Tema 2
Tema 2
a) Los actos administrativos son actos jurídicos, y no meramente materiales, que suponen
en la mayor parte de los casos una declaración de voluntad de la Administración
Pública, pero también de simple conocimiento (certificados) o juicio (dictámenes,
informes, consultas, etc.).
(GARCÍA DE ENTERRÍA) --- la declaración puede ser de voluntad, que será lo normal en las
decisiones o resoluciones finales de los procedimientos, pero también de otros estados
intelectuales: -de juicio.
-de deseo.
-de conocimiento.
b) El acto jurídico, la declaración en la que el acto consiste, en definitiva, debe ser emitida
por la Administración Pública.
c) La declaración debe ser consecuencia del ejercicio de una potestad administrativa, lo
que, conecta los actos administrativos con el principio de legalidad, entendida como
``positive Bindung´´.
Si la potestad ejercida es la reglamentaria, el producto de su ejercicio es una norma y no
un acto administrativo.
- Son actos favorables aquellos que amplían la esfera jurídica del particular, o les
reconocen un derecho o facultad.
- Son actos desfavorables o de gravamen aquellos que restringen la esfera jurídica del
particular, restringiendo sus derechos o el ejercicio de las facultades que
anteriormente tenían reconocidas.
Exigen un rango mayor en la habilitación normativa, normalmente a través de una norma con
rango de Ley, deben ser motivados y son irretroactivos.
NO tienen vida jurídica propia, sino que se refunden en la resolución que pone fin al
procedimiento. Constituyen ejemplos de actos de trámite los informes, dictámenes,
propuestas, testimonios, etc.
- Los informes y dictámenes, que son actos de juicio que se emiten en el seno de un
procedimiento resolutorio.
- Los actos de iniciación o de impulso en el procedimiento administrativo.
- Los actos que aun expresando una verdadera declaración de voluntad no constituyen
la resolución final de un procedimiento, como las aprobaciones iniciales o
provisionales de los planes de urbanismo.
- Actos necesitados de aprobación por un órgano o ente superior.
- Son actos que causan estado, aquellos que, al agotar la vía administrativa contra los
mismos no cabe recurso administrativo alguno.
Esto significa que, los actos que causan estado, poniendo fin a la vía administrativa, sólo son
susceptibles de recurso contencioso- administrativo o de revisión de oficio o de los recursos
potestativos de reposición.
- Son actos que no causan estado, los actos que no agotan las vías administrativas y por
lo tanto, contra ellos debe recurrirse ante la propia Administración, normalmente en
alzada, con carácter previo a la posible interposición de un recurso contencioso-
administrativo.
(GARCÍA DE ENTERRÍA), referencia a los actos que ponen fin a la vía administrativa artículo 114
LPAC:
+ Actos confirmatorios, son los que se limitan a reproducir o confirmar otro acto previo
dictado sobre el mismo asunto, idénticos sujetos y en base a iguales pretensiones y
argumentos. No son impugnables.
+ Actos complejos, la competencia resolutoria es mixta, siendo compartida por dos o más
órganos.
F) Actos plúrimos.
Los actos que aparecen reflejados en una misma relación o publicación, pero que conservan su
vida jurídica perfectamente diferenciada al tratarse de varios actos independientes.7
EJEMPLO: una relación de admitidos en un concurso, que puede contenerse en una misma
publicación, refleja en realidad tantos actos de admisión como personas admitidas.
La impugnación por parte de alguno de estos destinatarios sólo a su acto de admisión afecta, a
la de los otros actos reflejados en la misma relación.
Las cuestiones que se susciten en relación con los actos políticos del Gobierno, como son los
que afectan a la defensa del territorio nacional, relaciones internacionales, seguridad interior
del Estado y mando y organización militar, sin perjuicio de las indemnizaciones que fueren
procedentes, cuya determinación sí corresponde a la Jurisdicción contencioso-administrativa.
Supone que la Administración Pública da su visto bueno a una concreta actividad privada,
previa valoración de la misma en cuanto al cumplimiento de los requisitos y formalidades que,
en su caso, exija la legislación que la regula.
La autorización levanta una prohibición que con carácter preventivo establece la legislación
con la finalidad de que la Administración Pública pueda tener la oportunidad de realizar las
comprobaciones valorativas en que la autorización consiste. La finalidad de la prohibición no
es absoluta, no se prohíbe la actividad, sino ejercerla sin someterla a control previo. Se trata
de una prohibición general de desarrollar una determinada actividad a reserva de autorización.
Esta autorización tiene carácter reglado, por cuanto refiriéndose al ejercicio de un derecho o
una libertad, se trata tan sólo de verificar que se ejerce con arreglo a los requisitos
establecidos en la norma reguladora.
B) Clases.
→ Personales, reales o mixtas.
1. Son personales, cuando para su otorgamiento se requiere cumplir ciertos requisitos
personales, por lo que se entiende otorgadas intuitu personae; por ejemplo: el permiso
de armas.
2. Son reales, cuando se otorgan por razones objetivas, por lo que son transmisibles y
pueden revocarse o modificarse cuando cambian las circunstancias que motivaron su
otorgamiento; por ejemplo: la licencia de edificación.
3. Son mixtas, cuando se prevén requisitos reales y personales y conservar la
autorización.
→ Contenido.
La autorización tiene carácter reglado, y en caso de producirse el silencio en el procedimiento
de concesión debe tener sentido positivo, salvo que por Ley se imponga el silencio negativo
por razones imperiosas de interés general.
Las autorizaciones NO tendrán el carácter de numerus clausus, salvo que así se establezca por
razones de escasez de recursos naturales o inequívocos impedimentos técnicos, y en estos
casos deberán tener unos efectos de duración limitada, sin que pueda preverse la renovación
automática de la licencia.
La autorización, como cualquier acto administrativo, está sometido al control judicial a través
de los correspondientes recursos contencioso-administrativo.
→ Extinción.
→ Concesión.
La concesión, permite:
-elegir los sujetos más capaces o con mayores garantías para que la indicada
actividad se cumpla en el sentido que al interés público convenga.
-imponer, a la vez, ese ejercicio de una manera forzosa, de modo que elimine la
posibilidad de un no ejercicio, que se juzga contrario al interés general, todo ello bajo la
fiscalización administrativa.
La subvención por antonomasia es tan sólo a entidades privadas, no obstante, la Ley citada
emplea aquí el concepto presupuestario de subvención que incluye cualquier ayuda dineraria a
otra persona física o jurídica de quien otorga la subvención, por eso considera que también
pueden otorgarse subvenciones a personas jurídico públicas.
Aunque son subvenciones, tampoco se les aplica la Ley de subvenciones a las previstas en al
LOREG, con motivo de las elecciones, las previstas para financiación de los Partidos Políticos,
las previstas para los Grupos Parlamentarios.
NATURALEZA JURÍDICA.
La subvención es un acto administrativo necesitado de aceptación, se solicita por el interesado
y se concede por la Administración Pública, como cualquier otro acto administrativo.
NO deben considerarse subvenciones las ayudas dinerarias a las que pueda comprometerse la
Administración Pública en los supuestos del contrato de concesión de gestión de servicios
públicos, ya que se trata de una obligación ex contractu a cargo de la Administración
contratante, que en consecuencia sí se rigen en cuanto a su cumplimiento o incumplimiento
por la LCSP.
La subvención es un acto causal o finalista, sin que quepa la subvención por pura liberalidad,
que se traduce en una prestación dineraria de carácter gratuito, es decir no devolutivo.
SUJETOS DE LA RELACION SUBVENCIONAL.
La Administración concedente es aquella con cargo a cuyo presupuesto se otorga la
subvención.
Si se trata de la Administración General del Estado, los órganos competentes para otorgar la
subvención son los Ministerios y Secretarios del Estado, si bien requerirán autorización del
Gobierno o de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos si la subvención supera los doce
millones de €.
En las CCAA los órganos competentes se regulan en la legislación autonómica, y son el Consejo
de Gobierno o los Consejeros.
Los beneficiarios son las personas físicas o jurídicas, o incluso simples agrupaciones sin
personalidad jurídica que reciben la subvención. Para ser beneficiario es preciso que no
concurran en las personas de que se trate ninguna de las prohibiciones que se establecen en la
Ley de subvenciones. Prohibiciones, que en gran parte son coincidentes con las que establece
la LCSP para ser contratista.
En todo caso, las subvenciones, como acto necesitado de aceptación siempre se otorgan a
solicitud del beneficiario.
En los casos en que procede la adjudicación directa, éste tiene un derecho subjetivo al cobro
de la subvención. También cabe la adjudicación directa de la subvención, con carácter
excepcional cuando razones de interés público, social, económico o humanitario justifiquen
que no cabe su convocatoria pública.
La gestión de las subvenciones debe realizarse de acuerdo con los principios de:
-publicidad
-transparencia
-concurrencia
-objetividad
-igualdad
-no discriminación
-eficacia
-eficiencia.
CONTENIDO DE LA SUBVENCION.
La subvención establece una relación jurídica entre la Administración concedente y el
beneficiario en la que se integran una serie de derechos y deberes entre ellos.
Las obligaciones del beneficiario consisten en cumplir las condiciones impuestas, y entre ellas,
y principalmente, la de invertir la cantidad recibida en el cumplimiento de los objetivos fijados
en las bases de la convocatoria, que constituyen la finalidad que justifica la subvención.
También está obligado a conservar los libros y documentos justificados de gastos, y someterse
a las inspecciones correspondientes, así como a adoptar las medidas de difusión establecidas
sobre la subvención recibida en relación con la actividad y fines que la justificaron.
EXTINCIÓN DE LA SUBVENCION.
Se produce por el cumplimiento por las partes de sus obligaciones. También puede producirse
por renuncia del beneficiario, ya que la subvención supone un acto necesitado de aceptación,
o por estar incursa la subvención otorgada en causa de nulidad debidamente declarada.
INFRACCIONES Y SANCIONES.
Son INFRACCIONES las conductas del beneficiario o, en su caso, de las Entidades
colaboradoras-. Se clasifican en: -leves,
-graves,
-muy graves.
La responsabilidad puede ser DIRECTA, o SOLIDARIA alcanzando en este caso a los miembros o
partícipes de las entidades beneficiarias de la subvención.
Las SANCIONES tipificadas por la citada Ley, que en todo caso son independientes del
reintegro, son una multa cuya cuantía se fija en la cantidad de 75 a 900€ para las infracciones
leves, y una multa proporcional a la cantidad recibida por la subvención que se fija en el tanto
al doble de la cantidad percibida en las infracciones graves, y del tanto al triple en las muy
graves.
El plazo de prescripción será de 4 años para las infracciones y sanciones a contar desde el
día en que se cometió la infracción, o del día en que la sanción adquirió firmeza.