Juicio de Proporcionalidad
Juicio de Proporcionalidad
Juicio de Proporcionalidad
Hechos:
El juicio de p se divide en etapas, y de acuerdo al texto de Iván díaz cada una de ellas
contempla sub etapas o exámenes dentro de cada una
I. IDONEIDAD
Operaciones sucesivas:
La medida tiene por objeto proteger el Derecho a la vida de la menor, por ser la
patología de la recurrente una enfermedad mortal y degenerativa que, además, genera
un rápido y progresivo deterioro al punto de perder todas las habilidades adquiridas,
produciendo una pérdida completa del lenguaje y el sistema motor.
Es por ello que la medida que adopta la Corte que ordena brindar cobertura al
tratamiento requerido por la parte recurrente (que es la medida evaluada) resulta
efectiva para proteger y preservar su Derecho a la vida y al disfrute del más alto nivel
posible de Salud, consagrado en la Convención sobre los Derechos del Niño,
invocado en el fallo analizado. Permitiendo en los hechos detener la grave
sintomatología que le aqueja, evitando que su condición siga deteriorándose,
mejorando sus aspectos motores y asegurando su sobrevida. (C.S
II. NECESIDAD
4 Exámenes
1. ¿Existen otros medios idóneos para favorecer la finalidad perseguida con la medida
limitativa de derechos fundamentales?
En cuanto a medios alternativos idóneos, para este caso en particular, al ser una
enfermedad única en su tipo, el tratamiento que solicita la recurrente es el único
existente para tratar su patología, por lo que dado su alto costo, y atendiendo a la
medida analizada, el gasto lo debe soportar Estado de Chile, por medio de sus las
políticas públicas sanitarias, a través del Fondo Nacional de Salud, así como lo hacen
con las enfermedades del GES o en materias especiales, mediante la Ley Nº 20.850.
Por lo que se entiende, que es el único método idóneo para cumplir la finalidad de la
medida que se está sometiendo a control, siendo una medida necesaria que no admite
reemplazo.
Al cumplir con el primer exámen es que se hace innecesario proseguir con el resto de
los exámenes, pasando de manera inmediata a la regla de ponderación.
III. PONDERACIÓN
El derecho fundamental afectado y que se contrapone con el derecho a la vida en este caso es
la Juridicidad consagrado en el artículo 7 de la Constitución Política de la República, la cual,
hace referencia al principio de legalidad y a la asignación de recursos mediante el presupuesto
destinado al gasto público en materia de salud.
Principio de Legalidad:
En el caso dicho principio se refiere al marco jurídico que rige al Minsal y Fonasa para
cumplir con las funciones que les corresponde desarrollar en cuanto al otorgamiento de
prestaciones de salud, debiendo atenerse ambos organismos a lo establecido en los textos
normativos y reglamentarios vigentes, tales como el DFL N°1 del Minsal, Ley 19.966 (GES),
Ley 20.850 (Ley Ricarte Soto), etc. entre los cuales no se encuentran disposiciones que
contemplen las cobertura financiera para el medicamento (Brineura) solicitado por la
recurrente. En este sentido se trata de un sistema completamente reglado (Sistema de
protección financiera) al cual las recurridas se deben someter al tomar decisiones tratándose
de una política pública, en virtud del cual ellas se adoptan tomando en consideración no sólo
un criterio económico sino también uno técnico y sanitario, emanando así actos
administrativos motivados o fundados los cuales se basan en antecedentes objetivos y
verificables que se ajustan debidamente a la normativa constitucional, legal y reglamentaria
vigente. (Recurridas y Corte de Apelaciones)
En consecuencia la probabilidad de afectar el principio de legalidad no resulta del todo
verificable ya que si bien dichos organismos se encuentran obligados por los cuerpos
normativos antes referidos, en virtud de lo establecido en la Constitución (Art. 7), en cuanto al
objetivo, procedimiento, mecanismos y requisitos a los cuales deben atenerse, debemos
considerar en el caso particular que el derecho conculcado se encuentra consagrado en la
norma con mayor rango en el ordenamiento jurídico, esto es, en la Constitución, la cual
prevalece respecto de las normas citadas. (Corte Suprema)
Ambos intereses en colisión, el Derecho a la Vida y la Juridicidad de las normas, así como su
estrecha relación con el orden Económico, son importantes y trascendentes para el correcto
funcionamiento de todos los escalafones dentro de una sociedad, pero la autoridad al tomar
una decisión no debería invocar esta última (fundamento económico), poniéndolo en contra
del derecho a la vida y la integridad física o psíquica, principalmente porque ésta es un
derecho consagrado en una norma mayor, La Constitución Política de la República, la cual
prevalece respecto de los distintos cuerpos normativos. Por lo que el principio de Juridicidad
parece tener menos peso que el Derecho a la vida atendiendo al criterio de supremacía
Constitucional señalado y a la relevancia del derecho que se conculca. Mientras que este
Derecho a la vida parece tener un peso mayor considerando que la posibilidad de que sea
gravemente afectado es segura si no se brinda el tratamiento requerido de forma oportuna.
La negativa de financiamiento del fármaco puede acarrear graves consecuencias para la vida y
la salud de la recurrida, ya que con ello no solo se agudiza su sintomatología y deterioro, sino,
que se pondría en grave riesgo su sobrevida, ya que se trata de un medicamento indispensable
para una enfermedad frecuentemente mortal. (CS)
La Corte Suprema, dentro de el marco de sus atribuciones, manifiesta las disposiciones que
deben seguir los recurridos, en donde,la cobertura y el financiamiento inmediato del
tratamiento requerido, siendo el único capáz de controlar el padecimiento de la recurrente. Por
lo que es deber de la administración de salud en Chile que, cuando se involucren menores,
debe prevalecer el respeto irrestricto por ellos, en base a los compromisos adquiridos en
materia internacional y, que los criterios de orden económico en cualquier clase que se
presenten, se verán vencidos al ser contrapuestos al interés superior del niño