Descripcion Del Cpntenido Diana Reyes

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DESCRIPCIÓN DE LA INVESTIGACIÓN Y CONTENIDO.

La Filosofía Política Ha Variado A Través De La Historia, Para Los Griegos La Ciudad

Era El Centro Y El Fin De Toda Actividad Política, En El Medievo Es El Período

Histórico Que Va Desde El Siglo V Al Siglo XV De Toda Actividad Política Que Se

Centraba En Las Relaciones Que Debe Mantener El Ser Humano Con El Orden Dado

Por Dios. El Renacimiento De La Filosofía Política Adopta Un Enfoque Básicamente

Antropocéntrico Que Es Una Doctrina En El Plano De La Epistemología Que Estudia

Los Métodos Y Fundamentos Del Conocimiento Científico Situada Por El Ser Humano

Como Medida De Todas Las Cosas. En El Mundo Moderno Y Contemporáneo Donde

Surgen Y Conviven Muchos Modelos, Que Van Desde Los Totalitarismos Que Es El

Régimen Político Que Concentra La Totalidad De Los Poderes Estatales Hasta Los

Sistemas Democráticos Participativos Donde Existen Muchas Variantes. La Filosofía

Política Unido Con Los Valores Y Las Costumbres Que Existió Durante La Edad Media

Que También Se Relaciona Con La Ciencia Política, Que Estudia Las Estructuras

Políticas Que Es La Que Se Encarga De Cómo Deberían De Ser, Pero Muchas Veces La

Utilizan Para Justificar Las Acciones Políticas. La Tradición Clásica, Los Valores Y El

Análisis Político ¿Qué Significa, ¿En Este Contexto, La Tradición Clásica? Dejando De

Lado Matices Que Sería Necesario Introducir En Una Elaboración Mucho Más

Detallada Sobre Este Tema, La Tradición Clásica Se Caracteriza Por El Hecho De Que

La Reflexión Sobre El Orden Político Es Concebida Simultáneamente Como Una

Indagación De Carácter Moral. En La Tradición Clásica El Examen De La Vida Política

Y El Estado Es Inseparable De Su Valoración: Desde Platón Hasta Maquiavelo, La

Mirada Sobre Lo Político Es También Un Intento De Avizorar Los Fundamentos De La

Buena Vida, Y Mal Podríamos Entender La Obra De Platón Y Aristóteles, Agustín,

Marsilio, Tomás De Aquino, Lutero Y Tomás Moro Al Margen De Esa Premisa.

Maquiavelo Ocupa, En Este Sentido, Una Posición Absolutamente 7 Excepcional: Es


Nada Menos Que El Eslabón Que Marca La Continuidad Y La Ruptura De La Tradición

Clásica. El Florentino Es, Al Mismo Tiempo, El Último De Los Antiguos Y El Primero

De Los Modernos, Cosa Que Se Pasa Por Alto En La Mayoría De Los Estudios E

Interpretaciones Que Abusivamente Insisten En Subrayar La “Modernidad” De

Maquiavelo –El “Realismo” Supuestamente A Valorativo Con Que Examina La Vida

Política De Su Tiempo– Mientras Que Se Soslayan Sus Claras Preocupaciones

“Clásicas” Reflejadas En Su Sutil Distinción Entre Los Fundadores De Imperios Y

Naciones Y Los Déspotas Que, Como Agatocles, Imponen Exitosamente Su Dominio,

O En Sus Encendidas Invocaciones Encaminadas A Lograr La Unidad De Los Italianos,

Una Actitud Definitivamente Anclada En El Plano Valorativo. En Este Sentido, Las

Dificultades Que Plantea La Interpretación De Los Textos Maquiavelanos Se Reflejan

Magistralmente Nada Menos Que En La Obra De Un Estudioso Tan Destacado Como

Sheldon Wolin. En Ciertos Pasajes De Su Obra El Autor De Política Y Perspectiva Nos

Presenta Al Autor De El Príncipe Como Un Hombre Dispuesto A Renegar De Todo Lo

Que No Sea El Simple Y Llano Tratamiento De La Problemática Del Poder

Despojándose De Todo Tipo De Consideraciones Éticas Y Excluyendo A La Teoría

Política “Todo Lo Que No Parecía Ser Estrictamente Político, Se Tuvo Que Pasar Más

De Un Siglo Para Que Las Preocupaciones Axiológicas Del Periodo Clásico Pasaran De

La Mano De Hobbes A Un Segundo Plano Ya Que Los Desarrollos Teóricos

Experimentados A Partir De Esa Época De Ninguna Manera Significaron Un Estilo De

Reflexión -Política. Tenía Que Pasar Más De Un Siglo Para Que Las Preocupaciones

Axiológicas Del Periodo Clásico Pasaran De Hobbes A Un Segundo Plano Ya Que Los

Teóricos Experimentados A Partir De Entonces De Ninguna Manera Significaron La

Reflexión Filosófica Política En El Cual Las Las Valoraciones Y Los Ideales Hubiesen

Sido Completamente Erradicado. Si Bien El Justificado Antiescolastismo De Hobbes


Lo Llevó Con Toda Razón De A Un Segundo Plano Por Lo Cual Se Dice Pasa A Un

Segundo Plano Por Lo Que Los Desarrollos Teóricos Experimentados A Partir De

Entonces De Ninguna Manera Significaron La Entronización De Un Estilo De

Reflexión Filosófica-Política En Despreciar El Reseco Y Acartonado “Saber” Instituido

Con Tal En Oxford Y A Buscar Renovados Horizontes Para La Elaboración De Una

Nueva Teorización De Lo Político En Las Posibilidades Abiertas Para La Geometría Y

La Mecánica Difícilmente Concluirse Que El Desenlace De Su Búsqueda Tenga Una

Semejanza Siquiera Remota Con Los Preceptos Del

Positivismo O La Fantasiosa Pretensión Weberiana De Fundar Una Ciencia Social

“Libre De Valores” . Con Los Preceptos Del Positivismo O La Fantasiosa Pretensión

Weberiana De Fundar Una Ciencia De Lo Social “Libre De Valores”. La Rígida Y

Artificial Separación Entre Hechos Y Valores Que Ambos Postulan Para Nada Se

Compadece Con La Obsesión Valorativa Que Sostiene Y Otorga Sentido A Toda La

Densa Construcción Hobbesiana: El Establecimiento De Un Orden Político Que Ponga

Fin Al Estado De Naturaleza, Dominado Por El Temor A La Muerte Violenta, Y En

Donde No Prosperan Ni La Industria Ni El Comercio, No Se Cultivan Las Ciencias, Las

Letras Ni Las Artes, Y En Donde La Vida Del Hombre Es “Solitaria, Pobre, Tosca,

Embrutecida Y Breve” (Hobbes, P. 103). En Pocas Palabras, Lo Ocurrido Es Que Con

El Eclipse De La Tradición Clásica Y El Advenimiento De La Filosofía Política

Moderna Se Produce Un Desplazamiento De La Problemática Ética. Ésta Pasa A

Ocupar Un Segundo Plano En Lo Tocante A La Estructuración Argumentativa Del

Discurso Político, Más No En Lo Relativo A Su Importancia Como Un A Priori

Silencioso Pero Eficaz De Dicho Discurso. ¿O Es Que Acaso No Existe Un Evidente

Sesgo Conservador En La Ciencia Política Conductista, O En Las Tendencias Más

Recientes De La “Elección Racional”? Lo Que Antes Se Hallaba En El Centro De La


Preocupación Y Del Debate Intelectual De Autores Tan Variados Como Platón Y

Aristóteles, Agustín, Marsilio Y Tomás De Aquino, Moro, Erasmo Y Lutero, Aparece

Hoy En Día Como Una Petición De Principios Indiscutida E Indiscutible: Que La

Sociedad Actual, Es Decir, El Capitalismo, Es La Buena Sociedad. Hay Quienes Lo

Dicen Más Abiertamente Que Otros: Desde Karl Popper Hasta Friedrich Hayek Y, En

Nuestros Días, Francis Fukuyama Y Samuel Huntington. Pero No Significa Que

Quienes No Se Atreven A Declararlo Con La Misma Osadía, En El Fondo, Dejen De

Comulgar Con La Misma “Toma De Partido” En La Lucha Ideológica. La Persistencia

De Una Incesante Indagación En Torno A La Buena Sociedad Que Caracteriza A Los

Clásicos No Puede Interpretarse, Como Lo Hiciera En Su Peor Momento David Easton,

En El Sentido De Que En Sus Teorías Se Hallaban Ausentes Los Conceptos, Categorías

O Instrumentos Metodológicos Capaces De Iluminar El Análisis De La Realidad

Política De Su Tiempo (Easton, 1953). Cuando Hacia Mediados De Los Años

Cincuenta Éste Decide Declarar Difunta A La Filosofía Política Clásica Y Expulsar Del

Dominio De La Ciencia Política A Los Conceptos De Poder Y Estado (Por Su Supuesta

Inutilidad Para La Comprensión De Los Fenómenos Aludidos Por Dichos Conceptos),

Lo Que Está Haciendo Es Llevar Hasta Sus 9 Últimas Consecuencias La Barbarie

Fragmentadora Y Disolvente Del Positivismo. La Totalidad De La Vida Social Estalla

En Un Sinnúmero De “Partes” Que Dan Lugar A Otras Tantas “Ciencias”

Especializadas: La Economía, La Sociología, La Ciencia Política, La Antropología

Cultural, La Geografía, La Historia, Etc., Todas Las Cuales Comparten La Premisa

Ideológica De La Radical Separación Entre El Mundo De Los Hechos –Que Pueden Ser

Medidos Con La Precisión De Las Ciencias Naturales– Y Los Valores, Que Quedan

Reservados A Un Nebuloso Territorio Impenetrable Para La Práctica Científica.

Cualquiera Que Haya Leído Aunque Sea Sumariamente Los Grandes Textos De La
Tradición Clásica Podrá Comprobar La Riqueza Analítica, No Sólo Axiológica, En

Ellos Contenida. Obviamente, Las Proporciones Varían Según Los Casos: Aristóteles,

Que Para Marx Fue La Cabeza Más Luminosa Del Mundo Antiguo, Sintetizó En Su

Corpus Teórico, De Una Manera Extraordinaria, Densas Y Refinadas Argumentaciones

Éticas Con Notables Análisis Empíricos De Las Sociedades De Su Tiempo. ¿Y Qué

Decir De Platón, O De Marsilio, O De Moro? ¿Alguien Podría Seriamente Argumentar

Que En Sus Obras Sólo Se Encuentran Exploraciones En Relación Con Valores O A

Objetivos Morales, Con Prescindencia De Cualquier Referencia A Las Condiciones

Imperantes En Sus Respectivas Épocas? La Descripción Y El Análisis Que Hace Platón

De La Dinámica Política De Las Sociedades Oligárquicas, ¿Puede Desecharse Por Su

Irrealidad? El Diagnóstico De Marsilio Sobre El Conflicto Entre La Monarquía Y El

Papado, ¿Tenía O No Que Ver Con La Realidad? Y El Diagnóstico De Moro Sobre El

Impacto De La Transformación Capitalista De La Agricultura Inglesa, ¿No Constituye

Acaso Uno De Los Más Profundos Análisis Jamás Hecho Sobre Este Tema? En

Resumen: La Tradición Clásica No Puede Entenderse Como Una Fase En La Historia

Del Pensamiento Político En La Cual Predominaban Sin Contrapesos Las

Preocupaciones Éticas En Desmedro De Las Analíticas. Ambas Coexistían, Y El Hecho

De Que Las Segundas Se Subordinasen A Las Primeras No Debe Llevarnos A

Desmerecer La Importancia De Estas Últimas. La Expulsión De Los Valores Y De La

Argumentación Ética Del Terreno De La Reflexión Filosófica Es Un Fenómeno

Bastante Reciente, Una Patología Que Se Despliega En Toda Su Intensidad Con La

Hegemonía Del Positivismo A Partir Del Siglo XIX Y Que Llega A Su Apogeo Con La

Así Llamada “Revolución Conductista” A Mediados De Nuestro Siglo. Los Límites De

La Mentada “Revolución” Quedaron En Evidencia Muy Pronto. En Palabras De Leo

Strauss, “No Se Puede Comprender Lo Político Como Tal, Si No Se Acepta Seriamente


La Exigencia ... De Juzgarlo En Términos De Bondad O Maldad, De Justicia O

Injusticia”

ANALISIS CRITICO DE LA INVESTIGACIÓN

. ¿Existe justicia en Honduras? Para dilucidar esta pregunta comencemos con un hecho

no tan largo en el mes de abril del año dos mil quince la Corte Suprema de Justicia

inválido los artículos pétreos de la Constitución de la República en los cuales se tenía

como delito la reelección presidencial. La Constitución de la Republica limitaba a los

presidentes a u solo 23 período de gobierno por cuatro años, incluía una provisión

extraordinaria que hace que el límite de periodo sea irreformable ante cualquier proceso

y decretaba que la violación a la misma constituiría el delito de Traición a la patria el

cual era imprescriptible el delito, dicha circunstancia lo redactaron así precisamente

para evitar que dictadores militares o caudillos se negaran a dejar el poder de los cuales

hay una sórdida historia en Honduras y el resto de América latina. El espíritu del

legislador era precisamente que no se diera la reelección presidencial con el fin de que

no se perpetuara una persona en el poder, razón por la cual en el año 2009 se decretó un

golpe de estado ya en éste tiempo ha sido subvertida por la Corte Suprema de Justicia en

la cual según la interpretación que se le dio la Constitución de la Republica si puede ir a

una segunda ronda de gobierno, en un país donde la democracia es frágil y cuyos grupos

sociales son inefectivos como el caso que nos ocupa. En el año 2009 el presidente

Manuel Zelaya Rosales trato de evadir estas pretensiones al intentar iniciar el

referéndum sobre si la Constitución de la República debía de ser reescrita, fue así como

el ejército destituyó a Zelaya a través de un golpe de estado y lo obligo a salir del país.

El constitucionalismo hondureño se enfrenta a una serie de deficiencias importantes. El

episodio de Zelaya demuestra que la Constitución no puede enfrentar adecuadamente


crisis internacionales o violaciones de los derechos humanos, por otra parte, el texto

existente ha demostrado ser incapaz de mejorar la severa desigualdad económica del

país o su concentración del poder político.