2024 Prácticas Fisiología+humana+

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Manual de prácticas

de fisiología humana
De la teoría a la práctica clínica
Jesús Alberto Moreno-Bayona
Manual de prácticas de fisiología humana.
De la teoría a la práctica clínica.
MANUAL DE PRÁCTICAS
DE FISIOLOGÍA HUMANA
De la teoría a la práctica clínica

Jesús Alberto Moreno-Bayona; MD, Msc.

UN
IV E NA
RSID LO
A D D E PA M P
Manual de fisiología humana. De la teoría a la práctica clínica /
Jesús Alberto Moreno-Bayona. -- Pamplona: Universidad de
Pamplona, 2024.

134 p. ; 17 cm x 24 cm.
ISBN (digital): 978-628-7656-27-7

© Universidad de Pamplona
Sede Principal Pamplona, Km 1 Vía Bucaramanga-
Ciudad Universitaria. Norte de Santander, Colombia.
www.unipamplona.edu.co
Teléfono: 6075685303

Manual de fisiología humana.


De la teoría a la práctica clínica

Jesús Alberto Moreno-Bayona

ISBN (digital): 978-628-7656-27-7


Primera edición, junio de 2024
Colección Salud
© Sello Editorial Unipamplona

Rector: Ivaldo Torres Chávez Ph.D


Vicerrector de Investigaciones: Aldo Pardo García Ph.D

Jefe Sello Editorial Unipamplona: Caterine Mojica Acevedo


Corrección de estilo: Andrea del Pilar Durán Jaimes
Diseño y diagramación: Laura Angelica Buitrago Quintero

Fotografías, figuras y diagramas: Carlos Alberto Moreno Chaparro.

Foto de portada: Claude Bernard and his pupils. Oil pain�ng a�er Léon-Augus.
h�ps://commons.wikimedia.org/wiki/File:Claude_Bernard_an-
d_his_pupils._Oil_pain�ng_a�er_L%C3%A9on-Augus_Wellcome_V0017769.jp
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Hecho el depósito que establece la ley. Todos los derechos reservados. Prohibida
su reproducción total o parcial por cualquier medio, sin permiso del editor.
PERFIL DEL AUTOR

Jesús Alberto Moreno-Bayona

Ha sido profesor de la Universidad de Pamplona, Colombia, desde el año


2004. Se graduó como Médico y Cirujano de la Universidad Industrial de
Santander UIS en Bucaramanga, luego adelantó estudios de Especialista
en Auditoría en Salud en la Universidad Autónoma de Bucaramanga y
posteriormente obtuvo el grado de Magister en Ciencias de la Actividad
Física y el Deporte de la Universidad de Pamplona, Colombia.

A lo largo de su trayectoria profesional, ha alternado el ejercicio clínico de


la medicina con su vocación docente, siendo profesor de las asignaturas
Fisiología Médica, Embriología y Comunicación Médica en el Departamen-
to de Medicina y de las asignaturas Fisiología del Ejercicio y Farmacología
en el Departamento de Fisioterapia de la Universidad de Pamplona. Así
mismo se ha desempeñado como director del Departamento de Medicina y
del Departamento de Ciencias Básicas en Salud de la misma universidad.

En la actualidad además de continuar como profesor del departamento de


Medicina, es el director del Grupo de Investigación en Ciencias Biomédi-
cas, adscrito a la Facultad de Salud de la Universidad de Pamplona,
Colombia, donde sus trabajos de investigación abordan las adaptaciones
fisiológicas causadas por el ejercicio y la implementación del ejercicio como
estrategia terapéutica para enfermedades crónicas no transmisibles.
DEDICATORIA

Al gran arquitecto del Universo por el don de la vida y la oportuni-


dad de permitirme crecer en el conocimiento de la verdad.

A mis padres quienes sembraron en mí el sentido de lucha frente a


las adversidades.

A mi esposa Amanda Lucía, mis hijos Carlos Alberto y María Lucía,


por su paciencia en permitirme prestado mucho del tiempo que les
pertenecía, para yo poder terminar esta obra.
PRÓLOGO

Comprender el funcionamiento del cuerpo humano es fundamental en


la formación médica. El concepto "conócete a ti mismo" ha sido una
máxima importante para filósofos como Kant y Rousseau y a lo largo
de la historia, tanto para los antiguos griegos, en el hinduismo, el
budismo, y hasta en el cristianismo y toma un papel fundamental en
medicina al enfocar esto al concepto de que nadie conoce mejor la
enfermedad que el propio enfermo. Sin embargo, aunque los pacien-
tes pueden sentir en carne propia lo que está sucediendo, los proce-
sos físicos, bioquímicos, celulares y moleculares subyacentes
pueden estar muy lejos de sus propias sensaciones. Por lo tanto, los
médicos debemos ir más allá y entender qué es lo que pasa en el
cuerpo de las demás personas, de nuestros pacientes. Es aquí donde
la fisiología humana—el estudio de las funciones y procesos que
ocurren de forma normal en el cuerpo humano, desde los sistemas,
órganos, tejidos y células del organismo, su regulación y el equilibrio
interno—nos da esas herramientas para entender cuando se pierde
este equilibrio y se cae en lo que conocemos como enfermedad.

Las actividades prácticas en la enseñanza de la medicina, tanto en


ciencias básicas como en la clínica, son fundamentales para la forma-
ción de médicos competentes, críticos y seguros. En los primeros
años de la enseñanza de la Medicina, estas actividades ayudan a los
estudiantes a desarrollar su razonamiento, a mejorar la comunicación
y el trabajo en equipo y a prepararse para entender situaciones médi-
cas reales con las que se enfrentarán en años posteriores de su
formación. Por lo tanto, es importante no solo llevar a cabo activida-
des de lectura y discusión, sino también procedimientos prácticos que
refuercen los conceptos teóricos, particularmente en el ámbito de la
fisiología humana. Hoy por hoy contamos con simuladores, realidad
virtual, realidad virtual aumentada, laboratorios virtuales, robots, entre
otros que facilitan este aprendizaje. Sin embargo, en nuestra realidad
Latinoamericana, muchas de nuestras escuelas de Medicina no

9
cuentan con recursos para adquirir y usar estas tecnologías. Sin
embargo, en este Manual de Prácticas de Fisiología Humana, un libro
creado gracias a la iniciativa del Dr. Jesús Moreno Bayona y la
Universidad de Pamplona, se cuenta con un gran texto de activida-
des para la enseñanza de la fisiología en el que no se requieren reac-
tivos o equipos especializados y que puede ser útil tanto para escue-
las de medicina con todos los recursos, dados los temas fundamenta-
les de fisiología que abarca, como aquellas con recursos un poco más
limitados.

He conocido al Dr. Moreno Bayona por más de 25 años. Desde nues-


tros primeros años como estudiantes de Medicina en la Universidad
Industrial de Santander, el Dr. Moreno Bayona (lo llamábamos ‘el
Capi’ por su liderazgo) siempre mostró una gran pasión por la fisiolo-
gía humana y la Medicina en general. Siempre estaba deseoso de
compartir el conocimiento y facilitar el entendimiento de los conceptos
del funcionamiento de los órganos y sistemas humanos, demostrando
desde siempre su dominio de todos los temas. Ahora, basado en el
conocimiento de la realidad de la formación médica y luego de estar
involucrado tiempo completo con la Facultad de Salud de la Universi-
dad de Pamplona por más de 20 años, el Dr. Moreno Bayona da un
paso hacia adelante en la contribución de la formación médica local y
nacional con este Manual. Dada la gran calidad de este libro, estoy
seguro que este título escalará las fronteras de Colombia y llegará a
muchas de las escuelas de Medicina de Latinoamérica.

Desde mi perspectiva de médico, con formación clínica, doctoral y


postdoctoral y trabajando desde uno de los mejores hospitales de
New York y los Estados Unidos y después de haber enseñado en
facultades de Medicina tan importantes la de la UNAM en México, me
atrevo a decir que mediante el uso de este manual, el estudiante de
medicina podrá llevar prácticas de laboratorio extremadamente útiles
para su formación que le permitirán ver, sentir, tocar, escuchar y final-
mente entender muchos de los conceptos fundamentales de la fisiolo-
gía humana. Para los docentes de fisiología humana, este manual
será un buen apoyo para hacer de sus clases algo más divertido y que
quedará en la memoria de sus estudiantes hasta que se refuercen
con conceptos de fisiopatología y formación clínica y algunos de ellos,
hasta el resto de su vida.

Invito a todos los lectores de este manual a disfrutar de doce expe-


riencias únicas para la formación médica, preparadas con la mejor

10
voluntad por parte de un gran maestro.

Bon voyage!

Diddier Prada, MD, Ph.D.


Assistant Professor
Institute for Health Equity Research
Department of Population Health Science and Policy
Department of Environmental Medicine and Public Health
Icahn School of Medicine at Mount Sinai
New York City, NY, USA

11
CONTENIDO

13 Introducción

15 Normas de bioseguridad
17 PRÁCTICA 1: Retroalimentación positiva

24 PRÁCTICA 2: Transporte de sustancias a través


de las membranas celulares

31 PRÁCTICA 3: Electrocardiografía
39 PRÁCTICA 4: Signos vitales
53 PRÁCTICA 5: Espirometría
61 PRÁCTICA 6: Sistema nervioso: reflejos
75 PRÁCTICA 7: Sentidos especiales:
visión, audición

91 PRÁCTICA 8: Sistema renal


101 PRÁCTICA 9: Sistema digestivo
107 PRÁCTICA 10: Sistema endocrino
113 PRÁCTICA 11: Sistema reproductor

118 PRÁCTICA 12: Fisiología del ejercicio


130 Referencias

12
INTRODUCCIÓN

La fisiología está definida como la ciencia que busca dar explica-


ción a los procesos físicos y a las reacciones bioquímicas que dan
origen a la vida y permiten el desarrollo de la misma. Si hablamos
de fisiología humana, debemos hacer unos ajustes a la definición
anterior, pues esta busca el mismo objetivo, pero aplicados al
cuerpo de los seres humanos.

Entender los complejos fenómenos y las intrincadas reacciones


bioquímicas, que le permiten al cuerpo humano mantenerse con
vida, son la base para entender su funcionamiento y a su vez,
constituyen el punto de partida para comprender sus alteraciones
y la fisiopatología de las enfermedades. De allí que la fisiología se
convierta en la columna vertebral para la formación de cualquier
médico o profesional de la salud.

Durante muchos años, varios autores han mencionado que para


ser un buen médico se tiene que ser un buen fisiólogo, y esto hasta
la fecha no ha perdido su validez, pues a partir de conocer perfec-
tamente el funcionamiento normal del cuerpo humano, le será más
fácil identificar sus alteraciones (Fisiopatología), realizar un diag-
nóstico correcto y por lo tanto un tratamiento acertado de las
diferentes condiciones clínicas que pueden afectar a sus pacien-
tes.

En virtud a que la fisiología demanda la comprensión de una gran


cantidad de conceptos teóricos, los cuales son dinámicos, resulta
fundamental contrastar dichos conceptos con procedimientos
prácticos, de manera que le permitan al futuro profesional de la
salud, comprender mejor los diferentes fenómenos fisiológicos del
cuerpo humano e identificar su aplicación en el ámbito clínico.

13
Por tal razón, este manual de prácticas de fisiología humana surge
como respuesta a una necesidad sentida de muchas instituciones
y docentes de educación superior en Colombia, que imparten asig-
naturas del área básica de las ciencias de la salud, y que buscan
desarrollar el componente práctico de dichas asignaturas, pues
ofrece a los estudiantes en formación, una herramienta que les
permitirá reforzar su proceso de aprendizaje y hacer de este una
experiencia amena y significativa.

El presente manual está compuesto por 12 prácticas, las cuales,


en su gran mayoría, han sido diseñadas para poder ser llevadas a
cabo sin la necesidad de reactivos o equipo especializado, permi-
tiendo así, ser implementado en cualquier institución educativa.
Cada práctica está organizada con sus objetivos, materiales, reac-
tivos, introducción y procedimiento. Adicionalmente, al final de
cada práctica se incluyen unas preguntas y la lectura de un artículo
científico que le permitirán al estudiante complementar y reforzar
los conocimientos adquiridos durante la práctica, así como correla-
cionar lo aprendido con la práctica clínica.

Espero que este trabajo sea del agrado y utilidad para todos, tanto
docentes como estudiantes, para que avancen en el estudio de la
fisiología humana. Debo resaltar que, como tal, esta obra es objeto
de revisión y de comentarios, los cuales, desde ya, agradezco
inmensamente a los lectores me los hagan llegar, con el fin de
mejorarla en futuras ediciones.

14
NORMAS DE BIOSEGURIDAD

Un laboratorio o una práctica de cualquier asignatura, es un espacio


valioso de aprendizaje, pues permite, a través de la experiencia, la
adquisición de ciertas habilidades prácticas y actitudes, así como
consolidar los conceptos teóricos revisados en las clases. Para que lo
anterior se pueda llevar a cabo, se debe generar en el laboratorio un
ambiente de trabajo y aprendizaje respetuoso, amable y colaborativo
entre estudiantes y docentes.

Para lograr lo anterior se hace necesario el cumplimiento de ciertas


directrices, las cuales son de obligatorio cumplimiento tanto para
estudiantes como docentes y las cuales se describen a continuación:

1 Acatar las indicaciones y obser- 4 Traer a la práctica los diferentes


vaciones hechas por el docente materiales que se requieran
a cargo de la práctica y los auxi- para desarrollar la misma, los
liares de laboratorio. cuales se detallan en el aparta-
do “Materiales” y “Reactivos” de
2 La práctica debe ser leída y cada una de las prácticas.
preparada con anterioridad a la
fecha de realización de la 5 Mantener un comportamiento
misma. adecuado, tono de voz bajo y no
fomentar actos que afecten el
3 Es obligatorio el uso de ropa desarrollo normal de la práctica.
cómoda, bata, zapato cerrado,
cabello recogido para quienes 6 Colocar toda la atención reque-
tengan cabello largo y en las rida a las indicaciones y demos-
prácticas que así lo requieran, traciones que realice el docente
usar gafas de seguridad y guan- a cargo de la práctica. Ante
tes de látex desechables. cualquier duda sobre los proce-
dimientos a realizar, acudir y
preguntar al docente que está a
cargo de la misma.

15
7 Manipular el instrumental y equipos con cuidado para evitar su
daño. Cualquier daño causado a los equipos institucionales
deberá ser asumido por quien genere el daño.

8 Tomar nota en una libreta de apuntes de los resultados obtenidos


durante la práctica.

9 Retornar los equipos o instrumental utilizado en perfecto estado de


funcionamiento y aseo a los auxiliares de laboratorio.

16
PRÁCTICA No. 1
Retroalimentación positiva:
tiempo de sangrado y de coagulación

ADVERTENCIA
Si alguno de los participantes de la práctica presenta algún
diagnóstico médico o padece alguna condición clínica relacio-
nada con la coagulación de la sangre, o consume algún
 medicamento como Aspirina, Warfarina, Clopidogrel,
Rivaroxabán, Dabigatrán o cualquier otro medicamento que
afecte el proceso de coagulación, por favor informe al docente
encargado de la práctica.

OBJETIVOS:
• Definir el concepto de hemostasia y describir el proceso por
medio del cual un sangrado se detiene después de una punción
en un dedo.

• Reconocer la importancia clínica de los tiempos de sangrado y


de coagulación.

• Reconocer las condiciones clínicas en las cuales los tiempos


de sangrado y coagulación se ven aumentados.

• Describir las bases fisiológicas del proceso de coagulación y


sus alteraciones.

MATERIALES:

• Alcohol al 70% • Alfiler grande.


• Algodón. • Cronómetro.
• Lanceta para punción. • Guantes de látex
• Papel de filtro (absorbente). desechables.
• Portaobjetos de vidrio.

REACTIVOS:
No aplican.

17
INTRODUCCIÓN

El término “homeostasis” fue acuñado por el fisiólogo estadouniden-


se Walter Cannon en el año 1929, para referirse al “mantenimiento de
las condiciones casi constantes del medio interno”. Esta homeostasis
es garantizada gracias a la participación armónica de la mayoría de
los órganos. La gran mayoría de las variables fisiológicas no son un
número absoluto estático, sino un rango de valores (Cannon, 1929).
Ejemplo de ello tenemos variables fisiológicas como la temperatura
corporal, la frecuencia cardiaca, la tensión arterial, la frecuencia respi-
ratoria, las concentraciones de iones como el sodio, potasio y los
valores de pH plasmático, etc.

Para lograr mantener estos valores entre los rangos fisiológicos ade-
cuados, el cuerpo humano dispone de unos mecanismos de compen-
sación denominados “mecanismos de retroalimentación”, los
cuales se activan ante cualquier alteración de los valores fisiológicos
normales, con miras a corregir o retornar a la normalidad la variable
que se está alterando. Estos mecanismos de retroalimentación están
conformados por estructuras especializadas a nivel del sistema
nervioso central y periférico y mediante la liberación de hormonas.
Estos mecanismos actúan de dos formas:

Mecanismos de retroalimentación negativa. Es el más común en el


cuerpo humano. Este mecanismo consiste en que cuando una varia-
ble o factor fisiológico se aumenta o disminuye, inmediatamente el
sistema de control que lo regula, disminuye o aumenta su acción
respectivamente, es decir en sentido contrario al estímulo, con miras
a retornar la variable alterada a sus valores normales. Por ejemplo:
Cuando realizamos algún ejercicio físico, se aumenta el consumo de
oxígeno (O2) por parte del tejido muscular, trayendo como consecuen-
cia una disminución de la concentración de oxígeno en sangre y un
aumento en las concentraciones de dióxido de carbono (CO2) y lacta-
to. Ante esta situación, el sistema nervioso dispone de unas estructu-
ras especializadas llamadas quimiorreceptores, que al detectar estos
cambios activan mecanismos de corrección tales como: aumento de
la frecuencia cardiaca y respiratoria, para aumentar el ingreso de O2
al plasma y aumentar la expulsión de CO2 a través de los pulmones
(Hall, 2016).

18
Mecanismos de retroalimentación positiva. Este mecanismo
funciona como un “círculo vicioso”, es decir, la alteración de una varia-
ble, trae como consecuencia que se genere un efecto sobre dicha
alteración que potencie el efecto ejercido sobre la misma. El proceso
de coagulación, el shock hipovolémico súbito, el potencial de acción y
el trabajo de parto son algunos ejemplos de retroalimentación positiva
(Hall, 2016).

El término “hemostasia” hace referencia a los procesos que imple-


menta el organismo para evitar la pérdida de sangre durante una
hemorragia. La hemostasia involucra cuatro pasos a saber:

• Vasoconstricción.
• Formación del tapón plaquetario.
• Formación del coágulo sanguíneo.
• Fibrinólisis (Disolución del coágulo).

Cuando se presentan sangrados profusos ante pequeñas heridas o


se presentan de manera espontánea, estos se deben a alteraciones
de los anteriores procesos, especialmente en las paredes arteriales,
activación de las plaquetas o formación del coágulo (Komal, 2010).

En cuanto a los defectos de la coagulación podemos identificar dos


grandes clases:
a) Excesivo sangrado en los tejidos: Estos se deben principalmen-
te a lesiones de vasos de mayor calibre. Se presenta una demora
o ausencia en la formación del coágulo sanguíneo que no refuerza
el tapón plaquetario formado inicialmente. Esto se puede deber a
la ausencia de factores de la coagulación como ocurre en las
hemofilias, alteraciones hepáticas como la hepatitis, cirrosis o
deficiencia de vitamina K, que impiden la síntesis de factores de la
coagulación.

b) Trombosis: proceso en el cual se forman coágulos de sangre en


el interior de un vaso sanguíneo que no ha sido afectado (Ghai,
2012).

19
Existen varias pruebas para evaluar el adecuado funcionamiento
del proceso hemostático, entre las que se encuentra:

• Tiempo de sangrado.
• Tiempo de coagulación.
• Prueba del torniquete para evaluar la fragilidad capilar.
• Recuento de plaquetas.
• Tiempo de protrombina.
• Tiempo parcial de tromboplastina.
• INR entre otros.

En la práctica del día de hoy abordaremos las dos primeras pruebas


para evaluar el proceso de hemostasia, como mecanismo de retroali-
mentación positiva.

PROCEDIMIENTO:

Tiempo de sangrado (Método de Duke):

• Informe al examinado el procedimiento que le va a realizar.


• Ubique en posición sentada y cómoda a la persona a quien se le
va a realizar el procedimiento.

• Seleccione el pulpejo de uno de los dedos (índice o medio) de la


mano derecha y límpielo varias veces con un algodón impregnado
con suficiente alcohol al 70%.

• Utilizando la lanceta para punción, realice una punción con una


profundidad de 2 mm sobre el pulpejo del dedo seleccionado (Ver
Figura 1) y al mismo tiempo inicie el conteo del tiempo en el cronó-
metro.

20
Figura 1
Punción pulpejo del dedo con la lancet.

Fuente: Elaboración propia.

• Permita la salida de sangre desde la punción realizada. No


comprimir el dedo puncionado. (Figura 1)

• Remueva las gotas de sangre cada 30 segundos, con el borde


del papel absorbente, sin realizar presión sobre la punción.
Enumere el número de manchas dejadas en el papel cada vez
que se remueven las gotas de sangre. (Ver Figura 2)

Figura 2
Enumeración de las manchas de sangre retiradas con el papel
absorbente, desde la punción,

Fuente: Elaboración propia.

21
• Contabilice el tiempo hasta el momento en el cual se detiene el
sangrado (cuando no se logra retirar gota de sangre con el
papel de filtro). Exprese el resultado en minutos y segundos.

• Tiempo normal de sangrado: 1-5 minutos. De continuar el


sangrado posterior a un tiempo de 10 minutos, suspenda el
procedimiento, aplique una gasa o algodón sobre el sitio de
punción e informe del caso a su docente.

Tiempo de coagulación (Método de la gota):


• Informe al examinado el procedimiento que le va a realizar.

• Ubique en posición sentada y cómoda a la persona a quien se


le va a realizar el procedimiento.

• Seleccione el pulpejo de uno de los dedos (índice o medio) de


la mano derecha y límpielo varias veces con un algodón
impregnado con suficiente alcohol al 70%.

• Utilizando la lanceta para punción, realice una punción con una


profundidad de 2 mm sobre el pulpejo del dedo seleccionado
(Ver Figura 1).

• Presione el dedo puncionado con miras a obtener una gota


grande de sangre y colóquela sobre un portaobjeto de vidrio
(Ver Figura 3). Inicie el conteo del tiempo en el cronómetro.

Figura 3
Gota gruesa sobre portaobjetos y formación de fibras de fibrina.

Fuente: Elaboración propia.

22
• Con un alfiler grande, dibuje una letra o un símbolo sobre la
gota de sangre a intervalos de 30 segundos.

• Contabilice el tiempo al cual las fibras de fibrina se adhieren a


la punta del alfiler y se pueden retirar de la gota de sangre (Ver
Figura 3).

• El tiempo transcurrido desde la colocación de la gota de


sangre sobre el portaobjetos y la formación de las hebras de
fibrina, es el tiempo de coagulación.

CUESTIONARIO

• ¿Cuál es la importancia clínica de determinar el tiempo de


sangrado y el tiempo de coagulación?

• ¿Qué aspectos del proceso de la hemostasia se comparten


o son comunes durante la determinación del tiempo de
sangrado y de coagulación?

• ¿Qué elementos o procesos de la hemostasia son evalua-


dos por cada uno de ellos?

• ¿De qué factores depende el tiempo de sangrado y el


tiempo de coagulación?

• Mencione las condiciones en las cuales se aumenta el


tiempo de sangrado y el tiempo de coagulación.

• ¿Cuál es el mecanismo por medio del cual se utiliza el


Ácido acetilsalicílico como anticoagulante?

Artículo de refuerzo: (Sang et al., 2021)

Yaqiu Sang, Mark Roest, Bas de Laat, Philip G. de Groot, Dana Hus-
kens, Interplay between platelets and coagulation, Blood Reviews,
Volume 46, 2021, 100733, ISSN 0268-960X.

23
PRÁCTICA No. 2
Transporte de sustancias a través de
las membranas celulares.
Fragilidad osmótica de los glóbulos rojos

ADVERTENCIA
Si alguno de los participantes de la práctica presenta algún
diagnóstico médico o padece alguna condición clínica relacio-
nada con la coagulación de la sangre, o consume algún medi-
 camento como Aspirina, Warfarina, Clopidogrel, Rivaroxabán,
Dabigatrán o cualquier otro medicamento que afecte el proce-
so de coagulación, por favor informe al docente encargado de
la práctica.

OBJETIVOS:
• Definir el concepto de ósmosis, endosmosis y exosmosis.

• Definir el concepto de fragilidad osmótica de los eritrocitos y


describir la utilidad de la prueba.

• Explicar las razones que inducen la hemólisis de los glóbulos


rojos, cuando estos se exponen a soluciones hipotónicas.

• Explicar el efecto de una solución hipertónica sobre los glóbu-


los rojos.

MATERIALES:
• Seis (06) tubos de ensayo de vidrio de 1 cm x 7cm.
• Una escalerilla para tubos de ensayo con capacidad para al
menos 6 tubos de ensayo, o pedazo de icopor de 2 cm grosor x
5cm de ancho x 20cm de largo.
• Lápiz marcador de vidrio (Sharpie).
• Gotero de vidrio.
• Recipiente pequeño de vidrio.
• Alcohol al 70%
• Algodón.
• Guantes desechables de látex.

24
• Lanceta para punción.
• Solución salina (Cloruro de Sodio) al 0,9% (Una bolsa 500mL por
todos los estudiantes)
• Agua destilada (Una bolsa de 250 mL para todos los estudiantes).

REACTIVOS:
No aplican.

INTRODUCCIÓN

La membrana celular está conformada por una doble capa de lípidos,


dentro de la cual se encuentran proteínas que en su gran mayoría
cumplen funciones tanto estructurales como de transporte de sustan-
cias. Esta membrana separa el espacio intracelular del extracelular y
tiene la propiedad de ser semipermeable al agua y sirve un como
filtro, altamente selectivo, que controla la entrada de nutrientes y la
salida de productos de desecho. Adicionalmente, garantiza las
diferentes concentraciones de iones entre el espacio intracelular y el
extracelular (Hall, 2016).

El transporte de sustancias entre un espacio y otro, se da a través de


dos mecanismos básicos principales: La difusión y el transporte
activo, aunque estos dos procesos pueden presentar variaciones.
Cuando hablamos de difusión, hacemos referencia al proceso por
medio del cual las moléculas de una sustancia se mueven de un lado
a otro de una membrana semipermeable, gracias a su movimiento
aleatorio y a favor de su gradiente de concentración. La difusión
puede ser simple, cuando ocurre en las condiciones anteriormente
mencionadas, pero también puede ser facilitada, cuando intervienen
proteínas que requieren gasto energético para que el proceso se lleve
a cabo de una manera más rápida (Hall, 2016).

Cuando hablamos de transporte activo, hacemos referencia al paso


de las moléculas de una sustancia a través de la misma membrana
semipermeable, pero en contra de su gradiente de concentración,
gracias a la utilización de proteínas transportadoras que demandan
consumo de energía (Ghai, 2012).

25
El agua a pesar de ser hidrosoluble, pasa a ambos lados de la mem-
brana celular a través de las proteínas que sirven como canales y de
unas estructuras denominadas acuaporinas (poros exclusivos para el
agua). En virtud a que el agua puede difundir hacia ambos lados de la
membrana celular, cuando por alguna razón la concentración de
alguno de los espacios intracelular o extracelular se modifica, trae
como consecuencia el movimiento de agua en el sentido requerido,
con miras a equilibrar o garantizar las concentraciones adecuadas. En
condiciones normales fisiológicas, el movimiento del agua es nulo,
manteniendo constantes los respectivos volúmenes (Arrazola, 1994).

El movimiento de agua en algún sentido trae como consecuencia que


la célula se hinche (por aumento del volumen de agua) o se contraiga
(por disminución del volumen de agua). Este movimiento neto de
agua, como consecuencia de los cambios de concentración de los
diferentes espacios fisiológicos, recibe el nombre de ósmosis. El
objetivo de dicho movimiento de agua es equilibrar las concentracio-
nes a lado y lado de la membrana. Otro concepto que hay que recor-
dar aquí, es el de presión osmótica, que hace referencia a la canti-
dad de presión que se requiere ejercer, casi siempre en sentido
contrario, para detener la ósmosis (Hall, 2016).

Los valores de concentración en los diferentes espacios celulares se


pueden expresar en las siguientes unidades: Osmolalidad: Es el
peso molecular-gramo de un soluto osmóticamente activo. Ej: 180g
de glucosa (peso molecular de la glucosa), son equivalentes a 1
osmol de glucosa, pues la glucosa no se disocia en iones. Pero si un
soluto se disocia en 2 iones, un peso molecular-gramo del soluto, se
convertirá en 2 osmoles, pues el número de partículas osmóticamente
activas es ahora el doble, en comparación con el caso del soluto que
no se disocia. Osmolaridad: Es la concentración expresada en osmo-
les por litro de solución (Osm/L), en lugar de hacerlo por kilogramo de
agua (Ghai, 2012).

Cuando el proceso de ósmosis se lleva a cabo hacia el interior de la


célula, esta empieza a aumentar su volumen intracelular, hasta tal
punto que, de no resolverse, puede traer como resultado la explosión
de la misma o lisis de la célula. Si analizamos el fenómeno anterior,
pero en sentido contrario, la célula empieza a perder agua y a dismi-
nuir su volumen intracelular, hasta el punto de contraerse al máximo,
fenómeno que recibe el nombre de crenación.

26
En condiciones normales la hemólisis de los glóbulos rojos empieza a
tonicidades de 0,48%, por lo tanto, no se observa hemólisis en solu-
ciones con tonicidades superiores a 0,5% (Ghai, 2012).

PROCEDIMIENTO:

• Enumere los tubos de ensayo del número 1 al número 6.

• Utilizando el gotero de vidrio, coloque el número de gotas de


solución salina al 0,9% en cada uno de los tubos, tal y como se
muestra en la Tabla 1.

• Lave el gotero de vidrio con abundante agua y séquelo com-


pletamente. El gotero de vidrio debe lavarse y secarse comple-
tamente después de ser utilizado en cada tubo de ensayo.

• Utilizando nuevamente el gotero de vidrio, adicione ahora el


número de gotas de agua destilada a cada uno de los tubos, tal
y como se muestra en la Tabla 1. El gotero de vidrio debe
lavarse y secarse completamente después de ser utilizado en
cada tubo de ensayo.

• Mezcle el contenido de cada tubo, tapando el mismo con el


pulgar y volteándolo varias veces. Marque la tonicidad de la
solución contenida en cada tubo, según lo mostrado en la
Tabla 1.

• Informe al examinado el procedimiento que le va a realizar.

• Limpie con algodón impregnado de alcohol al 70% el pulpejo


de uno de los dedos (índice o medio) de la mano derecha, de
la persona a evaluar.

• Realice una punción en la zona anteriormente mencionada con


la lanceta de punción, con una profundidad de 2 mm (Ver
Figura 4).

• Dígale al evaluado que haga presión sobre el dedo puncionado


y descargue una gota de sangre dentro de cada uno de los 6
tubos de ensayo (Ver Figura 4). Una vez terminado, aplique un
algodón sobre el sitio de punción y ejerza presión sobre el
mismo.

27
Figura 4
Punción pulpejo del dedo, recolección gota de sangre y colocación
en los tubos de ensayo.

Fuente: Elaboración propia.

• Utilizando guantes de látex desechables, tape con el pulgar


cada uno de los tubos de ensayo y mezcle el contenido del
tubo volteándolo SUAVEMENTE Y SOLAMENTE UNA VEZ.

• Deje los tubos de ensayo con la preparación en absoluto


reposo en la escalerilla para tubos de ensayo, durante una
hora.

• Posterior a la hora, observe el grado de hemólisis de cada tubo


de ensayo, sosteniendo la escalerilla para tubos de ensayo a
la altura de los ojos y colocando un papel blanco detrás de los
mismos.

28
Tabla 1
Preparación de las soluciones para evaluar la fragilidad osmótica
de los glóbulos rojos

Tubo de ensayo # 1 2 3 4 5 6
# gotas NaCl 0,9% 25 15 13 10 8 0
# gotas agua des�lada 0 10 12 15 17 25
Tonicidad del tubo (%) 0,9 0,54 0,47 0,36 0,29 0

Nota: Utilice el mismo gotero de vidrio y lávelo y séquelo completamente después


de utilizarlo para la solución salina y el agua destilada en cada tubo. Esto garanti-
zará que el volumen de todas las gotas, sea igual en los diferentes tubos.

OBSERVACIÓN Y RESULTADOS:

• El grado de hemólisis se evalúa observando el color rojo del sobre-


nadante a lo largo de los tubos 1 (solución salina 0,9%) al 6 (agua
destilada).

• En los tubos de ensayo donde no se produce la hemólisis, los


glóbulos rojos se decantarán en el fondo del tubo, como un punto
rojo y el sobrenadante será transparente.

• Si se presenta algún grado de hemólisis, la solución se teñirá de


rojo (Hemoglobina) y algunos glóbulos rojos no afectados se
decantarán en el fondo del tubo de ensayo. El color de la solución
se incrementará a medida que disminuye la tonicidad de la solu-
ción.

• En los tubos donde se presenta la hemólisis completa, la solución


se teñirá uniformemente de rojo, sin la presencia de glóbulos rojos
en el fondo del tubo de ensayo.

• Observe cuidadosamente cada uno de los tubos e identifique el


número del tubo y la tonicidad a la cual se inicia la hemólisis, así
como el, o los tubos donde se presenta la hemólisis completa de
todos los glóbulos rojos.

29
CUESTIONARIO

• ¿Cuál es la diferencia entre los términos fragilidad y hemóli-


sis?

• ¿Cuál es la diferencia entre ósmosis y presión osmótica?


• Describa el comportamiento de los glóbulos rojos en condi-
ciones de hipotonicidad e hipertonicidad.

• Mencione 3 condiciones en las cuales se vea aumentada la


fragilidad eritrocitaria.

Artículo de refuerzo: (Aseel Sh. Abdullah, Yamama Zuhair, Alaa


Anwer, 2021)

Aseel Sh. Abdullah, Yamama Zuhair, Alaa Anwer, Israa Ghassan


Zainal. Osmotic Fragility And Hemolysis % Of HumanErythrocytes
Β-Thalassemia Major AndAnemiaPatientsCompared To Healthy Sub-
jects. Sys Rev Pharm 2021;12(2):237-241

30
PRÁCTICA No. 3
Electrocardiografía

OBJETIVOS:
• Conocer los instrumentos requeridos para la toma de un elec-
trocardiograma.

• Interpretar el trazado normal de un electrocardiograma.

MATERIALES:
• Electrocardiógrafo o polígrafo digital POWERLAB.
• Electrodos con gel o sustancia conductora.
• Algodón.
• Alcohol al 70%.
• Camilla.
• Máquina rasuradora desechable.
• Toallas de papel.

REACTIVOS:
No aplican.

INTRODUCCIÓN

El corazón es un músculo hueco conformado por cuatro cavidades,


las cuales se contraen de manera armónica y rítmica para poder man-
tener el bombeo adecuado de sangre y así suministrar oxígeno,
nutrientes y demás elementos disueltos en la sangre a todo el orga-
nismo. Para poder llevar a cabo este proceso, el corazón cuenta con
un sistema especializado de autoexcitación, el cual permite generar
impulsos eléctricos de manera rítmica, para que estos a su vez
despolaricen los cardiomiocitos, para su posterior contracción (Hall,
2016).

Este sistema especializado está compuesto por las siguientes estruc-


turas:

31
• Nodo Sinusal o Sinoauricular (SA), el cual actúa como marcapaso
fisiológico del corazón.

• Vías Internodulares o Internodales, las cuales diseminan el impul-


so eléctrico a las aurículas.

• Nodo Aurículoventricular, en donde el impulso eléctrico se detiene


momentáneamente antes de ingresar a los ventrículos.

• Haz Aurículovrenticular.

• Ramas derecha e izquierda del Haz de His.

• Sistema de Purkinje, el cual termina de diseminar el impulso eléc-


trico a todo lo largo y ancho de los ventrículos.

El corazón está inervado por las las dos divisiones el sistema nervioso
autónomo: Simpática y Parasimpática. El estímulo simpático aumenta
la frecuencia cardiaca, a fuerza de contracción y el gasto cardiaco.
Por otra parte, el efecto parasimpático genera un efecto contrario,
disminuye la frecuencia cardiaca, la fuerza de contracción y el gasto
cardiaco.

Cuando el impulso cardiaco atraviesa todo el músculo cardiaco, parte


de esta corriente también se disemina hacia los tejidos superficiales
del cuerpo, permitiendo que dicha corriente pueda ser registrada colo-
cando electrodos sobre la superficie del mismo. El registro gráfico de
estos potenciales eléctricos recibe el nombre de electrocardiograma
(Hall, 2016).

El trazado norma de un electrocardiograma se compone de las


siguientes ondas:

• Onda P: Correspondiente a la despolarización de las aurículas.


• Complejo QRS: Corresponde ala despolarización de los ventrículos.
• Onda T: Correspondiendo a la repolarización de los ventrículos.

Segmentos: Que hacen referencia a fragmentos de trazado electro-


cardiográfico que no presenta alteración en su potencial, es decir, es
isoeléctrico. Entre los segmentos más importantes tenemos:

32
o Segmento P-R.
o Segmento S-T.

Intervalos: Que hacen referencia a fragmentos del trazado que inclu-


ye segmentos y ondas. Entre los intervalos más importantes tenemos:

o Intervalo P-R.
o Intervalo Q-T.
o Intervalo R-R.

Figura 5
Ondas, Segmentos e Intervalos de un electrocardiograma normal.

Fuente: Elaboración propia.

Para registrar las ondas electrocardiográficas, los equipos actuales


tienen establecidas unas derivaciones o conexiones eléctricas, que
reciben el nombre de:

• Derivaciones bipolares: Designadas por DI, DII y DIII.

• Derivaciones Monopolares: aVR, aVF, aVL y las derivaciones


precordiales V1-V6.

33
Figura 6
Triangulo de Einthoven y sus derivaciones.

Fuente: Elaboración propia.

Los actuales electrocardiógrafos grafican el trazado en un papel


milimetrado el cual está calibrados de la siguiente manera: En el eje
horizontal se grafica la variable tiempo (duración) y para esto, cada
milímetro del papel equivale a 0.04 s y su velocidad de registro en
adultos es de 25mm/s y en población pediátrica es de 50mm/s. En el
eje vertical se grafica la variable voltaje (amplitud) y para esto, cada
10mm equivalen a 1mV.

Figura 7
Calibración del papel electrocardiográfico.

Fuente: Elaboración propia.

34
Los valores normales para las ondas, complejos, segmentos e inter-
valos de un electrocardiograma se encuentran relacionadas en la
Tabla 2.

Tabla 2
Valores normales de ondas y complejos en el EKG

Aspecto Amplitud Normal Duración Normal


Onda P < 0,25 mV. <0.12 s.
Intervalo PR Isoeléctrico 0,12 -0,20 s.
Onda Q < 25% Onda R < 0,04 s.
Complejo QRS Variable < 0,12 s.
Segmento ST Isoeléctrico No aplica
Hombres: < 0,2 mV (V2-V3)
Mujeres: < 0,15 mV. (V2-V3)
Intervalo QT No aplica < 0,45 s.
Onda T Menor al QRS que lo precede No aplica

Fuente:(Lara Prado, 2016)

PROCEDIMIENTO:

• Informe al examinado el procedimiento que le va a realizar.

• Solicítele al examinado que se despoje de todos los elementos


metálicos tales como: relojes, joyas, aretes, piercings, mone-
das, hebillas de correas, teléfono celular y demás elementos
que puedan ser conductores de la electricidad.

• Indíquele al examinado que se descubra el tórax anterior, se


retire los zapatos y se acueste sobre la camilla en posición de
decúbito supino. Cerciórese que las muñecas y los tobillos
queden al descubierto.

• Procure que esté lo más relajado posible y que la temperatura


de la habitación sea agradable, pues el temblor muscular
puede interferir la señal eléctrica.

35
• Limpie con un algodón impregnado con alcohol al 70%, las
muñecas, los tobillos y los sitios del tórax anterior donde colo-
cará los electrodos.
• Coloque los electrodos (impregnados de gel o pasta conducto-
ra) que van en las muñecas, en los tobillos y en la zona anterior
del tórax, como se muestra en las Figuras 8 y 9. Evite colocar-
los sobre prominencias óseas, articulaciones o zonas con
mucho pelo. De ser necesario, rasure la zona donde aplicará
los electrodos, para evitar que el pelo afecte el registro.

• Conecte los cables de los electrodos según las convenciones


que el equipo tenga para cada uno de ellos. Asegúrese que los
cables estén conectados al electrodo que les corresponde.

• Dígale al examinado que se quede lo más quieto posible, pues


va a iniciar el registro.

• Inicie el registro del electrocardiograma, oprimiendo el botón


START o INICIO según corresponda en el equipo de registro
que esté utilizando.

• Observe que la calidad del trazado sea la adecuada, es decir


que sea un trazado limpio y sin interferencias. Si la calidad no
es adecuada, detenga el registro y compruebe que los electro-
dos estén bien adheridos a la piel del examinado y tengan
suficiente gel o pasta conductora y repita el registro.

• Una vez terminado el registro, retire el papel con el mismo y


apague el electrocardiógrafo. En los equipos de poligrafía
digital como el POWERLAB, es necesario dejar que el registro
se haga durante al menos 20 segundos y posteriormente se
oprime el botón “STOP” o DETENER.

• Retire los cables y electrodos del examinado, limpie la piel con


las toallas de papel y asegúrese de retirar todo el gel o pasta
conductora.

• Rotule el trazado electrocardiográfico obtenido con el nombre,


edad, sexo del examinado, así como la fecha y hora del regis-
tro.

36
• Reúnase con sus compañeros de grupo e identifiquen las
ondas, complejos, segmentos e intervalos del electrocardio-
grama.
• Para el trazado electrocardiográfico tomado, determine los
siguientes aspectos: Ritmo, Frecuencia cardiaca, Morfología y
duración de ondas y complejos, Eje cardiaco, Presencia de
bloqueos, Presencia de signos de isquemia.

Figura 8
Ubicación de derivaciones del Electrocardiograma para polígrafo
digital.

Fuente: Tomado de (ADInstruments, 2023)

37
Figura 9
Derivaciones precordiales del Electrocardiograma.

Fuente: Elaboración propia.

V1: Cuarto espacio intercostal con línea paraesternal derecha.


V2: Cuarto espacio intercostal con línea paraesternal izquierda.
V3: Punto medio entre V2 y V4.
V4: Quinto espacio intercostal con línea media clavicular izquierda.
V5: Quinto espacio intercostal con línea axilar anterior izquierda.
V6: Quinto espacio intercostal con línea axilar media izquierda.

CUESTIONARIO

• ¿Cuáles son los cuidados que se deben tener al tomar un


electrocardiograma?

• ¿Qué fenómeno fisiológico evalúa el electrocardiograma?


• ¿Cuál es la utilidad clínica de un trazado electrocardiográfi-
co?

• ¿En qué tipo de pacientes o sintomatología se sugiere


tomar un electrocardiograma?

Artículo de refuerzo: (Aseel Sh. Abdullah, Yamama Zuhair, Alaa


Anwer, 2021)

Aseel Sh. Abdullah, Yamama Zuhair, Alaa Anwer, Israa Ghassan


Zainal. Osmotic Fragility And Hemolysis % Of HumanErythrocytes
Β-Thalassemia Major AndAnemiaPatientsCompared To Healthy Sub-
jects. Sys Rev Pharm 2021;12(2):237-241

38
PRÁCTICA No. 4
Electrocardiografía

OBJETIVOS:
• Definir los diferentes signos vitales que se miden en la práctica
clínica.
• Aprender los métodos que existen para la toma de los signos
vitales.
• Contrastar los valores obtenidos en las mediciones, con los
valores normales establecidos internacionalmente para los
signos vitales.

• Definir los conceptos de taquicardia, bradicardia, hipotensión e


hipertensión arterial, taquipnea, fiebre y sus correlaciones clíni-
cas.

MATERIALES: REACTIVOS:
No aplican.
• Fonendoscopio con campana.
• Tensiómetro aneroide.
• Termómetro digital o de mercurio.
• Reloj de pulsera.

INTRODUCCIÓN

Pulso:

La determinación del pulso es parte fundamental del examen físico


que se le realiza a una persona, por parte del personal de salud, pues
este nos refleja de forma indirecta el funcionamiento del sistema
cardiovascular. El pulso se define como la percepción externa, a
través de la palpación suave, de la expansión rítmica de las paredes

39
de las arterias, que se localizan a nivel más superficial en diferentes
puntos del cuerpo. Dicha expansión se debe a la transmisión de las
ondas de presión que se generan en el sistema cardiovascular, por la
contracción y relajación del corazón. (Hall, 2016)

El pulso puede determinarse en varios sitios a saber: zona lateral del


cuello (pulso carotídeo), zona anterior del extremo distal y lateral del
antebrazo (pulso radial), zona medial del brazo (pulso braquial),
zona antero-medial del tarso (pulso pedio). Las características que
se deben evaluar durante la determinación del pulso son: El ritmo, la
frecuencia y la amplitud (Pal, 2010).

El ritmo del pulso hace referencia al constante espaciamiento (en


tiempo) entre una y otra pulsación percibida. Cuando esto ocurre,
decimos que el pulso es regular, pero cuando el tiempo transcurrido
entre una y otra pulsación no es el mismo, decimos que el pulso es
irregular o arrítmico.

En cuanto a la frecuencia del pulso, decimos que esta es el número


de veces que percibimos la onda de pulso por unidad de tiempo, la
cual usualmente es durante un minuto. Se considera normal, cuando
la frecuencia del pulso se encuentra entre 60 -100 pulsaciones por
minuto. Los valores normales del pulso según la edad, los que se
relacionan en la Tabla 3 (Keith Kleinman, Lauren McDaniel, 2020).

Tabla 3
Valores normales de frecuencia cardiaca, según grupo de edad

Frecuencia cardiaca
Grupo de edad (la�dos/minuto)
0-3 meses 110-160
3-6 meses 110-150
6-12 meses 90-130
1-3 años 80-125
3-6 años 70-115
6-12 años 60-100
> 12 años 60-100

Fuente: (Keith Kleinman, Lauren McDaniel, 2020)

40
La amplitud del pulso es el grado de expansión que sufre la pared de
la arteria, durante cada onda de pulso. Desde el punto de vista fisioló-
gico, la amplitud de la onda de pulso debe ser igual en ambas extremi-
dades.

Se pueden presentar alteraciones en cuanto a la amplitud del pulso,


entre las que encontramos: Pulso parvus (amplitud disminuida);
Pulso alternante: Alterna una onda de pulso de gran amplitud, con
una de pequeña amplitud; Pulso bíferiens: Pulso con dos picos de
onda de pulso; Pulso bigémino: Una onda normal acompañado de
una onda prematura; Pulso paradójico: Marcada disminución de la
amplitud de la onda pulsátil durante la inspiración y un aumento de la
amplitud durante la espiración; Pulso en martillo de agua (Corri-
gan): Presenta una amplitud mayor de la esperada, un rápido aumen-
ta de una onda estrecha, acompañado de un descenso súbito en la
amplitud (Ball, 2019). Ver Figura 10.

Tensión arterial:

La tensión arterial representa la presión que ejerce la sangre sobre


las paredes de las arterias, la cual le permite llegar a las diferentes
partes del organismo a través del sistema cardiovascular. El sistema
cardiovascular incluye dentro de sus estructuras arterias grandes
como la aorta y varias de sus ramas como las carótidas, las subcla-
vias, etc. que tienen como característica fundamental que sus pare-
des son bastante elásticas. Esta capacidad les permite a las arterias
generar una energía potencial durante la contracción del corazón, la
cual se disipa durante la relajación cardiaca. Las arteriolas que son
las partes más distales del sistema cardiovascular actúan como vasos
de resistencia o de capacitancia para regular la presión ejercida sobre
las paredes arteriales distribuyendo la sangre hacia los capilares.
Gracias a la elasticidad de los grandes vasos arteriales, sumado a la
resistencia que ofrecen las arterias de menor calibre y los capilares,
garantizan que el flujo alternante que se genera por la sístole y diásto-
le ventricular, se transforme en un flujo continuo y permanente. En
cuanto al lecho venoso, el cual presenta una presión menor que el
arterial, este transporta la sangre desde los diferentes tejidos corpora-
les y los regresa al corazón, garantizando así que el gasto cardiaco
sea el adecuado para mantener una presión sanguínea adecuada.
(Keith, LM, Dalley, 2017).

41
Figura 10
Registros de los diferentes tipos de pulso.

Fuente: Adaptado de (Ball, 2019)

42
Los ruidos de Korotkoff:
En 1905, Nikolai Korotkoff mientras examinaba a sus pacientes
descubrió unos sonidos que se presentaban durante la auscultación
de las arterias y que en la actualidad llevan su nombre. Estos ruidos
se generan por la turbulencia que se genera en el flujo sanguíneo
después de liberar la presión que se está ejerciendo con el brazalete
del tensiómetro sobre la arteria. En condiciones normales, la sangre
circula dentro de las arterias en una misma dirección y su movimiento
adquiere unas características laminares y silentes (silenciosos). Este
movimiento de la sangre al interior de un tubo cerrado, también
presenta otra característica y es que la sangre que está en el centro
del flujo sanguíneo se mueva a una mayor velocidad, comparada con
la sangre que está en contacto con las paredes de las arterias (pues
esta última tiene mayor rozamiento por las paredes de las arterias)
(Mahlon H. Delp; Robert T. Manning, 1970).

Cuando el flujo sanguíneo atraviesa una arteria con un diámetro que


se ha reducido bruscamente, el flujo laminar que traía se altera en su
totalidad, generando así que la sangre tome diversas direcciones y
forme una turbulencia o remolino dentro de esa porción del vaso
sanguíneo. Este fenómeno que se presenta en la sangre hace que
pierda no solo su cualidad de ser laminar, sino que también deja de
ser silente, permitiendo así ser escuchado por medio de un fonendos-
copio. Dicho sonido presentará diferentes intensidades del sonido
que produce dependiendo del grado de obstrucción que se esté
presentando al paso de la sangre. Precisamente, este fue el fenóme-
no que describió Korotkoff en sus experimentos. Para poder percibir
estos ruidos, la mejor forma es cuando realizamos la toma de la
tensión arterial por el método auscultatorio. Este método se realiza
mediante el uso de un tensiómetro ya sea de mercurio o aneroide
(aire). El tensiómetro debe colocarse alrededor del brazo y llenarse
con aire hasta que la presión obstruya o cierre la arteria braquial impi-
diendo así la circulación de la sangre. Una vez alcancemos la presión
necesaria para cerrar la arteria, colocaremos el fonendoscopio sobre
la arteria antecubital y empezamos a desinflar el tensiómetro de una
forma lenta y constante. Tan pronto como la presión que se está ejer-
ciendo sobre la arteria sea ligeramente menor a la presión sistólica, el
flujo represado antes de la obstrucción generada por el brazalete,
vence la obstrucción que este está haciendo y el flujo sanguíneo
empieza a generar una turbulencia que golpea las paredes del vaso
sanguíneo. El primer ruido se escuchará como un “tump” de caracte-
rísticas graves, y la presión que se esté registrando sobre el manóme-

43
tro, me indicará el valor de la presión sistólica, la cual debe estar, en
condiciones normales, por debajo de 130 mmHg. Luego seguimos
desinflando el brazalete de forma lenta y constante, permitiendo así
que la arteria vaya aumentando su diámetro y se escuchará que el
sonido se va tornando más agudo y disminuyendo su intensidad hasta
que estos desaparecen pues el diámetro del vaso sanguíneo ha recu-
perado su calibre normal y el flujo sanguíneo recupera sus caracterís-
ticas de ser laminar y silente. Cuando desaparecen los ruidos, la
presión que esté registrando el manómetro corresponderá a la
mínima presión del sistema, que es la presión diastólica que, en
condiciones normales, debe estar por debajo 85mmHg (Mahlon H.
Delp; Robert T. Manning, 1970).

Los valores establecidos para la tensión arterial, acorde con la Socie-


dad Internacional de Hipertensión, son los que se relacionan en la
Tabla 4.

Tabla 4
Clasificación de tensión arterial
Presión sistólica Presión diastólica
Categoría (mmHg) (mmHg)
Normal < 130 y/o <85
Normal alta 130-139 y/o 85-89
Hipertensión Grado I 140-159 y/o 90-99
Hipertensión Grado II ≥160 y/o ≥100

Fuente: (Unger et al., 2020)

Frecuencia respiratoria:
Se define como frecuencia respiratoria, el número de veces que el
tórax se expande durante un minuto. La expansión del tórax obedece
a las dos fases del proceso respiratorio que son la inspiración y la
espiración. La respiración es un proceso mixto, es decir, parte se
realiza de forma voluntaria y la gran mayoría se realiza de forma invo-
luntaria. Para realizar adecuadamente dicho proceso, la persona
debe utilizar los músculos del tórax que se ven involucrados en el
mismo. Los músculos respiratorios se pueden clasificar en dos
clases:

44
Músculos inspiratorios: Diafragma (principal), Intercostales externos,
serratos anteriores, Esternocleidomastoideo y Escalenos.

Músculos espiratorios: Intercostales internos, Transversos torácicos y


oblicuos del abdomen (Hall, 2016).

La inspiración es un proceso activo, pues demanda la contracción de


la musculatura, trayendo como consecuencia un aumento del diáme-
tro y volumen de la cavidad toráxica, generando así una presión nega-
tiva o de succión, comparada con la presión atmosférica, lo que
permite que el aire ingrese a los pulmones. Por su parte, la espiración
es un proceso pasivo, pues demanda más relajación de la musculatu-
ra, trayendo como consecuencia una disminución del diámetro y volu-
men de la cavidad torácica, generando así una presión superior a la
presión atmosférica y de esta manera expulsando el aire de los
pulmones (Hall, 2016).

Los valores normales para la frecuencia respiratoria según la OPS, se


relacionan en la Tabla 5.

Tabla 5
Valores normales de frecuencia respiratoria, según grupo de edad
Frecuencia respiratoria
Grupo de edad (respiraciones/minuto)
0-3 meses 30-60
3-6 meses 30-45
6-12 meses 25-40
1-3 años 20-30
3-6 años 20-25
6-12 años 14-22
> 12 años 12-18

Fuente: (Keith Kleinman, Lauren McDaniel, 2020)

Una frecuencia respiratoria por encima de los valores normales esta-


blecidos para la edad se denomina taquipnea y una disminución se
denomina bradipnea.

45
Temperatura:
La temperatura es el grado de calor o frío que una persona experi-
menta como consecuencia del balance entre la producción y pérdida
del mismo. La temperatura corporal proviene de las reacciones
bioquímicas exotérmicas que se llevan a cabo constantemente dentro
de nuestro cuerpo. Esta temperatura garantiza el normal funciona-
miento de los órganos y tejidos. Gracias a las propiedades del agua
contenida en la sangre, el calor producido en el interior, se va distribu-
yendo por todo el cuerpo y disipando finalmente hacia el exterior, con
miras a que el valor de temperatura se mantenga dentro de valores
estables. Los seres humanos son clasificados como homeotermos,
que significa que mantienen su calor corporal en valores muy esta-
bles, a pesar de los cambios de temperatura del medio ambiente (B.
Pharm, 2015).

Los valores normales de temperatura corporal se encuentran entre 36


֯C-37 ֯C. Cualquier valor por encima de 37 ֯C, se denomina hiperter-
mia o fiebre (Este último término es utilizado generalmente cuando el
aumento de la temperatura se debe a procesos infecciosos), y si está
por debajo de 37 ֯C, se denomina hipotermia (B. Pharm, 2015).

La temperatura corporal se puede medir en varias partes: Boca, axila


y recto. La temperatura axilar es en promedio 1 ֯C menor a la tempera-
tura oral y esta última es 0,5 ֯C – 1 ֯C menor que la temperatura rectal.

PROCEDIMIENTO:

• Informe al examinado el procedimiento que le va a realizar.

• Ubique a la persona a examinar en una posición sentada y


cómoda por al menos 5 minutos.

• Ubicar el pulso carotídeo: Coloque los dedos índice y medio en


el borde posterior del ala (derecha o izquierda) del cartílago
tiroides. Desplace los dedos en dirección posterior, hacia el
borde anterior del músculo esternocleidomastoideo. En el
punto medio de dicho trayecto, comprima suavemente con los
dos dedos y sienta la onda de pulso de la arteria carótida.

• Cuente el número de pulsaciones durante un minuto.

46
• Ubicar el pulso radial: Coloque los dedos índice y medio en el
punto medio entre la apófisis estiloides del radio y el tendón del
músculo flexor radial del carpo. Comprima suavemente con los
dos dedos hasta que perciba la onda de pulso de la arteria
radial.

• Cuente el número de pulsaciones durante un minuto. El resul-


tado obtenido corresponde a la frecuencia de pulso.

• Registre el valor obtenido.

Tensión arterial:

Método palpatorio:

• Informe al examinado el procedimiento que le va a realizar.

Colocar el brazo izquierdo sin ropa que comprima.

• Sentar al evaluado cómodamente (posición recomendada para


la toma habitual) o bien recostarse, poniendo el brazo donde
se vaya a medir la TA apoyado y a la altura del corazón. Espe-
rar en esta posición 5 minutos.

• Seleccionar el brazalete adecuado: Se recomienda que el


ancho del brazalete sea de un 40% del largo del brazo (medido
desde el acromion hasta el olécranon), de la persona a exami-
nar. Ver Tabla 6.

47
Tabla 6
Dimensiones recomendadas del brazalete, según circunferencia
braquial

Circunferencia Ancho cámara Largo cámara


Edad del brazo (cm) neumá�ca (cm) neumá�ca (cm)
Escolar 22 9 18
Adolescente 26 10 24
Adulto 34 13 30
Adulto Mayor 44 16 38

Fuente: (Tagle, 2018)

• Colocar el brazalete sobre el brazo (preferiblemente el izquier-


do), teniendo en cuenta que el borde inferior del brazalete
quede a unos 2-3 cm por encima de la fosa cubital (pliegue del
codo).

• Localice el pulso radial en el antebrazo donde ha colocado el


brazalete (mano izquierda para nuestro caso).

• Sin dejar de palpar el pulso radial, cierre la válvula de la perilla


y empiece a inflar el brazalete, con incrementos de aproxima-
damente 20 mmHg en cada insuflada, hasta que deje de
palpar el pulso radial. Una vez deje de percibir el pulso radial,
insufle un poco más de aire hasta unos 10-20 mmHg.

• Abra suavemente la válvula de la perilla para permitir que el


aire salga del brazalete. El desinfle debe ser a 2-5 mmHg por
segundo. Registre el valor de la presión en el manómetro a la
cual usted vuelve a percibir el pulso radial. Este valor corres-
ponde a la Presión de Obliteración de Pulso (POP) o presión
sanguínea sistólica.

• Registro el valor obtenido.

NOTA: Este método solo permite medir la presión sistólica.

48
Método auscultatorio:

• Informe al examinado el procedimiento que le va a realizar.

• Colocar el brazo izquierdo sin ropa que comprima.

• Sentar al evaluado cómodamente (posición recomendada para la


toma habitual) o bien recostarse, poniendo el brazo donde se vaya
a medir la TA apoyado y a la altura del corazón. Esperar en esta
posición 5 minutos.

• Seleccionar el brazalete adecuado: Se recomienda que el ancho


del brazalete sea de un 40% del largo del brazo (medido desde el
acromion hasta el olécranon), de la persona a examinar. Ver Tabla
6.

• Colocar el brazalete sobre el brazo (preferiblemente el izquierdo),


teniendo en cuenta que el borde inferior del brazalete quede a
unos 2-3 cm por encima de la fosa cubital (pliegue del codo).

• Calcular la presión máxima del brazalete (PMB), la cual se calcu-


la de la siguiente manera: PMB = POP + 30mmHg. Esta será la
máxima presión a la cual se debe inflar el brazalete, cuando esta-
mos midiendo la presión sanguínea por el método auscultatorio.

• Colocar la campana del fonendoscopio sobre la arteria braquial


(parte superomedial de la fosa cubital). En este momento no debe
escucharse ruido alguno pues la arteria está ocluida.

• Abra lentamente la válvula de la perilla, para permitir que salga


aire y el brazalete se empiece a desinflar. El desinfle debe ser a
2-5 mmHg por segundo.

• Una vez se empieza a disminuir la compresión sobre la arteria


braquial, se llega a un punto en el que se escucha el primer ruido
de Korotkoff. Registre la presión del manómetro, en la cual escu-
chó el primer ruido, pues dicha presión corresponde a la presión
sistólica.

49
• A medida que la presión del brazalete va disminuyendo, los soni-
dos se vuelven más fuertes y después disminuyen gradualmente
hasta que ocurre una disminución súbita de la intensidad (V ruido),
o desaparecen. En este momento registre la presión del manóme-
tro, pues dicha presión corresponde a la presión diastólica.

• Registre el valor obtenido

• Repetir el procedimiento colocando al examinado en posición de


bipedestación y decúbito supino.

• Compare los valores obtenidos en cada posición y por cada


método y discútalos con sus compañeros de grupo.

Después de este punto, se pueden escuchar algunos ruidos muy


débiles, los cuales desaparecen 5-10 mmHg más abajo. La Sociedad
Americana de Cardiología, recomienda oficialmente usar el punto de
desaparición de los ruidos, como el valor de la presión diastólica.

Ocasionalmente no hay desaparición de los ruidos, los cuales se


pueden seguir escuchando hasta que la presión en el esfigmomanó-
metro llega hasta cero. Este fenómeno ha dado lugar a muchos infor-
mes equivocados de pacientes, quienes parecieran “no tener presión
diastólica”, lo cual es ilógico. El error consiste en no registrar la
presión diastólica en el punto en el cual ocurre un cambio súbito en la
intensidad de los ruidos de Korotkoff (Mahlon H. Delp; Robert T. Man-
ning, 1970).

Una condición clínica muy frecuente en personas adultas mayores es


la presencia de hipotensión postural u ortostática, que consiste en
una disminución en las cifras tensionales al colocarse una persona de
pie, después de estar un tiempo acostado o sentado. Para determinar
esta condición debe medirse la tensión arterial al minuto y a los cinco
minutos después de colocarse de pie. Si se presenta una disminución
de la tensión sistólica > 20 mmHg y/o de la tensión diastólica > 10
mmHg, se confirma el diagnóstico de hipotensión ortostática. (Ma-
hlon H. Delp; Robert T. Manning, 1970).

50
Frecuencia respiratoria:

• Coloque al examinado en posición sentada o decúbito supino,


por al menos 5 minutos.

• Sin alertar al examinado (hágale preguntas sobre algún tema,


esto permitirá que el examinado respire normalmente, sin hacer
inspiraciones o espiraciones forzadas), cuente el número de veces
que el tórax se expande durante un minuto. El resultado obtenido
es la frecuencia respiratoria.

• Registro el valor obtenido.

Temperatura:

• Informe al examinado el procedimiento que le va a realizar.

• Coloque al examinado en posición sentada o decúbito supino,


por al menos 5 minutos.

• Tome firmemente el termómetro de mercurio por el extremo


opuesto al bulbo y sacúdalo varias veces y observe que el nivel de
mercurio se encuentre por debajo de los 35 ֯ C. En caso de utilizar
termómetro digital, simplemente enciéndalo.

• Coloque el bulbo del termómetro en la boca del examinado


durante al menos 3 minutos.

• Retire el termómetro y observe el valor a donde llegó la columna


de mercurio. En caso de utilizar un termómetro digital, simplemen-
te observe el valor arrojado por el dispositivo.

• Repita el procedimiento anteriormente descrito, pero colocando


ahora el termómetro en la axila.

• Registre los valores obtenidos para cada una de las mediciones


tanto oral como axilar.

51
CUESTIONARIO

• ¿Por qué la sangre ejerce una fuerza sobre las paredes de


los vasos sanguíneos? ¿Esta presión es constante a lo
largo del ciclo cardiaco?

• Defina presión sistólica y diastólica y cuál es el significado


clínico de cada una.

• ¿Por qué es necesario un brazalete acorde a la circunfe-


rencia del brazo, cuando se toma la tensión arterial?

• Mencione 5 variables fisiológicas o corporales que puedan


afectar la presión sanguínea.

• Mencione 3 complicaciones para una persona que presen-


ta hipertensión arterial.

Artículo de refuerzo: (Elliott & Endacott, 2022)

Malcolm Elliott & Ruth Endacott (2022) The clinical neglect of vital
signs’ assessment: an emerging patient safety issue?, Contemporary
Nurse, 58:4, 249-252, DOI: 10.1080/10376178.2022.210949

52
PRÁCTICA No. 5
Espirometría

NOTA:
Antes de realizar la prueba, tenga en cuenta las siguientes
recomendaciones:

• No fume por lo menos 1 hora antes de la prueba.


• No consuma alcohol por lo menos 4 horas antes de la
prueba.
• No realice ejercicios de fuerza por lo menos 30 minutos antes
de la prueba.
• No use ropa ajustada que le impida respirar profundamente.
• Evite comer 2 horas antes de la prueba.
• Si usted padece alguna enfermedad pulmonar tales como
asma, EPOC, enfisema pulmonar, infecciones respiratorias,
etc, o consume algún tipo de medicamento para las mismas,
infórmele al docente antes de realizar la práctica.

OBJETIVOS:
• Comprender las bases físicas y fisiológicas de la ventilación
pulmonar y el intercambio gaseoso que se produce durante la
respiración.

• Reconocer las diferencias entre lo que es un volumen y una


capacidad pulmonar.

• Discutir los métodos de medición de volúmenes y capacidades


pulmonares.

• Identificar las diferencias entre las espirometrías, en cuanto a


las curvas volumen- tiempo y flujo-volumen.

• Identificar los patrones obstructivos, restrictivos y mixtos con


sus respectivas curvas volumen- tiempo y flujo- volumen.

53
MATERIALES:
• Polígrafo digital PowerLab o espirómetro clínico.

REACTIVOS:
No aplican.

INTRODUCCIÓN

La espirometría es una prueba que busca evaluar la función pulmonar


y es la más utilizada para este fin. Esta prueba busca medir o determi-
nar cuánto aire puede inhalar en los pulmones y cuánto puede exhalar
rápidamente. La espirometría registra el movimiento de los volúme-
nes de aire que normalmente entran y salen con cada respiración.
Estos volúmenes pueden ser volúmenes estáticos o dinámicos(“Pul-
monary Function Tests,” 2014).

Volúmenes estáticos:
Existen 4 clases de volúmenes pulmonares a saber:

Volumen corriente o volumen tidal: Es la cantidad de aire que entra


durante la inspiración o sale durante la espiración, cuando esta se
realiza en condiciones de reposo. Este volumen es de aproximada-
mente 500 mL o 7 ml/kg de peso corporal (Hall, 2016).

Volumen de reserva inspiratorio: Hace referencia al volumen de aire


que se puede ingresar a los pulmones, por medio de una inspiración
forzada, y que es adicional al volumen corriente. Este volumen es de
aproximadamente 3000 mL (Hall, 2016).

Volumen de reserva espiratorio: Es el volumen de aire que puede ser


espirado, por medio de una espiración forzada, y que es adicional al
volumen corriente. Este volumen es de aproximadamente de 1100 mL
(Hall, 2016).

Volumen residual: Hace referencia al volumen que queda en los


pulmones después de realizar una espiración forzada. En promedio
este volumen equivale a 1200 mL (Hall, 2016).

Partiendo de los anteriores volúmenes, se pueden determinar tam-


bién 4 capacidades pulmonares a saber:

54
Capacidad inspiratoria: Esta hace referencia a la sumatoria de los
volúmenes correspondientes al volumen corriente o tidal más el volu-
men de reserva inspiratoria. Representa la máxima cantidad de aire
que una persona puede inspirar, comenzando en el nivel espiratorio
normal y expandiendo los pulmones hasta la máxima capacidad. Su
valor aproximado es de 3500 ml (Hall, 2016) .

Capacidad residual funcional: Esta capacidad resulta de sumar el


volumen de reserva espiratorio más el volumen residual. Nos indica la
cantidad de aire que queda dentro de los pulmones después de reali-
zar una espiración normal o en reposo. Corresponde a un volumen de
2300 mL aproximadamente (Hall, 2016).

Capacidad vital: Esta capacidad determina el máximo volumen de


aire que una persona puede espirar tras un esfuerzo inspiratorio
máximo. Se obtiene sumando el volumen de reserva inspiratorio más
el volumen corriente, más el volumen de reserva espiratoria y su valor
aproximado es de 4,600 ml (Hall, 2016).

Capacidad pulmonar total: Como su nombre lo dice, esta capacidad


hace referencia al máximo volumen de aire que pueden albergar los
pulmones, posterior a realizar un esfuerzo inspiratorio máximo. Resul-
ta de sumar la capacidad vital más el volumen residual: Su valor es de
aproximadamente 5800 mL. En la Figura 11 se muestran los diferen-
tes volúmenes y capacidades pulmonares (Hall, 2016).

55
Figura 11
Volúmenes y capacidades pulmonares.

Fuente: Adaptado de (Marín Trigo, 2003).


VRI: Volumen Reserva Inspiratoria. VC: Volumen Corriente o Tidal. VRE: Volumen de
Reserva Espiratoria. VR: Volumen Residual. CI: Capacidad Inspiratoria. CRF: Capacidad
Residual Funcional. CV: Capacidad Vital. CPT: Capacidad Pulmonar Total.

Volúmenes dinámicos:
Los volúmenes dinámicos reciben su nombre en virtud a que, en ellos
la medición involucra la variable tiempo. Estos se miden con un espi-
rómetro y para ello el examinado debe inspirar profundamente hasta
que ingrese la máxima cantidad de aires a sus pulmones, es decir su
capacidad pulmonar total y luego debe expulsar la mayor cantidad de
aire en el menor tiempo posible, que dure al menos 6 segundos (Rive-
ro-Yeverino, 2019). Los volúmenes pulmonares son los siguientes:

Capacidad vital forzada: Es el volumen máximo de aire que la perso-


na expulsa en una espiración forzada máxima, posterior a haber
llenado sus pulmones al máximo.

Volúmen espiratorio forzado en el primer segundo (FEV1): Es la canti-


dad o volumen de aire que la persona expulsa en el primer segundo
mientras realiza una espiración forzada.

56
Flujo espiratorio forzado entre el 25-75% (FEF 25-75%): Este volu-
men mide en la parte media de la espiración forzada, es decir entre el
25-75%, correspondiendo al 50%. La utilidad de este flujo es que
resulta muy sensible para detectar la obstrucción precoz de las vías
respiratorias, sobre todo en las de pequeño calibre. Como se mencio-
nó anteriormente, se obtiene identificando en el trazado espirométrico
el 25% y el 75% de los puntos volumétricos de la Capacidad Vital
Forzada, para posteriormente medir el volumen y el tiempo entre esos
dos puntos. Su unidad de medida es en Litros/segundo (Rivero-Yeve-
rino, 2019).

Índice FEV1/CVF (Índice de Tiffeneau): Es la relación entre el volu-


men espirado en el primer segundo con respecto a la capacidad vital
forzada. Este valor se considera patológico cuando es menor de 0.7 o
70%. Todos los valores obtenidos se deben comparar con tablas de
acuerdo con edad, talla y sexo del paciente (Rivero-Yeverino, 2019).
En la Figura 12 se pueden apreciar los volúmenes dinámicos y los
flujos que arroja una espirometría.

Figura 12
Curva volumen-tiempo de una espirometría normal.

57
Fuente: Adaptado de (Rivero-Yeverino, 2019).

PROCEDIMIENTO

(Benítez-Pérez, Rosaura Esperanza, Torre-Bouscoulet, Luis,


Villca-Alá, Nelson, Del-Río-Hidalgo,, Rodrigo Francisco, Pérez-Padi-
lla, Rogelio, Vázquez-García, Juan Carlos, Silva-Cerón, Mónica,
Cid-Juárez, Silvia, & Gochicoa-Rangel, 2016).

• Verifique que el espirómetro esté calibrado y que los implementos


(mangueras, sensores, conectores, etc.) estén limpios y disponi-
bles para realizar la prueba y correctamente ensamblados al
equipo.

• Indague al examinado sobre el cumplimiento de las recomenda-


ciones hechas al comienzo de esta práctica.

• Encienda el equipo a utilizar a menos 5 minutos antes de realizar


la prueba.

58
• Ingrese los datos solicitados por el equipo en el caso de que
aplique, tales como: humedad relativa ambiental, temperatura del
ambiente, altitud del sitio, edad del examinado, sexo del examina-
do, estatura, etc.

• Preséntese ante el examinado y pídale que se siente lo más


cómodo posible e infórmele el procedimiento que le va a realizar.
Así mismo permítale que se familiarice con los elementos que va a
manipular.

• Verifique si existen o no contraindicaciones para realizar la


prueba.

• El examinado deberá estar sentado, con la espalda recta y la


cabeza ligeramente elevada.

• Explíquele al examinado como se coloca la boquilla en la boca


demostrándole que la sujete con los dientes (sin morderla), sellan-
do muy bien la boquilla con los labios y sin obstruirla con la lengua.
Permita que el examinado se familiarice con el procedimiento.

• Solicítele al examinado que respire normalmente un par de


veces.

• Posteriormente, solicítele al examinado que realice una inspira-


ción rápida y profunda en menos de 1 segundo, hasta que llene
totalmente los pulmones. Acto seguido, que se coloque la boquilla
en la boca y realice una espiración forzada en el menor tiempo
posible (de forma explosiva) y que continúe exhalando durante al
menos 6 segundos, hasta que ya no pueda expulsar más aire de
los pulmones.

• Solicítele al examinado que se retire la boquilla.

• Verifique que el trazado registrado por el equipo sea el adecuado.

• Si por alguna razón el trazado no es el adecuado, deje descansar


al examinado unos minutos, mientras tanto vuelva a explicarle las
maniobras que debe realizar o aclare preguntas que pueda tener y
repita el procedimiento.

• Interprete y discuta con sus compañeros de grupo el trazado


espirométrico obtenido.

59
CUESTIONARIO

• Defina los principales volúmenes y capacidades que se


determinan a través de una espirometría.

• ¿Qué significa el VEF1 y cuál es su significado clínico?

• Realice un cuadro donde explique los hallazgos espiromé-


tricos, que se observan en un patrón obstructivo, un patrón
restrictivo y un patrón mixto.

Artículo de refuerzo: (Haynes, 2018)

Haynes J. M. (2018). Basic spirometry testing and interpretation for


the primary care provider. Canadian journal of respiratory therapy :
CJRT = Revue canadienne de la therapie respiratoire : RCTR, 54(4),
10.29390/cjrt-2018-017. https://doi.org/10.29390/cjrt-2018-017

60
PRÁCTICA No. 6
Sistema nervioso: reflejos

OBJETIVOS:
• Identificar a importancia del examen neurológico en el ámbito
clínico.

• Familiarizarse con los componentes de un examen neurológi-


co.

• Aprender la técnica para evaluar los reflejos osteotendinosos


más importantes.

• Aprender la técnica para evaluar los reflejos pupilar, consen-


sual, corneal y de acomodación.

• Identificar el circuito neuronal de los reflejos osteotendinosos.

• Familiarizarse con la clasificación de la respuesta de los refle-


jos osteotendinosos.

MATERIALES: REACTIVOS:
• Martillo de reflejos. No aplican.

INTRODUCCIÓN

El examen neurológico constituye un elemento esencial dentro de la


práctica clínica, pues nos permite determinar el adecuado funciona-
miento del sistema nervioso, a través de las respuestas que este da a
los estímulos externos. Este examen nos permite identificar diversos
tipos de enfermedades y su ubicación a nivel del sistema nervioso.
Las enfermedades neurológicas pueden presentar una gran variedad
de signos y síntomas a nivel cognitivo, comportamental, visual, motor
y sensitivo. La presencia de ciertos hallazgos en el examen neurológi-
co, permiten detectar de manera oportuna enfermedades neurológi-
cas y condicione que pueden poner en riesgo la vida de una persona
o afectar su calidad de vida (Shahrokhi M, 2023).

61
El examen neurológico puede ser retador en virtud a que puede ser
difícil de realizar en niños, adultos mayores o pacientes poco colabo-
radores. De igual forma, hay que tener presente que las respuestas
neurológicas a una misma maniobra son diferentes en niños que en
adultos. Un examen neurológico debe incluir el análisis del estado de
conciencia, pares craneales, componente motor y sensitivo, marcha,
equilibrio, reflejos y signos de irritación meníngea (Shahrokhi M,
2023).

La escala de Glasgow relacionada en la Tabla 7, es la más utilizada


para evaluar el estado de conciencia de una persona, principalmente
cuando ha sufrido un trauma cráneo-encefálico. Esta escala fue
creada en 1974 por Bryan Jennett y Graham Teasdale y evalúa tres
componentes a saber: Apertura ocular, Respuesta Verbal y Respues-
ta motora. Cada una de estas respuestas tiene una ponderación esta-
blecida. Según la puntuación obtenida en la valoración, se puede
interpretar así: Trauma cráneo-encefálico leve: 13-15 puntos; Trauma
cráneo-encefálico moderado: 9-12 puntos; Trauma cráneo-encefálico
severo: menos de 9 puntos (Teasdale & Jennett, 1974). El estado
mental de un individuo se empieza a evaluar desde el interrogatorio.
Se analiza la ubicación del examinado en persona, tiempo y espacio,
así como la congruencia y pertinencia de las respuestas que da a
cada una de las preguntas, el grado de memoria, el lenguaje utilizado
y el estado de ánimo que presenta la persona (Shahrokhi M, 2023).

Tabla 7
Escala de Glasgow
Variable Respuesta Puntaje
Espontánea 4 puntos
Apertura A es�mulos verbales 3 puntos
ocular Ante un es�mulo doloroso 2 puntos
Ausencia de apertura ocular 1 punto
Orientado correctamente 5 puntos
Respuesta Paciente confuso 4 puntos
verbal Lenguaje inapropiado 3 puntos
Lenguaje incomprensible 2 puntos
Carencia de ac�vidad verbal 1 punto
Obedece órdenes correctamente. 6 puntos
Respuesta Localiza es�mulos dolorosos. 5 puntos
motora Responde al es�mulo doloroso, 4 puntos
pero no localiza.

62
Variable Respuesta Puntaje
Respuesta con flexión anormal 3 puntos
de los miembros.
Respuesta con extensión 2 puntos
anormal de los miembros.
Ausencia de respuesta motora 1 punto
Fuente: (Teasdale & Jennett, 1974)

La evaluación de los 12 pares craneales: (Olfatorio I), Óptico (II), Ocu-


lomotor (III), Troclear (IV), Abducens (VI), Trigémino (V), Facial (VII),
Vestibulococlear (VIII), Glosofaríngeo (IX), Vago (X), Espinal acceso-
rio (XI) e Hipogloso (XII), nos da una información valiosa sobre daños
a nivel cerebral y tallo cerebral (Keith, LM, Dalley, 2017). Ver Figura
13.

La evaluación del componente motor, incluye la inspección de los


músculos en busca de deformidades, asimetrías, atrofias, debilidades
musculares, evaluación de rangos de movimiento de las articulacio-
nes e identificación de flacidez o espasticidad que nos permita
diferenciar lesiones de motoneurona inferior o superior respectiva-
mente (Shahrokhi M, 2023).

La evaluación del componente sensitivo abarca entre otros aspectos


los síntomas de aumento o disminución de las percepciones como el
dolor, la temperatura, la vibración y la posición corporal. El análisis de
la marcha se puede hacer a simple vista observando como ingresa el
paciente al consultorio. Hay que tener en cuenta que los cambios en
la marcha pueden obedecer a múltiples factores, tales como debilida-
des musculares, neuropatías, cambios por artritis o artrosis, sobrepe-
so, etc. El análisis de la marcha involucra evaluar la postura, el paso,
el balance y el golpe del talón. Esto lo podemos evaluar solicitándole
al examinado que camine en la punta de los pies, los talones o cami-
nando en “tándem”, es decir, el talón del pie de adelante, toque la
punta del pie que está detrás, cuando se ubican en línea recta (Sha-
hrokhi M, 2023).

Finalmente, la evaluación de los reflejos osteotendinosos nos da una


idea sobre el adecuado funcionamiento del componente motor del
sistema nervioso central. Los reflejos miotáticos o de estiramiento
constituyen la manifestación más sencilla del funcionamiento del huso
muscular. En este reflejo, siempre que se estira una fibra muscular,

63
dicho cambio es censado por el huso muscular, el cual desencadena-
rá como respuesta refleja, una contracción de la fibra muscular. El
circuito neuronal de un reflejo miotático se puede observar en la
Figura 14 (Hall, 2016).

Figura 13
Ubicación de los Nervios craneales.

Fuente: By Patrick J. Lynch (TeachMe & Anatomy, 2023)

Los reflejos osteotendinosos, se clasifican según la respuesta obteni-


da al momento de evaluarlos, según se observa en la Tabla 8.

64
Tabla 8
Clasificación de las respuestas reflejas

Grado Respuesta observada


Grado 0 Reflejo ausente (Arreflexia). No se evidencia respuesta.
Grado 1 (+) Reflejo presente pero disminuido (Hiporreflexia).
Grado 2 (++) Normal. Reflejo presente con desplazamiento del segmento
corporal accionado por el músculo.
Grado 3 (+++) Reflejo presente pero con aumento de su intensidad
(Hiperreflexia)
Grado 4 (++++) Clonus.
Fuente: (Gopal Krushna Pal, 2010)

Figura 14
Circuito neuronal del reflejo miotático.

Fuente: Tomado de (Hall, 2016)

65
En cuanto a los reflejos oculares, estos están regulados por fibras
simpáticas y parasimpáticas. Las fibras preganglionares parasimpáti-
cas se originan en el núcleo de Edinger-Westphal y viajan por el III par
craneal hasta el ganglio ciliar. A partir de allí se genera la inervación
del globo ocular a través de los nervios ciliares, los cuales ejercen su
efecto sobre el músculo ciliar que regula la capacidad de enfoque del
cristalino y el esfínter de iris que regula el tamaño de la pupila (Hall,
2016).

En cuanto a la inervación simpática, esta se origina en la asta inter-


mediolateral del primer segmento torácico de la médula espinal.
Desde dicho punto, las fibras simpáticas ascienden hasta el ganglio
cervical superior donde hacen sinapsis con las neuronas posganglio-
nares, generando posteriormente los nervios que legarán hasta las
fibras radiales del iris (apertura pupilar) y los músculos extraoculares
(Hall, 2016).

El mecanismo que permite enfocar los objetos sobre la retina recibe


el nombre de acomodación y depende de la contracción o relajación
del músculo ciliar del ojo. Este fenómeno está regulado por mecanis-
mos de retroalimentación negativa, que permite modificar el poder
dióptrico del cristalino (Hall, 2016).

En cuanto al reflejo pupilar o fotomotor, este es el que controla la


cantidad de luz que ingresa al ojo. La vía neuronal de este reflejo está
regulada por los pares craneales II y III. Cuando la luz incide en la
retina, el estímulo del nervio óptico es llevado hasta los núcleos
pretectales y desde allí pasan al núcleo de Edinger-Westphal, desde
donde regresan al esfínter del iris para modificar su diámetro (Hall,
2016). La Figura 15, muestra la inervación del ojo y el arco reflejo foto-
motor.

66
Figura 15
Inervación del ojo y arco reflejo fotomotor.

Fuente: Tomado de (Hall, 2016)

67
PROCEDIMIENTO
Reflejo rotuliano

• Infórmele al examinado el procedimiento que va a realizar.

• Permita que el examinado esté sentado sobre una camilla, de


manera que las rodillas queden flexionadas y los pies suspendidos
en el aire y completamente relajado.

• Identifique el tendón del músculo cuádriceps y pálpelo con el


dedo índice, justo por la parte superior de la rótula, ver Figura 16.

• Utilizando el martillo de reflejos sostenido entre los dedos índice


y pulgar, moviendo solo la muñeca del examinador, propine un
golpe certero y rápido sobre el tendón del cuádriceps del examina-
do, justo por debajo de la rótula.

• Se deberá obtener como respuesta, una extensión de la pierna.


El reflejo homólogo del lado contralateral, también se deberá
observar simultáneamente.

• Si el reflejo no se obtiene, repita el procedimiento, pero esta vez


ordénele al examinado que entrelace los dedos de las manos y
haga fuerza tratando de separarlas (maniobra de Jendrassik). Ver
Figura 17.

• Clasifique la respuesta obtenida, según la Tabla 8.

• Realice el mismo procedimiento evaluando los siguientes refle-


jos, según se muestran en las figuras correspondientes: Reflejo
Bicipital (Ver Figura 18), Reflejo Tricipital (Ver Figura 19), Reflejo
Braquiorradial (Ver Figura 20), Reflejo Aquiliano (Ver Figuras 21ª
y 21b). En todos los reflejos, se deberá observar la contracción del
músculo involucrado, con la correspondiente extensión o moviliza-
ción del segmento distal.

• En cuanto al Reflejo Plantar (Ver Figura 22). Utilice la punta del


martillo de reflejos o la punta del dedo pulgar y con cierta fuerza
desplácelo por el borde externo del pie desde el talón hasta los
dedos del pie, sin que el proceso sea doloroso. La respuesta debe
ser una flexión plantar y de los dedos del pie.

68
• Evalúe todos los reflejos de forma bilateral y registre los resulta-
dos.

• Ahora, con la ayuda de una linterna, evalúe los siguientes refle-


jos:
o Reflejo Fotomotor: Solicítele al examinado que permanezca con
los ojos cerrados durante 10 minutos. Posterior a este tiempo, abra
el párpado del ojo a examinar y aplique luz directa sobre el mismo y
observe los cambios que se observan en la pupila sobre la que está
aplicando la fuente de luz.

o Reflejo Consensual: Repita el procedimiento realizado para el


reflejo fotomotor, pero esta vez observe la reacción que se presenta
en el ojo contrario al que se aplica la fuente de luz.

o Reflejo Pupilar de acomodación: Con luz natural adecuada


observe los cambios que se presentan en las pupilas del examinado,
cuando este observa un objeto lejano o un objeto colocado a 10 cm
de distancia.

o Reflejo Corneal: Solicítele al examinado que mira al frente, luego,


con un pequeño pedazo de algodón o con un copito toque muy
suavemente la zona lateral de la córnea. La respuesta que debe
esperarse es una oclusión de ambos párpados y una elevación del
globo ocular.

o Registre los resultados.

Figura 16
Sitio para la obtención del reflejo Rotuliano.

Fuente: Elaboración propia.

69
Figura 17
Maniobra de Jendrassik.

Fuente: Elaboración propia.

Figura 18
Sitio para la obtención del reflejo Bicipital.

Fuente: Elaboración propia.

70
Figura 19
Sitio para la obtención del reflejo Tricipital.

Fuente: Elaboración propia.

Figura 20
Sitio para la obtención del reflejo Braquiorradial.

Fuente: Elaboración propia.

71
Figura 21a
Sitio para la obtención del reflejo Aquiliano.

Fuente: Elaboración propia.

Figura 21b
Sitio para la obtención del reflejo Aquiliano.

Fuente: Elaboración propia.

72
Figura 22
Sitio para la obtención del reflejo Plantar.

Fuente: Elaboración propia.

CUESTIONARIO

• Describa la importancia clínica de la evaluación de los refle-


jos osteotendinosos.

• ¿Qué significan los términos “Síndrome de motoneurona


superior” y “Síndrome de motoneurona inferior” y como se
manifiestan clínicamente?

• Mencione 3 reflejos patológicos y cuál es la explicación


neurofisiológica para que esto se presenten.

• Realice un esquema donde se muestren las vías nerviosas


de los reflejos corneal, pupilar, de acomodación, fotomotor
y consensual.

73
Artículo de refuerzo: (Lin-Wei et al., 2021); (Macdonald et al., 2017)

Lin-Wei, O., Xian, L. L. S., Shen, V. T. W., Chuan, C. Y., Halim, S. A.,
Ghani, A. R. I., Idris, Z., & Abdullah, J. M. (2021). Deep Tendon Reflex:
The Tools and Techniques. What Surgical Neurology Residents
Should Know. The Malaysian Journal of Medical Sciences: MJMS,
28(2), 48-62. https://doi.org/10.21315/mjms2021.28.2.5

Macdonald NK, Kaski D, Saman Y, Al-Shaikh Sulaiman A, Anwer A


and Bamiou D-E (2017) Central Positional Nystagmus: A Systematic
Literature Review. Front. Neurol. 8:141. doi: 10.3389/fneu-
r.2017.00141

74
PRÁCTICA No. 7
Sentidos especiales:
visión, audición

OBJETIVOS:
• Familiarizarse con las pruebas que existen para determinar el
campo visual, punto ciego, agudeza visual y visión en color en
una persona y su importancia clínica.

Identificar los defectos de refracción que se presentan en la
visión de las personas.

Familiarizarse con las pruebas para evaluar el sentido de la
audición.

• Describir los principios que rigen las pruebas de diapasones


para evaluar la audición.

• Diferenciar la conducción aérea y ósea en el proceso de la


audición.

MATERIALES:
• Oclusor visual adhesivo. • Carta de Snellen.
• Objeto a manera de lapicero • Carta de Ishihara.
con una punta de color blanco • Diapasón (256 ó 512 z).
y otra de color rojo. • Cronómetro.

REACTIVOS:
No aplican.

INTRODUCCIÓN

La luz se propaga en el aire a una velocidad de 300000 Km/s, pero


dicha velocidad puede reducirse si dichos rayos de luz se desplazan
a través de un cuerpo sólido o líquido. Cuando esto ocurre, la diferen-
cia de velocidades en cada uno de los medios, determina un cociente,
que recibe el nombre de índice de refracción. Es decir, si un rayo de
luz atraviesa un vidrio y en este su velocidad es de 200000 Km/s, el

75
índice de refracción del vidrio será el resultado de dividir 300000
(velocidad de la luz en el aire), entre 200000 (velocidad de la luz en el
vidrio), lo que daría un resultado de 1,5. El ojo humano se compone
de diferentes estructuras tales como la córnea, humores acuoso y
vítreo y el cristalino, los cuales tiene índices de refracción específicos.

Cuando los rayos de luz chocan contra una superficie de manera


perpendicular a la misma, no sufren desviación alguna, pero cuando
chocan con cierto grado de inclinación, el rayo de luz se desvía de la
dirección que traía, generando así un ángulo que se denomina ángulo
de refracción (Hall, 2016).

El ojo humano puede presentar alteraciones en el proceso óptico que


se lleva cuando miramos los objetos, tales como la miopía, hiperme-
tropía, la presbicia, el astigmatismo. Cuando el ojo no presenta altera-
ciones de la refracción recibe el nombre de ojo emétrope. Estos
defectos se pueden identificar mediante un examen de la agudeza
visual. Así mismo es necesario evaluar el campo visual de una perso-
na, así como la capacidad de identificar los colores de los objetos.

Campo visual: El campo visual es la zona de visión que detecta cada


ojo en un momento específico. Las imágenes percibidas en la zona
nasal, reciben el nombre de campo visual nasal, mientras que las
imágenes percibidas hacia la periferia, reciben el nombre de campo
visual temporal. La campimetría nos permite identificar puntos ciegos
en las diferentes porciones de la retina. La campimetría nos permite
diagramar los puntos donde aparecen los objetos en el campo visual
de la persona. En todas las campimetrías siempre aparece un punto
ciego, el cual corresponde al disco óptico, debido a la ausencia de
conos y bastones en dicha zona. Este punto se ubica aproximada-
mente a unos 15° lateral al punto central de la visión. Cualquier punto
ciego que se encuentre en sitios diferentes al anteriormente mencio-
nado, se denominan escotomas, y son productos de daños en el
nervio óptico por condiciones como el glaucoma, tóxicos, irritaciones
o retinitis pigmentarias (Hall, 2016).

Esta técnica detecta el estímulo, comparándolo con el campo visual


del examinador. Las características más destacables de esta técnica
es que es una medida cualitativa, que nos sirve únicamente para
detectar defectos severos, pero pese a que se trata de una técnica
tradicional tiene una gran relevancia, ya que se sigue utilizando hoy
en día para tener una primera idea sobre si hay alteración en el

76
campo visual, ya que no requiere tecnología y se puede hacer en
cualquier lugar y en cualquier momento (Castaño P, Andrés, Fernán-
dez, Verónica, Galano, Sergio, & Gómez, 2014).

Agudeza visual: Es la capacidad que tiene el ojo humano para


diferenciar dos puntos de luz como diferentes, cuando estos rayos
chocan con el ojo formando un ángulo de 25s entre ellos. Es decir que
una persona con agudeza visual normal, puede distinguir dos puntos
luminosos, como elementos independientes, ubicados a una distan-
cia de 10m, siempre y cuando estén separados entre 1,5 -2 mm (Hall,
2016).

La agudeza visual es un mecanismo que relaciona la retina y la corte-


za visual y puede verse afectada por factores como: la iluminación de
la superficie, el tamaño del objeto y la distancia a la que se encuentra
del ojo, la longitud de onda de la luz y el tiempo de exposición. Los
defectos refractivos que puedan tener cualquiera de las lentes que
componen el ojo, hacen que el objeto se proyecte antes o después de
la retina, trayendo como consecuencia que este se vea borroso.

La agudeza visual es mayor en la fóvea donde hay mayor cantidad de


conos y disminuye a medida que se aleja de esa área. La agudeza
visual se evalúa a través de la carta de Snellen (Ver Figura 23), la
cual se compone de diferentes caracteres de diversos tamaños, los
cuales son de color negro sobre fondo blanco (Ghai, 2012). La agude-
za visual normal se reporta como 20/20, que significa que la persona
puede ver a 20 pies, las letras o caracteres que por su tamaño deben
verse cuando la carta de Snellen está a dicha distancia.

Visión en color: Los conos son las células de la retina especializadas


en identificar los colores. El ojo humano es capaz de detectar casi
todos los grados del color, siempre y cuando los colores rojo, verde y
azul se mezclan o combinan adecuadamente. Con base en los expe-
rimentos realizados sobre la visión en color, se ha logrado comprobar
que las sensibilidades espectrales de los tres tipos de conos son idén-
ticas a las curvas de absorción de la luz para los tres tipos de pigmen-
tos presentes en estas células (Hall, 2016).

77
Figura 23
Carta de Snellen.

Fuente: by OpenStax College is licensed under CC BY 3.0.

78
Cuando un ojo no posee un grupo de conos receptores para determi-
nado color, la persona es incapaz de diferenciar algunos colores,
condición que recibe el nombre de daltonismo. Cuando faltan los
conos para el rojo o para el verde, se dice que tiene un daltonismo
rojo-verde.

Una persona que carezca de conos rojos, se dice que tiene una prota-
nopía. Un daltónico sin conos verdes sufre deuteranopía (Hall, 2016).

La evaluación de la visión en color se realiza por medio de las cartas


de Ishihara (Ver Figura 24), en las cuales se disponen de manera
confusa una mezcla de puntos de diferentes colores y la persona
evaluada tiene que identificar los números que aparecen en ellas.

Figura 24
Carta de Ishihara.

Fuente: Europe Wellcome L0059160.jpg" is licensed under CC BY 4.0.

79
En cuanto al sentido de la audición podemos decir que el sonido es
una onda que viaja en la misma dirección a través de un medio, en
este caso el aire, alternando entre zonas de alta y baja presión. Estas
ondas son generadas por la vibración de objetos, y son percibidas por
nuestros oídos como sonidos (Ghai, 2012).

El oído humano es un órgano altamente especializado que está


conformado por el pabellón auricular, el conducto auditivo externo, la
membrana timpánica, la cadena de huesecillos y la cóclea ubicada en
el oído interno. Entre las características del sonido se encuentran el
tono, la intensidad y el timbre. El sonido puede transmitirse tanto por
vía aérea como por vía ósea.

El tono es la percepción de la frecuencia del sonido, a mayor frecuen-


cia, el tono es más agudo. El rango de frecuencia audible para el
humano se ubica entra los 16-20000 Hz. La frecuencia de la voz en
una conversación es de aproximadamente 120Hx en hombres y
250Hz en mujeres (Ghai, 2012).

La intensidad hace referencia al volumen del sonido y constituye la


percepción de la amplitud que tienen las ondas sonoras, la cual se
mide en decibeles (dB). Para el caso del ser humano, la intensidad
adecuada se localiza entre 0-120 dB (Ghai, 2012).

En cuanto al timbre, este hace referencia a la sensación percibida


cuando escuchamos una mezcla de frecuencias relacionadas, como
es el caso de los acordes en la música.

La vía auditiva involucra la participación de cuatro a seis neuronas


desde el órgano de Corti hasta la corteza auditiva e incluyen al gan-
glio espiral, núcleo coclear, núcleo olivar, núcleo trapezoidal, lemnisco
lateral, colículo inferior, cuerpos geniculados mediales, para posterior-
mente llegar a las áreas 41 y 42 de Brodman (Ghai, 2012).

Las alteraciones de la audición reciben el nombre de hipoacusia, que


es cuando hay una disminución en la capacidad de escuchar los soni-
dos o sordera que es cuando no se perciben sonidos. La evaluación
de la audición se puede realizar a través de exámenes clínicos
utilizando diapasones o a través de estudios más completos y compu-
tarizados como es el caso de las audiometrías y los potenciales
evocados. En la práctica de hoy utilizaremos los diapasones, para
evaluar las vías de conducción aérea y ósea de los oídos, aplicando

80
las pruebas de Rinne, Weber y Schwabach. Para lo anterior se utiliza-
rán unos diapasones, los cuales emiten sonidos puros y al hacerlos
vibrar pueden ser percibidos por la vía aérea cuando se colocan cerca
al orificio auditivo externo y también la vibración de estos diapasones
puede ser percibida por el hueso cuando se colocan en contacto
directo con la mastoides.

PROCEDIMIENTO

• Preséntese y explíquele al evaluado el procedimiento que va a


realizar.

• Siente al paciente y ocluya el ojo que no va a ser evaluado, ya


sea con el oclusor o con la mano, sin hacer presión sobre el globo
ocular.

• Siéntese frente al paciente a una distancia de 1 metro entre los


ojos suyos y los del evaluado (Ver Figura 25), con los ojos tanto del
examinado como del examinador a la misma altura. Cierre el ojo
directamente opuesto al ojo ocluido del paciente.

• Solicite al paciente que mire sobre su ojo abierto o su nariz.

• Sostenga sus manos estáticas en el medio, entre usted y el


paciente en cuadrantes opuestos, aproximadamente a 30º de la
fijación central (60 cm del eje mutuo). Rápidamente muestre y
luego retire uno o varios dedos en cada uno de los cuadrantes del
campo visual monocular (Superior derecho, Inferior izquierdo,
Superior izquierdo, Inferior derecho) (Ver Figuras 26 y 27). Para
evitar confusión, limite el número de dedos que muestra a 1, 2 y 5,
y sostenga los dedos lado a lado en el plano frontal. Repita en los
cuatro cuadrantes, evaluando como mínimo dos veces por
cuadrante. Repita el anterior procedimiento, para el ojo que estaba
ocluido.

• Nuevamente solicítele al paciente que mire sobre su ojo abierto o


su nariz. Ahora con el lapicero de tapa o punta blanca, desplácelo
desde la periferia hasta el centro del campo visual y solicítele al
examinado que le informe en qué momento aparece el objeto en el
campo visual. Realice el procedimiento en diferentes ángulos en
cada uno de los cuadrantes del campo visual. Repita el anterior

81
procedimiento, para el ojo que estaba ocluido.

• Nuevamente solicítele al paciente que mire sobre su ojo abierto o


su nariz. Ahora con el lapicero de tapa o punta roja, ubíquelo en el
centro del campo visual y desplácelo de forma horizontal hacia la
periferia del campo visual, tanto hacia a la derecha como hacia la
izquierda. Solicítele al evaluado que le informe el momento en que
desaparece la punta de color rojo.

• Registre las discrepancias, si las hubo, entre el campo visual del


examinado y el examinador.

Figura 25
Campimetría por confrontación.

Fuente: Elaboración propia.

Figura 26
Campimetría por confrontación.

Fuente: Elaboración propia.

82
Figura 27
Campimetría por confrontación.

Fuente: Elaboración propia.

Agudeza visual:

• Preséntese y explíquele al evaluado el procedimiento que va a


realizar.

• Ubique al examinado a una distancia de 6m (20 pies) de la carta


de Snellen (Ver Figura 23). La carta debe estar a la altura de los
ojos del evaluado y ubicada sobre una pared o zona con adecuada
iluminación.

• Solicítele al evaluado que utilice el oclusor ocular para tapar uno


de los ojos, sin hacer presión sobre el globo ocular y pídale que lea
las letras que usted le va indicando sobre la carta de Snellen. Debe
empezarse en orden descendente hasta que el evaluado ya no
pueda identificar las letras señaladas. La última línea de letras que
el evaluado pueda leer de manera correcta, corresponde a la agu-
deza visual del ojo que se está evaluando.

• Repita el procedimiento anterior, pero ahora evaluando el ojo que


estaba ocluido, es decir, tapando el ojo que acaba de evaluarse. Al
igual que el anterior, la última línea que el evaluado pueda leer de
manera correcta, es la agudeza visual para ese ojo. No necesaria-
mente debe ser la misma agudeza visual para ambos ojos.

83
• La agudeza visual se reporta a través de un fraccionario en el
cual el numerador corresponde a la distancia a la cual las letras
son leídas correctamente por la persona y el denominador la
distancia a la cual las letras se deberían leer por una persona con
visión • La agudeza visual se reporta a través de un fraccionario en
el cual el numerador corresponde a la distancia a la cual las letras
son leídas correctamente por la persona y el denominador la
distancia a la cual las letras se deberían leer por una persona con
visión normal. Es decir, si el evaluado solo puede leer la primera
línea de la carta de Snellen, significa que su agudeza visual es de
20/200, que significa que solo pudo leer a 20 pies (6m) la letra que
debería leerse normalmente a 200 pies (60m). Si la persona solo
pudo leer hasta la cuarta línea de letras, su agudeza visual es de
20/50, que significa que solo pudo leer a 20 pies (6m) las letras
que deberían leerse normalmente a 50 pies (15m) y así sucesiva-
mente. Una persona con agudeza visual normal debe obtener un
resultado de 20/20 y poder leer hasta la octava línea, lo que signifi-
ca que pudo leer a 20 pies (6m) las letras que deberían leerse
normalmente a 20 pies (6m).

Visión en color:

• Preséntese y explíquele al evaluado el procedimiento que va a


realizar.

• Ubique al paciente en una posición sentada y con buena ilumina-


ción natural.

• Muéstrele las cartas de Ishihara (Ver Figura 24) al evaluado y


pídale que identifique los números o imágenes que se encuentran
en ellas. Para la primera carta, el evaluado debe identificar el
número 74, para la segunda carta debe identificar el número 42 y
para la tercera carta debe identificar el número 6.

Pruebas de diapasones
Prueba de Rinne:

• Esta prueba compara la audición de la vía aérea con la ósea en


el mismo oído.

84
• Coloque al examinado en una posición sentado y cómoda, en
una habitación en silencio.

• Preséntese y explíquele al evaluado el procedimiento que va a


realizar.

• Infórmele al evaluado que debe levantar la mano cuando deje de


escuchar los sonidos.

• Sostenga el mango del diapasón (256 – 512Hz) entre los dedos


pulgar e índice. Luego golpee uno de los brazos del diapasón
contra la zona hipotenar de la otra mano.

• Con el diapasón vibrando, coloque la base del mango del diapa-


són sobre el proceso mastoideo del oído que está evaluando (Ver
Figura 28). El examinado debe escuchar el sonido y pídale que
levante la mano cuando deje de escucharlo. Tome nota del tiempo
transcurrido desde que colocó el diapasón sobre el proceso mas-
toideo y la levantada de la mano del evaluado.

• Acto seguido, con el diapasón aun vibrando, colóquelo lo más


cercano posible al conducto auditivo externo (Ver Figura 28). En
condiciones normales, el sonido debe seguirse percibiendo y
pídale al evaluado que levante la mano una vez deje de escuchar
el sonido por la vía aérea. Tome nota del tiempo transcurrido desde
que colocó el diapasón en la vía aérea. En condiciones normales,
el tiempo de audición de la vía aérea es de aproximadamente 35s
y por la vía aérea debe ser de 10 s más, es decir un total de 45s.
es decir, la conducción aérea debe ser mayor que la conducción
ósea

• Si lo anterior se cumple, se dice que la prueba de Rinne es positi-


va. Por el contrario, si oye más por la vía ósea, se dice que la
prueba de Rinne es negativa. En una sordera de conducción, solo
se percibe el sonido por la vía ósea y no por la vía aérea. En una
sordera nerviosa, la conducción ósea como aérea estarán dismi-
nuidas en tiempo.

• Repita el anterior procedimiento para el otro oído.

85
Figura 28
Colocación del diapasón en la prueba de Rinne.

Fuente: Elaboración propia.

Prueba de Weber:

• Esta prueba compara la conducción ósea en ambos oídos.

• Coloque al examinado en una posición sentado y cómoda, en una


habitación en silencio.

• Preséntese y explíquele al evaluado el procedimiento que va a


realizar.

• Sostenga el mango del diapasón (256 – 512Hz) entre los dedos


pulgar e índice. Luego golpee uno de los brazos del diapasón
contra la zona hipotenar de la otra mano.

• Con el diapasón vibrando, coloque la base del mango del diapa-


són sobre la parte media y superior del cráneo o en la mitad de la
frente. El diapasón debe quedar en contacto con la piel y el hueso
y estar equidistante a ambos oídos (Ver Figura 29).

• Pregúntele al examinado si escucha el sonido por igual en ambos


oídos o lo escucha más fuerte en uno de ellos.

• En condiciones normales, el sonido debe escucharse por igual en


ambos oídos. En una sordera de conducción el sonido se oye más
fuerte en el oído afectado, en virtud a que el efecto de enmascara-

86
miento que hace el ruido ambiental, no se presenta en el oído afec-
tado. En el caso de una sordera nerviosa el sonido se oye más
fuerte en el oído sano, pues el paciente lateraliza el sonido hacia el
lado sano.

Figura 29
Colocación del diapasón en la prueba de Weber.

Fuente: Elaboración propia.

87
Prueba de Schwabach

• Esta prueba compara la conducción ósea del evaluado con la del


evaluador, asumiendo que este último tiene una audición normal.

• Coloque al examinado en una posición sentado y cómoda, en una


habitación en silencio.

• Preséntese y explíquele al evaluado el procedimiento que va a


realizar.

• Sostenga el mango del diapasón (256 – 512Hz) entre los dedos


pulgar e índice. Luego golpee uno de los brazos del diapasón
contra la zona hipotenar de la otra mano.

• Infórmele al evaluado que debe levantar la mano cuando deje de


escuchar los sonidos.

• Con el diapasón vibrando, coloque la base del mango del diapa-


són sobre el proceso mastoideo del oído que está evaluando. El
examinado debe escuchar el sonido y pídale que levante la mano
cuando deje de escucharlo.

• Una vez el examinado deje de escuchar el sonido, coloque el


diapasón en su proceso mastoideo (del examinador) (Ver Figura
30).

• En condiciones normales el sonido no debe escucharse por parte


del examinador. En una sordera de conducción, el examinado
tendrá mejor conducción ósea que la del examinador. En una
conducción nerviosa, la conducción ósea del examinado estará
disminuida con respecto a la del examinador. Lo anterior significa
que usted como examinador, puede seguir escuchando el sonido
por vía ósea cuando el examinado informa que ya no lo escucha.

88
Figura 30
Colocación del diapasón en la prueba de Schwabach.

Fuente: Elaboración propia.

CUESTIONARIO

• ¿Cómo se define el término campo visual y cuál es la


extensión normal de dicho campo?

• Describa los defectos refractivos más comunes del ojo y


como se corrigen los mismos.

• Cuáles son las características del sonido que se perciben


durante el proceso de la audición. Explíquelas brevemente.

• ¿Qué significan los términos “ultrasónico”, “infrasónico” y


“supersónico”?

• Describa brevemente las limitaciones que presentan las


pruebas de diapasones.

• Describa brevemente lo que es una audiometría y los


potenciales evocados auditivos.

Artículo de refuerzo: (Strupp et al., 2020); (Wagner et al., 2022)

Strupp, Michael, Dlugaiczyk, Julia, Ertl-Wagner, Birgit Bettina, Rujes-


cu, Dan Westhofen, Martin Dieterich, Marianne. Vestibular Disorders.
Deutsches Arzteblatt International, 2020, 117(17), 300-310.
10.3238/arztebl.2020.0300

89
Wagner, Isabella V, Stewart, Michael W, Dorairaj, Syril K. Updates on
the Diagnosis and Management of Glaucoma. Mayo Clinic procee-
dings. Innovations, quality & outcomes, 2022, 6 (6), 618-635.
10.1016/j.mayocpiqo.2022.09.007

90
PRÁCTICA No. 8
Sistema renal

OBJETIVOS:
• Reconocer las funciones principales de los riñones.

• Comprender los procesos renales básicos.

• Identificar los efectos que genera la alteración del volumen


plasmático sobre la función renal.

• Analizar las implicaciones clínicas de los diferentes cambios


del volumen plasmático.

MATERIALES:
• Seis (06) recipientes para recolectar orina, perfectamente limpios.
• Botella de agua potable (mínimo 1L).
• Solución salina normal al 0,9% (mínimo 1L)
• Solución de rehidratación oral (mínimo 1L)
• Picnómetro de 2 mL ó 5mL.
• Balanza analítica.
• Instrumento medidor de pH (pHmetro).
• Guantes de látex.
• Toallas de papel.

REACTIVOS:
No aplican.

INTRODUCCIÓN

Los riñones son órganos bilaterales que desempeñan diferentes


funciones que resultan esenciales para la vida. Usualmente la función
que mejor se conoce es la de eliminar productos de desecho de nues-
tro cuerpo, pero son más las funciones que llevan a cabo estos órga-
nos. Entre las funciones renales encontramos:

91
• Regulación del equilibrio hidroelectrolítico: Las funciones de las
células se llevan a cabo en un medio acuoso cuya composición
debe estar controlada de forma muy precisa. El concepto de equili-
brio establece que cualquier sustancia que ingresa al organismo
debe corresponderse con la cantidad que se excreta de la misma.
Los riñones se encargan de mantener ese estrecho balance entre
los líquidos y electrolitos que se ingieren con los que se expulsan
(Hershel Raff, 2013). Si el volumen de agua, la osmolaridad, el pH
o la concentración de electrolitos se alteran, ponen en riesgo el
normal desarrollo de todas las funciones celulares e incluso causar
la muerte. Este equilibrio se logra gracias a la participación simul-
tánea de los aparatos urinarios, respiratorios, digestivo, endocrino,
tegumentario, nervioso, cardiovascular y linfático (Kenneth S.
Saladin, 2013).
El agua corporal está distribuida entre los espacios intracelular,
extracelular, este último subdividido en intersticial, intravascular y
transcelular (líquido cefalorraquídeo, sinovial, peritoneal, pleural,
pericárdico, humor vítreo, humor acuoso, etc.). La pérdida de agua
corporal recibe el nombre de hipovolemia y una de sus principales
causas es la deshidratación. Por otra parte, el exceso de líquidos
recibe el nombre de hipervolemia y se presenta principalmente en
la hidratación hipotónica o intoxicación por agua (Kenneth S. Sala-
din, 2013).

• Regulación del equilibrio ácido-base: Las sustancias ácidas o


básicas que ingresan a nuestro organismo ya sea por la ingesta de
las mismas o producto de nuestro metabolismo, constantemente
alteran el pH de nuestro plasma. Los riñones deben cumplir tam-
bién con esta función excretando o reteniendo ácidos o bases,
según se requiera, para poder garantizar un pH dentro de los
rangos fisiológicos que debe ser entre 7,35 y 7,45.

• Excreción de sustancias de desecho metabólicas y de sustancias


bioactivas: El cuerpo humano constantemente está produciendo
sustancias de desecho producto del metabolismo, los cuales ya no
cumplen función alguna y deben expulsarse del organismo. Ejem-
plos de estas sustancias son: Urea, Ácido Úrico, Creatinina y
desechos de la degradación de la hemoglobina. Así mismo, en
unión con el hígado, ayudan a expulsar fármacos, hormonas y
tóxicos (Hershel Raff, 2013).

92
• Regulación de la presión sanguínea: El control de la presión
sanguínea, depende no solo del sistema cardiovascular, sino de la
cantidad de volumen sanguíneo que hay dentro del sistema circu-
latorio y de la concentración de iones sodio. De igual forma, el
sistema Renina-Angiotensina-Aldosterona es el responsable de la
producción de sustancias vasoactivas que regulan el diámetro de
los vasos sanguíneos (Hershel Raff, 2013).

• Regulación de la producción de eritrocitos: La eritropoyetina es


una hormona producida a nivel de las células intersticiales peritu-
bulares y las células mesangiales del riñón. Esta hormona se
encarga de estimular la producción de eritrocitos a nivel de la
médula ósea. El principal estímulo para la producción de eritropo-
yetina por parte del riñón es la hipoxia arterial, los cuadros de
anemia o la disminución del flujo sanguíneo renal (Hershel Raff,
2013).

• Regulación de la producción de vitamina D: La principal produc-


ción de vitamina D en nuestro cuerpo se da con la exposición al sol
(Vitamina D3) que posteriormente pasa al hígado a transformarse
en 25-hidroxivitamina D, la cual pasa posteriormente a transfor-
marse en 1,25-dihidroxivitamina D, que es la forma activa de dicha
vitamina para facilitar la absorción de calcio a nivel digestivo (Hers-
hel Raff, 2013).

• Realizar gluconeogénesis: El sistema nervioso central es depen-


diente de la glucosa sanguínea. Por lo tanto, en los periodos de
ayuno cuando no hay suficiente aporte de glucosa, el cuerpo
empieza a producir glucosa a partir de sustratos no carbohidratos
(aminoácidos o ácidos grasos), proceso que recibe el nombre de
gluconeogénesis. A pesar que la mayor parte de la gluconeogéne-
sis se lleva a cabo en el hígado, el riñón también realiza este
proceso, sobre todo cuando el ayuno es prolongado (Hershel Raff,
2013)

La unidad funcional del riñón es la nefrona, la cual está conformada


por el glomérulo renal, el túbulo contorneado proximal, las porciones
descendentes y ascendentes del asa de Henle, el túbulo contorneado
distal y el túbulo distal que desemboca en el túbulo colector.

Las anteriores estructuras se especializan en llevar a cabo una serie


de procesos entre los que se encuentran:

93
• Filtración glomerular: La formación de orina empieza por el filtra-
do glomerular, el cual se parece mucho al plasma sanguíneo,
salvo porque contiene muy pocas proteínas plasmáticas, los
demás iones y solutos orgánicos de bajo peso molecular están en
cantidades casi iguales que las del plasma. La cantidad de filtrado
que se genera por unidad de tiempo recibe el nombre de tasa de
filtración glomerular, la cual puede ser de hasta 180L/día, es decir
125mL/min en una persona normal. Esto permite que el riñón
pueda excretar los productos de desecho y mantener las concen-
traciones del medio interno (Hershel Raff, 2013).

• Reabsorción y secreción de sustancias en los túbulos: El volu-


men final de la orina, así como la composición de la misma, varían
ostensiblemente con respecto a lo filtrado en el glomérulo renal.
De los 180L/día que se filtran, solo se excretan 1-1,5L/día de orina,
lo que evidencia la gran capacidad de reabsorción de los compo-
nentes útiles del plasma como son los electrolitos, aminoácidos,
glucosa y bicarbonato que se da a nivel de los diferentes túbulos.
Así como se reabsorben agua y sustancias, también se secretan
otras por parte de los túbulos, como es el caso de la urea (Hershel
Raff, 2013).

• Metabolismo por parte de los túbulos: Como mencionamos


previamente, aparte de las funciones de filtración, secreción y
reabsorción, en el riñón también se llevan a cabo procesos meta-
bólicos, como son la extracción de nutrientes orgánicos del filtrado
glomerular (glucosa) y transformaciones metabólicas que buscan
alterar la composición de la orina y del plasma como ocurre en el
proceso de gluconeogénesis, la síntesis de amonio a partir de la
glutamina y la producción de bicarbonato (Hershel Raff, 2013).

• Regulación de la función renal: La regulación renal se lleva a


cabo gracias a la participación de señales neurológicas, hormona-
les y mensajeros químicos, que actúan a nivel del mismo riñón,
con miras a satisfacer las necesidades del organismo. Las señales
neurales se originan en el plexo celiaco simpático, las cuales regu-
lan el flujo sanguíneo renal, la filtración glomerular y la liberación
de sustancias vasoactivas. La acción hormonal se origina en las
glándulas adrenales mediante la liberación de aldosterona y corti-
sol por parte de la corteza y de epinefrina y norepinefrina por parte
de la médula adrenal. Estas acciones hormonales tienen efecto
incluso a nivel del sistema nervioso central, específicamente en la

94
hipófisis, donde se secreta a hormona antidiurética, la cual será
fundamental para regular la excreción de agua. De igual forma el
corazón secreta péptidos natriuréticos que aumentan la excreción
de sodio por parte de los riñones. Entre los mensajeros químicos
que actualmente están en estudio para identificar claramente su
papel, podemos mencionar el óxido nítrico, agonistas purinérgicos,
superóxido y eicosanoides (Hershel Raff, 2013).

PROCEDIMIENTO

Indicaciones generales: Para realizar la presente práctica se deben


tener las siguientes indicaciones, las cuales aplican para todos los
estudiantes que recolectarán las muestras de orina:

• El día anterior a la prueba deben realizar una actividad con


tendencia de normal a leve, es decir, abstenerse de realizar ejerci-
cio físico, trotar o correr.

• Tomar nota de la hora a la cual realizó la última micción del día


anterior.

• El día de la prueba, debe recolectar la primera orina de la


mañana en el recipiente para recolectar orina y llevarlo a la prácti-
ca, se acepta máximo 1 hora después de haber tomado la mues-
tra. Si la práctica no se realiza en las primeras horas de la mañana,
la muestra debe refrigerarse en una nevera (NO EN EL CONGE-
LADOR) y al momento de desplazarse hacia la práctica, llevar el
recipiente con la muestra.

• Tan pronto se inicie el laboratorio, se debe medir el volumen de


orina recolectado, la densidad y el pH.

• Cada 30 minutos, el examinado deberá recolectar una muestra


de orina, así no tenga ganas, hasta completar un total de seis (06)
muestras. A cada una de las anteriores muestras se les deberá
realizar también las mismas mediciones que se le hicieron a la
primera muestra, es decir, volumen, densidad y pH.

• El estudiante examinado deberá permanecer dentro del laborato-


rio en reposo y con la menor actividad física posible.

95
Indicaciones específicas para cada una de las prácticas: Cada
grupo asumirá el análisis de las muestras de orina, según las siguien-
tes situaciones:

Estricto ayuno: Este escenario aplica solo para los grupos que
tengan horarios de práctica antes de las 8 am. El examinado
deberá asistir al laboratorio en estricto ayuno, de mínimo 8 horas
tanto de sólidos como de líquidos. El examinado debe permanecer
en estricto reposo dentro del laboratorio y solo podrá ingerir
alimentos y bebidas después de haber recolectado la sexta mues-
tra.

Ayuno con carga de agua: Al igual que el anterior escenario, el


examinado debe asistir al laboratorio en estricto ayuno, de mínimo
8 horas tanto de sólidos como de líquidos. Tan pronto llegue al
laboratorio y entregue la primera orina recolectada en la mañana,
deberá empezar a tomar una carga de agua equivalente a
15mL/kg de peso, la cual debe ingerir en un tiempo no superior a
15 min. Solo podrá ingerir alimentos después de haber recolectado
la sexta muestra.

Ayuno con carga de solución salina: Al igual que el anterior


escenario, el examinado debe asistir al laboratorio en estricto
ayuno, de mínimo 8 horas tanto de sólidos como de líquidos. Tan
pronto llegue al laboratorio y entregue la primera orina recolectada
en la mañana, deberá empezar a tomar una carga de solución
salina normal al 0,9%, equivalente a 15mL/kg de peso, la cual
debe ingerir en un tiempo no superior a 15 min. Solo podrá ingerir
alimentos después de haber recolectado la sexta muestra.

Dieta normal con ejercicio: En este escenario, el examinado no


requiere haber realizado ayuno alguno y deberá haber consumido
la dieta que normalmente ingiere. Tan pronto llegue al laboratorio y
entregue la primera orina recolectada en la mañana, deberá trotar
alrededor del parqueadero o de una cancha, durante 10 minutos.
Luego se ubicará en el laboratorio en completo reposo para tomar
las demás muestras. Solo podrá ingerir alimentos y bebidas
después de haber recolectado la sexta muestra.

Dieta normal con ejercicio y solución de rehidratación oral: Al


igual que en el escenario anterior, el examinado no requiere haber
realizado ayuno alguno y deberá haber consumido la dieta que

96
normalmente ingiere. Tan pronto llegue al laboratorio y entregue la
primera orina recolectada en la mañana, deberá trotar alrededor
del parqueadero o de una cancha, durante 10 minutos. Luego se
ubicará en el laboratorio en completo reposo para tomará la solu-
ción de rehidratación oral, equivalente a 15mL/Kg de peso, duran-
te 15 minutos. Solo podrá ingerir alimentos y bebidas después de
haber recolectado la sexta muestra.

Determinación de la densidad de un líquido por medio del


picnómetro:

• Tome el picnómetro ya sea de 2ml ó 5mL que esté vacío, limpio y


seco (Ver Figura 31). Péselo con la tapa puesta, utilizando la
balanza analítica (Ver Figura 32 y 33).

• Llene completamente el picnómetro con la orina recolectada por


el examinado y con cuidado, deje caer la tapa de tal forma que el
líquido ascienda por el interior del orificio que tiene la tapa, hasta
que se reboce ligeramente. Limpie el exceso de líquido que pueda
quedar adherido a las paredes del picnómetro con una toalla de
papel.

• Pese el picnómetro lleno de orina, tres veces, utilizando la balan-


za analítica (Ver Figura 34).

• Calcule el promedio los tres pesos obtenidos en las mediciones


anteriores.

• Con el peso promedio obtenido en el punto anterior, divídalo


entre el volumen del picnómetro que está utilizando, ya sean 2mL
ó 5mL. Recuerde que la fórmula para calcular la densidad es: (ρ) =
m / V. Donde ρ = densidad; m= masa; V= volumen.

97
Figura 31 Figura 32
Picnómetro. Balanza analítica.

Fuente: Elaboración propia. Fuente: Elaboración propia.

Figura 33 Figura 34
Pesaje del picnómetro Pesaje del picnómetro lleno
vacío en la balanza. en la balanza.

Fuente: Elaboración propia. Fuente: Elaboración propia.

98
Determinación del pH:

• Lave adecuadamente el electrodo del pHmetro.

• Encienda el pHmetro y verifique que funcione correctamente (Ver


Figura 35).

• Introduzca el electrodo del pHmetro dentro de la muestra de orina


y manténgalo sumergido hasta que la lectura sea constante.

• Registre el valor de pH reportado.

• Lave muy bien el electrodo para realizar las otras mediciones.

CUESTIONARIO

• Describa una patología o condición clínica en las cuales se


vean afectadas cada una de las funciones renales.

• Describa una patología o condición clínica en las cuales se


vean afectadas cada una de los procesos que ejecuta el
riñón.

• Describas los mecanismos fisiológicos que se activan en


cada una de las situaciones analizadas en la práctica de
hoy.

Figura 35
pH metro.

Fuente: Elaboración propia.

99
Artículo de refuerzo: (Roxe DM., 1990); (Ahmad S, Maqbool A,
Srivastava A, Gogoi S, Siddiqui FA, 2019).

Roxe DM. Urinalysis. In: Walker HK, Hall WD, Hurst JW, editors. Clini-
cal Methods: The History, Physical, and Laboratory Examinations. 3rd
edition. Boston: Butterworths; 1990. Chapter 191. Available from:
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK302/

Ahmad S, Maqbool A, Srivastava A, Gogoi S, Siddiqui FA, Panwar S.


Urine Analysis Revisited: A Review. Ann. Int. Med. Den. Res. 2019;
5(1):PT22-PT32.

100
PRÁCTICA No. 9
Sistema digestivo

OBJETIVOS:
• Entender las funciones del sistema gastrointestinal.

• Familiarizarse con las capas funcionales del tracto digestivo y


las especializaciones que contribuyen a su función.

• Identificar los segmentos del aparato digestivo y las funciones


de cada uno de ellos.

• Identificar los efectos de las diferentes secreciones del aparato


digestivo para realizar la digestión y absorción de nutrientes a
partir de los alimentos ingeridos.

MATERIALES:
• 5 frascos de vidrio de compo- • 1 piña verde.
ta. • Guantes de látex.
• 2 porciones medianas de pan • Cronómetro.
blanco. • Revolvedor o palillo de
• 3 porciones de 20g de carne madera.
de res (1 poción cruda entera, • Cámara fotográfica.
1 porción cocinada entera y 1
porción cocinada triturada).

REACTIVOS:
No aplican.

INTRODUCCIÓN

El aparato digestivo tiene la función principal de suministrar agua y


nutrientes al cuerpo. Todos los alimentos que se ingieren con la dieta
están compuestos por macromoléculas de carbohidratos, lípidos y
proteínas, que deben degradarse a moléculas más elementales y de

101
fácil absorción por el intestino, proceso que recibe el nombre de
digestión. La digestión demanda la participación de diversos segmen-
tos del aparato gastrointestinal que incluyen desde la boca, con la
masticación, hasta la parte final del colon y la secreción de sustancias
denominadas enzimas, hacia la luz del tubo digestivo, que finalmente
convertirán los alimentos en partículas que pueden cruzar el epitelio
del intestino, proceso que recibe el nombre de absorción (Hershel
Raff, 2013).

De igual forma, el aparato digestivo sirve como órgano de excreción


de sustancias, que el cuerpo no necesita y no absorbe de la comida
ingerida. Así mismo, el intestino cumple otra función importante como
es la de defender nuestro cuerpo, pues en virtud a la continuidad que
el sistema gastrointestinal tiene con el exterior, puede ser una vía de
ingreso de microorganismos o sustancias letales. Para protegerse de
esta situación, el aparato digestivo posee un sistema complejo de
defensas, denominado sistema inmunitario gastrointestinal (Hershel
Raff, 2013).

De otra parte, el tubo digestivo está tapizado por unas capas funcio-
nales especializadas. La primera de ellas es el epitelio que recubre
todo el tubo digestivo y está dotado de glándulas que drenan sus
secreciones hacia la luz del tubo. Este epitelio es el encargado de
captar de forma selectiva agua, nutrientes, electrolitos y rechazar
aquellos que son perjudiciales. Este epitelio presenta una disposición
a manera de criptas y vellosidades en el intestino, que le permiten
aumentar su área de o superficie de absorción. Casi todo el epitelio
intestinal es de naturaleza cilíndrica, excepto en el esófago donde el
epitelio es de naturaleza escamosa estratificada (Hershel Raff, 2013).

En el estómago, el epitelio se especializa en células productoras de


ácido y enzimas que ayudan a la digestión. A nivel del intestino se
pueden observar células de Paneth, que se ubican en las bases de
las criptas y cumplen funciones de secretar péptidos antimicrobianos.
Otras células son las caliciformes que se encargan de producir moco.
Todo este epitelio esta soportado sobre su correspondiente lámina
propia y por capas musculares que reciben el nombre de muscularis
mucosae, que es la capa por donde transcurre la inervación del plexo
submucoso. Existe otra capa muscular circular que se encarga de
disminuir el diámetro del tubo digestivo y de esta forma favorecer el
movimiento de los alimentos (peristaltismo) y finamente de forma más
externa se encuentra la capa muscular longitudinal. Entre estas dos

102
últimas capas musculares encontramos el plexo mientérico (Hershel
Raff, 2013).

Respuesta del aparato digestivo a una comida:

Son varios los tejidos y órganos que participan en armonía al momen-


to de ingerir un alimento, el cual pueden detectar con la sola observa-
ción, el olor o el gusto de la misma. Por ejemplo, a nivel de la cavidad
oral encontramos los dientes que se encargan de triturar los alimentos
en porciones más pequeñas, las glándulas salivales, que secretan
ptialina, agua y moco que permiten humedecer el bolo alimenticio
para facilitar su deglución. La masticación resulta fundamental para la
digestión de todos los alimentos, pues tritura los mismos en pedazos
más pequeños, lo cual facilita la acción de las diferentes enzimas
digestivas y evita la irritación de la mucosa gastrointestinal (Hall,
2016).

El estómago funciona principalmente como reservorio del alimento y


controla la velocidad de paso del mismo hacia el intestino delgado.
También secreta ácido clorhídrico y pepsina (Kenneth S. Saladin,
2013).

En el duodeno, que es la primera porción del intestino delgado, junto


con el páncreas (que secreta todas las enzimas necesarias para la
digestión final de los alimentos) y el hígado (que secreta bilis para
emulsificar las grasas) se termina el proceso digestivo y se emiten
señales endocrinas que regulan el funcionamiento de segmentos
proximales y distales del tubo digestivo (Hershel Raff, 2013).

Finalmente, en el colon o intestino grueso cumple funciones de alma-


cenamiento de sustancias de desecho y de materiales no digeribles,
así como la absorción de agua, preparando así el bolo fecal para su
expulsión final en la defecación. El colon tiene tres regiones: el colon
ascendente, el colon transverso y el colon descendente y sigmoides.
Otros solutos como los ácidos biliares y bilirrubinas también son modi-
ficados en el colon a través de un metabolismo bacteriano (Hershel
Raff, 2013).

La absorción de los nutrientes se lleva a cabo a través del sistema


venoso porta hacia el hígado, donde se metabolizan todos los nutrien-
tes y sustancias absorbidas desde el intestino y de ser necesario de
destoxifican. El hígado recibe en promedio el 65% del flujo sanguíneo

103
por medio del sistema venoso porta y en los periodos postprandiales
dio flujo puede aumentar hasta el 85%. Los nutrientes de naturaleza
lipídica se absorben a través del sistema linfático por medio de los
quilomicrones (Hershel Raff, 2013).

En cuanto a los mecanismos de regulación endocrina, podemos men-


cionar algunas de las hormonas gastrointestinales que participan en
la digestión, absorción y motilidad del aparato digestivo, tales como:
Gastrina, Colecistoquinina (CCK), Secretina, Péptido inhibidor gástri-
co (GIP), Péptido intestinal Vasoactivo (VIP) y la Motilina entre
muchas otras (Hershel Raff, 2013).

PROCEDIMIENTO

Procedimiento digestión de proteínas:

• Los estudiantes conformarán grupos de igual número de


integrantes, según el número de estudiantes.

• El día previo a la realización de la práctica, deberán conseguir la


piña verde y extraerle la parte central (corazón o tallo de la piña) y
macerarla la más posible para extraer el jugo de dicha zona. El
corazón o tallo de la piña posee grandes concentraciones de
bromelina, la cual es una enzima proteolítica (C. et al., 2012)

• Dividir el volumen de jugo recolectado de manera proporcional en


3 frascos de vidrio (idealmente que cada frasco se llene hasta 1cm
de altura) y dejarlos en reposo a una temperatura entre 5°C - 10°C.
Deberán rotular los frascos con los números 1, 2 y 3 respectiva-
mente.

• El día de la practica tomarán los 3 frascos con el jugo de la piña


y colocarán las porciones de carne de la siguiente manera: Frasco
No. 1: Porción de carne cruda entera, Frasco No 2: Porción de
carne cocinada entera y Frasco No. 3 Porción de carne cocinada
triturada. Revolver completamente las preparaciones e inmediata-
mente activar el cronómetro.

• Observar cada 30 minutos los cambios que se estén presentando


en cada uno de los frascos y consignarlos en una tabla.

104
• Al cabo de 2 horas y media, observar los cambios finales de cada
una de las preparaciones y tomar una fotografía de cada frasco.
Indicar en cuál de los frascos se llevó a cabo una mayor degrada-
ción de la carne y explicar a qué se deben dichos resultados.

Procedimiento digestión de carbohidratos:

• Los estudiantes conformarán grupos de igual número de


integrantes, según el número de estudiantes.

• El día de la práctica, tomarán 2 frascos de vidrio y entre todos los


estudiantes los llenarán de saliva (idealmente que cada frasco se
llene hasta 1cm de altura) y dejarlos en reposo a una temperatura
entre 5°C - 10°C. Rotular cada frasco como Frasco No.1 y Frasco
No.2

• Tomar un pedazo de pan blanco y colocarlo en el frasco No. 1 y


en el frasco No. 2 colocar la misma cantidad de pan que la coloca-
da en el Frasco No. 1, pero triturarlo completamente. Agitar com-
pletamente las preparaciones e inmediatamente activar el cronó-
metro.

• Observar cada 30 minutos los cambios que se estén presentando


en cada uno de los frascos y consignarlos en una tabla.

• Al cabo de 2 horas y media, observar los cambios finales de cada


una de las preparaciones y tomar una fotografía de cada frasco.
Indicar en cuál de los frascos se llevó a cabo una mayor degrada-
ción del pan y explicar a qué se deben dichos resultados.

CUESTIONARIO

• Mencione las principales funciones de las diferentes partes


que conforman el aparato digestivo humano.

• Mencione los sitios donde se producen las diferentes enzi-


mas digestivas y el efecto que tienen sobre los alimentos
ingeridos.

• Describa tres patologías del aparato digestivo que afecten


los procesos de digestión y absorción.

105
• Describa la utilidad que presenta para el ser humano la
ingesta de vegetales y alimentos con alto contenido de
fibra.

Artículo de refuerzo: (Fikree & Byrne, 2021) (Sokic-Milutinovic et al.,


2021)

Fikree, A., & Byrne, P. (2021). Management of functional gastrointesti-


nal disorders. Clinical medicine (London, England), 21(1), 44–52.
https://doi.org/10.7861/clinmed.2020-0980

Aleksandra Sokic-Milutinovic, Aleksandra Pavlovic-Markovic, Ratko


S. Tomasevic, Snezana Lukic; Diarrhea as a Clinical Challenge:
General Practitioner Approach. Dig Dis 10 May 2022; 40 (3): 282–289.
https://doi.org/10.1159/000517111

106
PRÁCTICA No. 10
Sistema endocrino:
taller sobre diabetes mellitus e hipotiroidismo

OBJETIVOS:
• Identificar las partes que componen el sistema endocrino.

• Conocer los diferentes mecanismos por los que actúan las


hormonas en el cuerpo humano: endocrino, paracrino y autocri-
no.

• Comprender los mecanismos de retroalimentación en la secre-


ción de las hormonas.

• Familiarizarse con la fisiopatología de la diabetes mellitus.

• Familiarizarse con la fisiopatología del hipotiroidismo.

MATERIALES: REACTIVOS:
No aplica. No aplican.

INTRODUCCIÓN

Todos y cada uno de los órganos y tejidos que conforman el cuerpo


humano funcionan de manera articulada como un todo. Para lograr
este objetivo, estos tejidos deben establecer comunicación entre
ellos, para de esta manera coordinar sus funciones. Entre los siste-
mas que más estrecha comunicación tienen son el sistema nervioso y
el endocrino. El proceso de comunicación se lleva a cabo a través de
unas sustancias que se denominan hormonas, que son sustancias en
su mayoría de tipo proteico o lipídico (Kenneth S. Saladin, 2013).

El sistema endocrino está conformado por las siguientes estructuras:

• El Hipotálamo que, libera factores neuroendocrinos que actúan


sobre la glándula hipófisis, tales como: GNRH, CRH, TRH, GnRH,
Somatostatina, Dopamina, Hormona Antidiurética y Oxitocina.

107
• La Glándula hipófisis que, gracias al estímulo recibido del hipotá-
lamo, cumple la función de coordinar o regular el sistema endocri-
no, liberando sustancias que actuarán estimulando a otras glándu-
las y tejidos del cuerpo tales como TSF, FSL, LH, ACTH, MSH,
Prolactina y Hormona del crecimiento.

• La Glándula tiroides que, es la glándula endocrina más grande


del cuerpo y secreta hormonas como la T3, T4 y Calcitonina, para
regular el metabolismo del cuerpo.

• Las Glándulas Paratiroides que, secretan la Hormona Paratiroi-


dea, que regula el metabolismo del calcio.

• El Páncreas que, en su función endocrina secreta Insulina, Gluca-


gón y Somatostatina para regular las concentraciones de glucosa
en el plasma sanguíneo.

• Las Glándulas Suprarrenales que, secretan Cortisol, Aldosterona,


Andrógenos por parte de la zona cortical y Adrenalina y Noradre-
nalina por parte de la zona medular.

• Los Ovarios o Testículos que, liberan estrógenos y progesterona


en los primeros y testosterona en los segundos, para garantizar el
proceso reproductor de la especie humana (Hershel Raff, 2013).

Las anteriores glándulas se comunican entre ellas y con los demás


tejidos por medio de cuatro vías principales de comunicación a saber:
Endocrina (Cuando el neurotransmisor o la hormona es liberado al
torrente sanguíneo para que actúe en tejidos lejano al sitio de produc-
ción de la misma); Paracrina (Cuando el neurotransmisor o la hormo-
na es liberado al torrente sanguíneo para que actúe en tejidos veci-
nos, cercanos al sitio de producción de la misma) y Autocrina (
Cuando el neurotransmisor u hormona es liberado para que actúe
sobre la misma célula que la secretó) (Kenneth S. Saladin, 2013).

Los efectos de una hormona pueden darse a nivel de la membrana


celular de los tejidos (Canales iónicos dependientes de un ligando,
Receptores acoplados a proteínas G o a Receptores proteicos de
tirosina cinasa), a nivel citoplasmático o a nivel del núcleo (Recepto-
res esteroides) (Hershel Raff, 2013).

108
La liberación de una hormona, usualmente es controlada por la secre-
ción de otra hormona. Un ejemplo de lo anterior, son la liberación de
los factores liberadores del hipotálamo, que actúan sobre la hipófisis
para estimular la liberación de otras hormonas que actuarán en los
diferentes tejidos o en otras glándulas. De igual forma la inhibición de
la liberación de las hormonas, casi siempre se lleva a cabo por meca-
nismos de retroalimentación negativa, en los cuales el exceso de
producción de la hormona en la glándula blanco trae como conse-
cuencia la inhibición en la liberación de la hormona o factor que
estimula a dicha glándula blanco (Hershel Raff, 2013)

Tabla 9
Nombres, abreviaturas y sitios de secreción de las hormonas

Nombre de hormona Si�o secreción Abreviatura


Adrenocor�cotropa (cor�cotropina) Adenohipófisis ACTH.
vasopresina (an�diuré�ca) Neurohipófisis ADH
pép�do natriuré�co auricular Corazón ANP
Cor�coliberina Hipotálamo CRH
Dehidroepiandosterona Corteza suprerrenal DHEA
Eritropoye�na Riñón e Hígado EPO
Hormona folículo es�mulante Adenohipófisis FSH
Somatotropina (hormona del crecimiento) Adenohipófisis GH
gonadoliberina Hipotálamo GnRH
Somatomedina (factor de crecimiento insulinoide) Hígado y otros tejidos IGF
lutropina (hormona luteinizante) Adenohipófisis LH
noradrenalina Médula suprarrenal NE
Oxitocina Neurohipófisis OT
Dopamina (hormona inhibidora de la prolac�na) Hipotálamo PIH
para�rina (hormona para�roidea) Para�roides PTH
triyodo�ronina Tiroides T3
Tetrayodo�ronina Tiroides T4
Tiroliberina Hipotálamo TRH
Tirotropina (hormona es�muante de la �roides) Adenohipófisis TSH

Fuente: Adaptado de (Kenneth S. Saladin, 2013)

109
La Diabetes Mellitus es la enfermedad metabólica más prevalente en
el mundo, alcanzando un promedio de 422 millones de personas en
todo el mundo, según datos de la OMS para el 2022 (OMS, 2023). La
diabetes se define como una alteración en el metabolismo de los
carbohidratos, como consecuencia de una deficiencia en la secreción
de la hormona insulina por arte de las células β del páncreas, trayen-
do como consecuencia unos niveles de glucosa en sangre muy altos,
que a la postre traerán como consecuencia síntomas como: Polidip-
sia, Poliuria y Polifagia, así como otras alteraciones tales como hiper-
glicemia, glucosuria y cetonuria. La diabetes mellitus se clasifica en
Tipo 1, la cual solo representa el 10 % de los casos, en la cual hay una
incapacidad del páncreas para producir adecuadamente la insulina y
la Tipo 2, que representa el 90% de los casos y en la cual se presenta
una resistencia a la insulina. El no tratamiento de la diabetes mellitus
puede traer complicaciones como daño a nivel renal, de la retina, del
sistema nervioso y del sistema vascular periférico (Kenneth S. Sala-
din, 2013).

En la actualidad la Asociación Americana de Diabetes (ADA), en sus


últimos lineamientos del año 2023, estableció los criterios a tener en
cuenta para el diagnóstico de diabetes los siguientes: Glicemia basal
o en ayunas (mínimo 8 horas de ayuno) ≥ 126 mg/dL ó Glicemia al
azar (es decir en cualquier momento del día después de haber
comido) ≥ 200mg/dL ó valores de Hemoglobina glicosilada (Hb1c) ≥
6,5% (ElSayed et al., 2023)

En cuanto al Hipotiroidismo, es una deficiencia en la secreción de las


hormonas tiroideas T3 y T4. Esta baja producción en las hormonas
tiroideas puede obedecer a deficiencias en la ingesta de yodo (casos
poco usuales, pues actualmente gran variedad de productos alimenti-
cios, el agua y la sal de mesa vienen suplementados con yodo) o por
trastornos autoinmunes como es el caso de la Tiroiditis de Hashimoto,
en la cual el sistema inmune ataca las células de la glándula tiroides
afectando su producción de hormonas tiroideas. Entre los signos y
síntomas del hipotiroidismo podemos resaltar: Aumento inexplicable
de peso, caída del cabello, fragilidad de uñas, fatiga y pereza, aumen-
to de la somnolencia, estreñimiento, debilidad muscular, etc. Clínica-
mente se puede encontrar aumento en el tamaño de la glándula
tiroides, en virtud a una sobre estimulación de la hipófisis a través de
la TSH (Kenneth S. Saladin, 2013).

110
En la actualidad la Asociación Americana de Tiroides (ATA) ha esta-
blecido como criterio para diagnosticar el hipotiroidismo el encontrar
en plasma unos niveles elevados de TSH y unos niveles bajos de T4
libre. En caso de encontrar niveles de TSH elevados y T4 libre norma-
les, se estaría frente a un caso de hipotiroidismo subclínico (Patil N,
Rehman A, 2023).

PROCEDIMIENTO

Por grupos prepararán una pequeña exposición de no más de 30


minutos, en donde socializarán una exposición acerca dela Diabetes
Mellitus y el Hipotiroidismo. Para lo anterior los estudiantes se apoya-
rán en los artículos de refuerzo que se relacionan en el numeral 7 de
esta práctica. El docente a cargo de la práctica asignará los temas a
cada grupo. Así mismo darán respuesta al cuestionario del numeral 6
de la práctica.

CUESTIONARIO

• Explique algunas de las causas de la hiposecreción hormo-


nal y mencione algunos ejemplos. Haga lo mismo para a
hipersecreción hormonal.

• ¿Por qué la falta de yodo en la dieta causa hipersecreción


de Hormona Tirotropina (TSH)? ¿Por qué la glándula
tiroides se agranda en el bocio endémico?

• Explique la fisiopatología, las manifestaciones clínicas y el


tratamiento de la Diabetes mellitus tipo 1 y tipo 2.

• Explique la fisiopatología las manifestaciones clínicas y el


tratamiento del Hipotiroidismo.

Artículo de refuerzo: (Galicia-Garcia et al., 2020) (Ralli et al., 2020)

Galicia-Garcia U, Benito-Vicente A, Jebari S, Larrea-Sebal A, Siddiqi


H, Uribe KB, Ostolaza H, Martín C. Pathophysiology of Type 2 Diabe-
tes Mellitus. International Journal of Molecular Sciences. 2020;
21(17):6275. https://doi.org/10.3390/ijms21176275

111
Ralli, M., Angeletti, D., Fiore, M., D’Aguanno, V., Lambiase, A., Artico,
M., de Vincentiis, M., & Greco, A. (2020). Hashimoto’s thyroiditis: An
update on pathogenic mechanisms, diagnostic protocols, therapeutic
strategies, and potential malignant transformation. Autoimmunity
Reviews, 19(10), 102649. https://doi.org/https://doi.org/10.1016/j.au-
trev.2020.102649

112
PRÁCTICA No. 11
Sistema reproductor:
taller sobre métodos diagnósticos de embarazo
y métodos anticonceptivos

OBJETIVOS:
• Identificar las diferentes pruebas que se realizan para diagnos-
ticar el embarazo.
• Distinguir los métodos de planificación familiar que actualmente
se encuentra disponibles y sus mecanismos de acción.

MATERIALES: REACTIVOS:
No aplica. No aplican.

INTRODUCCIÓN

Métodos de diagnóstico de embarazo:

Los métodos para hacer diagnóstico de embarazo han evolucionado


ostensiblemente. Desde las pruebas biológicas como la de
Ascheim-Zondek, la de Kuperman y la de Friedman, que utilizaban la
orina de la mujer para ser inyectada en ratones en las dos primeras y
conejos en la tercera y ver su efecto sobre los ovarios de dichos
animales, así como la prueba de Hogben, que utilizaba sapos, hasta
las actuales pruebas que utilizan principios inmunológicos para deter-
minar la presencia de hormonas como la gonadotrofina coriónica
humana (hCG), la cual es secretada específicamente por tejidos
embrionarios como el sincitiotrofoblasto. La gonadotrofina coriónica
tiene propiedades antigénicas y su presencia, ya sea en orina o en
sangre, puede ser detectada por anticuerpos específicos (Pal, 2010).

113
Los niveles de hCG sensibles en orina son detectables a partir del
octavo día de embarazo, pero idealmente se aconseja tomarlos unos
14 días después de la amenorrea. El test debe realizarse en las
siguientes 12 horas de haber tomado la muestra de orina. Este test se
pueda realizar utilizando la inhibición de aglutinación del látex (LAI),
también llamado Gravindex test o por inhibición de la hemaglutinación
(HAI), también llamado test de Prognostican. La precisión de estos
test es superior al 98% y dentro de las ventajas están el poder realizar
el diagnóstico en corto tiempo, son bastante precisos y no requieren
animales ni la experiencia que se requieren para realizar los test
biológicos (Pal, 2010).

Otros métodos como el radioinmunoanálisis, se basan en detectar la


presencia de la hCG en el plasma materno incluso en periodos tan
cortos como 10 días después de la fertilización. Este método puede
detectar valores tan pequeños como 0,003 UI/mol de la subunidad β
y hasta 0,001 UI/mol de la subunidad α de dicha hormona. La prueba
de Elisa (Análisis Inmunoabsorbente ligado a enzimas) tiene un prin-
cipio similar al radioinmunoanálisis, pero no utiliza sustancias radioac-
tivas. Finalmente, la ecografía es una técnica muy utilizada para
corroborar los diagnósticos de embarazo. Este método utiliza ondas
de ultrasonido para identificar la presencia del embrión en el útero
materno, el cual es detectable a partir de la quinta semana de gesta-
ción, la fetocardia a partir de la semana 10 y los movimientos fetales
a partir de la semana 11. Adicionalmente permite identificar ubicación
de la placenta, la morfología del feto o la presencia de anormalidades
en el mismo, la edad gestacional, cantidad de líquido amniótico, etc.
(Gopal Krushna Pal, 2010).

Métodos de planificación familiar:

Los métodos de planificación familiar se utilizan para controlar o


determinar a voluntad de los padres, el número de hijos que tendrán
como descendencia. Esta limitación de la fertilidad puede ser tempo-
ral o definitiva. Desde la mitad del siglo pasado, los métodos anticon-
ceptivos han tenido el mayor auge y han evolucionado sustancialmen-
te con miras a poder mantener su efectividad anticonceptiva y dismi-
nuir los efectos secundarios.

A pesar de que los actuales métodos anticonceptivos tienen una alta


tasa de efectividad, la cual supera el 98%, ninguno puede garantizar

114
el 100% de efectividad, salvo la abstinencia de las relaciones sexua-
les (Gopal Krushna Pal, 2010). En la actualidad los anticonceptivos
orales no solo se utilizan para controlar la natalidad, sino para el trata-
miento de algunas enfermedades como los desbalances hormonales,
el síndrome de ovario poliquístico, el hiperandrogenismo e hirsutismo.
Los métodos anticonceptivos más conocidos son los siguientes:

Métodos fisiológicos:

En estos métodos encontramos el método del ritmo, el cual basa


su principio en identificar un lapso de tiempo seguro y un periodo
de abstinencia. En condiciones normales el óvulo tiene una sobre-
vida de 24 horas después de la ovulación, mientras que el esper-
ma tiene una sobrevida de 48 horas una vez ingresa al útero, por
lo tanto, hay un periodo de 3 días en los cuales se debe evitar las
relaciones sexuales. Este método demanda conocer con gran
precisión el día de la ovulación, la cual casi siempre es el día 14
del ciclo, es decir 14 días antes de la siguiente menstruación,
siempre y cuando la mujer siempre tenga ciclos regulares. Así las
cosas, el periodo en el cual se debe evitar tener relaciones sexua-
les estaría entre los 4 días antes y después de la fecha que se
tiene calculada para la ovulación. El otro método fisiológico es el
del coito interruptus, el cual consiste en retirar el pene de la vagina
justo antes de eyacular. Los anteriores métodos no se aconsejan
en virtud a su baja efectividad, la cual no supera el 40% (Gopal
Krushna Pal, 2010).

Métodos de barrera:

Entre estos métodos encontramos el condón o preservativo tanto


para hombre como para mujer y el diafragma vaginal, el cual se
coloca en el cuello uterino de la mujer. El condón es uno de los
métodos más utilizados por los hombres, a pesar de que su efecti-
vidad no supera el 85%, tiene la ventaja de que disminuye el riesgo
de adquirir enfermedades de transmisión sexual (ETS) (Gopal
Krushna Pal, 2010).

Espermicidas:

Hacen referencia al uso de sustancias, geles o cremas, que se


aplica la mujer antes del coito, con miras a que ejerzan un efecto
destructor sobre los espermatozoides.

115
Esterilización quirúrgica:

Buscan por medio de un procedimiento quirúrgico, interrumpir la


vía normal de tránsito de los óvulos o los espermatozoides. Dentro
de este grupo encontramos el corte de trompas de Falopio, ya sea
por la técnica de Pomeroy o Ushida y la vasectomía. Este método
es de los más efectivos actualmente. A pesar de que anteriormente
se consideraba un procedimiento de anticoncepción definitiva, en
la actualidad, gracias a la microcirugía, se puede revertir este
procedimiento.

Dispositivos intrauterinos:

Es la colocación de dispositivos ya sea de plástico o de metal


dentro del útero, los cuales actúan como cuerpo extraño. Estos
dispositivos generan un proceso de inflamación dentro del útero y
aumentan su motilidad, impidiendo así la implantación del huevo o
cigoto (Gopal Krushna Pal, 2010).

Métodos hormonales:

Reciben también el nombre de anticonceptivos orales y consiste


en el consumo diario de tabletas que contienen pequeñas cantida-
des de estrógenos y progestágenos, los cuales se administran a
partir del primer día del periodo menstrual, con miras a generar
una inhibición en la producción de la hormona Folículo estimulante
(FSH) y la hormona Luteinizante (LH), lo cual impide la síntesis de
hormonas ováricas y la ovulación. Así mismo, alteran a las carac-
terísticas del moco cervical y del endometrio, que generan un
ambiente hostil para los espermatozoides. Se suelen tomar una
vez al día durante 21 a 24 días; seguidamente, la toma se
interrumpe durante 4 a 7 días (para que sobrevenga la menstrua-
ción) y luego se reanuda. También existen los de 28 tabletas en los
cuales 24 tabletas tienen el principio activo y las otras cuatro son
un placebo que se toma durante los días en que no se toman los
comprimidos combinados, con miras a establecer una rutina de
tomar un comprimido al día. La píldora sin efecto (placebo) puede
contener hierro y ácido fólico. Otros métodos hormonales son las
inyecciones mensuales o cada tres meses, los parches subdérmi-
cos y transdérmicos, implantes subdérmicos, los cuales pueden
tener efectividad hasta por 5 años, etc. (Gopal Krushna Pal, 2010).

116
PROCEDIMIENTO

Por grupos prepararán una pequeña exposición de no más de 20


minutos, en donde socializarán los principales métodos de diagnósti-
co del embarazo, los métodos de planificación familiar y sus mecanis-
mos de acción. Para lo anterior los estudiantes se apoyarán en los
artículos de refuerzo que se relacionan en el numeral 7 de esta prácti-
ca. El docente a cargo de la práctica asignará los temas a cada grupo.
Así mismo darán respuesta al cuestionario del numeral 6 de la misma.

CUESTIONARIO

• Mencione las hormonas que se ven involucradas durante el


embarazo y su principal función.

• ¿Cuáles son los principios utilizados en los test biológicos y


en los test inmunológicos y cuáles son los actualmente más
utilizados?

• ¿Cuáles hormonas son secretadas por la placenta durante


el embarazo?

• Qué significa el término amenorrea y mencione sus princi-


pales causas.

• ¿Cómo se puede determinar la fecha de ovulación?

• Describa los mecanismos de acción de los métodos


anticonceptivos actuales.

Artículo de refuerzo: (Teal & Edelman, 2021) (Jain & Muralidhar,


2011)

Teal, S., & Edelman, A. (2021). Contraception Selection, Effective-


ness, and Adverse Effects: A Review. JAMA, 326(24), 2507–2518.
https://doi.org/10.1001/jama.2021.21392

Rakhi, J., & Sumathi, M. (2011, December). Contraceptive methods:


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of India. https://doi.org/10.1007/s13224-011-0107-7

117
PRÁCTICA No. 12
Fisiología del ejercicio:
estimación del VO2 máx.

ADVERTENCIA
Si alguno de los participantes de la práctica presenta algún
 diagnóstico médico o padece alguna condición clínica que le
impida la realización de esfuerzos o ejercicio físico, por favor
informe al docente encargado de la práctica.

OBJETIVOS:
• Familiarizarse con el concepto de capacidad funcional aeróbica
y sus bases fisiológicas

• Diferenciar los conceptos de VO2, VO2 máx. y VO2 pico.

• Aprender a aplicar las pruebas indirectas para la determinación


del VO2 máx.

• Reconocer las aplicaciones clínicas que tiene la determinación


de las anteriores variables.

MATERIALES:
• Cronómetro. • Escalón de 33cm y 40cm.
• Silbato. • Aplicación para celular de
• Conos señalizadores. metrónomo (Metrónomo
• Pista de atletismo (400m) o Beats).
en su defecto una cancha de • Balanza para pesar perso-
fútbol de la cual se conozcan nas.
sus dimensiones.

REACTIVOS:
No aplican.

118
INTRODUCCIÓN

El consumo de oxígeno (VO2) hace referencia a la cantidad de


oxígeno que consume o utiliza nuestro cuerpo por unidad de tiempo.
Usualmente se expresa en mL oxígeno/Kg de peso/minuto. Gracias a
esta variable se puede determinar el metabolismo energético del
cuerpo para transformar la energía contenida en los alimentos y
demás sustratos energéticos en trabajo celular, que para el caso del
ejercicio será la contracción muscular (José Lopez Chicharro, 2023).

La cantidad de oxígeno que consume el cuerpo humano en reposo


para mantener sus necesidades metabólicas basales es de aproxima-
damente 3,5 mL Oxígeno/Kg de peso/minuto. Este valor es el equiva-
lente a 1 MET o unidad metabólica. El VO2 está determinado por el
gasto cardiaco del individuo y la diferencia arterio-venosa de oxígeno
en un tejido específico. Así las cosas, el consumo de oxígeno puede
expresarse por medio de la siguiente fórmula:

VO2 = Q * D(a-v) O2

donde Q = Gasto cardiaco y D(a-v) = Diferencia arterio-venosa de


oxígeno. El primer factor depende fundamentalmente de la función
cardiaca y puede variar desde valores de 5L/min en reposo hasta 5 ó
6 veces en ejercicio máximo, mientras que el segundo puede verse
afectado por variables tales como: la presión atmosférica, la concen-
tración de hemoglobina en sangre y la capacidad de captación de
oxígeno por parte de los tejidos y puede variar desde 5mL O2/100mL
sangre en condiciones de reposo, hasta 17mL O2/100mL sangre en
condiciones de ejercicio máximo (José Lopez Chicharro, 2023).

El VO2 aumenta de forma lineal a medida que aumenta la intensidad


del ejercicio, hasta que alcanza su valor máximo, es decir, el individuo
es incapaz de soportar un aumento en la intensidad del ejercicio,
generando así una meseta en la gráfica de esta variable. Así las
cosas, se puede definir como consumo máximo de oxígeno (VO2
max.) al máximo volumen de oxígeno que el organismo es capaz de
absorber del medio ambiente, transportar en la sangre y consumir a
nivel de los tejidos por unidad de tiempo. Esta variable fisiológica es
una medida de la capacidad funcional aeróbica de un individuo. El
VO2 max. Depende de ciertos factores tales como: la edad, el sexo, la
dotación genética, la composición corporal y el grado de entrenamien-
to del individuo (José Lopez Chicharro, 2023).

119
En cuanto al consumo de oxígeno pico (VO2 pico) este hace refe-
rencia al máximo consumo de oxígeno que presenta un individuo
cuando realiza una prueba específica, pero cuyo valor y comporta-
miento no cumple con los requerimientos objetivos para ser cataloga-
do como consumo máximo de oxígeno (VO2 max). Entre las principales
causas para que esto se presente, se encuentran: Grado de voluntad,
estado de salud física y grado de motivación del individuo, e incluso la
decisión del personal que está haciendo la evaluación (médicos o
facultativos), quienes deciden terminar la prueba antes del agota-
miento máximo, para evitar complicaciones en pacientes con cardio-
patías, neumopatías, sedentarios o de avanzada edad (José Lopez
Chicharro, 2023).

En virtud a la que existe muchas variaciones entre las diversas pobla-


ciones y cada laboratorio tiene establecidos sus valores de referencia
y de igual forma se pueden presentar diferencias o errores en los
métodos de medición del VO2 max . hay algunos estudios poblaciona-
les como los de Neumann en 1988 y Nevill 2003 que han permitido
aproximarse a establecer valores normales para el VO2 max. los cuales
se encuentran en rango de 35-45 mLO2/Kg peso/min. en hombres y
de 30-40 mLO2/Kg peso/min para mujeres (Neumann G., 1988) (José
Lopez Chicharro, 2023).

El consumo máximo de oxígeno es una variable fisiológica que tiene


una gran aplicación en el ámbito clínico, principalmente en áreas
como la cardiología y la medicina interna, pues permite determinar de
manera objetiva la capacidad aeróbica y el estado funcional tanto de
deportistas, sujetos sanos o pacientes con patologías, así como
determinar el impacto de las intervenciones terapéuticas o de los
programas de rehabilitación.

Determinación del VO2 máx.

Las pruebas para determinar el VO2 máx. utilizan la contracción de


grandes masas musculares con una intensidad y duración suficiente.
Esta prueba recibe el nombre de prueba de esfuerzo o ergometría,
para la cual existen varios protocolos muy bien estandarizados. Las
pruebas de esfuerzo directas son aquellas que miden el VO2 máx.
utilizando equipos sofisticados como los cicloergómetros y analizado-
res de gases inspirados y expirados, las cuales se realizan en labora-
torios especializados (José Lopez Chicharro, 2023). Actualmente
existen equipos portátiles que permiten ser llevados a los campos de

120
juego o entrenamiento para medir estas variables durante la ejecu-
ción del deporte.

Las pruebas de esfuerzo indirectas son aquellas que se han dise-


ñado para no tener que utilizar equipos especializados como los
cicloergómetros o los analizadores de gases respiratorios. Estas
pruebas se basan en recorrer distancias sobre una pista atlética,
subirse y bajarse de un escalón y con base en los tiempos utilizados,
las distancias recorridas, la frecuencia cardiaca alcanzada, el sexo, la
estatura y el peso del evaluado, y utilizando ciertas fórmulas, se
puede determinar el VO2 máx. con una precisión bastante aceptable.
Entre las pruebas indirectas más utilizadas se encuentran las siguien-
tes:

Test de escalón de Astrand-Ryhming: Consiste en subir y bajar un


escalón de 33cm para las mujeres y de 40cm para los hombres,
llevando una cadencia establecida, la cual es de 22,5 veces por
minuto, durante 5 minutos. Al finalizar la prueba se toma la frecuencia
cardiaca del evaluado y utilizando el nomograma de Astrand- Ryh-
ming (Ver Figura 36) o la ecuación correspondiente, se calcula el VO2
máx. El VO2 máx. estimado se debe corregir si el sujeto tiene una
edad superior o inferior a 25 años, multiplicando el resultado obtenido
por el factor correspondiente para la edad según corresponda (Ver
Tabla 10). La correlación del VO2 máx. calculado por este método y
el real es de 0,74, con un error entre el 10% y el 15% para sujetos
entrenados y no entrenados respectivamente (Åstrand, 2003).

121
Figura 36
Nomograma de Astrand-Ryhming.

Fuente: (ÅStrand et al., 1960)

122
Tabla 10
Factor de corrección por edad para el test de escalón de
Astrand-Ryhming

Edad (años) Factor


15 1,10
20 1,05
25 1,0
30 0,94
35 0,87
40 0,83
45 0,78
50 0,75
55 0,71
60 0,68
65 0,65

Fuente: (Åstrand, 2003). Elaboración propia.

Otra forma de calcular el VO2 máx. para el test del escalón es a través
de las siguientes fórmulas (Åstrand, 2003):

Hombres: VO2 máx. (L/min) = 3,744 * [(peso Kg +5) / FC-62)]


Mujeres: VO2 máx. (L/min) = 3,750 * [(peso Kg -3) / FC-65)]

Donde “peso Kg” hace referencia al peso del evaluado y “FC” a la


frecuencia cardiaca del evaluado una vez termina la prueba. Los
demás valores son constantes.

Para individuos con edades superiores a los 25 años, la fórmula


sobreestima su potencia aeróbica, razón por la cual debe hacerse la
correspondiente corrección por los factores relacionados en la Tabla
10, a partir de dicha edad. (Ricardo Mora Rodríguez, 2010).

Test de escalón de tres minutos: Existen otros test para determinar


de manera indirecta el VO2 máx. como es el caso del test de escalón
de tres minutos desarrollado por McArdle, en el cual el evaluado debe
subir un escalón de 40cm durante 3 minutos a una cadencia de 24
ciclos/min para hombres y 22 ciclos /min para mujeres. La frecuencia

123
cardiaca se contabiliza entre los segundos 5 y 20 del minuto inmedia-
tamente siguiente a terminar la prueba. Para determinar el VO2 máx.
se utilizan las siguientes fórmulas, donde FC= Frecuencia cardiaca
(McArdle et al., 1972):

Hombres: VO2 máx. = 111,33 – (0,42 * FC)


Mujeres: VO2 máx. = 65,81 – (0,1847 * FC)

Test de Cooper: Este es un test de campo desarrollado por Kenneth


H. Cooper en al año 1968 y consiste en recorrer la mayor distancia
posible, a una velocidad constante, en un tiempo de 12 minutos. Es
una prueba que en su inicio se diseñó para evaluar soldados en el
ejército de los estados unidos, por lo tanto, esta prueba se sugiere
utilizarla en personas sanas y moderadamente activas. L aprueba
debe realizarse sobre una superficie plana, idealmente una pista
atlética en donde se puedan marcar fácilmente distancias completas
como 400m, 200m o 100 m, con miras a que se puedan determinar
fácil y rápidamente el número de vueltas completas o parciales que
realice el examinado (José Lopez Chicharro, 2023). Para estimar el
VO2 máx. se deberá utilizar la siguiente ecuación:

VO2 máx. = 0,0268 * distancia recorrida (m) – 11,3

Una vez determinado el VO2 máx. se comparan los datos obtenidos


con los valores reportados en la Tabla 11 y se cataloga la capacidad
aeróbica del sujeto, según la categoría en la que se ubique.

Tabla 11
Valores de VO2 máx. para el test de Cooper, por sexo y rango de
edad

CATEGORIA EDADES
13-19 20-29 30-39 40-49 50-59 > 60
Muy baja < 35 < 33 < 31,5 < 30,2 < 26,1 < 20,5
Baja 35 - 38,3 33 - 36,4 31,5 - 35,4 30,2 - 33,5 26,1 - 30,9 20,5 - 26
Normal 38,4 - 45,1 36,5 - 42,4 35,5 - 40,9 33,6 - 38,9 31 - 35,7 26,1 -32,2
Hombres
Buena 45,2 - 50,9 42,5 - 46,4 41 - 44,9 39 - 43,7 35,8 - 40,9 32,3 - 36,4
Excelente 51 - 55,9 46,5 -52,4 45 - 49,4 43,8 - 48 41 - 45,3 36,5 - 44,2
Superior > 56 > 52,5 > 49,5 > 48,1 > 45,4 > 44,3
Muy baja < 25 < 23,6 < 22,8 < 21 < 20,2 < 17,5

124
CATEGORIA EDADES
13-19 20-29 30-39 40-49 50-59 > 60
Baja 25 -30,9 23,6 - 28,9 22,8 - 26,9 21 - 24,4 20,2 - 22,7 15,5 - 20,1
Normal 31 - 34,9 29 - 32,9 27 - 31,4 24,5 - 28,9 22,8 - 26,9 20,2 - 24,4
Mujeres Buena 35 - 38,9 33 - 36,9 31,5 - 35,6 29 - 32,8 27 -31,4 24,5 - 30,2
Excelente 39 - 41,9 37 - 40,9 35,7 - 40 32,9 - 36,9 31,5 - 35,7 30,3 - 31,4
Superior > 42 > 41 > 40,1 > 37 > 35,8 > 31,5
Valores de VO2 máx. expresados en mL O2/Kg/min.

Fuente: Adaptado de (Kenneth H. Cooper, 1980).

Test de Rockport de una milla: Este test fue creado por Kline y cola-
boradores en el año 1987 y es más apropiado para aquellas personas
que no pueden realizar los anteriores debido a su baja condición
física. La prueba consiste en caminar una milla (1609m) lo más rápido
posible sobre una superficie plana. Terminada la prueba inmediata-
mente se toma la frecuencia cardiaca del evaluado. La potencia aeró-
bica para este test se calcula con la siguiente fórmula (Kline et al.,
1987):

VO2 máx. = 132,853 – (0,0769 * P) – (0,3877 * E) + (6,315 * S) –


(3,2649 * T) – (0,1565 * FC)

Donde:
P = Peso de la persona en libras (1kg = 2,2 libras). E = Edad en años.
S = Sexo (mujeres = 0; Hombres = 1). T = Tiempo (minutos).
FC = Frecuencia cardiaca al final de la prueba.

Existen muchos otros test para determinar el VO2 máx. de forma


indirecta como son: el test de Balke, el test corriendo/andando 1,5
millas (George et al., 1993), el test de Course Navette, el test de UKK,
el test de Margaria, el test de yo-yo, etc. (Ricardo Mora Rodríguez,
2010) (José Lopez Chicharro, 2023).

125
PROCEDIMIENTO

Nota: Para todas las pruebas, previamente se debe realizar una


sesión de calentamiento dinámico moviendo todas las articulaciones
tanto de miembro inferior como superior, cuello, espalda y trotando en
el puesto, el cual no debe tener una duración superior a 10 min.

Test de Cooper:

• Previa explicación de la prueba al examinado, indáguele si tiene


alguna pregunta o inquietud sobre la misma. Hágale énfasis al
evaluado que durante la prueba debe correr todo el tiempo, dosifi-
cando el esfuerzo para que este sea entre moderado a intenso,
pero no extenuante.

• Ubicar al examinado en la línea de partida.

• De un silbato para iniciar la prueba e inicie el cronómetro.

• Cada 4 minutos de un silbato para informarle al corredor el


tiempo que lleva de prueba.

• Al terminar los 12 minutos de la prueba, de tres silbatos cortos e


inmediatamente detenga el cronómetro y contabilice el número de
vueltas y fracción de vuelta que dio el examinado durante los 12
minutos.

• El examinado debe continuar trotando lentamente y finalmente


caminar hasta que se recupere.

• Con base en la distancia recorrida y utilizando la fórmula para


estimación de la potencia aeróbica para el test de Cooper, determi-
ne el VO2 máx. del evaluado.

• Registre en una tabla los datos para todos los estudiantes.

Test de escalón de Astrand-Ryhming:

• Previa explicación de la prueba al examinado, indáguele si tiene


alguna pregunta o inquietud sobre la misma.

126
• Ubique al examinado frente a un escalón de 40cm de altura en
caso de que se trate de un hombre, o frente a un escalón de 33cm
de altura en caso de que sea una mujer.

• Utilizando la aplicación del metrónomo, calibre el ritmo del mismo


a 90 beats/min, el cual equivale a 22,5 ciclos/min.

• Active el metrónomo y permítale al examinado que se familiarice


con la cadencia que deberá llevar durante la prueba. Recuérdele
que cada señal sonora corresponde a cada uno de los movimien-
tos de subir y bajar cada pie del escalón, así: Primer sonido: Subir
pie derecho; Segundo sonido: Subir pie izquierdo; Tercer sonido:
Bajar pie derecho; Cuarto sonido: Bajar pie izquierdo.

• Una vez esté listo el examinado, haga la señal de inicio y active


el cronómetro.

• Al cabo de 5 minutos de transcurrida la prueba, indique al exami-


nado que suspenda la misma.

• Inmediatamente posterior a terminar la prueba, palpe el pulso


radial y contabilice el número de pulsaciones comprendidas entre
los segundos 15 y 30 del minuto que está transcurriendo tras
haber terminado la prueba.

• Multiplique por 4 el número de pulsaciones que logró contabilizar


en el punto anterior y esta será la frecuencia cardiaca de recupera-
ción.

• Con los datos anteriores y utilizando las fórmulas o el nomogra-


ma para estimación de la potencia aeróbica para el test de escalón
de Astrand y según el sexo, determine el VO2 máx. del evaluado.

• Registre en una tabla los datos para todos los estudiantes.

Test de Rockport de una milla:

• Demarque previamente sobre la pista atlética, con los conos


señalizadores, la distancia de 1 milla (1609m).

• Pese en la balanza al examinado o indáguele por el peso corporal


actual.

127
• Previa explicación de la prueba al examinado, indáguele si tiene
alguna pregunta o inquietud sobre la misma.

• Ubicar al examinado en la línea de partida.

• De un silbato para iniciar la prueba e inicie el cronómetro.

• Anime al examinado para que camine lo más rápido que pueda.

• Una vez el examinado cruce la marca de la milla detenga el


cronómetro e inmediatamente toma la frecuencia cardiaca.

• Posteriormente, con base en el peso de la persona, la edad, el


sexo, el tiempo utilizado en recorrer la milla y la frecuencia cardia-
ca al terminar la prueba y utilizando la fórmula correspondiente
para el test de la milla determine el VO2 máx.

• Registre en una tabla los datos para todos los estudiantes.

CUESTIONARIO
• ¿Cuál fue la diferencia en los valores de VO2 máx. determi-
nados con cada una de las pruebas realizadas en la prácti-
ca?

• ¿Cuál de los test revisados en la práctica utilizaría para


determinar el VO2 máx. en un estudiante universitario
activo?

• ¿Cuál de los test revisados en la práctica utilizaría para


determinar el VO2 máx. en un paciente de 50 años que
desea empezar a hacer ejercicio?

• Describa las aplicaciones clínicas que tienen las pruebas


para determinar el VO2 máx. Tanto directas como indirec-
tas.

Artículo de refuerzo: (Buttar et al., 2019)

Buttar, K., Scholar, Saboo, N., & Kacker, S. (2019). A review: Maximal
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134
Manual de Prácticas de Fisiología Humana

De la teoría a la práctica, se ofrece como un texto guía para apropiar y


correlacionar clínicamente los conceptos teóricos revisados en la asig-
natura de fisiología humana. Es un manual que no solo está pensado
solamente para los estudiantes de medicina en sus primeros años de
formación, sino para cualquier otro estudiante del área de la salud.

En esta primera edición se han compilado doce prácticas que abordan


los temas más relevantes y de obligatoria revisión por parte de los
estudiantes de las ciencias de la salud, las cuales se han diseñado
para que se lleven a cabo sin el uso de reactivos costosos o equipos
especializados.

Cada práctica incluye unos objetivos claros y fácilmente medibles,


aborda posteriormente una fundamentación teórica sobre el tema a
tratar y finaliza con unas preguntas de estudio que le permitirán al
estudiante reforzar los conceptos aprendidos y correlacionarlos clíni-
camente con artículos científicos actualizados, los cuales se sugieren
al final de cada práctica.

ISBN (Digital): 978-628-7656-27-7

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