Dialogo
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DIÁLOGO
1
una parte una humanidad que sólo Jesús podía tener. Y lo mismo lo encontramos
en el paralítico de la piscina de Betesdá, Jesús se compadece de aquel hombre, lo
cura de la parálisis, pero después lo encuentra en el templo, y qué le dice Jesús:
‘Mira que te he curado, por favor, no vuelvas a las andadas’… todo gira en torno a
cinco… ahí Jesús lo que hace es liberar a un hombre, 38 años, periodo de
peregrinación del pueblo en el desierto. Jesús muy humano y al mismo tiempo es
exigente. Los profetas son así, no permiten la doblez ni la hipocresía.
Hoy se dan dos extremos en la formación déjalos ser, porque todos somos adultos,
¡no!,… necesitamos acompañamiento. Y el otro es la rigidez. Y yo sinceramente no
creo en los sistemas rígidos, porque éstos crean una doble vida, vida a nivel de
vitalidad. “Hoy haré lo que me dicen que haga, mañana ya me las veré yo para
acampar”. Ayer les contaba una anécdota cuando yo era general fui a visitar a las
provincias croatas … y lo primero que hacía ‘extra hominis’ nada de provincial,
nada de definidor, nada de maestros, porque es cuando hablan, sobre todo en
países excomunistas como Croacia. Y yo allí me deleitaba hablando de la
necesidad del radicalismo evangélico, bueno cuando terminé me dice uno: “Va, no
se preocupe, hoy hacemos lo que ustedes nos dicen que hay que hacer porque si
no se nos abre la puerta y se cierra, mañana vamos a hacer lo que ustedes hacen”.
Son sistemas cerrados. Yo creo que la formación tiene que ser en libertad y
responsabilidad, no pueden dar libertad sin exigirles responsabilidad, no pueden
exigir responsabilidad si no dan libertad. Ese binomio tiene que ir de la mano.
2
la vida consagrada muy pocas cosas son esenciales, pero las hay, por tanto, aunque
no todo es esencial tampoco, no todo es secundario, dar a cada cosa su
importancia. Ni arqueología: ‘ay es que mi fundador ayunaba un día sí y otro
también’, adelante hazlo si eso te ayuda, pero a lo mejor eso no es el criterio
fundamental del carisma. ‘Ay es que mi fundador llevaba el hábito remendado’,
bueno pues mira era coherente llevaba el corazón remendado por dentro y quería
que lo viesen por fuera, quería huir de la incoherencia, que le consideraran que era
santo, cuando en realidad, pues era uno más. Allí está el elemento esencial en la
coherencia, no en el remiendo, en el remiendo estaría la arqueología.
No llamarle liderazgo, sino servicio de la autoridad. Hoy comemos lo que nos dan,
pensamos lo que nos pide que pensemos, esto es: Colonización cultural.
Necesitamos evangelizar el servicio de la autoridad y para ello hay que formarse.
3
Fíjense, ustedes, que Vultum Dei quaerere la constitución apóstolica para las
contemplativas pide que haya cursos de formación para las abadesas y superioras.
Pues también en la vida apostólica hay que formarse.
4
por parte de Pío XII es un poco la carta fundacional de los institutos seculares, que
para aquel tiempo, -lo acaba de reconocer el Papa Francisco-, fue reprobable.
Hasta entonces no se entendía que la consagración pudiese ser secular y la
secularidad consagrada. Entonces para los institutos seculares este binomio
consagración-secularidad no puede estar ausente. Su formación se da en la
secularidad y el testimonio en la secularidad, la vocación de los institutos seculares
es muy importante para la Iglesia. Porque en muchos lugares donde no pueden
llegar los sacerdotes, los religiosos, son llamados a estar los institutos seculares.
Han tenido un problema, culpa de ustedes o no, que muchas veces a ustedes o
ustedes mismas o ellos, se presentan como religiosos de segunda clase, ustedes
son una cosa distinta, ustedes no son religiosos. A partir del Concilio Vaticano II se
habla de Vida Consagrada. En el documento queremos dar a conocer a los obispos
vuestra espiritualidad y vuestro carisma. Y no sean fotocopia nuestra, su lugar no
está en las sacristías o en las iglesias, su lugar está en las plazas, en las calles,
donde se construye pensamiento, en los lugares de trabajo, en la secularidad.
Estoy muy contento de haber firmado, elaborado esa cartita que es muy sencilla, el
título es consagración y secularidad.