Material de Lectura - Semana 2

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MATERIAL DE LECTURA

COMPLEMENTARIO

SEMANA 2

PÁG. 3 INTRODUCCIÓN

PÁG. 4 UN OBJETIVO DE VALOR

PÁG. 9 LA IMAGINACIÓN CREADORA

PÁG. 11 LA PELÍCULA DE TU VIDA

PÁG. 13 LA NUEVA VIBRACIÓN

PÁG. 14 EJERCICIOS
Ahora que empezaste a sentir la diferencia entre
estar en una frecuencia más baja o más elevada (tal
vez sentiste un fluir diferente en tu día a día o un
estado emocional diferente, más agradable) llegó el
momento de direccionar esa energía hacia una visión
clara y específica.

Toda esta energía cultivada nos servirá para crear esa


realidad que queremos vivir pero para eso hay que
decidir cuál es esa realidad y cuál es su frecuencia.

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No solemos ponernos objetivos y cuando lo
hacemos, suelen ser a largo plazo, nos olvidamos
que lo tenemos o no son enteramente específicos.

Además, un objetivo es mejor que ningún objetivo


pero no todo objetivo es un buen objetivo. Pero
¿qué caracteriza un objetivo de valor? Para eso
tenemos que diferenciar entre 3 tipos distintos de
metas y ver cómo nos afecta cada una.

Pero antes vale preguntarse, ¿para qué nos


ponemos objetivos? ¿para lograr más cosas? ¿para
tener más? ¿para qué?. En definitiva, un objetivo
sirve para expandir nuestro ser. Pero ¿por qué?

Cuando determinamos una cierta meta, es como


poner el lugar de llegada de un viaje. Si no nos
ponemos un objetivo, no sabemos hacia dónde
vamos. Cuando determinamos una cierta meta, es
como poner el lugar de llegada de un viaje. Si no nos
ponemos un objetivo, no sabemos hacia dónde
vamos.

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Si un marinero sale con el barco pero no sabe a
dónde va, da vueltas y vueltas y se encuentra con
lo que se encuentra y muchas veces sigue en el
mismo lugar. Muchos andamos así por la vida.

Ahora, si ponemos un objetivo, podemos trazar un


camino. Luego en el recorrido cosas van pasando y
vamos adaptándonos para llegar a ese lugar. El
punto es que siempre nos adaptamos para
acercarnos cada vez más a ese lugar que
decidimos. Si no tenemos ese norte, el primer
viento que suceda nos lleva hacia anda saber
donde.

Sin embargo, al saber el objetivo de forma clara y


específica, puede pasar lo que sea que siempre
podrás adaptarte para volver a tu camino y llegar a
destino. Además, una persona que nunca navegó
en su vida y tiene un viaje tormentoso, con vientos
fuertes y olas enormes, llega a puerto siendo
transformado por esa experiencia, siendo otra
persona, ahora un marinero mucho más
habilidoso. Esa persona se expandió en ese viaje. Y
ese es el propósito de tener un objetivo, que nos
expanda, que nos haga crecer, vivir algo distinto,
ser una versión nuestra que despierta su potencial

El objetivo está para expandir nuestro


infinito potencial a la acción.

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Ahora que entendimos esto, que el objetivo está
para darnos la transformación en el camino de
lograrlo, que el foco es en el proceso, podemos
hablar de los tres tipos de objetivos. Estos son:

Objetivo Lateral
Objetivo Diagonal
Objetivo Mágico (o Salto cuántico).

El objetivo lateral no expande, como el nombre lo


dice, te mantiene moviendo tu ser en una misma
frecuencia, parece algo distinto pero en realidad,
no te expandes, te quedas en lo seguro y no haces
nada nuevo, repites patrones.

El objetivo diagonal parece que nos expande pero


nos mantiene en frecuencias adyacentes, porque
te imaginas lo que podrías hacer para crecer un
poquito, te moves y requiere un esfuerzo para
lograrlo pero luego vuelves a tu mismo lugar.
Terminas fluctuando en frecuencias tan próximas
que no genera una expansión, solo nos da la
ilusión de cambio. Lo podemos identificar porque
logramos pensar en qué pasos tomar para
lograrlo. La mayoría de nosotros caemos en este
objetivo.

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El objetivo mágico está en una frecuencia tan
alejada de la que estamos, que no tenemos idea
cómo lograrlo, pero algo nos genera. Algún miedo
o entusiasmo o idealmente ambos. Es eso que ni
bien lo pienses, te enciende el alma, te aprieta el
estómago y tal vez piensas que no es posible. No
te atreves a soñarlo porque no puedes concebir
cómo lograrlo, pero ahí está el oro.

Si recordamos que todo es energía que vibra en


cierta frecuencia y la energía no se crea ni se
destruye, solo se transforma, esa realidad que
queremos vivir ya existe, solo tenemos que
conectar con esa realidad, mantenernos
enfocados en ella con nuestra atención y liberar
nuestra habilidad imaginativa para construirla en
nuestra cabeza, conectarnos con esa frecuencia,
traerla al cuerpo y cuando estemos ahí, podremos
ver lo que antes no veíamos. Ahí llegan las
oportunidades, ahí llegan las ideas, las personas y
las herramientas.

Es como si estuvieses caminando y quieres subir


una montaña que nunca viste. No sabes por donde
es el camino, empiezas a caminar y lo descubres
en el camino o te da miedo y abandonas la idea
por el desconocido.

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Pero si yo te dijera que hay una versión tuya que
ya la subió, que está arriba de la montaña mirando
para abajo hacia tí, viéndote empezar tus primeros
pasos.

Esta versión tuya puede observar el camino


completo, puede ver cuál es la mejor forma y que
si sigues caminando, encontrarás una escalera que
te ayuda.

Esta versión eres tú alineado a la frecuencia


que quieres vivir (subir la montaña).
Ahora te toca ser el que está arriba
de la montaña para ver el camino.

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Desde chicos que nos frenan la imaginación, nos
reprimen y buscan traernos a la ‘’realidad". Nos
educan de esa forma y critican a los que ´viven en
las nubes´. Nos dicen que dejemos de imaginar
tonterías, que estamos perdiendo tiempo, que
‘’tenemos que crecer’’. Alguien que construye vidas
extraordinarias es el niño que sigue jugando de
adulto con juguetes de adultos. Pasa de hacer
castillos de arena a rascacielos, de aviones de papel
a llevar personas a la luna.

La imaginación es lo que permite concebir lo que no


existe y al hacerlo, permite que seamos los canales
que traemos esa idea a la realidad material.

Así surge cada invención. Sabemos que las ideas


existen y cuando es su momento, la persona que
está receptiva y acciona para llevarla a cabo, la
convierte en material.

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Ahora permítete soñar porque tu parte autocrítica,
que limita tu vida, es solamente una programación
que repite lo que te decían de chico. Pero hoy
tienes la oportunidad de transformarlo y de
reprogramarte

Prueba imaginarte la vida que quieres, sin juzgarla,


permítete ser loc@ o absurd@.

¡Libérate!
Cuanto más seas libre de imaginar y
soñar, más elevadas son las frecuencias
con las que podrás conectar y más
podrás crear en tu vida.

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Todos vivimos una película que nos inventamos
constantemente, seamos conscientes o no.

Todo el tiempo tu mente te está contando algo que


te dices. Dependiendo de nuestra programación nos
contamos una historia que nos haga sentir bien y
otras no tanto. Algunas nos conectan con el miedo y
otras con entusiasmo.

Todo tiene que ver con la expectativa del resultado.


Si creemos que será negativo, nos agarra miedo o
ansiedad. Si creemos que será positivo, nos
sentimos alegres, entusiasmados, inspirados. En
realidad lo que estamos haciendo es conectando
nuestro foco a una frecuencia u otra.

Elegí lo que quieres vivir.


Escribe la película de tus sueños y
¡sé el personaje principal!

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Escribe la película de tu vida con tus sentidos,
experimentándola con el cuerpo, agregando los
pensamientos que tienes, las opiniones sobre lo
que percibes.

Cuéntate esa película sobre lo que estás viviendo


en tu vida ideal y llegará la emoción
correspondiente, la vibración de la frecuencia
correspondiente.

Cuánto más escribas, más detalle, llevando al


cuerpo con tus sentidos, más los llevarás al
inconsciente y a tus nuevas conexiones neuronales,
haciéndolo más normal para tu mente

¡hasta que lo ves en tu realidad!


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La idea es vivir la mayor parte del tiempo
en tu nueva vibración, en sentir ese
agradecimiento en tu pecho, la calma en tu
respiración y el placer de simplemente ser,
porque ya está, ya lo estás viviendo.

Esta semana será cuestión de disfrutar la emoción


de esa realidad. De jugar a que ya lo estás
experimentando y disfrutar de imaginar.

Podrán venir situaciones que te quieran distraer


para volver a las creencias de miedo y crítica, a la
inacción; pero tu trabajo es recordar que es cuestión
de foco, de preparar tu semana y tu día para que
incluyan momentos de recordar (alarmas) para
sentirte en esa vida sin apego a que lo que pasa o no
pasa, porque ya pasó.

Sentirte ahí es todo lo que nos interesa. Y para eso a


continuación les dejo algunos ejercicios.

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Para ejercitar tu imaginación te dejo dos ejercicios:

1. Escribir historias sin lógica y sin sentido, fluir con


lo primero que se te venga a la cabeza y ver hacia
dónde te lleva sin control o juicio. Haz tres o cuatro
historias así para ver si vas animando a que tu
imaginación fluya.

2. Durante tu día, observa a personas con quien


trabajas, o que ves en la calle y dedícale cinco a diez
minutos imaginando cómo será su vida, cómo es,
qué piensa, qué cree de sí mismo. Create la novela
de lo que está viviendo en base a la observación que
estés haciendo de esa persona sin juzgar de bueno o
malo, solo imaginar (cuidado para no mirar mucho
así no se dan cuenta). Esto permite que utilices los
estímulos del momento para que fluya tu
imaginación. El juicio de valor te frena en una
historia, la idea es que vayas sumando información
de cómo sería esa persona. ¡Permítete ser absurd@!

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1.Escribe todo lo que no te gusta de tu vida en una
lista. Sin miedo, es el momento de ser crítico y
dejarlo salir.

2.Ahora, de cada uno de esos puntos que elegiste,


escribe lo que te gustaría que sea en su lugar, como
te gustaría que sea idealmente. Su opuesto positivo.

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Una vez que elijas un objetivo que te expanda pero
no te abrume y que no tengas idea de cómo
lograrlo, escribe en un pedazo de papel o imprime y
corta el que te proporcionamos aquí abajo
empezando la frase de la siguiente forma:

¨Estoy feliz y agradecid@ ahora que…¨


Completa tu frase en presente, sucediendo en


positivo y que sea medible y específico.

Utilicen esta tarjeta para llevarla en su bolsillo o


billetera y leanla cada vez que la toquen. Pueden
plastificarla si prefieren tambien.

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1. Escribe el guión de un día de tu vida ideal en
alrededor cinco páginas dejando que fluya tu
imaginación libremente, no te tienes que casar con
lo que escribes

¡Déjate ir y sé loc@!

Una vez que lo hagas, tendrás más claridad y habrás


inyectado una nueva frecuencia en tu inconsciente.

2. Ahora llegó el momento de elegir qué momento


te conectó más con tu objetivo, qué momento
representa tu objetivo siendo realizado de la forma
que más te conecte.

Escribe ese momento, esa escena agregando


percepciones de tus cinco sentidos, luego la opinión
que tienes al respecto y la emoción que te genera.

3. Pásalo en limpio y tenlo exactamente como tú


quieres que sea.

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Utiliza la meditación que les di para conectar con tu
guión de ese momento todas las mañanas al
despertarte y un día, al llegar al estado emocional
de esa realidad, abre los ojos y manteniendo ese
estado, graba un audio tuyo leyendo en voz alta ese
guión desde ese estado, ¡disfrutándolo!

Escucha ese audio durante tu día varias veces, es tu


ancla a tu nueva frecuencia.

Repite todo el día la afirmación de tu objetivo


¨Estoy feliz y agradecid@ ahora que…¨Ponte
alarmas cada par de horas para chequear en qué
frecuencia estás y regálate dos minutos para cerrar
los ojos e imaginar tu vida ideal con tus sentidos y
emociones.

Escribe al final de tu día un diario sobre cómo fue


tu maravilloso día de la realidad que quieres vivir
como si la hubieses vivido ese día.

¡Jueguen a ser niños y


utilicen esa imaginación lúdica!

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Recuerden no caer en la trampa de la presión de tener que
sentirte siempre bien o estar siempre arriba. El tema no es
reprimir o negar sino aceptarlo y permitirte imaginar y
volver el foco a la vida que tu sí quieres. Recuerden:

Todo lo que no te gusta,


te muestra la posibilidad de algo
que sí te gustaría

Estén atentos que el miércoles vamos a tener un desafío


en el área de comunidad y tienen que tener el guión
hecho para ese entonces.

¡Disfruten!

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