CASO 1 y 2
CASO 1 y 2
CASO 1 y 2
El caso descrito es un delito de homicidio. El sobrino S ideó y llevó a cabo un plan para
adelantar su herencia mediante la muerte de su tío T. S aprovechó su cercanía familiar para
manipular y engañar a T, sugiriéndole un paseo diario en un lugar de alta incidencia de
tormentas y en la hora del día con mayor concentración de descargas eléctricas, sabiendo que
esto aumentaría significativamente el riesgo de que su tío falleciera. El acto de S se puede
considerar una forma de homicidio doloso, ya que el plan fue diseñado con el objetivo
específico de causar la muerte de T. Además, el hecho de que S haya utilizado un método que
no es directamente violento no lo exime de responsabilidad penal. En conclusión, el caso
descrito es un delito de homicidio, y S debe ser responsabilizado por su acción.
CASO 2
El empresario Mr. E dedica gran parte de su tiempo libre a la biología marina, habiendo incluso
alcanzado el grado de doctor en biología. Al inaugurar Mr. E una nueva planta de producción
de celulosa de su propiedad, situada en la ribera de un rio, el Dr. E piensa fugazmente en que
la población de cangrejos fluviales irremediablemente desaparecerá por efecto de los vertidos
de la nueva fábrica. En efecto al cabo de unos meses, lo cangrejos prácticamente han
desaparecido, sin embargo, Mr. E previamente había solicitado y obtenido de modo
plenamente acorde con la disposiciones reglamentarias y legales pertinentes permisos para
iniciar la nueva actividad comercial.
El caso descrito podría ser considerado como un delito ecológico o ambiental, dependiendo de
las medidas y leyes específicas del lugar donde ocurrió el hecho. Aunque el empresario Mr. E
haya obtenido los permisos necesarios para iniciar su nueva planta de producción de celulosa,
si los vertidos de la fábrica resultaron en la desaparición de la población de cangrejos fluviales,
se podría argumentar que Mr. E cometió un delito ecológico al no tomar medidas adecuadas
para prevenir la contaminación del rio. Es importante señalar que este tipo de delitos no
siempre requiere de una intención maliciosa, sino que también pueden ser considerados
delitos por negligencia o falta de diligencia debida. En este caso, el hecho de que el empresario
Mr. E sea un biólogo marino con conocimientos previos de la posible contaminación del río
podría ser un factor importante en su responsabilidad en la desaparición de la población de
cangrejos. En conclusión, el caso descrito podría ser considerado como un delito ecológico o
ambiental, dependiendo de las normas y leyes específicas del lugar donde ocurrió el hecho.