Trabajo CONTRATO DE SEGUROS 240511 211055
Trabajo CONTRATO DE SEGUROS 240511 211055
Trabajo CONTRATO DE SEGUROS 240511 211055
Dentro de este trabajo iniciaremos con una parte introductoria del contrato de
seguros para continuar con un análisis jurisprudencial de la prescripción del
contrato de seguros.
La jurisprudencia en sentencia T-251/17 define el contrato de seguros:
“El contrato de seguro surge con la finalidad principal de proteger los intereses particulares
contra pérdidas provenientes de improviso Si bien no existe definición legal de esta figura,
esta Corte retomando a su vez lo expuesto por la Sala de Casación Civil de la Corte Suprema
de Justicia entiende el contrato de seguro como aquel “en virtud del cual una persona -el
asegurador- se obliga a cambio de una prestación pecuniaria cierta que se denomina
“prima”, dentro de los límites pactados y ante la ocurrencia de un acontecimiento incierto
cuyo riesgo ha sido objeto de cobertura, a indemnizar al “asegurado” los daños sufridos o,
dado el caso, a satisfacer un capital o una renta”
El artículo 1036 del Código de Comercio describe las principales características del contrato de seguro como
consensual, bilateral, oneroso, aleatorio y de ejecución sucesiva. Las mismas han sido explicadas por esta
Corporación de la siguiente forma:
“Es consensual, en la medida en que se perfecciona y nace con el sólo consentimiento, desde el
momento en que se realiza el acuerdo de voluntades entre el asegurador y el tomador sobre los
elementos esenciales del contrato de seguros. Es bilateral, por cuanto las partes se obligan
recíprocamente. Genera obligaciones para las dos partes contratantes: para el tomador, la de pagar
la prima, y para el asegurador, la de asumir el riesgo y, por ende, la de pagar la indemnización si
llega a producirse el evento que la condiciona. Es oneroso porque es un contrato que reporta
beneficio o utilidad para ambas partes. El gravamen a cargo del tomador es el del pago de la prima y
el del asegurador es el pago de la prestación asegurada en caso de siniestro. Es aleatorio por cuanto
en el contrato de seguros tanto el asegurado como el asegurador están sujetos a una contingencia
que es la posible ocurrencia del siniestro. Es de ejecución sucesiva, puesto que las obligaciones a
cargo de los contratantes se van desenvolviendo continuamente hasta su terminación”
En cuanto al consentimiento, La doctrina a establecido dos etapas para que este se
perfeccione y si bien el contrato de seguros se presenta cuando se dan los anteriores
presupuestos y características existe una etapa precontractual en la cual se forma este
consentimiento con la oferta, etapa en la cual el asegurador oferta una cobertura,
define una prima y un alcance del seguro, esta oferta puede ser rechazada, aceptada o
revocada. Pero en realidad el consentimiento que generara el efecto de aceptación del
contrato de seguro se da desde que se genera la oferta y esta es aceptada.
Otro punto importante y relevante para la validez del contrato de seguros es el principio
de la buena fe para lo cual cito la Sentencia T-251/17
“Por vía jurisprudencial[92] se ha afirmado que este es un contrato especial de buena fe, en el que
las partes se sujetan al contrato con lealtad y honestidad. En este sentido, en la sentencia T-086 de
2012, la Corte sostuvo que: “ambas partes en las afirmaciones relacionadas con el riesgo y las
condiciones del contrato se sujetan a cierta lealtad y honestidad desde su celebración hasta la
ejecución del mismo. De conformidad con lo dispuesto en el artículo 1058 del Código de
Comercio, el tomador o asegurado debe declarar con sinceridad los hechos y circunstancias que
determinan el estado del riesgo, puesto que ello constituye la base de la contratación. En caso de
presentarse reticencias e inexactitudes en la declaración que conocidas por el asegurador lo
hubieran retraído de contratar, se produce la nulidad relativa del seguro. El asegurador también
debe cumplir con el principio de buena fe evitando cláusulas que sean lesivas al asegurado,
cumpliendo con la prestación asegurada a la ocurrencia del siniestro y comprometiéndose a
declarar la inexactitud al momento en que la conozca y no esperar a la ocurrencia del siniestro
para alegarla como una excepción al pago de la indemnización.”
Expediente: T - 3.921.594
Actor: Mery Montoya de González
Accionada: Liberty Seguros S.A.
Referencia: Revisión de los fallos de la acción de tutela
Primera instancia: Juzgado sexto penal para adolescentes con función de
control de Garantías de Cali (Valle)
Segunda instancia: Juzgado tercero penal para adolescentes con funciones
de Conocimiento de Cali (valle)
HECHOS RELEVANTES
TESIS
La protección de los derechos fundamentales es procedente por vía la acción
de tutela en caso de acción u omisión de las entidades del sistema financiero
como para el caso una compañía aseguradora con base en que son
prestadoras de un servicio público, además de que los usuarios se
encuentran en estado de indefensión respecto de ellas, entrando a analizar el
requisito de subsidiaridad no es posible dejar de lado a las personas que
requieren una especial protección constitucional, y en algunos casos tendrá
que ser más especializado el estudio que se realice.
Con base en que la acción de tutela busca la protección de los derechos
fundamentales de las personas y como para el caso en el estudio de
personas en condición de invalidez, el juez del caso no solo debe realizar el
estudio de los mecanismos de defensa con los cuales estaría dotado por la
ley si no que también deberá analizar si estos son idóneos para la protección
de dichos derechos y si son los idóneos para efectuar esa protección para el
caso se concluye que aunque se trata de una tema contractual tiene la
capacidad de afectar a la persona especialmente en sus derechos
fundamentales y la tutela tendrá plena validez.
Para el caso en estudio se entra a analizar el término de prescripción para los
contratos de seguros como es la ordinaria de dos años (2) y la extraordinaria
de cinco años (5).
La prescripción ordinaria comienza a contar desde que la persona
razonablemente pudo conocer el hecho que da origen a la acción (el
siniestro) y la extraordinaria corre desde que ocurre el siniestro.
Para el caso de las personas en condición de invalidez que no cuentan con
capacidad económica y que además es necesario el dictamen de valoración
de la junta médica regional y así poder reclamar la cobertura de la póliza de
seguro pero desproporcionado es sensato, el legislador al momento de
establecer estas cargas lo realiza para casos donde las partes están en
condiciones esperadas cuando ocurra el siniestro, pero no estas no pueden
ser excesivas, y esto lo llega equilibrar el juez de tutela que en su análisis
deberá revisar el estado de las personas principalmente el actor y según lo
que se le pone de presente además de las pruebas que pueda pedir, y así
llegar al caso de suceda deberá tomar la decisión de revisar las cargas
procesales y dar una aplicación especial.
El artículo 1081 del comercio tiene una reglamentación objetiva y cumple con
los objetivos propios de establecer parámetros claros en los contratos de
seguros y así dar seguridad jurídica, pero en el caso de que se presente una
amenaza a los derechos fundamentales
El artículo 1081 del Código de Comercio es razonable pues sus objetivos
cumplen con fines constitucionalmente legítimos como la seguridad jurídica,
No obstante, puede existir una amenaza a derechos fundamentales en el
marco del contrato de seguro, en algunos casos como cuando los
asegurados se encuentran en condición de invalidez, no tengan la capacidad
económica para cubrir la obligación, el interés no sea exclusivamente
patrimonial, y sea necesaria la certificación de un médico experto donde se
establezca el porcentaje y la fecha de la pérdida de capacidad laboral; para
estos casos es aplicable la prescripción extraordinaria debido a las
consecuencias negativas para los sujetos de especial protección que por
razones ajenas a su voluntad se encuentran en imposibilidad de realizar la
reclamación y ejercer sus derechos.
Para hacer efectiva la póliza en los contratos de seguros solicitando la
cobertura de capacidad laboral se debe demostrar:
La pérdida de la capacidad laboral, que es superior al 50 %, fecha desde la
cual se da su estructuración o siniestro, y será esta fecha desde la cual se
empieza a contar los términos de prescripción, deberán estar certificados por
la Junta Regional de Calificación de Invalidez.
En el caso de aplicar la prescripción extraordinaria las personas en condición
de invalidez tendrían la carga de presentar la reclamación dentro de los cinco
años de ocurrido el siniestro y así lograr que se interrumpa el termino de
prescripción, aunque no conozcan con certeza desde cuándo empieza a
contar ni el grado de incapacidad que poseen y el porcentaje de la calificación
que les darán.
DECISION
CONCLUSIONES FINALES
Presentado a:
Dra. María del Pilar Galvis
Presentado por:
Laura Lamprea
Carlos Carrera
Andrés Ayala
Alexander Pira Flórez
Materia: Seguros