Gobierno de La Antigua Grecia
Gobierno de La Antigua Grecia
Gobierno de La Antigua Grecia
antigua Grecia
Los sistemas de gobierno de la antigua Grecia, variaban según los griegos buscaban
respuestas a preguntas tan fundamentales como, ¿quién debería gobernar y cómo?
¿Debería la soberanía (kyrion) estar en el gobierno de la ley (nomoi), la constitución
(politea), los oficiales, o los ciudadanos? Dado que no se decantó por una respuesta
definitiva a estas preguntas, el gobierno de la antigua Grecia, por tanto, tuvo formas
extraordinariamente diversas y, a lo largo de muchos siglos y de unas ciudades-estado a
otras , el poder político podía encontrarse en las manos de un solo individuo, una élite o
en todo ciudadano varón: la democracia, ampliamente considerada como la mayor
contribución de los griegos a la civilización.
Democracia
La constitución de Atenas se conoce como una democracia porque respeta los intereses
no de la minoría sino de todo el pueblo. Cuando se trata de resolver disputas privadas,
todo el mundo es igual ante la ley; cuando se trata de preferir a una persona en vez de
otra para los cargos de responsabilidad pública, lo importante no es la pertenencia a una
clase particular, sino la capacidad real que tenga el hombre en cuestión. (Pericles, 431
AEC)
Los temas que se trataban en la asamblea iban desde decidir las magistraturas hasta
organizar y mantener los suministros de alimentos o debatir asuntos militares. En
Atenas también había un organismo más pequeño, al igual que en Élide, Tegea y Tasos,
el boulē, que decidía y determinaba la prioridad de los temas que se discutían en la
asamblea. Además, en tiempos de crisis y guerras, este organismo también podía tomar
decisiones sin que se reuniera la asamblea. El boulē o consejo de 500 ciudadanos era
elegido por sorteo y tenía un plazo limitado en el cargo, que actuaba como una especie
de comité ejecutivo de la asamblea. Los decretos de la Asamblea también podían ser
impugnados por los tribunales. Con una función similar a la del boulē, también estaba el
consejo de ancianos, hombres selectos de más de 60 años, la gerousia, de Esparta, que
también tenía a los dos reyes espartanos como miembros y tenía cierto poder legal.
Otros organismos de ancianos también existían en Corinto y Estínfalo. En Atenas, el
Areópago era un consejo parecido, en el que los ancianos se convertían en miembros
vitalicios.
Luego, en otros estados griegos también había asambleas democráticas, aunque a veces
tenían una estipulación de un mínimo de propiedad para los asistentes (como en la
Federación Beocia de 447-386 AEC). Algunas ciudades-estado también mezclaban las
asambleas democráticas con una monarquía, como por ejemplo Macedonia y Molosia.
LOS REYES DE ESPARTA ESTABAN
CONTROLADOS POR LOS ÉFOROS
(EPHOROI) QUE A SU VEZ ERAN ELEGIDOS
POR LA ASAMBLEA.
Monarquía
En el mundo griego las monarquías eran raras y a menudo solo se distinguían de una
tiranía cuando el gobernante hereditario era más benevolente y gobernaba realmente por
el interés del pueblo. Las monarquías más famosas fueron las de los estados de
Macedonia y Épiro, donde el gobernante compartía el poder con una asamblea, aunque
en la práctica esta estaba bastante limitada. A pesar de que Esparta también tenía una
asamblea ciudadana, lo más conocido es su sistema de dos reyes. Aunque no eran
monarcas absolutos, sí que tenían un gran poder cuando lideraban al ejército espartano
en tiempos de guerra. En tiempos de paz los reyes estaban controlados por los éforos
(ephoroi), que a su vez eran elegidos por la asamblea. Es evidente que era necesario
cierto grado de consenso político para que este aparato superpuesto funcionara. Los
reyes también eran miembros de la gerousia en la que se los admitía desde una edad
temprana, así que debían de tener una importante ventaja sobre los demás miembros,
que no podían unirse hasta que no cumplieran 60 años. Sin embargo, los reyes
espartanos podían ser juzgados e incluso exiliados.
Tiranía
Los tiranos eran los únicos gobernantes de un estado que se habían hecho con el poder
de manera anticonstitucional, a menudo asesinando a su predecesor. Sin embargo, los
tiranos griegos no eran necesariamente gobernantes malvados (como se entiende hoy en
día la palabra); simplemente cuidaban de sus intereses propios. Siracusa, en Sicilia, tuvo
una lista de tiranos famosos; por ejemplo, Dionisio desde 450 AEC y su hijo Dionisio
II, que accedió al poder en 367 AEC. Otros tiranos conocidos son Pisístrato en Atenas,
desde alrededor de 560 AEC (un típico tirano benevolente que de hecho allanó el
camino para la democracia), Fidón en Argos (c. 660 AEC), Licofrón en Tesalia, la
dinastía de Cípselo, que contaba con Periandro, en Corinto (c. 657-585 AEC)
y Polícrates en Samos ( 530-522 AEC). Para los atenienses, la tiranía se convirtió en lo
opuesto a la democracia, una posición que permitía a los ciudadanos de Atenas sentir
cierta superioridad. Este sentimiento se hace especialmente evidente en la demonización
de los reyes persas Darío y Jerjes, los tiranos por excelencia.
Periandro
J
Oligarquía
Una oligarquía es un sistema en el que el poder político está controlado por un grupo
selecto de individuos, a veces en pequeño número, pero que también puede incluir
grandes grupos. Para los griegos, y más particularmente para los atenienses, cualquier
sistema que excluyera del poder a todo el conjunto de ciudadanos y no fuera una tiranía
o una monarquía se describía como una oligarquía. Las oligarquías puede que fueran el
sistema de gobierno más común en las ciudades-estado, y a menudo ocurrían cuando la
democracia no funcionaba bien. Por desgracia, la información relativa a las oligarquías
del mundo griego es escasa. Se sabe que en 411 AEC en Atenas, "la oligarquía de los
400" le quitó el poder a la Asamblea y después esta también fue reemplazada por una
oligarquía más moderada de 5000. En 404 AEC, tras la derrota del ejército ateniense en
Sicilia, hubo una oligarquía de "los treinta tiranos" en Atenas, que fue un régimen
especialmente brutal, conocido por sus ejecuciones sumarias. Otros estados que también
tuvieron un sistema oligárquico son Mégara y Tebas.
Funcionarios públicos
En Atenas la ley la creaban y la aplicaban los magistrados (archai). Todos los
ciudadanos podían ser elegidos para este puesto, y de hecho puede que hubiera ciertas
expectativas de que el ciudadano honorable cumpliera con su papel de manera activa en
la vida cívica. Los griegos no veían al estado como una entidad que interfería y que
quería limitar las libertades del individuo, sino que lo entendían como un aparato a
través del cual el individuo podía expresar su pertenencia a la comunidad plenamente.
La rotación regular de los archai, gracias a un periodo de mandato limitado y a la
prohibición de reelección, significaba que se podían controlar los abusos de poder y que
los gobernantes, a su vez, se convertirían en gobernados. También existían varias juntas
de funcionarios que tomaban las decisiones administrativas; los miembros de estas
juntas a menudo provenían de las diez tribus tradicionales. La mayoría de puestos
cívicos eran de corto plazo y se elegían por sorteo, para asegurarse de que el soborno
fuera mínimo. También es importante que los puestos de poder a menudo requerían no
solo de tiempo libre sino también de la disposición económica para financiar proyectos
municipales tales como la construcción naval y los festivales. Por este motivo,
probablemente se daba el caso de que los puestos públicos en realidad estaban
dominados por los ciudadanos más ricos.
En Esparta, los funcionarios estatales más importantes eran los cinco éforos.
Probablemente era la asamblea de Esparta la que los elegía y mantenían el cargo un año
solamente. Sin embargo, durante ese tiempo tenían poder en la mayoría de las áreas de
la vida cívica y podían nombrar y controlar a todos los demás funcionarios públicos.
Preguntas y respuestas
¿Qué tipo de gobiernos tenían las ciudades-estado griegas?
Las ciudades-estado griegas tenían diferentes tipos de gobierno. Algunas tenían
una democracia directa en la que todos los ciudadanos podían participar (por
ejemplo, Atenas), otras tenían una monarquía (Esparta), otras tenían una
oligarquía en la que un pequeño grupo poderoso dirigía el gobierno (Tebas), y
otras tenían un único líder o tirano (Siracusa).