ANA
ANA
ANA
CURSO:
FUNDAMENTOS DE LA INGENIERIA
GRUPO IV:
2024021718
DOCENTE:
JULIO 2024
LIMA-PERÚ
ANTÓN RAUL:
Antes de que estuviéramos en pandemia, solía hacer mis trabajos bajo presión, pese a ello
siempre terminaba haciendo un buen trabajo. Nunca tuve hábitos de estudios, o sea un horario y
regirme a ello, pensaba que todo lo estaba haciendo bien, jamás me gustó leer, detesto eso, al
menos que sean fórmulas matemáticas, pero no suelo leer ni libros, ni artículos, ni revistas.
Cuando empezó la pandemia del COVID 19, el gobierno buscó alternativas para reemplazar la
educación presencial , y nació la peor idea , “Aprendo en casa”, tanto como en TV o sus
plataformas virtuales , ahí fue cuando vi el estudio como algo que tenía que hacer por
obligación , siempre deteste esa forma de educación, 2 años sin aprender , igual mucha o poca
de la responsabilidad , fue mía , ya que tampoco me esmere en estudiar por mi cuenta los temas
que no dominaba , en matemáticas cuando hay algún tema que no entiendo, no paro hasta por
fin entender y eso creo que es una de mis virtudes, solo que al final me suelo confiar demasiado
porque creo que lo se todo y en realidad no es así, en conclusión , considero que todo esto de la
irresponsabilidades que tengo en el curso , fue por no tener ningún habito de estudio , dejar
todo a última hora , como siempre me gusto trabajar bajo presión , así me acostumbre.
GUERRA DARWIN:
Desde mi primer año de secundaria, tomé la decisión de trabajar, no porque mis padres me lo
pidieran, sino porque los talleres de los colegios no me interesaban. Un familiar me llevó a un
trabajo que hasta hoy me genera ingresos los fines de semana. Aunque lograba mantener
buenas notas, 16 o 17, nunca me esforzaba más allá de lo necesario, solo tenía como objetivo
aprobar. Al salir del colegio, postulé a la universidad, pero no ingresé. Lo intenté de nuevo al
siguiente año, combinando trabajo y estudio, pero otra vez fallé. La verdad es que los cursos
quizá por eso se me dificultó el ingreso, tenía que enfocarme en otros cursos para comenzar
los que deje de lado. Después de otro año de intentarlo, logré entrar. Durante ese tiempo, me
di cuenta de que soy algo bueno en números y en cursos de letras, pero me falta aún el
poco más de 2 meses, aunque soy introvertido y no tengo muchas características sociales, he
conseguido hacer algunos amigos. Sin embargo, sigo haciendo lo mínimo necesario y me
escolar e incluso parte de la época preuniversitaria, el problema fue cuando empecé a leer
textos más complejos, como los científicos, ya que estos requieren una mayor concentración y
una comprensión más profunda. Sin embargo, los textos más sencillos como los narrativos o
literarios los he llevado de una mejor manera. En cuanto al razonamiento matemático, nunca
ha sido un gran obstáculo para mí, ya que tengo un buen manejo de los números. Aunque, el
razonamiento matemático abarca más que solo matemáticas básicas, y en varias ocasiones
hubieron temas que se me han complicado. En general, he logrado adaptarme y superar los
distintos desafíos que se presentan, pero estos dos temas (razonamiento matemático y
comprensión lectora) puedo decir que solo los supe sobrellevar mas no dominarlos.
MONTERO DARIANA:
Para empezar, en el colegio nunca tuve la necesidad de estudiar después de clases, solo hacía
mis tareas y ya. Mis notas eran promedio y tampoco quería sobresalir en mis notas, no lo veía
necesario. Así que me metía en otras cosas como proyectos, danzas, y obras. Cuando llegué a
secundaria, me chocaron las matemáticas porque no tenía mucha base, pero en otros cursos,
como historia, geografía y psicología, me iba bien, aunque solo aprendía para los exámenes y
luego no recordaba mucho. Mis padres nunca me presionaron porque no estaban en casa; mi
estudio dependía solo de mí. Ellos solo querían que tuviera notas aprobatorias, como 16 o 17,
Sin presión con los estudios, me puse a mejorar mi inglés y a aprender un poco de francés.
La pandemia me ayudó a estudiar francés, ya que ir al instituto no era factible. Sin embargo,
prestaba atención en uno o dos cursos. Creo que soy procrastinadora porque soy realmente
No leo mucho; lo único que he leído completo son historietas o novelas. En el colegio nos
daban libros para comprar y de la biblioteca, pero nunca los leí completos porque no los
encontraba interesantes. Siento que necesito orientación para motivarme en los estudios, ya
que solo hago las tareas y no repaso a menos que sea necesario, como para un examen,
en mi último año de colegio que me enseñó varios métodos. En matemáticas, no soy muy
buena porque no practicaba ni de pequeña ni ahora, solo hago lo que veo en clase. Aunque a
Desde que inicié secundaria me di cuenta que muchas veces me costaba prestar atención por
mucho tiempo y que no me esforzaba lo suficiente para hacerlo ni para tener notas altas, me
diagnosticada con trastorno de déficit de atención (TDAH), durante la pandemia esto fue más
difícil de trabajar debido a las distintas distracciones que podía encontrar estando en casa. La
etapa pre universitaria fue un poco complicada ya que no contaba con una buena base en
cuanto a matemáticas y ciencias, también el hecho de la presión constante que ejercían los
demás y yo sobre mí. No considero que sea una persona que deje todo a última hora pese a
que no suelo tener una buena organización y sobre mis hábitos de lectura, soy una persona a
la cual le gusta mucho leer, aunque no precisamente libros académicos o de ese estilo,
disfruto mucho de un libro de ciencia ficción o romance, desde muy pequeña fui inculcada de
este hábito por mi familia. En lo que es comprensión lectora si bien se me dificulta mucho
debido al TDAH algunas de las complicaciones que tengo es que suelo distraerme mucho y
pierdo el hilo de la lectura fácilmente, otro más es la impulsividad ya que suelo leer muy
rápido y saltarme usualmente algunas líneas y por último, la dificultad para retener
información a corto o largo plazo. En cuanto a razonamiento matemático, viví mucho tiempo
en otro país en el cual el nivel de matemáticas era mucho menor al que se tenía en Perú, al
momento de venir a estudiar acá fue algo que llegó a afectarme mucho y que de cierta
manera sigue afectando como por ejemplo en la dificultad que puedo tener al resolver un
ejercicio. Muchas veces no tengo motivación para estudiar y cuando lo hago lo siento como
Antes de la pandemia, no teníamos hábitos de estudio estructurados y solíamos trabajar bajo presión.
especialmente en matemáticas y ciencias, debido a una base insuficiente en estas materias. Algunos
de nosotros admitimos ser procrastinadores, encontrando productividad solo bajo presión, mientras
que otros nos preocupamos por nuestra actitud de hacer lo mínimo necesario. Además, nuestras
actitudes hacia la lectura varían: algunos no disfrutamos leer, limitándonos a lo necesario, mientras
otros disfrutamos de géneros como la ciencia ficción y el romance, un hábito inculcado desde
pequeños. Como dinámica de motivación proponemos establecer un grupo de estudio semanal donde
cada uno comparta sus fortalezas y ayude a los demás en sus áreas de dificultad. Por ejemplo, quien
disfruta de la lectura puede recomendar libros o técnicas de lectura que han ayudado, mientras quien
tiene buen manejo de los números puede ofrecer tutorías en matemáticas. Además, se pueden
establecer objetivos pequeños y alcanzables, celebrando los logros de cada uno para mantenernos
motivados. Esta colaboración no solo mejorará nuestras habilidades académicas, sino que también
personal, siempre y cuando cada persona esté decidida y comprometida a cambiar esos malos
hábitos.