0% encontró este documento útil (0 votos)
9 vistas5 páginas

7

Descargar como docx, pdf o txt
0% encontró este documento útil (0 votos)
9 vistas5 páginas

7

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1/ 5

Por otra parte tenemos al Dr.

Ramón
Daniel Pizarro, Tratadista Argentino, quien
en su libro “Daño Morar' Editorial
HAMMURABI S.A., a las paginas 125 y
s.s. señala lo siguiente:

"El daño moral es cierto cuando


cualitativamente resulta consiatable su
existencia, aun cuando no pueda
determinarse su cuantía con
exactitud.
El tema se relaciona con la prueba
del daño moral, cuya existencia
frecuentemente suele ser inferida,
por vía de presunciones o indicios,
de la sola lesión a ciertos intereses
no patrimoniales que hacen la
esencia misma de la dignidad
humana. ”

De igual manera los famosos tratadistas


franceses “Mazeaud y Tune” señalan en su
Tratado de la “Responsabilidad Civil del
Daño Indirecta”. Tomo II, volumen 2,
Editorial EJEA, a las paginas 270 y
siguientes:

'‘Por no existir la responsabilidad más


que si están reunidos sus tres
elementos constitutivos (perjuicio,
culpa, vínculo de causalidad), debe ser
realizada la prueba de la existencia de
esos elementos para que se pueda
pronunciar una condena,..,... por eso y
la observación se refiere no sólo a la
carga de la prueba de la culpa, sino a
la carga de la prueba del vínculo de
causalidad, interesa destacar que, por
haber sido establecidas las
presunciones de responsabilidad en el
exclusivo interés de la víctima, no
pueden ser invocadas sino por ellas,
nadie más puede alegarlas. ”

Siguiendo este orden de ideas, podemos


seguir citando a cientos de tratadistas de
alto renombre en materia de Daño Moral
quienes sostienen
que dicho daño no es susceptible de prueba.
Ahora bien, para complementar estas
premisas nos vamos a referir al criterio
sostenido en cuanto a la pruebas en materia
de Daño Moral establecidas durante décadas
por nuestro Tribunal Supremo de Justicia.

Nuestro máximo Tribunal e ultima instancia es


quien dicta las interpretaciones sobre aquellas
materias o puntos en los cuales existan
disparidad de criterios, y éstas decisiones
deben ser vinculantes para los demás
Tribunales que conforman nuestro sistema
judicial, tal y como lo establece el artículo 335
de la Constitución Nacional. A tal efecto» en
épocas pasadas y ya superadas se
presentaron conflictos en cuanto al Daño Moral
y determinar el mismo a través de medios
probatorios que den certeza de que dicho daño
existe, en virtud de estas controversias
nuestro máximo tribunal se ha pronunciado
como en el caso de la Sentencia del 20 de
Mayo de 1999, identificada con el número
1135-99, señala h> siguiente:

“Los daños morales, por su naturaleza


esencialmente
subjetiva, no están sujetos a una
comprobación directa...”

De igual manera, en fecha 10 de Marzo de


1999, en la causa número 555- 99 señalo lo
siguiente:

“El daño moral no es susceptible de


prueba. Ha sido criterio constante y
pacífico de la doctrina y jurisprudencia
nacional, que el daño moral no es
susceptible de prueba ”

Así mismo en fecha 31 de octubre del año


2000, en la cusa número 340, ei Tribunal
Supremo de Justicia presento el siguiente
criterio:
“Sobre ¡a probanza de los daños
morales, esta Sala de Casación Civil
ha expresado de manera reiterada,
desde sentencia de fecha 10 de
Octubre del año 1991, que lo único
que debe demostrarse plenamente
en una reclamación por daño moral
es el hecho generador o sea, el
conjunto de circunstancias de hecho
que genera la aflicción cuyo petitium
doloris se reclama. ”

Así pues las cosas, esta parte actora considera


plenamente explanado los elementos de
Derecho, la Doctrina v Jurisprudencias
oue señalan la improcedencia de
pretender probar el Palio Moral.

Hoy día la valoración y manera de proceder a su


indemnización se ubica en un Red de
Satisfacción, ya que la indemnización en
metálico no podrá tener otra función que la
satisfactoria, toda vez que es de la esencia de
esta especie de daños el que no puedan ser
tasados en dinero prudentemente. Nunca
existe una perfecta correspondencia
entre di daño Moral v el resarcimiento,
pero la condición de la imposibilidad
matemáticamente exacta de la valoración
sólo puede ser tomada en beneficio de la
víctima y no en su perjuicio. No es razón
subiente para no indemnizar, v beneficiar
así al responsable, el hecho de que no
sea posible establecer un equivalente
exacto, porgue en materia de daño moral
el arbitrio es hasta la esencia de las
cosas, v en- este casa particular Ileso
hasta cercenar la vida de un mujer
enlutando su hogar.

Este mismo criterio ha sido sostenido desde ese


año hasta la actualidad, por lo cual se evidencia
que en Venezuela el Daño Moral es una realidad
Juridica-Social y de comprobada valoración
económica tasándose los criterios antes
expuestos, teniendo en consideración la entidad
del daño causado. Por k> cual, esta parte
Agraviada estima el Daño Moral causado

También podría gustarte