Trabajo de Teoría y Sistema Político #2

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La Banda- Santiago del Estero.

Escuela Normal Superior. Dr. José Benjamin Gorostiaga.


Profesorado para la Educación Secundaria en Economía.

Teoría y Sistema
Político.

(Informe de Lectura.)
Denominación:
“La política como práctica social concreta”.
Docente a cargo del espacio:
Prof. Alejandra Dominguez.
Integrantes:

Curso: 2º Año.
Ciclo lectivo 2.015
A modo de presentación:

Entendemos que la política lejos de ser una cuestión únicamente remitida al


plano de la actividad partidaria, es más bien una de las prácticas cotidianas
más antiguas que ha desarrollado la humanidad. En la búsqueda de textos
referidos a la temática, nos parece relevante destacar a Hannah Arendt, quien
afirma que “la política es una forma de vida más plenamente humana. El
problema es que su concepto de lo político adquiere una significación muy
variable, según los diferentes contextos de debate teórico y de análisis
histórico”. Es por eso, que sin dejar de lado la polisemia del término,
abordaremos el sentido que lo relaciona con la cotidianeidad de actores
sociales concretos, que toman decisiones determinadas, en la búsqueda de
una forma particular de bien común.

Mediante la técnica de debate grupal, muy oportuna para el abordaje


temático en este espacio curricular, se explicitará el diálogo surgido entre los
integrantes de este grupo…
Miércoles 20 de octubre, 16.15 hs.

Mario: ¡Pienso que deberíamos empezar, expresando lo que nosotros


entendemos por política!

Jesica: Esa es buena idea. Para mi la política es una actividad humana, que
permite en cierto modo organizar los intereses de los grupos humanos.

Claudia: Mas que organizar, me parece trata se plantee la convergencia de lo


mismo.

Mario: No se, porque también podemos hablar de política en la divergencia.

Caro Magnone: Para mi tiene que ver con la participación, con el hecho de
cómo me involucro, con alguna cuestión.

Iver: Para mi que va por el lado de la participación, yo digo lo mismo, o sea que
esta falta de participación, que hay por ejemplo, en la conformación del centro
de estudiantes, es un problema político.

Carolina Santillán: Eso de la falta de participación más tiene que ver con lo
cultural, con el individualismo, con el conformismo, y la pasividad.

Mario: Seguro que si, Fíjense que en la introducción pusimos que es una
práctica social muy antigua, entonces debemos pensar que dicha práctica esta
marcada por las características de la época, sino no hubiesen habido distintos
sistemas políticos en cada época.

Jesi Burgos: y más aún, no hubiesen existido grandes revoluciones y


transformación en lo político y social.

Claudia: Yo he leído a Freire, y el dice algo tan simple, que el sujeto hace
política, cuando decide o deja que los demás decidan por el. Claro se tratará de
un tipo de política en función de la opción que se tome.

Iver: ¿Entonces?

Mario: La definimos como una actividad humana, en la que obviamente se


ponen en juego los intereses, que finalmente deberían ser consensuados,
mediante mecanismos democráticos de decisión participativa.
Carolina Santillán: Bueno… sigamos…

Carolina Magnone: ¿Qué podemos decir de la relación entre política y poder?

Claudia: Para muchas personas, la política es el medio para conseguir el


poder.

Mario: yo pienso que hay como una relación mutua entre política y poder. Por
un lado, están quienes a través de la actividad política logran el poder, y por el
otro los que a través del poder, logran participar en grupos políticos, como son
los partidos. Es el caso del poder económico, que en muchas oportunidades
apoya a un candidato u otro, en función a los intereses que se pretende que
este (el candidato) resguarde.

Yesica Burgo: Y bueno, caso concreto, lo de clarín con el PRO, que utilizan
cualquier mecanismo de masa, para fomentar opinión pública a favor de ese
sector.

Iver: Lo lamentable, es que de esa parte no se escucha propuesta solidamente


fundada, ya que no hacen más que desinformar y elaborar discursos confusos.

Mario: ¿Formulamos el informe?

Carolina Magnone: ¡Dale!

“La política y el poder”.

Es importante admitir que no hay actividad humana ajena a la política, ni


política que no se asocie a las diversas actividades de los hombres. Todos los
problemas que se refieren a la existencia humana tienen que ver con la política,
pues ésta es un principio activo, susceptible de abarcar todos los aspectos de
la vida del hombre en sociedad. La actividad política se caracteriza
precisamente por su universalidad y diversidad. El hombre como ser social,
esta inmerso en un haz de relaciones sociales que determinan su vida; estas
relaciones, cada vez más intensas, afectan a todos los ámbitos de la vida
humana; y la política, pensada como gobierno de estas situaciones sociales
dirige tales situaciones tendientes a satisfacer necesidades sociales. De ahí
que estas sean profundamente estudiadas por las ciencias del hombre.

La política nace y se desarrolla cada vez más en función del surgimiento, el


avance y la universalización de la división social del trabajo. El interés y las
ventajas de ciertos individuos y grupos es satisfecho en detrimento del interés y
las ventajas de los otros: la fuerza de unos es la debilidad de los otros. De ahí
que esta como práctica, aglutine a un cierto número de individuos que en torno
a sus intereses compartidos, se propongan aunar fuerzas, que basadas en sus
concepciones ideológicas, se pronuncien en virtud a la obtención del bien
común.

Continuando, no es posible pensar la política aislada del poder. Para


gobernar las situaciones sociales a las que venimos refiriendo, es necesario
dicho poder basado en la capacidad de obtener la obediencia de otros. Aquel
que tiene el poder es quien es capaz de imponer a los demás una definición de
metas y un modelo de organización. En otras palabras, el poder se encuentra
ampliamente diseminado en la sociedad y concentrado en el Estado,
sostenemos que el poder en general y el poder político en particular solo puede
ser entendido, partiendo de la constatación de la existencia de una situación en
la que un individuo, grupo o institución tiene la voluntad y la capacidad real y
potencial para decidir y provocar que otro individuo, grupo o institución realice,
impida y/o modifique una acción, independientemente de la fuente que se
utilice para el ejercicio del mismo. El poder coercitivo, como capacidad de
obtener obediencia, mediante la presión, amenaza y privación; es característico
de modelos de estados autoritarios, en el que el poder en si mismo está
altamente concentrado en la figura misma del estado; el poder persuasivo es el
mecanismo que permite obtener obediencia, sin la influencia de medios
coercitivos, es decir a través de la unificación de las preferencias y prioridades
ajenas con las propias, logrando la convicción de un grupo determinado. Por
último, el poder retributivo, pretende lograr la obediencia mediante el
establecimiento de una relación de intercambio.

Si pensamos en la sociedad argentina en general y en la de nuestra


provincia en particular, podemos expresar que el poder que se ejerce, tiene sus
bases en las tres fuentes antes expresadas. Desde los orígenes del estado
moderno, nuestra sociedad se configuró, desde el ejercicio coercitivo del poder,
puesto que en la instancia fundacional del mismo, la búsqueda de la cohesión y
la construcción del aparato estatal; hoy se reconoce una larga tradición en la
implementación de la coerción, en la política que han desarrollado los distintos
sectores sociales. Actualmente, los partidos políticos que llegan al poder
legitimitado desde el acto del sufragio, utilizan todos los modos de poner en
práctica el poder, inclusive el coercitivo, muy a pesar de que en sus campañas,
se muestren persuasivos, y respetuosos de la libertad en cuanto a las
decisiones que toma el pueblo, es decir, en el acto mismo de pensar distinto. El
poder retributivo, en cuanto a la presión que muchas veces se realiza bajo la
amenaza de flexibilización laboral a los empleados de la administración pública,
es muy común en sociedades, que como la nuestra, ha naturalizado
comportamientos de temor a las represalias propias de gobiernos que
asumieron características feudales en estos últimos años. Por otro lado, la
puesta en escena de un montaje en el que la forma persuasiva de poder, se
materializa en propaganda oficial, que los medios afines al poder de turno
difunde, termina por conformar esta triada de modos, desde la que se práctica
el poder, con la finalidad de lograr la adhesión bajo cualquier costo y la
permanencia de un partido determinado; aún a expensas de la identidad
ideología que dio origen al partido político gobernante. Como opinión
compartida, el ejercicio del poder por parte de un cierto sector debe tener
temporalidad. La temporalidad en la duración del ejercicio del poder y la
renovación de los cargos es, también, un requisito indispensable para evitar la
corrupción y el nepotismo. La prolongada permanencia en los cargos políticos,
fenómeno muy común en nuestra democracia, es sospechosa y hay pruebas
en la historia misma de que tal cuestión conduce, con frecuencia, a la
corrupción.

El ejercicio del poder no debe gozar de inmunidad ante la crítica para evitar
así la corrupción. Por eso, la libertad e independencia de los medios
formadores de opinión pública, para ejercer la crítica, es algo esencial en una
democracia. Un recurso del que nuestra democracia está muy necesitada.
Hace falta prensa libre que aporte luz y mayor transparencia a la política
mediante la denuncia de corrupciones, abusos, traiciones y desmanes. No
obstante y a modo de reflexión, decíamos más arriba que la política es una
práctica que nos atraviesa, que forma parte de nuestras vidas. No podemos
pretender permanecer inertes a cuestiones que atañen a la sociedad en su
conjunto y al destino de cada uno de los habitantes, de ahí la necesidad de la
participación, racional, crítica y conciente en el momento de la toma de
decisiones trascendentales; no solo ante el acto del sufragio, sino en el hecho
de involucrarse en organizaciones o agrupaciones que persiguen un fin común,
que se materializa en una causa compartida cuyo logro tiende a la búsqueda
del bien común en un aspecto de la realidad concreta que se desea mejorar.

Para tener en cuenta este domingo 25 de octubre:

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