Dialogo

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Excmo. Sr. Arz. José Rodríguez Carballo, ofm.

ENCUENTRO FRATERNO CON LA VIDA CONSAGRADA. Vida activa.


Arquidiócesis de Guadalajara.
14 de julio de 2017

DIÁLOGO

1. ¿QUÉ TAN IMPORTANTE ES LA RELACIÓN ENTRE EL CONSEJO PROVINCIAL O


GENERAL Y EL EQUIPO DE FORMACIÓN PARA CUANDO SE DA EL INFORME DE UNA
CANDIDATA?
Cuando una general con su consejo nombra a una formadora o a unos formadores
tiene que depositar en ellos la confianza. Si no hay confianza (…) y por eso yo
personalmente no puedo entender cómo el consejo de formación da un informe
negativo y la madre general que tiene todo el don del Espíritu dice, no, yo la voy a
admitir. Muy bien, pero después, sería, yo la mandaría a vivir con esas personas.
Yo creo que hay que escuchar al consejo de formación, sino para qué estamos,
muchas veces la general, el general, hablo de institutos pequeños, -porque para mí
sería imposible eso-, pero vamos se da con el provincial, se le escapan muchas
cosas. Quien conoce a los candidatos, candidatas son las personas que viven con
ellas, porque de visita todos somos maravillosos. El problema es la vida concreta y
esto se conoce conviviendo. Aquí yo veo que a veces no hay articulación, y tiene
que haber articulación, y aunque, la superiora general o provincial, -depende de las
constituciones-, puede admitir contra el parecer del consejo, sin embargo, yo antes
de hacerlo me lo pensaría muchas veces, porque a veces estamos admitiendo
bombas. Y en adelante, pues, se desanima el consejo de formación, ‘si total no me
van a hacer caso’ (…) se necesita diálogo, se necesita confianza, si la general no
tiene confianza en sus formadoras, en sus formadores que los retire, punto.

2. USTED MENCIONÓ QUE SE NECESITA UN DISCERNIMIENTO PARA ADMITIR A LOS


CANDIDATOS, ¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE EL DISCERNIMIENTO RÍGIDO Y EL
EXIGENTE?
Usted, seguramente oyó hablar de un encuentro de un tal Jesús de Nazaretcon una
mujer que parece que era bastante pecadora, por tanto, no brillaba bastante por
su virtud. Entonces, ¿qué pasa? Jesús ¿qué le dice?: “Nadie te ha condenado, yo
tampoco”. Por eso el Papa ha dicho ‘quién soy yo para condenar’… ahí viene el
elemento humano la acogida, pero viene la exigencia: ‘Mujer, no peques más’. Por

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una parte una humanidad que sólo Jesús podía tener. Y lo mismo lo encontramos
en el paralítico de la piscina de Betesdá, Jesús se compadece de aquel hombre, lo
cura de la parálisis, pero después lo encuentra en el templo, y qué le dice Jesús:
‘Mira que te he curado, por favor, no vuelvas a las andadas’… todo gira en torno a
cinco… ahí Jesús lo que hace es liberar a un hombre, 38 años, periodo de
peregrinación del pueblo en el desierto. Jesús muy humano y al mismo tiempo es
exigente. Los profetas son así, no permiten la doblez ni la hipocresía.

Hoy se dan dos extremos en la formación déjalos ser, porque todos somos adultos,
¡no!,… necesitamos acompañamiento. Y el otro es la rigidez. Y yo sinceramente no
creo en los sistemas rígidos, porque éstos crean una doble vida, vida a nivel de
vitalidad. “Hoy haré lo que me dicen que haga, mañana ya me las veré yo para
acampar”. Ayer les contaba una anécdota cuando yo era general fui a visitar a las
provincias croatas … y lo primero que hacía ‘extra hominis’ nada de provincial,
nada de definidor, nada de maestros, porque es cuando hablan, sobre todo en
países excomunistas como Croacia. Y yo allí me deleitaba hablando de la
necesidad del radicalismo evangélico, bueno cuando terminé me dice uno: “Va, no
se preocupe, hoy hacemos lo que ustedes nos dicen que hay que hacer porque si
no se nos abre la puerta y se cierra, mañana vamos a hacer lo que ustedes hacen”.
Son sistemas cerrados. Yo creo que la formación tiene que ser en libertad y
responsabilidad, no pueden dar libertad sin exigirles responsabilidad, no pueden
exigir responsabilidad si no dan libertad. Ese binomio tiene que ir de la mano.

3. PODRÍA AHONDAR EN EL CONCEPTO DE NO SE TRATA DE ESTAR A LA MODA, PERO


TAMPOCO HACER ARQUEOLOGÍA
Hubo un momento en que hubo muchos institutos que podrían denominarse
institutos esclavos de la moda, y claro hemos perdido en estos institutos que han
querido estar en la cresta, en la onda de la moda, han perdido la raíz y pues han
terminado en crisis, se han dado pasos que de renovación no tiene nada, quieren
dar muchos de ruptura simplemente para estar a la moda. Yo cito siempre un
dicho que aprendí en Vietnam: ‘Cásate con la moda y pronto te quedarás viudo’.
Esto basta pensar en los ordenadores… la moda, por así decirlo, que no me gusta
ese término, la marca el Evangelio, la marca Jesús. Y el otro peligro es la
arqueología quedarnos con elementos totalmente secundarios, y después como
dice el evangelio colamos la mosca y nos tragamos el camello. Y esto suele pasar
cuando damos a todo la importancia que no tiene. En algún momento de nuestros
institutos pensamos que todo es esencial, todo, cuál es el peligro, que llega un
tiempo en que todo se convierte en secundario, y así como no todo es esencial, en

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la vida consagrada muy pocas cosas son esenciales, pero las hay, por tanto, aunque
no todo es esencial tampoco, no todo es secundario, dar a cada cosa su
importancia. Ni arqueología: ‘ay es que mi fundador ayunaba un día sí y otro
también’, adelante hazlo si eso te ayuda, pero a lo mejor eso no es el criterio
fundamental del carisma. ‘Ay es que mi fundador llevaba el hábito remendado’,
bueno pues mira era coherente llevaba el corazón remendado por dentro y quería
que lo viesen por fuera, quería huir de la incoherencia, que le consideraran que era
santo, cuando en realidad, pues era uno más. Allí está el elemento esencial en la
coherencia, no en el remiendo, en el remiendo estaría la arqueología.

4. ESTAMOS EN UNA CRISIS DE LIDERAZGO, MAS AQUÍ EN MEXICO, ¿PODRÍA


COMPARTIRNOS ALGO DE SU EXPERIENCIA PARA PODER RECREAR ALGO DE ESTE
LIDERAZGO?
Yo estoy convencido de que en la Vida Consagrada estamos viviendo una doble
crisis: crisis de autoridad y crisis de obediencia, porque cuando hay crisis de
autoridad hay crisis de obediencia y viceversa. Habría que intentar formarnos para
asumir responsabilidades concretas. El problema de la vida consagrada es que
muchas veces nuestras elecciones están motivadas por los sentimientos, ‘ay es que
aquella madre es muy simpática, y votamos’. Bueno si es simpática la llamamos
para que nos cuente chistes, pero no para que nos gobierne. Cabe lo que decía
Santa Teresa: Es santa que rece por nosotros, es sabia que nos enseñe, es
prudente que nos gobierne. Por lo tanto, el criterio no es la santidad… yo creo que
hay una crisis de autoridad. Y yo les pediría aquí en México que dedicasen un
tiempo de formación al servicio de la autoridad.

Usted, como yo antes, usamos el término Leadership, liderazgo este es un término


que inventaron vuestros vecinos del norte, pero jamás aparece en el Evangelio. Por
tanto, tenemos que volver al vocabulario que da sentido a nosotros. El líder se
hace o se nace. La autoridad no retiene nada, por tanto la acoge. El ejemplo de
san Francisco, ‘me siento hijo de tan buen padre, aunque yo no sea tan buen hijo’.
Francisco era líder antes de fundar la Orden, era el rey de la juventud, después de
fundar la Orden, le salían callos porque los frailes le hacían la guerra, esto no
quiere decir que no ejerciese la autoridad. Estos matices, no es lo mismo
leadership que el servicio de la autoridad.

No llamarle liderazgo, sino servicio de la autoridad. Hoy comemos lo que nos dan,
pensamos lo que nos pide que pensemos, esto es: Colonización cultural.
Necesitamos evangelizar el servicio de la autoridad y para ello hay que formarse.

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Fíjense, ustedes, que Vultum Dei quaerere la constitución apóstolica para las
contemplativas pide que haya cursos de formación para las abadesas y superioras.
Pues también en la vida apostólica hay que formarse.

5. UNA DE LAS CAUSAS DE LA VIDA CONSAGRADA DE ABANDONO ES LA DIFICULTAD


A TRAVÉS DE LA VIDA FRATERNA, ¿PODRÍA EXPLICAR CÓMO LA VIDA FRATERNA SE
ALIMENTA DE LA FRAGILIDAD?
La comunidad se apoya o crece a partir de la debilidad, nosotros nunca vamos a
encontrar una comunidad perfecta, siempre vamos a encontrar hermanos o
hermanas que si no cojean de una pierna, cojean de dos, todos somos pecadores,
empezando por los superiores, todos necesitamos el perdón y la misericordia.
¿Quién no perdona? aquél que se cree que es un dechado de virtudes. En la vida
de comunidad hay que aceptarnos como somos, y desde ahí caminar juntos hasta
lo que tenemos que ser, esto nos lo marca el evangelio y las constituciones, pero
desde la aceptación. Ustedes imagínense que Pedro no aceptase que era un pobre
desgraciado: ‘Yo no te negaré’ ‘los demás sí, porque son frágiles’, dijo san Pedro.
Cuando Jesús le pregunta por tercera vez, ‘¡ah! también yo’. La aceptación de la
propia fragilidad, no para convivir con la fragilidad, sino para caminar en la misma
dirección que nos señala el evangelio y las constituciones

6. ¿CUÁNTO PUDIERA AFECTAR EN UNA COMUNIDAD EL QUE SEA EL SUPERIOR


PARCIAL CON UNOS Y OTROS NO?
Afecta totalmente, ahí no hay vida comunitaria, no hay fraternidad. Yo estoy
convencido que en la Vida Consagrada cometemos injusticias enormes, y a unos
les permitimos que beban un vaso de vino y a otros ni un vaso de agua. Volvemos
al servicio de la autoridad. Un superior que comete estas injusticias, pues está
perdiendo la autoridad, esto afecta, afecta de muchos modos que no habrá
confianza al superior a la superiora, afecta porque yo hallaré la forma de jugar.
Cuando hay superiores así se cometen injusticias. Cuando se dan hermanos ricos y
hermanos pobres, ¿qué evangelio es éste? Ante la profesión todos somos iguales,
sólo hay un tipo de hermanos que tienen derecho a ser privilegiados, los enfermos,
a los enfermos no les neguemos nada, pero a los demás todo igual. Evangelizar el
servicio de la autoridad. Vienen opciones nada evangélicas: ‘tú me has dado el
voto’ ‘tú me hiciste publicidad’… no perdamos la libertad por un plato de lentejas…
¿Qué seguimiento de Cristo? Hay que hablar claro.

7. SI NOS PUDIERA HABLAR UN POQUITO MÁS SOBRE EL DOCUMENTO QUE VAN A


SACAR SOBRE LOS INSTITUTOS SECULARES. Este año se celebra el 70 aniversario

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por parte de Pío XII es un poco la carta fundacional de los institutos seculares, que
para aquel tiempo, -lo acaba de reconocer el Papa Francisco-, fue reprobable.
Hasta entonces no se entendía que la consagración pudiese ser secular y la
secularidad consagrada. Entonces para los institutos seculares este binomio
consagración-secularidad no puede estar ausente. Su formación se da en la
secularidad y el testimonio en la secularidad, la vocación de los institutos seculares
es muy importante para la Iglesia. Porque en muchos lugares donde no pueden
llegar los sacerdotes, los religiosos, son llamados a estar los institutos seculares.
Han tenido un problema, culpa de ustedes o no, que muchas veces a ustedes o
ustedes mismas o ellos, se presentan como religiosos de segunda clase, ustedes
son una cosa distinta, ustedes no son religiosos. A partir del Concilio Vaticano II se
habla de Vida Consagrada. En el documento queremos dar a conocer a los obispos
vuestra espiritualidad y vuestro carisma. Y no sean fotocopia nuestra, su lugar no
está en las sacristías o en las iglesias, su lugar está en las plazas, en las calles,
donde se construye pensamiento, en los lugares de trabajo, en la secularidad.
Estoy muy contento de haber firmado, elaborado esa cartita que es muy sencilla, el
título es consagración y secularidad.

8. ¿CUAL SERÍA UN BUEN TESTIMONIO COMO CONSAGRADOS PARA SEGUIR


ATRAYENDO JÓVENES?
Yo creo que para los jóvenes de hoy, hay tres elementos que nos piden a los
religiosos. Primero esa dimensión trascendental que vean que somos hombres y
mujeres de oración. Antes, los frailes rezábamos en la Iglesia, pero ahora todos
tenemos nuestras capillitas allá en lo más profundo del convento. No nos ven
rezar y ese es un testimonio visible, la oración, pero la oración encarnada, una
espiritualidad encarnada, que nos haga al mismo tiempo hijos del cielo e hijos de la
tierra, profetas y místicos, misioneros y discípulos.
Segundo, la vida fraterna, la vida comunitaria, en los religiosos esto es
imprescindible. Ahí donde se ve la vida fraterna, es visible, auténtica, sana, ahí hay
vocaciones. Yo estoy convencido que la vida fraterna en comunidad es la primera
forma de evangelización y también de pastoral vocacional.
Tercero, la misión entre los más pobres, lo que el Papa Francisco está diciendo
siempre de ir a las periferias, esto no es nuevo. Nuestra misión sería ir a donde no
quieren ir los demás. Nuestro lugar es tapar agujeros. La opción por los pobres no
es una opción sociológica, sino es una opción de fe. El país donde más ha habido
abandonos en estos últimos tres años es Brasil. Muchos entran por liberar al
hombre. Opciones por los pobres, desde opciones de fe. Dejándonos evangelizar
por ellos.

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