Temario #1 Concursal
Temario #1 Concursal
Temario #1 Concursal
Es la rama del Derecho mercantil formada por las normas sustantivas y procesales que tienen
por objeto la regulación del concurso de acreedores. Su finalidad es buscar una solución a la
situación de insolvencia de un deudor respecto a varios de sus acreedores, para que el primero
pueda finalmente cumplir con sus obligaciones.
Entre nosotros, Carrasco Delgado, define al derecho concursal como “aquella rama jurídica que,
por medio de procedimientos universales y extraordinarios, persigue obtener mejoras en la
recuperación de créditos, así como, la optimización de los costos involucrados, ya sea por medio
de la realización de la masa activa, o bien, por la reestructuración de la misma, regido como
regla general por la pars condictio creditorum. (“igual condición de crédito”, y supone la paridad
de tratamiento, en igualdad de condiciones, para los acreedores. Su objeto es la satisfacción
proporcional de los derechos de los acreedores, respetando la respectiva posición preferencial que
tengan los mismos en virtud de la ley (por ejemplo, un acreedor hipotecario).
2. ¿QUÉ ES EL CONCURSO?
“un proceso jurisdiccional que, como todos los procesos, sirve de cauce para que los Tribunales
de Justicia juzguen sobre la procedencia en Derecho de prestar una tutela jurisdiccional a un
sujeto que la solicita frente a otro u otros sujetos y, en caso de resultar procedente, concedan y
hagan efectiva dicha tutela.
El concurso, sin embargo, aludiendo al número de partes involucradas, debe ser entendido como
“la participación en un mismo acto de diversas personas que se hallan interesadas en él. Ej.: es
necesario el concurso de todos los condominios de un inmueble para la validez de los actos
relativos a éste”.
1º Lograr la máxima satisfacción de los acreedores con respeto del principio de igualdad, de
manera que el eventual quebranto económico que lleve aparejada la insolvencia del deudor
común se reparta de manera proporcional entre todos los acreedores.
2º Facilitar la conservación del patrimonio del deudor insolvente, particularmente, cuando ese
patrimonio está destinado a la explotación o ejercicio de una actividad empresarial o profesional
que no podría continuar si el patrimonio se extinguiese por completo (Principio de Conservación
de la Empresa)
En su artículo 1°, expresamente, dispone que “[…] establece el régimen general de los
procedimientos concursales destinados a reorganizar y/o liquidar los pasivos y activos de una
Empresa Deudora, y a repactar los pasivos y/o liquidar los activos de una Persona Deudora”.
“Un proceso ejecutivo patrimonial de orden público, de carácter universal y colectivo, que
persigue mediante la administración y/o liquidación de los bienes del insolvente, el pago a los
acreedores conforme la graduación legal” (Juan Esteban Puga)
I. Bilateralidad de la audiencia. El principio significa que el juez tiene que escuchar a todas
las partes en el proceso antes de que haga su juicio.
II. Concentración y economía procesal. El principio de economía procesal, tiende a evitar esa
pérdida de tiempo. El principio de la concentración, en cambio, tiene por finalidad reunir o
concentrar en una sola audiencia o en el menor número de audiencias el desarrollo del
proceso.
III. Celeridad. “la prontitud de la justicia a través de la rapidez y velocidad del proceso; éste
último concebido como un sistema de garantías”. En consecuencia, por aplicación del
citado principio, se pone fin al sistema de plazos no fatales, ambiguos y extensos, que
dilataban innecesariamente el procedimiento. Se le reemplaza, en cambio, por un sistema
de plazos fatales y definidos para evitar incertidumbres.
IV. Publicidad. Se reemplazan las publicaciones en el Diario Oficial y las notificaciones
judiciales, por un sistema público virtual, denominado el Boletín Concursal, de carácter
gratuito (V. Ley Art. 2 N°7 y página Web de la Superintendencia de Insolvencia y
Reemprendimiento (en adelante SUPERIR, V. Ley N°20.720, Art. 331 y ss.:
http://www.superir.gob.cl/).
V. Racionalidad económica. La “racionalidad económica” es un principio que pretende “la
conjugación perfecta y armónica entre los intereses del Derecho (y, en forma particular,
del Derecho Concursal) y aquellos propios del ámbito de los negocios” (SILVA P., 2012), a
saber, promueve el impulso económico de las empresas que pueden caer en crisis de
insolvencia, instando por acuerdo oportunos, tendientes a la reorganización, más que a la
liquidación de la empresa, pues postula que la terminación de una empresa trae graves
problemas sociales y económicos.
b) En materia de recursos.
1.- Reposición:
recurrida.
La resolución que falla la reposición no es susceptible de recurso alguno (V. Art. 4 Núm. 1).
2.- Apelación:
II. Plazo para interponerlo: Cinco (5) días desde la notificación de la resolución recurrida.
3.- Casación: Se rige por las reglas generales (V. Art. 4 Núm. 3)
c) en materia de incidentes
Solo pueden promoverse incidentes en aquellas materias en que la ley expresamente lo permita.
Se tramitan conforme a las reglas generales prevista en el Código de Procedimiento Civil. Luego, se
trata de cuestiones accesoria de al juicio que requiera pronunciamiento especial con audiencia de
las partes. (V. Art. 82 del Código de Procedimiento Civil). Se tramita con sujeción a las reglas
establecidas en los artículos 89 al 91 del Código de Procedimiento Civil, si no tiene en la ley una
tramitación especial (V. Art. 3, inciso 1°, incidente de incompetencia; Art. 87, incidente de
impugnación de acuerdos; Art. 337 N°7, inciso 4°, incidente de remoción).
No suspenden el procedimiento concursal, salvo que esta ley establezca lo contrario (V. Art. 5).
d) en materia de notificaciones
12. ¿CUÁL ES EL OBJETO DEL DERECHO CONCURSAL? BREVE ANÁLISIS DE LAS TUTELAS
INDIVIDUALES, EN COMPARACIÓN CON LAS TUTELAS COLECTIVAS.
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14. ¿CUÁLES SON LAS TEORÍAS SOBRE LA INSOLVENCIA? EXPLIQUE Y, EN PARTICULAR, REFIÉRASE
A LA CRÍTICA DE ARAYA PAREDES Y BOFIL GENZSCH SOBRE EL CONCEPTO DE “INSOLVENCIA” EN EL
PROYECTO DE LEY DE REORGANIZACIÓN Y LIQUIDACIÓN DE ACTIVOS DE EMPRESAS Y PERSONAS
(V. LECTURA COMPLEMENTARIA: ANÁLISIS Y COMENTARIOS A LA REFORMA AL RÉGIMEN
CONCURSAL CHILENO (BOLETÍN N°8324-03), UNIVERSIDAD DE CHILE, EN REVISTA DE DERECHO –
ESCUELA DE POSTGRADO N°4, DICIEMBRE DE 2013)
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“el estado patrimonial vicioso y complejo que se traduce en un desequilibrio entre el activo
liquidable del deudor y su pasivo exigible, de modo que coloca al titular en la incapacidad objetiva
de cumplir, actual o potencialmente, los compromisos que lo afectan”
a) Generalidad:
La insolvencia no es el mero hecho del no pago de una obligación, sino el estado global de
impotencia para pagar el conjunto de obligaciones que gravan al deudor.
Esta característica distingue a la insolvencia del “mero incumplimiento” de una obligación, efecto
previsto y regulado por el Código Civil en el efecto de las obligaciones y que da derecho a la
ejecución individual del deudor por el acreedor (V. Art. 1545 a 1559 del Código Civil, en relación al
Art. 2465, y Art. 434, 530 y 544 del Código de Procedimiento Civil).
b) Permanencia:
El estado de impotencia patrimonial que referimos, debe ser precisamente eso, un “estado”, es
decir una situación de relativa estabilidad y no una simple coyuntura pasajera subsanable en el
corto plazo.
c) Objetividad:
Esta consiste en la posibilidad de evidenciar en los hechos el estado crítico del patrimonio del
deudor, cuestión que hará el Juez a través de la prueba que se le rinda y que sea conducente para
formar su convicción en orden a que el deudor padece de un desequilibrio patrimonial efectivo y
no aparente.
d) Insalvabilidad:
Es decir, que la situación patrimonial que afronta el deudor insolvente sea de tal magnitud que no
sea posible superar por sus propios medios la crisis patrimonial por la que atraviesa.
50 y sgts
19. ¿CUÁLES SON LOS PRINCIPIOS CONCURSALES? EXPLIQUE
I.- Principio clásico de la par conditio creditorum (igual condición de los acreedores) o par
conditio omnium creditorum (igual condición de todos los acreedores).
La regla par conditio creditorum, o “igual condición de crédito”, no es una regla de igualación de
créditos, a saber, una en que todos los créditos de los acreedores pasan ser considerados como
“iguales”, sino una de aseguramiento de oportunidades similares para los acreedores en el
concurso del deudor insolvente, mediante la eliminación de la regla prior in tempore, potior in
iure, “primero en el tiempo, preferido en el derecho”, propia del derecho común, que premia a
quien primero llega premunido de un “crédito personal”, ante la garantía que le confiere el
patrimonio del deudor (derecho de prenda general)
Este es otro de los principios clásicos que han orientado a los distintos ordenamientos jurídicos
que se han preocupado de dar protección al “crédito”86, especialmente en situaciones de
insolvencia, instituyendo acciones individuales y colectivas.
La universalidad es un principio que se deriva de la par condictio creditorum y en cuya virtud, para
propender a la igualdad de los acreedores, como también a la eficacia del concurso, se allegan por
una parte todos los acreedores del deudor, conformando lo que se denomina “masa pasiva”,
mientras que por la otra se reúnen todos los bienes del deudor en falencia, lo cual constituye la
“masa activa” del concurso o de la quiebra, o simplemente, el “activo”. La universalidad también
tiene una manifestación procesal, que consiste en que un solo tribunal ha de conocer todos los
juicios contra el deudor fallido y relativos a sus bienes.
Para la eficacia de los fines del concurso, se hace preciso que sólo exista un único procedimiento
ante un único tribunal ante el cual concurran todos los acreedores y se alleguen todos los bienes
afectos al concurso. De lo que se trata es de evitar la duplicidad de concursos, lo que rompería la
igualdad de los acreedores y la universalidad.
Significa que en el concurso concurre una multiplicidad de intereses particulares que naturalmente
propenden a su satisfacción individual, en circunstancias que es muy posible que ellos no se
satisfagan en su integridad, Por ello, es preciso ordenar y supeditar el querer individual a los
intereses superiores del conjunto de los acreedores. Un buen ejemplo de esto, es que –dictada la
Resolución de Liquidación-se suspende el derecho de los acreedores para ejecutar
individualmente al fallido (V. Ley Art. 135).