Bautismo y Confirmación
Bautismo y Confirmación
Bautismo y Confirmación
CONFIRMACIÓN
“ N U N C A D E B E M O S O LV I D A R Q U E S O M O S B A U T I Z A D O S Y C O N F I R M A D O S
E N O R D E N A L A E U C A R I S T Í A ” ( PA PA B E N E D I C T O X V I )
TEMARIO
1. Repaso de los elementos esenciales de la sesión anterior.
2. Diferencia entre Sacramentos y Sacramentales
3. Bautismo
Materia
Forma
Efectos
Ministro
4. Confirmación
Materia
Forma
Efectos
Ministro
REPASO
Cristo se hace presente de muchas maneras, pero se queda de manera particular y
especial en los sacramentos.
Jesús se queda en los signos sensibles que dispensan la gracia, es decir, la vida divina.
La palabra Misterio proviene del término sacramento. Antiguamente se le
denominaban los misterios de Cristo.
El cristianismo no solo implica el anuncio, sino que sobre todo se realiza en el
encuentro: los sacramentos.
Si es un encuentro no son simples ritos, ni recuerdos, ni repeticiones de algo que
sucedió hace dos mil años, sino que son actualizaciones del misterio de Cristo.
Actualizar-Acto.
REPASO
El término sacramento es la acomodación latina al griego mysterion. El término
sacramento se aplicaba al compromiso que hacía el soldado con la patria. Y se
después, se asumió como un signo sagrado.
El sacramento es signo eficaz y causativo (causa) de la gracia.
El sacramento es encuentro con Cristo.
El sacramento como comunicación con Dios.
La presencia de Cristo en los sacramentos es real porque Él los ha instituido.
Ha decidido quedarse de esa manera y acompañar la vida del hombre.
Los sacramentos son para las personas.
Es presencia de Cristo en la vida del hombre.
REPASO
“Un signo sensible que encierra una significación trascendente y, al mismo tiempo
que causa aquello que significa”.
Los sacramentos son para los hombres. Pues bien dada la naturaleza corpóreo-
espiritual de la persona la acción eficaz de los sacramentos debe manifestarme
mediante estos dos vehículos.
FORMA:
“N. Recibe por esta señala el don del Espíritu Santo”.
MINISTRO, SUJETO Y
PADRINOS
MINISTRO:
Obispo y de manera extraordinaria el presbítero.
SUJETO:
Todo bautizado que esté en una edad adecuada o edad de “discreción”.
PADRINOS:
Un padrino o una madrina.
CONCLUSIÓN
La CONFIRMACIÓN es un sacramento y significa la plenitud del Espíritu, la
plenitud de la gracia y la adultez en la vida cristiana.
La Confirmación es la plenitud de la gracia: “El Espíritu Santo descendió de forma
corporal sobre Él” (Lc 3,22).
“El Señor desciende sobre los candidatos; ellos serán “sellados” con el don del
Espíritu y enviados para ser testigos de Cristo ¿qué significa recibir el “sello” del
Espíritu Santo? Significa ser marcados indeleblemente, inalterablemente cambiados,
significa ser nuevas criaturas. Para los que han recibido este don, ya nada puede ser
lo mismo. Estar “bautizados” en el Espíritu significa haber sido refrescados por la
belleza del designio de Dios para nosotros y para el mundo, y llegar a ser nosotros
mismos una fuente de frescor para otros. Ser “sellados” con el Espíritu significa
además no tener miedo de defender a Cristo, dejando que la verdad del Evangelio
impregne nuestro modo de ser, pensar y actuar, mientras trabajamos por el triunfo de
la civilización del amor” (Benedicto XVI, Homilia en la XXXIII Jornada Mundial de
la Juventud).