P5 Teatro 6º
P5 Teatro 6º
Curso: 6º
Proyecto Teatro y te Desatro
Se preguntarán, ¿por qué solidaria?... porque los trabajos serán compartidos en las escuelas primarias, jardines,
merenderos, comedores, hogares de ancianos, o cualquier institución que necesite de nuestro aporte, de nuestra alegría,
para poder pasar este momento tan atípicamente inusual que estamos viviendo. Aquellos que no quieran compartir el
trabajo en las redes, o en las escuelas, me avisa, es respetable la decisión!.
A continuación encontrarán las obras sugeridas para trabajar de las que elegirán 1 (una) para trabajar
AL PAN PAN
ACTO ÚNICO
TELÓN
Apetensembrei Tucumán Lengí Tururú Canché
ACTO ÚNICO
PERSONAJES: Empleado - Cliente
ESPACIO ESCÉNICO:
La escena transcurre en una agencia de avisos clasificados de un diario. En el frente del mostrador puede
leerse un cartel que dice; ¡Clasirriiiiiiiiiiing! Entra el cliente y se dirige al empleado.
CLIENTE: Necesito publicar un aviso clasificado.
EMPLEADO: (Con actitud de vendedor).¡Excelente elección! ¡Clasirriiiiiiiiiiiiiiiing, es el mejor modo de vender
desde un transatlántico hasta un chupetinnnnnnnnnnnng!
CLIENTE: ¡Fantástico! Deseo vender...
EMPLEADO: (Lo interrumpe). ¿Su casa? ¿Su auto? ¿Su avioneta?
CLIENTE: No. Quiero vender un apetensembrei tucuman lengi tururú canché.
EMPLEADO: (Al público). ¿UN QUÉ?
CLIENTE: Un apetensembrei tucumán lengi tururú canché. Es viejo, pero está en muy buen estado. ¿En qué
rubro me recomienda ofrecerlo?
EMPLEADO: ¡Ni idea! En mi vida he visto un apesentenmbrei tumucán genli... (Se embrolla).
CLIENTE: A-pe-ten-sem-brei tu-cu-mán len-gi tu-ru-rú can-ché. Es tan fácil de decir como de reconocerlo.
EMPLEADO: No me diga!.
CLIENTE: Sí le digo.
EMPLEADO: Déme alguna pista.
CLIENTE: ¿Se cree avión?
EMPLEADO: Digo, algún indicio para saber en qué rubro publicarlo. Le confieso que no tengo la más pálida
idea de cómo es un...
CLIENTE: (Repite con fastidio). apetensembrei tucuman lengi tururú canché
EMPLEADO: Eso mismo.
CLIENTE: Pues, lo identificaría en el acto si lo viera levantando la patita para hacer pis en un árbol.
EMPLEADO: (Va a anotar). Entonces, en el rubro de mascotas.
CLIENTE: (Estalla). ¡Está loco! ¿Algo que tiene botoncitos, perillitas, lucecitas y engranajitos le suena a un
animalito?
EMPLEADO: (Cree entender). Ah, entonces, en venta de electrodomésticos.
CLIENTE: (Más enojado). ¡Monstruo! ¡Cómo se le ocurre considerar como a un vulgar aparato algo que tiene
tres ojos, cuatro bocas, dos narices con seis orificios nasales cada una, respira y posee los mismos derechos
que usted y yo!
EMPLEADO: (Temeroso). ¿Es una persona?
CLIENTE: Una persona responsable debería estar en su puesto. ¿Cree que a una persona se la estaciona en
el garaje, se la guarda en el ropero o dentro de un pastillero como se suele hacer con cualquier
apetensembrei tucumán lengi tururú canché?
EMPLEADO: (Tratando de comprender). ¿En el garaje? Es un modelo de coche...
CLIENTE: No tiene ruedas, ni motor; pero sí, bocina y los jueves interpreta milongas.
EMPLEADO: (Sin perder su paciencia). ¿Es un instrumento musical?
CLIENTE: Usted no sabe nada de nada. ¿Ha visto alguna orquesta filarmónica que sume un apetensembrei
tucumán lengí tururú canché?
EMPLEADO: A esta altura, no sabría qué decirle.
CLIENTE: Pues sepa que ningún instrumento musical crece en maceta como lo hace un apetensembrei
tucumán lengi tururú canché.
EMPLEADO: ¡En maceta! Entonces, lo publicamos en la venta de insumos para jardinería.
CLIENTE: (Irónico) ¿Y qué tiene que hacer algo que se enchufa, en medio de un jardín? Imagínese que lo
rieguen o llueva, entraría en cortocircuito en el acto.
EMPLEADO: (Busca terminar con la confusión). Que sea en el rubro de artículos eléctricos...
CLIENTE: Creo que no nos estamos entendiendo.
EMPLEADO: (Se rinde). Le doy toda la razón.
CLIENTE: (Exaltadísimo).Yo vengo a vender una de mis pertenencias más preciadas y usted quiere que
aparezca cualquier irresponsable y termine por destruirla.
EMPLEADO: Está bien, no se enoje (Busca más referencias). ¿Dónde lo compró?
CLIENTE: No lo compré, me lo trajeron los Reyes Magos.
EMPLEADO: (Cree acertar). ¡Ah, es un juguete!
CLIENTE: (Alarmado). ¡Jamás jugaría con un apetensembrei tucumán lengi tururú canché! Se corre el riesgo
de perder una mano... o las dos.
EMPLEADO: (Ya Se va enojando). ¡Es un animal salvaje!
CLIENTE: El animal y el salvaje es usted. Mi apetensembrei tucumán lengi tururú canché es de lo más
mansito y educadito. Los sábados lo saco del horno y lo llevo a la peluquería. Luego, nos vamos al cine: le
encantan las de dibujitos animados. Y después, suelo llevarlo a la lavandería.
EMPLEADO: (Grita). ¡ES UNA PRENDA DE VESTIR!
CLIENTE: (Entre dientes). Cierre esa boca. Si apareciera algún apetensembrei tucumán lengi tururú canché y
escucha que alguien lo pone al nivel de una camisa, un pantalón o un calzoncillo, usted estaría en serios
problemas.
EMPLEADO: (Ya perdió la paciencia). Estoy en problemas desde que usted entró por esa puerta para
complicarme la existencia.
CLIENTE: Yo simplemente quería vender mi...
EMPLEADO: (Muy molesto). Si, ya sé. No lo repita más. Me cansó con su apetensembrei tucumán lengi tururú
canché. (Se dio cuenta de que lo dijo correctamente y comienza a repetirlo, variando el ritmo, incluso bailando
con el cliente).
CLIENTE: (Feliz). ¡Ve que puede decirlo! Y yo que iba a denunciarlo a la Asociación Protectora de
Apetensembreis tucumán lengi tururú canché,
EMPLEADO: (Viendo una carpeta). Es más, acabo de descubrir que en Clasirriiiiiing hay un rubro exclusivo
para compra y venta de apetensembreis tucumán lengi tururú canché.
CLIENTE: ¡Excelente! (Le dicta el aviso). Ponga que lo vendo por dinero en efectivo o en canje por un
mamemi surqui pototó manché, pero que sea made in Argentina, no son buenos los importados. (Paga el
aviso y sale muy conforme).
EMPLEADO: (Muy contento). Un cliente más que se va satisfecho con ¡Clasirriiiiiiiiiiiiiiiing!, el mejor modo de
vender desde un transatlántico hasta su abesentén..., no... su asesemprei... ¡tampoco! mutumán... ¡menos!
Cumután rengli... (Nuevamente confundido, al público). ¿Cómo era?
TELÓN O APAGÓN
ACTO ÚNICO
PERSONAJES:
VETERINARIO
ESPOSA
MARIDO
(El consultorio de un médico veterinario, lo cual se puede indicar con un cartel sobre el escritorio. Debe haber una
camilla.)
VETERINARIO: (Habla por teléfono.) Señor, si su loro dice malas palabras llévelo a una academia de buenos modales,
no es un caso veterinario. ¡Además, insulta a su suegra! Considérese afortunado: eso le ahorrará problemas con su
esposa. Buen día (Grita.) ¡El que sigue!
ESPOSA: (Entra con su marido, que camina en cuatro patas y ladra.) Doctor… doctor… tiene que ayudarme.
VETERINARIO: (Se sorprende al ver al hombre que va de un lado a otro haciendo cosas de perro.) ¡Asombroso!
ESPOSA: (Le ordena.) ¡Quieto! ¡Sentado! ¡Echadito!
VETERINARIO: (Al ver como el marido obedece.) ¡Increíble!
ESPOSA: Y usted no sabe qué bien le sale el muertito.
VETERINARIO: Señora, yo soy veterinario, no psiquiatra.
ESPOSA: Ya fuimos. Pero mi marido le hizo pis en las macetas del consultorio y el psiquiatra por poco no llama a la
perrera.
VETERINARIO: (Se acerca al marido.) ¿Desde cuándo está así?
ESPOSA: Desde que lo mordió un perro…
VETERINARIO: ¿Dónde?
ESPOSA: En la calle.
VETERINARIO: ¿En qué parte?
ESPOSA: En la esquina.
VETERINARIO: Del cuerpo.
ESPOSA: Ah, en el dedo.
VETERINARIO: Y lo desinfectó…
ESPOSA: No pude, el perro salió corriendo.
VETERINARIO: Le pregunto si le puso algo.
ESPOSA: No, parece que le gustó así como estaba.
VETERINARIO: ¿Tenía rabia?
ESPOSA: Muy contento no estaba.
VETERINARIO: ¿Era chico?
ESPOSA: Doctor, le dije que lo mordió un perro, no un niño.
VETERINARIO: Si el perro era adulto o cachorro.
ESPOSA: Con el susto que me pegué, no se me ocurrió preguntarle la edad.
VETERINARIO: ¿De qué raza era?
ESPOSA: Ladraba como chihuahua, pero tenía el tamaño de un dogo. El hocico era de caniche y las orejas parecían de
doberman…
VETERINARIO: ¿Era un perro o el hombre lobo? ¿Le salía espuma por la boca?
ESPOSA: No, pero a mi marido siempre se le llenaba la boca de espuma.
VETERINARIO: ¡Eso es terrible!
ESPOSA: ¿Por qué? Le pasaba cada vez se lavaba los dientes con dentífrico.
VETERINARIO: (Toma un anotador.) Dígame el nombre de su perro… digo, marido.
ESPOSA: Se llama Raúl Pérez, pero desde ayer le decimos Lassie. (Al ver que el marido mueve la cola.) Usted le cae
simpático, mire cómo le mueve la cola.
VETERINARIO: Voy a revisarlo. Señor… Lassie, a la camilla. ¡Hop! (El marido salta y se sienta como perro en la
camilla.) Diga “a”.
MARIDO: ¡Guau!
VETERINARIO: Dije “a”.
MARIDO: ¡Guau!
VETERINARIO: “A”… no guau.
ESPOSA: Es que no pude anotarlo en alguna escuela para perros.
VETERINARIO: (Le pone el termómetro en la boca, pero el marido se lo come.) ¡Se lo tragó!
ESPOSA. Y usted no sabe cómo me ha dejado los sillones. Me muerde el felpudo y me esconde las pantuflas. Eso sí,
conseguí lo que en diez años de casados nunca pude: me lleva el díario a la cama.
VETERINARIO: (Al ver que el marido se rasca.) Encima eso…
ESPOSA: No, mi marido tenía pulgas antes de que lo mordiera el perro.
VETERINARIO: ¿Sus hijos lo vieron en este estado?
ESPOSA: Están chochos: el menor lo saca a pasear a la plaza y el mayor lo anotó en un concurso canino. El que no lo
puede ni ver es el gato de los vecinos: se viven peleando. Pero no sabe lo guardián que es. Mire… (Ordena.) Lassie,
chule… ¡chule al veterinario! (El marido, violento, ladra y persigue al médico por el consultorio.)
VETERINARIO: Párelo, párelo, que me masacra.
ESPOSA: No se alarme: hombre que ladra no muerde. (Ordena.) Lassie, stop. Le hablo en inglés como a los ovejeros
alemanes (Al ver que su marido lengüetea al veterinario.) Mire los besitos que le da.
VETERINARIO: (Con ternura.) A ver, la pata. (El marido obedece y le da la mano.) La otra. (El marido obedece.) Un
giro… (El marido gira como un trompo.)
ESPOSA: Impresiona, pero como mascota es un primor.
VETERINARIO: Su marido sufre de “pichuchitis virósica”, un mal extraño que tiene cura. (Anota.) Póngale esta vacuna y
todo volverá a la normalidad.
ESPOSA: Pensé que tendríamos que sacrificarlo. ¿Y va a tardar mucho?
VETERINARIO: Una semana.
ESPOSA: Doctor, hoy es nuestro aniversario y habíamos reservado mesa en un restaurante elegantísimo.
VETERINARIO: Entonces, antes cómprele un collar más caro y llévelo a la peluquería canina.
ESPOSA: No puedo ir con mi marido así…
VETERINARIO: Tiene razón. Le recomiendo que festejen en su casa: busque en Netflix “Los 101 dálmatas” y prepare
una cena romántica con alimento balanceado. De postre, sírvale galletas de huesitos. (Al ver que el marido va a hacer pis
contra el escritorio.) ¡Lassie, no!
ESPOSA: (Cuando el perro vuelve a enojarse con el médico y lo sigue para morderlos, ordena.) ¡Quieto! ¡Sentado!
¡Echadito! (El hombre obedece. La esposa dice al público:) Y pensar que como marido nunca pude hacer que me
obedeciera.
Llamada a tiempo
ACTO Único
PERSONAJES: Inés (insistente) y Pronosticador
ESPACIO ESCÉNICO:
La escena transcurre en dos niveles diferentes. Uno es la Casa de Inés y el otro, la oficina del Pronosticador.
INÉS: (Marca un número en su teléfono).Tut... tut... tut
PRONOSTICADOR:). Ring... Ring... (Atiende). Buen día!
INÉS: ¿Hablo con el pronóstico del tiempo?
PRONOSTICADOR: No, habla con el pronosticador. EI pronóstico no suele atender llamadas.
INÉS: Llamo a tiempo para saber el tiempo porque no quiero sufrir un contratiempo?
PRONOSTICADOR: Entonces, no me haga perder el tiempo. Pregunte.
INÉS: ¿Será hoy un día lindo o feo?
PRONOSTICADOR: (Mira unos papeles). Y... va a estar feo.
INÉS: ¡Qué lindo!
PRONOSTICADOR: Dije feo.
INÉS; Es que me parece lindo cuando el día está feo. Aunque si esta muy, muy feo ya no me parece
tan, tan, lindo.
PRONOSTICADOR; Veo que la tiene bien clara.
INÉS: No, no me llamo Clara. Me llamo Inés.
PRONOSTICADOR: Veo que es una mujer decidida.
INÉS: Sí, aunque a veces, no. Sí y no. No se. ¿Está claro?
PRONOSTICADOR: Clarito, Clara.
INÉS: Entonces, ¿va a llover o habrá sol?
PRONOSTICADOR:Va a ser una jornada inestable; despejado por momentos, nublado, por otros.
INÉS: ¡Rayos!
PRONOSTICADOR: (Mira sus notas). No, no se avecina ninguna tormenta eléctrica.
INÉS: ¿Y cómo salgo, entonces?
PRONOSTICADOR: ¡ por la puerta!.
INÉS: Digo: ¿salgo con paraguas o con lentes de sol?
PRONOSTlCADOR: salga sin nada, pero lleve la ropa.
INÉS: ¿Y si llueve?
PRONOSTICADOR: Se moja.
INÉS: ¿Y si sale el sol?
PRONOSTICADOR: se seca.
INÉS: Ay, qué sabio es usted!
PRONOSTICADOR: Y usted hace cada pregunta que dan ganas de matarla.
INÉS: ¿Y como estará la temperatura?
PRONOSTICADOR: La máxima va a estar baja y la mínima va a estar alta.
INÉS: (Anota). La máxima estará mínimay la baja alta
PRONOSTICADOR: No, al revés!
INÉS: (Vuelve a anotar). La mínima máxima y la alta baja! ¿Y cuál sera la alta?
PRONOSTICADOR: Diez grados.
INÉS: (Sube la voz.) Más alto que no le oí.
PRONOSTICADOR: (Furioso). Mire, baje el tonito alto porque si no lo baja no le digo la alta.
INÉS: Que bajón con la alta!
PRONOSTICADOR: No se aflija, va a ingresar una masa de aire caliente.
INÉS: ¿Masa de pizza?
PRONOSTICADOR: De pascualina.
INÉS: ¿Y Cómo estará la presión atmosférica?
PRONOSTICADOR: ¿Para que quiere saberla?
INÉS: Porque sufro de presión. A veces la máxima se me junta con la mínima y no se si la tengo alta o baja.
PRONOSTICADOR: (Molesto). ¡Otra vez cón la máxima y la mínima!
INÉS: Bueno, al final; ¿Me pongo guantes, bufanda, pulóver y sobretodo?
PRONOSTICADOR: ¿sobre todo eso?
INÉS: ¿Y si corre viento?
PRONOSTICADOR: Deje que corra, es bueno hacer un poco de ejercicio.
INÉS: ¿Y si hay una inundación? Mire que yo no sé nadar
PRONOSTICADOR: No nada nada?
INÉS: Nado nada de nada.
PRONOSTICADOR: Entonces, en vez de paraguas, lentes de sol y sobre todo salga con salvavidas.
INÉS:¿Y si viene nieve?
PRONOSTICADOR: (Alegre). ¿Cuándo viene Nieves?
INÉS: En invierno.
PRONOSTICADOR: ¡Uf! Cuánto falta para que venga Nieves!
INÉS: ¿Podría haber granizada?
PRONOSTICADOR: Eso pregúnteselo a un heladero, no a mí, un pronosticador del tiempo que no tiene tanto tiempo.
INÉS: Entonces, ¿saco el saco?
PRONOST|CADOR: (muy molesto). Si quiere saque el saque. Si no, guarde el guarde y por la dudas para salir
maquíllese y lávese los dientes.
INÉS:¿Para qué?
PRONOSTICADOR: ÅSí se protege de lo que pueda pasar en esta jornada inestable. Recuerde ¡Al mal tiempo, buena
Cara! ¡Que tenga un lindo día! (Cuelga).
INÉS: ¿Cómo lindo día?! Si me dijo que iba a estar feo.
APAGÓN
ACTO Único
PERSONAJES: Paciente - Doctor
ESPACIO ESCÉNICO
La escena transcurre en un consultorio médico.