El Universo1
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Índice:
I. Teoría del Big Crunch
II. Teoría del Big Freeze
III. Teoría del Big Rip
IV. Los agujeros negros
V. Teoría de que el espacio-tiempo no es real
VI. Universo: ¿infinito o finito?
VII. El tiempo
VIII. Teoría de los universos paralelos
IX. Mi opinión
ACLARACIÓN
Este libro está formulado con teorías y pensamientos que han tenido físicos,
astrofísicos, astrónomos… Por lo que incluyo las teorías que más me
convencen y me parecen más cercanas de la realidad. Si opinas otra teoría,
recuerdo que el pensamiento lo tiene uno y es libre de pensar lo que crea.
DISFUTAD DE LA LECTURA
I- Teoría del big Crunch
Esta era, en la primera parte de la cual nos hallamos, se caracteriza por ser
las estrellas los objetos dominantes del cosmos. Gran parte de la energía
generada en el universo es debida a los procesos nucleares que tienen lugar
en su evolución, y sin duda es la era en la que más fenómenos interesantes
ocurrirán. Su inicio fue 1 millón de años después del Big Bang, con la
formación de las primeras estrellas y durará hasta dentro de 100 billones
de años (1014) en el futuro, cuando dejen de formarse estrellas, al menos a
partir del gas interestelar, y todas ellas se hayan apagado. El futuro en esta
era estará marcado por el progresivo agotamiento del gas interestelar, y
con él una progresiva disminución de la formación estelar, disminuyendo las
estrellas que se forman y aumentando la proporción de cadáveres estelares
(enanas blancas, estrella de neutrones, y agujeros negros). Asimismo, la
metalicidad del gas interestelar irá aumentando y ello tendrá profundas
consecuencias en la evolución estelar, disminuyendo por un lado la masa
máxima que puede tener una estrella y permitiendo la existencia de
estrellas aún menos masivas que las más ligeras de las existentes
actualmente y de mucha mayor vida, pero por otro disminuyendo
significativamente la vida de los astros que se formen por entonces, aunque
aun así, esas estrellas congeladas como han sido llamadas debido a su
bajísima temperatura superficial (comparable a la existente hoy en la
superficie terrestre) vivirían mucho más tiempo que las estrellas menos
masivas existentes hoy.
Llegará un momento en el que las únicas estrellas de la secuencia principal
que queden sean las enanas rojas (astros) astros que no experimentan la
fase de gigante roja. Aun así cerca del final de su lenta evolución estos
astros se cree que tienen luminosidades similares a la del sol actual, por lo
que gracias a ello incluso dentro de un billón de años (1012) las galaxias
tendrán luminosidades comparables a las actuales, pero posteriormente en
primer lugar la muerte de dichas estrellas y luego la extinción de las enanas
blancas hará que las tinieblas las acaben envolviendo y extinguiendo de
manera progresiva e irremediable.
En esta era los objetos dominantes serán los restos denson, inertes, y fríos
que durante la era estelífera fueron estrellas (enanas negras, estrellas de
neutrones, y agujeros negros), estimándose que durará entre 1014 años y al
menos 1032 años (dependiendo de cuando se desintegren los protones o si es
que se desintegran). Será un universo prácticamente oscuro para un órgano
como el ojo humano, pero aún seguirá radiando en otras longitudes de onda
durante mucho tiempo.
La evolución galáctica por entonces estará dominada por la interacción
gravitatoria entre dichos objetos y los efectos causados por ellas como
relajación dinámica, disminución de las órbitas debido a la emisión de ondas
gravitatorias, y finalmente aquellos causados por la aproximación de dichos
objetos, que provocará por un lado que las galaxias muestren una
distribución de masas cada vez más heterogénea, con una pequeña parte
(apenas un 1 %) de la masa concentrada en un volumen cada vez más pequeño
en su centro —hasta acabar por formarse un agujero negro gigantesco—, y
el resto de ella dispersa en un amplio volumen de espacio, o incluso
expulsada de la galaxia ("evaporación galáctica").
Seguirán formándose estrellas gracias a colisiones estelares, aunque a un
ritmo muy lento (aun así, se formarán bastantes astros gracias a ese
sistema, por lo que durante al menos parte de está era una galaxia
contendrá alrededor de 100 estrellas). Muy de vez en cuando, dos enanas
marrones pueden colisionar, formando una nueva estrella; una enana roja que
brillará 25 billones (2,5×1013) de años antes de convertirse en una enana
blanca —constituyendo este proceso una manera de que nazcan estrellas,
incluso cuando la formación estelar normal haya cesado mucho antes y que
durará bastante tiempo, formando relativamente muchas estrellas (se ha
estimado que durante esta época la galaxia que mucho antes fue el Grupo
Local contendrá alrededor de 100 estrellas que consigan su energía gracias
a la fusión del hidrógeno, nacidas gracias a esas colisiones)—, al igual que
dos enanas blancas (mejor dicho, enanas negras) formando una nueva enana
blanca. Otros objetos mucho más exóticos que podrán formarse por este
proceso —mediante la colisión de enanas blancas si se dan las condiciones
adecuadas— son estrellas que fusionen helio o carbono en vez de hidrógeno
(aunque su esperanza de vida será mucho menor que una estrella que fusione
hidrógeno, respectivamente de unos cientos de millones de años y de un
millón de años) además de supernovas tipo I, si la masa total de las dos
estrellas supera el El límite de Chandrasekhar, o incluso un GRB si colisionan
dos estrellas de neutrones; en una galaxia oscura y empobrecida estos
fenómenos —ya impresionantes hoy— serán realmente espectaculares.
Esos fenómenos ocurrirán sobre todo en la parte central de las galaxias, e
incluso tras la formación del mencionado agujero negro al destruir y
absorber éste el resto de cadáveres estelares cercanos que no se hayan
fusionado con él —brillando como un quasar durante mil millones de años
antes de que la oscuridad y el frío vuelvan a envolverlo todo—, y también se
producirán a escala supergaláctica, convirtiendo cada cúmulo de galaxias en
un enorme agujero negro formado por la fusión de aquellos agujeros negros
que antes fueron galaxias individuales y rodeado por un halo compuesto por
aquellos cuerpos que han conseguido escapar.
Las interacciones gravitatorias y la contracción orbital debida a la emisión
de energía en la forma de ondas gravitatorias ya mencionadas también
acabarán por destruir los sistemas planetarios que puedan existir por aquel
entonces, disrompiendo sus órbitas y convirtiendo a los planetas en
vagabundos sin rumbo a través de la oscuridad, o provocando que acaben por
chocar con los cuerpos que orbitan; parece que únicamente los que orbiten
enanas rojas —que no experimentan la fase de gigante roja—, como por
ejemplo los de Gliesse 876 , son los que sufrirán este último destino.
Asimismo, si la materia oscura presente en los halos galácticos está
compuesta por partículas como los WIMPs, dichas partículas acabarán por
desaparecer vía aniquilación debida a colisiones entre ellos o debido a la
captura por remanentes estelares. En este último caso, el efecto será la
disminución de la masa de la galaxia —y una consecuente expansión de ella—,
y que dichos remanentes estén más calientes de lo que cabría esperar, con
una temperatura de apenas 5 grados sobre el cero absoluto
Mucho más adelante, se producirá la desintegración de los protones y por
tanto de la materia, un fenómeno predicho por las Teorías de la Gran
Unificación (TGUs). Este fenómeno aún no ha sido observado
experimentalmente, pero parece claro que acabará por producirse tarde o
temprano, incluso si las teorías antes mencionadas resultan ser incorrectas;
las estimaciones de la vida media del protón varían entre 1032 y 1041 años en
el primer caso y un intervalo mucho mayor en el segundo, que puede llegar a
10200 años.
En el caso de que las TGUs sean ciertas, el resultado de la desintegración
de los protones será la producción de rayos gamma, y quizás
electrones y positrones que consigan sobrevivir a la aniquilación mutua entre
ellos al decaer dicha partícula así como unos pocos neutrinos, e incluso
reacciones nucleares —aunque de producción de energía mucho menor
comparada a la desintegración de los protones, ya de por sí bajísima (de
apenas del orden de 400 vatios)— (los neutrones fuera de los núcleos
atómicos o de las estrellas de neutrones son inestables y se desintegran en
apenas 15 minutos). Al ir disminuyendo su masa, las enanas blancas (ya
apagadas y convertidas en enanas negras desde hace mucho tiempo atrás)
irán expandiéndose y llegará un momento en el cual sus masas serán
insuficientes para seguir estando su materia en estado denegrado, algo que
ocurrirá cuando su masa, radio, y densidad sean comparables a los del
planeta Júpiter. Más adelante, cuando su masa quede reducida a
1021 gramos, esos objetos acabarán por dejar de ser considerados cómo
estrellas eventualmente pasando a ser cuerpos del tamaño de una roca
mantenidos por fuerzas de Coulomb —las que mantienen unidos cuerpos
como planetas, etcétera— hasta acabar por desaparecer.
Las estrellas de neutrones evolucionarán de modo similar debido a la
presencia de materia ordinaria en su corteza exterior, perdiendo
progresivamente su degeneración y cuando su masa quede reducida a una
parecida también a la del planeta Júpiter sufrirán un reajuste o bien les
convertirá en objetos parecidos a las enanas blancas, en adelante siguiendo
una evolución similar a la de dichos cuerpos, o bien provocará que estallen
dispersando su materia.
Finalmente, los planetas y otros cuerpos menores sufrirán también una
desintegración parecida, descomponiéndose primero sus átomos
constituyentes en elementos cada vez más simples hasta llegar al hidrógeno
y luego desapareciendo.
Un agujero negro
absorbiendo una
estrella de neutrones
Un agujero negro es una región finita del espacio en cuyo interior existe
una concentración de masa lo suficientemente elevada como para generar
un campo gravitacional tal, que ninguna partícula ni siquiera la luz puede
escapar de ella (en 2021 se observaron reflejos de luz en la parte más
lejana del agujero negro). Los agujeros negros pueden ser capaces de
emitir un tipo de radiación, la Radiación de Hawking conjeturada
por Stephen Hawking en la década de 1970. La radiación emitida por
agujeros negros como Cygnus X-1 no procede del propio agujero negro sino
de su disco de acrecimiento.
La gravedad de un agujero negro, o «curvatura del espacio-tiempo», provoca
una singularidad envuelta por una superficie cerrada, llamada horizonte de
eventos. Esto es previsto por las ecuaciones del campo de Einstein. El
horizonte de sucesos separa la región del agujero negro del resto del
universo, y una vez dentro de él, ningún tipo de partícula, sea material o
electromagnética, puede salir, ni siquiera los fotones. Dicha curvatura es
estudiada por la relatividad general, la que predijo la existencia de los
agujeros negros y fue su primer indicio. En la década de 1970, Stephen
Hawking, Ellis y Penrose demostraron varios teoremas importantes sobre la
ocurrencia y geometría de los agujeros negros. Previamente, en 1963, Roy
Kerr había demostrado que en un espacio-tiempo de cuatro dimensiones
todos los agujeros negros debían tener una geometría
cuasiesférica determinada por tres parámetros: su masa M, su carga
eléctrica total e y su momento angular L.
Sin embargo, en general se cree que una vez que comienza la inflación, hay
regiones donde nunca se detiene; se cree que los efectos cuánticos pueden
mantener la inflación para siempre en algunas regiones del universo, por lo
que, a nivel mundial, la inflación es eterna.
En una entrevista del año pasado, el científico británico dijo que la teoría
habitual de la inflación eterna predice que, globalmente, el universo es como
un fractal infinito, con un mosaico de diferentes universos de bolsillo,
separados por un océano que se infla.
¿Qué es?
Hay un dicho que dice que somos una mota de polvo en el universo, pero a lo
largo de los siglos las personas hemos aprendido nuevas cosas; no obstante,
nos quedan muchas cosas por aprender que representamos en teorías.
Mi opinión sobre el fin del universo está reflejada en el Big Freeze y en el
Big Crunch. La teoría del Big Rip no me convence mucho porque habrá un
momento en el que el universo se contraiga o se muera térmicamente, pero
la idea de una expansión eterna no me convence.
Mi opinión sobre el tiempo está de la mano con la idea de que el tiempo sea
un círculo cerrado y para finalizar la idea del multiverso es la siguiente: si
hay muchos universos paralelos y el conjunto es el multiverso, tiene que
haber multiversos paralelos y macroversos y así sucesivamente, es decir que
el universo es tanto finito como infinito.