tp2 Folk y Lit

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Universidad Nacional de las Artes

UNA

DEPARTAMENTO DE FOLKLORE
“PROF. ANTONIO BARCELO”

APELLIDOY NOMBRE: Méndez Yeny Luisa

CATEDRA: Folklore y Literatura

EQUPO DOCENTE:

Titular: Claudio Thibaud

Adjunta: María Angélica Guelmes

TRABAJO PRACTCO: N°2

Año: 2023
1- Biografía de Atahualpa Yupanqui:

Atahualpa Yupanqui que en quechua quien quiere decir “el que viene de
tierras lejanas para decir algo”, ese era el seudónimo que utilizo de
quien en vida fuera HECTOR ROBERTO CHAVERO: cantautor,
guitarrista, poeta y escritor argentino.
Nació en 1908 en Campo de la Cruz, en José de la Peña, partido de
Pergamino provincia de Buenos Aires.
Su primer encuentro con la música fue de la mano del Padre Rosaenz y
luego de quien fuera un gran referente para él, Don Bautista Almirón,
maestro guitarrista.
Su temprano acercamiento con la música lo sello a fuego.
De familia ferroviaria, en 1917 se trasladan a Tucumán, lugar donde
Atahualpa dejo florecer sus más puro sentimiento de amor por aquellos
paisajes y les dedico varias canciones, zambas y su famoso poema
“Camino del Indio”, que escribió a sus 19 años.
En su esplendor de la vida recorrió varias provincias de nuestro país
instruyendo y nutriéndose de su costumbres, música y tradiciones;
trabajo en varios oficios pero nunca abandono su amor por la música.
En 1931, en Entre Ríos, participo de una sublevación de los hermanos
Kennedy, la cual fue un fracaso y tuvo q exiliarse en Uruguay.
En 1934 regresa a la Argentina.
Por su afiliación al partido comunista su obra sufrió censura y también
fue perseguido, torturado y encarcelado, es entonces donde decide
empezar su retiro en las sierras de Córdoba, más precisamente en cerro
colorado donde yace su casa, y viaja con mucha frecuencia a Francia
donde se radica por varios años y donde conoce a Edith Piaf, ella se
enamora de su voz y su expresión folklórica, luego de tantos años
renuncia al partido comunista y en 1953 se levanta su proscripción y
vuelve a grabar sus obras en el país.
Su reconocimiento fue de nivel internacional, recibió muchos premios en
Francia, Japón, México, Venezuela, Colombia y otros países de
América. En Argentina el escenario más ansiado e importante para los
folkloristas lleva su nombre como reconocimiento, en la ciudad de
Casquín, donde se desarrolla el gran festival de folklore.
A lo largo de su carrera escribo más de cientos de obras y compartió
escenario y créditos con grandes artistas y compositores, pero uno se
destacó, Pablo Del Cerro, seudónimo que utilizo su segunda esposa
Antonela Paula Pepín Fitzpatrick y con quien conformo uno de los dúos
más importantes de su carrera.
Fallece en Nimes, Francia un 23 de Mayo de 1992 a sus 84 años y sus
restos descansan en el patio su casa de cerro colorado junto a los de su
gran amigo “El Chúcaro”.
Dejo un legado importante para todas las generaciones vinientes y abrió
las puertas nuevamente a la literatura gauchesca con su obra “El
Payador Perseguido”, es el Padre del Folklore Argentino, sus obras son
referentes, entrañables y de gran esplendor.
2-

El artículo de Diego Mares desglosa y describe muy bien la obra de


Atahualpa Yupanqui “El payador Perseguido”, lo pone a un nivel universal
de las obras literarias mundiales, es un análisis que resalta y relata las
distintas facetas vividas y escritas por el autor, ya que es una obra
biográfica.

Está escrita en sextinas Hernandianas, como las del Martin Fierro,


llevándonos directamente a dar un recorrido por la literatura gauchesca,
está dirigida más que nada al ciudadano común, al gaucho, exponiendo
cada una de sus penas, es una payada, un instrumento que dará voz a las
injusticias y a la explotación, un canto a la rebelión.

En ella existe un claro manejo de la oralidad, de la poesía hablada para


llegar más profundamente al público y a su sentir.

Es una singular obra que nos lleva a pensar nuestra postura existencial,
nuestra identidad, nuestras costumbres, poniéndonos en un lugar casi
incómodo con actitudes delatoras e injustas para con el gauchaje.

Fue escrita en los años de más plenitud de Yupanqui, relatando con total
madurez y fortaleza cada una de sus experiencias, exponiendo así tanta
persecución, es un culto poético al gaucho y su destino tan marcado por
una sociedad tan cruel y centralizada, con ojos en Dios pero de corazón frio.

Es totalmente libre de “actividades” política, solo se centra en el paisano,


sus actividades, su destino y sentido de pertenencia.

Mares lo contempla con tanto amor y expone la flamante obra poética


argumentando un “final abierto”, comparándolo con El Martin Fierro, la ida y
la vuelta, citando a Yupanqui unos años antes de su partida diciendo que
este había expresado “que estaba preparando una obra culmine que dejaría
guardado”, por eso Mares plantea que la obra no está terminada y que
existiría la segunda parte de El Payador Perseguido, es un supuesto que
hasta el día de hoy no hemos conocido sobre su existencia y que se
llamaría “El Adiós del Payador”.

Esta obra marco la literatura gauchesca, su sello quedara marcado en la


memoria de quienes lo escucharon o la leyeron, es un canto inconfundible
tan ameno y entrañable, amados por unos y odiados por otros pero sus
versos calan en lo más profundo de cada paisano dejando su incesante son
en recuerdo de un hombre que su nombre seguirá resonando tantos años
como dure el sol de cada día.

Atahualpa Yupanqui: El Payador Perseguido.

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