MODULO 1 Química
MODULO 1 Química
¿QUÉ ES UN MODELO?
En ciencias puras y, sobre todo, en ciencias aplicadas, se denomina modelo científico a una
representación abstracta, conceptual, gráfica o visual de fenómenos, sistemas o procesos a fin
de analizar, describir, explicar, simular y predecir esos fenómenos o procesos. Un modelo permite
determinar un resultado final a partir de datos de entrada. Se considera que la creación de un
modelo es una parte esencial de toda actividad científica. (Definición de Wikipedia)
Los modelos y la modelización tienen una importancia clave en muchos contextos científicos,
y son uno de los principales instrumentos de la ciencia moderna. La manipulación de modelos es
esencial en la investigación científica, porque sirven para aprender sobre las teorías científicas y el
mundo. Aunque los modelos no se ajusten con perfección a todos los detalles del mundo, pueden
proporcionar una información útil y profunda sobre su funcionamiento.
Mario Bunge (investiga quién es!) asigna dos funciones esenciales a los modelos científicos:
explicación y predicción del fenómeno, las cuales también son características de las teorías
científicas.
A veces, el modelo tiene por objeto reemplazar el sistema real para simplificar su estudio. Por
ejemplo, podemos considerar que la Tierra y la Luna son partículas puntuales para explicar las
mareas, los ciclos lunares, etc. Un modelo es a veces una imagen mental de la estructura o
propiedades de un sistema. Así, la luz ha sido modelada como un flujo de partículas discretas
(fotones) o como una onda continua y finalmente se introdujo el concepto de onda asociada a una
partícula que fue verificada experimentalmente. Ambos modelos confluían en uno solo y la luz se
comportaba como una dualidad onda-partícula.
Los criterios principales que un modelo debe satisfacer son los siguientes:
1. El modelo debe ser lo más simple posible.
2. 2. El modelo no debe ser incompatible con las teorías establecidas en campos de
estudio relacionados.
3. 3. El modelo debe ser capaz de predecir fenómenos que puedan ser comprobados
experimentalmente
La palabra átomo (a = sin, tomos = partes) fue nombrada por primera vez en Grecia cerca del
año 500 a.C por los atomistas, siendo los más destacados Demócrito y su mentor
Leucipo. Desarrollaron la “teoría atómica del Universo”, la cual afirmaba que todo lo percibido
mediante los sentidos estaba formado por pequeñas partículas, invisibles, macizas, con
diferentes formas y texturas, llamadas átomos. Los principales postulados de su modelo eran:
Este pensamiento griego no tuvo aceptación ya que contradecía las ideas de otros
filósofos como Aristóteles y Empédocles, quienes afirmaban que la materia estaba formada por
cuatro elementos: aire, fuego, tierra y agua, que se combinaban obteniendo sustancias con distintas
propiedades, negando la existencia del vacío. Aristóteles le agregó un quinto elemento: el éter, para
explicar la inmutabilidad del resto del universo. La idea más importante de este grupo denominado
“filosóficos” fue que la materia era continua, es decir, se podía dividir en partes iguales eternamente
y no existía interrupción alguna en su interior. Estas ideas perduraron casi 23 siglos por encima de
las ideas de los atomistas.
"Decimos dulce, decimos amargo, decimos caliente, decimos frío, decimos color; pero en realidad
no existen más que los átomos y el vacío" Demócrito de Abdera (460-370 a.C.)
En 1808, John Dalton, químico y físico británico, publicó su teoría atómica, que retomaba las
antiguas ideas de Leucipo y de Demócrito, concluyó que las sustancias están compuestas de
átomos esféricos idénticos para cada elemento, pero diferentes de un elemento a otro. Según la
teoría de Dalton:
* La materia está formada por partículas muy pequeñas llamadas átomos, que son indivisibles y
no se pueden destruir.
• Los átomos de un mismo elemento son iguales entre sí y tienen su propio peso y cualidades
propias.
• Los átomos de los diferentes elementos tienen pesos diferentes.
• Los átomos permanecen sin división, aún cuando se combinen en las reacciones químicas.
• Los átomos de elementos diferentes se pueden combinar en proporciones distintas y formar
más de un compuesto.
• Los compuestos químicos se forman al unirse átomos de dos o más elementos distintos.
Dalton se dio cuenta de que la diferencia en las propiedades mostradas por elementos diversos,
sólo se puede explicar a partir de la idea de que los átomos de un determinado elemento son
diferentes de los átomos de otro elemento (tal como lo conocemos hoy en día).
El físico danés Niels Bohr, propuso un nuevo modelo atómico que se basa en cuatro postulados:
1.- Los electrones giran alrededor del núcleo en órbitas fijas estacionarias sin emitir energía.
2.- Los electrones solo pueden girar alrededor del núcleo en aquellas órbitas muy precisas
asociadas a una cantidad de energía bien determinada y no en cualquiera valor.
3.- Cuando un electrón pasa de una órbita externa a una más interna, la diferencia de energía entre
ambas órbitas se emite en forma de radiación electromagnética luminosa (fotón). Mientras el
electrón se mueve en cualquiera de esas órbitas no radia energía, sólo lo hace cuando cambia de
órbita. Si pasa de una órbita externa (de mayor energía) a otra más interna (de menor energía) emite
energía, y la absorbe cuando pasa de una órbita interna a otra más externa. En dichos saltos de
órbitas los electrones no pasan por ninguna de las órbitas intermedias posibles.
4.- Al suministrarle al átomo energía externa, el electrón puede pasar o "excitarse" a un nivel de
energía superior, correspondiente a una órbita de mayor radio. El modelo de Bohr es muy simple y
recuerda al modelo planetario de Copérnico, los planetas describiendo órbitas circulares alrededor
del Sol. El electrón de un átomo describe también órbitas circulares, pero los radios de estas órbitas
no pueden tener cualquier valor. Este modelo si bien no es descartado totalmente no satisface la
explicación de cualquier átomo sino que solo explica el átomo de hidrógeno, el más sencillo de todos
los elementos.
A lo largo de la historia éstos fueron los modelos atómicos que precedieron al que en la
actualidad se considera el más acertado, que es el modelo de nube electrónica que desarrollaremos
en el siguiente capítulo.
MODELO CONTEMPORÁNEO:
NUMERO ATOMICO: Número principal que ordena a todos los elementos químicos de la Tabla
Periódica de los Elementos y que representa la cantidad de protones que un átomo posee en su
núcleo.
NUMERO MASICO: Es la masa atómica que figura en la Tabla Periódica de los Elementos redondeada
a una cifra entera y representa la cantidad de protones y neutrones que un átomo posee en su
núcleo.
Sabiendo que el átomo es, en principio, eléctricamente neutro podemos hacer la siguiente
descripción de sus partículas internas:
Cantidad de protones: 11
Cantidad de electrones: 11 (para mantener la neutralidad)
Cantidad de neutrones: A – Z = 12
Una vez determinado esto, debemos ubicar los 11 electrones en sus respectivos niveles y
subniveles alrededor del núcleo. Para ello utilizamos el diagrama de Moeller (o regla de las
diagonales) que nos permite ir ubicando electrones:
REGLA DE LAS DIAGONALES
El diagrama de Moeller es una regla muy simple y útil para recordar el orden de llenado de los
diferentes niveles y subniveles de energía del átomo. Sólo hay que seguir el orden marcado por las
flechas que es en sentido diagonal:
Teniendo en cuenta la forma de cada orbital atómico y cuántos electrones caben en cada uno:
De ésta forma podemos distribuir esos electrones en casillas (conocidas como casillas
cuánticas) que hacen una representación minimalista de las formas complicadas que poseen los
orbitales atómicos.
Las flechas simbolizan los electrones
Es necesario, al completar las casillas tener en cuenta la regla de Hund, que me indica la
forma correcta de ir llenando los orbitales atómicos:
Por último existe una forma más simplificada de representar la distribución de los electrones
que se conoce como ¨configuración electrónica¨ la cual suprime las casillas y representa los
electrones como potencias ubicadas al lado de cada orbital atómico:
Es muy importante identificar cuáles son aquellos electrones que se encuentran en los niveles
más externos de un átomo, pues de ellos va a depender la reactividad química de un elemento.
Estos electrones son aquellos que se encuentran en el nivel más alto, en el ejemplo anterior serían
todos aquellos ubicados en el Nivel 4 Sunivel s, para identificar éstos electrones se los denomina
¨C.E.E.¨ (CONFIGURACIÓN ELECTRÓNICA EXTERNA).
Por último, y en la antesala de lo que serán las uniones entre los átomos que permitirán la
existencia de todas las sustancias compuestas y simples que conforman nuestro Universo, existe la
representación de puntos de Lewis, que se encarga de mostrar los electrones de la C.E.E. en
diagramas de puntos (o cruces o el símbolo que elijamos) alrededor del símbolo del elemento y
respetando si dichos electrones se encuentran apareados o no:
(Ne) 3s1
Lo que se encuentra entre paréntesis o corchetes es aquella parte del sodio que es idéntica al
elemento químico anterior (o sea el Neón) y lo que se encuentra fuera del paréntesis o corchete es
la capa más externa. Teniendo en cuenta que el orbital s ocupa una sola casilla en el diagrama de
orbitales y contiene un solo electrón en el nivel 3 para el sodio su símbolo de Lewis será:
Y si por ejemplo tomamos el hierro, la Tabla nos dice que su configuración electrónica es:
xx
Fe
ETN°33
Química Inorgánica
División 403
NÚMEROS CUÁNTICOS
Número cuántico principal (n):
Representa el nivel de
energía y su valor es un
número entero positivo
(1, 2, 3, ....)
Se le asocia a la idea
física del
volumen/tamaño del
orbital.
n = 1, 2, 3, 4, .......
Número cuántico secundario o
azimutal (l):
Tipo de Valor Nº Nº e-
Identifica al subnivel orbital l orbitales
de energía del
s 0 1 2
electrón y se le
asocia a la forma del p 1 3 6
orbital.
d 2 5 10
f 3 7 14
Número cuántico magnético (m o
ml):
Describe las
orientaciones espaciales
de los orbitales.
Sus valores son todos
los enteros entre -l y +l,
incluyendo al 0.
Valor de m según el ingreso del
último electrón al orbital.
Número cuántico de spin (s o
ms):
Informa el sentido del giro del electrón sobre sí
mismo en un orbital.
Su valor es +1/2 o -1/2
En una configuración electrónica, un electrón
puede ser representado simbólicamente por:
Indica el número
3p1
cuántico principal (n)
Indica el número
cuántico secundario (l)
11Na
Configuración
electrónica para 11
electrones
1s2 2s2 2p6 3s1
Entre los elementos cuya configuración
electrónica no puede ser predicha por la
regla de las diagonales se encuentran el
cromo, cobre, niobio, molibdeno, rutenio,
rodio, paladio, plata , lantano, cerio,
gadolinio, platino, oro, actinio, torio,
protactinio, uranio, neptunio, plutonio y curio
No olvides que, de entrada, un subnivel no
podrá comenzar a llenarse si todos los
orbitales de un subnivel de menor energía a
él no se han llenado por completo
Con el cromo (Cr Z = 24) surge otra aparente anomalía porque su
configuración es [Ar] 3d5 4s1. La lógica de llenado habría llevado a [Ar]
3d4 4s2, sin embargo la distribución fundamental correcta es la
primera. Esto se debe a que el semillenado de orbitales d es de mayor
estabilidad, puesto que su energía es más baja.
Con el cobre Cu Z = 29 sucede algo similar al
cromo, puesto que su configuración fundamental
es [Ar] 3d10 4s1. La configuración [Ar] 3d9 4s2 es
de mayor energía. La configuración con 10
electrones en orbitales d, es decir, el llenado total
de estos orbitales es más estable.
Notación global externa
Es más compacta que la anterior.
Se remplaza parte de la configuración
electrónica por el símbolo del gas noble de Z
inmediatamente anterior al elemento.
Gases nobles: 2He; 10Ne; 18Ar; 36Kr; 54Xe; 86Rn.
(10Ne) 3s1
ISOTOPOS
Se denomina isótopos a los átomos de un mismo elemento, cuyos núcleos tienen una
cantidad diferente de neutrones, y por lo tanto, difieren en número másico. Es decir son átomos de
un mismo elemento químico con idéntico número atómico pero distinto número másico. Ejemplo:
234
Th y 23090Th para dos de los isótopos del torio. El subíndice (90 en ambos casos para el
90
torio) es el número atómico Z, el número que asigna el lugar en la tabla periódica; el superíndice
(234 o 230) es el número de masa A, la masa atómica aproximada en unidades de masa atómica.
La idea de que un elemento químico puede ser en realidad una mezcla de átomos con
diferente comportamiento radiactivo y diferentes masas atómicas, pero todos con las mismas
propiedades químicas, significaba que habría que cambiar uno de los postulados básicos de la teoría
atómica de Dalton, a saber, el postulado de que los átomos de un elemento puro son iguales en
todos los aspectos.
Así, el uranio 238 (238U) y el uranio 234 (234U) son isótopos del uranio (92U); el plomo 214
(214Pb) y el plomo 206 (206Pb) son isótopos del plomo (82Pb). Son químicamente iguales; ocupan el
mismo lugar en la tabla periódica y tienen el mismo número atómico Z, que se suele escribir como
subíndice. Pero son físicamente diferentes, porque tienen diferentes masas atómicas A, que se
suele escribir como superíndice en unidades de masa atómica.
Mientras que los 3 tienen el mismo número atómico, 1 al poseer un sólo protón en el núcleo,
en el Protio no existe neutrón, en el Deuterio existe un neutrón y en el Tritio un segundo neutrón,
con lo que cada isótopo difiere en forma creciente en su masa atómica.
La masa atómica presente en la tabla periódica es un valor que tiene en cuenta la abundancia
natural de cada isotopo. Así, por ejemplo, siendo la abundancia del Protio 99,9855% y la
del Deuterio 0,0145% el valor presenta en la tabla será de [0,999855x1,007u.m.a. +
0,000145x2,014u.m.a] = 1.0071. Ya que prácticamente todo el Hidrógeno se encuentra
como Protio, el valor contenido en la tabla será muy cercano a la masa atómica del Protio.
Cabe destacar que gran parte de los elementos químicos cuentan con más de un isótopo.
Apenas veintiún elementos, como el sodio, tienen un único isótopo natural. Es posible dividir los
isótopos en isótopos estables e isótopos no estables o radiactivos. Para que un isótopo
sea radiactivo, debe exhibir una proporción entre su cantidad de neutrones y de protones que no
resulte propicia para mantener la estabilidad del núcleo.
Los iones pueden estar constituidos por dos o más átomos (poliatómicos) de diversa
naturaleza, o de un único átomo (monoatómicos). En cualquiera de los casos, hablaremos de
un catión (o cationes) cuando se trate de un ion cargado positivamente (es decir, que el átomo o
molécula neutra inicial cedió electrones), y hablaremos de un anión (o aniones) cuando se trate de un
ion cargado negativamente (es decir, que el átomo o molécula neutra inicial aceptó electrones).
Los iones se forman por ionización. El término se refiere al fenómeno de ganancia o pérdida
de electrones del átomo cuando es sometido a determinados procesos. La pérdida o ganancia de
electrones permite al átomo adquirir carga eléctrica, transformándose en un ion. Se concluye que los
átomos no ionizados son neutros eléctricamente.
Los iones también se clasifican según la cantidad de átomos que tienen. Cuando el ion
dispone de un único átomo, se trata de un ion monoatómico. En cambio, si el ion presenta al
menos dos átomos, recibe el nombre de ion poliatómico.
La energía mínima que se requiere para separar un electrón de un átomo aislado (o un ion) en
su estado basal se conoce como energía de ionización, y se representa en kJ/mol. La magnitud de
esta energía es una medida de que tan “fuertemente” se encuentra unido el electrón al átomo. Cuanto
mayor es la energía de ionización es más difícil quitar el electrón del átomo.
A continuación pueden verse qué tipos de iones existen según su carga y cantidad de átomos:
“Los dioses crearon al mundo con alguna imperfección simétrica. Esto, con el objetivo de que los humanos
no sintieran envidia de sus poderes”. Richard Feynman (Premio Nobel de Física)
ACTIVIDAD: Investiga qué es lo que se conoce como la teoría del Big Bang. ¿Habías escuchado
alguna vez éste término? ¿Qué puedes decirnos a priori sobre lo que crees que significa? Confronta
tus concepciones previas con lo que hallaste en la investigación y comparte en clase tus resultados.
Se conoce como modelo GUT (teoría de la gran unificación) del origen del Universo a una
teoría que postula que en el comienzo de todo lo hoy conocido, como materia, energía e
interacciones entre ambas, eran muy distintos. Todo eso cabía dentro de un tamaño tan pequeño y
condensado que nos cuesta poder imaginarlo. No existían los átomos, tampoco las fuerzas tal como
las conocemos hoy, ni la electricidad, ni las sustancias químicas, ni los seres vivos.
Nuestro Universo era, hace 14.000 millones de años, algo que ningún científico se atreve a
decir con seguridad, lo único que se afirma con cierto grado de precisión es que un instante después
de ese primer momento y, por razones que no se conocen aún, lo que estaba en un estado
indescriptible comenzó a expandirse e inflarse luego del instante cero (Big Bang o gran explosión) y
de allí que se denomine modelo inflacionario.
En esos primeros momentos las condiciones eran tales que no podían existir las variables que
hoy conocemos de la física y de la química. Energías inmensas, calores extremos y una enorme
sopa de partículas y campos lo eran simplemente todo. Es allí, o mejor dichos unas millonésimas de
segundos después, dónde la ENERGIA se convierte en MATERIA. Estamos muy familiarizados con
el hecho de que la materia se convierta en energía, cada vez que quemamos un papel o
consumimos alimentos ocurre esa transformación, sin embargo a la inversa no solemos verlo con
tanta facilidad, aunque ocurre todo el tiempo en las estrellas. El mejor ejemplo de conversión de
energía en materia son las estrellas, donde ocurren reacciones nucleares, que requieren de enormes
energías y temperaturas (como en nuestro Sol, 5600 grados centígrados en la superficie y
15.000.000 en el centro). En esas condiciones ocurrieron los primeros pasos que condujeron hacia
lo que hoy conocemos como el objeto de estudio de la Química: átomos, moléculas, sustancias; y de
la Física: fuerzas, transformaciones de la energía y campos de acción de fuerzas.
A medida que transcurría el tiempo el Universo conocido se expandía cada vez más al tiempo
que se iba enfriando, y se iban conformando las condiciones que daban origen a ciertas partículas
que ya conocemos como el electrón (considerada la primer partícula que nuestro Universo dio). Sin
embargo los instantes iniciales son la clave del porqué éste, nuestro mundo, es cómo es y tiene las
características que hoy en día presenta.
En las siguientes imágenes podemos ver como evolucionó, de acuerdo al ME cosmológico
(modelo que hace referencia a los principios del cosmos), nuestro Universo hasta el día de hoy:
ACTIVIDAD: Investiga quién fue que relacionó materia y energía mediante una ecuación muy
famosa en su trabajo ¨Teoría de la Relatividad Especial¨. Realiza una breve síntesis de lo que dicha
teoría postula tratando de expresar con tus propias palabras el significado de la misma.
En la siguiente imagen podemos ver cómo se formaron las fuerzas de la naturaleza a partir de
una primer fuerza conocida como SUPERFUERZA. Estos momentos de separación se consideran
rupturas de una simetría que se cree mantenía a todo lo que hoy forma el Universo en un estado
muy distinto al que hoy conocemos, el instante cero del que nadie sabe aún con seguridad cómo
eran las cosas:
Todo lo sucedido en los instantes posteriores al Big Bang sucede bajo condiciones de muy
alta energía y velocidades cercanas a la velocidad de la luz (300.000 km/s) que hacían que el
comportamiento de las partículas no sea el mismo que el que ocurre en condiciones menos
extremas. Decimos que a esos niveles de velocidad los sucesos son de tipo ¨relativista¨ dado que
fueron descritos en la Teoría de la Relatividad de Albert Einstein. Bajo estas condiciones hay una
existencia de un gran número de partículas e interacciones entre ellas que fueron estudiados
alrededor de 1960. Por ejemplo se descubrió la existencia de leptones (particulas muy ligeras) y
hadrones (partículas muy densas) y también de bosones (partículas con funciones muy puntuales
como la de mantener unidas a otras partículas). A su vez los hadrones se pueden dividir en
bariones (partículas pesadas) y mesones (partículas de peso medio). En un principio se pensó que
todas ellas eran partículas elementales como el electrón (es decir que no están formadas por
entidades más pequeñas) pero luego se descubrió que no era así. Por otro lado estaban las
interacciones entre ellas, es decir las fuerzas que actuaban para mantenerlas unidas o separadas
que como se muestra en la imagen anterior se fueron originando a lo largo de los momentos de
ruptura de la simetría. Todo lo que dijimos hasta aquí se refiere al modelo cosmológico que nos
permite comprender nuestro modelo estándar de partículas.
Este modelo no está exento de problemas que no puede aún resolver, no obstante dado que
ha logrado explicar exitosamente muchos fenómenos es el que actualmente se acepta hasta tanto
aparezca otro que explique mejor o incluya lo que no se ha podido hasta ahora.
En la siguiente imagen se muestran cuáles son las principales partículas que hoy en día,
según el ME, se consideran forman todas las combinaciones que dan lugar a los átomos de los
elementos que se conocen y que estudiaremos durante el año, trataremos de estudiar brevemente
cada grupo de ellas para comprender cómo es la visión del átomo en el siglo XXI.
Aclaración sobre la siguiente Figura: el gravitón no forma parte del Modelo Estándar de la Física
de Partículas dado que éste último no incluye la interacción gravitatoria.
A su vez se conocen como fermiones elementales a las que no poseen una estructura
interna, es decir son indivisibles, y hadrones a aquellas que están formadas por otras partículas
más pequeñas:
QUARKS: Partículas elementales que al juntarse entre ellas forman los componentes de los núcleos
de átomos (nucleones) como por ejemplo los protones y neutrones.
LEPTONES: Partículas elementales que no experimentan los efectos de la interacción fuerte (la
explicaremos más adelante) y que el valor que equivale a algo así como el giro sobre sí
mismos (conocido con el nombre de spin) es fraccionario (1/2). El electrón es el
ejemplo más famoso de ésta familia.
BOSONES: Los bosones de intercambio son la segunda familia de partículas elementales. Tienen
valores de spin que son números enteros (a diferencia de los leptones que es
fraccionaria) y son consideradas las partículas mediadoras de fuerzas e interacciones
entre las demás partículas. La interacción entre los bosones de intercambio y los
fermiones es lo que da lugar a las fuerzas fundamentales de la naturaleza
(electromagnetismo, interacciones fuerte y débil, gravedad). A continuación
mencionamos cada uno:
a.- Fotón: bosón considerado responsable de las interacciones
electromagnéticas como la luz, la electricidad, el magnetismo, rayos X, rayos gamma,
luz ultravioleta, luz infrarroja, microondas, ondas de radio, etc. Tiene una masa que se
cree que es nula (valor cero) y viaja a la velocidad de 300.000 km/s (velocidad que
según Albert Einstein conforma un límite imposible de superar en el Universo).
b.- Gluón: bosón considerado responsable de la interacción nuclear fuerte o
fuerza nuclear fuerte. La fuerza fuerte es una de las cuatro que se creían
conformaban la superfuerza antes del Big Bang y que a medida que comenzó el
fenómeno inflacionario del Universo se separó de las otras tres. Su función principal es
unir a los quarks para formar los nucleones como el protón y el neutrón. Existen ocho
tipos distintos de gluones, se cree que su masa es nula y su carga eléctrica también.
Según la teoría postulada por Higgs, segundos después del Big Bang la simetría que
mantenía unida a la superfuerza se rompe, el Universo se va enfriando y expandiendo, las fuerzas
comienzan a diferenciarse y las partículas mediadoras comienzan a adquirir una masa que antes no
tenían. Sin embargo faltaba hallar la respuesta a la pregunta de quién era responsable de esa
ruptura de simetría que conducía al resultado final de la ¨masificación¨ de partículas. Higgs propuso
que ese responsable era un campo bosónico (zona de influencia o acción de una partícula) y que el
bosón responsable de ello sería el principal responsable de otorgar masa a las partículas.
Para familiarizarnos con la idea de campo diremos que el espacio está lleno de campos
invisibles a nuestros ojos, como por ejemplo el campo gravitatorio que mantiene unida la Tierra con
su Luna y a su vez a ambas con el Sol. En el momento cero, millonésimas de segundos antes del
comienzo de la expansión, nuestro Universo era simétrico, con partículas que carecen de masa y se
mueven a la velocidad de la luz. En estas condiciones el campo de Higgs está en un estado de
energía de valor cero, similar al reposo absoluto. Pero cuando nuestro Universo comienza a
expandirse y enfriarse el campo de Higgs deja de tener valor cero y pasa a un estado inestable que
ocasionó la ruptura de la simetría inundando todo el espacio conocido con dicho campo. A estas
alturas los científicos creen que el vacío absoluto no existe, pues aunque quisieramos vaciar todo del
espacio conocido, siempre seguirá estando el campo de Higgs allí porque es considerado un campo
fundamental que está obviamente formado por partículas llamadas bosones de Higgs.
La principal característica del campo de Higgs es que al ser atravesado por partículas sin
masa, éstas ganan energía en la interacción con el campo y luego esa energía se convierte en
masa. A mayor interacción con el campo mayor será su masa ganada. Esto constituyó una
verdadera revolución científica, pues hasta entonces, se creía que la masa era una característica
intrínseca de cada partícula, como postulaba Newton. En cambio ahora la masa sería una propiedad
adquirida gracias al campo de Higgs y no a la partícula en sí misma.
¿Por qué se dice que el bosón de Higgs es la partícula de Dios? Simplemente porque si
pudiéramos eliminar el campo de Higgs del Universo, todas las partículas volverían a tener masa
cero y viajarían a la velocidad de la luz, con lo cual no habría átomos, ni estructuras sólidas, líquidas
o gaseosas, ni sustancias, ni éste apunte, ni yo ni ustedes! Sin masa, las partículas serían tan
veloces como la luz, por lo que no habría acumulaciones, y por lo tanto tampoco átomos. Se ha
atribuido la característica de ¨creacionista¨ al campo de Higgs por ser el responsable de la
existencia de todo lo actualmente conocido, explicaría el origen de todo lo que nos rodea y en parte
es eso lo que lo ha enfrentado a las principales concepciones religiosas actuales. Un detalle
importante es que éste bosón solo actúa por unas millonésimas de segundos y a temperaturas
sumamente altas, por eso el estudio de su interacción con las partículas y su mecanismos para
otorgar masa fue un enorme desafío para los científicos contemporáneos.
Esta partícula, fue intensamente buscada durante casi medio siglo, hasta que el 4 de julio del
año 2012 la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN), anunció el hallazgo, con
un 99,99995 % de confianza, de esta partícula, un evento catalogado como “histórico”, pues hasta
ese momento era considerado como uno de los grandes enigmas de la física. La hazaña se logró
gracias al Gran Colisionador de Hadrones (LHC), que funciona en las dependencias del CERN en
Ginebra, y al trabajo de 3.000 científicos de 38 países y más de US$ 9 mil millones en inversión. En
este, el mayor acelerador de partículas del mundo que empezó a funcionar el año 2008 y cuenta con
un anillo de 27 kilómetros construido bajo tierra, se produjeron los choques de alta energía de
protones, con el fin de captar el bosón de Higgs. En este anuncio, uno de los invitados de honor fue
precisamente Peter Higgs, quien se mostró emocionado por la presentación de los resultados. “No
tenía idea de que esto sucedería mientras estuviera vivo”, señaló en aquella oportunidad el
científico de 84 años.
Para poder reproducir las energías equivalentes a los instantes posteriores al Big Bang se
construyen enormes estructuras con el fin de dar velocidad a partículas para luego hacerlas chocar
entre sí y observar los resultados acumulados en millares de datos que son procesados por
supercomputadoras. A continuación se muestra una fotografía de la construcción del LHC, para
notar su tamaño observe el tamaño de la persona que se encuentra parada frente a la sección
principal:
ACTIVIDAD: ¿Qué vinculación hay entre el CERN y los primeros pasos de lo que hoy conocemos
como Internet? Investiga sobre ello para ponerlo en común en la clase.
Algunas veces aparecen éstos términos en películas o libros de ciencia ficción, pero ¿son
realmente conceptos teóricos reales que manejan los científicos? A continuación los describimos:
MATERIA OSCURA: Fue propuesta en 1933 por el Astrónomo y Físico búlgaro Fritz Zwicky y
considera que es un tipo de materia que no emite ningún tipo de radiación visible o captable por
instrumento alguno (de allí el término ¨oscura¨) haciendo que sea completamente transparente a los
medios de observación con que contamos en la actualidad. La única forma de interacción con otro
tipo de materia es la gravedad y por ello se la ha podido detectar, a través de observaciones
astronómicas, cuando influye gravitacionalmente a galaxias o cúmulos observables
astronómicamente. La composición de este tipo de materia aún es tema de discusión entre los
científicos y no se ha podido determinar con cierto grado de aceptación su estructura y elementos
constitutivos.
Como información interesante podemos decir que se estima que el 26% de la materia
presente en el universo es materia oscura, solo el 4% es materia bariónica (la que podemos
observar) y el resto es Energía Oscura. De modo que toda la materia visible es en realidad tan solo
el 4% de la materia que creemos existe en el Universo.
ACTIVIDAD OPCIONAL: Si te han interesado éstos temas puedes investigar sobre otros temas
relacionados: Teoría de cuerdas, Energía oscura, Teoría M. Luego comparte tu investigación con la
clase y el docente!!!
.- Santamaría, Mario E. El modelo estándar de partículas, los pilares de la materia. RBA Editora,
España, 2016.
.- Dova, María T. Qué es el bosón de Higgs. Ed. Piados, Argentina, 2015. María Dova es una física
argentina de la UNLP que participa del proyecto LHC activamente. También hay otro grupo en la
UBA liderado por Ricardo Piegaia.
.- Hawking, Stephen y Mlodinow, Leonard. El gran diseño. Crítica Editora. España, 2010.
.- Gellon, Gabriel. Había una vez el átomo. Colección Ciencia que ladra, Siglo XXI Editores.
Argentina, 2011.
CREDITOS:
.- Hawking, Stephen. Breve historia del tiempo. Ed. Bantam Books, Inglaterra, 1988
.- Quirantes, Arturo. Espacio-tiempo cuántico, en busca de una teoría del todo. Ed. RBA,
España, 2015.