Vallislonga Nº5 - Las Mujeres de La Barbacana PDF

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Las Mujeres

de La Barbacana
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Tesoro de los diccionarios históricos de la lengua española 2021.
Diccionario histórico de la lengua española (1933-1936).
Real Academia Española.

V
iendo la definición antigua de la pala- y recordaban que ya habían preguntao y si traías
Un olmo, un tejo o un tilo
bra “barbacana” toma sentido el hecho muchos días.
plantado decenios atrás en la
de que el muro que delimita la Plaza de
plaza era el lugar de reunión Rincón de Palacio de Valdemeca pudiera Todas vestían de negro, algunas con pañuelo en
de los habitantes de un pueblo originariamente tratarse de un muro de defensa de la cabeza que tapaban moños trenzados de larguí-
cualquiera. Alrededor de él se una antigua fortaleza o de las primeras edificacio- simo pelo blanco y casi todas lucían algún adorno,
sentaban a hablar, a repasar nes, que se situaría en la parte más elevada del pe- collares o pendientes. Eran mujeres que toda su vida
los últimos acontecimientos, queño cerro sobre el que se asienta actualmente el la habían pasado en el pueblo hasta que, llegada una
pero también era el escenario núcleo del pueblo. edad y para salvar los rigores del invierno, marcha-
elegido para bailar o para ban a la ciudad con los hijos. De allí volvían más
enamorar a la persona con La barbacana actual, lejos de su supuesto origen modernas y renovadas, algunas sin moño y sin luto,
la que compartir el futuro. En defensivo, ha sido lugar de reunión y tertulia de va- pero todas ellas orgullosas de lo bien que le iba a
Valdemeca no había árbol en rias generaciones de mujeres de Valdemeca. Gra- la familia en la ciudad o de los buenos estudios del
cias a este muro, los que veníamos de fuera a pasar muchecho o la muchecha.
la plaza, sino una barbacana
las vacaciones al pueblo podíamos conocer y escu-
en la zona alta del pueblo.
char las historias y tejemanejes que aquellas muje- Era una generación habituada a los cambios, na-
res compartían con las vecinas. El muro original de cida en una monarquía, fueron luego mozas en una
Rincón de Palacio que formaba la barbacana, no era república, vivieron una guerra y criaron a sus hijos
como el actual reformado, sino que se trataba de una en una dictadura, hasta que, en su madurez, llegó la
construcción de piedra seca típica de la Serranía. democracia. Sin embargo, a pesar de esos cambios,
ellas siempre se mantuvieron como pilar familiar,
El primer encuentro que se tenía con las vecinas acostumbradas a trabajar duro en la casa y algunas
era a la llegada al pueblo, después de un largo via- en el campo, a criar hijos, a cuidar padres, a estirar la
je todas las mujeres del Rincón nos esperaban sen- despensa, a cuidar animales.
tadas en la barbacana para saludarnos y darnos la
bienvenida. Te recibían con dos besetes y entona- Nunca se quejaban de los rigores del pasado y no
ban cantinelas de lo maja y grandisma que estabas acababan de entender el presente, renegando de los

12 por: Norma Pérez García y Pachi Pérez Criado vallislonga · nº5 · 2022 13
nietos que no se comían sus guisos —“una guerra ten- La tradición de los mayos comenzaba con el sor-
dríais que pasar”—, ni porque estos preferían un bocadi- teo, una vez sorteadas las mozas y a ritmo de jota,
llo de Nocilla a un buen bocado de orza. “Pero ¿qué mi- estrofa a estrofa se va pidiendo licencia para cantar,
sión llevas?, si es que están enjugascaos”, se quejaban. pasando a retratar a la maya para, en la despedida,
sortear o emparejar el mayo.
A pesar de todo, disponían de tiempo libre y lo
compartían con las vecinas en la barbacana mien- Los Mayos no son únicos sino que cada pueblo
tras los hombres fumaban en el Cotanillo. Allí, entre tiene los suyos propios. Hay publicadas distintas
tertulias y cotilleos, se intercambiaban patrones de versiones y, si bien todas tienen en común la divi-
ganchillo y recetas de cocina (aunque siempre se sión en estrofas que definen la belleza de la moza
guardaban algún secretillo) mientras hacían labor u desde la cabeza a los pies, existen muchas variacio-
ojeaban quién pasaba por la calle. nes entre regiones e incluso entre pueblos cercanos.
Los Mayos de Valdemeca transcritos aquí —y, en ge-
La tía Juliana, la Marcelina, la Narcisa, la Lucía y
neral, los de la Serranía Alta de Cuenca— presentan
su madre María La Huelamera, la Carmen, la Trini-
más similitudes a los de algunos pueblos de Teruel
dad, la Herminia, la María, la Sinfo, son los nombres
como Griegos o Guadalaviar que a otros de la Serra-
de aquellas mujeres de nuestra infancia en la barba-
nía Baja, quizás porque la transmisión oral no en-
cana del Rincón de Palacio. A veces se unía la Dio-
tiende de fronteras. Mayas y mayos de la Vega del Codorno (Cuenca).
nisia o la Remigia. Allí, y para hacer más llevadero Estampa, 1928 / Rafael Campos
el momento, echaban un flit en el suelo, un líquido Comparando la recopilación de los mayos de Val-
azul para matar las moscas cuyos cadáveres barrían demeca con otros publicados de otras zonas, hemos
antes de recogerse a su casa. visto que había partes de la homenajeada sin deta-
Aspecto de la Calle Rincón de Palacio (¿años 70?)
llar, no sabemos si por olvido de la abuela o porque
Pero si hay algo que recordamos gratamente, es
aquí no se cantaban. Para completar la descripción,
el sentido del humor de todas ellas, cómo intercam-
biaban dimes y diretes, adivinanzas pícaras, chas- Los Mayos
carrillos y bromas, algo en lo que era insuperable
la Sinfo, cuyo enorme sentido del humor nos hacía Los cantos del mayo es una de las tradiciones que
pasar tardes inolvidables. se han trasmitido de generación en generación, los
mayos son canciones de ronda que se cantaban a las
Uno de los recuerdos más graciosos —para noso- mozas o maya a mediados de mayo.
tras, no para su protagonista— es cuando entre un
grupo de ellas decidieron hacerle los agujeros en las En el folklore español se solía denominar maya a
orejas con unos pendientes viejos a una chiquilla, una niña o joven preadolescente, ataviada con una
sujetándola entre todas hasta que finalmente logra- corona de laurel y otros adornos con flores, a la que
ron perforarle las orejas. dedicaban el mayo los mozos.

Estos, entre otros, son nuestros recuerdos, seguro En Cuenca esta tradición es antiquísima y se re-
que en cada rincón de Valdemeca había una barbaca- monta al año 1507. En 1959 se publicó en el periódi-
na y un grupo de mujeres que marcaron a otros tantos co “Ofensiva” un escrito sobre esta tradición, en la
niños y nos hicieron sentir un poco más del pueblo. que se aporta un documento que decía así:

Las reuniones de mujeres en esa época suponían, Cuenca, 27 de abril de 1507. Este día, los dichos
además de una forma de socializar, una vía de tras- señores Corregidor y Regidores mandaron que
misión oral. Con ellas y sus tertulias se perdió parte por quitar escándalos que hay en el traer ar-
de la historia del pueblo y ahora nos toca a nosotros mas los mozos que andan con los Mayos y por-
intentar recuperar lo que podamos para que no cai- que este año pasado mataron un mozo, man-
gan en el olvido. daban que ningún mozo ni personas con los
Mayos traigan armas, so pena que las hayan
Con este afán hemos recuperado los Mayos que de perder, y mandan pregonarlo en la Plaza de
nuestra abuela nos trasmitió por escrito. Quizás no la Picota y otras plazas.1 Reportaje en la
revista Estampa
estén completos, o alguien los recuerde de otra ma- en 1928. Archivo
nera, pero son unos Mayos de Valdemeca que quere- 1) www.cadenaser.com - El “mayo” de Cuenca se remonta a 1507 José Vicente Ávila
mos preservar para otras generaciones. cuando se cantaba a la “maya”, 14 mayo 2019.

14 Las Mujeres de La Barbacana vallislonga · nº5 · 2022 15


hemos decidido adjuntar estrofas de los mayos de son una muestra que esperamos se puedan ir com-
Griegos2 ya que, como hemos comentado, de los pu- pletando con aportaciones de otras familias que re-
blicados de Cuenca y Teruel, son los que presentan cuerden más estrofas o variantes.
más parecido a los de Valdemeca.
2) www.pcisa.wordpress.com - Recopilación de versos, partituras,
Los Mayos de Valdemeca ha sido una tradición audios y vídeos de las fiestas de Los Mayos de la Sierra de
tan antigua como bonita. Los que aquí presentamos Albarracín (archivo etnográfico).

* Las estrofas en color azul son las variaciones de los Mayos en la localidad de Griegos.
Ya estamos a treinta. Estas son tus cejas, Esa es tu garganta, Eso que te tapas
Del abril cumplido. En lo arqueadas, Garganta de cera, Con el delantal,
Alegraos damas, Los arcos de cielo Cuando bebes agua La media columna
que mayo ha venido. Y el cielo es tu cara. Todo se clarea. y el Palacio Real.

Ha venido mayo, Estos son tus párpados, Esos son tus hombros Esos son tus muslos,
Bienvenido sea, son dos picaportes, Que son escaleras Son de oro macizo,
Florando cañadas, cuando tú los cierras pa subir al cielo Donde se sostiene
Casando doncellas. yo siento los golpes. Y bajar por ellas. Todo el edificio.

Esta noche vengo Esos son tus ojos, Esas son tus manos Esos son tus pies,
Con mucha prudencia Dos luceros claros Cargadas de anillos, De andar menudito,
A pintar el mayo, Que alumbran de noche Para mis prisiones, Que por donde pisan
Si me das licencia. De los enamorados. Cadenas y grillos. Salen clavelitos.

Con todo el respeto, Tu nariz aguda Esos son tus pechos, Ya te hemos pintado
Si es de vuestro agrado, Como fina espada, Son dos fuentes claras Todas tus facciones,
Esta noche mismo Que a los corazones Donde yo bebiera, Ahora falta el mayo
Os cantaremos el mayo. Sin sentir los pasa. Si tú me dejaras. Que te las adorne.

Esta es tu cabeza, Esas tus orejas Tu cintura un junco Si quieres (nombre ella),
En lo redondita Con esos pendientes Cogido en la playa, Si es de vuestro agrado,
Que en ella se forma Adornan tu cara Todos van a ver Acuérdate (nombre él)
Una margarita. Y tu hermosa frente. cosa tan delgada. Recibes por mayo.

Ese tu cabello, Esas tus mejillas, Ya vamos llegando Moza, si no estás contenta
rubio como el oro, tan recoloradas, A partes ocultas, Con el mayo que te eché,
que cuando lo peinas, parecen dos rosas Nadie diga nada, Madruga por la mañana
se te enreda todo. en abril criadas si no le preguntan. Y ponte el mandil del revés.

Tu frente espaciosa Tus labios morados, Bibliografía:


Es campo de guerra La lengua encarnada, • Manuscritos de Herminia Azaustre, años 2004 a 2005.
donde el Rey Cumplido Y la dentadura, • https://cadenaser.com/emisora/2019/05/14/ser_
Plantó su bandera. Todo te acompaña. cuenca/1557852845_316892.html
• https://www.elblogdecuencavila.com/?p=16618
• https://funjdiaz.net/folklore/07ficha.php?ID=4524

16 Las Mujeres de La Barbacana

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