Estrategias - Creatividad

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 3

1.

Dibujar y pintar
¿A qué niño no le gusta dibujar y pintar? A todos les encanta, ya
que dejan salir ese Leonardo Da Vinci que llevan dentro para
pintar lo que se les pasa por la cabeza.
Algunos pintan a sus padres y hermanos, otros a mariposas y
distintos animales, y otros, incluso, son más creativos e
imaginativos y nos sorprenden con sus dibujos. Y es que,
dependiendo del resultado final podemos deducir muchas cosas
de su personalidad.
Es una actividad muy divertida para dejarse llevar por su
creatividad, y, para que todo lo dibujado quede muy colorido,
nuestros rotuladores para la sublimación son ideales.
Déjale que dibuje con ellos, e imprime su dibujo sobre un plato,
una mochila o una camiseta, ¡verás qué momentazo de
diversión familiar!. Si todavía no conoces esta técnica, te
contamos qué es la sublimación y para que se utiliza.
2. Jugar con plastilina
Jugar con plastilina es una de las técnicas para desarrollar la
creatividad de los niños que se lleva practicando desde hace
muchos años. Es una actividad que les impulsa a sacar su vena
escultora, y les facilita reproducir sus ideas en 3D, además de
estar en contacto con diferentes texturas.
Por otro lado, favorece la relajación y potencia la
concentración, y a su vez desarrolla la motricidad fina. Algo que
a muchos niños les cuesta.
Por eso, comienzan a jugar con plastilina desde muy pequeños.
Jugar con este elemento es uno de los ejercicios de
creatividad más antiguos, pero más eficaz.
3. Hacer puzzles
Hacer puzles es una forma lúdica y entretenida para ir
encajando piezas y unirlas para llegar a una creación final.
Además de mejorar la creatividad, mejora la memoria visual,
estimula la relajación y mejora el desarrollo psicomotriz.
Es un juego para hacer en solitario, con otros niños o
familiares, por lo que también puede mejorar las relaciones
familiares y sociales.
Existe una gran variedad de puzzles, desde animales, pasando
por el cuerpo humano, hasta de diferentes capitales de Europa o
del mundo. Esto también ayuda a que aprendan sobre distintas
cuestiones al mismo tiempo que se divierten y juegan.
4. Hacer manualidades
Hacer manualidades es una actividad muy asequible y fácil,
tanto para hacer en clase como en casa. Además, a los niños
les encanta, ya que se entretienen y, al mismo tiempo,
desarrollan un pensamiento creativo mientras lo hacen.
Fomentar las manualidades y el DIY en los niños les ayudará no
solo a mejorar la creatividad sino también a trabajar su
paciencia y su psicomotricidad, además de desarrollar su
imaginación.
Un buen ejercicio puede ser pedirles, una vez hayan finalizado
con la manualidad, que expliquen lo que han creado. ¡Te
sorprenderá la imaginación que tienen algunos!
5. Escuchar música y bailar
Mover el esqueleto nos encanta a todos, tanto a niños como a
adultos, incluso a nuestros mayores también les chifla. Y es
que, escuchar música es una actividad divertida que, muchas
veces inconscientemente, te hace mover el body y te hace
cantar a grito pelado. Te suena, ¿verdad?
Escuchar música es genial para divertirse solo, en familia o con
amigos. Automáticamente, nos sale la sonrisa, nos sube la
autoestima y nos hace movernos al son de la melodía. Siempre
se ha dicho que la música es terapéutica, por eso es importante
que fomentes el consumo de la música entre los niños.
6. Visita museos y exposiciones
Llevar a los niños a visitar museos o exposiciones es una
actividad muy enriquecedora además de estimulante, ya no solo
por cambiar de ubicación y su entorno, sino por la gran
oportunidad de apreciar el arte en otro formato diferente.
Además, es una opción ideal para preguntarle por su opinión, y
saber qué le ha parecido lo que ha visto. Así, fomentarás su
faceta más analítica y sabrás si ha estado atento y
observador.
7. Leer cuentos
Si el niño aún es muy pequeño y no sabe leer, es muy
importante leerle cuentos y hacerle partícipe de los mismos.
Esto le ayudará a fomentar su imaginación y creatividad, ya
que, al solo escuchar el cuento, él mismo se imaginará las
escenas y cómo será el protagonista de cada cuento.
Incluso podéis dar un paso más en cuanto a diversión, creando
vuestro propio cuento para que pueda participar en la creación
de la historia, donde incluso vosotros mismos podéis ser los
personajes principales.
8. Juegos de palabras
Juegos de palabras como el “veo veo”, “el ahorcado” o
“apalabrados” son ejercicios de creatividad ideales para
enseñar ortografía, estimular el pensamiento estratégico e
incluso conseguir que el niño amplíe su vocabulario.
Los juegos de palabras mejoran la creatividad y ofrecen horas y
horas de diversión. Además, se pueden jugar en cualquier sitio y
en cualquier situación. Mientras se va en el coche, en casa de
amigos, o en una sala de espera de un hospital o pediatría.
Hasta aquí nuestra lista de actividades que ayudarán a tu hijo o
hija a mejorar su creatividad. ¿Y en tu casa? ¿Practicáis alguna
de ellas? ¿Tienes otras maneras de estimular al mismo tiempo
que os divertís? Si necesitas una buena inspo de creatividad
no dudes en entrar en nuestro canal de YouTube y seguirnos.
En él encontrarás infinitas posibilidades de manualidades que
podrás hacer con tu hijo e ideas de dibujo que le encantarán.

También podría gustarte