Trailer (POLACO con subtítulos en INGLÉS)
- Sinopsis
- Una chica de diecisiete años, huérfana de padre y abandonada por su madre, se enfrenta a su situación personal con dos únicas obsesiones: por un lado, encontrar a su progenitora; por el otro, participar en los Juegos Olímpicos. Una historia sobre una adolescente obligada a madurar a la fuerza, entre orfanatos corruptos y familias de acogida disfuncionales.
- Género
- Drama Adolescencia Drama social
- Dirección
- Reparto
- Año / País:
- 2019 /
Polonia
- Título original:
- Wszystko dla mojej matki
- Duración
- 103 min.
- Guion
- Música
- Fotografía
- Compañías
Te voy a decir lo que no es: no es una comedia, no es un musical, no es un romance; no es Hollywood, no es el mundo del “happy ending”; no es complaciente con el espectador, no es cómoda de ver, para nada; tampoco es la enchufada Angelina Jolie haciendo el ridículo en 'Inocencia interrumpida'; no es de candidatura al Oscar, ni puñetera falta que le hace.
Esto es un dramón de los más crudos que nos van a llegar a lo largo de este año. Desagradable hasta decir basta. Helador como un navajazo, no por distante, sino por el gris escenario y los tristes acontecimientos. Preocupante porque se hace eco de realidades aún actuales, que tienen a la mujer como sufridora y al hombre como impune torturador.
Nos habla de la soledad y de obsesiones autodestructivas, de huérfanos que no entienden ni asimilan que sus padres se hayan desentendido de ellos, de sociedades que protegen a sus violadores y maltratadores, que no dejan margen de maniobra a madres solteras.
Seguramente habrá quien le atribuya el epíteto de misándrica a la película, ya que el protagonismo femenino aquí es absoluto y los pocos secundarios masculinos que aparecen tienen un perfil machista intenso —salvo dos excepciones cuyas apariciones no sumarán más de cinco minutos en total—. El resquicio que deja hacia la esperanza en mi género (o sexo) es mínimo, pero es que estas cosas que cuenta están pasando, nos guste o no verlo. Sospecho que Imielska no quiere tanto ser abanderara feminista como hacer dar las gracias por no haber pasado por algo así a quien pueda darlas.
Esto es un dramón de los más crudos que nos van a llegar a lo largo de este año. Desagradable hasta decir basta. Helador como un navajazo, no por distante, sino por el gris escenario y los tristes acontecimientos. Preocupante porque se hace eco de realidades aún actuales, que tienen a la mujer como sufridora y al hombre como impune torturador.
Nos habla de la soledad y de obsesiones autodestructivas, de huérfanos que no entienden ni asimilan que sus padres se hayan desentendido de ellos, de sociedades que protegen a sus violadores y maltratadores, que no dejan margen de maniobra a madres solteras.
Seguramente habrá quien le atribuya el epíteto de misándrica a la película, ya que el protagonismo femenino aquí es absoluto y los pocos secundarios masculinos que aparecen tienen un perfil machista intenso —salvo dos excepciones cuyas apariciones no sumarán más de cinco minutos en total—. El resquicio que deja hacia la esperanza en mi género (o sexo) es mínimo, pero es que estas cosas que cuenta están pasando, nos guste o no verlo. Sospecho que Imielska no quiere tanto ser abanderara feminista como hacer dar las gracias por no haber pasado por algo así a quien pueda darlas.
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3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Toda una tortura emocional para la protagonista y para el espectador de esta historia de una chica en exclusión social que permanece recluida en un orfanato.
Ola tiene diecisiete años. Retraída e ingenua, un tribunal la colocó en una instalación correccional por su constante escape de orfanatos. A diferencia de otras chicas no se arregla nada y va siempre descuidada, solamente quiere encontrar a su madre, pero nadie le facilita pistas de donde se encuentra. Su única distracción es entrenar en la pista de atletismo con la intención de ganar algún campeonato...
Zofia Domalik que interpreta a Ola nos llega a estremecer en algunos momentos por las continuas agresiones de todo tipo que sufre.
Con mucho acierto escribe y dirige la directora Malgorzata Imielska, basándose en historias reales en las que se documentó. Aunque ya hemos visto en numerosas ocasiones una historia parecida, la película resulta bastante sincera, y sorprende que no caiga en el sentimentalismo o rabia que suele rodear a este tipo de films.
No sabemos los motivos por los que llego al orfanato, ni tampoco que es lo que ocurre con su madre, todo está envuelto en silencios y misterio, que tampoco llegan nunca a desvelarse completamente. Una interesante película polaca que se iba a proyectar en el Festival de Barcelona y ante el problema de la pandemia podemos verla en casa a través de Filmin.
Destino Arrakis.com
Ola tiene diecisiete años. Retraída e ingenua, un tribunal la colocó en una instalación correccional por su constante escape de orfanatos. A diferencia de otras chicas no se arregla nada y va siempre descuidada, solamente quiere encontrar a su madre, pero nadie le facilita pistas de donde se encuentra. Su única distracción es entrenar en la pista de atletismo con la intención de ganar algún campeonato...
Zofia Domalik que interpreta a Ola nos llega a estremecer en algunos momentos por las continuas agresiones de todo tipo que sufre.
Con mucho acierto escribe y dirige la directora Malgorzata Imielska, basándose en historias reales en las que se documentó. Aunque ya hemos visto en numerosas ocasiones una historia parecida, la película resulta bastante sincera, y sorprende que no caiga en el sentimentalismo o rabia que suele rodear a este tipo de films.
No sabemos los motivos por los que llego al orfanato, ni tampoco que es lo que ocurre con su madre, todo está envuelto en silencios y misterio, que tampoco llegan nunca a desvelarse completamente. Una interesante película polaca que se iba a proyectar en el Festival de Barcelona y ante el problema de la pandemia podemos verla en casa a través de Filmin.
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