Este documento enfatiza la importancia de confiar en Dios en tiempos de crisis y problemas. Aconseja dejar de preocuparse en exceso por asuntos fuera de nuestro control y mantener la fe en Dios, quien es poderoso y siempre cuida de los suyos. Insta al lector a buscar a Dios en oración y recordar que aunque a veces no lo percibamos, Él siempre está con nosotros.
0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
50 vistas5 páginas
Este documento enfatiza la importancia de confiar en Dios en tiempos de crisis y problemas. Aconseja dejar de preocuparse en exceso por asuntos fuera de nuestro control y mantener la fe en Dios, quien es poderoso y siempre cuida de los suyos. Insta al lector a buscar a Dios en oración y recordar que aunque a veces no lo percibamos, Él siempre está con nosotros.
Este documento enfatiza la importancia de confiar en Dios en tiempos de crisis y problemas. Aconseja dejar de preocuparse en exceso por asuntos fuera de nuestro control y mantener la fe en Dios, quien es poderoso y siempre cuida de los suyos. Insta al lector a buscar a Dios en oración y recordar que aunque a veces no lo percibamos, Él siempre está con nosotros.
Este documento enfatiza la importancia de confiar en Dios en tiempos de crisis y problemas. Aconseja dejar de preocuparse en exceso por asuntos fuera de nuestro control y mantener la fe en Dios, quien es poderoso y siempre cuida de los suyos. Insta al lector a buscar a Dios en oración y recordar que aunque a veces no lo percibamos, Él siempre está con nosotros.
Descargue como PPTX, PDF, TXT o lea en línea desde Scribd
Descargar como pptx, pdf o txt
Está en la página 1de 5
MI CONFIANZA ES DIOS
Devocional 27 de Abril de 2020, IEC OASIS DE ESPERANZA.
VERSICULO PRINCIPAL
“Por lo cual asimismo padezco esto;
pero no me avergüenzo, porque yo sé a quién he creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día” 2 Timoteo 1:12 (Reina- Valera 1960). Importante:
A veces pareciera que no hemos creído en el DIOS TODOPODEROSO del
cual la Biblia habla. Y digo esto porque nuestras actitudes, nuestras reacciones frente a los problemas de la vida o las crisis que enfrentamos reflejan la poca fe que en ocasiones le tenemos a Dios. Tenemos fe en tantas cosas y nos cuesta tanto tener fe en Dios. Por ejemplo, cuando abres el grifo para lavarte las manos, lo abres confiando que saldrá agua y por su puesto que sale agua. Si vas a tu refrigerador en busca de comida, lo abres esperando encontrarla, si sales a tu empleo y tienes que tomar un autobús, sales esperando que ese autobús pase a la misma hora de todos los días, si entras a tu habitación y esta oscura, presionas un botón para encender la luz y es obvio que esperas que la luz aparezca. Pero en lo espiritual se nos hace difícil confiar en que Dios nos ayudara o nos dará las respuestas que necesitamos. ¿Realmente confías en Dios? Esta bien, si confías en Dios entonces deja de preocuparte al extremo por cosas que a veces ya no tienes el control de solucionar, porque ¿Qué ganas con preocuparte al extremo?, solo empeoras tu salud y tu ánimo. Si realmente confías en Dios, debes de mantenerte firme, no te alejes de Él, debes buscarlo e insistir en oración, pues tu misma confianza en Dios te hará querer estar cerca de Él. Hoy quiero recordarte que TÚ DIOS Y MI DIOS es PODEROSO que nunca ha perdido una batalla, que siempre ha tenido cuidado de los suyos, que nunca te dejara porque así Él lo ha prometido, que te ama a pesar de todo porque su amor para tu vida es ETERNO. Hoy quiero invitarte a confiar en ese Dios que te ama, en ese Dios que se preocupa por ti y aunque muchas veces creas que se ha olvidado de ti, la verdad es que en ningún momento lo ha hecho, al contrario, a pesar que no lo has notado Él ha estado allí cuidándote, protegiéndote, alimentándote, y aunque tu poca fe no ha sido capaz de percibirlo tienes que estar seguro que Él ha estado allí a tu lado. Y RECUERDA… Saber en quien hemos creído nos debe dar seguridad y confianza de que TODO estará bien, es ver más allá de lo que nuestros ojos humanos ven, es confiar más allá de lo que nuestra mente quiere hacernos pensar, es escuchar la voz divina que nos susurra al oído que todo estará bien y que no hay nada de que preocuparse. ¿Sabes que necesitamos todos nosotros?, confiar en Dios y declarar como el Apóstol Pablo: YO SÉ EN QUIÉN HE CREÍDO. ¡Tranquilo!, ¡Calma!, ¡Ten Confianza!, ¡No te desesperes!, Confía en Él, porque Él es Poderoso para cambiar cualquier panorama contrario.