Métodos y Análisis Verticales
Métodos y Análisis Verticales
Métodos y Análisis Verticales
El análisis financiero dispone de dos herramientas para interpretar y analizar los estados
financieros se denominan Análisis horizontal y vertical, que consiste en determinar el
peso proporcional (en porcentaje) que tiene cada cuenta dentro del estado financiero
analizado. Esto permite determinar la composición y estructura de los estados
financieros.
Como el objetivo del análisis vertical es determinar que tanto representa cada cuenta del
activo dentro del total del activo, se debe dividir la cuenta que se quiere determinar, por
el total del activo y luego se procede a multiplicar por 100. Si el total del activo es de
200 y el disponible es de 20, entonces tenemos (20/200)*100 = 10%, es decir que el
disponible representa el 10% del total de los activos.
Se puede decir, por ejemplo, que el disponible (caja y bancos) no debe ser muy
representativo, puesto que no es rentable tener una gran cantidad de dinero en efectivo
en la caja o en el banco donde no está generando Rentabilidad alguna. Toda empresa
debe procurar por no tener más efectivo de lo estrictamente necesario, a excepción de
las entidades financieras, que por su objeto social deben necesariamente deben
conservar importantes recursos en efectivo.
Quizás una de las cuentas más importantes, y a la que se le debe prestar especial
atención es a la de los clientes o cartera, toda vez que esta cuenta representa las ventas
realizadas a crédito, y esto implica que la empresa no reciba el dinero por sus ventas, en
tanto que sí debe pagar una serie de costos y gastos para poder realizar las ventas, y
debe existir un equilibrio entre lo que la empresa recibe y lo que gasta, de lo contrario
se presenta un problema de liquidez el cual tendrá que ser financiado con
endeudamiento interno o externo, lo que naturalmente representa un costo financiero
que bien podría ser evitado si se sigue una política de cartera adecuada.
Los Activos fijos, representan los bienes que la empresa necesita para poder operar
(Maquinaria, terrenos, edificios, equipos, etc.), y en empresas industriales y
comerciales, suelen ser representativos, más no en las empresas de servicios.
Respecto a los pasivos, es importante que los Pasivos corrientes sean poco
representativos, y necesariamente deben ser mucho menor que los Activos corrientes, de
lo contrario, el Capital de trabajo de la empresa se ve comprometido.
Algunos autores, al momento de analizar el pasivo, lo suman con el patrimonio, es
decir, que toman el total del pasivo y patrimonio, y con referencia a éste valor, calculan
la participación de cada cuenta del pasivo y/o patrimonio.
Frente a esta interpretación, se debe tener claridad en que el pasivo son las obligaciones
que la empresa tiene con terceros, las cuales pueden ser exigidas judicialmente, en tanto
que el patrimonio es un pasivo con los socios o dueños de la empresa, y no tienen el
nivel de exigibilidad que tiene un pasivo, por lo que es importante separarlos para poder
determinar la verdadera Capacidad de pago de la empresa y las verdaderas obligaciones
que ésta tiene.
Así como se puede analizar el Balance general, se puede también analizar el Estado de
resultados, para lo cual se sigue exactamente el mismo procedimiento, y el valor de
referencia serán las ventas, puesto que se debe determinar cuanto representa un
determinado concepto (Costo de venta, Gastos operacionales, Gastos no operacionales,
Impuestos, Utilidad neta, etc.) respecto a la totalidad de las ventas.
Los anteriores conceptos no son una camisa de fuerza, pues el análisis depende de las
circunstancias, situación y objetivos de cada empresa, y para lo que una empresa es
positiva, puede que no lo sea para la otra, aunque en principio así lo pareciera. Por
ejemplo, cualquiera podría decir que una empresa que tiene financiados sus activos en
un 80% con pasivos, es una empresa financieramente fracasada, pero puede ser que esos
activos generen una rentabilidad suficiente para cubrir los costos de los pasivos y para
satisfacer las aspiraciones de los socios de la empresa.
Con este tipo de análisis, puedes contestar algunas preguntas como las siguientes:
1. ¿De dónde sale el dinero que tengo trabajando en la empresa? Es decir, ¿qué porcentaje
sale del capital contable, del pasivo a corto plazo y del pasivo a larga plazo?
2. ¿Cómo se encuentra distribuido el dinero que tengo trabajando en mi negocio? ¿Está en
activo circulante, fijo o diferido? o dicho de otra manera, ¿cuál es la mezcla de activos con que
está trabajando la empresa?
3. ¿Cómo se integran mis costos y/o gastos?
4. ¿Existe algún rubro del estado de resultados cuyo monto sea especialmente alto?
Por esta razón, es necesario poner un cuidado especial en determinar con qué empresa los vas
a comparar, ya que si la otra empresa también está mal en su situación financiera, entonces de
nada servirá trabajar con esta información, porque, como dice el refrán, "mal de muchos,
consuelo de tontos".
Asimismo, puedes hacer comparaciones con los estados financieros que hayas presupuestado,
para detectar deficiencias en la operación o administración de la empresa.
Para determinar la estructura financiera interna de una empresa, primero hay que determinar la
proporción que representa cada rubro con respecto al total de cada concepto que nos interese.
Como ejemplo de lo anterior, podremos saber que proporción del total del activo es circulante,
o qué proporción del activo total representa el rubro de inventarios, o de clientes, o de terreno,
edificio o maquinaria y equipo, etc. Los resultados del análisis servirán para obtener algunas
conclusiones acerca de la situación financiera de la empresa.
A diferencia del método de razones financieras, en los que se hacen operaciones con
diferentes rubros de los estados financieros, en el método de reducción de estados financieros
a porcentajes o método de porcentajes integrales, lo único que tienes que hacer es dividir cada
uno de los renglones que integran los estados financieros entre el total de cada rubro y
multiplicarlo por 100, para que quede expresado en porcentaje.
Lo mismo sucedería con el pasivo y capital contable, en cuyo caso, el total seria la suma del
pasivo más el capital contable y en el estado de resultados debes considerar que las ventas
netas son iguales al 100 por ciento.
Para calcular los porcentajes integrales en el Balance general, se debe considerar como
referencia la suma del pasivo más el capital contable
Observa como invariablemente, la suma de los porcentajes debe ser iguala 100, es decir, al
hablar de porcentajes siempre debes tener en cuenta que estás determinando un por "ciento",
por lo que la suma de los porcentajes individuales debe ser igual a 100, o lo que es lo mismo,
"el todo es igual a la suma de sus partes"; de no ser así, significa que existe algún error en tus
cálculos.
Para obtener los porcentajes integrales, como ya se mencionó con anterioridad, es necesario
dividir cada uno de los renglones de los costos y gastos entre el total de ventas netas y
multiplicarlo por cien.
Para calcular los porcentajes integrales en el estado de resultados, es necesario hacerlo con
respecto a las ventas netas
Con este tipo de análisis, puedes contestar algunas preguntas como las siguientes:
1. ¿De dónde sale el dinero que tengo trabajando en la empresa? Es decir, ¿qué porcentaje
sale del capital contable, del pasivo a corto plazo y del pasivo a largo plazo?
2. ¿Cómo se encuentra distribuido el dinero que tengo trabajando en mi negocio? ¿Está en
activo circulante, fijo o diferido? o, dicho de otra manera, ¿cuál es la mezcla de activos con que
está trabajando la empresa?
3. ¿Cómo se integran mis costos y/o gastos?
4. ¿Existe algún rubro del estado de resultados cuyo monto sea especialmente alto?
A continuación, estudiaremos otra herramienta de análisis que, a diferencia del anterior, nos
permite conocer el desarrollo de los últimos años de una empresa. Este método es conocido
con el nombre de análisis de tendencias.
Análisis de tendencias
Este método nos permite conocer la dirección y velocidad de los cambios que se han dado en
la situación financiera de la empresa a través del tiempo, por lo que se considera como un
método de análisis horizontal.
Al igual que el método de porcentajes integrales, este nos ayuda a la detección de fallas; pero
es solamente un método explorativo, por lo que siempre es necesario investigar más a fondo
para encontrar las causas de las fallas.
Para efectuar un análisis mediante este método, es necesario determinar los cambios sufridos
en los saldos de los rubros de los estados financieros que nos interesa analizar.
La aplicación de este método requiere de la elección de un año base que te va a servir como
referencia o punto de partida de tus cálculos para poder observar la tendencia que está
siguiendo cada concepto.
Para calcular los cambios sufridos en cada rubro una vez determinada la base, solamente
debes dividir el saldo del rubro que te interese de cada año, entre el saldo base y el resultado lo
multiplicas por 100, con lo que obtendrás un resultado conocido como índice de tendencia.
Para calcular los cambios sufridos en cada año y en cada rubro, es necesario determinar el
índice de tendencia respectivo
Fórmula pura el cálculo del índice de tendencia
Una vez obtenidos los índices, es muy conveniente graficarlos para ver con claridad cómo se
está comportando tu empresa financieramente.
En ocasiones, es conveniente que utilices una misma gráfica para presentar la tendencia de 2,
3 o hasta 4 conceptos, pero no es recomendable que presentes muchos conceptos en la
misma gráfica, ya que puedes perderte con tantos datos y líneas.
Una vez que hemos calculado los índices de tendencias respectivos, se procede a interpretar
los resultados para poder obtener algunas conclusiones sobre el comportamiento financiero de
la empresa.
Ahora, se analizan las partes fundamentales del estado de resultados, en donde se observa la
tendencia de las ventas, comparada con el costo de ventas, gastos de operación y utilidad
neta.
RAZONES FINANCIERAS:
Uno de los instrumentos más usados para realizar análisis financiero de entidades
es el uso de las razones financieras, ya que estas pueden medir en un alto grado
la eficacia y comportamiento de la empresa. Estas presentan una perspectiva
amplia de la situación financiera, puede precisar el grado de liquidez, de
rentabilidad, el apalancamiento financiero, la cobertura y todo lo que tenga que ver
con su actividad.
RAZONES DE LIQUIDEZ:
RAZONES DE ENDEUDAMIENTO:
Estas razones indican el monto del dinero de terceros que se utilizan para generar
utilidades, estas son de gran importancia ya que estas deudas comprometen a la
empresa en el transcurso del tiempo.
RAZONES DE RENTABILIDAD:
RAZONES DE COBERTURA:
RAZONES DE LIQUIDEZ:
SOLVENCIA (IS):
IS = Activo total
Pasivo total