Este discurso habla sobre la dignidad del hombre. Argumenta que el hombre es la criatura más afortunada, ya que Dios no le dio un lugar o aspecto definido, sino que le permitió elegir y moldearse a sí mismo. El hombre puede obtener lo que desee y ser lo que quiera, a diferencia de los animales cuyo destino está predeterminado. El hombre puede purificarse a través de la filosofía moral y elevar su alma hacia el cielo.
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Este discurso habla sobre la dignidad del hombre. Argumenta que el hombre es la criatura más afortunada, ya que Dios no le dio un lugar o aspecto definido, sino que le permitió elegir y moldearse a sí mismo. El hombre puede obtener lo que desee y ser lo que quiera, a diferencia de los animales cuyo destino está predeterminado. El hombre puede purificarse a través de la filosofía moral y elevar su alma hacia el cielo.
Este discurso habla sobre la dignidad del hombre. Argumenta que el hombre es la criatura más afortunada, ya que Dios no le dio un lugar o aspecto definido, sino que le permitió elegir y moldearse a sí mismo. El hombre puede obtener lo que desee y ser lo que quiera, a diferencia de los animales cuyo destino está predeterminado. El hombre puede purificarse a través de la filosofía moral y elevar su alma hacia el cielo.
Este discurso habla sobre la dignidad del hombre. Argumenta que el hombre es la criatura más afortunada, ya que Dios no le dio un lugar o aspecto definido, sino que le permitió elegir y moldearse a sí mismo. El hombre puede obtener lo que desee y ser lo que quiera, a diferencia de los animales cuyo destino está predeterminado. El hombre puede purificarse a través de la filosofía moral y elevar su alma hacia el cielo.
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DISCURSO SOBRE LA
DIGNIDAD DEL HOMBRE
GIOVANNI PICO DELLA MIRÁNDOLA
Pico della Mirandola • He leído en los antiguos escritos de los árabes, padres venerados, que Abdala el Sarraceno, interrogado acerca de cuál era a sus ojos el espectáculo más maravilloso en esta escena del mundo, había respondido que nada veía más espléndido que el hombre. Con esta afirmación coincide aquella famosa de Hermes: "Gran milagro, oh Asclepio, es el hombre". • el hombre, familiar de las criaturas superiores y soberano de las inferiores, es el vínculo entre ellas • el hombre el más afortunado de todos los seres animados y digno, por lo tanto, de toda admiración. • Entre los arquetipos, sin embargo, no quedaba ninguno sobre el cual modelar la nueva criatura, • al hombre que así fue construido, obra de naturaleza indefinida • Oh Adán, no te he dado ni un lugar determinado, ni un aspecto propio, ni una prerrogativa peculiar con el fin de que poseas el lugar, el aspecto y la prerrogativa que conscientemente elijas y que de acuerdo con tu intención obtengas y conserves. • ¡Oh suma libertad de Dios padre, oh suma y admirable suerte del hombre al cual le ha sido concedido el obtener lo que desee, ser lo que quiera! • Las bestias en el momento mismo en que nacen, sacan consigo del vientre materno, como dice Lucilio, todo lo que tendrán después. Los espíritus superiores, desde un principio o poco después, fueron lo que serán eternamente. • Al hombre, desde su nacimiento, el padre le confirió gérmenes de toda especie y gérmenes de toda vida. • ¿Quién, pues, no admirará al hombre? A ese hombre que no erradamente en los sagrados textos mosaicos y cristianos es designado ya con el nombre de todo ser de carne, ya con el de toda criatura, precisamente porque se forja, modela y transforma a sí mismo según el aspecto de todo ser y su ingenio según la naturaleza de toda criatura. • el hombre es animal de naturaleza varia, multiforme y cambiante. • lavemos con la filosofía moral, como en agua corriente. • n la guerra y con la paz, las dos naturalezas de nuestra alma por las cuales somos levantados al cielo o precipitados a los infiernos. • Qué otra cosa quieren significar, en efecto, en los misterios de los griegos los grados habituales de los iniciados, admitidos a través de una purificación obtenida con la moral y la dialéctica, artes qué nosotros consideramos ya artes purificatorias? • aquel medén agan, esto es, "nada con exceso", prescribe rectamente la norma y la regla de toda virtud según el criterio del justo medio, del cual trata la moral. • gnothi seautón, esto es, "conócete a ti mismo", incita y exhorta al conocimiento de toda la naturaleza, de la cual el hombre es intersticio y como connubio. • hasta que, por último, mediante la piedad teológica y el santísimo culto de Dios, podamos resistir vigorosamente, como águilas del cielo, el fulgurante esplendor del sol a mediodía.