No es posible porque todos los días tienes que mirarte en el espejo.
Por el momento colócate en el segundo círculo de acción. Tendrías que
convertirte en tu mejor amiga, tu mejor apoyo, y luego tú, a ti misma, te
colocarías en el centro de tu primer círculo de acción. Mientras estés en el
segundo círculo de acción, tienes que aprender a ser muy indiferente con tus
propios pensamientos y tus propios sentimientos.

Algo dentro de mí comprendió en ese momento a qué se referían: lo importante


de poder elegir uno mismo el sentimiento adecuado. Casi siempre estímulos erróneos
nos hacen percibir cosas erróneas. Me di cuenta de que somos como una veleta, son
los estímulos externos los que nos permiten sentir.

- ¿Cómo puede luchar una veleta contra la dirección del aire?

- Siendo una veleta chamánica de primera -contestó Jorge.

68
Ejercicio IV

LAS FRASES DIRECTIVAS

Sólo la disciplina mental


te permite tener la indiferencia necesaria
para poner a la gente en el segundo círculo de acción.

Sólo la disciplina mental


te permitirá llegar a la paz interna que buscas.

- Cuando tu jefe llegue a decirte: “Adela, tu trabajo es una


porquería”. Tú mueves la cabecita muy despacio, como si dijeras sí mirando al
suelo en forma casi sumisa, pero dentro de tu mente, en total rebeldía e
indiferencia, te dices:

“Nada de lo que dice mi jefe, en este momento, significa nada para mí”

- Utilizas las frases directivas, y con ellas llevas a tu mente a la


indiferencia. La indiferencia amable es la llave de toda esta estrategia.

Veía con mucha claridad el juego de Bekech. Con el tiempo estas frases fueron
la tabla de salvación de mi vida.

- Cuando tu novio te hace sentir mal, Rocío; te hace sentir tonta o


poca cosa, usa las frases directivas:

“Nada de lo que siento en este momento por mi maravilloso novio


significa nada para mí”.

“Nada de lo que hace en este momento significa nada para mí”.

- Si Bekech se acerca a ti -dijo Jorge- y te dice: “No me caes bien”


Logra provocar tu mayor enojo. Entonces lo pones en el segundo círculo de
acción y dices:

69
“Nada de lo que escucho o siento en este momento por Bekech,
significa nada para mí”.

- Si ves a Jorge, y con tu gran capacidad de observación ves sus


defectos, para no perder la oportunidad de apreciar sus grandes virtudes, te
dices:

“Estos defectos que veo en Jorge no significan nada para mí”.

Este pensamiento (especifica cual), no significa nada para mi.


Escapar de este pensamiento me permite escapar del mundo que me
atormenta.

Este sentimiento (especifica en qué parte de tu cuerpo lo sientes),


no significa nada para mí.
Este sentimiento de ____________ lo transmuto en buena suerte.

Esta crítica (hacia mi jefe, mi pareja, mi maestro) no significa nada para mí.
Sólo es una imagen que yo he creado.

- Las personas tienen el poder sobre ti cuando te hacen enojar,


quedar en ridículo, te humillan o no aprecian lo que haces o lo que eres -dijo
Bekech-.
- Es injusto -dijo Adela-, yo trabajo y trabajo, ayudo a los demás y
no hay quien se dé cuenta. Ni las gracias me dan ¿Cómo aplico esto que dices?
¿Cómo transmuto esta sensación que me resulta aplastante y agotadora? -dijo
poniendo una simpática cara de súplica-.

No existe la justicia,
es una hermosa utopía.
Existen las leyes
y la ley del más fuerte;
la ley del que tiene más energía

- Primero te ubicas: ¿Es un sentimiento o un pensamiento?


- Los dos -dijo sin dudarlo- Un pensamiento que se repite: Mi jefe
no aprecia lo que soy, no es justo, no me sube el sueldo. Eso me crea en el
pecho una sensación de presión.

70
Un pensamiento:

- Bien -dijo Bekech- ya has localizado la fuga de energía.


Bombardeas al pensamiento con ésta frase:

Este pensamiento no es mío…fuera de mí.


Este pensamiento viene conmigo pero no es parte de mi realidad…
fuera de mí.
Este pensamiento no significa nada para mí…fuera de mí.

- Y pasas la mano por encima de tu cabeza como si te peinaras o te quitaras


una basurita -concluyó Bekech.

Bekech hizo la pantomima de que se quitaba una telaraña, la arrojaba lejos y


ésta, como si estuviera pegada a una liga, regresaba y hacía impacto en su cabeza.

- ¡Qué difícil es sacar un pensamiento -dijo Bekech volviendo a


repetir su pantomima-. Hace falta hacerlo cientos de veces!

Este pensamiento es como el lodo de mis zapatos:


Va conmigo pero no es parte de mí,
fuera de mí

Un sentimiento:

Si descubres un sentimiento, que es algo que está dentro de tu cuerpo y no


en tu cabeza, pones la mano derecha en el estómago y la izquierda en el punto
donde sientes el sentimiento. Comienzas a masajear en círculos creando espirales.
Con la mano izquierda círculos grandes sobre tu cuerpo. Con la derecha círculos
pequeños sobre tu estómago a la vez que haces una invocación mental:

Trasmuto esta energía en buena suerte.

- Si ese sentimiento es un bloqueo energético, esa energía la


podemos canalizar a tu favor. Si esa energía es negativa y nociva, con la mano
izquierda haces la pantomima de que estuvieras sacando algo, como un chicle
pegado. Y dices mentalmente:
Fuera de mí.

71
- Voy a estar muy graciosa -dijo Adela- masajeándome en la
oficina. Me van a despedir o peor, me van a violar porque van a creer que me
estoy calentando -dijo entre risitas-.
- Este ejercicio se practica primero a solas en la intimidad de tu
casa. Cuando lo aprendes y tienes que hacerlo en un lugar público, lo haces
mentalmente o con un pequeñísimo movimiento que no llame la atención.
-

Importantísimo: Nunca llamar la atención.


Tampoco deben saber que estás repitiendo las frases directivas.

- ¿Y si queremos llamar la atención del jefe? -dijo Adela con cara


de seductora-.
- ¡Bajo ninguna circunstancia!. La idea de los círculos de acción y
nuestra estrategia chamánica es salir de problemas no meternos en ellos.
- No vayáis por ahí diciendo - interrumpió Jorge - :“Fulanita,
perdona que no hable contigo pero acabo de meterte en el segundo círculo de
mi vida; entonces, nada de lo que digas o hagas significa nada para mí” Porque
si van por ahí confesando esta estrategia, les aseguro que se meten en
problemas, y gordos.
- Las personas que tienen influencia sobre ti no van a querer, bajo
ninguna circunstancia, perder su poder. Ellos nunca deben saber que están
perdiendo el control y la influencia hasta que sea demasiado tarde.

Para poder desarrollar con efectividad


esta estrategia,
hace falta mucha discreción
y mucha astucia.

72
LA COSMOVISIÓN DEL NACIMIENTO

Son los hijos los que eligen a los padres


por sus virtudes y por sus defectos.
de Los recuerdos robados a las estrellas muertas

- Los padres no pueden ir al cielo y pedir: “Me da dos hijos y una


hija” No es así como funcionan las cosas, - comenzó su plática Bekech -. Hay
un plano anterior al nuestro, antes de nacer, de dónde venimos. Otro plano
intermedio, el astral. Y un plano posterior a donde van todas las almas, el cielo.
Al plano anterior al momento de la concepción, le vamos al llamar “El lugar
de donde venimos”.

En “El lugar de donde venimos” hay varias puertas. Cada uno de nosotros, en
un estado andrógino, tiene que cruzar esas puertas antes de descender a este plano,
que es la matriz de la madre; la tercera dimensión.

No existe una ley única y tal vez sea demasiado simplista el esquematizar el
nacimiento del ser humano. Así es que tomémoslo como una metáfora chamánica
creada por mí, por mis vivencias y mis recuerdos personales.

Paso a paso antes de nacer de acuerdo a esta metáfora.

1er paso: Reconocer que llegó el momento de descender al plano humano.


2º paso: Estar de acuerdo con la experiencia que te toca vivir.
3º paso: Elegir, entre las posibilidades que te asignan, los padres que necesitas
para la experiencia que te toca.
4º paso: Cruzar una puerta o varias, por las que vas a nacer.
5º paso: Estar presente en el momento de la concepción.
6º paso: Ir al plano donde se escribe el libro de la vida.
7º paso: Regresar al vientre de tu madre en el segundo mes de gestación.
8º paso: Percibir la realidad desde el estado acuoso, la matriz.
9º paso: Nacer.

73
LAS 7 PUERTAS DEL NACIMIENTO

- Esto no me lo contaron, yo lo viví –dijo Bekech con voz solemne


y casi lágrimas en los ojos - Lo vi y me lo enseñaron en el astral. He tenido dos
veces la experiencia fúnebre de la muerte clínica. En esas dos ocasiones me ha
recibido mi maestro y me ha enseñado cómo nacen los seres humanos. Fue
como una excursión en la que yo era testigo de todo lo que les voy a contar.

1ª PUERTA DE NACIMIENTO

- Aquí nacen aquellas personas que no quieren nacer -dijo Bekech-.

Aquí, Bekech y Jorge, hicieron una magnifica pantomima. Nos deleitaron con
su explicación y con su alegría. Bekech se puso una enorme barba blanca, de esas que
se usan para disfrazarse de Papá Noel. José, con una tiza, dibujo unos círculos en el
suelo.

- Yo soy Dios en su versión femenina; la Gran Madre creadora del


universo

Su público estaba encantado, todos rieron.

- “¡Jorge!”, gritó Dios.

Jorge salió corriendo y puso cara de niño travieso que espera ser regañado.

- “Dígame, Señor Dios”.


- “Es hora de que bajes nuevamente a la tierra”.
- “¿Tan pronto? No quiero bajar”.

Jorge hizo como si se asomara a un agujero y dijo:

- “¿En México? No quiero, no quiero, no quiero”.


- “Anda Jorge, es momento de vivir la experiencia y superarla”.

Bekech se quitó la barba y dijo:

74
- Jorge realmente tendrá una mala vida. Su experiencia será
realmente desastrosa desde su concepción hasta su muerte. Pero siempre existe
la posibilidad de invertir la experiencia y triunfar como ser humano.

2ª PUERTA DE NACIMEINETO

- “Jorge”. Llamó Dios.


- “Dígame, Señor Dios”.
- “Te toca nacer”
- “¿Tan pronto?”
- “Sí, tan pronto”
- “Sólo han pasado 100 años terrestres. No quiero bajar”.
- “Anda Jorge, mira en donde vas a nacer”

Jorge hizo como si se asomara en un segundo círculo que había pintado


Bekech.

- “Mira Jorge, vas a caer en blandito. Mira, vas a nacer en México.


Allá abajo está tu anterior pareja. Te toca nacer siendo hijo de tu anterior hija.
Ahí está tu antiguo hermano. Vas a ser terapeuta. ¡Mira en que casa más mona
vas a vivir! Mira Jorge, ahí está Bekech para ayudarte…

Y Jorge nace. Su vida no va a ser fácil, pero estará rodeado de gente que le
quiera y de muy buenas oportunidades para cumplir la tarea para la que nació.

3ª PUERTA DE NACIMENTO

Jorge entró corriendo en escena:


- “Señor Dios, ya quiero nacer”.
- “¿Cómo? - dijo Dios - pero si acabas de morirte”.
- “Sí, sí, pero tengo ganas de nacer nuevamente”.
- “¿Tan pronto?”.
- “Sí”.

Bekech hizo como si se asomara en un tercer círculo pintado en el suelo.

- “¿Quieres nacer en México? ¿Como hombre? ¿En el siglo XX?...


te vas a arrepentir”.
- “Sí, sé que me voy a arrepentir, pero quiero bajar”.
- “Lo que quieres no va a ser nada fácil mi querido Jorge ¿Seguro
que quieres nacer?”.
75
- “Sí”. Dijo contundente.

Y Jorge nace y se arrepiente. Nace con muchas ganas de nacer pero con miedo
de nacer.

4ª PUERTA DE NACIMIENTO

Esta es la puerta de las almas viejas: Antiguos maestros o maestras, vírgenes,


sacerdotisas, santos, beatos, pitonisas, budas o chamanes, antiguos maestros de la
Atlántida o Lemuria, que ya cumplieron su tarea de existencia y ahora sólo quieren
vivir nuevas experiencias para acrecentar la conciencia.

Ejemplo 1
- “Dime, Jorge”.
- “Quiero bajar a vivir la experiencia de tener una vida perfecta, sin
problemas”.
- “Muy bien, elige lo que quieras y necesites. Nacerás con una
burbuja de protección alrededor de ti”.

Ejemplo dos:
- “Dime, Jorge”.
- “Quiero vivir una nueva experiencia, vivir en un paraíso
perceptual. Tener un síndrome de Dawn o algo parecido”.
- “¿Quieres que tu experiencia sea fácil o difícil?”
- “Fácil”.
- “Muy bien, nacerás en Alemania”.

Ejemplo tres
- “Sabes que no será fácil, mi querido Jorge”.
- “Quiero cumplir una tarea allá abajo, pero no quiero olvidar mi
esencia ni perder mi comunicación contigo”.
- “Si quieres acordarte de mí, pon problemas en tu vida. Cuando
tenemos problemas es cuando buscamos la conexión con lo divino”.

5ª PUERTA DE NACIMIENTO

- “Jorge”.
- “Dime, Señor Dios”.

76
- “Necesito que bajes a cambiar a la humanidad. Tienes una tarea
mucho más compleja que las anteriores. Tu presencia en el mundo dejará
huella”.
- “Estoy listo para bajar cuando lo necesites”.
- “Hasta los treinta y tres años serás una persona del montón; vivirás
en el borde existencial. Después se desarrollará tu alma vieja y prepararás la
tarea para la que te mando: la transformación del medio social donde vas a
nacer”.

Sólo una de cada 10 personas que bajan por esta puerta logra su cometido.

- A las almas viejas se las reconoce por su capacidad de reírse de los


problemas. No importa lo duros que sean los palos que les da la vida. Ríen
aunque lloren. Saben reír de todo y, sobre todo, de si mismos. Las almas viejas
se pueden activar a mitad de un ciclo de existencia, sobre todo después de un
lance con la muerte.

Ejemplos de la puerta 4, son Frida Khalo o Gandhi, Budda o el mismo Hitler


que, aunque fracasó en su tarea, pues su deber era ayudar a la humanidad, transformó
el orden social.

6ª PUERTA DE NACIMIENTO

Explicó Bekech:

Esta es la más extraña de todas. En las otras cuatro puertas nacen almas
humanas. En esta puerta nacen almas de otras especies o entidades inorgánicas. Hay
personas que se identifican más con una raza animal o simplemente saben que no son
de este mundo; esta no es su raza y este no es su planeta.

Por ejemplo, el alma de un delfín que quiere probar la existencialidad humana.


Se va a arrepentir pero quiere probar. Es el caso de Jack Mayol (el gran azul); aunque
su cuerpo es de humano su alma es de delfín.

También es por esta puerta por donde entran las conciencias que vienen del
mundo de las hadas. La mitad de los que están aquí vienen de ese mundo. Dejan su
lugar de origen con la esperanza de poder ayudar a esta humanidad; de poder utilizar
su capacidad mágica en el mundo de los humanos. Son personas que, siendo niños,
echan de menos sus alas. Incluso buscan las cicatrices en la piel de su espalda. Se
sienten adoptados, como si sus padres no fueran sus padres. Tienen una gran
añoranza por su otra casa y su otra familia y tienen una gran nostalgia por su mundo
77
de las hadas, por dormir en una flor o comunicarse con las plantas y animales.
Continuamente se sienten fuera de lugar y casi toda su existencia la emplean en
buscar a su familia, intentar curar al mundo, darle un regalo a Dios por la oportunidad
de vivir esa experiencia.

Muchas veces al cruzar la 6ª puerta también se tiene que cruzar por algunas de
las puertas anteriores.

7ª PUERTA DE NACIMIENTO.

Es como un basurero existencial. Lo que no sirve para nada lo arrojan aquí. Es


el lado oscuro de la realidad. Seres deformes en su energía, incluso en su cuerpo,
demonios o presencias de baja densidad energética, personas o seres realmente
peligrosos, depredadores o parásitos del universo. Lo que tu entiendas por personas
malas con premeditación y alevosía, seres que no puedes imaginar como humanos,
nacen por aquí.

EL LIBRO DE LA VIDA

Bekech nos explicó:

Una vez asignada la puerta de nacimiento, se eligen los padres que se necesitan
para la experiencia a vivir.

Cada persona tiene una razón de ser


y una tarea asignada.

El alma asiste a su concepción con la esperanza de que entre los padres haya
energía, pasión y amor - en el mundo occidental es difícil que se den estas tres
posibilidades-. Después, el alma sube nuevamente y va al lugar donde se escribe el
libro de la vida. Es un libro en blanco con un principio y un final. En este libro
escribes tu tarea de nacimiento, tu regalo a la vida (tu aportación a la humanidad o al
mundo), y cuál es la experiencia que vas a vivir.

En el Libro de la Vida se escribe tu destino. Lo escribes tú mismo con ayuda de


una fuerza consciente e independiente de ti (aunque de alguna manera eres tú
mismo). A esa fuerza la llamamos el “Yo Superior” o “Guía Espiritual”.

78
En este libro está escrito tu futuro y una parte de los acontecimientos que vas a
vivir. La mitad del Libro está en blanco, la otra mitad la escribes tú. La parte en
blanco es algo que tienes que escribir mientras vives tu vida; mientras vives la
experiencia. La otra mitad ya está escrita, pero no definida. Esto es: la página
izquierda está escrita y la derecha en blanco.
La página de la izquierda es tu destino, escrito por ti y tu Yo Superior, antes de
tu nacimiento.

La página de la derecha está en blanco; es tu libre albedrío. Son los


acontecimientos y la manera que tengas de resolver las condiciones de la página
anterior.

Por ejemplo:

Aquí está Eva. Estaba escrito en su destino que tenía que encontrarse con
Bekech y con Jorge. No había poder sobre la tierra que no implicara este encuentro.
Pero la manera que tenga de relacionarse o lo que aprenda de nosotros, depende de
ella y de sus decisiones en su presente inmediato.

Lo digo de otra manera: Tu destino, Eva, es vivir y comprar tu casa, tu libre


albedrío es cómo la decoras. Tu destino es ser terapeuta infantil, tu libre albedrío es
triunfar o fracasar. Tu destino es encontrar una pareja, casarte y tener una familia es
tu libre albedrío. Eva, tu destino es encontrarte con el amor de tu vida, si al final te
quiere o te detesta sólo depende de ti y nada más que de ti. Eso no está escrito,
depende de tus actos; de tu manera de ser, de tu forma de tratarle.

El Libro de la Vida siempre se puede rescribir. Podemos regresar a la Gran


Biblioteca universal (donde se guarda la conciencia de todos los seres vivos) y
podemos, con la debida autorización, cambiar lo que hemos escrito, tanto del pasado
como lo que va a ocurrir en el futuro. Para eso hace falta mucha energía, mucha
ligereza y mucha conciencia, que es lo que vienen a buscar hoy aquí.

79
CORTANDO TELARAÑAS ENERGETICAS

- El camino chamánico no es fácil Bekech, es muy intricado y


complejo - dije en un momento de descanso - Sé que tienes que hacer las cosas
a escondidas y eso me deja el sabor de estar haciendo algo malo.
- Mira José, la vida no es fácil, el camino chamánico es fácil, lo
difícil para ti es salir de la maraña donde estás metido. Es necesario ir poco a
poco cortando esos hilos energéticos que te unen con las demás personas.
- Pero... el camino chamánico ¿Es honesto?
- Es lo más honesto que podrás encontrar contigo mismo. Para ti la
honestidad es ir por ahí completamente recto y transparente, recibiendo
tortazos de Dios y de los demás. La rectitud del chamán depende de los pactos
que éste ha hecho con Dios y consigo mismo. Tú eres un mono albino; vas para
santo; un mono albino en un hábitat como el que vives ahora, esta ciudad con
sus 5 millones de habitantes, que es una selva. En esta selva necesitas tener un
magnifico camuflaje para lograr dejar de ser víctima; para convertirte en
cazador. No cazador de las demás víctimas, no. Lo que nos interesa es ser
cazador de la conciencia.
- ¿Y si no quiero dejar mi rectitud, si no quiero dejar de ser un
mono blanco, si no quiero ir a cazar conciencia?.
- Entonces, mi buen José, da las gracias y aléjate de nosotros. La
conciencia es pegajosa -me dijo como si tuviera lástima por mí - tú estás
saliendo del fondo de la botella donde está la mayoría de la gente común y
corriente. La gente que ves aquí son la élite, son los que se acercan al cuello de
la botella, son los que quieren salir o por lo menos asomarse, son lo mejor de la
sociedad. Están en condiciones perfectas y no lo saben, siguen atados a sus
telarañas energéticas, sobre todo a su padre y a su madre.

MEDITACIÓN DE LOS PADRES

Todo el grupo estaba en una sala. Apareció un viejo alumno de Bekech a quien
hacía llamar Manolito. Bekech y Jorge lo saludaron con mucha camaradería. Parecían
un grupo de adolescentes traviesos listos para hacer una de las suyas que,
naturalmente, nos implicaría a todos. Me sorprendía que mantuvieran tan viva su
esencia de niños; armonizaban mucho con ella y contrastaba con la fuerza,
temperamento e impecabilidad con la que realizaban cada uno de sus actos. Los tres
eran de personalidad fuerte pero con un alma siempre dispuesta a la alegría.

Manolito, un hombre maravilloso, noble, bonachón, cultivador de las artes


marciales, querido por todos, sobre todo por las mujeres, era ese tipo de persona que

80
siempre trasmite confianza. Nunca estaba sólo porque siempre había alguien que se
acercaba a él a preguntarle lo que no se atrevían a preguntar a Bekech o a Jorge.

Él comenzó la meditación, la continuó Bekech y finalmente la terminó Jorge.

Meditación con Manolito: (Puso de fondo la música de la película “Somewhere


in time”, de John Barry).

Entra en trance profundo, profundo, profundo. Respira inhalando


profundamente y contando hasta 8. Profundo, profundo, profundo. Tu cuerpo parece
de plomo… pesado y vacío. Tu alma se siente ligera, muy ligera, ligera, ligera.
Imagina que flotas y entras en otros estados de conciencia…profundo, profundo,
profundo.

Vas a imaginar, con pensamientos, sensaciones o imágenes en tu mente, que


estás caminando por un bosque. Imagínalo, siéntelo, piénsalo.

Imagina y siente el olor del bosque, el musgo, la tierra mojada, el olor a los
pinos.

Piensa en el verde del bosque, en las hojas verdes que hacen juego con el azul
del cielo

Oye a los pájaros cantar, escúchalos. Míralos volar. Escucha al viento


deslizarse entre los árboles.

Mira las ardillas correr entre rama y rama, y a las mariposas volar alrededor de
ti.

Escucha un riachuelo a lo lejos. Camina hasta él. Oyes el sonido de pequeñas


cascadas y pequeños remolinos y te deleitas ante tanta hermosura.

Siente cómo metes las manos y los pies en el agua fresca. Cómo tomas un poco
de agua y mojas tu rostro. El agua resbala por tu cara. Tomas un puñado de arena y se
pierde entre tus dedos.

Imagina que caminas por un sendero. Ves unas fresas rojas; cortas algunas y
las llevas a tu boca. Se produce una explosión de sabor. Sientes cómo las semillitas
de las fresas son trituradas por tus molares… tu boca se llena de saliva.

Llegas a un prado. Hay una gran cantidad de flores: Rosas silvestres de intenso
aroma. Acércate y huele. Inhala profundamente y empápate de su perfume. Hay
narcisos; busca su olor. Tus sentidos recuerdan perfectamente el olor embriagador de
las flores.
81
Caminas por el prado. El sol es agradable. Hay muchas flores pequeñas y
muchas mariposas.

En el centro del claro ves un campamento indio. Una anciana te llama. Te


acercas a ella; miras su rostro completamente lleno de arrugas. Viste con pieles y
plumas y está completamente adornada con amuletos, piedras y huesos.
Junto a ella hay unas piedras y unos troncos que sirven de asiento. En el centro
una pequeña hoguera.

Bekech tomó la palabra y Manolito guardó silencio:

“Bienvenido”, dijo la anciana “¿Sabes por qué estás aquí? Te voy a enseñar un
ritual para cortar telarañas. Pon mucha atención”:

“Mira al sendero; allá donde florece en rojo, allá. Distingue a dos personas que
se acercan caminando. Te resultan conocidas, descubres quienes son: Son tu padre y
tu madre. No importa si están vivos o en otro plano, son ellos. La luminosidad que
dejaron en ti ahora está aquí”.

“He traído su “yo superior” a éste lugar de poder, para que puedas hacer el
ritual que te estoy enseñando”.

“Míralos. Quizás están como la última vez que los viste o tal vez tienen la
imagen que conservas de ellos desde que eras un niño”.

“Imagina que la anciana te sienta sobre un tronco y frente a ti sienta a tu madre.


La anciana se coloca detrás de ti y te dice:

- Vas a hacer un ritual para cortar telarañas y para limpiar tu


luminosidad de la energía de tu padre y de tu madre”.

La india te habla suavemente en el oído:

- “Vas presentarle a tu madre tus reclamaciones; aquellas cosas que


no te gustaron de ella, aquello que te ofendió, que te desilusionó. Aquel enfado
que nunca fuiste capaz de decirle. Vas a presentarle tus reclamaciones.

- Madre: Quiero decirte lo que no me gustó de ti……


Quiero expresarte mis desilusiones, mis enojos….
Quiero reprocharte la falta de ayuda y la falta de cariño………
Quiero perdonarte por no haber estado allí cuando te necesitaba……

82
“Hay un momento de silencio en el que tú hablas mentalmente con tu madre y
le planteas tus reclamaciones personales……..”

“Imagina como tu madre, con lágrimas en los ojos y con la barbilla temblorosa,
te pide disculpas:

- Te pido perdón por no haber sido la madre que hubieras querido


que fuera. Te pido perdón por no haber hecho aquello que esperabas que
hiciera; por no haber tenido la fortaleza y la grandeza que tú hubieras querido
que tuviera. Soy así. Sé que pude dar más de mí, pero fue lo mejor que pude
hacer.

Ahora perdónala. Imagina que la miras a los ojos y le dices:

Madre: Yo te perdono.
Te perdono por lo que me has hecho
o por lo que yo esperaba que hicieras y no hiciste……
Madre yo te perdono.
Te perdono por lo que no hiciste.
Yo te perdono…

Imagina a tu madre dándote un abrazo mientras las lágrimas ruedan por sus
mejillas.

Ahora es tu madre la que te va a plantear a ti sus reclamaciones; sus


desilusiones, sus enojos:”

- Quiero decirte lo que no me gustó de ti. Quiero hablarte de esas


cosas que como madre me molestaron; de tu falta de apoyo y agradecimiento,
de tu falta de respeto y cariño:

“Vas a oír como tu madre dice aquellas cosas que le molestaron de ti. Vas a
escuchar sus reclamaciones y tú le vas a pedir disculpas:”

- Madre: Quiero pedirte disculpas por no haber sabido agradecer


quien eres y lo que hiciste; por no haber sabido qué hacer por ti. Quiero
pedirte perdón por no haber sido el hijo/a que tu querías tener. Quiero pedirte
perdón por las desilusiones, los enfados y los problemas que yo fui creando.
Madre, te pido disculpas.

“Hay un momento de silencio en el que hablas mentalmente con tu madre. Y


vas a escuchar como tu madre te perdona:”

- Yo te perdono.
83
La india se acerca a tus espaldas y te toca.

“Ahora vas manifestar tu amor y tu agradecimiento a tu madre. Vas a decirle


todas esas cosas hermosas que nunca te atreviste a decir. Vas a darle lo mejor de tu
corazón”

Madre, quiero decirte lo mucho que te quiero. Quiero manifestar mi amor


incondicional por ti; mi agradecimiento a tus atenciones, tus sacrificios y tus
cuidados. Quiero decirte cuántas cosas hermosas he vivido contigo. Quiero hablarte
de mis momentos sublimes. Madre, vivo gracias a ti.

“Hay un momento de silencio, en el que tú hablas mentalmente con tu madre.

Ves los ojos de tu madre llenos de lágrimas y amor”.

- Madre, te quiero. Gracias por ser mi madre. Madre, te amo.


Gracias por traerme a este hermoso mundo. Madre, gracias por darme la
oportunidad de ser quien soy, por cuidarme y amamantarme. Gracias, muchas
gracias.

“Ahora tu madre te va a decir las cosas hermosas que nunca te dijo y ahora
expresa para ti. Va a manifestar su amor hacia ti.

- Gracias por haberme elegido como madre, te quiero. Gracias por


los momentos sublimes y exquisitos que me has dado. Quiero darte las gracias
por preocuparte y ocuparte de mí. Quiero darte las gracias. Realmente me
siento orgullosa de ti; de lo que haces, de lo que eres. Eres mi mayor orgullo.

Te quiero, te amo, te adoro.

“Tu madre no resiste más y rompe a llorar. Tú la abrazas y la cuidas como si


fuera una niña pequeña. Ves la fragilidad de su alma y la fortaleza de la tuya.

La india os separa. Tú secas tus lágrimas mientras ves a tu madre que sigue
llorando como una niña. La india se coloca detrás de ti y te señala hilos de luz que
salen de tu madre hacia ti.

De ella sale un hilo de luz plateado; un cordón que une su ombligo a tu


ombligo. Ves también pequeños hilos de luz de sus muñecas a tus muñecas, de tu
pecho a su pecho, de sus piernas a tus piernas.

La india te da un cuchillo de cristal y te dice: Corta los hilos de luz, corta tu


cordón umbilical”.
84
- Madre, gracias por ser mi Madre. Gracias por todo lo que me
nutres. Ahora yo soy responsable de mí mismo.

“Ve cortando uno a uno los hilos que sientas imagines o creas tener. Córtalos e
inhala profundamente”.

- Madre, te devuelvo tu energía, recupero mi energía.


Eres libre y yo soy libre.

“Hay un momento de silencio en el que vas cortando, uno a uno, los hilos que
te ataban con tu madre.

Una extraña sensación de paz y tranquilidad te inunda”. Respira muy


profundamente.

Bekech repitió el mismo ritual con el padre y acto seguido…:

“Imagina a tu padre, a tu madre y a ti tomados de las manos. Respiras


profundamente. Ellos son libres, tú eres libre. Tu amor hacia ellos está intacto,
incluso se ha acrecentado después de este ritual.

Tus padres se alejan y tú los ves irse. Camina en dirección a donde se pone el
sol.

La india te señala el cielo. Ves un águila enorme”.

Aquí Bekech se calló y tomó la palabra Jorge:

“Ves al águila descender sobre tu cabeza. Sientes como sus garras entran
profundamente en ti. Tú relajas tu alma y el águila comienza a elevarte. Extiendes tus
brazos y relajas las piernas. Sientes la fuerza del águila elevándote.

Sientes cómo el poder del águila entra en ti. Tus brazos, poco a poco, se
transforman en alas de águila. Tu cabello se convierte en plumas y tu nariz y boca en
pico. Tu cuerpo se transforma en el cuerpo de un águila. Comienzas a mover tus alas
y ves al águila volar a tu lado. Ves a la anciana mirarte desde el campamento indio y
a tus padres alejarse.

Vuelas con el águila disfrutando esta nueva libertad que se te está dando. El
águila te lleva volando al lugar del origen; al lugar donde está tu Libro de la Vida. Es
necesario que entres en ese lugar sin ser tú, transformado, cambiado”.

Para poder ser,


85
debo dejar de ser,
salir de mí y mirarme entre los otros;
los otros que no existen si yo no existo.
Octavio paz

CAMBIANDO EL LIBRO DE LA VIDA

Puedes cambiar la interpretación de tu nacimiento. El águila te pide que


cambies la interpretación de tu nacimiento, la puerta por la que naciste, la tarea que
tienes, la cantidad de energía con la que te concibieron tus padres. Ahora todavía no
puedes cambiar el presente o el futuro, pero puedes cambiar la interpretación de tu
nacimiento. Quitar una mentira inútil y poner en su lugar una mentira verdadera. Eres
un alma vieja que nació para cambiar a la humanidad. Cambiando la interpretación de
tu pasado, puedes cambiar tu presente y dar condiciones de vida para cambiar tu
futuro.

Cuando uno repite muchas veces una mentira,


tarde o temprano se convierte en una verdad.
Si tú niegas muchas veces una verdad,
tarde o temprano se convierte en una mentira.
Tú eres un alma vieja que vino
a ayudar a la humanidad.
Es lo único que te interesa creer.

Jorge nos dejó escuchando música como si estuviéramos completamente


dormidos.

- Buenos días -dijo Bekech- bostecen y estiren su cuerpo. Y, poco a


poco, vayan recordando todo como si hubiera sido un sueño.

86
CAPITULO FINAL

Bekech, mi maestro, sigue vivo, pero está lejos de mí y de mi alma. Él ha


sembrado su semilla y mi conciencia recorrió el mundo, viajó a otros universos y
ahora lucho por ser lo más normal posible, pasar lo más desapercibido posible y al
mismo tiempo continuar con mi tarea existencial. Mariví, mi madre energética del
que sería heredero, actualmente no puede trabajar donde yo trabajo.

Comencé mi camino a los 14 años y ahora tengo 63 años, todo es igual y nada
es igual.

Tengo una casa, una familia, dos hijos, soy el hombre más feliz que he
conocido en mi vida, trabajo en lo que quiero trabajar, gano lo que quiero ganar,
lucho como quiero luchar, y sin embargo tengo una sensación de fracaso existencial.

He avanzado todo lo que mi capacidad y mis vicios me permitieron, avancé de


acuerdo a mi impecabilidad, hay retos que me faltan y disciplinas que debo cimentar.

Amo la vida y la vida me ama y sin embargo estoy tan lejos del triunfo que
quería lograr…

Tengo alumnos que son más mi familia, tengo pacientes que son más mis
amigos, tengo familia por la que daría la vida sin dudarlo y sin embargo es tan
solitaria esta condición humana.

He logrado expandir mi conciencia más allá de la condición humana y a día


siguiente puedo asistir a un evento social y comportarme como una persona normal.

Y sin embargo me siento tan lejos del control de mi energía.

A pesar de esa sensación de retraso, fracaso y aislamiento, no me he detenido


un solo día, he descansado en la plenitud y me he podido abandonar al amor por este
mundo, pero no me he detenido. Sé que no alcanzare a romper este ciclo de
reencarnación como ser humano, sé que no podré morir y llevarme mi cuerpo, sé con
la certeza absoluta que mi muerte será la muerte de un hombre normal, mas sin
embargo me niego a dejar de luchar por alcanzar la más mínima posibilidad de
lograrlo. Me niego a detenerme. Si de algo tengo la certeza es de que he caminado el
camino que he querido tomar, si de algo tengo la certeza es de que el nagual y el
desafiante de la muerte me dejó un mapa energético, un mapa que le han dado a mi
87
cuerpo de ensueño y que me permite saber la dirección exacta a la tercera atención, a
la libertad, en donde están los naguales. Donde está la salida para escapar de esta
cárcel perceptual.

¨Si logras salir -me dijo el Nagual Carlos Castaneda-, si logras escapar, del otro
lado voy a estar yo para darte un jalón¨.

Sé que he entrado en al 3ª atención, lo sé, pero no tengo energía ni conciencia


para describir lo que he visto en términos normales, sé que la velocidad a la que me
he sometido es tan intensa que mi conciencia no alcanza armarla como una visión
coherente.

Sé qué me atrapa y qué debo dejar, lo sé, pero no logro armar la imagen o el
entendimiento.

He comprado una casa maravillosa en las montañas, que se ha convertido en


centro de peregrinación de la nueva humanidad. Ahí soñaba dar mis últimos
discursos. Ahí soñaba despedirme de mis seres queridos. Ahora sé que el poder me
pide soltar lo que me estorba y a veces la felicidad y el amor me estorban.

Suspiro viendo el fracaso de mis intentos, suspiro viendo la realidad que he


construido, suspiro pero sigo en mi camino, en la impecabilidad de mis actos, la
impecabilidad de mi trabajo, en la impecabilidad que me ha permitido utilizar lo que
el desafiante de la muerte nos enseñó antes de partir. Usar la masa energética del
grupo para que ese mapa se convierta en un puente, un puente entre la gente ordinaria
y la tercera atención, que la persona más insignificante e inútil tenga una esperanza
como yo de caminar la ruta que marca el mapa, y sin nos toca morir en el intento,
será una muerte válida sabiendo que no teníamos esperanzas y aun así lo intentamos
de la manera más impecable posible.

Fin

88
TAREAS A REALIZAR

TAREA I

Hacer cosas que te den energía


y detener fugas de energía

Listado de ahorro de energía: ahorrar energía, incrementar la energía y detener


fugas de energía.

Esta es la tarea más importante dentro del conocimiento chamánico y se tiene


que ir desarrollando y puliendo durante toda nuestra vida.

Tenemos que ver qué nos da energía. Buscar actividades, pensamientos,


sentimientos, lugares y personas que nos den energía, nos nutran y nos beneficien
energéticamente.

Tenemos que descubrir de qué manera perdemos energía. Comenzar por las
fugas de energía más sencillas y, poco a poco, ir batallando con las fugas grandes. Es
importante detener las fugas de energía.

Cuando se hace la lista de ahorro y fugas de energía, tenemos que aprender a


especificar cuándo, dónde y con quién se nos fuga la energía; si son fugas provocadas
por el exterior o fugas provocadas dentro de nosotros.

Siempre se empieza con las fugas más pequeñas y, poco a poco, irás ganando
fuerza y experiencia para batallar con las fugas grandes o existenciales.

89
TAREA II

Diario Chamánico

Cada aprendiz tiene que tener su cuaderno de bitácora;


un diario donde pueda plasmar su conocimiento y sus experiencias.

Comienzas a escribir tu libro mágico, un diario donde escribas las cosas


mágicas de tu mundo, las coincidencias, las visiones. Escribes ahí tus momentos de
claridad; cuando sabes lo qué quieres y lo qué no quieres. Escribes tus fantasías
mágicas.

Aquí escribirás tus descubrimientos personales, tus creencias, tus conceptos.

Es un diario con recortes o poemas; con nombres de libros o ideas que hoy
parezcan imposibles. Es tu cuaderno personal de cada curso o enseñanza que recibas.

En este libro plasmarás el consenso de tu conocimiento y de tu aprendizaje.

TAREA III

Los cuatro círculos de acción


e identificar cuándo una persona se vuelve un vampiro energético.

Descubrimos quién tiene poder


sobre nuestra vida, nuestros sentimientos y nuestro destino,
y aprendemos a neutralizarlos

Buscamos entender con claridad cada círculo de acción.

Cortamos nuestra relación con aquellas personas que coloquemos en el tercer


círculo. Dejamos de verlos muy amable y decentemente. Dejamos de convivir y de
tratar con ellos. Casi siempre será gente nefasta o vampiros energéticos que no
beneficien nuestra energía.

90
Eres lejano y encantador

Aprendemos a neutralizar a las personas que coloquemos en el segundo


círculo, controlando nuestros pensamientos y sentimientos sobre ellas o sobre lo que
ellas dicen o hacen. Al aprender a neutralizarlas, poco a poco nosotros vamos a ganar
fuerza y poder sobre ellas, hasta que podamos transformarlas o alejarlas de nuestra
vida. Evitamos pensar en la gente del segundo círculo y, sobre todo, no hablamos de
ellos, no pensamos en ellos, no sentimos nada por ellos.

Eres indiferentemente amable

Poco a poco vamos cuidando a quienes entran en nuestro primer círculo de


acción. Vamos puliendo nuestras estrategias para elegir gente maravillosa que entre
en este primer círculo, y además procuramos que nos elijan a nosotros para figurar, a
nuestra vez, en su primer círculo de acción. Al principio nuestro primer círculo de
acción estará un poco vacío, pero, poco a poco, lo iremos llenando de personas que
valgan la pena. La primera persona que vale la pena eres tú.

Eres maravilloso con ellos, maravilloso contigo.

TAREA IV

Esta tarea es la base para neutralizar muchas de las fugas de energía. Dado que
casi todas las fugas de energía se dan primero por el pensamiento, cambiando los
pensamientos podremos transformar nuestra energía y nuestra percepción.

Las “frases directivas” nos sirven para ser más positivos en la vida. Tienen que
pronunciarse en un determinado estado mental, llenando el alma de energía y dejando
que los ojos brillen

Lo más importante, en el momento de repetir mentalmente una frase directiva,


es dejar que los ojos brillen, buscar el brillo en los ojos, crear el brillo en los ojos.

Te vas a tomar dos años sabáticos de no criticarte a ti mismo, para no decirte


cosas feas, para utilizar frases directivas que incrementen tu auto-confianza y tu auto
estima.
91
FRASES NOCTURNAS

Por la noche, antes de quedarte dormido, respiras profundamente y repites 20


veces las siguientes frases:

A partir de mañana me voy a sentir mejor, mejor y mejor.


A partir de mañana me voy a sentir mejor, mejor y mejor, más fuerte y más
impecable.
A partir de mañana me voy a sentir mejor, mejor y mejor, más feliz y más
alegre.
A partir de mañana me voy a sentir mejor, mejor y mejor con más confianza y
alegría.
A partir de mañana me voy a sentir mejor, mejor y mejor con más amor y
autoestima.

Las dos últimas palabras se pueden ir cambiando. Siempre con términos


positivos y en presente futuro (no se puede decir: “A partir de mañana ya no me
deprimo”, porque el subconsciente no funciona con la palabra “no”. Se dice: “A partir
de mañana estoy más contenta y más tranquila”)
Y 20 veces por la mañana:

A partir de hoy me siento mejor, mejor y mejor… más fuerte y más tranquila.
A partir de hoy me siento mejor, mejor y mejor… más tranquila y más
hermosa.
A partir de hoy me siento mejor, mejor y mejor… más disciplinada y con más
energía.
A partir de hoy me siento mejor, mejor y mejor…más alegre y triunfadora.
A partir de hoy me voy a sentir mejor, mejor y mejor.

Mirarte al espejo y decirte mentiras verdaderas

Nuestro subconsciente ha sido bombardeado por mentiras mentirosas: No


puedo, no sé, no lo hago bien, eres una tonta…, etc. Esas mentiras mentirosas nos
llevan a la autocrítica, a ser insultantes con nosotros mismos, a ser exigentes y crueles
dentro de nuestros pensamientos. Vas a mirarte al espejo 5 minutos diarios y vas a
decirte mentiras verdaderas:
92
Cada día estoy más…
Cada día estoy más bonita.
Cada día estoy más fuerte.
Cada día estoy más tranquila.

A partir de hoy estoy ganando más…


A partir de hoy estoy ganando más confianza en mí misma.
A partir de hoy estoy ganando más fuerza interna.
A partir de hoy estoy ganando más capacidad de atrapar oportunidades.
A partir de hoy me resulta muy fácil ser productiva.
A partir de hoy me resulta muy fácil que la gente me quiera.
A partir de hoy me resulta más fácil…

Me gusta mucho mi cuerpo.


Cada día tengo un cuerpo más bonito y sano.
A partir de hoy tengo más cariño y se cuidar mejor a mi cuerpo.
Etc.

Se recomienda aprender a repetir estas mentiras verdaderas durante todo el


día, siempre en forma mental.

Frases directivas

Las frases directivas siempre se utilizan en términos positivos y en presente


futuro:

Cada día tengo más…


A partir de hoy soy más…
Cada día que pasa logro más fácilmente…

No se utilizan términos negativos como: A partir de mañana ya no me deprimo


Se dice: A partir de mañana estoy más tranquila y más relajada, más llena de
energía y vitalidad. Más contenta con la vida y con mayor capacidad de triunfo

Es importante, en esta tarea, aprender a dar órdenes al subconsciente

Si repites muchas veces una mentira,


terminas convirtiéndola en una verdad.

Yo quiero

Yo quiero…
93
yo puedo …
yo merezco…

yo quiero triunfar.
yo puedo triunfar.
yo merezco triunfar.

yo voy a triunfar.
yo soy un triunfador natural.

Repetirlo hasta la saciedad. Y cuando surja un sentimiento, estemos meditando


o en soledad, masajear pecho o estómago en círculos y repetir estas frases directivas
como si fueran un mantra, cambiando el último adjetivo.

También se puede tomar un rosario o un mala (rosario tibetano), y repetir:


“Quiero, puedo, merezco”, como si fuera un mantra.

Frases básicas

Este pensamiento… (especifica) no es mío, fuera de mí.


Este sentimiento… ( especifica) no es mío, fuera de mí.
Este pensamiento no significa nada para mí, fuera de mí.
Este sentimiento no es mío, fuera de mí.
Este dolor es como el barro de mis zapatos, fuera de mí.
Esta desilusión es como una astilla en mi corazón, fuera de mí.

TAREA V

Cortar telarañas energéticas.


Cada luna llena vas a elegir una de las personas que están en tu segundo círculo
de acción y vas a improvisar una meditación en la que cortas hilos energéticos con
esta persona (algo parecido a la meditación de los padres.)

94
LIBROS RECOMENDADOS:

“Viaje a Ixtlán” (Carlos Castaneda). Capítulo: “La última batalla sobre la


tierra”.
“Los recuerdos robados a las estrellas muertas” (Agustín Chaman).
“El don del águila” (Carlos Castaneda). Capítulo: “Florinda”.
“Las enseñanzas de don Carlos” (Víctor Sánchez).
“Pláticas con el nagual” (Armando Torres).
“En la sombra del pájaro lira” (Andrés Ibáñez).
“Hadas y chamanes ( Agustín Chaman )

95
Apéndice I

Este pequeño libro manual constituye material de trabajo para el curso


introductorio dentro del aprendizaje chamánico de la familia azul.

El curso ha sido elaborado para ser trabajado durante un fin de semana. El


efecto puede ser devastador. Es el principio básico, y el mejor, dentro de nuestro
trabajo. Este curso siempre es recomendable vivirlo, por lo menos, dos veces. Es
como una buena película, la primera es para vivirla y la segunda para entenderla.

Nuestra idea es crear un concepto accesible, que comprometa al participante


con el conocimiento y no con los maestros. Es un camino sin maestro aunque, de
alguna manera, se haga una conexión directa con el benefactor (que puede ser uno o
varios), que sólo será un punto de referencia o de apoyo.

Nuestra idea, dentro del chamanismo azul, es crear un nuevo concepto


chamánico.

Por último, queremos crear un plan de estudios, una diplomatura. Aunque


parezca una broma, no significa que al final de un ciclo la persona que pasó por todos
los cursos sea un chamán, eso es imposible. Pero por lo menos se puede dar un
reconocimiento a su labor.

Un chamán ya llega siendo chamán cuando entra en uno de estos seminarios.


Nuestra única función es darle herramientas, confianza y energía para que pueda
reconocer lo que es y pueda aplicarlo en el mundo de todos los días.

Por otra parte, tengo que reconocer que yo no soy proclive a los rituales, y el
chamanismo es abundante en ellos. Mi idea siempre ha sido quitar la paja religiosa,
los mitos, la parte doctrinal y quedarme con los ejercicios y la filosofía.

En el chamanismo no queremos esclavos, alumnos o fanáticos que obedezcan.


Queremos seres libres que vayan al mundo de todos los días, apliquen el trabajo y,
con su propio esfuerzo, vean qué les sirve y qué no; que con su impecabilidad
puedan descubrir las verdades que encierra el chamanismo.

Por último, la palabra “chamán” sólo es marketing; el término más adecuado


para el entendimiento europeo.

96
Apéndice II

PLAN DE ESTUDIOS Y SEMINARIOS

CURSO INTRODUCTORIO:
LA DANZA CON LA MUERTE

En este seminario, el participante entra en los conceptos básicos del


chamanismo. Este módulo tiene el poder de la conciencia y de la palabra. Los
ejercicios llevan al participante a replantearse su existencia y cuestionarse, desde un
estado de poder, cuáles son las razones por las que está en este mundo y cómo puede
mejorar su vida.

Este módulo es el más importante dentro del trabajo chamánico azul. Es un


trabajo de impacto que puede dar un giro completo a nuestra manera de percibir el
mundo e interactuar con él, creando un empuje excepcional para la realización de
objetivos. Es un curso que, para entenderlo correctamente, hay que hacerlo, por lo
menos, dos veces.

Temario:
 Ahorro, uso y distribución de nuestra energía.
 Las telarañas energéticas, cortar lazos afectivos.
 Estrategias chamánicas para alcanzar la paz interna.
 Mi nacimiento. Cosmología de cómo llegamos a este mundo y a dónde partimos.
 Frases de poder y conjuros de la conciencia.
 Las razones que tengo para vivir.
 Mis padres.

97
CURSO II

EL ALBUM DE LOS MOMENTOS SUBLIMES

En este seminario nos adentramos en la conciencia y en el pensamiento.


Buscamos entender el concepto del bien y del mal; las fuerzas que mueven el mundo.
Buscamos entender el lado oscuro de la realidad y cómo mover nuestra vida, nuestra
conciencia y nuestra felicidad hacia el lado blanco de la conciencia; hacia la
interpretación de nuestro pasado y nuestro futuro dentro de la belleza y del amor.

Temario:
 Cómo controlar los pensamientos.
 Los momentos maravillosos.
 La conciencia acrecentada, respiraciones de poder.
 Mi mito del guerrero, de la amazona.
 Anclajes a momentos maravillosos.
 Cómo canalizar nuestra energía hacia la buena suerte.
 La alegría como forma de conocimiento.
 Transmutación de momentos desagradables en estados de poder.
 Cazar momentos sublimes.

CURSO III

SANACIÓN

Métodos indígenas chamánicos, lakotas, y de geometría sagrada (en algunos


casos). Cómo se realiza una operación áurica y los métodos para energizar sus
medicinas.
Temario:
 Cómo cambiar y sanar tu destino.
 Limpiar Karma y crear Dharma.
 Anclajes de poder.
 Operaciones áuricas.
 Animales de poder.
 Respiraciones de poder.
 Preparación de medicina a la manera apache.
 Tambores, plumas, cuarzos y humo.
 Masaje azteca para la columna vertebral.
 Método indio de hipnosis.
 Si se dan las condiciones oportunas, se hará la Danza del Fuego

98
CURSO IV

ACECHO

Principios básicos de cacería de energía, de observación, de preparar trampas


en el mundo de todos los días.

El acecho está compuesto por una serie de pautas para conocerte a ti mismo, tus
rutinas y tus fugas de energía, tus hábitos energéticos. El acecho te permite cazarte a
ti mismo y llevarte a vivir la vida que siempre quisiste vivir. Es el arte de ser
ordinario y mágico al mismo tiempo. Es el arte de influir en los demás, ayudándoles
en su mejor opción. Es la capacidad de entender e interpretar los mandatos que el
Espíritu tiene para ti.
Temario:
 Los principios del acecho.
 Cacería de poder.
 Los otros estados de conciencia.
 El subconsciente y cómo acceder a él.
 Buena suerte.
 El lenguaje del cuerpo.
 El triunfo.
 Acecho y ensueño.

CURSO V

ENSOÑACIÓN
Es un curso más teórico que practico, donde se explican las leyes del astral y como acceder a
él.

Temario:

 El cuerpo astral y el cuerpo de ensueño.


 La segunda atención.
 Mundo mágico.
 El silencio mental.
 Autorreflexión y no crítica.
 El miedo dentro del astral.
 Interpretación de sueños.
 Sueños freudianos y sueños de poder.

99
CURSO VI

AVANZADOS

En este seminario se busca profundizar y alcanzar un mínimo compromiso dentro del trabajo
chamánico. Este trabajo está más encauzado hacia el conocimiento de Carlos Castaneda y sus
libros.

Temario:

 El camino de Don Juan.


 Los “no haceres” del “yo personal”.
 El intento.
 El poder que rige nuestro destino.
 Caminos con corazón.
 El reto del guerrero.
 La recapitulación y la lista de recapitulación.
 La hazaña del guerrero.

TRABAJO INTENSIVO DENTRO DE LA ENSOÑACION


CON EL INORGÁNICO ÁNGEL FELINO
vía WhatsApp

Trabajo nocturno de canalización de la energía de la serpiente de Fuego, para la


transformación y preparación de los estados de ensoñación, por medio de la limpieza del cuerpo
energético y de la burbuja luminosa. Noventa ejercicios para hacer en la noche, que se pueden
repetir por las tardes (siesta). La idea del trabajo de la serpiente de fuego, es crear un vínculo
energético entre el cuerpo de ensueño del participante y el del maestro benefactor (Agustín). Por
medio de un nuevo sistema, en el que se combina la tecnología con el mundo mágico, se despierta
la energía sutil de la columna vertebral. A través de ejercicios sencillos y poéticos, el participante
consigue, poco a poco, entrar en un estado de bienestar, realizar cambios y desarrollar su conciencia
perceptiva. Este trabajo, a pesar de ser un método sencillo y que requiere poco esfuerzo, no es un
trabajo para todo el mundo, hace falta haber tenido anteriormente una preparación adecuada.

100
INTENSIVOS EN ARMENTERAS
Seminario de 6 días

Tal vez, la verdadera entrada en el camino del conocimiento en nuestro linaje, es el


trabajo en La Casita. Los intensivos llevan el sabor de la plenitud, la belleza y la
energía. Se crea un estado único de conciencia dentro de lo que es la alegría y el
restablecimiento del alma, del cuerpo y de la mente.

Cada seminario intensivo tiene un tema específico. Las dinámicas, ejercicios o


rituales se determinan y construyen en función de las características de los
participantes.

Lo que ocurre en los seminarios intensivos es difícil de explicar con palabras. Es una
vivencia pura de fraternidad, de belleza y de amor a la vida.

Camino de enamorarse de la vida: Curso básico para principiantes en los


seminarios intensivos.

Camino del guerrero: Sólo para aprendices que han asistido a la mayoría de los
módulos anteriores.

Camino de la sanación: Técnicas de geometría sagrada para la curación.

Camino del servicio: Trabajo destinado al servicio a los demás, a la naturaleza.


Dejar que el mundo te sirva y aprender a dejarte atender por los demás.

Sólo para mujeres: Intensivo con prácticas destinadas al manejo especializado


de la energía femenina.

Camino del mago: Trabajo que crea una amalgama entre el chamanismo, la
PNL, el camino del druida y la ingeniería mental.

101
RITUALES SAGRADOS
DENTRO DE LOS SEMINARIOS
DE FIN DE SEMANA O INTENSIVOS

- Danza del fuego.


- Intensi
- Respiraciones chamánicas
- Entierro del maíz.
- Inipis (Sauna india).
- Fumar la Pipa Dakota (Chanupa) (tabaco con damiana).
- Camino del mago.
- Dar de comer a la tierra.
- Kambo, rape sapo

Apéndice III

OTRAS INFORMACIONES

¿QUÉ ES UNA LECTURA DE AURA?

La lectura del campo electromagnético o aura, es una experiencia de conocimiento en


sí mismo, donde se interpreta la calidad, el color, la densidad de la energía, así como
los principales bloqueos o zonas de poder y características específicas de la
configuración energética, espiritual, mental, sentimental o kármica de la persona.

La lectura de aura o interpretación chamánica, es una herramienta perfecta para


adentrarse en el maravilloso mundo del conocimiento personal, la confirmación del
proceso de vida y de las pautas que debemos seguir. Su duración es de 45 minutos
aproximadamente. Dentro de ese tiempo, se podrá hablar de las primeras capas
áuricas, además de la configuración energética del cuerpo físico y de sus chakras;
de la energía que marca el nacimiento y de la funcionalidad inmediata en el
proceso de transformación que vive la persona. En esta interpretación se relacionará
cada color con características concretas de la vida cotidiana de la persona, buscando
una terminología sencilla, que explique las preguntas inmediatas del participante.

102
ARMENTERAS
(Cataluña, España)

Queremos crear un centro de conciencia. Queremos crear el “Chamanasterio”.


Un lugar donde los aprendices de chamanismo puedan refugiarse, restablecer la
energía y tener un lugar de descanso. Armenteras es el lugar destinado a los
seminarios intensivos; es el hogar para aquellas personas que pertenecen a la familia
azul y centro principal de nuestro aprendizaje.

Armenteras está a una hora de Barcelona y 30 minutos de Manresa, en el pre-


pirineo catalán. La casa es una masía de piedra de 4 niveles. El primer piso data del
siglo XIV-XV, época en la que San Juan de Borja era Virrey de Cataluña. La casa
todavía conserva el escudo real esculpido en su arco de entrada. La segunda planta
data del siglo XVI. En esta etapa constructiva, se la asocia a los templarios y a los
masones. Todavía se puede ver con claridad un relieve de piedra con el santo grial y
símbolos masónicos. En el siglo XVII se añade una tercera planta. El resto de la
construcción data del siglo XIX, época en la que Armenteras era un nombre de
notable influencia en la zona. En el siglo XX, la casa abandonada, fue quedando,
poco a poco, prácticamente en ruinas. Fue refugio del “Maquis” durante la guerra
civil española, y después, vacía y desmantelada, fue revendida en varias ocasiones.
Por último, pudimos acceder a ella e iniciar las actuales reformas.

SITIO WEB

www.chamanazul.com

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