Instrumentos Internacionales de Relaciones Individuales y Colectivas de Trabajo

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Teoría General del trabajo y las Relaciones de Trabajo Humano

Instrumentos Internacionales de Relaciones Individuales y Colectivas de

Trabajo

Guía

1. Caso.

Baena, Ricardo y otros (270 trabajadores vs. Panamá)

Decisión: febrero 2, 021

Se denunció por parte del Comité Panameño por los Derechos Humanos, ante la

Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) al Estado de Panamá, por

el despido arbitrario de 270 empleados públicos y dirigentes sindicales, que habían

participado en distintas protestas contra la política gubernamental en reclamo de

sus derechos laborales. Para concretar la sanción, el Estado aplicó una ley (la 25)

dictada con posterioridad a los hechos que estableció que la tramitación de los

juicios que iniciaran los trabajadores a raíz de los despidos se realizaría en el fuero

contencioso-administrativo y no en el laboral, tal como determinaba la legislación

vigente.

Previo a la llegada del caso a la CIDH, la Jurisdicción de Panamá denegó las

pretensiones de reintegro, en tres tipos de procesos: a) los recursos de amparo de

garantías Constitucionales planteados ante el pleno de la Corte Suprema de

Justicia; b) las demandas de inconstitucionalidad de la Ley 25 interpuestas también

ante el pleno de la Corte Suprema de Justicia, y c) las demandas contencioso-


administrativas de plena jurisdicción interpuestas ante la Sala Tercera de la Corte

Suprema de Justicia.

Ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ésta presentó el caso en

la Corte Interamericana de Derechos Humanos, quien realizó unas

recomendaciones que no fueron acatadas por el Estado y por ello se decidió ir a la

Corte Interamericana de Derechos Humanos.

La Corte por unanimidad, después de un proceso, en donde se presentaron

pruebas y alegatos de conclusión de ambas partes declaró que el Estado de

Panamá había violado los derechos a la libertad de asociación, a las garantías

judiciales y a la protección judicial y los principios de legalidad y de

irretroactividad de la ley en perjuicio de los 270 trabajadores. En la parte

considerativa afirmó:

“136. Debe reiterar la Corte que los procesos judiciales se basaron en la aplicación de la Ley
25 a los trabajadores destituidos, la cual no regía al momento de los hechos que motivaron
las destituciones y que este Tribunal ha considerado contraria al principio de legalidad y de
no retroactividad (supra párr. 115). La normativa jurídica que contemplaba los procesos
aplicables en el momento de los hechos por los cuales fueron despedidos fue derogada
precisamente por la citada Ley 25.

137. El artículo 8.1 de la Convención (Americana de Derechos Humanos) consagra los


lineamientos del llamado “debido proceso legal”, que consiste en el derecho de toda persona
a ser oída con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable por un juez o tribunal
competente, independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la ley, en la
sustanciación de cualquier acusación penal formulada en su contra o para la determinación
de sus derechos. El artículo 8.2 de la Convención establece, adicionalmente, las garantías
mínimas que deben ser aseguradas por los Estados en función del debido proceso legal. Por
su parte, el artículo 25 de la Convención ordena proporcionar un recurso sencillo y rápido
para la protección de los derechos de las personas

En la parte resolutiva la Corte señaló que el Estado violó los principios de

legalidad y de irretroactividad consagrados en el artículo 9 de la Convención

Americana sobre Derechos Humanos, los derechos a las garantías judiciales y la

protección judicial consagrados en los artículos 8.1, 8.2 y 25 de la Convención

Americana sobre Derechos Humanos, y violó el derecho a la libertad de asociación

consagrado en el artículo 16 de la Convención Americana sobre Derechos

Humanos.

Decide por ende, que el Estado debe reintegrar en sus cargos a los 270 trabajadores,

pagándoles los montos correspondientes a los salarios caídos y demás derechos

laborales que les correspondan según su legislación interna. Si no fuere posible el

reintegro deberá brindarles alternativas de empleo que respeten las condiciones,

salarios y remuneraciones que tenían al momento de ser despedidos. En caso de no

ser tampoco posible esto último, el Estado deberá proceder al pago de la

indemnización.

Condena por equidad, a pagar a cada uno, la suma de US$ 3.000 por concepto de

daño moral, US$ 100.000 como reintegro de gastos generados por las gestiones

realizadas por las víctimas y sus representantes, y la suma de US$ 20.000 como

reintegro de costas, causados en los procesos internos y en el proceso internacional

ante el sistema interamericano de protección.

Decide además la Corte Interamericana que supervisará el cumplimiento de esta

Sentencia y sólo después dará por concluido el caso.


REFLEXIÓN:

A partir de este caso y de la revisión de la Convención Americana de derechos

humanos, se le pide al docente, antes de estudiar la unidad, que reflexione sobre

los siguientes interrogantes:

1. ¿Es obligatorio para los Estados pertenecer a la ONU, la OEA o a la OIT? ¿Es

conveniente, estar en ellos?

2. ¿Se sacrifica la soberanía de un país cuando un Estado reconoce la competencia

contenciosa de la Corte Interamericana de Derechos humanos?

3. ¿Por qué son obligatorias las sentencias que profiere la Corte Interamericana

de Derechos Humanos o la Corte Internacional de Justicia?

Las NIT no sólo provienen de la OIT, también otros organismos las


producen, aunque en menor cantidad y menor especialidad. Entre otros y
de manera sucinta estarían:

La CARTA DE NACIONES UNIDAS (1945), en cuanto se refiere a los


derechos humanos en general.

La DECLARACIÓN DE FILADELFIA (1944) que redefinió los objetivos y


fines de la OIT.

La DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS, que


consagran el derecho a la libre elección del trabajo, protección al desempleo,
el descanso remunerado, las vacaciones y el derecho de asociación en sus
artículos 23 y 24 (1948).

El PACTO INTERNACIONAL DE DERECHOS CIVILES Y POLÍTICOS, que


en sus artículos 8a y 22, se refiere a la prohibición al trabajo forzoso y el
derecho a fundar sindicatos (1966).

El PACTO INTERNACIONAL DE DERECHOS ECONÓMICOS, SOCIALES


Y CULTURALES que en sus artículos 6, 8 y 9 retoman los derechos
humanos y se refieren a la seguridad social (1966).

La CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO, en el artículo 32 se


reconocen los derechos del menor a estar protegidos contra la explotación
económica y contra el desempeño de todo trabajo peligroso o que
entorpezca su educación o su salud física o mental y se obliga allí a que los
estados miembros de la ONU adopten medidas para asegurar lo anterior,
tales como fijar una edad mínima para trabajar, adecuados horarios y
condiciones de trabajo y sanciones para los empleadores infractores.

La CARTA DE LA OEA, que proclama los derechos fundamentales de las


personas, la erradicación de la pobreza (1948, 1967, 1985 y 1993).

La DECLARACIÓN AMERICANA DE LOS DERECHOS Y DEBERES DEL


HOMBRE en sus artículos XIV, XVI y XVII señala que toda persona tiene
derecho al trabajo en condiciones dignas, a recibir una remuneración en
relación con su capacidad, que le asegure un nivel de vida conveniente, que
toda persona tiene derecho a la seguridad social y el derecho de asociarse
con otros para promover intereses de cualquier orden (1948).

El PROTOCOLO DE BUENOS AIRES que en el artículo 43, señala que el


trabajo es un derecho y un deber social “…otorga dignidad a quién lo
realice y debe prestarse en condiciones que, incluyendo un régimen de
salarios justos, aseguren la vida, la salud y un nivel económico decoroso
para el trabajador y su familia, tanto en sus años de trabajo como en su vejez
o cuando cualquier circunstancia lo prive de la posibilidad de trabajar.”,
igualmente el derecho de asociación y la importancia de la contribución de
las organizaciones (1967).

La CONVENCIÓN AMERICANA DE DERECHOS HUMANOS (también


llamada Pacto de San José) se refiere a los derechos humanos de carácter
civil y político, en el artículo 16 se refiere al derecho de asociación.

El PROTOCOLO ADICIONAL a la Convención Americana sobre los


Derechos Humanos en materia de derechos económicos, sociales y
culturales (También llamado Protocolo de San Salvador), siendo el principal
instrumento contentivo de las NIT en el sistema interamericano, contiene 4
artículos dedicados a lo laboral, los artículos 6, 7, 8 y 9, que se refieren al
derecho al trabajo, condiciones justas, equitativas y satisfactorias del mismo,
los derechos sindicales y el derecho la seguridad social.

Otros instrumentos internacionales que pueden generar NIT son los


tratados bilaterales o multilaterales entre países, que, a pesar de no estar
referidos expresamente a lo laboral, como en el caso de los Tratados de
Libre Comercio, se consagran normas de protección laboral, como elemento
esencial para mantener el convenio entre los países firmantes.

A pesar de los numerosos instrumentos internacionales expuestos, es una


realidad que los convenios y recomendaciones de la OIT son la principal
fuente de creación de las Normas Internacionales del Trabajo, producto de
la inevitable internacionalización del trabajo por efectos de la expansión de
la economía. Conclusión de lo expuesto, es la necesidad de conocer, la
estructura, la organización interna y el funcionamiento de esta entidad
internacional.

2. Caso
1. El sindicato de la Empresa Social del Estado “Hospital San Vicente de

Paul”, del Municipio de “Vitara”, “Sintrasanvicen”, decide cesar en sus

funciones durante los días 28 y 29 de julio de 2022, como consecuencia de la

falta de pago de las primas legales y extralegales del junio del año 2006, ,

luego de la promesa insatisfecha de su pago. El Gerente de la E.S.E.,

inmediatamente solicita una visita del Ministerio de Protección social, para

efectos de que constante y declare el paro ilegal. Efectivamente el delegado

del Ministerio constata la suspensión del servicio público, declarando ilegal

el paro en una empresa que presta servicios públicos esenciales. Como

consecuencia de ello son despedidos 5 trabajadores oficiales. Quienes

demandan ante la jurisdicción ordinaria su reintegro, argumentan que

existe una flagrante violación de los convenios 87 y 98 de la OIT, que son

convenios prioritarios ratificados por Colombia, porque la declaración de la

ilegalidad del paro, lo hizo una entidad del Estado, frente a otra entidad del

Estado como lo es la E.S.E. hospital que pertenece al municipio.

Textualmente citan en su demanda, una serie de recopilaciones de

decisiones y principios del Comité de Libertad Sindical del Consejo de

Administración de la OIT, que rezan:

“La declaración de ilegalidad de la huelga no debería corresponder al

gobierno, sino a un órgano independiente de las partes y que cuente con su

confianza (véase informe del comité, caso núm. 1598, párrafo 477.

No es compatible con la libertad sindical que el derecho de calificar una

huelga como ilegal en la administración pública competa a los jefes de las

instituciones públicas, ya que estos son jueces y parte en el asunto. (Véase

informe, caso núm 1190, párrafo 242,d).


Refiriéndose a una circular oficial referente a la ilegalidad de toda huelga en

el sector público, el comité consideró que asuntos como este no deberían ser

competencia de las autoridades administrativas (Véase informe 1304,

párrafo 96)” .

A su vez el Hospital y el Ministerio de Salud y Protección Social,

manifestaron que conforme a la sentencia C-432 del 12 de septiembre de

1999 con ponencia del Doctor CARLOS GAVIRIA DIAZ, se había revisado

el tema, al declararse exequible el art. 451 del C.S. del T., que trata de la

ilegalidad de la huelga y de la facultad administrativa de declararla.

Con base en lo anterior responda las siguientes preguntas:

1. ¿Es el servicio de salud, un servicio público esencial? ¿Por qué?

2. Va en contravía del Convenio 87 y 98 que se coarta la libertad sindical

declarando la ilegalidad de una huelga?

3. Está usted acuerdo con que se erija un instituto particular que declare

la ilegalidad de las suspensiones o huelgas en donde esté implicada una

entidad del Estado? ¿Quién la pagaría?

4.Como juez de instancia, como resolvería este caso?

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