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PEQUEOS INTERCAMBIOS, GRANDES RITUALES: un ESTUDIO ETNOGRFICO DE LOS ACTOS ESCOLARES. Autor: M.A. Gustavo Alejandro Blzquez.

Programa de Postgraduacin en Antropologa Social. Museo Nacional. UFRJ. Fac. de Filosofa y Humanidades. Universidad Nacional de Crdoba. 1. El carcter (contextual)izacin del acto escolar. El acto escolarpuede ser descrito como una produccin escnica realizada por las maestras en conjunto con el total de alumno del curso a su cargo o con slo un grupo de escogidos. Este tipo de performances tienen lugar en ocasin de una serie de fechas que marcan los momentos culminantes en la narracin/construccin de una historia para la Nacin Argentina (Revolucin de Mayo, Da de la Independencia, de la Soberana, de la Tradicin, de las Malvinas, etc.) siendo realizados, por lo general, en el patio central del edificio escolar con la presencia de los alumnos, sus padres, las maestras, Directora y en algunas ocasiones la Inspectora. La duracin de cada performances variable y puede extenderse por un espacio de 10 minutos hasta una hora. La secuencia escnica es iniciada por las palabras de un presentador que enuncia los por que del acto. Este rol puede ser ocupado bien por un alumno/a, bien por una maestra. Posteriormente ingresa al escenario la Bandera de Ceremonias, portada por los abanderados, nios que a causa de su actuacin sobresaliente, han sido honrados para cumplir con esta destacada funcin. Seguidamente se canta el Himno Nacional. Luego de estas acciones ms tradicionales y que aparecen en cualquier acto escolar tienen lugar una serie de actuaciones que pueden ir desde la simple lectura de un texto alusivo hasta representaciones teatrales con escenografa y sonidificacin. Este es el momento de mayor creatividad de la ceremonia y donde se reconocen las mayores variaciones. Una vez finalizadas las representaciones, se retira entre aplausos la Bandera de Ceremonias, dndose por concluido el ritual. Estas ceremonias son parte de una larga tradicin en la educacin formal argentino y en cierto sentido aparecieron con la creacin de un sistema pblico de instruccin elemental a partir de la Ley 1420 de 1884. Esta ley nacional que regulaba la formacin primaria, declarndola obligatoria, gratuita y laica, afect solamente a las escuelas que dependan del Poder Ejecutivo Nacional, es decir aquellas ubicadas en la Capital Federal y en los Territorios Nacionales. Cada estado provincial tuvo que elaborar leyes que ordenaran la educacin en sus respectivos territorios. Crdoba promulg en 1896 la ley 1426 o Ley Orgnica de la Educacin Primaria cuya principal diferencia con la normativa nacional era el carcter catlico que deba seguir la educacin.

En ninguna de estas leyes se mencionan a los actos escolares que aparecern en los decretos reglamentarios de las normas, pero se haca siempre referencia a la accin nacionalizante que deba desarrollar la escuela. En el decreto 41009 de 1938, que reglament la Educacin Primaria en la Provincia de Crdoba, el Captulo XIV fue dedicado enteramente a las "Fiestas escolares y patriticas". En l se establecan las fechas, caractersticas y objetivos generales de las celebraciones. Este decreto tiene an un carcter muy general, en relacin a los actos escolares, que se fue especificando, primero a travs de circulares del ministerio de Educacin y posteriormente a travs del "Calendario Escolar". Desde el punto de vista del etngrafo pueden reconocerse en el acto escolar dos elementos: a. el acto, objeto material de carcter esttico producido por las maestras y cuya principal materia prima es tanto su propio cuerpo como el cuerpo de los alumnos participantes. La produccin de este objeto es obligatoria, siendo cada maestro responsable, al menos, de la produccin de un acto anual. La produccin monoplica del objeto acto por un grupo de especialistas, como son las maestras, debe ser pensada como parte del proceso de "vocacionalizacin" del trabajo docente y su articulacin con los procesos de nacionalizacin. Es al interior de estas dinmicas sociales que escuela y maestros adquieren el lugar de prestigio que hasta hoy detentan como productores legtimos de un conjunto de bienes , entre los cuales se ubica el acto. b. la performance patritica escolar.(PPE) que puede ser definida como el ritual donde se despliega el objeto acto que es ofrecido tanto a los asistentes (nios, padres y personal docente) como a una entidad trascendente llamada Patria. La produccin del acto comienza con la eleccin de un texto y de los actores necesarios, por parte de la maestra responsabilizada por el proceso de produccin. Posteriormente se ensayar hasta llegar a su puesta en escena. Incluiremos tambin dentro de la produccin, la evaluacin del mismo dado que, como mostraremos, sta repercutir de manera directa sobre aquella. Las PPE, en tanto rituales, se encuentran reglamentados en lo que hace a sus caractersticas escnicas y secuencia ritual. Tambin est establecido por ley cual debe ser la funcin y las fechas en que deben realizarse. El acto en tanto cosa ser considerado un don que es intercambiado a travs de un ritual. En este sentido, las PPE pueden ser comparadas con un kula melanesio y el objeto acto con los collares y brazaletes que circulan en una comunidad kula semejante a la escuela. Las Performances Patriticas Escolares, como el Kula, son slo un momento, el ms solemne, del amplio sistema de prestaciones y contra prestaciones que, en realidad engloban la totalidad de la vida de la escuela. Son espacios rituales de intercambio y socializacin, de (re)construccin y (re)afirmacin de ciertos vnculos entre los participantes.

Estas PPE que pueden ser asemejadas a los grandes kulas martimos, suponen como stos una serie de kulas interiores, de relaciones de intercambios entre un conjunto de agentes que posibilitan la produccin de los materiales a ser intercambiados en esos grandes kulas. En este trabajo nos detendremos en la descripcin de algunas de las relaciones que se establecen entre algunos agentes en torno a la produccin del acto y especialmente en torno a su evaluacin. Las relaciones de produccin deben ser entendidas como relaciones al interior de esos kulas internos, en tanto que las evaluaciones consideradas son siempre parte del kula intertribal. 2. Los intercambios en la produccin. 2.1 Los intercambios entre las maestras. Cada maestra es encargada de producir al menos un acto durante el transcurso de un ao escolar. De acuerdo a ciertas variables como por ejemplo el nmero de maestras que tenga una determinada escuela, las docentes pueden estar obligadas a realizar ms de una escenificacin. Al comienzo del ciclo lectivo se distribuyen los actos escolares y se elabora una planilla la cual debe ser firmada por cada maestra que sella de este modo el compromiso contrado. Los mecanismos de atribucin de la responsabilidad de un determinada PPE son variables y dependen principalmente del estilo de relacionamiento que se establece entre maestras y directivos. Muchas veces es la directora quien atribuye las responsabilidades, otras es producto de un proceso de negociacin entre las docentes. Estas observaciones son vlidas para todos las PPE excepto para la que corresponde al Da de la Bandera que siempre es encargada a la maestra de cuarto grado. Esto se debe a que ese da los alumnos de cuarto grado atraviesan un ritual de pasaje conocido como "Promesa a La Bandera". Una de las principales preocupaciones de las maestras, en el momento de la produccin, es "hacer un acto lindo". Lindo, como veremos posteriormente est determinado, en gran medida, por la evaluacin realizadas por ciertos agentes. "En esta escuela los actos son as", nos coment una maestra. "As" es un modo que se aprende a travs de la participacin en la vida de una escuela, y que puede consistir en, desde escoger un alumno para leer las glosas o ser la maestra la que lee, nombrar a los nios que portan la bandera nacional o no hacerlo, etc. El aprendizaje de este "as" se realiza a travs de las conversaciones entre maestras que se pasan informacin sobre como le gusta a la directora, intercambian material para producir el acto o buscan la ayuda de aquellas que tienen un reconocido prestigio o un cierto saber especfico, como danzas folklricas, tocar la guitarra, aptitudes para el dibujo. Preparar un "acto lindo" o "as" da lugar a toda una serie de intercambios entre las maestras, intercambios a travs de los cuales se sancionan posiciones de poder y prestigio, que colaboran en la estructuracin de una jerarqua en el cuerpo docente. En este sentido deben pensarse la competencia y rivalidades que se instauran entre las

maestras en torno al acto y las PPE, su realizacin y evaluacin mediata o inmediata. Estas rivalidades y bsqueda de prestigio dan cuenta del compromiso que poseen los agentes con el juego social en el cual se encuentran sumergidos. Los intercambios tambin son importantes a la hora de alimentar ciertas relaciones al interior de la escuela y deben pensarse como incluidos en toda otra serie de intercambios que incluyen desde un saquito de t hasta un "me mirs los chicos", frase utilizada para pedir que una maestra se haga responsable, por un breve lapso, de los alumnos de otra. Estos dones y contra-dones circulan todo el tiempo entre el grupo de trabajadoras y muchas veces se extienden por fuera del espacio escolar, incluyndose las invitaciones para una fiesta, una cena o un baile. Otro elemento a tener en cuenta en el anlisis de estos intercambios es la presencia de algunas maestras que utilizan el espacio escolar para la venta de productos cosmticos, ollas o ropa a sus colegas. Estas estaran seguramente obligadas a ser ms generosas a la hora de ofrecer o dar informacin para hacer un acto. Sin embargo, dada nuestra falta de atencin en su momento a todo este tipo de intercambios, hoy no podemos responder de modo acabado la pregunta que nos formulara Edmund Leach(1982) acerca de quin cambia qu con quin?. Slo podemos sealar que existe una gran actividad de intercambio, especialmente en torno a los textos utilizados para producir el acto. En muchas ocasiones al indagar sobre como la productora haba conseguido el texto, nos encontrbamos con un "me lo pas la maestra de" y se identificaba al sujeto. Esta frase nos muestra como la entrevistada no reconoce haber pedido; ella fue el agente pasivo de la accin de otro sujeto. Pedir la colocara en una posicin de carencia, de falta de prestigio al carecer del capital suficiente para encarar por s sola la produccin del acto. Muchas de las docentes guardan los textos de un ao para otro construyendo verdaderos archivos de suma utilidad tanto cuando se tiene que producir un acto como a la hora de "pasar" un texto para otra. Este capital que se encuentra tanto objetivado en esas "carpetas" como en libros especialmente producidos se va construyendo a lo largo de la vida en la escuela, dado que por ejemplo las maestras no son entrenadas para realizar PPE durante sus aos de formacin profesional. Esta falta de preparacin coloca a las maestras "nuevas" en una situacin de desventaja que las lleva a envolverse en relaciones de endeudamiento para con las colegas de mayor antigedad que adquieren as un mayor crdito. 2.2 Los intercambios entre maestras y padres. Una vez decidido cual ser el acto a realizar, la maestra precisa de la colaboracin de los alumnos y padres. Para poner en escena el texto escogido, la maestra puede necesitar, por ejemplo, de ocho damas antiguas , una pastelera y cinco patriotas.

La eleccin de los que ocuparn los diferentes roles lo realiza la maestra tomando en cuenta diferentes caractersticas de los alumnos entre las que podemos sealar: Rasgos fsicos: Las rubias hacen por lo general de damas antiguas, los ms altos de criollos, las ms feas, gordas y morenas son obligadas a travestirse de granaderos, en las escuelas de nias. Rasgos histrinicos: los ms "desenvueltos", los menos tmidos, resultan ms fcilmente escogibles. Las ms simpticas suelen actuar de negritas. Rasgos econmicos: Nos referimos aqu a la representacin que se hace la maestra de las condiciones socioeconmicas de los padres del nio, a partir de la cual calcula la posibilidad de que estos cumplan con lo que ella exigir. Una vez realizado el casting, la maestra, en general por escrito, solicita a los padres que disfracen a sus hijos segn lo pedido. Muchas veces las madres concurren a la escuela para combinar los detalles del traje con la maestra. Estas idas y venidas, este pedir y dar que se establece entre padres y docentes permite el establecimiento de relaciones muchas veces teidas por la informalidad. En los padres hay cierto orgullo por sus hijos que han sido escogidos para actuar, situacin que viene a sancionar su posicin, relacionada con la evaluacin que la maestra realiz de su capital y del capital de sus hijos. Otras veces los padres se sienten incomodados por el pedido, bien porque excede sus expectativas , quienes consideran que la maestra se est abusando, bien cuando consideran todo un tedio encarar esa actividad. "Est loca, Ud. no se imagina todo lo que me pidi", me coment una madre cuando hablbamos sobre los actos escolares, otra coment "es un trabajo!!!". En estos intercambios hay un clculo, no siempre inconsciente, tanto por parte de las maestras como de las madres. Ambas saben que hay un lmite para el pedido y un lmite para la recusa. Este clculo precisa ser siempre no-reconocido para mantener el encanto del intercambio y todos se muestran encantados con la posibilidad de pedir y dar, al menos cuando estn frente a frente. Las maestras tienen un inters particular en cuanto al casting, dado que de una buena seleccin va a depender un "acto lindo", los padres tiene un inters en cumplir con las expectativas de la maestra dado que acatar este pedido implica no slo colocarse en una relacin de acreedor con respecto a la docente sino que tambin implica un agradecimiento por la distincin otorgada. Cuando la maestra pide, est lanzando un desafo a los padres, desafo que como todo gesto de este tipo pone en cuestin la honra de ambos sujetos. La aceptacin del desafo depender tanto de la evaluacin que los padres hacen de la maestra como del grado de compromiso que estos tengan con los juegos de prestigio en esa escena social. 2.3 Los intercambios entre los padres.

Dado que nuestro trabajo se centr en torno a las maestras, slo tenemos sobre estos intercambios algunas anotaciones en nuestra libreta de campo: 25 de mayo Hoy es el acto en la escuela T. Es mi primera visita y voy a ir con Virginia que tiene que llevar sus hijos al acto. Llego a lo de Virginia, tomamos caf y ella comienza, sin muchas ganas, a vestir a los chicos para el acto. Ella es responsable de un gaucho y una paisanita. El traje de gaucho lo consigui de la hermana que lo haba mandado a hacer para uno de los hijos, el sombrero y el pauelo son un prstamo de una de las vecinas. La paisanita se arm con una blusa blanca de calle, una pollera larga que hizo Haide, la vecina y un pauelo de Virginia. Falta la canastita con las empanadas!!! comenz a llorar la nena-paisana. Todos partimos en el coche, eran las 9 de la maana, haca mucho fro. Pasamos por lo de una vecina, quien subi al auto con dos nios, un negrito de la colonia y otra paisanita. El viaje en auto haba sido combinado el da anterior. La madre-sin auto pregunt "Te hace falta algo?". Virginia le grit "Una canasta para Ami". La madre prest la canastita. La nena continuaba llorando, ahora faltaban las empanadas. Cuando llegamos a la escuela, Virginia le pide dos empanadas a una amiga, cuya hija es compaera de la nena. La nena sigue llorando "Son muy poquitas!!!". En ese momento, Virginia me mira y dice, "Ves, para lo nico que sirven los actos es para que aprendan a consumir". A partir de estas impresiones podemos suponer la existencia de toda una red de relaciones que se ponen en juego por ejemplo, a la hora de construir los disfraces. En este proceso participan las madres y otros miembros del grupo de parentesco como tas y abuelas que colaboran o directamente toman a su cargo la confeccin del traje. En este proceso suele ser comn tambin la participacin de vecinos. Muchos de estos disfraces, como el de la nena-paisanita, podran verse como verdaderos bricolages, que se van armando progresivamente con la participacin de familiares, amigos y vecinos, a partir de todo un circuito de intercambios en el cual sera imposible intentar aislar el don inicial, ya que todo funciona dentro de un cuadro de servicios mltiples que se ofrecen, se piden y aceptan y del cual, que por lo general, nadie intenta escapar. Un cierto cdigo de buena conducta y buena convivencia est orientando este conjunto de prcticas que aparecen como libres y que, sin embargo, son de carcter obligatorio. Virginia no haba poda recusarse al pedido de Madre-sin-auto, de llevarla a la escuela. De haberlo hecho hubiera sido sumamente descorts, como tambin hubiera sido descorts no preguntar: "te hace falta algo", manifestar un inters por la situacin del otro, como se vio obligada a hacer Madre-sin-auto. Otro tipo de intercambios que se establecen entre los padres en torno al acto es el del prestigio. Estos intercambios tienen un aspecto de potlatch. Con ciertos trajes (especialmente los de dama antigua), con los equipos fotogrficos y video-grabadoras, con los autos, la ropa personal, cada familia intenta humillar y destacarse de las otras

familias que concurren a la PPE. En mi registro de aquel helado y ventoso 25 de Mayo podemos leer: Los trajes de las damitas son muy elaborados y las madres comparan los diferentes trajes. Mientras esperaban para entrar a escena las damitas de ocho o diez aos estaban muy abrigadas. Cuando las damitas entran bailando por la calle escucho que una mujer le grita a otra: "Pelusa, Sacale el tapado, Pelusa...!!!". Pelusa no le sac el abrigo a la nia quien no puede lucir el traje. La seora le comenta a otra "La Pelusa no le sac el tapado, que idiota no le sac el tapado....y la nena, la vest de dama antigua....!!!!. Los actos escolares, en tanto espacio de encuentro ritualizado, permitiran estos gestos de ostentacin, de exhibicin del capital acumulado y funcionan, posiblemente, como espacios que pueden ser utilizados para la reconversin de una especie de capital en otro, espacios donde se construye y destruye un nombre, un prestigio. Estas luchas de riquezas materiales y simblicas podran ser ledas como un pequeo potlatch escolar en los cuales, como se queja Virginia, los nios, los padres, los maestros y directivos, aprenden a consumir pero tambin a reconocer. Reconocer las formas vlidas de capital, es decir aquellas que en ese espacio son capaces de honrar y dar prestigio, y por ende deben ser consumidas, as como de reconocer las jerarquas y las posiciones diferenciales que cada sujeto tiene dentro de ese conjunto 3. Los Intercambios en la evaluacin 3.1 La evaluacin inmediata Una vez finalizado la PPE y frente a la presencia de todos los concurrentes al mismo, la directora, comienza su evaluacin, felicitando pblicamente a la maestra encargada de la realizacin. Esta evaluacin es casi siempre sumaria y se expresa mediante un "Debemos agradecer a la Seorita Nilda que organiz este acto", o "Con un fuerte aplauso le agradecemos a las Seoritas que hicieron este acto", "Tenemos que felicitar a las maestras de cuarto grado por el acto realizado". Luego de concluida la ceremonia, los padres de los alumnos que actuaron tambin felicitan a la maestra y le agradecen lo que han hecho. "Estuvo hermoso, a los chicos les encant", "En casa nos divertimos tanto preparando el traje de dama antigua...Trabajamos todos". Muchas veces los disfrazados nios eran fotografiados por los padres junto a la maestra, buscando un registro de aquellos momentos. A travs de la palabra o el registro fotogrfico la maestra es colocada en un lugar de prestigio a travs de esos contra-dones con los cuales se retribuye el trabajo docente. El reconocimiento de los padres era recibido con mucho entusiasmo por los maestros, situacin que debe ser entendida en el contexto de que los principales destinatarios del acto, segn el discurso nativo, eran los padres: "Hoy (refirindose al acto del 25 de Mayo) no se puede festejar sino recordar, en principio slo se iba a cantar el Himno,

pero la maestra de segundo grado quiso hacer algo, por los padres, porque a ellos les gusta mucho", nos coment la Directora. "Si no fuera porque a los padres les gusta ver a los chicos disfrazados, no haramos nada. Ellos (los padres) tienen una ilusin muy grande, " se justificaba la maestra encargada de esa misma PPE. Las maestras agradecan los agradecimientos y juntos padres y maestros comentaban la "difcil situacin de la Provincia" Junto con esta serie de agradecimientos se producen entre las maestras una serie de comentarios como: "Te sali muy lindo", "Los chicos estuvieron brbaros!", "Muy lindo, me gust ms que el del ao pasado". Desgraciadamente, durante el trabajo de campo, no registramos quienes eran las maestras que felicitaban y quienes las felicitadas, lo que hoy nos permitira tratar de reinscribir esos gestos de "buen compaerismo" en el marco de las relaciones que se establecen al interior de ese grupo de trabajadoras y describir con mayor profundidad los intercambios de gentilezas a travs de los cuales se construye una reputacin Estas felicitaciones, agradecimientos y reconocimientos a la labor cumplida deben ser entendidas dentro del circuito de intercambios que se dan en torno a las performances escolares. En los primeros momentos del trabajo de campo, cuando despus de concluido el acto conversaba con la maestra encargada, yo no produca ningn comentario al respecto de lo ocurrido, slo esperaba que ella siguiera dndome algn tipo de informacin, un dato para mi investigacin. Las maestras se mostraban poco interesadas y todo conclua rpidamente. Mi sensacin era de cierta angustia, algo no estaba funcionando bien y para tranquilizarme, haca ma la explicacin nativa que, culpaba de toda desgracia a la "crisis". Al transcurrir el tiempo y de modo no reflexivo, comenc a hablar sobre el acto. Yo tambin realizaba mi evaluacin y le comentaba a la maestra, lo lindo que haba sido, la atencin que haba logrado despertar entre los alumnos que no participaron como actores, la cantidad de padres que haban asistido. Sorpresivamente las maestras comenzaron a hablar. En su momento estos acontecimientos no me resultaban interesantes o consideraba que era ese el modo natural en el cual se desenvuelve un trabajo de campo. El etngrafo tena que encontrar el truco para hacer hablar a sus informantes. Sin embargo, al volver sobre las notas, me siento obligado a pensar como mi silencio era posiblemente interpretado como una negativa a ingresar en el sistema de intercambios y mi recusa inconsciente a otorgar un contra-don produca un enfriamiento de la relacin. Cuando mi palabra empez a fluir y retribuir el don recibido, aceptando incluirme en la relacin, las maestras comenzaron a hablar. Al realizar mi evaluacin e integrarme al circuito de intercambios, apareci la dimensin de endeudamiento que segn Edmund Leach(1982) es el modo en que los sujetos vivencian las relaciones de intercambio. Las maestras y muchas veces la directora se haban colocado como acreedoras, ellas me haban dado su tiempo, muchas veces su confianza, y principalmente el acto, sin embargo yo no haba sido capaz de pagar esa deuda, ni siquiera la haba reconocido como tal. La ausencia de

felicitacin y evaluacin espontnea, no formal, del acto produca que fuera ubicado en una posicin de exterioridad dado que no estaba reconociendo que haba contrado una deuda. Esta falta de reconocimiento impeda el progreso de la relacin o construa otro tipo de relacin. La falta de devolucin de un don recibido puede ubicar al destinatario tanto por encima como por debajo del donante. Ambas posiciones las fui ocupando a lo largo del trabajo. Como superior en honra construa una relacin de evaluador externo de la escuela. Me pregunto ahora, porqu me incomod tanto con la identificacin con un Inspector del Ministerio, o un espa que viene a ver y despus le cuenta al Ministro. Sin saberlo, me comportaba como tal. Como inferior en honra, era alguien que slo se interesaba por los actos, era "el chico de los actos", calificativo con el que se me sola designar. Esta designacin da cuenta tanto de la posicin de exterioridad al circuito de intercambios como de la falta de capital (el chico) para ingresar en ese circuito. Cuando comenc a pagar con mi palabra, la situacin cambi dado que habamos empezado a jugar el juego de la honra y el prestigio. Mis juicios, mis opiniones, reconocan el capital simblico de los informantes as como algunas de las reglas a partir de las cuales ste se construye en el espacio escolar. El reconocimiento explcito de su saber hacer actos, nos colocaba en una situacin de isotimia, de iguales en honra. Ahora eran ellas las ubicadas en una posicin de deudoras, Mis comentarios, siempre alabatorios de las PPE, era retribuidos con un "Qu pena un trabajo tan lindo (mi investigacin) y justo este ao" o "Tendras que haber visto el acto del ao pasado...ese si fue lindo", "El ao pasado fue todo muy diferente, se cantaban pregones, los chicos bailaban una zamba, un gato". Estas frase que atribuan a mi trabajo el mismo calificativo que los padres y yo le daba a su acto, pueden ser ledas como el reconocimiento de mi reconocimiento de su prestigio. Es en esta situacin de igualdad que las maestras muestran/construyen la percepcin de que el bien ofrecido, el acto, era de una calidad inferior al de los aos anteriores y al disculparse se adelantan a cualquier crtica. 3.2 La evaluacin Mediata La evaluacin mediata del acto, es realizada principalmente por la directora y debe ser entendida en relacin al Concepto. El Concepto es una nota que sta otorga a cada una de las maestras cuando finaliza el perodo lectivo. Esta calificacin es entregada a cada una de las interesadas en una planilla oficial en la cual se detallan los tems evaluados y la puntuacin obtenida en cada uno de ellos. Despus de ser sido firmada por la maestra, una copia es archivada en la escuela. Los tems considerados van desde la actualizacin pedaggica hasta la puntualidad y arreglo personal, pasando por la colaboracin que la docente presta a las actividades escolares. No existe un tem en particular que evale como las maestras realizaron los actos que tenan bajo su

responsabilidad, sin embargo, es sta una de las actividades que mayor importancia tienen a la hora de atribuir esa calificacin. El concepto tiene una doble importancia. Por una parte, un valor que, de modo provisorio, podramos llamar burocrtico y por otra un valor al cual denominaremos, a falta de un concepto mejor, simblico. La importancia burocrtica, codificada en una intrincada serie de normativas ministeriales, est dada por la necesidad de tener un buen concepto para poder acceder a ciertos beneficios, como por ejemplo un traslado de escuela. Una buena calificacin sirve tambin para que las maestras aumenten su Puntaje. El puntaje es la evaluacin realizada por un cuerpo de funcionarios del Ministerio de Educacin ( la Junta de Clasificaciones) del curriculum de cada docente. A partir del puntaje obtenido se elaboran listas de orden de mrito que, a su vez, regulan el acceso a los puestos de trabajo como maestras. Un mal concepto, en caso de que este sea repetido durante un perodo de tres aos y la maestra no fuera titular de su cargo, hara que esta perdiera su ocupacin. El concepto, desde el punto de vista burocrtico, es importante para las maestras ms jveneso aquellas que se estn iniciando en la actividad profesional, dado que son ellas las que ubicadas en sectores perifricos intentan trasladarse a escuelas ms cercanas a su domicilio o al centro de la ciudad o procuran un nuevo cargo de maestra. Tambin son ellas las que generalmente, al no ser titulares, tienen el riesgo de perder su trabajo a causa de una serie de evaluaciones desfavorables. Para las maestras que tienen recorrido un camino mayor dentro de la profesin el concepto carece mayormente de esta importancia burocrtica, dado que ya han alcanzado los beneficios que un buen concepto les permitira obtener El valor utilitario del concepto est restringido, en estos casos, a aquellas que buscan un ascenso a directora o vicedirectora. Mayoritariamente, estas maestras tambin estn excluidas de los castigos que devendran de un mal concepto. En cuanto al valor simblico del concepto, la situacin es un tanto inversa dado que, son las maestras que ya han recorrido un largo camino en la educacin quienes se muestran ms interesadas en la obtencin de una buena calificacin. Esta situacin es entendible si pensamos que son ellas las que se encuentran ms inmersas y comprometidas en el ethos escolar. El concepto es un instrumento a travs del cual se otorga y adquiere prestigio, un medio de reconocimiento y distincin. Un buen concepto honra a la maestra que lo recibe, aumentando as su capital simblico a travs de la consagracin de los valores que ella encarna o las formas de capital que ella posee, como los valores y el capital legtimo en aquel campo. En este sentido el concepto puede ser entendido como un fetiche de prestigio, tal como las disposiciones de las habitaciones en Versalles, o los gestos ceremoniales en relacin al despertar del rey.(Elas,1987). Este fetiche funcionar para algunas maestras, ms cercanas a la corte de Luis XIV, como un indicador del lugar ocupado en la jerarqua de su escuela, en

tanto que para otras ms cerca de Luis XVI, tendr principalmente una utilidad inmediata, o servir en la bsqueda de determinadas ventajas. Esta diferencia en relacin al valor del fetiche debera ser puesta en relacin tanto con ciertos habitus y disposiciones de cada maestra; con el particular estilo cortesano que se vive en cada escuela, as como con el valor social que el ser maestra tiene en una determinada formacin social. Realizar un "acto lindo" es como ya sealramos una de las estrategias para conseguir ese buen concepto cuya posesin, como si se tratara de un collar o brazalete trobriands, acrecienta el prestigio individual.Un "acto lindo" como un objeto kula importante, tiene la calidad de tal a partir de un juicio colectivo que determina ese carcter de lindo o extraordinario. La evaluacin que realiza la directora es de fundamental importancia en la determinacin del valor de un cierto acto, por ejemplo, algunas maestras entrevistadas nos comentaban "yo hara todo diferente, pero....a la directora le gusta as.....". Ese As, como ya sealramos es aprendido a travs de la convivencia escolar y los intercambios que en ella tienen lugar. Seramos sumamente parciales si slo considerramos la opinin de la directora como determinante del valor de un determinada acto. Ella misma se encuentra atrapada en una serie de relaciones de interdependencia, cuya descripcin escapa a los lmites de este trabajo, en las cuales participan activamente los padres, las propias maestras y en otros tiempos, el Estado a travs de sus polticas y agentes encargados de aplicarlas. Sin embargo creemos que es la Directora quien debe catalizar todas esas relaciones y sintetizar el conjunto de valoraciones y objetivarlas en el Concepto 4. Conclusiones A lo largo de este trabajo hemos intentado describir a las Performances Patriticas Escolares como si se tratara de fenmenos sociales totales, en los cuales lo econmico y lo jurdico, lo religioso, lo esttico, lo poltico y lo morfolgico se encuentran confundidos y entrelazados, de modo tal que cualquier separacin ser siempre arbitraria. Dentro de estas PPE intentamos aislar al ACTO, como un objeto que se intercambia y a travs del cual se alimentan una serie de relaciones de interdependencia , de las cuales slo describimos algunas y se despliegan otros circuitos de intercambio que alimentan otras relaciones. Son muchas las cosas que han quedado fuera, entre las ms importantes se encuentran todas las relaciones de intercambio que se dan entre los nios y aquellas que se dan entre estos y los otros agentes considerados. La exclusin de los nios ha sido deliberada y en esta ocasin los hemos tratado tan slo como una materia prima inerte. Otra dimensin que ha quedado excluida de nuestro anlisis tanto de las PPE como de los ACTOS ha sido la esttica. Tomar en cuenta este aspecto nos permitira

una mejor comprensin del carcter ldico que poseen los actos escolares tanto para las maestras como para los padres y los nios. La consideracin de esta dimensin, generalmente olvidada, nos permitira un mayor acercamiento a, por ejemplo, la identificacin que se da entre los productores y la cosa producida, sobre la que nos llama la atencin Malinowki(1937) en su anlisis de los urigubu (dones que un sujeto entrega a la casa de la hermana y su esposo) as como al placer en hacer analizado por Florence Weber(1989) en torno al cultivo de flores entre un grupo de obreros en Francia. Para concluir queremos sumariamente llamar la atencin, para una dimensin analtica presente en todo estudio de intercambio de dones: la oposicin obligatorio/espontneo que caracteriza las operaciones de dar, recibir y retribuir. Como hemos sealado la produccin del acto es de carcter obligatorio, de acuerdo a una normativa estatal que rige el trabajo docente. Sin embargo los maestros tienden a representarse esta actividad como espontnea o generosa, fuera de todo inters calculstico en obtener un buen concepto o conseguir un reconocimiento social expresado como prestigio. Esta misma situacin puede reconocerse en muchos de los padres que estando obligados a mandar a sus hijos a los actos escolares, se representan esta accin como libre y voluntaria. Este no-reconocimiento de los intereses en juego en esa escena social, "juego en el cual todos saben --y no quieren saber-- que todos saben --y no quieren saber--"(Bourdieu, 1996:8), que se construye en torno a las PPE, es la que las dota de encanto y belleza. Esta denegacin colectivamente sustentada, por medio de la cual un saber comn no puede ser transformado en saber pblico/publicado, no puede ser entendida fuera del trabajo pedaggico a travs del cual se construyen ciertas disposiciones del habitus tales como la generosidad o la entrega espontnea. Este trabajo de inculcacin es realizado a travs de la instauracin de una creencia que sustentara a la denegacin y la dotara de eficacia. La gratuidad aparente de estos dones que son los actos no puede entenderse fuera del Amor a la Patria, a la cual como ensean las PPE, todo debe entregarse sin esperar nada a cambio y la Vocacin Docente, que es, como sealramos en el inicio, el modo que las maestras tienen de manifestar su Amor a la Patria. Referencias Bibliogrficas y Fuentes. 1. Fuentes Archivos: Ministerio de Educacin de la Pcia. de Crdoba Escuela "Gobernador Olmos". Crdoba Revistas: La Obra.(1930-1958) El Monitor de la Educacin Comn. (1930-1950) Documentos Oficiales: Leyes de la Nacin Argentina.

2. Bibliografa Bourdieu, Pierre. 1980. Le sens pratique Paris: Minuit. ______________1995(1966). "Senso de Honra" in Mariza Corra(org) Trs Ensaios sobre Argelia & um Comentario. Campinas: Unicamp Editora. ______________1996. "Marginalia. Algumas Notas Adicionais sobre o Dom". Mana, (2) 2. Elas, Norbert. 1987(1969). A Sociedade de Corte. Lisboa: Editorial Estampa. Leach, Edmund. 1982: "Debt, Relationship, Power" in Social Anthropology. Oxford: Oxford University Press. Malinowski, Bronislaw. 1984(1922). Argonauts of the Western Pacific. Prospect Heights,Ill: Waveland Press. ____________________1987(1937). Coral Gardens and their Magic.London: Allen & Unwin Ltd.. Mauss, Marcel. 1971(1923) "Ensayo sobre el don" in Sociologa y Antropologa. Madrid: Tecnos. Plotkin, Mariano. 1994. Maana es San Pern. Buenos Aires: Ariel Senet, Rodolfo. 1905. Apuntes de pedagoga. Bs As: Cabut & Cia. Weber, Florence. 1989. Le travail cte. Paris: INRA/EHESS.

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