Asignatura y Sección: Sociología Sección 4: Docente: David Elías Cárdenas Reyes
Asignatura y Sección: Sociología Sección 4: Docente: David Elías Cárdenas Reyes
Fecha: 16/7/2022
INTRODUCCION
Todos los Estados tienen las mismas funciones básicas en el sentido de que
son una organización de todas las instituciones legislativas y ejecutivas dentro
de un territorio concreto. Y, lo más importante, una organización controlada y
dirigida por una pequeña minoría. Para poder comprender mejor las funciones
podemos comenzar definiendo, ¿Qué es el estado?
¿Qué es el estado?
El estado está formado por un conjunto de instituciones que comprenden el poder ejecutivo,
el poder legislativo, la administración central y local, el poder judicial, la policía y las
fuerzas armadas. Al poder ejecutivo del Estado, se le llama frecuentemente gobierno.
(Introudccion a la Sociologia)
El Estado fija reglas generales y obligatorias para todos los miembros de una sociedad,
toma decisiones sobre las políticas que debe impulsar en los diferentes campos de la vida
social, establece procedimientos y traza canales precisos para el despliegue de los mismos.
El Estado es la arena donde se dirimen los conflictos sociales. Es una institución, o más
bien un conjunto de instituciones, que la sociedad ha creado para moderar el conflicto entre
intereses diferentes, a fin de mantenerlos dentro de cierto orden que permita el
desenvolvimiento de las variadas actividades y relaciones sociales. Todas las sociedades,
desde la más primitiva hasta las más avanzadas, en la actualidad se han dado alguna forma
de gobierno, alguna forma de organización del poder de la sociedad como fórmula para
mantener viva y actuante a dicha comunidad.
El Estado moderno tiene encomendadas una serie de tareas cuyo objetivo último es
garantizar el ejercicio de los derechos y libertades fundamentales del ser humano. La
libertad de creencia, expresión, movimiento y participación; el derecho a ser tratado como
igual ante la ley, conquistas de la Revolución Francesa, pueden mantenerse vigentes sólo
por vía de la acción y la fuerza del Estado. Max Weber afirma que el Estado es “el
monopolio legítimo de la violencia sobre determinado territorio”. Esta definición nos lleva
a relacionar al Estado con el espacio geográfico dentro de cuyas fronteras, él es el único
con capacidad para imponer un orden, en forma justificada y reconocida como válida por
los habitantes de dicho espacio geográfico. Esta exclusividad que detenta el Estado para el
manejo socialmente autorizado de la fuerza y la capacidad de sanción para quienes
violenten el orden social, nos resulta muy clara cuando algún individuo se ve afectado por
otro en sus derechos o en sus intereses y no puede castigar con sus propias manos a aquél
que lo agravió, sino que debe acudir a alguna de las agencias estatales, como por ejemplo al
ministerio público, para que ésta identifique la falta y aplique el castigo. En este sentido, el
Estado, a través de su facultad de elaborar leyes y reglamentos, estructura y ordena los
límites que deben tener las diferentes actividades sociales y, a partir de ahí, establece las
diferentes infracciones o faltas que se cometen si no se respetan esos límites. El Estado
determina también el tipo de sanciones o castigos que deben imponerse a quienes violentan
las normas, establece los procedimientos (juicios) para determinar si hubo infracción e
imponer el castigo correspondiente, y establece medios para asegurar que los juicios sean
imparciales.
Ya señalamos que el Estado es “el poder organizado dentro de una comunidad nacional”
y que la dominación que impone no puede sustentarse solamente en la fuerza, sino que
ahí que tengan que ver con la manera como los ciudadanos aseguran que la acción del
Estado cumple con los cometidos que tiene asignados. En sociedades democráticas, el
poder del Estado está acotado por un conjunto de reglas o normas jurídicas obligatorias.
El Estado se convierte así en un poder legal, regido por el derecho, es decir, es una forma
que él mismo se somete, al tiempo que debe velar porque sea observado y respetado de
Este conjunto de normas relativas a la vida en sociedad es lo que se conoce como derecho.
Se trata de ordenamientos sociales que deben ser observados y que se corresponden con
ciertas sanciones que se imponen cuando las leyes no se acatan.
Toda organización social requiere de normas que rijan su convivencia. El derecho posee
tres características esenciales que lo diferencian de prescripciones religiosas, dictados
morales o reglas de comportamiento fijadas por la costumbre. Esas características son las
siguientes:
El derecho cobra sus rasgos distintivos en el seno del Estado moderno, cuando el individuo
libre e igual se convirtió en el referente central de dicha forma de organización del poder.
El derecho antiguo o medieval no regía la vida de los hombres por igual, sino que
contemplaba reglas diferenciadas para los variados grupos que componían tales sociedades;
además, no solamente normaban la vida externa de los hombres, sino su vida privada, su
vida familiar. Así como el Estado es un producto de la modernidad, el derecho es
igualmente una institución moderna, de ahí que deba incluirse como cuarto elemento que
acompaña al surgimiento del Estado-nación.
En las sociedades contemporáneas, las diversas funciones y tareas que tiene encomendadas
el Estado se realizan mediante un conjunto de aparatos o instituciones. En ellos descansa y
a través de ellos se manifiesta el poder del Estado.
a) Gobierno: Es el órgano formalmente investido del poder estatal, a través del cual
dicho poder se expresa en toda su plenitud. El gobierno habla en nombre del Estado
y es, en última instancia, el responsable de las acciones de éste. Al gobierno le están
confiados el ejercicio del poder y la definición de la orientación política de la
sociedad: en pocas palabras, la toma de decisiones políticas, su ejecución y
cumplimiento.
b) Administración: Es un aparato del Estado que tiene por cometido el desarrollo de
actividades que hagan viable el ejercicio gubernamental. La administración está al
servicio del gobierno y depende formalmente del Poder Ejecutivo; le corresponde
aplicar lo decidido y ordenado por el gobierno.
c) Institutos armados: Conforman el brazo del Estado encargado de la administración
de la violencia, esto es, de la coerción. El aparato militar comprende un conjunto de
unidades tales como los ejércitos (armada y marina) y las fuerzas policiacas y de
seguridad del Estado.
d) Asambleas representativas: Son los órganos encargados de formular y aprobar
leyes, enmiendas o adiciones a las normas legales (Poder Legislativo). El Poder
Legislativo es un órgano deliberativo, de reflexión, que tiene, además, el cometido
de supervisar las acciones del gobierno; de ahí la necesidad de que sea
independiente y plural.
e) Poder Judicial: En toda sociedad existen diferentes y encontrados intereses que en
momentos de conflicto o choque exigen algún tipo de resolución, a fin de preservar
la convivencia social. Cuando dos personas reclaman una misma propiedad, cuando
un individuo se siente violentado en sus derechos por otro o cuando alguna de las
partes que firmaron un contrato deja de cumplir con los compromisos establecidos
por éste se genera un enfrentamiento que debe ser resuelto de alguna forma. De la
misma manera, cuando una entidad o estado se siente invadido en su esfera de
acción por otro o por el Estado federal, se requiere de una instancia que determine a
quién le asiste la razón. Ése es el papel del Poder Judicial.
A medida que las sociedades crecen, se desarrollan y se hacen más complejas, y conforme
las actividades y los grupos sociales se diversifican, las relaciones entre la sociedad y el
Estado reclaman la existencia de entidades capaces de integrar y organizar a los distintos
intereses a fin de resguardarlos y promover su injerencia en el proceso de toma de
decisiones.
c) Reclutan al personal político; es decir, entrenan a los líderes y a los cuadros políticos en
las actividades de liderazgo, dirección y representación.
d) Dan forma a la vida política, así como base social a la autoridad política, ya que una vez
en el poder definen la orientación y los programas del gobierno y le confieren a éste sus
apoyos sociales.
De acuerdo con los objetivos específicos que persiguen y el tipo de miembros que las
integran, las organizaciones sociales que participan políticamente pueden clasificarse de la
siguiente manera:
La relación entre partidos y organizaciones puede ser ocasional y ocurrir sólo en momentos
de lucha electoral o de movilización social, como cuando un partido político logra allegarse
el apoyo de grupos ecologistas, feministas o de colonos, para sus fines electorales. Sin
embargo, también puede tratarse de una relación regular y orgánica, esto es, con lazos
estructurales, permanentes. Un ejemplo de esta relación fueron los partidos socialistas y
comunistas que incluían a sindicatos como parte de su estructura, o los partidos verdes que
integran en su seno a organizaciones defensoras del medio ambiente. En algunos países
europeos todavía se mantienen estas relaciones orgánicas, pero cada vez es más frecuente
que las organizaciones sociales se rehúsen a colaborar con los partidos políticos,
defendiendo celosamente su independencia, porque el empeño fundamental de éstos es
conquistar y mantener el poder y no lograr las metas concretas que se proponen las
organizaciones sociales.
Las funciones del Estado pueden ser entendidas como poderes del Estado o como las
competencias de la Administración pública, ejercidas como funciones públicas por distintos
tipos de cargos públicos. Teniendo en cuenta el concepto, hay muchas teorías sobre cómo
debe manejarse este tipo de cargos o la forma correcta de ejercerlos.
Bibliografía