Ensayo: Del Mar A La Ciudad

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ENSAYO: DEL MAR A LA CIUDAD

Oscar Colchado Lucio nació en Huallanca, Ancash (1947). Es un poeta, cuentista y


novelista. Fundó el Grupo Literario Isla Blanca y dirigió la revista Alborada/ Creación y
análisis. Es profesor de Lengua y literatura.

Ha recibido, entre otros premios, el “José María Arguedas” de cuento (1978), el “José
María Eguren” de poesía (1980), el Premio Copé (1983), el Premio Nacional de
Literatura Infantil y Juvenil (1985), el Premio Latinoamericano de Cuento (CICLA 87),
el Premio Nacional de Educación (1995), el Premio Nacional de Novela “Federico
Villarreal” (1996) y el Premio Internacional de Cuentos “Juan Rulfo” (2002).

En 1992 fue jurado en el Premio Casa de las Américas (Cuba). Su obra Cholito en los
Andes mágicos ha sido llevada a la televisión para los países del Grupo Andino.

Del mar a la ciudad es una obra escrita por Oscar Colchado Lucio, esta obra es una
compilación de cuentos que presentan panoramas distintos e interesantes. Permite
conocer la idiosincrasia, las costumbres, los temores y los sueños de los pobladores de
Chimbote, un puerto al norte el Perú.

“Del Mar a la Ciudad” de Oscar Colchado, tiene como centro la ciudad de Chimbote.
Esta ciudad representa algo más que un simple marco o un escenario en el que discurre
la vida de los personajes que protagonizan los siete cuentos que comprenden este libro.
Esta ciudad es en gran medida, un personaje más, cuyo carácter y perfil va emergiendo
con nitidez en la medida que se describen calles y ambientes característicos, se recrea el
clima y la atmosfera social, se conocen las opiniones, ideología y peripecias de los
personajes. Pero, sobre todo, Chimbote se define por la presencia del mar.

La historia de nuestro país está llena de paradojas. Una de ellas es que, a pesar del
enorme litoral con que contamos y la rica tradición social que nos liga al mar desde
épocas remotas, al entrar al siglo XX muy bien podía afirmarse que el grueso de la
sociedad le daba la espalda. De este modo, cuando a mediados del siglo se empieza a
impulsar la actividad pesquera hasta llegar a convertirnos, en la década siguiente, en el
primer productor de harina y aceite de pescado del mundo, la primera reacción es de
sorpresa, de asombro. Era como si recién nos diéramos cuenta de la existencia del mar y
sus inauditas riquezas.

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