An�lisis Arrest of a stone Buddha, acci�n fren�tica y narrativa reflexiva (PC, Switch)
El (dif�cil de pronunciar y recordar) nombre de Vadim Gilyazetdninov seguramente no os suene a nada. Es muy posible, de hecho, que tampoco conozc�is su nombre art�stico, Yeo, aunque es m�s probable que conozc�is su �pera prima, al menos a nivel comercial, The Friends of Ringo Ishikawa. Un juego que su autor presenta como un Street Gangs (o Kunio Kun) + Shenmue + Persona 3 , que funcion� muy bien tanto en PC como Nintendo Switch.
Ahora, tras un peque�o periodo de tiempo para volver al desarrollo, Yeo vuelve a la carga con un juego que, de alguna manera, complementa la duolog�a existencialista que ya plantea The Friends of Ringo Ishikawa. Con un aspecto visual parecido (aunque diferente por muchos motivos), en esta ocasi�n abandona su amado Jap�n para centrarse en un pixelado Par�s de los 70 en el que nuestro protagonista, un asesino a sueldo, busca respuestas a lo que le pasa en la vida.
Acci�n run and gun, beat 'em up y narrativa
A nivel jugable, Arrest of a Stone Buddha cuenta con dos partes diferenciadas. Por un lado tenemos las escenas de acci�n y por otro lado aquellas en las que nos movemos de manera m�s o menos libre por Par�s. En cuanto a duraci�n por tiempo deben ir relativamente parejas, aunque depende un poco de nuestra manera de jugar y de la habilidad o paciencia que tengamos.
En las escenas de acci�n manejamos a nuestro asesino a sueldo de una manera parecida a lo que har�an los beat 'em up estilo My Hero o Kung Fu Master, pero teniendo en cuenta que nuestro protagonista es experto en el uso de armas de fuego. As�, solemos empezar con un arma de base, pero cuando un enemigo se acerca lo suficiente podemos quit�rsela y usarla nosotros. Respecto a las armas, tenemos b�sicamente tres opciones, pistola, recortada y fusil de francotirador. El ritmo puede llegar a ser muy fren�tico, recordando en algunos momentos a la etapa de Heroic Bloodshed de John Woo, con algunas animaciones muy propias de esas pel�culas, e incluso algunos momentos de jugabilidad.
Por desgracia, incluso en modo f�cil, la cantidad de enemigos a la que nos enfrentamos es tan grande que para poder avanzar metros tendremos que pegar alg�n disparo, pararnos a quitarle el arma a alg�n rival y pegar m�s disparos, mientras no paran de llegar enemigos por los dos lados. Hay que tener en cuenta que tiene alguna mec�nica relativamente interesante, como el hecho de poder apuntar y disparar a los enemigos que nos tengan en nuestro punto de mira, o la posibilidad de disparar de manera muy r�pida a ambos lados, aunque tambi�n que tendremos que contar nosotros las balas que nos quedan, porque no hay ninguna se�alizaci�n en pantalla m�s all� de que cuando se acaben ya no dispararemos sino que pegaremos patadas.
Este tipo de fases, si bien son espectaculares, no tienen mucha gracia m�s all� de seguir avanzando y de hacerlo con concentraci�n, ya que la dificultad suele ser la misma desde el inicio del juego hasta el final. De hecho, en alguna ocasi�n nos encontramos con varias alturas, pero da igual, las balas se siguen disparando como si estuvieran todos los enemigos en un plano horizontal.
Por otro lado, tenemos los momentos de algo m�s de calma. Suponen el contrapunto perfecto a esas ensaladas de tiros y cad�veres, ya que en estos casos nos encontramos con momentos en los que normalmente nos dan una ligera explicaci�n sobre lo que m�s o menos que tenemos que hacer, pero el c�mo y el cu�ndo lo hagamos suele ser problema nuestro, de manera que podemos explorar tranquilamente el peque�o mapeado de Par�s a nuestro antojo, con ciertas limitaciones. Por un lado, hay un reloj va avanzando, de manera que algunas actividades no se podr�n hacer fuera de nuestro horario. Por otro lado, si dejamos a nuestro personaje sin hacer nada demasiado tiempo es muy posible que se acabe cansando y vaya directamente a la siguiente fase de acci�n. Eso s�, nuestro protagonista andar� siempre como si le pesase la vida (algo que tiene cierto sentido una vez hayamos avanzado algo en la historia). Estos trozos son muy interesantes, y a nivel de atm�sfera y de narrativa tienen mucho valor, pero es muy posible que los que m�s disfruten de la otra parte del juego aprecien menos sus virtudes.
Como hemos comentado antes, el estilo visual de Yeo es heredero de la �poca de los 16 bits. Concretamente, podr�amos decir que est� en un punto intermedio entre la paleta y resoluci�n de Super Nintendo, y alguna un poco m�s avanzada. Los decorados tienen un aspecto impecable, con detalles muy bien conseguidos como las calles de Par�s, mientras que los personajes combinan un aspecto simp�tico con unas intenciones mucho m�s amenazantes, una especie de evoluci�n de la saga Kunio Kun pero en 16 bits, sin llegar a los extremos a los que s� lleg� esa saga en Super Nintendo, qued�ndose m�s bien cerca de lo que se pudo ver en PC Engine-Turbo Grafx. En este aspecto podr�amos decir que lo mejor son las animaciones, con algunos movimientos realmente espectaculares y efectistas, como robar arma o algunas posiciones de disparo.
Musicalmente hereda bastante el estilo de un juego con el que tiene algo de relaci�n en tono y forma: Hotline Miami. Sin llegar a la brillantez del juego de Cactus, lo cierto es que hablamos de melod�as que se adaptan bastante bien a la situaci�n, en ocasiones muy animadas y en ocasiones mucho m�s reflexivas y pausadas, mientras todo ello se ve acompa�ado ya sea de ruido de pistolas o escopetas, o de la tranquilidad m�s absoluta de nuestro piso o ciudad, lo que sirve de manera notable como contrapunto al exceso de violencia de la parte ruidosa. Como detalle extra, comentar que se lanza traducido al espa�ol, lo que es un detalle interesante de cara a poder entender el mensaje que quiere explicarnos.
Conclusiones
Arrest of a Stone Buddha es m�s dif�cil de disfrutar que su anterior obra, pero de alguna manera, como el contrapunto de violencia y tranquilidad propia al juego, tiene cierto sentido. Un t�tulo que no aspira a ser un �xito comercial, sino de contar algo, de expresar una idea o una vivencia, como ya le pas� en el anterior t�tulo. Por ello es conveniente acercarse a �l sabiendo que es posible que no nos otorgue una recompensa f�cil
Hemos podido jugar a este juego gracias a un c�digo de Steam proporcionado por su desarrollador.