Hijazo-Gascón, Cadierno e Ibarretxe-Antuñano (2018) - Selección Secciones 1 y 2 para Seminario ELSE
Hijazo-Gascón, Cadierno e Ibarretxe-Antuñano (2018) - Selección Secciones 1 y 2 para Seminario ELSE
Hijazo-Gascón, Cadierno e Ibarretxe-Antuñano (2018) - Selección Secciones 1 y 2 para Seminario ELSE
1. Introducción
El movimiento, es decir, la expresión de cómo nos movemos (bien nosotros mis-
mos, bien las entidades a nuestro alrededor), es uno de los dominios semánticos
básicos en la comunicación humana. La diferenciación de las categorías semánticas
que lo componen en distintas lenguas es fundamental en el estudio de la adqui-
sición de una primera o una segunda lengua. Desde la lingüística cognitiva se ha
intentado explicar esta expresión del movimiento a partir de la tipología semántica
propuesta por Talmy (1985, 1991, 2000), que clasifica las lenguas dependiendo de
la codificación de elementos semánticos del movimiento. Esta codificación influye
en el estilo retórico y la atención que prestan los hablantes a distintos aspectos de
la experiencia durante el acto de habla según la hipótesis del “pensar para hablar”
(thinking for speaking en inglés) de Slobin (1991, 1996, 2000, 2004). En este capítulo
se presentan en detalle estos dos modelos teóricos. Después se revisan algunos de
los estudios empíricos llevados a cabo desde estos dos enfoques en el campo de la
adquisición de segundas lenguas y del español como L2. En la última sección se
presentan posibles líneas de investigación futuras y de aplicaciones pedagógicas.
En (1a) la Figura que se mueve es Pedro y lo hace en relación a una Base que es
la casa. El verbo salir codifica en este caso el Movimiento en sí mismo y el Camino,
es decir, la dirección del movimiento (de fuera adentro). Finalmente, el gerundio
corriendo nos indica la Manera del movimiento, es decir, la forma (o patrón motriz)
en la que se pone el cuerpo para llevar a cabo el movimiento, así como la velocidad.
En (1b) la información opcional hace referencia a la Causa por la que se mueve la
Figura (el papel), es decir, por el viento.
Según dónde se codifique el componente semántico del Camino, dentro o
fuera del verbo principal del evento de movimiento, Talmy clasifica las lenguas
en dos grandes grupos o patrones de lexicalización: las lenguas de marco satélite
y las lenguas de marco verbal. Podemos ver esta diferencia en el ejemplo anterior
—repetido ahora como (3)— con su equivalente en inglés —ejemplo (2)— :
Así pues, las lenguas de marco satélite como el inglés en (2) tienden a codifi-
car el Camino fuera del verbo principal de la oración, en lo que Talmy denomina
“satélite” (son elementos que no pueden constituir por sí solos un sintagma, como
las partículas en inglés, por ejemplo, out “fuera”). Por otra parte, las lenguas de marco
verbal, como el español en (3), por lo general codifican el Camino dentro del verbo
principal y la Manera, si es que es necesaria para describir la situación discursiva, se
añade en una expresión distinta al verbo: un adverbio (rápidamente) o un gerundio
(flotando). Aquí es importante incidir en un punto teórico y metodológico muy
importante en la lingüística cognitiva: el lenguaje basado en el uso (véase el capítulo
1 de Ibarretxe-Antuñano y Cadierno en este volumen). Al mencionar estas tenden-
cias a la hora de codificar un evento de movimiento en cada uno de estos grupos,
siempre se está haciendo referencia al patrón de lexicalización más característico de
cada lengua. Es decir, al tipo de estructura que los hablantes nativos adquieren antes
y utilizan con más frecuencia en situaciones comunicativas normales. El hecho
324 Alberto Hijazo-Gascón et al.
Ahora bien, el uso de este tipo de verbos como verbos principales no es muy
frecuente, y en algunos casos es incluso imposible. Por ejemplo, un enunciado en
inglés como el que aparece en (5) solo se podría traducir por el equivalente español
en (6a) y no por el de (6b).
Ejemplos como (6), donde el hablante quiere describir a la vez la Manera (corriendo)
en la que se mueve la Figura (Juan), el Movimiento físico y el Camino desde fuera
hasta dentro del colegio, no plantean ningún problema en lenguas de marco satélite
como el inglés. Sin embargo, estas situaciones no se pueden describir de la misma
forma en las lenguas de marco verbal como el español, ya que no está permitido el
uso de un verbo de Manera como verbo principal en casos donde el movimiento
implica cruzar un límite (Aske 1989).A esta restricción se le conoce como la “restric-
ción del cruce de límites” (boundary-crossing constraint) (Slobin y Hoiting 1994).
(7) He [the deer] starts running and he tips him off over a cliff into the water. And he lands
“Él [el ciervo] empieza a correr y lo tira por encima de un acantilado hasta
dentro del agua.Y aterriza”
(8) El ciervo le llevó hasta un sitio donde había un río. Entonces el ciervo tiró al niño y al
perro al río.Y después cayeron
water “al interior del agua”. Esta descripción tan detallada de la trayectoria permite
al oyente inferir el escenario en el que se produce el movimiento, y que en este caso
incluye un acantilado sobre el agua. En el caso de (8) la descripción es más estática y
la trayectoria del movimiento se infiere. Es decir, la descripción estática donde había
un río y el verbo que se añade a continuación (cayeron) permite inferir al oyente que
la trayectoria se produce desde un lugar elevado hacia abajo, hasta el río.
Los patrones de lexicalización de Talmy y el pensar para hablar de Slobin se
han convertido en referencia obligada para los estudios sobre el espacio y el movi
miento. Sus ideas se han aplicado al estudio de más de un centenar de lenguas tanto
orales como de signos (véanse las que se recogen, por ejemplo, en Berman y Slobin
1994; Strömqvist y Verhoeven 2004; Ibarretxe-Antuñano 2009).
2.3. La gestualidad
Estas clasificaciones también han dado pie al estudio multimodal de la descripción
de los eventos de movimiento, que ha ayudado a comprender aún mejor en qué
se fijan los hablantes a la hora de describir el movimiento y, lo más importante, a
señalar que la gestualidad no solamente sirve para enfatizar o complementar lo
que se dice oralmente, sino tanto para comunicar información nueva como para
observar procesos cognitivos. En el caso de los eventos de movimiento, lo que se ha
demostrado es que los hablantes de ambos patrones de lexicalización utilizan la ges-
tualidad en sincronía con el habla, pero con una función diferente. McNeill (2000)
sugiere que los hablantes de lenguas de marco verbal como el español utilizan gestos
para codificar información que puede no aparecer en el texto oral como, por ejem-
plo, la Manera —lo que denomina este autor gestos de “huella de manera” (manner
fogs)—, mientras que para los hablantes de lenguas de marco satélite, los gestos que
expresan Manera de movimiento se emplean como elemento modulador: cuando
la Manera es comunicativamente importante se refuerza sincronizando el gesto con
el verbo de Manera. Si la Manera no es discursivamente importante, se minimiza
mediante la expresión de la Manera en el habla y la codificación de Camino en el
gesto. También se ha mostrado que la información que se gesticula, aunque sea la
misma, no se realiza de la misma forma. Por ejemplo, en una escena de los dibujos
animados de Piolín, como en la Figura 14.2, los hablantes de lenguas de marco
verbal gesticulan sobre la Manera y el Camino por separado.