Tres (2021)

Esta película te deja loca cavilando…. Y al final todo cobra sentido

En nuestro día a día damos por supuestas muchas cosas, una de ellas es la facilidad en la comunicación entre dos personas que hablen el mismo idioma; pero ¿y si no es tan fácil?

Desde este punto de partida y asándose en su experiencia como técnico de sonido en la industria del cine, Juanjo Jimenez y sus guionistas y resto de equipo, exploran los problemas en esa comunicación cuando aparece un retardo entre el emisor y el receptor, “fuera de sincro”, como se dice en el argot.

Con pocos elementos más y apoyándose en una magistral interpretación de Marta Nieto en el personaje central, que ni siquiera tiene más nombre que “C”, esta película nos mantiene en un estado de inquietud mientras progresa hacia un final inesperado que da sentido a toda la trama y que redondea la película.

Es cierto que hay momentos en que el espectador se siente perdido o desconcertado en cuanto al devenir de la película, sobre todo por la escasez de circunstancias o escasez de acción, pero insisto en que finalmente la película acaba consolidándose.

Es de esas películas que necesitan asentarse y que al día siguiente siguen dando qué hablar o te siguen haciendo cavilar.

La película no es para nada predecible, puede haber quien opine que tiene momentos repetitivos, puesto que los ejemplos de desincronización se reiteran para mostrar la variación que van teniendo éstos, ampliándose cada vez más; sin embargo esos momentos se salvan por la fantástica interpretación de Marta Nieto, que lleva en la cara su sufrimiento interior y nos transporta a su mente, a sus sensaciones al completo.

Es curioso, porque la propia película en sí, una vez que la has visto, te deja “desincronizado”: necesitas un rato para entender lo que has visto, para dar la vuelta y comprender de qué se trata (en spoiler)

Podría haber sido la historia de una pescadora que muerde el anzuelo, o de una costurera que da puntada sin hilo, así en metafórico, sin embargo, es la historia de una diseñadora de sonido que está fuera de sincro, así en literal.
Qué idea tan rara, me gusta. Pero el problema de la película es que intenta explicar el origen de tan estrafalaria cosa, buscando tres pies al gato y volviéndose agotadora, ya que muta de propuesta singular a genealógico embrollo metatemporal, así en literal también.
No sé cuál hubiese sido la mejor manera de continuar la trama, pero la que nos proponen deja la sensación de no serlo.

Al menos, sin duda, sobre todo, está Marta Nieto sosteniendo la película con destreza y convicción para que no llegue a tocar fondo.