El Maestro-De Esgrima
El Maestro-De Esgrima
El Maestro-De Esgrima
Arturo Pérez-Reverte
comenzó su carrera como escritor en 1986 con la publicación de “El húsar”, entre
hombres buenos.
“El maestro de esgrima” fue publicado en el año 1988, esta obra es de misterio y
importantes, uno de ellos es Luis de Ayala mejor conocido como el marques de los
Alumbres quien estuvo involucrado en la política durante cierto tiempo. Para aliviar
su soledad acude con regularidad a “el progreso” allí visita a sus amigos quienes a
monarquía.
bella y hábil en el arte de la esgrima, quien solicita tomar clases, pero al inicio
Jaime no acepta ya que en esa época no era común que las mujeres practicaran
ese deporte, él se enamora de Adela, sin embargo, ella oculta algo, ya que lo
utiliza para llegar al Marques de los alumbres sin que nadie sospeche nada,
cuando por fin lo conoce, ella deja de acudir con Jaime y no sabe nada de ella,
tiene un encuentro muy extraño con la joven, también una pesadilla de una
muñeca sin ojos. En una de sus clases, el marqués de los alumbres le entrega
unos documentos y le pide que no le mencione nada a nadie, poco después Luis
De Ayala es asesinado, por esa razón Jaime decide leer los documentos, pero ya
que no comprende nada de política, decide acudir a Agapito Cárceles, sin
femenino sin ojos y con el rostro desfigurado, él siente paz después de verla
muerta ya que siempre había sospechado que ella lo había utilizado para llegar al
buscarlo a su casa, pero nadie abre así que decide entrar por la terraza y se
desnudo y con heridas que parecen navajazos, se da cuenta de que no está solo y
tiene un combate con dos hombres, a uno le rompe la nariz y a otro le da dos
regañan por no haber dicho nada además le informan que Agapito intentó pedir
queda en casa esperando a que lleguen por él, Adela Otero se aparece y le
confiesa que lo utilizó para llegar al Marques y que ella lo asesinó porque se sentía
en deuda con el hombre que la salvó y asesinó a su sirvienta para fingir su muerte,
lo llama ingenuo, le confiesa que sabe que la ama e intenta seducirlo para matarlo
Adela intenta asesinarlo de nuevo pero él se las arregla para matarla, es así como
termina la historia.
ESTRUCTURA INTERNA
convicciones, aun cuando estas pueden costarle la vida, una vida destinada a
cumplir una misión que parece imposible. Es íntegro y fiel a sus principios y
El resto de cosas del mundo le traen sin cuidado. Se trata de un personaje que
desde la cita inicial -«Soy el hombre más cortés del mundo (…)», de Heine-,
Cervantes: «La nariz ligeramente aguileña bajo una frente despejada y noble (…)»
[p. 21], «El joven Quijote, lo había llamado uno de los periódicos que se ocupaban
del caso» [p. 76], «Usted es el hidalgo que no sale a los caminos porque los
molinos de viento los lleva dentro» [p. 128]. Temas para los profesores. CARIDAD
precedida por la de otro personaje, Luis de Ayala, del que hablaremos más
adelante. Gran parte de estas descripciones coincidirán con momentos en los que
esgrima, con lo que el lector comparte la propia imagen que el maestro tiene de sí
mismo y lo vemos con sus mismos ojos en numerosas ocasiones [pp. 24-25, 79,
aguileña, frente amplia, ojos grises, bigote cuidado -«a la vieja usanza», como su
ADELA DE OTERO
A pesar de sus terribles crímenes, ella también actúa movida por su propio código
cultura y dinero como si de su propia obra se tratara, sin esperar nada a cambio
[pp. 277-278]. Todo ello le sirve para justificar sus actos («Yo no he hecho sino
puesto en ello ni un ápice de maldad más que la estrictamente necesaria» [p. 304])
(«Yo no existo», le dice a Astarloa y este recuerda sus palabras cuando la cree
muerta [pp. 137, 236]). Lo primero que destaca en su descripción [p. 49] es su
mirada, unos ojos de color violeta con destellos dorados que hechizan al maestro
con solo mirarlos y que ella se encarga de potenciar con su vestuario y adornos.
de la obra: hermosa, helada, enigmática, de odio, cruel, asustada… [pp. 49-50, 56,
muestra contraída en los momentos del duelo [pp. 88, 302]. Adela se acerca al
identificándose con Eneas- «una Troya ardiendo a sus espaldas» [p. 136]. El
efecto sorpresa que se consigue con su reaparición reafirmará la identificación de
este personaje con un espejismo [p. 276]. Pero incluso entonces, cuando ya ha
confesado sus crímenes, en dos ocasiones parece querer salvar la vida a Astarloa
[pp. 294, 298]), si bien pronto comprendemos que sus verdaderas intenciones son
otras, intenciones que serán frustradas por su maestro de esgrima.
LUIS DE AYALA.
Aristócrata, ocioso, hedonista, pragmático, aficionado al juego, a los puros
habanos y a las aventuras amorosas, confiesa no haber leído un libro Temas para
algunas expresiones literarias: «Creo que Cervantes escribió algo sobre eso…
hermosos a mano» [pp. 22-23]. Aun así, su forma de expresión es muy coloquial,
extranjero», «Maldita sea mi estampa, don Jaime», «Por las llagas de Sor
cualquiera. Hasta las cachas.» [p. 19], «Por los cuernos de Lucifer… me ha dejado
usted hecho un nazareno» [p. 21]. Ello revela una caracterización peculiar de la
conciencia dormida» [p. 130]. Termina siendo víctima de sus propias pasiones: su
Esta obra de desarrolla en Madrid (calle Riaño, el progreso, paseo del prado, plaza
mayor)
Isabel II.