Estrategias de Evaluación Psicopedagógica
Estrategias de Evaluación Psicopedagógica
Estrategias de Evaluación Psicopedagógica
La evaluación psicopedagógica es una de las tareas más trascendentes que llevan a cabo
referentes, para pasar en el segundo apartado a describir sus diversas fases, así como los
Finalidades y referentes
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escolar, entorno familiar-, con la finalidad de fundamentar decisiones acerca de la
respuesta educativa más adecuada a las necesidades de dicho alumno (MEC, 1996; Solé,
traduzcan en medidas factibles que los docentes puedan implementar para fomentar el
extensión, de sus compañeros de aula (Coma y Álvarez, 2005). Porque, como indica
puede y debe ser utilizada para mejorar las prácticas educativas generales”, aunque en
Estos objetivos se sustentan en una visión particular del desarrollo humano y de los
escolar (Coll, 2001) y las teorías sistémicas (Selvini et al, 1985; Watzlawick, Beavin y
Martín, 2010, en esta misma colección) del cual la caracterización del proceso de
en los mismos. Dicho esto, no todos los entornos tienen el mismo potencial educativo
para todas las personas, porque éste depende de la naturaleza de las actividades que se
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la evaluación psicopedagógica es imprescindible para determinados alumnos, cuando
los recursos que habitualmente se utilizan –para enseñar, para ayudar a progresar-, se
una visión más ajustada de las potencialidades y dificultades del alumno, así como
importante es explorar aquellos elementos del contexto que pueden estar limitando el
disponibles para modificar la situación (Giné, 2005; véase también capítulo 1 del
aula serán distintas de las que tienen lugar en la familia, o en otros sistemas en los que
entorno en el que surge, se detecta o se manifiesta una dificultad, para ayudar a generar
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o construir una respuesta educativa adaptada, tendente a favorecer, por una parte, el
progreso del alumno, y por la otra, la autonomía y competencias de los docentes. Para
condiciones en las que se produce una demanda y, en función de este análisis, elaborar
objetivos e hipótesis –contando con la complicidad del tutor u otro profesional que haya
aisladas, sino que está compuesta por un inicio y una continuidad de acciones que el
enseñanza y aprendizaje en las que docente y alumno están implicados con el fin de
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dirigido a optimizar una situación considerada disfuncional a través del análisis
conjunto, con el objetivo de construir una visión compartida, más matizada, más
emerjan o se puedan sugerir actuaciones y tareas que persiguen mejorar la situación del
Para terminar con esta caracterización, es necesario tener en cuenta que la evaluación
más tienda ésta a la inclusión y a la colaboración entre sus miembros, más fácil será
estudiantes que las necesitan. Baste señalar, al respecto, la diferencia que supone para
atención a la diversidad….
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Además de poder estar implicados estos distintos participantes, en función de la
2005).
seguimiento
Fases e instrumentos
fases claramente establecidas e inmodificables. Al contrario, tanto las fases como los
Tabla 1. Posibles fases, acciones e instrumentos que pueden formar parte de un proceso
de evaluación psicopedagógica
Fases evaluación psicopedagógica
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-Hojas de -Observación -Entrevista- -Entrevista
derivación reunión
-Análisis trabajos de -Observación
-Entrevista clase -Informe escrito
-Análisis de
Instrumentos
-Informes o -Entrevista -Entrevistas trabajos de clase
y/o acciones documentos del /acuerdos otros
centro -Exploración mediante profesionales -Exploración
pruebas mediante pruebas
orientador, de una demanda que debe analizarse en términos de quién la realiza, para
quién, el contexto al cual atañe y el problema al que se refiere, para decidir si se aborda
complejidad de las relaciones humanas y las interacciones emocionales” (p. 47). En este
momento inicial el orientador puede hacer uso de dos instrumentos específicos para
del alumno, como sobre todo de sus competencias y habilidades en distintas áreas
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acciones emprendidas para resolver la situación. Las hojas de derivación o guías
petición puede desencadenar una representación algo distinta del alumno por parte del
hagan tangibles depende de cómo se utilicen estos instrumentos. Por ello, algunos
derivación).
han tenido experiencias anteriores de trabajo conjunto. Cuando las condiciones son
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La evaluación inicial también debe tomar en consideración otras fuentes de información
dossieres…) que con frecuencia aportan interesantes datos que no siempre son tenidos
en cuenta.
en el desarrollo
que falla, sino también a sus capacidades en todas las vertientes -cognitiva, afectiva,
relacional-. Interesa conocer la vivencia que el alumno tiene del problema, la percepción
de sus capacidades, las estrategias que utiliza, qué hace cuando necesita ayuda, etc., con
globalidad implica, en algunos casos, nuevos retos para el orientador, sobre todo cuando
país del que procede el estudiante; aceptación de la diferencia (Hays, 2008, véase el
ajustada las características del alumno y los recursos que pueden favorecer su
formas distintas en función del entorno en el que participamos. Por ello, debemos
indagar cuándo y cómo tienen lugar los fenómenos que preocupan al docente,
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atendiendo a cómo se producen y buscando comprender qué variables intervienen para
profesionales.
2.1. Observación
distintos momentos del proceso –inicio y/o seguimiento-, y con formatos distintos –
aporta este instrumento cuando se atiende al aula y formular algunas sugerencias para
contraste de la información obtenida con el docente para contar con su punto de vista-,
el aula; relativizar, ya que permite comparar la actuación del alumno con la de sus
dispone de un referente real de lo que se hace en el aula y de cómo se hace, para poder
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El uso de la observación compromete tanto al orientador como al docente, ya que su
negociación, planificación, realización y análisis deben ser compartidos por ambos, pero
comprendan la finalidad que se persigue con ella, evitando que la interpreten como una
estudiantes). Especialmente -pero no sólo- en ESO hay que calibrar si el esfuerzo que
supone llevar a cabo la observación en el aula se compensa por los beneficios que
compartida y diseño de cambios. Remitimos al análisis que realizan los autores para
profundizar en torno a la observación de aula, así como a pautas o guías para facilitar la
identificar, entre otros aspectos, qué actividades propone en clase, cómo las valora y
cómo analiza e interpreta las dificultades que ponen de manifiesto las tareas del alumno
frente a las características de los trabajos resueltos por otros compañeros. Este análisis
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permite obtener, asimismo, información acerca del alumno: existencia de errores
interesante posibilidad es analizar los trabajos conjuntamente con el alumno, para así
indagar cómo valora sus tareas, cómo explica sus dificultades y qué aspectos considera
familiar y social en general (Solé, 1998). Hay que tener en cuenta que el alumno es el
con los alumnos algo mayores, involucrarles en las medidas que vayan a tomarse,
alumno se extiende también al seguimiento que se lleve a cabo y que supondrá nuevos
de la edad del alumno –por ejemplo, dibujos, juegos con un niño pequeño. En su
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quién somos, qué hacemos y por qué nos reunimos con él, así como garantizar toda la
conducido a que los tests psicológicos hayan ido dejando paso a pruebas de evaluación
a las que se llevan a cabo en el aula; por lo general se centran en las capacidades
tarea, qué estrategias utiliza –si organiza, planifica, revisa, detecta errores; si pide y/o
acepta ayuda-, y cómo la resuelve. Si bien algunas de estas pruebas han sido publicadas
generalizado. Hay que tener en cuenta, como señala Fernández (1997), que las pruebas
consideración las características específicas del centro educativo-, y por tanto se deben
propuestas educativas en las que participa el alumno que está siendo evaluado, permitirá
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Por lo que se refiere a los tests psicológicos –especialmente los de nivel intelectual-
continúan utilizándose en ciertos casos en los que existen dudas acerca de las
posibilidades de este capítulo una revisión de estos instrumentos que, bien utilizados
información –en aquellos casos en los que el alumno pueda estar atendido por alguno de
ellos- ya sea para proponer una derivación. En este último caso, es necesario señalar que
la derivación externa no supone el desentendimiento por parte del orientador sino que,
se llevan a cabo en relación a dicho alumno y a sus familias. Esta tarea se facilita
cuando se constituyen estructuras estables –como las comisiones sociales que existen en
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determinadas zonas y distritos- para facilitar el intercambio y colaboración entre
profesionales que no siempre la valoran del mismo modo ni comparten los mismos
referentes teóricos, lo que explica las frecuentes dificultades para un entendimiento que
sin embargo no puede ser obviado (ver Bassedas, en este mismo volumen; Bassedas,
2007).
alumno en el entorno educativo, datos que son compartidos con el docente, a quien se
permite que incluso desde los primeros momentos puedan incorporarse determinadas
adecuada del alumno y de sus posibilidades, así como de la capacidad de actuar del
centro y de los profesores, de forma que se consiga que ciertas respuestas educativas
habituales, y que las menos pertinentes, se sustituyan por otras que se ajusten mejor a
las necesidades de dicho alumno. Igualmente, las propuestas que se formulen durante el
proceso pueden servir como referente para valorar el grado en que se incorporan y
funcionan y, en caso de que no generen los cambios esperados, poder ser revisadas. Esta
potencialidades con el tutor y otros profesionales que intervengan con relación al caso.
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Igualmente, en este momento se consensua el plan de actuación a seguir, que incluirá las
escrito MEC, 1996). Cuando esto ocurre, lo adecuado es hacerlos concisos y sin
parte del alumno de lo que sucede, de lo que se espera de él, de las medidas que se
adoptarán para mejorar su situación y dejar espacio para que pueda expresar su opinión.
distintos, sino también en el grado en que las diferencias se conciben como algo natural,
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4. Seguimiento
apoyo, orientador…) a la vez que supone la consecución de dos retos simultáneos. Por
una parte permite al orientador “evaluar la evaluación”, en cuanto obtiene datos del
docente sobre la eficacia de las propuestas consensuadas; por otra, permite continuar el
proceso de evaluación psicopedagógica, puesto que los nuevos datos obtenidos deben
incorporarse para emitir nuevos juicios e hipótesis. Por ello, durante la fase de
que le suscite cada situación. Así, puede mantener nuevas entrevistas con el docente, o
acerca del alumno y las respuestas educativas que se le ofrecen. Esta fase puede
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técnica a los órganos de la administración educativa para la adopción de decisiones que
los capítulos de Babío, 2010, en este volumen, y el de Galán y Echeita, 2010, en esta
misma colección).
anterioridad, porque supone aportar una valoración técnica con valor vinculante
dirigida a adoptar decisiones de distinto calibre (de escolarización en uno u otro centro;
respuesta educativa adecuada y potenciadora de las capacidades del alumno incluye una
informes como en el dictamen, la administración pide una “opinión técnica” sobre las
derecho a ocupar una plaza para alumnos con necesidades educativas especiales; para
currículum prescrito; o para que su familia pueda percibir alguna subvención o subsidio.
En el caso concreto de los dictámenes, que suelen tener una forma estandarizada, el
marco legal (Capítulo II de la Orden del 14 de febrero de 1996) establece que está
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personales o materiales complementarios; cuando se plantee la admisión del alumno en
que puedan ser incorporados-, así como a los recursos necesarios para ofrecer una
y de los aspectos que deberían ser incorporados para garantizar una enseñanza adaptada
dictámenes o informes son idénticos a los que se han comentado en el apartado anterior,
tan solo que, en este supuesto, la información por recopilar acostumbra a estar
determinados instrumentos. Así, por ejemplo, uno de los criterios para establecer que
sitúe dos desviaciones típicas por debajo de la media (American Association on Mental
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Retardation, 2002 en Giné y Font, 2007). Además, con elevada probabilidad, la
dictamen también y sobre todo debería revertir en la mejora de las prácticas educativas
que se concretará en una adaptación curricular más o menos significativa. Como indica
108). Estos documentos pueden convertirse, por tanto, en la base para negociar la
representación del alumno y sus potencialidades con el centro que finalmente lo acoja.
Asimismo, pueden ser el referente inicial que vaya revisándose y adecuándose a medida
desarrollo de los estudiantes, así como la consolidación de los centros educativos como
también desde el punto de vista ético. Es ética cuando el orientador que la lleva a cabo
modo más competente; y es ética cuando se basa en el respeto hacia sus protagonistas,
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que hacen depositario al orientador de informaciones que deben ser administradas con
Actividades.
1. En grupo, pensad en las características que debería tener una “hoja de derivación” útil
para favorecer la reflexión del tutor que solicita la intervención del orientador en
relación a un alumno determinado, así como para que el orientador pueda hacerse una
derivación”, una para alumnos de educación infantil y primaria, y otra para alumnos de
global.
recreo o en momentos de “ocio”. ¿Cuáles serían las dimensiones que a vuestro juicio
deberían tomarse en consideración para llevar a cabo una observación en este contexto?.
visión contextual del desarrollo de las personas. ¿Cuáles serían las diferencias más
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fundado en una visión del desarrollo como proceso individual y que atribuye las
diferencias entre las personas a aspectos estrictamente individuales e internos? ¿En qué
Referencias bibliográficas
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http://www.juntadeandalucia.es/averroes/html/adjuntos/2008/05/19/0006/index.html
Documento de la Junta de Andalucía en el que se define la sobredotación intelectual, se
aportan instrumentos para evaluarla y se incluyen algunas ideas para fomentar el
aprendizaje de estos alumnos en el contexto del aula.
COBOS, L., GARCÍA, J.M. & SÁNCHEZ, V. EMULEX: evaluación multilingüe del
alumnado extranjero. Consultado (07/04/2010) en:
http://www.juntadeandalucia.es/averroes/html/adjuntos/2008/04/30/0001/index.html
Recurso presente en la Web de la Junta de Andalucía que permite realizar una
evaluación del nivel de conocimiento lingüístico-matemático de alumnos de primaria y
secundaria procedentes de distintos países, en español y en su lengua materna. También
incluye una plantilla para realizar el informe final.
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JULIÀ M. (2002). Eines psicopedagògiques. Equip d’Orientació i assessorament
Psicopedagògic de Terrassa. Consultado (07/04/2001) en:
http://www.xtec.net/~mjulia/alumnat/avalua/avalua.htm
Interesante página en catalán en la que pueden consultarse y bajarse pruebas
psicopedagógicas y materiales diversos.
i
La demanda también puede proceder de la Inspección educativa u otras instancias de la Administración.
En estas situaciones la evaluación psicopedagógica adopta matices específicos que se comentan con más
detalle en el último apartado de este capítulo.
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