Dijon es un centro cultural y empresarial bien situado en la región francesa de Borgoña. A finales de la Edad Media fue un poderoso ducado europeo, una ciudad rodeada de una muralla de casi 10 metros y franqueada por 33 torres. Actualmente se han encontrado restos de 12 de ellas.
Considerada una de las ciudades francesas de mayor atractivo, La larga e interesante historia de esta población ha provisto a Dijon con un vasto patrimonio cultural y arquitectónico que despierta un gran interés turístico.
Actualmente cuenta con museos de categoría internacional, así como con tiendas espectaculares y rutas de senderismo fascinantes. Su gastronomía ofrece sabores únicos como la popular mostaza de la ciudad, los caracoles y los vinos.
Esta capital francesa es un tesoro con arquitectura bellísima y variada, que se plasma en construcciones patrimoniales tan sugerentes como la iglesia Notre Dame y el palacio de los duques y de los estados de Borgoña. Fue construido en 1686 y se convirtió en la sede de los duques de Borgoña.
El alimento más valorado internacionalmente de Dijon es la mostaza. Pero esta ciudad posee una escena gastronómica deliciosa, con platos exquisitos como la trufa y los caracoles de Borgoña. Además, no deberías perderte la carne de vaca de Burgundia, el pollo asado en vino tinto y el cóctel kir.
Dijon alberga multitud de parques espectaculares, como el Jardín Darcy o el Combe à la Serpent. En este puedes pasear y relajarte mientras admiras maravillosas flores y vegetación autóctona de temporada.
Borgoña es una región vinícola por excelencia. Sus sabrosos tintos dejan siempre un excelente sabor de boca, tan bueno como las experiencias de turismo enológico que proporcionan la visita a las principales bodegas y viñedos del entorno.
La moda es uno de los pilares, las aficiones y las tendencias de esta gran ciudad francesa. Salir de compras por sus abundantes boutiques es una maravilla. En las calles de Dijon encontrarás desde prendas y marcas cotidianas a buen precio hasta firmas de lujo como Chanel y Givenchy.
El palacio de los duques y de los estados de Borgoña es una impresionante estructura neoclásica del año 1364. Actualmente alberga el ayuntamiento y el Museo de Bellas Artes. Sigue el Tour de Philippe le Bon para visitar este escenario, que un día fue el hogar de los Grandes Duques. Durante el recorrido disfrutarás de vistas del valle de Dijon, el río Saona, las colinas y los viñedos circundantes. Otra posibilidad es escoger el Tour de Bar que te lleva a la cocina del palacio donde es posible admirar sus imponentes chimeneas.
El Museo de Bellas Artes se localiza en el palacio de los duques y es una auténtica joya. Alberga las tumbas talladas de los duques Juan Sin Miedo y Felipe II el Audaz. Fundado en 1787, ofrece una vasta colección de arte egipcio, medieval y renacentista. Admirarás obras maestras de Lotto, Manet, Monet, Matisse y Rodin, esculturas modernas de François Pompon y creaciones de mitad de siglo de la escuela de París de Charles Lapicque, Vieria da Silva y Nicolas de Staël. Además, exhibe cerámica y gafas islámicas, armas y ataúdes orientales, marfiles y máscaras africanas, porcelana asiática y esculturas exóticas procedentes de India y del Tibet.
La iglesia Notre Dame de Dijon comenzó a construirse en 1230. Este templo católico es una obra maestra de la arquitectura gótica. Se encuentra localizada en el corazón de la ciudad, cerca del Palacio de los duques en un entorno majestuoso y precioso. Dispone de una escultura de Bon-Espoir conocida como la Virgen Negra, siempre protectora con la ciudad frente a los invasores foráneos. También cuenta con sacristía, capilla de la Asunción y galería con bellas vidrieras del siglo XIII.
El Museo de la Vida de Borgoña es un museo etnológico situado en un convento cisterciense del siglo XVII. Alberga una colección comisariada por Perrin de Puycousin, que incorpora muebles, útiles, trajes y artefactos borgoñeses del siglo XIX. En el último piso, la galería reconstruye una calle antigua de Dijon con tiendas clásicas de entonces.
En la Maison des Cariatides, uno de los edificios más bellos de la ciudad, se localiza uno de sus mejores restaurantes. Lo dirige el chef Thomas Collomb. Entre sus especialidades destacan el lomo de atún con quinoa y pimientos y el lomo de cerdo criado en granja con pulpa de berenjena, confitura de setas girolle y tomates. También debes probar el manjari de chocolate con flor de sal y galletas de sablé con sabor a vainilla de Madagascar. Un auténtico deleite para los paladares más afortunados.
El palacio de los duques y de los estados de Borgoña es una impresionante estructura neoclásica del año 1364. Actualmente alberga el ayuntamiento y el Museo de Bellas Artes. Sigue el Tour de Philippe le Bon para visitar este escenario, que un día fue el hogar de los Grandes Duques. Durante el recorrido disfrutarás de vistas del valle de Dijon, el río Saona, las colinas y los viñedos circundantes. Otra posibilidad es escoger el Tour de Bar que te lleva a la cocina del palacio donde es posible admirar sus imponentes chimeneas.
El Museo de Bellas Artes se localiza en el palacio de los duques y es una auténtica joya. Alberga las tumbas talladas de los duques Juan Sin Miedo y Felipe II el Audaz. Fundado en 1787, ofrece una vasta colección de arte egipcio, medieval y renacentista. Admirarás obras maestras de Lotto, Manet, Monet, Matisse y Rodin, esculturas modernas de François Pompon y creaciones de mitad de siglo de la escuela de París de Charles Lapicque, Vieria da Silva y Nicolas de Staël. Además, exhibe cerámica y gafas islámicas, armas y ataúdes orientales, marfiles y máscaras africanas, porcelana asiática y esculturas exóticas procedentes de India y del Tibet.
La iglesia Notre Dame de Dijon comenzó a construirse en 1230. Este templo católico es una obra maestra de la arquitectura gótica. Se encuentra localizada en el corazón de la ciudad, cerca del Palacio de los duques en un entorno majestuoso y precioso. Dispone de una escultura de Bon-Espoir conocida como la Virgen Negra, siempre protectora con la ciudad frente a los invasores foráneos. También cuenta con sacristía, capilla de la Asunción y galería con bellas vidrieras del siglo XIII.
El Museo de la Vida de Borgoña es un museo etnológico situado en un convento cisterciense del siglo XVII. Alberga una colección comisariada por Perrin de Puycousin, que incorpora muebles, útiles, trajes y artefactos borgoñeses del siglo XIX. En el último piso, la galería reconstruye una calle antigua de Dijon con tiendas clásicas de entonces.
En la Maison des Cariatides, uno de los edificios más bellos de la ciudad, se localiza uno de sus mejores restaurantes. Lo dirige el chef Thomas Collomb. Entre sus especialidades destacan el lomo de atún con quinoa y pimientos y el lomo de cerdo criado en granja con pulpa de berenjena, confitura de setas girolle y tomates. También debes probar el manjari de chocolate con flor de sal y galletas de sablé con sabor a vainilla de Madagascar. Un auténtico deleite para los paladares más afortunados.
Si te apetece degustar la cocina clásica de la región de Borgoña no dejes de visitar el pequeño, íntimo y delicioso restaurante Chez le Bougnat. En su carta de platos principales encontrarás opciones desde los 10,50 EUR.
Si lo que te apetece es disfrutar una experiencia gastronómica sofisticada, te sentirás muy bien en La Dame d'Aquitaine. Es un lujoso establecimiento en el que escucharás música clásica mientras degustas la fina gastronomía de Dijon desde 37 EUR. Y, por supuesto, pide un buen vino tinto de la región para acompañar estas degustaciones.
La temporada más recomendable para viajar a Dijon se ubica en los meses más cálidos, desde abril hasta noviembre. Además, a finales del otoño tiene lugar la cosecha del vino en esta región, por lo que los aficionados al turismo enológico suelen escoger estas fechas.
El aeropuerto más próximo a Dijon es el Charles de Gaulle de París (CDG), que se ubica a 346 kilómetros. Un servicio de tren de alta velocidad, cuyo precio es 17 EUR, conecta las ciudades.
Eurostar y trenes de alta velocidad conectan Dijon con París y las principales ciudades francesas. Y, también, con muchos destinos de Europa.
La autopista A6 enlaza Dijon con la capital de Francia y la A36 lo hace con Estrasburgo y sigue hacia Alemania. También hay buenas conexiones viarias con Luxemburgo, Suiza y Bélgica.
La compañía Eurolines conecta Dijon con numerosas capitales francesas y europeas.
1. En el centro de la ciudad vas a encontrar calles con encanto repletas de edificios medievales. Te sorprenderán los tejados multicolores, así como el Tour Philippe le Bon, una torre del siglo XV que proporciona incomparables vistas de la ciudad y su entorno campestre.
2. Faubourg Nord. En el norte de la ciudad se encuentra esta tranquila zona para descansar. En ella se ubica la estación de tren y hoteles tan recomendables como el Montigny y el Kyriad Dijon Gare.
3. Jouvence. Se trata de un vecindario moderno y residencial con buenas posibilidades de alojamiento y locales gastronómicos para disfrutar junto a los lugareños.
Dijon cuenta con una buena red de transporte público, tanto de autobuses como de tranvías, disponibles desde 1,30 EUR. Un ticket para dos días cuesta 6,85 EUR y, uno de tres, 8,80 EUR.
Los taxis también son otra posibilidad. Se encuentran por la ciudad en gran número: su taxímetro arranca con 2 EUR y el abono mínimo es de 7 EUR.
Alquilar un coche es ideal para explorar la ciudad, algo que puedes hacer con Sixt o Enterprise desde 95 EUR. Ahora bien, debes tener cuidado porque esta localidad cuenta con muchas calles de una única dirección, que pueden confundirte, y las plazas para aparcar son escasas.
En la calle peatonal Rue de la Liberté se localizan pequeñas tiendas y boutiques junto con grandes establecimientos de marcas nacionales de todos los sectores, desde moda hasta vinos y licores.
Para comprar comidas y artículos de uso cotidiano, acude a las grandes superficies. Carrefour y E. Leclerc te proporcionan amplias gamas de productos a precios muy competitivos, mientras que Leader Price Express es la mejor opción para realizar compras rápidas. Para que te hagas una idea del nivel de precios de la ciudad, piensa que medio litro de cerveza de barril te costará en un bar 2,50 EUR y, un refresco de cola, 1,60 EUR.