i t i n e r a r i o

d e

p i e d r a

La arqueologa
mesoamericana
en la obra de Nebel

L e o n a r d o L p e z Lu j n
a Marie-France Fauvet-Berthelot

Durante el Romanticismo, existi una tendencia a mirar

al pasado no slo por curiosidad o por la necesidad de un
saber ms amplio. Aquellos hombres no buscaban en
los vestigios arqueolgicos sociedades primitivas, sino
civilizaciones en su Edad de Oro. Como podemos ver en
estas pginas, Carl Nebel no se sustrajo a esta fascinacin,
y se acerc a las antigedades mesoamericanas
con la perspectiva de quien busca en ellas
los rostros de culturas verdaderas.
Tuzapan, sitio arqueolgico
descubierto por Carl Nebel.
Detalle de la lmina 34.

20

l 6 de diciembre de 1825, en la sede de la Socit de Gographie de Pars, David

Baillie Warden causaba una gran expectacin entre la asamblea al leer su reporte sobre la Description of the Ruins of an Ancient City: Discovered Near Palenque, informe que el capitn Antonio del Ro haba rendido al rey de Espaa en
1787, y que, tras dcadas en el olvido, haba sido impreso por primera ocasin

Figurillas aztecas.
Lmina 46.

en Londres en 1822. Las emotivas palabras de

Con la ampliacin del plazo y una maWarden acerca de una ciudad de ocho leguas de yor difusin de las bases de la competencia, el
extensin, con un arte avanzado y que haba sido escenario cambi radicalmente: entonces fueengullida por la jungla tuvieron tal impacto entre ron muchos los que se declararon dispuestos
los miembros de la sociedad que, al unsono, de- a emprender la aventura, entre ellos Franois
cidieron publicar en francs el reporte de Del Ro Corroy, director del hospital militar de Villay, unos meses despus, convocar a un concurso hermosa, su hijo y su sobrino, as como el abad
para elaborar una descripcin ms completa y Henri Baradre, el polifactico Jean-Frdric
ms exacta sobre la enigmtica capital maya.
Waldeck, el malogrado Ludwig Choris, el pintor
En el clebre Bulletin rgano de difusin Johann Moritz Rugendas y Juan Galindo, oficial
de la sociedad, que ms tarde se convertira en superior de la Repblica de Amrica Central. A
la principal fuente de inspiracin de Jules Ver- la lista de interesados pronto se sumara el nomne prometieron otorgar una medalla de oro, bre de un talentoso alemn de apenas 25 aos
con valor de 2 400 francos, a quien lograra inter- de edad: Carl Nebel. Por conducto de Adrien
narse en la selva y llevara a cabo vistas pintores- Cochelet, cnsul general de Francia en Mxico,
cas de los monumentos palencanos con planos este joven, con estudios en arquitectura y al pay cortes, as como con detalles de las esculturas recer tambin en ingeniera, se propuso ante la
ms insignes. Se deban realizar excavaciones en Socit de Gographie para llevar a cabo el viaje
los subterrneos y los acueductos; indagar sobre a Palenque, pero, quiz debido a una solicitud
sus constructores, especialmente sus costumbres de apoyo econmico, el ofrecimiento recibi una
y su lengua; elaborar mapas de las demarcaciones respuesta negativa si bien bastante amable a
donde estaban las ruinas, haciendo observaciones mediados de 1830. An as, Nebel persisti en
geogrficas y econmicas, y recopilar datos sobre sus aspiraciones, tal y como lo demuestra una
Votn, comparable a Buda y Odin. Por si fuera segunda carta que Cochelet envi a la sociedad
poco, tambin deban emprenderse reconoci- a finales de ese mismo ao, en la cual se anunmientos en Yucatn y Guatemala, particularmen- ciaba que el alemn pagara el viaje de su propio
te en los alrededores de Mrida y Man, adems peculio e intentara llegar hasta Guatemala. Junde El Petn, Utatln y Copn, pues haba noticia to a dicha carta se encontraba el ambicioso prode que los vestigios arqueolgicos de aquellas re- grama de actividades de Nebel, el cual inclua la
giones tenan vnculos con los de Palenque. Para redaccin de un breviario de la historia antigua
no quedar fuera del concurso, los resultados ten- de Mxico acompaado de dibujos de cdices y
dran que ser entregados en la sede de la sociedad esculturas originales, un estudio de la mitologa
antes del 1 de enero de 1830.
prehispnica, otro de la Piedra del Sol entonSemejantes metas debieron haber sonado ces llamada Calendario de los mexicanos, as
inalcanzables para la mayora de los lectores del como descripciones y dibujos de Teotihuacan,
Bulletin, mxime si prestaron fe a uno de los pri- Cholula, Xochicalco, Papantla, Mitla y el propio
meros concursantes, quien afirmaba que los explo- Palenque.
radores de la Palmira americana haran frente a
tempestades, vientos del norte, serpientes, cule- Tenochtitlan y el Museo Nacional
bras, grandes murcilagos, tigres, leones, lacan- Para entonces, Nebel era ya un declarado amandones antropfagos y, todava peor, a los temibles te de la arqueologa mesoamericana. Durante sus
mexicanos, poco civilizados, celosos y descon- dos primeros aos de estancia en Mxico, el pafiados. Ante tan aterradoras perspectivas, la res- sado prehispnico haba incidido vigorosamenpuesta a esta novelesca convocatoria fue tan pobre te en su espritu creativo, y lo haba motivado a
como insatisfactoria, razn por la cual el cierre del plasmar en papel cuanto vestigio de la antigedad
concurso tuvo que prorrogarse dos aos.
se atravesaba frente a sus ojos. A la postre, esta
22

aficin dara como fruto superlativo su Voyage

pittoresque et archologique dans la partie la plus
intressante du Mexique, lbum litogrfico que fue
publicado por primera vez en Pars en 1836 y en
el que Nebel consagr a la arqueologa 20 lminas de un total de 50. Este bellsimo conjunto de
imgenes nos revela su especial predileccin por
la arquitectura y la escultura en piedra, aunque no
soslay algunos objetos menores elaborados con
cermica y madera. De manera correlativa, los
breves textos que acompaan las lminas que
tan slo pretendan la diversin y el recreo del
lector nos reflejan las preocupaciones propias
de un arquitecto que enfoca su mira en los materiales y en los sistemas constructivos, y que se interroga sobre las dimensiones exactas, la forma, las
proporciones y las funciones de los monumentos.
Recurrente en ellos es la admiracin de su autor
por la perfeccin de los restos arqueolgicos locales, en franco contraste con un siempre despreciativo Alejandro de Humboldt, quien consideraba a
la plstica prehispnica como desprovista de todo
valor esttico, por ser obra de pueblos brbaros.
Nebel, por el contrario, los atribua a civilizaciones en toda la extensin de la palabra, y los comparaba, por ejemplo, con las vas pavimentadas, el
Coliseo y otros monumentos de la Roma antigua,
que tanto haba admirado durante una estancia
previa en la pennsula itlica.

Copia del Lienzo de Tetlama, elaborada por Carl Nebel. Bibliotque Nationale de France.
Esta pieza revela que Carl Nebel, adems de ser explorador, dibujante
y coleccionista de piezas prehispnicas, copiaba documentos antiguos.

Xochiqutzal.
Muse du quai Branly.
Coleccin Lohse-Boudet.
Carl Nebel dibuj esta
pieza de su coleccin, pero
confundi a Xochiqutzal
con Coatlicue en su
nomenclatura.
Lmina 47.
Teponaztli.
Tepoyango, Tlaxcala.
National Museum of
the American Indian,
Washington, D.C.
En el ejemplar dibujado
por Nebel, la fecha
fue interpretada
equivocadamente por
el artista, pues grab la
leyenda 4 Casa, en lugar de 5
Casa que aparece en la pieza.
Lmina 44.
23

Podemos suponer que Nebel tuvo su primer

contacto significativo con el pasado mesoamericano en la Plaza de Armas de la capital, lugar donde
haban sido exhumadas la Piedra del Sol y la Coatlicue en el no muy lejano ao de 1790. Como es
bien sabido, tras su descubrimiento fortuito y hasta
1885, el primero de estos monolitos estuvo expuesto
pblicamente al pie de la torre oeste de la catedral,
como puede verse en las lminas 3 y 4 de su lbum.
Imaginemos, por tanto, al artista frente al Zodiaco de 24 toneladas, tratando de captar su compleja
iconografa. Su preocupacin por el ms mnimo
detalle tuvo como resultado ltimo la lmina 49 de
su Voyage pittoresque et archologique Incurri
all en poqusimos errores de apreciacin, siendo
quiz el ms notorio el relativo a la fecha 11-Mono,
la cual qued transfigurada en un rostro humano
seguido de seis crculos. An as, esta litografa era
infinitamente ms precisa que el grabado en cobre
de Francisco Agera, dado a conocer en 1792 en
la Descripcin histrica y cronolgica de las dos piedras, de Antonio de Len y Gama, y reproducido
por Humboldt en 1810 en sus Vues des cordillres
Nebel complement la imagen de la Piedra del Sol
con un texto basado en la obra de Lon y Gama,
siguiendo sus aciertos y errores en relacin con el
significado cosmognico del monumento y de sus
supuestas funciones como reloj solar y marcador
de pasos equinocciales, solsticiales y cenitales. En

24

realmente pocas ocasiones Nebel se aventur a dar

sus propias opiniones, por ejemplo, cuando seal que las dos serpientes de fuego que enmarcan el
disco representan al tiempo devorando a las generaciones humanas.
Nebel tambin debi haber pasado largas
jornadas de trabajo en el hoy desaparecido primer
edificio del Museo Nacional. En el patio central
analiz, con la mirada y con el trazo, a la Coatlicue, y encontr en ella rasgos de terror y espanto
propios de lo que llam una graciosa trinidad integrada por las divinidades de la guerra, la muerte y el infierno. Para el texto de su lbum se bas
nuevamente en las explicaciones de Lon y Gama,
y realiz un dibujo de gran formato (que puede
apreciarse en la lmina 50 de su lbum, reproducida en la pgina 31 de esta edicin) en el que, como
bien lo notara Justino Fernndez, hay leves equivocaciones en las figuras del crneo y la serpiente que
desciende entre las piernas de la diosa. Junto a la
Coatlicue, el alemn se top con la mole cilndrica
de la Piedra de Tzoc, de la cual ilustr acuciosamente el disco solar de la cara superior (lmina 46),
dos secciones con el desarrollo de las quince escenas de conquista llevadas a cabo hasta el gobierno
del sptimo tlatoani mexica (lmina 45, en las pginas 24 y 25 de este ejemplar), adems de un detalle
en gran formato de la sujecin de Chalco (lmina
44). En sus explicaciones de dichas lminas, el ale-

mn duda de que la Piedra de Tzoc hubiera sido equivocadamente en l una fecha 4-Casa), quizs
empleada en el sacrificio gladiatorio, tal y como lo aludiendo al ao 1519 de nuestra era. Brantz Masuponan sus antecesores. Al mismo tiempo, iden- yer todava lleg a ver este teponaztli en el museo
tifica de manera correcta los glifos toponmicos en 1841; pero luego, en fecha desconocida, fue
como armas o banderas de las naciones y a la efi- sustrado ilcitamente para reaparecer en 1928 en
gie de Tzoc como un jefe o gran personaje que las listas de nuevas adquisiciones del Museum of
porta un casco ms lujoso. Sin embargo, confunde the American Indian, Heye Fondation, de Nueva
el propulsor de los guerreros vencidos con flores York. Esto explica por qu hoy da se localiza en
o ramos que stos presentan a sus captores como el National Museum of the American Indian de
signo de sumisin.
Washington. Finalmente, en la misma lmina del
Otro tema que tambin atrajo la atencin lbum se muestran otros instrumentos cermicos
de Nebel en el Museo Nacional fue el de la msica. de viento (en la pgina 30 de esta edicin). Todos
En la lmina 43 del lbum dibuj dos teponaztlis ellos datan del Posclsico tardo (1325-1521 d. C.)
que Guillermo Dupaix y Luciano Castaeda ha- y proceden del centro de Mxico: una flauta tububan registrado en 1807 del otro lado de la Sierra lar transversa con un orificio de digitacin, una
Nevada, durante la Real Expedicin Anticuaria flauta globular con un orificio de digitacin, un
por la Nueva Espaa. Ambos instrumentos fue- silbato y dos flautas tubulares con campanas en
ron llevados a la capital en 1819 por sugerencia forma de flor, y cuatro orificios de digitacin.
de Fausto Elhuyar y, tras la consumacin de la
Independencia, llegaron al museo. El primer tam- Atrado por el coleccionismo
bor es de nogal, procede de la ciudad de Tlaxcala Tan pronto lleg a Mxico, Nebel entr en contacy representa a un guerrero. Conservado hoy en to con un crculo de aficionados a las antigedala Sala Mexica, fue considerado por Daniel Cas- des, integrado por el suizo Lukas Vischer, el austaeda y Vicente T. Mendoza como el ejemplar triaco Frdric Waldeck y los germanos Maximims hermoso que posee el Museo Nacional, de lian Franck, Carl Uhde y Johann Moritz Rugenmejor conservacin, de sonidos ms puros y de das. Estos extranjeros haban seguido el ejemplo
sonoridad perfecta. El segundo tambor, de Tepo- de diletantes locales como Luciano Castaeda, el
yango, Tlaxcala, (en la pgina 23 de este nme- conde de Peasco y la marquesa de Selva Nevada,
ro) tiene grabada la fecha 5-Casa (Nebel dibuj amasando sus propias colecciones. Acostumbra-

25

Escenas de la
Conquista, de la
piedra de Tzoc.
Lmina 45.

Piedra de
Sacrificio (detalle).
Lmina 46.
Cabecitas
teotihuacanas.
Lmina 49.

ban venderse piezas ar- son nicas en Mxico (lmina 12, en las pginas
queolgicas entre s y ha- 4 y 5 de esta edicin). Iniciada su construccin en
cerse prstamos tempora- el Preclsico, esta pirmide estaba dedicada a la
les para dibujarlas. Aunque llegada de los espaoles a Chicnahuiquihuitl (9Nebel era mucho menor que Lluvia), divinidad a la que los indgenas sacrifila mayora, debi integrarse caban nios a cambio de lluvias. En comparacin
rpidamente al grupo, pues com- con los grabados ms antiguos de Humboldt y de
parta con ellos el alemn como len- Castaeda, la litografa de Nebel es bastante fiel a
gua materna y aptitudes artsticas.
la realidad. La vista fue tomada desde un pequeExisten testimonios fehacientes de o montculo prehispnico conocido hoy como
que Nebel entabl con Waldeck una intensa re- Cerro Cocoyo que se encuentra justo al ponienlacin de colaboracin, a la vez que de competencia, te y est completamente rodeado por la poblacin
relacin que se prolongara ms all de la estancia actual. Nebel plasm el monumento con su aspecde ambos en nuestro pas. Dentro de una serie de to de cerro natural, en medio de un cielo vaporointercambios de objetos, sabemos que Nebel solici- so y coronado por la iglesia de Nuestra Seora de
t prestados a Waldeck su coyote y su Tonatiuh (o los Remedios, entonces carente de su torre sur. A
Apolo). A cambio le llev al austriaco una burda la izquierda y en ltimo plano se adivina el pico
falsificacin de cermica inspirada en la Piedra del nevado de La Malinche y las siluetas de Puebla.
Sol, al parecer con el nimo de gastarle una mala
En 1831, Nebel visit las ruinas de Xochicalbroma. De igual manera, Nebel pint esculturas co, sitio epiclsico (650-900 d.C.) cuya existencia
pertenecientes al gabinete de Vischer: un bloque en fue tempranamente notificada por fray Bernardino
serpentina que representaba las armas de Tezcuco de Sahagn (ca. 1580) y Fernando de Alva Ixtilxy la excepcional efigie texcocana de Xipe Ttec (l- chitl (1611). Aunque el alemn nunca menciona
mina 48, en la pgina 71 de esta edicin), que hoy sus fuentes de informacin, es evidente que para su
se encuentra en el Museum der Kulturen de Basilea. lbum se vali profusamente del artculo de Joseph
De sta, Nebel seal, con ojo perspicaz, que repre- Antonio Alzate de 1791, quien haba emprendido
sentaba a un sacerdote vestido con una piel humana una expedicin al sitio morelense en 1777 y otra
durante la veintena de Tlacaxipehualiztli.
en 1784. Lo anterior queda patente en la lmina 29
Nebel gustaba de coleccionar pequeos (pgina 27 de este volumen), donde Nebel reconsobjetos arqueolgicos producidos en serie, tales truye hipotticamente el Templo de las Serpientes
como cabecitas teotihuacanas (figura 49), y figuri- Emplumadas, para lo cual se inspira en la propuesta
llas y sellos aztecas (lminas 46-48). En su lbum del sabio novohispano de que la pirmide contaba
incluy muchos de ellos para demostrar el grado en un origen con cinco cuerpos superpuestos. An
de perfeccin que [los antiguos mexicanos] haban as, no podemos negar al alemn la gloria de haber
adquirido en este ramo del arte plstico. All vin- sugerido, por primera ocasin, que el famoso Obcul las figurillas con dioses, sacerdotes y guerre- servatorio subterrneo de Xochicalco funga como
ros, aunque no siempre de manera correcta, pues marcador cenital y, sobre todo, el haber hecho las
confunda, por ejemplo, a Ehcatl con Tonatiuh y litografas ms bellas en la historia del sitio.
a Xochiqutzal con Coatlicue. Cerca de su muerte,
Para su lmina 28, Nebel seleccion la esNebel leg a un individuo de apellido Lohse un quina noroeste del Templo de las Serpientes Emtotal de 28 piezas de cermica, dos de piedra y dos plumadas, sin duda el ngulo ms agraciado de
de hueso. Con el tiempo, el magro conjunto pas este edificio que fuera reconstruido por Leopoldo
a manos de su hija, la seora Lohse-Boudet, quien Batres en 1909. Se trata de la misma esquina dibuen 1935 lo don al Muse dEthnographie du Tro- jada por Waldeck y Adela Breton, y fotografiada
cadro. Hace apenas un par de aos, este lote fue por Leopoldo Batres y Antonio Peafiel. En su litointegrado a las colecciones del flamante Muse du grafa, Nebel complet bloques y relieves faltantes,
quai Branly; de este conjunto, Nebel plasm dos elimin escombros, aadi palmeras y omiti la
figurillas antropomorfas en su lmina 46, dos en escalinata como si no existiera la mitad meridiosu lmina 47 y una ms en su lmina 48.
nal del templo. La escala, sealada por cuatro bien
figurados visitantes, hace suponer engaosamente
Al otro lado de las montaas
que la construccin posee una altura un 30 por
Nuevos horizontes se abrieron al joven alemn ciento mayor a lo que en realidad tiene (esta imacuando dej la ciudad de Mxico para trascender gen puede verse en la pgina 27 de esta edicin).
la Sierra Nevada y el Ajusco. En Cholula pudo reaNebel ilustr tambin detalles de los balizar una romntica estampa del Tlachihualtpetl o jorrelieves tallados en los bloques de prfido
cerro hecho a mano, cuyas ciclpeas dimensiones traqutico del templo, y reconoci en ellos per26

Templo de las Serpientes emplumadas de Xochicalco:

sus ruinas (arriba) y su reconstruccin hipottica (sobre estas lneas),
lminas 28 y 29.
Probablemente Carl Nebel bas la reconstruccin hipottica de esta edificacin
en el dibujo hecho por Alzate (derecha) y publicado en la Gazeta de Literatura, en 1791.
Biblioteca Nacional de Antropologa e Historia.
27

Flanco occidental
del Cerro de
los edificios en
La Quemada,
Zacatecas.
Lmina 21.

sonajes similares a los de Palenque, lo que signi- Explorando Veracruz y Zacatecas

fica que cuando redact los textos tuvo acceso a Durante meses, Nebel busc en el gobierno mexila publicacin de Del Ro o a las de Dupaix. La cano y en potenciales suscriptores los recursos
lmina 25 nos muestra a uno de los personajes necesarios para su tan anhelado viaje a Palenque.
inferiores del talud sur as2 o as8 en la nomen- Pero, a diferencia del gran eco que obtuvo Waldeck,
clatura de Virginia Smith (ver su publicacin del todos los esfuerzos de Nebel fueron en vano. Entre
ao 2000), pero transform las vrgulas de la ellos, no logr vender sus dibujos arqueolgicos al
palabra en largas plumas, la cabeza de reptil del cnsul de Prusia, pues a ste le pareci excesiva la
tocado en motivos vegetales y el caracol cortado suma de diez mil piastras que Nebel haba fijado.
en una suerte de apoyo. De manera correlativa, en As, al joven arquitecto no le qued ms remedio
la lmina 24 represent a uno de los personajes de que anunciar a la Socit de Gographie el 30 de
los tableros, pero fusion los elementos de tw1, diciembre de 1831, nuevamente por va de Cotw2 y tn4 en la mencionada nomenclatura. All, chelet, que se retiraba en definitiva de la liza. Poco
el tocado en forma de glifo del ao se convierte antes o poco despus de tomar esta triste decisin,
en un gorro cnico de varios niveles con una ser- Nebel realiz una expedicin a los densos bosques
piente como adorno, las anteojeras se tornan en tropicales del Totonacapan veracruzano, viaje que
gafas y desaparecen los dientes de la mandbula le implic un gasto de 1 200 pesos y una terrible
y las vrgulas.
enfermedad. Uno de los lugares visitados fue Ma28

pilca, en el municipio de Tecolutla, sitio arqueolgico bautizado con el nmero 101 en la relacin
de Jos Garca Payn. Como motivo principal, la
lmina 39 de su Voyage pittoresque et archologique nos muestra un bloque tallado en el tpico
estilo de El Tajn, lo que hara contemporneo
a Mapilca con este sitio. En sus notas, Nebel
registr la presencia de varias pirmides y pisos empedrados. A esto debemos sumar las
20 casas (una de 70 pasos de largo y diez pies
de alto) que contaron el doctor G. Schiede
de Cassel y el seor Deppe, quienes recorrieron el mismo lugar a fines de 1828 o
principios de 1829.
De Mapilca, Nebel se dirigi hacia el noroeste y atraves el ro Tecolutla para llegar a El Tajn.
De inmediato orden cortar los rboles que crecan
en torno a la Pirmide de los Nichos para elaborar

Plano de La Quemada, Zacatecas.

Lmina 23.
29

Instrumentos
musicales.
Lmina 43.
Pgina siguiente:
Coatlicue.
Lmina 50.
Pginas 32-33:
Reconstitucin
geomtrica de la
Pirmide de los
Nichos de El Tajn.
Lmina 37.

la que es, sin duda, la litografa ms espectacular

de su lbum (lmina 37, en las pginas 32 y 33 de
esta edicin). Pint una reconstitucin geomtrica
de la fachada oriental (sin desplomes ni faltantes,
aunque con una rara escalinata), con el fin de que
el interesado pudiera obtener medidas exactas de
cualquier elemento arquitectnico a partir de la
litografa. Por ello, los nichos de lajas de arenisca
emergen esplendorosamente de entre una exuberante vegetacin, y se superponen con elegancia
hasta casi alcanzar los 25 metros de altura. En el
escrito explicativo es clara la intencin de Nebel
por hacerse pasar como el descubridor de esta majestuosa urbe, cuyo apogeo aconteci entre el 750
y el 950 d.C. Nos dice: Aunque mencionada por
el barn de Humboldt y otros[], nunca ha sido
dibujada, ni an se ha tenido una relacin exacta
sobre ella. Conocida slo de reputacin, nadie la
ha visto, excepto algunos indios de las inmediaciones. Lejos de ello, un artculo annimo publicado
en la antigua Gazeta de Mxico nos da conocer que
Diego Ruiz, cabo de la ronda del tabaco de la jurisdiccin de Papantla, se haba topado con la Pirmide de los Nichos en marzo de 1785, durante una
inspeccin en busca de plantos clandestinos. Dicho artculo contiene una detallada descripcin del
monumento y est acompaado de un grabado en
cobre firmado por un tal Garca. Luego, en 1804, la
informacin de Ruiz y una copia del grabado referido es dada a conocer en Europa por el jesuita Pedro Jos Mrquez en sus Due antichi monumenti
A lo anterior debemos sumar que Dupaix visit El
Tajn en algn momento anterior a 1805, pero por
desgracia sus apuntes y dibujos se extraviaron.
Lo que s descubri Nebel durante la misma
expedicin fue Tuzapan, sitio del Posclsico tardo
(1200-1521 d.C.) que pocos han visitado (en la pgina 20 de este nmero). A pesar de que todava
hay quien lo considera perdido, este centro est
bien ubicado sobre el mapa. Se localiza en las cercanas del pueblo de Chicualoque, en el municipio
de Coyutla, que est frontero al estado de Puebla.
Denominado con el nmero 68 en la relacin de
Garca Payn, Tuzapan se levanta sobre una mesa
ubicada a unos kilmetros de distancia del curso
del ro San Marcos-Cazones. Fue inspeccionado
por Wilfrido DuSolier y Enrique Juan Palacios en
febrero de 1939 y por Humberto Besso-Oberto en
1987. En la actualidad est siendo estudiado por la
arqueloga Mara Rosa Avilez. Gracias a ella, sabemos que el denso bosque dibujado por Nebel en
la lmina 34 ha sido talado para cultivar caf e introducir ganado. Obviamente, esto ha acelerado el
saqueo y la destruccin de sus templos, juegos de
pelota, murallas, aljibes y canales, razn por la que
urge su salvaguardia. La pirmide principal de
30

das a Berghes entre 1832 y 1834 por el gobernador

Francisco Garca Salinas.
Por ltimo, la lmina 23 (en la pgina 29 de
este nmero) reproduce el tercero de cuatro planos
que Berghes levantara del sitio zacatecano entre
1830 y 1856, dos de los cuales, por cierto, se conservan hoy en la Mapoteca Manuel Orozco y Berra. El copiado por Nebel se basa en el segundo
plano de Berghes, aunque es un poco
ms preciso en lo referente a la topografa, los agrupamientos de las
edificaciones y el trazo de las vas
internas.

Personaje de Xochicalco.
Lmina 24.

cuatro cuerpos que suman 7.5 metros de alto y una

escalinata hacia el poniente tampoco conserva
el techo de la capilla que se observa en la litografa. Ha desaparecido asimismo la imagen de Chalchiuhtlicue tallada en la roca viva y que haca las
veces de surtidor (lmina 35).
La ltima visita arqueolgica consignada
en el Voyage pittoresque et archologique es la
que Nebel emprendiera a la ciudad epiclsica de
La Quemada, en el estado de Zacatecas. Aprovech para ello una estancia en la mina argentfera
inglesa de Veta Grande, donde el prusiano Joseph
Burkart tena el cargo de director de labores y el
franco-alemn Carl de Berghes era el supervisor
de las actividades de construccin y fundicin. Los
dos ingenieros no slo conocan a la perfeccin las
ruinas de La Quemada, sino que haban redactado
extensas descripciones, hecho vistas de sus monumentos, levantado planos y realizado excavaciones.
Con estos guas de excepcin, Nebel arrib
a La Quemada e ilustr el majestuoso flanco occidental del llamado Cerro de los Edificios (lmina
21, en las pginas 28 y 29 de esta edicin). Se adivinan en su litografa las grandes cortinas de toba
rioltica que forran las laderas del cerro, as como
las terrazas escalonadas que van desde la Acrpolis, al sur, hasta la Ciudadela, al norte. Segn
Nebel, la primera cumpla funciones sacerdotales
y la segunda militares. La siguiente imagen representa el quinto nivel de la Acrpolis, tambin conocido como la Plaza de los Sacrificios (lmina
22). En este lugar se encuentran una tpica plaza
hundida, ocupada al centro por un altar y rodeada por grandes cuartos y un basamento piramidal
de cinco cuerpos. De manera interesante, en la
litografa se observa un individuo blandiendo un
pico, quiz en alusin a las exploraciones encarga-

Un veredicto decepcionante
Sucesivos volmenes del Bulletin
nos dan a conocer, por un lado,
que Carl Nebel fue aceptado como
miembro de la Socit de Gographie el 20 de diciembre de 1833 y,
por el otro, que el cierre del concurso se difiri en dos ocasiones
ms. El tan ansiado fallo fue notificado hasta abril de 1836. Entre
otras muchas cosas, la comisin
lament en una comunicacin que
el hbil seor Nebel no haya podido acompaar al seor Waldeck en
todas estas excursiones. Los talentos
reunidos del arquitecto y del pintor
habran sido suficientes para esta
inmensa tarea. Calific sus dibujos
de La Quemada como cuidadosos y
acabados, y deplor que nadie de la
calidad del alemn hubiera viajado a
Guatemala. De manera tajante, juzg
que ninguno de los participantes haba cumplido
con los requisitos y que, por lo mismo, el concurso se postergaba por ltima ocasin hasta el 31 de
diciembre de 1839, elevndose el valor de la medalla a 3000 francos. Como premio de consolacin,
se otorgaron medallas de plata a Baradre y Lord
Kingsborough por sus respectivas ediciones de
la expedicin a Palenque de Dupaix y Castaeda.
Galindo recibi otra medalla de plata, Waldeck y
Corroy se hicieron acreedores a sendas medallas de
bronce, y Warden a un agradecimiento por publicar el reporte de Del Ro en francs. En 1840, como
era de esperarse, el premio fue declarado desierto y
con ello se puso punto final a la competencia.
Leonardo Lpez Lujn. Doctor en arqueologa por la Universidad de Pars e investigador del Museo del Templo Mayor, inah.
Ha recibido en dos ocasiones el Premio del Comit Mexicano
de Ciencias Histricas, adems del Premio de Investigacin en
Ciencias Sociales de la Academia Mexicana de Ciencias. Arquelogo de campo, ha incursionado en los ltimos aos en la historia
de esa disciplina en nuestro pas.
31

32

33