Deber Comunicacion

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 39

UNIVERSIDAD TÉCNICA DE COTOPAXI

NOMBRE:

OÑA OÑA EVELYN JAELA

DOCENTE:

ING. MILTON SAMPEDRO

MATERIA:

COMUNICACIÓN Y LENGUEJE

TEMA:

TAREA

CICLO:

PRIMERO “B” AGROPECUERIA

FECHA:

08/02/2024
La inseguridad marcó los casi 30 meses que Guillermo Lasso completará en el

poder. Reducir la violencia y frenar la penetración del crimen organizado en el país,

quedaron como asignaturas pendientes del Gobierno que termina su gestión el 23 de

noviembre de 2023. A puertas de la votación en un juicio político que pudo terminar en su

destitución, Guillermo Lasso declaró la muerte cruzada, disolviendo la Asamblea Nacional

y provocando el final anticipado de su administración. Más allá de los líos políticos y de la

sospechas de corrupción, Lasso y su Gobierno tuvieron en la inseguridad el principal

problema. Y se trató de un problema que nunca ofreció respiro y al que nunca encontraron

salida. En mayo de 2021, Lasso recibió un Ecuador que ya experimentaba una crisis de

seguridad. La administración de Lenin Moreno entregó un país con tasa de 14 muertes por

cada 100.000 habitantes y una primera masacre carcelaria con 79 víctimas. Pero, en lugar

de recomponer el camino, el régimen de Lasso abonó para que la crisis recrudeciera. El

Gabinete de Seguridad de Lasso enfrentó varias crisis y fue el más inestable de todos. Entre

crisis y cambios constantes, el frente de seguridad no encontró rumbo La inseguridad en

cifras Muertes violentas Entre el 1 de enero y el 18 de octubre de 2023, 6.044 personas

fueron asesinadas en Ecuador. Si esa media se mantiene en lo que resta del año, el país

podría cerrar 2023 con un sangriento récord de 7.607 asesinatos en un año. Una cifra

récord, considerando que en todo 2022 hubo 4.603 muertes violentas, por lo que el

incremento sería del 65,3%. El país podría cerrar en 2023 con una tasa de 44,9 asesinatos

por cada 100.000 habitantes, la peor cifra de la historia. (González, 2024).


No existe un día en Ecuador en que los muertos por crímenes violentos no se

cuentan por decenas. La violencia ha dejado de concentrarse en Guayaquil y se expande a

otras ciudades como Durán, Manta, Quevedo y Quito. Los ataques son a cualquier hora del

día, perpetrados por sicarios o atentados con bombas. Los objetivos pueden ser desde una

tienda de barrio hasta las unidades judiciales donde se realizan audiencias y las víctimas

incluyen a niños. (GAIBOR, 2023)

El pequeño país sudamericano, considerado hace sólo unos años como uno de los

más pacíficos de la región, vive la peor crisis de inseguridad de su historia. Las estadísticas

de la Policía revelan que entre enero y junio de este año se han registrado 3.513 asesinatos,

lo que significa un aumento del 58% respecto al 2022. Ese año la tasa de homicidios fue de

26 por cada 100.000 habitantes, y en la actualidad ya se ubica en 20, con una tendencia a

crecer, con lo que se estima que a final del año cerraría en 40 homicidios por cada 100.000

habitantes, convirtiéndose en el país más violento de la región. Esté escenario catastrófico

ocurre en medio de unas elecciones presidenciales y legislativas anticipadas en las que el

nuevo Gobierno no tendrá margen para improvisaciones, advierte Carolina Andrade,

analista en seguridad. “No se puede seguir esperando cosas tan básicas como equipar a la

Policía”, indica Andrade. Los ocho binomios a la presidencia saben que la inseguridad es la

principal preocupación de los ecuatorianos que están amenazados permanentemente por

delitos como extorsiones y secuestros que han aumentado hasta en un 300% respecto al

2022.Para el analista político Oswaldo Moreno, el ciudadano debe exigir de los candidatos

“que explique cuál será la política pública en seguridad y que asuma que la responsabilidad

es única y exclusivamente del Ejecutivo, no de los gobiernos locales, ni de la Asamblea”,

dice Moreno, porque esa ha sido la constante pugna de los gobiernos de turno cada vez que
la inseguridad aumenta. En los planes de gobierno que los binomios presentaron a la

autoridad electoral, todos han ubicado a la seguridad como su objetivo prioritario, la

mayoría coincide en cinco puntos: dar insumos a la fuerza pública, depurar a la Policía,

reformas al sistema judicial y penal, control de las cárceles y frenar la delincuencia

organizada transnacional; sin embargo, los discursos de algunos de ellos de cómo

ejecutarán una política pública en seguridad preocupa a Moreno. “Hay una suerte de

candidatos que se disfrazan de Bukele, que se refieren a no darle de comer a los presos y de

trabajo forzado”. (GAIBOR, 2023)

Ecuador ha visto un aumento en los delitos violentos en las últimas semanas,

especialmente en las ciudades de Quito y Guayaquil. Alrededor del 80 por ciento de

los homicidios en el país andino están relacionados con drogas ilícitas, según

funcionarios encargados de hacer cumplir la ley. ¿Qué están haciendo el Presidente

Guillermo Lasso y las fuerzas de seguridad para frenar la creciente violencia en el

país? ¿Qué influencia han tenido las preocupaciones de seguridad en las opiniones del

público sobre la administración de Lasso, que se acerca a su primer aniversario en

mayo? Con un cambio de gobierno este año en Colombia y la incertidumbre política

en Perú, así como el crimen continuo en las regiones fronterizas de Venezuela, ¿cómo

puede unirse la región andina para abordar el narcotráfico y el aumento del poder de

las bandas criminales?

Daniel Pontón, decano de la Escuela de Seguridad y Defensa del Instituto de

Altos Estudios Nacionales (IAEN): “La violencia criminal en Ecuador está creciendo de

manera peligrosa y parece no tener para. Después de una década de buena cosecha la tasa

de homicidios en el 2021 se ubicó sobre los 14 por cada cien mil–más de ocho puntos por
encima del 2018. En el mes de enero de 2022 los homicidios se triplicaron si se compara

con enero de 2021. Según la Policía del Ecuador, el 80 por ciento de los crímenes se debe a

la disputa de grupos criminales por el dominio territorial del narcotráfico a micro y macro

escala. Por esta razón, la delincuencia y la inseguridad se ha vuelto el principal problema

para los ecuatorianos. A nivel gubernamental, la guerra contra las drogas se ha posicionado

como la estrategia principal para enfrentar esta problemática. Sin embargo, los logros

mostrados por el gobierno a nivel de incautaciones en el año 2021 contrastan con el elevado

número de muertos que se le atribuyen a esta guerra. El gobierno parece ir perdiendo

sistemáticamente la guerra contra la delincuencia y se ha convertido en un tema muy

sensible políticamente. El panorama internacional venidero para el Ecuador es complejo

dado los cambios políticos que se están dando en la región. Pese a ello, plantear una agenda

común en materia de lucha contra el crimen puede generar una excelente oportunidad para

fortalecer la integración regional. Las recomendaciones internacionales sugieren que el

tema de la impunidad y el control de armas son factores fundamentales para lograr

reducciones significativas contra el crimen. Es ahí donde se deben establecer los esfuerzos

de colaboración entre los países.”

Ángel Zapata, subdirector de protección y seguridad en el Servicio Nacional de

Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes

Infractores (SNAI) de Ecuador: “La violencia en Ecuador ha escalado de manera

asombrosa en los últimos cinco años, en especial el 2021 donde la tasa de mortalidad

relacionada con la criminalidad pasó a dos dígitos. Los ciudadanos perciben que ya no hay

un lugar ni hora segura para sus actividades cotidianas y empresariales. Los datos apuntan a

que esta tendencia no mejore a corto plazo, Las estrategias del Gobierno Nacional no dan
efecto ni abasto y se conocen las posibles causas del incremento de la violencia,

especialmente de hechos en los cuales han sido asesinadas personas con un trasfondo

característico de los carteles del narcotráfico cuyo fin a más de causar miedo y terror busca

imponerse al estado de derecho y apoderarse de importantes y extensos sectores de la

ciudades. Es apropiado intuir que tras de las personas decapitadas, colgadas en puentes,

ensacadas, descuartizadas, baleadas en ataques selectivos con víctimas e impactos

múltiples, tanto como el empleo de armas automáticas de largo alcance y granadas, hay

economías ilegales que solo el narcotráfico y lavado de activos podría obtener y financiar.

Los tentáculos del crimen organizado se han manifestado también en el sistema de justicia,

cuyos fallos muchas veces dan espacio al cuestionamiento, debate y controversia de

opinión pública. Las autoridades responsables de la seguridad cotidianamente reaccionan

con muestras de poder. La prevención primaria y secundaria, ha pasado a segundo plano, la

prevención comunitaria ha desaparecido. Solo la disuasión con el apoyo de las Fuerzas

Armadas es la herramienta mediática utilizada. El escenario descrito otorga la necesidad e

importancia de redireccionar el plan de seguridad, cambiar el modelo centralizado de

cobertura nacional y abordar una estrategia integral pero local, acompañada de una reforma

legal que incorpore la prisión permanente revisable (PPR).” (Pontón, 2022)

El gobierno de Daniel Noboa busca hacer frente a una imparable espiral de

violencia criminal en Ecuador. Las autoridades achacan la situación al creciente

alcance de las bandas del crimen organizado movilizadas por el narcotráfico; pero,

¿qué más hay detrás?


En una escalada de violencia en Ecuador, que el presidente Daniel Noboa ha

calificado como un "estado de guerra", militares y policías salieron a las calles a custodiar

ciudadanos e infraestructuras estratégicas en las principales ciudades del país.

La crisis pone de relieve los retos que tiene por delante Noboa, quien asumió el

poder en noviembre tras prometer durante la campaña electoral que frenaría la violencia, al

tiempo que aumenta el transporte de cocaína a través del país por parte de las bandas de

narcotraficantes.

¿Por qué se ha deteriorado la seguridad en Ecuador?

La seguridad en Ecuador ha empeorado desde la pandemia del coronavirus, que

también golpeó la economía del país andino.

El número de muertes violentas ascendió a 8.008 en 2023, según el Gobierno, casi

el doble que en 2022. La violencia saltó al terreno político el año pasado, cuando

fue asesinado un candidato presidencial que tenía un discurso anticorrupción.

Las autoridades achacan la situación al creciente alcance de las bandas de

traficantes de cocaína, que han desestabilizado franjas de Sudamérica. Dentro de las

prisiones ecuatorianas, las bandas se han aprovechado del escaso control del Estado para

ampliar su poder. La violencia en las prisiones es cada vez más habitual, con cientos de

muertos en incidentes que las autoridades atribuyen a las luchas entre esos grupos por el

control de las cárceles.


Guayaquil, la ciudad costera más grande de Ecuador, está considerada la más

peligrosa del país, ya que sus puertos actúan como centro del contrabando de drogas.

Noboa, de 36 años, ha estado promocionando su "Plan Fénix " para la seguridad,

que incluye la creación de una nueva unidad de inteligencia, armas tácticas para las fuerzas

de seguridad, nuevas prisiones de alta seguridad y controles reforzados en puertos y

aeropuertos.

Costará unos 800 millones de dólares, dijo, aunque Estados Unidos aportará

200 millones de dólares en armas nuevas para el ejército ecuatoriano. ¿Qué causó el

estallido de violencia de esta semana?

La policía informó el domingo que Adolfo Macías, líder de la banda criminal Los

Choneros, había desaparecido de la prisión donde cumplía una condena de 34 años. Las

autoridades intentan localizarlo.

Mientras tanto, se produjeron incidentes de violencia en al menos seis prisiones

desde el lunes. Hasta el miércoles, más de 100 guardias y otros miembros del personal

seguían secuestrados por los presos.

En Riobamba, capital de provincia en el centro de Ecuador, 39 reclusos se fugaron

de una prisión, aunque algunos han sido recapturados.

La violencia se extendió a las calles el martes, con dos policías muertos en la

provincia de Guayas, donde se encuentra Guayaquil.


También fueron secuestrados siete policías en todo el país, aunque tres han sido

liberados. (Voz De América, 2024).

Quito, 30 may (EFE).- El flagelo del crimen organizado y del narcotráfico, a los que

se suman la delincuencia común y una crisis carcelaria sin precedentes, ubican a Ecuador

como el país con el aumento más acelerado de homicidios de toda la región y reflejan que

la realidad supera a la gestión del Gobierno de Guillermo Lasso.

Si en 2021 la nación andina registró más de 2.400 asesinatos, alcanzando los 14

homicidios por 100.000 habitantes (la tasa más alta en una década, según la fundación

InSight Crime) y prácticamente doblando la cifra de 2020, solo entre enero y abril de este

año ya van más de 1.200 muertes violentas contabilizadas por la Policía Nacional.

El docente del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN) Daniel Pontón

recuerda que Ecuador experimentó entre 2009 y 2010 tasas cercanas al 19, pero vaticina

que si nada impide la tónica actual, "se podría superar con creces esa cifra y estar a la par

que países centroamericanos o Venezuela".

Coincide con él Carolina Andrade, experta en seguridad ciudadana, al subrayar que

si el Ejecutivo no toma acciones de contención, como el último estado de excepción

focalizado en tres provincias, "podríamos dispararnos a niveles muy cercanos a México",

que cerró 2021 con una tasa de 25,8, conforme al Observatorio de Homicidios del Instituto

Igarapé.

FORMAS INÉDITAS DE VIOLENCIA


Cifras aparte, el repunte de la violencia con formas hasta ahora inéditas se evidencia

este año en sucesos tales como la aparición de cadáveres colgados de un puente en la

provincia de Guayas, vehículos bombas en Esmeraldas tras decomisos importantes de

droga, así como la explosión de drones en entornos carcelarios, que apuntan a una

"mexicanización" de las prácticas delictivas.

"Esta violencia no solo es cuantitativa, sino cualitativa y bajo una lógica de

amplificación mediática que genera mucha preocupación", alerta Pontón sobre un

fenómeno "que empieza a ser cotidiano" y llegar a tener un efecto de "derrame".

El síntoma más claro del deterioro de la situación en un país que, hasta hace poco

más de un lustro era considerado el segundo más seguro de Suramérica, es el repunte de los

sicariatos bajo modalidades que van más allá del ajuste de cuentas entre narcotraficantes.

Esta práctica está generando verdadera conmoción social porque muchos son

grabados por cámaras de vigilancia a plena luz del día, incluso ante la presencia de niños y

con objetivos variopintos que van desde una fiscal, abogados y empresarios hasta

individuos aparentemente no vinculados a actividades delictivas.

"Al principio el Gobierno planteaba que era un problema entre bandas del

narcotráfico, pero empieza a haber sicariatos para resolver conflictos triviales", insiste

Pontón al anotar que el 70 % de las provincias ecuatorianas muestran tasas significativas de

homicidios.

CRISIS CARCELARIA
Capítulo aparte merece la crisis carcelaria que en los dos últimos años se ha cobrado

la vida de más de 400 reclusos en sanguinarios enfrentamientos entre clanes rivales y sus

escisiones involucradas en el negocio de la droga, que a la vez se disputan el control de las

prisiones y las calles.

La violencia en las cárceles ha sido exponencial: en 2020 fueron 46 los presos

asesinados, un año después ascendieron a 316 en distintas matanzas, y este 2022 va camino

de reproducir el patrón al acumular de momento 64 muertes, las últimas en una carnicería

con 44 cadáveres apilados en el patio de la prisión de Santo Domingo.

Pontón enmarca estas acciones bajo el concepto de "violencia comunicacional" en

un mundo globalizado, "donde los criminales saben que esa violencia se difunde y marca

territorio bajo una lógica instrumental".El analista alerta que no se explica el ensañamiento

de estos clanes, reflejado en decapitaciones y brutalidad extrema, "influencia de los carteles

que hace rato están en Ecuador".

MEDIDAS RECIENTES

El presidente Lasso ha anunciado que destinará 1.200 millones dólares para

combatir la inseguridad, ha establecido una Comisión de Pacificación para fortalecer el

sistema penitenciario, ha avanzado una ley de seguridad ciudadana y prevé incorporar

30.000 policías al combate de la criminalidad.

Sin embargo, Andrade valora que las decisiones están llegando tarde y de manera

improvisada al censurar la falta de perfiles civiles para enfrentar un fenómeno

multidimensional.
"Por primera vez en 20 años todo el sector de la seguridad se encuentra bajo la

responsabilidad del servicio pasivo militar y policial", cuestiona.

Propone implementar las recomendaciones hechas por la Comisión Interamericana

de Derechos Humanos (CIDH) y la ONU respecto a la problemática carcelaria, mejorar

capacidades operativas y apostar por el eje preventivo contra la delincuencia común.

Su colega es partidario de intervenciones contundentes y separación de presos según

su perfil, y combatir el narcotráfico con inteligencia estratégica sin desdeñar la alta

impunidad "en un sistema permeable a la corrupción y al crimen organizado". EFE (Brik,

2022)

A pesar de que las autoridades no dan tregua en su lucha contra el crimen

organizado, Ecuador enfrenta su más severa oleada de violencia originada por el tráfico de

drogas. En el periodo comprendido entre el 1.º de enero y el 2 de julio de 2023, fueron

contabilizadas 3568 muertes violentas. (Foto: Policía Nacional del Ecuador)

Ecuador sostiene una lucha incesante contra el narcotráfico. Sin embargo, en

tiempos recientes este desafío alcanza niveles preocupantes, con una creciente crisis de

inseguridad y un incremento significativo de la violencia, que afecta la calidad de vida de

millones de ecuatorianos, reportó el diario The New York Times.

Hasta hace tres años, Ecuador era uno de los países con menos violencia en la

región. Ahora, los cárteles mexicanos y colombianos establecieron su presencia en ciudades

costeras como Guayaquil, donde afianzan parte del negocio de exportación de cocaína
procedente de los países vecinos como Colombia y Perú y con destino a otros países, señala

en Internet la plataforma argentina Infobae.

“El desafío que enfrenta Ecuador radica en la gravedad de la crisis de violencia que

vive en su historia contemporánea, como resultado de la reestructuración de las dinámicas

criminales transnacionales”, dijo el 18 de septiembre a Diálogo Yadira Gálvez, experta en

temas de seguridad y académica de la Universidad Nacional Autónoma de México.

“Ecuador es un área clave para el trasiego de drogas y sobre todo un escenario de

confrontación de estos grupos criminales transnacionales, que llevan al Gobierno a

establecer una serie de medidas, incluyendo estado de emergencia en varias provincias del

país, para combatir la violencia y la criminalidad”.

Y es que la presencia de sicarios, secuestradores, extorsionadores y miles de

ladrones y atracadores se hacen sentir tanto en barrios de clase obrera como en zonas

relativamente acomodadas, precisó Infobae. La inseguridad y la ola de violencia giran en

torno a la cocaína.

Entre el 1.º de enero y el 2 de julio de 2023 fueron registradas 3568 muertes

violentas, lo que equivale a una tasa de 19,83 homicidios por cada 100 000 habitantes. Si

esta tendencia persiste, al finalizar el año las cifras podrían superar los 7000 asesinatos,

alcanzando una tasa de 39 casos por cada 100 000 habitantes, indica en Internet el sitio

internacional Statista.

Democracia amenazada
A pesar de contar con un equipo de seguridad el candidato ecuatoriano Fernando

Villavicencio, quien se destacaba por su firme postura en contra del crimen organizado y la

corrupción, fue asesinado a tiros el 9 de agosto, días antes de las elecciones presidenciales

especiales del 20 de agosto, reportó Infobae.

Según el diario estadounidense LA Times, en los días previos al asesinato, el

candidato hizo denuncias públicas donde afirmaba que el líder de un grupo delictivo local

conocido como Los Choneros, vinculado al Cártel mexicano de Sinaloa, lo había

amenazado. Además, el candidato señaló la existencia de vínculos entre políticos y

narcotraficantes.

“Ya no estamos lidiando con la delincuencia común, sino con los más grandes

cárteles de la droga del mundo”, declaró al diario ecuatoriano Primicias el presidente de

Ecuador Guillermo Lasso. Desde mayo del 2021 hasta agosto de 2023, la Policía Nacional

logró incautar 502 toneladas de drogas, indicó LA Times el 5 de septiembre.

Cooperación e Inteligencia

“La cooperación internacional es un elemento esencial para desmantelar el crimen

transnacional”, enfatizó Gálvez. “Esta colaboración internacional implica intercambio de

información, cooperación en inteligencia, fortalecimiento de capacidades operativas y

compartir experiencias”.

En esta línea, el 16 de agosto Ecuador ratificó el Acuerdo de Cooperación con los

Estados Unidos, informó el diario español El Mundo. El objetivo es que Ecuador cuente
con la inteligencia y el asesoramiento estadounidense para fortalecer la capacidad de su

Fuerza Aérea en la localización, identificación, seguimiento e interceptación de aeronaves

civiles sospechosas de tráfico de drogas.

“Los Estados Unidos reconocen que no es suficiente con dislocar y atacar a las

organizaciones criminales, sino que también hay que fortalecer el Estado de derecho y la

lucha contra la corrupción y el lavado de dinero en toda la región”, manifestó Gálvez. “Es

urgente apoyar el entrenamiento y equipar tanto a las autoridades de procuración e

impartición de justicia, como fortalecer las capacidades de operación de Ecuador contra

todas las organizaciones criminales”.

Durante la ratificación del acuerdo, el embajador estadounidense en Quito Michael

J. Fitzpatrick, aseguró: “Ahora más que nunca, los Estados Unidos están comprometidos

con Ecuador en la lucha contra el crimen organizado y la búsqueda de la justicia. Estamos

dedicados a nuestra alianza con Ecuador en los ámbitos de seguridad, justicia y Estado de

derecho, durante el tiempo que sea necesario para mitigar las amenazas urgentes que

enfrentan nuestros países y ciudadanos”.

“Desde 2018, el Gobierno de los Estados Unidos ha destinado aproximadamente

USD 31 millones en asistencia bilateral a Ecuador, específicamente en áreas relacionadas

con la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado transnacional, para fortalecer sus

capacidades”, destacó Gálvez.

Aprender la lección
“Una lección que Ecuador puede aprender de México y Colombia es que el aumento

del crimen organizado transnacional lleva a una mezcla entre actividades económicas

legales e ilegales debido al aumento de la capacidad financiera de las organizaciones

criminales”, finalizó Gálvez. “Esto va más allá del lavado de activos y se traduce en su

habilidad para diversificarse en otras áreas económicas; una situación sumamente

preocupante”.

(PELCASTRE, 2023).

Ecuador ha sufrido una grave espiral de violencia que se mantiene hasta principios

del 2024. De hecho, el 2023 se convirtió en el año con más homicidios de la historia del

país, con una persona muerta cada 69 minutos a causa de la violencia criminal. De acuerdo

a lo reportado por la Policía Nacional, en 2023 se registraron 7.592 muertes violentas, lo

que se traduce en una tasa de homicidio de más de 40 muertos por cada 100.000 habitantes.

Estas cifras representan un aumento aproximado del 64,9% comparado con las 4.603

muertes de 2022 (Department, statista, 2024)

Entre el 1 de enero y el 20 de marzo de 2022, las autoridades contabilizaron

815 muertes violentas. Mientras que en los mismos 78 días de 2023 hubo 1.356 casos.

Esto supone un incremento del 66,4%.

A pocos días que concluya el primer trimestre de 2023, el país ha vivido uno de los

períodos más violentos de su historia en materia de seguridad. Según Registros del

Ministerio del Interior en los 365 días de 2022 hubo 4.603 homicidios, eso significa un

promedio 10,4 casos diarios de 25, por cada 100.000 habitantes, según informó el portal

Primicias. Mientras en lo que va el año 2023, el promedio diario es de 17,4 casos. Si esta
media se mantiene, se podría cerrar el año con más de 6.300 crímenes y una tasa de 34

casos por cada 100.000 habitantes.

Juan Zapata, ministro del Interior, dijo sobre el tema al medio de comunicación Primicias

que el problema está localizado principalmente en 15 distritos del país: Prosperina, Sur de

Guayaquil, Esmeraldas, Quevedo, Pascuales, Manta, Portete, Esteros, Florida, Portoviejo,

Milagro, Salinas, Durán y Balzar. En estos distritos se genera entre el 80 y 85% de las

muertes totales en el país.

En estos distritos la pelea se da por dominio del territorio. “Es claro que existe una guerra

declara entre bandas en las que inclusive se han perdido los códigos”. Con esto se refirió a

que las muertes ya no son selectivas, no les interesa quien está alado de los objetivos, si

están niños o familias. Se han perdiendo los códigos, recalcó a Primicias.

“Ruta de las drogas”

El Gobierno justifica el crecimiento de las muertes entre 2022 y 2023 debido a la guerra

entre bandas que se disputan el control del territorio y del mercado del narcotráfico y el

microtráfico de drogas. Las cifras oficiales apuntan que el 80% de estos asesinatos se dan

en las llamadas “rutas de las drogas”. Se trata de Guayas, Esmeraldas, Manabí, Los Ríos y

El Oro.

Zapata, mencionó que es imposible que las muertes violentas se detengan, pero el objetivo

es contenerlas y luego empezar a reducirlas. La prioridad sería el control de las armas y

municiones que se mueven en el mercado ilegal. Para fortalecer esta área, el Gobierno

ecuatoriano firmó un convenio con la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y

Explosivos de Estados Unidos (ATF, por sus siglas en inglés). El objetivo de este acuerdo

es determinar la trazabilidad de las armas y de las municiones que terminan en las manos de
los delincuentes. La idea es rastrear las fábricas de donde salen las armas para determinar

cuáles son las rutas que siguen para ingresar al país.

Acciones inmediatas

“Hemos generado la estrategia contra la violencia. Porque la policía tiene que enfocarse en

las nuevas dinámicas: secuestro, extorsión y muertes violentas”. Para ello se van a construir

100 UPC (Unidades de Policía Comunitaria) y seis UVC (Unidades de Vigilancia

Comunitaria). Las primeras 35 UPC serían entregadas a finales de 2023, 10 más en agosto,

y el resto en lo que va el año, señaló a Primicias. Las UVC son más grandes tienen una

capacidad para 200 a 300 policías y estarían previstas para marzo de 2024.

En el tema de los vehículos, dijo que entregarán algunos que no son nuevos, van a ser

repotenciados, pero saldrán como nuevos. Estarán en las zonas más conflictivas. Por

ejemplo, la zona 1 de Esmeraldas, tiene 180 patrulleros y vamos a dar 100 más de estos

repotenciados. Estos ayudarán hasta que se renueve la flota”, contó a Primicias. (DLH).

(Diario La Hora Ecuador, 2023)

Un total de 210 toneladas de droga incautadas en un solo año, todo un récord. Al

menos 4500 asesinatos el año pasado, también un récord. Niños reclutados por pandillas.

Cárceles como centros de delincuencia. Barrios consumidos por rencillas criminales. Y

todo este caos financiado por extranjeros poderosos con mucho dinero y bastante

experiencia en el negocio mundial de la droga.

Ecuador, en el extremo occidental de Sudamérica, se ha convertido en pocos años

en una tierra de las oportunidades del narcotráfico, con carteles importantes de países tan
lejanos como México y Albania uniendo fuerzas con pandillas y bandas de las cárceles, lo

que ha desatado una ola de violencia sin precedentes en la historia reciente del país.

La creciente demanda mundial de cocaína alimenta este panorama. Mientras que

muchos políticos y legisladores se han centrado en una epidemia de opioides, como el

fentanilo, que provoca la muerte de decenas de miles de estadounidenses cada año, la

producción de cocaína se ha disparado a niveles históricos, un fenómeno que ahora está

haciendo estragos en la sociedad ecuatoriana y ha convertido a una nación que solía ser

pacífica en un campo de batalla.

“La gente consume allá”, dijo el mayor Edison Núñez, oficial de inteligencia de la

policía nacional ecuatoriana, “pero no saben las consecuencias que pasan acá”.

No es que Ecuador sea nuevo en el negocio de la droga. Ubicado entre los mayores

productores de cocaína del mundo, Colombia y Perú, durante mucho tiempo ha sido un

punto de salida de productos ilícitos con destino a Norteamérica y Europa. Pero el auge en

Colombia del cultivo de la hoja de coca, ingrediente básico de la cocaína, ha dado lugar a

un aumento de la producción de la droga, mientras que los años de laxitud policial en la

industria del narcotráfico en Ecuador han convertido al país en una base cada vez más

atractiva para la fabricación y distribución de drogas.

La violencia vinculada a las drogas comenzó a aumentar en torno a 2018, a medida

que los grupos delictivos locales competían por mejores posiciones en el negocio. Al

principio, la violencia se limitaba principalmente a las prisiones, donde la población había

aumentado tras el endurecimiento de las penas relacionadas con las drogas y el mayor uso

de la prisión preventiva.
Con el tiempo, el gobierno perdió el control de su sistema penitenciario, y los presos

obligaban a otros presos a pagar por las camas, los servicios y la seguridad, e incluso tenían

las llaves de sus propios bloques carcelarios. Pronto, los centros penitenciarios se

convirtieron en bases de operaciones para el tráfico de drogas, según los expertos que

estudian Ecuador.

El crimen organizado internacional vio una oportunidad lucrativa para ampliar sus

operaciones. En la actualidad, los carteles más poderosos de México, Sinaloa y Jalisco

Nueva Generación, son financiadores en el terreno, junto con un grupo procedente de los

Balcanes al que la policía llama mafia albanesa. Grupos locales de delincuencia callejera y

carcelaria con nombres como Los Choneros y Los Tiguerones trabajan con los grupos

internacionales, coordinando el almacenamiento, el transporte y otras actividades, según la

policía.

La cocaína, o un precursor llamado pasta base de coca, entra en Ecuador desde

Colombia y Perú, y suele salir por vía fluvial desde alguno de los ajetreados puertos del

país (Turkewitz, 2023).

Los videos se difunden de forma masiva a diario en las redes sociales y generan

conmoción. Asaltos, robos, ataques con armas de fuego en locales comerciales. Gente

agredida a golpes en la calle mientras le arrebatan sus pertenencias, balaceras, atracos en

taxis o buses.

Pese a que el Gobierno ha reiterado que la seguridad es una prioridad,

las cifras muestran un aumento de los delitos de forma global: desde enero hasta agosto
del 2020 hubo 12 475 robos a personas, mientras que en el mismo período de este 2021 se

registraron 16 017. Es decir, un aumento del 28,4%, según datos del Ministerio de

Gobierno.

Redacción Seguridad (I)

Los videos se difunden de forma masiva a diario en las redes sociales y generan

conmoción. Asaltos, robos, ataques con armas de fuego en locales comerciales. Gente

agredida a golpes en la calle mientras le arrebatan sus pertenencias, balaceras, atracos en

taxis o buses.

Pese a que el Gobierno ha reiterado que la seguridad es una prioridad,

las cifras muestran un aumento de los delitos de forma global: desde enero hasta agosto

del 2020 hubo 12 475 robos a personas, mientras que en el mismo período de este 2021 se

registraron 16 017. Es decir, un aumento del 28,4%, según datos del Ministerio de

Gobierno.

En el caso de los robos a viviendas también se ve una subida: de 4 461 el año

pasado a 5 178 este 2021 (16%). En lo que respecta a la sustracción de vehículos, el año

pasado fueron 2 676 y en este año se reportaron 4 231 casos (58%).

De igual forma, los asesinatos, cuyos autores tienen la intención de quitar la vida a

una persona, se duplicaron en el período analizado. Las provincias más preocupantes se

concentran en la Costa, encabezadas por Guayas, Manabí, El Oro y Los

Ríos, Esmeraldas. En la Sierra están Azuay y Cotopaxi.


De los 1 213 asesinatos perpetrados en los primeros ocho meses de este año, 952 se

ejecutaron con armas de fuego, seguido muy por debajo de armas blancas.

Un reciente hecho causó indignación en la población, cuando un adolescente murió

por una bala perdida en un restaurante ubicado al sur de Guayaquil. La tarde del domingo

17 de octubre del 2021, dos ladrones sorprendieron a los comensales y uno de ellos disparó

al policía que se encontraba en el lugar y trató de impedir el asalto. Se produjo un cruce de

balas y tres proyectiles impactaron al chico que almorzaba en el local junto con su familia.

Consternado, el padre del joven contó que una bala le penetró a la altura del

corazón. Dos tiros más le impactaron en el brazo y la costilla. “Al traerlo al hospital, él

venía en mis brazos y no podía respirar por más que intenté reanimarlo, no tenía signos

vitales” (Elcomercio.com, 2021).

Desde finales de 2020, Ecuador ha sufrido una crisis de seguridad producto de

conflictos entre organizaciones criminales con conexiones al narcotráfico.1 Los conflictos

iniciaron luego del asesinato de Jorge Luis Zambrano, líder de la banda criminal Los

Choneros, considerada una de las más antiguas y peligrosas del país. 2 Zambrano fue

asesinado el 28 de diciembre de 2020 y su muerte llevó a que las agrupaciones criminales

conocidas como Los ChoneKillers, Los Lobos, Los Pipos y Los Tiguerones, que

funcionaban como subestructuras de Los Choneros, se separaran de la banda e iniciaran una

guerra contra sus antiguos líderes por el control de los centros carcelarios del país y

del tráfico de drogas a través de una serie de masacres y otros hechos delictivos.324

La ola de violencia ha generado un marcado despunte en el número de asesinatos en

el país.5 En 2021, la tasa de homicidios intencionales alcanzó el 14,04 por cada 100 000
personas y un saldo de 2497 muertes violentas (la mayor desde 2011), 6 en comparación con

una tasa de 7,8 en 2020.7 Estas cifras han continuado aumentando en 2022, cerrando dicho

año con una tasa de homicidios de 25 por cada 100.000 habitantes y un saldo de 4603

muertes violentas. El dato más reciente de 2023 dicta que este cerró con una tasa de 40

homicidios por cada 100.000 habitantes y un saldo de cerca de 7592 muertes violentas. La

zona del país más violenta es la denominada "Zona 8", que aglutina a

los cantones de Guayaquil, Durán y Samborondón. La misma vio 53 asesinatos entre enero

y febrero de 2021 y 162 en el mismo periodo de 2022.8

En 2023, en la zona 8 que comprende a Guayaquil, Durán y Samborondón, entre el

1 de enero y el 24 de abril, se reportaron cerca de 730 muertes violentas, siendo el lugar

más violento del país.

El foco de la violencia se ha desarrollado dentro de los centros carcelarios del país, 3

con hechos como la Masacre carcelaria del 23 de febrero o la Masacre de la Penitenciaría

de Guayaquil del 28 de septiembre, ambas ocurridas en 2021 y la segunda considerada la

quinta masacre carcelaria más sangrienta en la historia de América Latina.2 En total, 503

reos fueron asesinados en el país solo durante 2021. 9 Sin embargo, la ola de violencia

también se ha manifestado fuera de las cárceles.

Antecedentes[editar]

Véase también: Antecedentes de la Crisis de seguridad de Ecuador (2020-presente)

Asesinato de Jorge Luis Zambrano[editar]

Jorge Luis Zambrano fue un criminal ecuatoriano, líder de la banda Los

Choneros desde el 2007 hasta 2020,10 Su asesinato ocurrió el 28 de diciembre del 2020 en
un centro comercial en Manta por un desconocido que disparó a quemarropa contra el. 11

Después de la muerte de Jorge Luis Zambrano, su sucesor José Macías Villamar alias

"Fito" provocó que los subgrupos que funcionaban como parte de Los Choneros se

dividieran e inicien una guerra por el liderazgo (wikipedia, 2020)

El 2022 será recordado como el año en que Ecuador obtuvo su peor registro

de violencia criminal. Las cifras oficiales indican que el país andino es la nación

latinoamericana con mayor incremento de este tipo de violencia. Así como Ecuador, en

nueve países también aumentaron los datos sobre violencia criminal. En Ecuador, el 2022

cerró con 4.603 muertes violentas, equivalente a 25 casos por cada 100.000 habitantes.

En el 2021, la tasa de muertes violentas era de 13,7 por cada 100.000 habitantes. El

porcentaje de incremento fue de 82,5 %, según reveló Primicias, que analizó el récord de

muertes violentas en Latinoamérica.

En el 2023, la situación de Ecuador no ha mejorado pues en los 10 primeros días de

enero se registraron 16 asesinatos diarios.

De acuerdo con las cifras del 2022, Jamaica es el país más violento de

Latinoamérica con una tasa de 50.6 muertes por cada 100.000 habitantes, le

sigue Trinidad y Tobago, Honduras y Venezuela.

Según los datos disponibles, Ecuador podría ocupar la quinta posición en la lista,

aunque aún queda por confirmar la tasa de Belice, de acuerdo con Primicias. Contrario al

gran aumento de Ecuador en cuanto al índice de muertes violentas, El Salvador logró una

reducción de esta tasa con un 56 %. La política para reducir la violencia del presidente
salvadoreño Nayib Bukele ha sido cuestionada por la vulneración de los derechos

humanos. México también mostró una reducción del 6 % en la tasa de muertes violentas.

En Ecuador, el incremento de la violencia criminal, reflejada en las muertes

violentas, sería la respuesta de los grupos de delincuencia organizada frente a las acciones

de las fuerzas de seguridad que buscan contener la penetración del narcotráfico en el país,

según la versión gubernamental.

De acuerdo con los datos de la Policía Nacional, recogidos por Primicias, en el

2022, las autoridades policiales decomisaron 201,4 toneladas de drogas. Aunque esta

cantidad no supera a las incautaciones del 2021, sí se registra como la segunda tasa más alta

de la historia nacional.

Ecuador se ha convertido en un país clave para el envío de droga, especialmente

cocaína, hacia Europa y Estados Unidos. La ubicación de la nación es clave pues se

encuentra entre los dos productores más importantes de droga del

mundo: Colombia y Perú. Colombia es uno de los productores más importantes de coca

en el mundo. El 66 % de cultivos ilegales de coca en América Latina están en ese país,

que posee 154.475 hectáreas de sembríos ilícitos. Perú, que está en la frontera sur del

Ecuador, es el segundo productor más importante de la región, con el 23% de los sembríos,

equivalentes a 54.655 hectáreas.

Según la información oficial del gobierno ecuatoriano a la que Infobae accedió, una

hectárea de coca en promedio tiene de 10,000 –12,000 plantas y representa al menos 4.2

cosechas por año. Una hectárea de estos sembríos produce 5,8 toneladas métricas de hoja
de coca anualmente, lo que puede traducirse a 6,7 kg de clorhidrato de cocaína al año. Para

determinar estrategias que permitan enfrentar las amenazas de la frontera colombo-

ecuatoriana, los más altos representantes militares de las Fuerzas Armadas de esos dos

países celebraron, a finales de diciembre, una reunión bilateral de trabajo y suscribieron un

acta de compromisos para la implementación táctica y operativa del Plan de Protección de

Fronteras. El objetivo es impulsar acciones para neutralizar a los grupos del crimen

transnacional que operan en la zona fronteriza.

Las principales amenazas son las acciones del narcotráfico y el crimen organizado

en la frontera común, según informó el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas del

Ecuador. Para la institución militar, las distintas dinámicas que emplea el narcotráfico y sus

delitos conexos causan impacto en la seguridad de la región, por lo que “será́ necesario que

los acuerdos a los que se llegó́ en esta reunión se traduzcan en planes y órdenes que

permitan minimizar estas amenazas trasnacionales” (Arcos, 2022)

Balaceras y sangrientos motines en las cárceles, asesinatos selectivos,

desapariciones, secuestros extorsivos, coches bomba y amenazas de artefactos explosivos

se han vuelto episodios cotidianos en la vida de los 18 millones de personas que viven en

Ecuador, que atraviesa desde hace un tiempo la crisis de seguridad más grave de su historia.

El Gobierno atribuye esta situación a los «golpes» que le ha propinado al crimen

organizado, tanto en términos de incautación de drogas como a su capacidad de producción,

y a las peleas entre los grupos delincuenciales organizados que se disputan territorios para

poder llevar a cabo sus operaciones ilícitas.


Recientemente, el presidente Guillermo Lasso afirmó que estos grupos no tienen

drogas para traficar y por ello el fenómeno de la inseguridad ha migrado a otros delitos.

«Los grupos delincuenciales organizados, los internos, no tienen droga que

comerciar, entonces su capacidad delictiva la mutan hacia otros delitos como es la

extorsión, el chantaje, los intentos de secuestro, las «vacunas (extorsivas, un cobro que

exigen estos grupos a los comerciantes, a cambio de ofrecerles «seguridad» y también las

muertes violentas», aseveró el mandatario.

Como medida de contención de la situación, el Gobierno decretó varios estados de

excepción y la tenencia y porte de armas regulada, por parte de civiles, lo que causó alarma

entre los expertos ante un probable aumento de muertes violentas en el país.

Ecuador registró en 2022 una cifra récord de muertes violentas, con 4.539

homicidios, pero los expertos pronostican que el 2023 va camino a superar con creces esa

cifra.

A fines de marzo, el ministro del Interior, Juan Zapata, dijo al diario digital

Primicias que entre el 1 de enero y el 20 de marzo se contabilizaron 1.356 muertes

violentas en el país, cifra que representa un incremento de 66,4 por ciento con respecto a

igual período del año precedente, cuando se registraron 815 homicidios.

«Las causas de la ola de violencia que vive el Ecuador son varias. No hay una

respuesta simple para un tema tan complejo (como el) que estamos viviendo», aseveró a la

Agencia Sputnik la especialista en Seguridad e Inteligencia, Carolina Andrade.


En su opinión, si bien la problemática del narcotráfico es real, con una

sobreproducción de estupefacientes en territorio colombiano, existen otros factores internos

que condicionan la escalada de la inseguridad y la violencia.

Causas y efectos

Andrade, ex coordinadora general de Inteligencia durante el gobierno de Rafael

Correa (2007-2017), expuso que existen factores internos y externos que influyen en la ola

de inseguridad que azota al país y que no se circunscriben únicamente a las disputas por

territorios que protagonizan los grupos delincuenciales.

Entre los factores externos, la especialista señala la sobreproducción de drogas en la

vecina Colombia, a niveles históricos, con un crecimiento de 43 por ciento en 2022 con

respecto al año anterior, según el último informe de la Organización de las Naciones

Unidas.

Andrade dijo que Colombia está produciendo los mismos niveles que en el año

2000, cuando se comenzó a aplicar el Plan Colombia, y cuatro veces más que en la época

del narco Pablo Escobar.

«Eso ya nos da un indicador externo de que las acciones que se han llevado a nivel

regional de la política antidrogas ha sido un fracaso para erradicar los cultivos de uso

ilícito», explicó sobre la situación en el país vecino.


Andrade dijo que el proceso de paz entre el Gobierno colombiano con las Fuerzas

Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), firmado en 2016, privilegió el eje

represivo y militar y no el social, principalmente en las zonas fronterizas de los

departamentos de Nariño y Putumayo, limítrofes con Ecuador en las provincias de

Esmeraldas, Carchi y Sucumbíos, lo cual ha repercutido en la situación actual del país.

Entre los factores internos que inciden en el aumento de la criminalidad en Ecuador,

que afecta con énfasis la ya mencionada provincia de Esmeraldas y la de Guayas (suroeste),

están el desmantelamiento del ministerio de Justicia, que administraba la gestión y

administración de las cárceles y la rehabilitación social.

«Este ministerio se lo eliminó y se lo entregó nuevamente a la Policía (Nacional) y

vemos ahora cuáles son los resultados», dijo la especialista.

A ello se suma la eliminación del ministerio del Interior y el traspaso de sus

funciones al ministerio de Gobierno, que tuvo lugar en la administración anterior, y el

asesinato a finales de 2020 del líder de la banda delincuencial «Los Choneros», la principal

organización delictiva del país, lo cual desembocó en el enfrentamiento de las bandas

dentro y fuera de las prisiones.

Otros elementos a tomar en cuenta en este contexto es el tráfico ilícito de drogas

para el uso de consumo interno y, como añadido, la crisis económica y social que no ha

sido atendida incluso desde antes de la pandemia de covid-19.


Ello, en opinión de Andrade, ha traído consigo que las economías ilícitas ocupen

territorios, capten población y la involucre en estas redes, ya sea a través de la extorsión y

la amenaza, lo cual ha propiciado también el incremento de la migración irregular para

llegar a EEUU, en la cual se han involucrado a más de 200.000 ecuatorianos y cerca de

4.000 niños solos.

Falta de estrategia

Para Andrade es evidente que nunca existió la estrategia «reservada» en seguridad

que el presidente Lasso refirió tener para el país, porque no se ha visto cambio alguno en

cuanto a las prioridades en este ámbito ni en otros sectores del Estado; por el contrario, la

violencia es cada vez mayor.

De acuerdo al Gobierno, el plan para combatir el narcotráfico y sus estructuras

mafiosas costaría unos 5.000 millones de dólares, para lo cual busca la cooperación

internacional, en especial de EEUU y la Unión Europea.

Hasta diciembre de 2022, Estados Unidos había cooperado con 30 millones de

dólares en materia de seguridad, según informó el entonces secretario nacional de

Seguridad Pública y del Estado, Diego Ordoñez, quien renunció al cargo tras duras críticas

a su gestión y al gobierno por una presunta falta de estrategia para enfrentar el problema.

Según Ordóñez, Ecuador vive un fenómeno inédito de violencia criminal,

delincuencia organizada y el recrudecimiento del delito común, aunque similar al que


experimentan otras naciones latinoamericanas, pero que se agudiza porque en el país

existen eventos «orientados a crear zozobra y temor entre los ciudadanos».

Zapata, en tanto, anunció una inversión millonaria para dotar a los cuerpos armados

de los implementos para reforzar la lucha contra el accionar de los grupos delincuenciales,

con la compra a Israel de chalecos, municiones e incluso de vehículos blindados.

«No tenemos un antes ni un después a partir de esos anuncios y lo único que hemos

visto es un sostenido crecimiento de la violencia y el uso de artefactos explosivos, de

territorios cedidos al narcotráfico, de estructuras de gobernanza criminal que se siguen

fortaleciendo y que son las que definen las dinámicas sociales y económicas en territorio

donde no hay presencia del Estado», aseveró Andrade.

En su apreciación, no existe capacidad de liderazgo por parte del presidente Lasso

para llevar adelante una verdadera estrategia de Estado que haga frente al momento de

violencia y criminalidad que vive el país.

Expuso que ha sido evidente la falta de toma de decisiones por parte del Gobierno

en los dos últimos años con respecto a los recursos que debería destinar a la seguridad y

también al sector social.

«Solamente han sido anuncios, pero no hay intención de que eso se convierta en

políticas públicas, en programas y proyectos serios que inviertan en la gente», dijo.


El presidente Lasso, quien está a las puertas de un juicio político en su contra por el

presunto delito de peculado, aseguró el domingo que 1.100.000 ecuatorianos salieron de la

pobreza, se han creado 500.000 empleos y se han construido cuatro hospitales, 16 unidades

educativas y 15.000 soluciones de vivienda gratuitas en los últimos 19 meses.

Andrade opinó que se debería aplicar una estrategia que priorice la prevención a

partir de la implementación de políticas públicas de educación, salud, deporte y cultura, en

contraposición a una lógica demasiado enfocada en lo represivo.

«Esto es un elemento central que debería orientar la visión de las políticas de

seguridad que se planteen y que tienen como objetivo canalizar esfuerzos, sobre todo en el

ámbito de la prevención y protección ciudadana, en niños, jóvenes, en poblaciones

vulnerables y no como actualmente sucede, desde una visión represiva, de militarizar las

calles como única respuesta a la ola de violencia que se está viviendo», aseveró.

Por el momento, los vecinos han comenzado a hacer rondas en sus barriadas para

espantar a los maleantes, mientras otros han decidido tomar la justicia por la mano ante la

incapacidad del Estado de resolver la situación y la incertidumbre de llegar con vida al día

siguiente (confirmado.net, 2023).

Ecuador tocó fondo en 2023 y terminó como el país más violento de América

Latina

Quito, 30 dic (EFE).- Aunque la crisis de inseguridad se arrastra desde hace casi tres

años, Ecuador tocó fondo en 2023 y terminará con una tasa de muertes violentas superior a
los 40 por cada 100.000 habitantes, lo que le ubica como el país más violento de América

Latina.

Y es que en Ecuador casi cada hora muere una persona en un contexto de violencia

criminal, hasta un total de 7.497 muertes violentas en el año, sólo hasta el pasado 17 de

diciembre.

Por ello, es muy probable que Ecuador termine este año con una tasa de entre 40 y

42 muertes violentas por cada 100.000 habitantes, lo que ubicaría al otrora país de paz

como el más inseguro y violento de toda América Latina, según comentó a Efe la

especialista en temas de seguridad Carolina Andrade.

De hecho, en el sector de Nueva Prosperina, un barrio del sur de Guayaquil, la

capital de la provincia costera de Guayas, la tasa llega a 114 por cada 100.000 habitantes,

uno de los índices más altos del planeta.

El asesinato a manos de sicarios en agosto pasado del entonces candidato

presidencial Fernando Villavicencio -cuando salía de un mitin proselitista en Quito-, así

como el de Agustín Intriago, alcalde de Manta, en julio, son dos de los casos que más han

resonado y conmovido al país por los alcances políticos.

Pero también han generado angustia las continuas masacres en las cárceles, por

disputas crueles entre bandas de delincuentes que pugnan por el control de las prisiones o la

retahíla de tiroteos en zonas populares donde actúan mafias del "micro-tráfico" o el

asesinato "por error" de niños que dormían en su vivienda en un barrio pobre de Guayaquil.
Como colofón, sólo basta ver la parrilla de titulares del diario El Universo de este

30 de diciembre, cuando destacó la "noche de terror" que vivió la víspera la ciudad de

Esmeraldas, la capital de la provincia costera del mismo nombre y limítrofe con Colombia,

donde aparecieron "vehículos incinerados" y se escucharon varios tiroteos.

"Sicarios balearon vehículo afuera del centro comercial en Daule (ciudad vecina de

Guayaquil) o "Fiscalía (en Quito) protege sus instalaciones por alertas a posibles ataques",

informó el diario en otros titulares del día.

La escalada de violencia también obedece al contexto de crisis económica que

soportó el país con la Presidencia del conservador Guillermo Lasso, quien gobernó entre

agosto de 2021 y noviembre de 2023, casi la mitad de su periodo recortado por él mismo

para evitar su censura en el Parlamento por un caso de supuesta corrupción.

Durante su periodo se denunciaron presuntos vínculos mafiosos de altas autoridades

policiales y militares, en lo que se denominó "narco-generales" y cuyo apelativo surgió de

la propia Embajada de Estados Unidos en Quito.

Según Andrade, el narcotráfico es el principal detonante para la explosión de

inseguridad en el país, con sus tentáculos que no sólo sujetan a sectores poblacionales, sino

a instituciones como el sistema financiero y al propio Estado.

Se conoce que las mafias del narcotráfico usan sistemas de exportación formal en

Ecuador para enviar droga a Europa y Estados Unidos, los grandes consumidores.

Según expertos, el 70 por ciento del dinero que genera el narcotráfico se blanquea o

lava en el sistema financiero y sólo un 30 por ciento es diluido en la economía informal.


Un informe de Naciones Unidas reveló recientemente que entre el 30 y el 50 por

ciento de la droga que llegó a Grecia y Turquía en este año provino del puerto de

Guayaquil.

Por ello, para Andrade, la lucha contra el microtráfico -el menudeo que se expende

en las calles del país- no es el mayor desafío, sino el que se haga contra las grandes mafias

del narcotráfico que ha infiltrado en instituciones formales del país.

Por todo ello, Andrade, que dirige la Secretaría de Seguridad del Municipio de

Quito, vio como una "buena señal" el hecho de que el nuevo presidente del país, Daniel

Noboa, quien sustituyó a Lasso, haya hecho cambios importantes en las cúpulas de mando

de las Fuerzas Armadas y la Policía como medida para atajar la espiral de violencia.

La especialista consideró que, además, la crisis de inseguridad afecta, sobre todo, a

la población infantil y juvenil, que es el blanco de reclutamiento de las grandes mafias.

El 40 por ciento de población penitenciaria de Ecuador oscila entre los 18 y 29 años,

y el 37,2 por ciento de las mujeres que han sido encarceladas tiene entre 18 y 22 años de

edad.

La mayoría de la población carcelaria posee un nivel de instrucción escolar inferior

a la educación básica y el 59 por ciento de quienes han muerto en las recurrentes masacres

que se han producido en las prisiones son jóvenes.

La enorme deserción escolar en el país y la alta emigración son otros factores que

vuelven vulnerables a la población infantil en el entorno del auge de la criminalidad, agregó

Andrade.
Para la especialista, la lucha contra la inseguridad tiene que ser integral y decidida.

Por ello pidió al presidente Noboa que concrete la asignación de equipamiento y recursos a

la Policía para la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, una tarea vital que

dejó pendiente su antecesor. EFE (León, 2023).

- Bibliografías

Arcos, S. (2022). infaboe. Obtenido de infaboe:

https://www.infobae.com/america/america-latina/2023/01/17/ecuador-es-el-pais-

latinoamericano-donde-mas-crecieron-las-muertes-violentas/

Brik, D. (2022). Crisis de seguridad en Ecuador: cuando la realidad supera a la

gestión. Obtenido de Crisis de seguridad en Ecuador: cuando la realidad supera a la

gestión: https://www.swissinfo.ch/spa/ecuador-seguridad_crisis-de-seguridad-en-

ecuador--cuando-la-realidad-supera-a-la-gesti%C3%B3n/47634134

confirmado.net. (2023). Obtenido de confirmado.net:

https://confirmado.net/2023/04/17/ecuador-a-merced-de-la-delincuencia-y-el-crimen-

organizado/

Department, S. R. (2024). statista. Obtenido de statista:

https://es.statista.com/estadisticas/1402384/tasa-de-homicidios-ecuador/

Department, S. R. (2024). statista. Obtenido de statista:

https://es.statista.com/estadisticas/1402384/tasa-de-homicidios-ecuador/

Diario La Hora Ecuador. (2023). Obtenido de Diario La Hora Ecuador:

https://www.lahora.com.ec/esmeraldas/ecuador-con-record-de-inseguridad-en-el-2023/
Elcomercio.com. (2021). Elcomercio.com. Obtenido de Elcomercio.com:

https://www.elcomercio.com/actualidad/seguridad/asesinatos-duplican-ecuador-

violencia.html

GAIBOR, V. (2023). El País. Obtenido de El País:

https://elpais.com/internacional/2023-07-10/la-inseguridad-en-ecuador-escala-a-niveles-

historicos-y-se-impone-como-prioridad-del-proximo-gobierno.html

González, M. A. (2024). primicias . Obtenido de primicias :

https://www.primicias.ec/noticias/seguridad/inseguridad-guillermo-lasso-ecuador-

muertes/

Grassi, M. P. (2019). Asesoría Técnica Parlamentaria. Obtenido de Asesoría Técnica

Parlamentaria:

https://obtienearchivo.bcn.cl/obtienearchivo?id=repositorio/10221/28082/1/

BCN_Sistemas_de_salud_Ecuador_FINAL.pdf

León, F. A. (2023). swissinfo.ch. Obtenido de swissinfo.ch:

https://www.swissinfo.ch/spa/ecuador-violencia--tema-de-fin-de-a%C3%B1o-_ecuador-toc

%C3%B3-fondo-en-2023-y-termin%C3%B3-como-el-pa%C3%ADs-m%C3%A1s-violento-de-

am%C3%A9rica-latina/49094482#:~:text=%2D%20Aunque%20la%20crisis%20de

%20inseguridad,m%C3%A1s%20vi

PELCASTRE, J. (2023). Dialogo-Americas . Obtenido de Dialogo-Americas :

https://dialogo-americas.com/es/articles/ecuador-amenazado-por-extrema-inseguridad-y-

violencia/
Pontón, D. (2022). LATIN AMERICA ADVISOR. Obtenido de LATIN AMERICA

ADVISOR: https://www.thedialogue.org/analysis/que-esta-impulsando-el-aumento-de-

crimen-en-ecuador/

Turkewitz, J. (2023). Nytimes . Obtenido de Nytimes :

https://www.nytimes.com/es/2023/07/12/espanol/narcotrafico-violencia-ecuador.html

Voz De América . (2024). Obtenido de Voz De América :

https://www.vozdeamerica.com/a/como-llego-ecuador-a-la-actual-ola-de-violencia/

7435738.html

Voz De América. (2024). Obtenido de Voz De América:

https://www.vozdeamerica.com/a/como-llego-ecuador-a-la-actual-ola-de-violencia/

7435738.html

wikipedia. (2020). Obtenido de wikipedia:

https://es.wikipedia.org/wiki/Crisis_de_seguridad_de_Ecuador_(2020-presente)

También podría gustarte