07 - Olga Lucía Zuluaga
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Resumen
Otra vez Comenio
Comenio once again
En este texto se asume el período comprendido entre Comenio y Herbart como el lapso de conformación del
horizonte conceptual de la pedagogía, con ubicación en el terreno metodológico y documental denominado saber
pedagógico. Esta lectura se refiere a lo que significa Comenio en un movimiento que no es igual al lento paso de las
cronologías, sino a un tiempo y unas coordenadas internas al saber pedagógico. En últimas, lo que se busca es
plantear una serie de problematizaciones para una introducción al estudio de los conceptos y de la práctica en Juan
Amós Comenio.
Abstract
This text is framed in the period between Comenio y Hebart as the timeline of conformation of conceptual horizon
of pedagogy, within the location in the methodical and documental field denominate pedagogical knowledge. This
reading refers to the meaning of Comenio in a movement that is not the same as the slow passing of chronologies
but as a time and some internal coordinates to the pedagogical knowledge. What is intended, in the end, is to
outline a series of questions for an introduction to the study of the concepts and the practice in Juan Amós Comenio.
__________________________________________________
* N. del E. Este texto fue publicado antes en esta revista, en el vol. 4, núm. 8-9, 1992-1993, pp. 241-273.
** Profesora jubilada de la Facultad de Educación de la Universidad de Antioquia. Creadora del Archivo Pedagógico
Colombiano, cofundadora del Grupo de Investigación Historia de la Práctica Pedagógica en Colombia.
E-mail: [email protected]
Revista Educación y Pedagogía, vol. XIX, núm. 47, Enero - Abril de 2007 99
Otra vez Comenio
Résumé
Dans ce texte on comprend la péirode entre Comenius et Herbart comme le laps de formation de l'horizon
conceptuel de la pédagogie, avec une situation dans le domaine méthodologique et documentaire appelé savoir
pédagogique. Cette lecture fait référence à ce que Coménius représente dans une courante qui n'est pas égale au
pas ralenti des chronologies, mais plutôt à un temps et à des coordonnées internes propres au savoir pédagogique.
Finalement, c'est qu'on cherche c'est d'établir une série de problèmes pour une introduction à l'étude des concepts
et la pratique chez Jean Amos Comenius.
Palabras clave
Juan Amós Comenio, horizonte conceptual de la pedagogía, saber pedagógico,
Didáctica magna, Pampedia, método de enseñanza
Juan Amós Comenio, conceptual horizon of pedagogical, pedagogical knowledge,
magna didactic, Pampedia, teaching methods
U
na región de las conceptualizaciones opción en el conjunto de conocimientos acer-
de Juan Amós Comenio ha alimenta- ca de la enseñanza.
do, desde tiempo atrás, la producción
del discurso didáctico, pedagógico y educati-
vo. Hay regiones de conceptos en su obra que Cómo leer a Comenio. Cuestiones de
la pedagogía incorporó en su devenir históri- método
co. También hay problemas, formulados en
su Didáctica magna, que aún nos sugieren re- Podemos llamar estado precientífico, en su acep-
flexiones y que siguen siendo preguntas abier- ción más amplia, el nivel alcanzado por una
tas en el seno del saber pedagógico. No pocos región de conocimientos, dentro de un saber,
historiadores de la educación y la pedagogía cuando elabora definiciones que le permiten
sitúan, a partir de la Didáctica magna, el naci- pasar de una práctica muy dispersa, a un con-
miento de una disciplina autónoma que unos junto más definido de objetos, conceptos y
denominan pedagogía, otros ciencia de la educa- prácticas producidas alrededor de éstos. En
ción, otros didáctica y otros ciencias de la educa- suma, cuando en el interior de un saber se
ción. origina un reordenamiento de conocimientos
que alcanzan un estatuto nuevo: los objetos
En el momento histórico de formulación de saber están más definidos y vinculados a
(1632), la Didáctica magna de Juan Amós Co- una práctica; se perfila un sujeto de saber que
menio busca cristalizar conceptos que toda operará con los nuevos enunciados; las no-
una práctica anterior requería para la solu- ciones que lo conforman alcanzan un mayor
ción de problemas específicos, que él señala ordenamiento y relación con la práctica, y se
tanto allí como en la Pampedia, y se formulan agrupan o reagrupan en función de los con-
otros que pretenden “fundamentar”, según ceptos, y las relaciones con el entorno social e
los propósitos anunciados por él mismo. Ello institucional son más definidos.
convierte el discurso sobre la enseñanza en
saber tangible, autónomo (otros prefieren ha- Estas consideraciones se sitúan en la tercera
blar de una disciplina autónoma) que tiene década del siglo XVII. Pero no tomamos este
por referente mayor la enseñanza. tiempo como un punto desde el cual volve-
mos hacia atrás en busca del momento en que
Esto significa que, con su discurso, sus pro- se inició el discurso sobre la educación. Nos
puestas, la delimitación de una práctica, las situamos en aquella práctica y aquella discur-
conceptualizaciones que buscaban ser funda- sividad cercanas a la producción de Comenio,
mento del arte de enseñar y aprender, Come- antes de él, cuando la educación y la enseñan-
nio se individualiza y diferencia como una za hacían parte de un discurso y una práctica
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Juan Amós Comenio
inmersos dentro del saber filosófico, con Juan flejo en los siglos XVII y XVIII, pleno de sugeren-
Luis Vives en su libro Tratado de la enseñanza, cias para historiar conceptos:
momento muy particular de especificación de
la práctica y del concepto de enseñanza. […] un concepto no exige para aparecer,
un trasfondo teórico predeterminado; el
Tampoco queremos explicar a Comenio des- concepto de reflejo no tiene su origen
de la historia social y política de su época, así en el contexto mecanicista al que se lo
estos estudios sean legítimos y necesarios. Esta traspone retrospectivemente, sino que
lectura se refiere a lo que significa Comenio surge con la obra de Willis, dentro de
en un movimiento que no es igual al lento una doctrina de inspiración dinamista y
paso de las cronologías, sino a un tiempo y vitalista [...] las teorías, sólo vienen des-
unas coordenadas internas al saber pedagógico pués, y muchas excrecencias teóricas
(véase Zuluaga, 1987). En este espacio se ubi- pueden injertarse sobre un mismo con-
can ciertos planteamientos que bien podrían cepto (citado en Macherey, 1969).
llamarse “problematizaciones para una intro-
ducción al estudio de los conceptos y de la Así pues, para nuestro caso, conceptos que
práctica en Juan Amós Comenio”, coordena- aún circulan en nuestras teorías educativas y
das situadas, indudablemente, en un espacio pedagógicas se formaron o vivieron un mo-
social y de saber. Sin embargo, es claro que las mento de su proceso en el interior de la didác-
condiciones sociales ya están presentes en la tica, cuando ésta se planteaba como el arte de
configuración y movimiento de los saberes, enseñar y aprender.
pero ellas no suprimen ni la presencia, ni el
balance que los saberes pueden hacer de sus La historia de las ciencias, al abandonar el
conceptos y de sus problemas. Éstos tienen prejuicio de los sistemas, nos abre otras posi-
su propia discursividad, que no debe acallar bilidades de análisis histórico, mostrando có-
la historia social, sino dejar que hablen los mo los sistemas no son el territorio único de
saberes su propia historia, entrecruzada con la conformación de los conceptos.
acontecimientos sociales y políticos que en-
cuentran en la historia social un apoyo irre- Tampoco vamos a discutir la cientificidad de
cusable para consolidar los análisis en el seno la pedagogía, para ocuparnos de ella a partir
del saber. del momento en que cobra el carácter de cien-
cia, siguiendo para ello las indicaciones de los
Pero es legítimo que una noción aparezca en historiadores de la pedagogía o de la educa-
un territorio de saber ajeno a aquel en el que ción. Tales indicaciones son muy variables:
finalmente se asentará. unas señalan a Comenio, otras a Heinrich Pes-
talozzi y otras a Johann Friederich Herbart.
No nos sorprenda que, más adelante, regio- Estos hitos, caracterizados por los historiado-
nes de conceptos y de problemáticas —que res, son significativos para nuestro enfoque
Comenio llamó didáctica— hayan sido reto- porque contribuyen a delimitar un amplio
mados por la pedagogía. Hasta dónde, cuáles dominio de conocimientos sobre la enseñan-
han sido las transformaciones y cuáles las con- za; pero no nos ocuparemos de comparar o
tinuidades, es un estudio que está por hacer- de discutir a quién corresponde la paterni-
se. En esta lectura de Comenio se proponen y dad de la pedagogía.
afirman algunas consideraciones con relación
al presente. Nada benéfica resulta aquella actitud dogmá-
tica que rechaza el análisis de los pedagogos
Conviene retomar el trabajo de Georges Can- señalando lo anticuado de sus ideas y la inu-
guilhem sobre la formación del concepto re- tilidad de estudiar ideas ya superadas. En vez
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de esta actitud, que genera una deshistori- Herbart dijo que la pedagogía debe construir
zación de la pedagogía, debemos hacer un uso su propio círculo de investigaciones (véase
productivo de la historia de las ciencias, dejar Herbart, s.f.), es decir, clama por una práctica
a un lado los vanos calificativos de “anticua- que fuese objeto de conocimiento. Esa prácti-
do”, “metafísico”, “idealista” y trabajar en la ca es la enseñanza, en una institucionalidad
perspectiva de valorar los conceptos que en que, sin romper del todo con la escuela, es
el devenir de un conocimiento han represen- diferente a ella, es un lugar teórico que Her-
tado momentos de impulso, de relaciones nue- bart llama la teoría de la instrucción. Por otra
vas con otros conocimientos, cambios de en- parte, Herbart ya no ve al maestro definido
foque, rupturas con planteamientos anterio- desde el manual; él piensa que el maestro debe
res, posibilidades de respuesta para asuntos saber tanto de pedagogía como de la ciencia
pendientes, o reactivación de puntos de vista
que enseña.
fecundos, etc.
Las distancias de Comenio a Herbart no son
Desde las formulaciones de Comenio en el
borrones apresurados; hay aquí un conside-
siglo XVII hasta las de Herbart en el siglo XIX, es
decir, desde la Didáctica magna de Comenio rable giro. Sin embargo, Herbart conserva el
hasta la Pedagogía de Herbart, se produjeron legado de la didáctica y su fuerza cifrada en
opciones de enseñanza, de formación del la enseñanza, permitiendo que aquella quede
hombre, de orientación de la escuela, se gesta- como el discurso más interno a la pedagogía,
ron modificaciones y emergieron conceptos una disciplina construida en el devenir del
y métodos. Basta leer las historias de las ideas saber acerca de la enseñanza, cuyo norte lo
pedagógicas y educativas, para localizar el constituyó indudablemente la Didáctica mag-
amplio espectro y las características globales na de Juan Amós Comenio.
de las opciones planteadas por un pedagogo
o por un bloque de ellos.
Reconocimientos importantes a Comenio
Como hipótesis de trabajo se continúa pro-
poniendo, aquí, asumir el período compren- Por el valor de autoridad que representa para
dido entre Comenio y Herbart como el lapso las comunidades científicas el patrimonio es-
de conformación del horizonte conceptual de la crito que ellas han reconocido y conservado
pedagogía, con ubicación en el terreno metodo- sobre las reflexiones, búsquedas, investigacio-
lógico y documental ya denominado saber nes y crisis que tienen lugar en un conoci-
pedagógico. Los análisis aquí contenidos se re- miento, es necesario tener en cuenta lo que
fieren a la delimitación de ese horizonte con- las Historias de la educación y de la pedago-
ceptual. Se dice delimitación como si hubiese gía han valorado del aporte de los diversos
existido, antes de Comenio, un terreno sin lin- autores, pues es justo e irrecusable conside-
deros bien definidos. Corresponde a la histo- rarlas como parte de la memoria del saber de
ria del saber pedagógico contar cómo fue el la pedagogía.
proceso de formación de los conceptos para
trazar los linderos, mas no los límites. Pero por una paradoja extremadamente
instructiva, desde el punto de vista de la
De esta manera, no tenemos que discutir dón- historia de las ciencias, es justamente
de empezó la verdad y quién la fundó, sino este metafísico que soñaba con un co-
ocuparnos de problemas referentes a la me- nocimiento integral, quien al escribir
moria del saber pedagógico, por ejemplo, his- una Gran didáctica y sus tratados espe-
toriar cómo fue el proceso de especificación ciales contribuyó a crear una ciencia de
de la práctica de la enseñanza en su compleji- la educación y una teoría de la didáctica,
dad social y de saber. considerados como disciplinas autóno-
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mas. Se puede decir que, ante todo, allí También Lorenzo Luzuriaga considera que
está la principal razón de su gloria sin Comenio “ha sido el fundador de la didáctica
desestimar sus iniciativas en el plano y en parte de la pedagogía moderna” (1965:
social e internacional (Piaget, 1957: 24). 143). Su más destacada contribución fue con
respecto al método (p.144). Los reconocimien-
Tenemos pues, según Jean Piaget, desde la Di- tos al método que hacen diferentes historia-
dáctica magna de Comenio, ciencia de la edu- dores han sido malentendidos por la posteri-
cación y teoría de la didáctica como disciplinas
dad. Es obvio que en el momento histórico
autónomas. Cuando Piaget y no pocos histo-
que vivió Comenio, el saber acerca de la ense-
riadores nos sitúan en la ciencia de la educa-
ñanza, al requerir delimitaciones en su prác-
ción o de la pedagogía a partir de la Didáctica
magna, no están indicando la enseñanza como tica y pretender solucionar los problemas de
lo esencial de la pedagogía. la enseñanza, toda propuesta, para perfilarse
como una opción, debía ofrecer conceptos,
Christoph Wulf va más allá de Piaget, al con- métodos y soluciones concretas. Pero es im-
ceptuar válidas para el presente dos formula- portante aclarar que esto no significa que, en la
ciones de Comenio sobre el conocimiento y actualidad, el problema más importante de
el porvenir del educando: al proponer la de- la pedagogía sea el método. Uno de los pro-
terminación del saber necesario para la vida blemas fundamentales es precisamente la su-
futura, Comenio introduce a la teoría educa- peración de métodos de enseñanza que se
tiva dos criterios que tienen validez hasta hoy. usan como meros procedimientos, desligados
En el marco de la educación se deben trans- de conceptualizaciones pedagógicas y tam-
mitir los conocimientos relevantes, por una bién de la ciencia objeto de la enseñanza.
parte, para la vida actual de los niños, y por
otra, para su futuro. El punto de vista de la Otros autores, como Wilhelm Dilthey, reco-
necesidad está inseparablemente unido a nocen la labor de fundamentación de la Di-
la pregunta por la selección de los contenidos dáctica:
y valores correctos de la educación y la ense-
ñanza, y con ello a la pregunta por los crite-
La didáctica está preparada por Bacon,
rios de esta selección y su fundamentación
Vives, Montaigne, etc. El espíritu crea-
(Wolf, 1979?: 14). La enseñanza y la escuela en
dor que la funda es Comenio. Así como
Comenio quedaron así ligadas a la verdad,
Descartes y Bacon habían sido los me-
pero también a la utilidad.
tódicos de la investigación, aquél es el
metódico de la instrucción (Dilthey,
El otro criterio formulado por Comenio no es
1965: 173).
menos importante y lo sitúa, según Wulf, en
los territorios propios de la modernidad: la
referencia al futuro. La educación debe con- Pero en nuestro método de abordar a Come-
siderar en sus reflexiones el futuro del niño. nio no es un propósito demostrar que él es
un fundador. Citamos a Dilthey para indicar
Pero ¿qué significa la referencia al futu- la lectura que hace un gran historiador como
ro de la educación? Desde el comienzo éste, quien reconoce la especial presencia de
de la época moderna esta pregunta no Comenio en un terreno preparado antes por
ha abandonado más a la pedagogía otros planteamientos, que se vuelve tangible
(p. 14). a partir de los trazos de aquél.
Y no sólo éste, sino también sus formulaciones La siguiente valoración de H. Weimer dife-
sobre la escuela para todos pertenecen al pen- rencia a Comenio en el conjunto de propues-
samiento moderno. tas pedagógicas de su época:
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enseñanza. La figura de la máquina con todas Bacon y Descartes fueron los metódicos de la
sus piezas perfectamente encajadas no es tan investigación, Comenio el metódico de la ins-
importante como la figura de la naturaleza; trucción. La didáctica surgió como el saber
los análisis que enfatizan en la máquina son acerca de la enseñanza más susceptible de
producto de exageraciones genealogistas que procedimientos ajustados a las “normas de la
se niegan a reconocer el fluir interno de los naturaleza”.
saberes. En el siglo XVII, que vio nacer la obra
de Comenio, la naturaleza sirvió de funda- En medio de esta corriente, que se proyecta
mento a la búsqueda de un nuevo método en la educación mediante el propósito de cons-
para la exposición del saber. El espíritu del trucción del espíritu científico, el distancia-
método y del experimento abrieron, para las miento de la primacía del latín y el fortale-
ciencias, nuevas formas de observación y de cimiento de los estados nacionales, irrumpió
investigación, y Comenio plasmó este movi- la obra de Comenio, transformando el discur-
miento al saber pedagógico. so acerca de la enseñanza en un discurso
autónomo, afianzando el movimiento en pro
El método llegó a ser la palabra clave de la de la lengua materna y planteando las más
época para la búsqueda de nuevos conoci- certeras soluciones para los “vicios” padeci-
mientos. No aceptar más el principio de au- dos por las escuelas. “¿De dónde puede pro-
toridad, lo tradicional; el hombre debía ob- venir esta lastimosa pérdida de tiempo y tra-
servar por sí mismo, utilizar sus sentidos y bajo sino de un método vicioso?” (Comenio,
buscar por la vía del ensayo las leyes de la 1971: 39). Comenio pone todo el énfasis en el
naturaleza. Según Cassirer: método.
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allá de las fronteras de las naciones, la escuela to; puesto que la verdad y la certeza de la cien-
debe enseñar todo a todos. cia no reside más que en el testimonio de los
sentidos, es preciso buscar que la enseñanza
sea toda por medio de la propia intuición y
El método y sus reordenamientos de la demostración sensual. Es necesario que
el conocimiento se base en la demostración
La trasformación que inaugura una nueva for- sensual, sólo así será perdurable, en el senti-
ma de discursividad para la pedagogía y la do de permanecer grabado en la memoria.
reorganización de la práctica de la enseñanza
es aquella que desplaza la enseñanza del libro Estas reglas, que ya no están cerca de noso-
de los clásicos a la naturaleza y del autor al tros, denotan una doble naturaleza de la
método, lo cual quiere decir que el método ya enseñanza: por una parte, es un método de
no será para aprender a través del filtro de un exposición para aprender y, por otra, la ense-
autor.1 “No se debe enseñar nada por la mera ñanza se adecua a la forma de conocer, al en-
autoridad, sino que todo debe exponerse me- tendimiento del que aprende, pues en la
diante la demostración sensual y racional” enseñanza, “todo se dispone en relación al en-
(Comenio, 1971: 87). tendimiento” (p. 82).
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1 Conservo en este escrito los análisis acerca de los planteamientos de Comenio sobre el método, presentados en
mi escrito: “El surgimiento de la pedagogía: Juan Amos Comenio” (1984).
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to, dirijamos la atención a las raíces his- bién por objetivo las buenas costumbres y la
tóricas del problema en el siglo XVII y se- devoción, esto es, su tarea es la transmisión
ñalemos cómo Comenio juiciosamente de los valores reconocidos como correctos. En
advirtió acerca del peligro de la unilate- el presente, esta misión sigue siendo confiada
ralidad, la parcialidad y el irrespeto por a la educación y conceptualizada desde pe-
el hombre en su desarrollo individual y dagogías diferentes a la de las ciencias de la
social. Su empresa de realizar una sínte-
educación y desde las ciencias humanas.
sis de la tradición y de los elementos de
lo moderno, lo colocó a menudo en una
Es decisivo observar que la unidad de educa-
coyuntura difícil, pero aún así desarro-
lló principios significativos (Capková, ción, enseñanza y escuela, permanece en el
1992: 188). saber pedagógico en diferentes opciones y de
diversos modos hasta comienzos del siglo XX,
En la Didáctica magna, Comenio une la edu- cuando se rasga esta ligazón para atomizar la
cación con la enseñanza y la escuela: “a todos pedagogía y hacer emerger las ciencias de
los que nacieron hombres les es precisa la en- la educación. El hecho de que el método ten-
señanza, porque es necesario que sean hom- ga sus procedimientos no es obstáculo, en
bres” (1971: 23). La ciencia, la virtud y la reli- Comenio, para incluir en la didáctica concep-
gión se adquieren “rogando, aprendiendo y tualizaciones sobre la educación y la enseñan-
practicando” (p. 20). En la Pampedia, él liga la za. Por el contrario, éstas hacen parte de la
didáctica a la pansofía y como resultado, fundamentación del método.
la enseñanza y la escuela quedan vinculadas
a su concepción pansófica. Pansofía como sa- Para llevar a cabo su proyecto pansófico se
biduría general, como saber universal, pero requieren maestros pampédicos que sepan
también omnisapiencia, sabiduría que condu- formar “a todos los hombres en todas las co-
ce así al conocimiento y a la devoción (Wolf, sas que perfeccionan la naturaleza humana,
1979?: 11). para volver a los hombres totalmente perfec-
tos” (Comenio, 1992: 139). A este maestro él lo
La organización de la escuela se acentúa en la llama pandidáscalo.
Pampedia en función del perfeccionamiento
del Género Humano, labor en la que cumple Los requisitos para educar a los hombres son
un papel clave la formación para la virtud, las escuelas, los libros y los maestros (p. 39).
pero en igual medida lo desempeña la cien- Para los fines de la educación, los libros ocu-
cia. Las escuelas son, para Comenio, “talleres pan un lugar decisivo:
para la formación de los hombres”. La didác-
tica es el instrumento útil para la construc- […] todo libro actual debe ser (y princi-
ción o instrucción del hombre todo. Por eso, palmente los escolares) todo él pansó-
la didáctica de Comenio está unida indisolu- fico, enteramente pampédico, entera-
blemente a la pansofía. No puede escogerse mente panglótico, enteramente panór-
tico. Pansófico: esto es, transmisor de la
otra perspectiva que la pansofía para aden-
médula de una sabiduría plena, más o
trarse en el pensamiento de Comenio. La di-
menos intensamente según el grado.
dáctica de Comenio equivale, en el pleno senti-
Pampédico, capaz de transmitir todo a
do de la palabra, a la pedagogía actual (Gó- todos, también según su grado. Pangló-
mez, [s.f.]: 31). tico: esto es, traducible a todas las len-
guas, dada la facilidad de su estilo sim-
En consecuencia, la educación no es sólo una ple y fácil. Panórtico, ciertamente útil
adquisición de saber, que tiene lugar median- para prevenir y enmendar la corrupción
te una referencia a las ciencias; ella tiene tam- de las cosas, repitámoslo otra vez,
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2 “La vocación profunda del lenguaje clásico ha sido siempre la de hacer un cuadro: sea como discurso natural,
compilación de la verdad, descripción de las cosas, corpus de conocimientos exactos o diccionario enciclopédico”
(Foucault, 1966: 302).
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hallazgos de Philippe Ariès sobre la historia los niños cosas infantiles, dejando para la edad
del niño en Francia (Ariès, [s.f.]), no haya nin- adulta lo propio de dicha edad. Evidentemen-
guna resonancia de las afirmaciones de te trabajan en balde los que proponen a los
Comenio, en pleno siglo XVII. niños opiniones de Cicerón o de otros gran-
des pensadores que tratan de materias que
La edad fue formulada por Comenio como están fuera del alcance de las inteligencias in-
un elemento que debería tenerse en cuenta fantiles (p. 123).
para enseñar:
En suma, existen suficientes consideraciones
[…] todo cuanto se ha de aprender debe en Comenio sobre la niñez para señalar que en
escalonarse conforme a los grados de la Didáctica magna están presentes unas pri-
edad, de tal manera que no se proponga meras y breves diferencias entre el niño, el
nada que no esté en condiciones de reci- hombre, la juventud y la adultez. De ello dan
bir (1971: 63). testimonio la forma de enseñarles las lenguas,
las ciencias y los libros didácticos que deben
Será de esencial cuidado la infancia, porque emplearse para ellos.
es en esta edad donde se aprende lo funda-
mental para la vida. Estas consideraciones, que ligan el método al
desarrollo de la mente y del lenguaje en el
Una misión confiada al maestro es la de hacer niño, fueron ampliamente recogidas en el
brotar, en el niño, el deseo de saber, valiéndo- horizonte conceptual de la pedagogía y han
se de diversos medios. Para lograrlo, el méto- sido incorporadas en diferentes opciones pe-
do debe contribuir disminuyendo el trabajo dagógicas, indudablemente transformadas. Al
de aprender, de tal manera que los alumnos emerger las ciencias humanas, a finales del
no interrumpan sus estudios. Para que el mé- siglo XIX, aparecen otras ciencias referidas a la
todo sea atrayente debe suavizarse, tratando enseñanza en las articulaciones de la pedago-
aun las cosas más serias de forma amena y gía con otras ciencias, por ejemplo, la psico-
familiar. De manera gradual y siguiendo el logía del niño directamente vinculada, en su
modelo de la naturaleza, “que procede de lo fundamento, a la pedagogía experimental pro-
más fácil a lo mas difícil (p. 76), deben ser ejer- puesta por Claparede. El niño de Comenio
citados en los niños: atisbaba desde la escuela el lento amanecer
del hombre moderno.
[…] los sentidos en primer lugar (esto
es fácil); después la memoria; luego, el
entendimiento y por último, el juicio.
El maestro
Así, gradualmente, seguirán, porque la
ciencia empieza por el sentido y por En la Pampedia, el maestro tiene para Comenio
la imaginación pasa a la memoria, des- una labor pansófica, de formación del hom-
pués por inducción de lo singular, se for- bre en la sabiduría. Para llevar a cabo su co-
ma el entendimiento de lo universal, y metido, el maestro debe ser como quiere que
por último, de las cosas suficientemen- los otros sean y, además, valerse de los libros.
te entendidas se compone el juicio para El maestro pampédico es llamado por Come-
la certeza del conocimiento (p. 77). nio un pandidáscalo. Para serlo verdaderamen-
te, él
El desarrollo del entendimiento y del lengua-
je de los niños requiere de un lenguaje y una […] debe proponerse un triple fin en su
escogencia de temas adecuados al estado de didáctica: 1) Universalidad para que to-
su inteligencia. Para formar a la vez el enten- dos puedan aprenderlo todo. 2) Simpli-
dimiento y el lenguaje deberán proponerse a cidad, para que por medios seguros lle-
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preceptores, a los eruditos, a los teólogos, pero plicarlo todo a todos. Como la educación se
en especial a los magistrados políticos, para había abandonado, estas tres cosas no se ha-
apoyar la reforma de las escuelas sin reparar bían hecho.
gasto alguno, pues:
Por ejemplo en algunos lugares no han
[…] hace ya más de cien años, en efecto existido escuelas; y por eso no hay en
que no han cesado de oirse lamentacio- ellos educación alguna, sino rusticidad
nes sobre el desorden y falta de método salvaje y barbarie; en otras partes exis-
que reinaba en las escuelas, y especial- tían, pero nada buenas; por tanto la edu-
mente, en estos últimos treinta años se cación es mala y no sirve para corregir la
han buscado remedios con empeño de- naturaleza humana, sino al revés, para
cidido. Pero ¿con qué resultados? corromperla más. En algunos sitios exis-
ten escuelas bastante buenas para su fin,
Las escuelas han continuado como eran. piadosas, santas, pero no están bien or-
Si alguno particularmente, o en alguna ganizadas por lo que se asemejan a la-
escuela privada, efectuó algún ensayo, berintos. Debe procurarse crear escue-
obtuvo exiguo resultado; ya le rodea- las por todas partes (pp. 103).
ron las risas burlonas de los indoctos o
le cerró el paso la envidia de los malé- La educación de su tiempo fue objeto perma-
volos o tuvo, al fin, que sucumbir priva- nente de su crítica:
do de auxilios bajo la carga de sus traba-
jos; y de esta manera fracasaron, hasta Si alguien piensa que, incluso así, hay
ahora, todos los intentos (p. 188). dificultades, puede decirse con verdad
que aun así todo sería más fácil de
En la Pampedia nos da la siguiente definición: lo que es la educación actual que educa
a algunos y descuida a los otros. 1) Será
Llamo escuelas públicas a aquellas re- más fácil sustentar a un solo maestro
uniones donde los jóvenes de toda al- para toda la juventud que (como ahora
dea, ciudad o provincia, bajo la dirección acontece) muchos preceptores priva-
de hombres (o de mujeres) honestísi- dos. 2) Un solo profesor enseñará más
mos, son ejercitados todos reunidos en fácilmente a muchos alumnos al mismo
las letras, en las artes, en las costumbres tiempo que a cada alumno individual-
honestas ya en la verdadera piedad, para mente. 3) También los discípulos apren-
conseguir que, por todas las partes, haya
derán todo más fácilmente en conjunto
abundancia de hombres bien instruidos.
que uno por uno a causa de la emula-
ción (p. 116).
Continúa anotando para qué habrá de servir
la escuela: La juventud debía ser educada colectivamen-
te. Comenio lo afirmaba en dos sentidos:
Queda determinado que deben estable-
cerse por todas partes escuelas públicas, Quiero decir no solamente el conjunto
que serán como el fermento para la vida de los jóvenes, que, confiados a la es-
económica y aun las bases de la Iglesia cuela, sean todos amados y educados con
y del Gobierno (1992: 188). igual cuidado, sino también el conjunto
de las disciplinas en las que deben ser
Todos los hombres, sin excepción, deben ser instruidos. En las escuelas públicas, pue-
educados en todas las cosas, mediante los li- den infundirse doctrinas en mayor nú-
bros, instrumentos universales de cultura, y mero en los espíritus, implantar en ellos
totalmente gracias a profesores que sepan ex- mejores costumbres, y, eliminar, según
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va pasando el tiempo, mayor número de lo cual era condición para abaratar los
errores y, finalmente, ahorrar mucho costos; también garantizaba la uniformi-
esfuerzo y gasto, porque no habrá dad de los contenidos. De ahí que la
maestros que se dediquen a enseñar in- escuela era susceptible de control; el
dividuos solos sino que, los mejores método había planteado el uso del tiem-
maestros, enseñarán a todos y simultá- po de los niños, de tal manera que el
neamente, todas las cosas necesarias tiempo de asistencia a la escuela no fue-
(p. 111). ra incompatible con las labores domés-
ticas; más adelante sería incompatible
con el tiempo de trabajo en las fábricas.
A modo de conclusión El método también respondía a la nece-
sidad de la defensa de la lengua mater-
Volvamos ahora a la clave que abrió la salida na. La enseñanza en lengua materna y
al horizonte conceptual de la pedagogía. En la creación de la escuela como institu-
la Didáctica magna, el método cumple un do- ción estatal, estaban entre las bases de
ble papel: la formación de las naciones.3
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3 N. del Editor: en el original no aparece el literal b.
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diálogo con el presente más cercano a los pro- _, [s.f.], Historia del niño en el antiguo régimen, [s.d.].
blemas que investigamos. Nadie puede inves-
Calvino, ltalo, 1991, Por qué leer a los clásicos, España,
tigar en el vacío, siempre hay una mirada Tusquets.
al entorno y el entorno es un complejo de
historia. Capkova, Dagmar, 1992, “Comenius: an alternative”,
Paedagogica Historica. lnternational Journal of History
Al releer a Comenio abrimos un camino que of Education, vol. XXVIII, núm. 2.
nos conduce a la memoria del saber pedagó- Cassirer, Ernst, 1984, La filosofía de la Ilustración, Méxi-
gico, en un momento (siglo XVII), donde no co, Fondo de Cultura Económica.
hay un punto cero y una fundación, sino don-
de encontramos los trazos del saber pedagó- Comenio, Juan Amós, 1840, Nociones elementales de la
naturaleza y de la industria humana, Caracas, Imprenta
gico en los territorios de la enseñanza, en otras
de Espinal.
palabras, la individualización del saber peda-
gógico. _, 1971, Didáctica magna, México, Porrúa.
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Otra vez Comenio
Sniders, Georges, 1973, Historia de la pedagogía, Barce- Zuluaga, Olga Lucía, 1984, El maestro y el saber peda-
lona, Oikos.
gógico en Colombia; 1821-1848, Medellín, Universidad
Weimer, H., 1920, Historia de la pedagogía, Madrid, La de Antioquia.
Lectura.
_, 1987, Pedagogía e Historia, Bogotá, Foro Nacional
Wulf, Christoph, 1979?, “El sueño de la educación”,
por Colombia.
Educación, Tubingen, vol. 131.
Referencia
Zuluaga G., Olga Lucía, “Otra vez Comenio”, Revista Educación y Pedagogía,
Medellín, Universidad de Antioquia, Facultad de Educación, vol. XIX, núm.
47, (enero-abril), 2007, pp. 99-118.
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