Silo - Tips - Honorarios Profesionales y Aplicacion Ley Omnibus
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INTRODUCCIÓN.
No hay que olvidar que, tal y como señala el propio Gobierno, el colectivo afectado
“ agrupa alrededor de un millón de profesionales, que suponen un 6,1 por 100 del
empleo total y el 30 por 100 del empleo universitario. Las profesiones colegiadas
suponen un 8,8 por 100 del PIB”.
NORMATIVA EUROPEA.
Ahora bien, a la hora de aplicar el articulo 81 TCE tiene una especial importancia el
Reglamento CE núm.1/2003 del Consejo de 16 de diciembre de 2002, 2002 relativo la
aplicación de las normas sobre competencia prevista en los artículos 81 y 82 del
Tratado.
Tratado
Con la entrada en vigor del Reglamento núm.1/2003 se han producido dos cambios
fundamentales. Por una parte, ha desaparecido la posibilidad de solicitar autorización
singular, por lo que las empresas deben proceder a una autorregulación de
competencia. Por otra parte, las autoridades de competencia y los Tribunales pueden
y deben aplicar el artículo 81 del TCE en su conjunto, es decir, tanto el apartado
primero como el tercero. Además, en virtud del articulo 3 del Reglamento
núm.1/2003, siempre que exista una afectación del comercio intracomunitario, las
autoridades de competencia y los Tribunales deben aplicar la normativa comunitaria.
No existe en cambio, una obligación expresa de aplicar el Derecho Nacional de
competencia, pero si se lleva a cabo debe serlo de forma plenamente compatible y
coherente con la normativa comunitaria.
Es decir, que las infracciones a estas normas no sólo pueden dar lugar a la iniciación
de un procedimiento administrativo por infracción ante las Autoridades Españolas y
Comunitarias de competencia- con imposición de eventuales multas-, sino que
también pueden dar lugar a acciones civiles ante los Tribunales ordinarios incluida la
reclamación por daños y perjuicios.
La Comisión, es competente para aplicar las normas comunitarias de la competencia
y, entre ellas, aquellas comprendidas en el articulo 81 TCE, para lo cuál tiene
facultades de investigación y de decisión, incluida la facultad de imponer elevadas
multas a aquellas empresas que infrinjan estas disposiciones. Los asuntos en materia
de competencia han de ser analizados caso por caso, sin generalidades excesivas,
aunque siempre bajo criterios uniformes. La Comisión, ante el riesgo que supone la
descentralización de competencias, ha dedicado un Diario Oficial a ofrecer directrices
y orientaciones sobre la aplicación del los artículos 81 y 82 del TCE (DOUE núm. C101
de 27 de abril de 2004. p. 81, apartado 9).
Del tenor literal del articulo 81 TCE se desprende que, en si mismo, dicho precepto
sólo es de aplicación “ratione personae” a empresas o asociaciones de empresas.
Por ello se colige que aunque la normativa Española autorice la adopción por los
Colegios de Abogados de criterios orientadores, la aprobación o mantenimiento de los
mismos, es por tanto, susceptible de incurrir dentro de la prohibición del Derecho
Europeo de la Competencia.
NORMATIVA ESTATAL.
ESTATAL.
La Ley 2/ 1974,
1974, de 13 de febrero,
febrero, de Colegios Profesionales,
Profesionales configura a los
Colegios Profesionales como Corporaciones de Derecho Público con personalidad
jurídica propia amparada por la Ley y reconocidos por el Estado con plena
capacidad para el cumplimiento de sus fines.
Abogacía.
Estatuto General de la Abogacía.
Española.
Código Deontológico de la Abogacía Española.
Los honorarios han de ser percibidos por el Abogado que lleve la dirección
técnica del asunto, siendo contraria a la dignidad de la profesión la partición
y distribución de honorarios entre Abogados excepto cuando:
La larga discusión sobre la legalidad del pacto de “cuota litis” parece haber
llegado a su fin tras la Sentencia dictada por el Pleno del Tribunal Supremo, Sala
de lo Contencioso Administrativo, de fecha 4 de noviembre de 2008 (Recurso
num. 5837/2005). La citada sentencia despeja cualquier duda en cuanto que
llega a la conclusión de que la conducta -cuota litis en sentido estricto-, sería
contraria al artículo 1 de la Ley de Defensa de la Competencia.
Competencia Para el Tribunal,
no cabe duda de que la prohibición de la que se habla supone la fijación indirecta
de precios mínimos que impide la libertad por parte del profesional de
condicionar su remuneración a un determinado resultado positivo, y de ello se
advierte una limitación en cuanto a las condiciones en que se presta el servicio
profesional.
En consecuencia con lo anterior parece ser que la libertad de pactos en la
retribución de los servicios profesionales ha de ser la regla general en la fijación
de honorarios, de cuanto se colige que la prohibición de la cuota litis en sentido
estricto implica la obligación de fijar unos honorarios con independencia de los
resultados y se excluye, por el contrario, con carácter general, no cobrar o cobrar
exclusivamente por resultado, limitándose la libertad de fijación de cuantía y
forma de cobrar en esa misma medida, puesto que tal libertad implica la
posibilidad de no cobrar en caso de pérdida del pleito o de otros pactos entre
cliente y abogado.
NORMATIVA AUTONÓMICA.
Con todo, la primera y mayor dificultad que se presenta es que tales cuestiones
habrán de ser negociadas con cada una de las Comunidades Autónomas (no solo
algunas cuentan con leyes propias de colegios profesionales, sino que sus
competencias horizontales inciden en la actividad colegial, p.ej. la exigencia de
visado colegial en las licencias urbanísticas). Como ya pusiera de manifiesto en
su informe no vinculante el Consejo de Estado, las Comunidades Autónomas
españolas han adquirido en sus estatutos de autonomía competencias legislativas
plenas en materia de colegios profesionales, por lo cual el carácter básico de esta
reforma es contrario a los mismos. Esta circunstancia propició en su día una
enmienda a la totalidad por parte del Grupo Parlamentario de Ezquerra
Republicana- Izquierda Unida-Iniciativa per Cataluña Verdes.
El Consejo de Estado.
Unión Profesional.
Para que los colegios profesionales puedan desempeñar sus funciones con
eficacia y eficiencia es del todo imprescindible que se mantenga un control
universal del ejerciente, y en el caso de las profesiones técnicas, un visado
obligatorio. Si no hay control transversal difícilmente podremos hacer nuestra
labor. Una labor, que advierte, es incomoda por cuanto legitimamos o
deslegitimamos decisiones políticas.
III. CRITERIOS
CRITERIOS ORIENTADORES DE HONORARIOS EN LA
ACTUALIDAD.
ACTUALIDAD.
Disposición Adicional
Adicional Cuarta. Valoración de los Colegios para la tasación de
costas. Los Colegios podrán elaborar criterios orientativos a los exclusivos
efectos de la tasación de costas y de la jura de cuentas de los abogados.
Dos son las primeras impresiones que nos produce la reforma. En primer lugar,
destaca la prohibición absoluta a los Colegios de fijar baremos orientativos de
honorarios o cualquier otra recomendación sobre precios, la cual parece olvidar
que lo único que prohíbe la Directiva es el establecimiento de tarifas obligatorias
mínimas y/o máximas que el prestador debe respetar (artículo 15 g); tanto es así
que el propio artículo 22 de la Directiva señala que: “Los Estados miembros harán
lo necesario para que los prestadores pongan a disposición del destinatario la
información siguiente: .... f) condiciones y cláusulas generales, en su caso,
utilizadas por el prestador. ... i) el precio del servicio, cuando el prestador fije
previamente un precio para un determinado tipo de servicio”, con lo cual la
existencia de criterios orientativos previos facilita el cumplimiento de la norma
comunitaria.
a) Por instancias
b) Por pruebas
c) Por actuaciones de trámite
d) Por incidentes
e) Por trabajos fuera del expediente
f) Por importancia de los trabajos
g) Por cuantía de los asuntos
h) Por el éxito
i) Por la dificultad que presenten
j) Por la experiencia y especialidad del abogado
k) Por la fortuna o situación económica del cliente
l) Por las costumbres del lugar
m) Por el tiempo que haya sido necesario dedicar
n) Por la responsabilidad que entrañe el asunto.
Y ello sin perjuicio de que los honorarios de los Letrados quedan sujetos al control
jurisdiccional por el cauce prevenido en los artículos 245 y 246 de la Ley de
Enjuiciamiento Civil, cuando se impugna una tasación de costas, por reputarse
excesivos los emolumentos minutados; y deviene incontestable al tenor de los
preceptos citados, a más de haberlo proclamado reiteradamente el Tribunal
Supremo -por todas, S.T.S. de 23 de junio de 1982- al igual que es evidente que el
órgano judicial no se encuentra vinculado en modo alguno por el dictamen que al
efecto pueda emitir un Colegio de Abogados, ostentando el órgano jurisdiccional
la facultad de fijar, previa ponderación de aquél, y de las circunstancias
concurrentes - clase, naturaleza, dificultades, cuantía del asunto y complejidad
técnica que ofreció a los Letrados de los intervinientes- en cada caso, si la minuta
presentada ha de considerarse o no ajustada.
V. PROBLEMÁTICA DEL FACTOR CUANTÍA EN LA FIJACIÓN DE
HONORARIOS.
Sin duda que el mayor problema a enfrentar a la hora de elaborar una factura o
minuta de honorarios es la base sobre la cual efectuar su cálculo final.
En los casos en que la determinación de la cuantía del interés en liza sea un factor
determinante en la aparición de diferencias interpretativas en relación con los
honorarios del letrado, podría hablarse de supuestos en que la inconcreción
procederá de dos posibles orígenes, que podríamos llamar materiales o
normativos:
A) Cuantía no determinada.
determinada Los primeros serían aquellos en que la
determinación de la cuantía no ha tenido lugar en el proceso, supuesto que
puede obedecer, a su vez a razones dispares:
B) proceso: Merece
Variación de la cuantía durante el curso del proceso
igualmente especial atención el caso de que la cuantía originariamente
determinada en la litis no sea de aplicación en el momento de la fijación de
los honorarios, ya sea por una variación posterior de la trascendencia
económica del juicio en instancias posteriores, o porque tal modificación
opere en razón de una actuación de la parte interviniente. Como casos
prototípicos, sin ánimo exhaustivo se pueden indicar:
CONCLUSIONES DE LA PONENCIA.