Solamente índice y preliminares, coord. B. Vauthier
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BNDICTE VAUTHIER
Y JIMENA GAMBA CORRADINE (Eds.)
CRTICA GENTICA Y EDICIN DE MANUSCRITOS HISPNICOS CONTEMPORNEOS CRTICA GENTICA Y EDICIN DE MANUSCRITOS HISPNICOS CONTEMPORNEOS CRTICA GENTICA Y EDICIN DE MANUSCRITOS HISPNICOS CONTEMPORNEOS APORTACIONES A UNA POTICA DE TRANSICIN ENTRE ESTADOS Bndicte Vauthier y Jimena Gamba Corradine (Eds.) EDICIONES UNIVERSIDAD DE SALAMANCA ESTUDIOS FILOLGICOS,
Ediciones Universidad de Salamanca y los autores I. edicin: mayo, 2012 ISBN: 978-84-9012-073-6 (Impreso) DL: S 220-2012 ISBN: 978-84-9012-112-2 (pdf) DL: S 360-2012 ISBN: 978-84-9012-113-9 (e-pub) DL: S 361-2012 ISBN: 978-84-9012-114-6 (Mobpocket) DL: S 362-2012 Motivo de cubierta: Emmanuel Urtuzuastegui Ediciones Universidad de Salamanca Apartado Postal 325 E-37080 Salamanca (Espaa) Realizado en Espaa - Made in Spain Grficas Lope Telfono +34 923 19 41 31 www.graficaslope.com Salamanca. Espaa
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CRTICA gentica y edicin de manuscritos hispnicos contemporneos : aportaciones a una potica de transicin entre estados / Bndicte Vauthier (coord.). 1a. ed.Salamanca : Ediciones Universidad de Salamanca, 2012 309 p.(Estudios Filolgicos; ) Actas de congresos 1. Crtica textual. I. Vauthier, Bndicte. 801.73 Publicado con la ayuda de: Schweizerische Akademie der Geistes- und Sozialwissenschaften Acadmie suisse des sciences humaines et sociales Accademia svizzera di scienze umane e sociali Academia svizra da scienzas moralas e socialas Swiss Academy of Humanities and Social Sciences Todos los derechos reservados. Ni la totalidad ni parte de este libro puede reproducirse ni transmitirse sin permiso escrito de Ediciones Universidad de Salamanca Ediciones Universidad de Salamanca es miembro de UNE (Unin de Editoriales Universitarias Espaolas) ndice Preliminares ...................................................................................................................................................... 9 La mquina de trovar del poeta Guillermo Carnero, Por signos de letrado: imaginario cultural y autoano- tacin........................................................................................................................................................ 23 Crtica gentica: orgenes, recepciones y arraigo Almuth Grsillon, La critique gntique: origines et perspectives ............... 35 lida Lois, Los estudios de crtica gentica en el campo de la literatura hispanoamericana ............................................................................................................................ 45 Fernando Colla, La coleccin Archivos y los Archivos Virtuales Latino- americanos: dos experiencias en el campo de las ediciones electrnicas .... 65 Paolo Tanganelli, Los borradores unamunianos (algunas instrucciones para el uso) ........................................................................................................................................... 73 Javier Lluch-Prats, El obrador del escritor y la edicin flolgica del texto lite- rario contemporneo ..................................................................................................................... 97 De la AUTOGRAFOTECA al archivo cultural Renzo Cremante, Archivi letterari italiani del Novecento: flologia e cri- tica ............................................................................................................................................................. 115 Francisco Javier Dez de Revenga, Gestin de un patrimonio literario: ma- nuscritos, epistolario, documentos personales, ediciones (El legado de Carmen Conde) ................................................................................................................................. 129 Historias de autores y editores: de la edicin crtica a la edicin gentica Louis Hay, dition critique et gntique: du Moyen ge nos jours ........ 147 Margarita Santos Zas, Los manuscritos de Valle-Incln: el taller del escri- tor ............................................................................................................................................................... 159 M. Francisca Vilches de Frutos, Los textos y sus representaciones: manuscri- tos y prctica escnica en el teatro espaol del siglo xxi.................................. 175 8 NDICE Montserrat Escartn Gual, Un archivo disperso: los papeles de Pedro Salinas .. 193 Jos Carlos Rovira Soler, De nuevo sobre el archivo de Miguel Hernndez .. 209 Bndicte Vauthier, Gentica de los manuscritos y gentica textual. El caso de Paisajes despus de la batalla de Juan Goytisolo ....................................... 235 Irne Fenoglio, Cration scripturale, gense, dition. Manuscrits littraires (Pascal Quignard) et manuscrits scientifques (mile Benveniste) ........... 259 Gentica electrnica y manuscrito electrnico Jean-Louis Lebrave, Gntique lectronique .................................................................. 283 Jess Rodrguez-Velasco, Manuscrito electrnico, alfabetizacin electr- nica ............................................................................................................................................................ 295 Preliminares Bndicte Vauthier Universitt Bern/ITEM Jai ptri de la boue et jen ai fait de lor. Il ne sufft pas de compulser des manuscrits pour tre gnticien. [] Ltablissement dune dition critique nest pas en soi une dmarche gntique. L a publicacin de La Littrature des crivains. Questions de critique gntique (Pars, Corti, marzo de 2002), suma de Louis Hay, fundador del Centre dAnalyse des Manuscrits (1974), rebautizado Institut des Textes et Manuscrits Mo- derne (1982), no pas inadvertida en Italia y en Espaa. A los pocos meses de su publicacin y pese a que no existiera traduccin del libro, este fue objeto de una elogiosa resea de Armando Petrucci en Italia, traducida luego al espaol por Mi- guel Requena y dada a conocer en Babelia en septiembre de 2002 1 . En la misma pgina del suplemento cultural se reseaba el libro de Pedro M. Ctedra: Invencin, difusin y recepcin de la literatura popular impresa (siglo XVI) (Mrida, Editora Regio- nal de Extremadura, 2002), centrado en las maneras de transmisin de la literatura popular siglodorista. Contestando de forma indirecta la pregunta acerca de una posible fliacin entre los mtodos La crtica gentica una nueva disciplina o un avatar moderno de la flologa? 2 , el acercamiento entre los trabajos del geneticista francs y del fllogo espaol se haca partiendo de la idea de que los estudios sobre la materialidad de los textos entendida como proceso de la escritura, en el caso de Louis Hay, como modos de transmisin, en el caso de Pedro M. Ctedra tendran la virtud de devolvernos a la experiencia real de la creacin y la lectura. Si al elenco de palabras citadas: materialidad de los textos o, mejor dicho, de los documentos, proceso de escritura, transmisin y, fnalmente, experiencia real y virtual de la creacin y la lectura, se aaden las de conservacin y edicin; si se pone especial nfasis en los protagonistas del manuscrito, cuyo camino le lleva del taller del escritor a las manos del lector detenindose en las de crticos y editores, ten- 1 Armando Petrucci, La gnesis de los textos literarios, Fernando Bouza, Ciegos y pliegos, Francisco Rico, Nota al pie, Babelia, El Pas, 7 de septiembre de 2002, pg. 11. La cita es de este ltimo. 2 Es el ttulo de un artculo de Jean-Louis Lebrave. 10 BNDICTE VAUTHIER dremos las palabras clave y los ejes en torno a los cuales se estructura este volumen, cuya estructura y contenido paso a comentar. Crtica gentica y edicin de manuscritos contemporneos. Aportaciones a una potica de transicin entre estados rene artculos de renombrados tericos de crtica textual y de crtica gentica europeos e hispanoamericanos, adems de los anlisis de fllogos hispnicos, tambin autores de ediciones crticas y/o responsables de archivos litera- rios. Todos ellos son fruto de dos encuentros internacionales centrados en la crtica textual y en la gentica de los manuscritos contemporneos (siglos xix-xxi) 3 . Esos foros se convocaron con la clara voluntad de tender un puente entre dos orillas: Es- paa e Hispanoamrica; entre diversas pocas: de la Edad Media al siglo xxi, y so- bre todo, entre diversas tradiciones: la crtica textual espaola, la flologa de autor italiana y la crtica gentica francesa, que, en parte, siguen viviendo de espaldas. Se abri as un debate terico y metodolgico que sigue abierto sobre las prcticas tradicionales y actuales del estudio de los manuscritos literarios contemporneos y sobre algunos de los problemas especfcos que plantea la edicin del llamado antetexto o dossier gentico. Por ello, se entiende, en defnicin de Jean Bellemin-Nol revisada por Grsillon, el conjunto de documentos escritos borradores, manus- critos de trabajo o cuadernos de bitcora, galeradas, apuntes, etc. que, de forma retrospectiva, se pueden vincular con un determinado proyecto de escritura, haya o no este desembocado en un texto publicado. El volumen se estructura en cuatro partes: Crtica gentica: orgenes, recep- cin y arraigo, De la autografoteca al archivo cultural, Historias de autores y de editores: de la edicin crtica a la edicin gentica, Gentica electrnica y manuscrito, encabezadas por una muy sugerente mquina de trovar del poeta Guillermo Carnero. En Por signos de letrado: imaginario cultural y autoanotacin, Guillermo Car- nero acept, de hecho, recoger el guante que le arrojamos al pedirle que nos abriera su taller de escritura y nos guiara en los sentiers de la cration 4 . A los cuarenta aos de su lanzamiento, pretendamos reconducir as la experiencia de una coleccin francesa, vinculada al nacimiento de la crtica gentica, cuyo objetivo principal fue dar la palabra a los artistas para que ellos se hicieran crticos de su obra, es decir, ofrecieran una refexin metacrtica sobre su arte. Guillermo Carnero cumpli con creces nuestras expectativas salvando la difcultad tarea superfua, la llama l de traducir a otro idioma y lenguaje los de la poesa. Adems de refexionar en voz alta sobre el llamado culturalismo rasgo defnitorio de su generacin, que inten- t superar as, replantendoselo, el intimismo clsico o primario, Carnero fue 3 El primero de ellos (II Congreso internacional de manuscritos literarios) tuvo lugar del 9 al 11 de diciembre de 2009, en San Milln de la Cogolla, bajo la direccin conjunta de Pedro M. Ctedra y Bndicte Vauthier, y se inscribi en el marco de las actividades dirigidas por Pedro M. Ctedra en el seno del Instituto Biblioteca Hispnica. El segundo tuvo lugar el 21 de enero de 2011 en Tours, bajo la direccin de Bndicte Vauthier, y se inscribi en el marco ms amplio del seminario mensual sobre Manuscrits hispaniques xix- xxi que dirige Bndicte Vauthier, junto con Fatiha Idmhand, en el Institut des Textes et Manuscrits Moder- nes, en Pars, desde octubre de 2010 (Programa en lnea: http://manuspanicos.hypotheses.org/). 4 La coleccin fue dirigida por Gatan Picon, de 1969 a 1976, e incluye veintisis volmenes. PRELIMINARES 11 desplegando los temas de la vejez y de la metapoesa, muy presentes en sus ltimos libros. Los ejemplos comentados le permitieron distinguir culturalismo duro, culturalismo de baja intensidad y culturalismo fcticio e insistir en el hecho de que en la prehistoria psquica de los poemas fundados en la experiencia cultural, los referentes culturales estn presentes desde el primer momento, y son el ndulo alrededor del cual cristalizan las intuiciones an no escritas. Que el lector medio sea capaz o no de descifrarlas es un reto del que es consciente el poeta y podrn ver cmo lo pretende afrontar. La primera parte se abre con La critique gntique: origines et perspectives, artculo de Almuth Grsillon, la ms cercana discpula, junto con Jean-Louis Le- brave, del fundador del ITEM. El ttulo remite, antes que al de nuestra primera parte, al eplogo que el maestro Louis Hay redact para acompaar la publicacin de unos pioneros Essais de critique gntique (1979). De hecho, este volumen exhiba por primera vez en el espacio pblico el sintagma crtica gentica que fguraba en su portada. Los treinta aos que nos separan de este libro han sido jalonados de trabajos y publicaciones varias, de coloquios, e incluso de algunas polmicas o batallas, siendo la ltima la que divide hoy a los crticos y editores respecto del lugar que est llamado a ocupar la informtica en la creacin artstica y edicin de manuscritos 5 . La crtica gentica, explica Grsillon, naci de una conjuncin estelar particular: se fragu en los aos sesenta y setenta en Francia, en el mbito de las letras modernas, entindase, la literatura francesa contempornea, que desconoca la tradicin flolgica, lo que no era el caso de su fundador y de sus discpulos, alemanes y germanistas formados en flologa alemana. Estos jvenes lingistas se apropiaron de algunos principios epistemolgicos del estructuralismo y de su me- todologa, as como de unas contadas herramientas flolgicas. La nocin funda- cional de estructura dio paso a la no menos cannica de proceso, la de escrito a la de escritura y el Texto producto acabado fue reemplazado por un dinmico antetexto. De la lingstica estructural tomaron en prstamo la nocin de sustitucin, que fue adaptada con vistas a poder reformular las cuatro operaciones bsicas supresin, aadido, reemplazo, desplazamiento. Las leyes de fliacin del stemma fueron reem- plazadas por el intento de reconstruccin cronolgica de las etapas de la creacin a partir de las marcas grfcas, relegando a la flologa a un papel subalterno, medio y no fn en s mismo. Si la crtica gentica ha ido creciendo para abrirse a nuevas disciplinas: teatro, msica, cine, ciencias humanas, etc., revelando al tiempo su vo- cacin plurisemitica e interdisciplinar, en ningn momento reneg de su vocacin inicial: adentrarse en los misterios de la creacin a partir de las huellas escritas que permiten ensanchar el espacio bidimensional de la pgina al tiempo de la escritura. Falta por ver y ser el objeto de la cuarta seccin si las mutaciones tecnolgicas que presenciamos y que afectan de forma crucial al soporte privilegiado de la crtica 5 Vase Pierre-Marc de Biasi, Pour une gntique gnralise: lapproche des processus lge num- rique, Genesis, 30, Thorie: tat des lieux, 2010, pgs. 163-175, as como las respuestas de Louis Hay y Jean- Louis Lebrave: Lettres Pierre-Marc de Biasi: Louis Hay, Une gntique sans rivages? y Jean-Louis Lebrave, Lordinateur, Olympe de lcriture, Genesis, 31, Composer, 2011, pgs. 151-159. 12 BNDICTE VAUTHIER gentica el manuscrito en el sentido de escrito a mano, de puo y letra de un autor, o sea, autgrafo anuncian la desaparicin de la ciencia ms joven del texto. En Los estudios de crtica gentica en el campo de la literatura hispanoame- ricana, lida Lois vuelve sobre los orgenes y los motivos de la migracin de la crtica gentica a Hispanoamrica y, ms an, se interroga sobre las caractersticas especfcas de esa implantacin en suelo americano, en particular en Brasil y en Ar- gentina, teln de fondo, esta, de su contribucin. Lois empieza recordando que la crtica gentica francesa, cuyo objeto es el manuscrito de trabajo artefacto nuevo en la tecnologa de la escritura, se inscribe en la encrucijada de tres factores cau- sales: evolucin tecnolgica, compilacin de grandes colecciones de manuscritos modernos y desarrollo de la ciencia lingstica y de la crtica literaria. Ahora bien, estos tres elementos no se dieron ni se dan en Amrica latina en los mismos trmi- nos que en Europa, lo que, junto con la tensin dialctica que suele existir entre cultura genuina e infuencia fornea, puede explicar la fsonoma particular de la crtica gentica que se desarrolla ah. Si Lois recuerda con razn el papel inicial de Ana Mara Barrenechea, discpula de Amado Alonso y estudiosa de Cortzar, en la difusin del enfoque gentico de los manuscritos, no cabe duda de que el verdadero arraigo y xito de la gentica de los manuscritos en Amrica latina corri parejas con el lanzamiento de la coleccin Archivos, que se insert en el marco del programa internacional de Salvaguarda de la memoria escrita latinoamericana del siglo xx. Pionero en el mbito editorial, este proyecto reuni en Pars, en 1984, no solo a entidades polticas (sin cuyo respaldo econmico el proyecto no hubiera sido facti- ble), sino tambin a fllogos y crticos de la Romania (Francia, Espaa, Italia) con un verdadero afn constructivo. Fruto del seminario Metodologa y prctica de la edicin crtica de textos modernos es el volumen Littrature latino-amricaine et des Carabes du XX e sicle, cuyo subttulo, Thorie et pratique de ldition critique, deja bien claro el predominio de un enfoque crtico antes que gentico del canon latinoame- ricano. La gentica ocupa un lugar importante, es verdad, pero auxiliar y no deja de otearse en las contribuciones recogidas que la batalla con la flologa stricto sensu, fuertemente arraigada en Italia y en Espaa, no haca ms que empezar. Despus de pasar revista a los casi sesenta volmenes que se publicaron desde la fundacin de Archivos, lida Lois se detiene en el problema tcnico con el que se enfrentan quienes desean hacer legibles entindase publicables no solo textos, sino tambin voluminosos y heterogneos antetextos. Cuestin de ndole editorial, por as decirlo, lo que no fue ni es prioridad entre los geneticistas franceses. Ese problema y las soluciones virtuales o numricas que se le estn aportando son objeto de los apuntes de Fernando Colla, responsable editorial de Archivos y codirector del complementa- rio Archivos Virtuales. La segunda cuestin, no menos palpitante, que aborda Lois remite a los lmites de carcter social o psicolgico que se habra impuesto la escuela francesa a la hora de analizar el antetexto. Volviendo a su idea inicial de un movimiento dialctico entre teoras genuinas y forneas, Lois habla de la actual preocupacin en Latinoamrica por establecer la especifcidad del pensamiento so- bre su literatura, entre otras cosas, mediante la seleccin de categoras y modelos tericos ms apropiados. Por lo que a la gnesis de Don Segundo Sombra se refere, PRELIMINARES 13 Lois muestra cmo la oralidad y la modulacin de la clave lingstica se inscriben en la gnesis de una tradicin escrita y destaca la importancia de futuros estudios genticos atentos a estas dimensiones. Formado en flologa de autor italiana, el hispanista Paolo Tanganelli nos ofrece una muy sugerente y profunda refexin en torno al valor del indito en Los borra- dores unamunianos (algunas instrucciones para su uso). En su contribucin Tanga- nelli va ms all del caso particular del escritor salmantino, al que tan bien conoce, y lo convierte en pretexto para ensayar una refexin acerca de las tipologas de autgrafos y de su utilidad flolgica. De acuerdo con Lois, y distancindose algo de la gentica francesa, cuya condena de un posible telos flolgico, por un lado, cuyo predominio de la reconstruccin del proceso creativo sobre la interpretacin del texto, por otro, no comparte, Tanganelli se interroga sobre los motivos (Por qu no se han publicado?) y la fnalidad (Para qu sirven?) de los inditos. Dejando de lado los casos de censura, autocensura e inacabados por la muerte del autor, Tanga- nelli distingue, primero, dos categoras de inditos: la una, muy amplia, abarcara tanto el pretexto italiano stricto sensu como el avant-texte francs, lo que, en algunos casos, hipoteca la pertinencia del aparato crtico tradicional; la segunda incluira los proyectos abortados. Entre ellos habra que distinguir dos tipos de descartes: los proyectos refundidos en obras publicadas por el autor y los proyectos abandona- dos del todo. El complejo antetexto de Del sentimiento trgico de la vida y la extraa historia editorial de la pieza La esfnge sirven a Tanganelli para ilustrar su refexin terica, que, es de esperar, har mella entre quienes se apresuran a veces en publi- car a ciegas cualquier indito cuyo nico inters es el de serlo. Para Tanganelli, la crtica de los scartafacci o fenomenologa del original tiene solo una funcin: abrir nuevas perspectivas exegticas (incluyendo la cuestin crucial de una mejor fjacin textual) y se entiende as su distancia crtica respecto de los geneticistas que se- paran edicin crtica y crtica literaria (vanse infra Hay y Fenoglio). De la misma forma, considera que el rescate del material preparatorio ha de servir ante todo a una mejor interpretacin de la obra a nivel granular, por ejemplo, en la medida en que los autgrafos permiten acercarse al usus scribendi de un autor, cuyas variantes grfcas y fonomorfolgicas suelen suprimir los editores en nombre de normas aca- dmicas (le bon usage); en el plano de la intentio, por otro, ya que un pormenorizado estudio de los borradores de un autor tambin permite captar cmo ha mudado y se ha ido afnando [su] intencin y, por ende, vislumbrar lo que la edicin acaba sepultando. En El obrador del escritor y la edicin flolgica del texto literario contempor- neo, Javier Lluch sigue abogando por un necesario acercamiento de la flologa his- pnica a la crtica gentica, de la que suele hablar a travs de su hermana o variante hispanoamericana. Para Lluch, el obrador del escritor sinnimo del usual taller o laboratorio representa el espacio fsico de creacin del autor al que el fllogo ha de acercarse como restaurador de las obras all creadas o como arquelogo que investiga el pasado de universos literarios. Si Lluch parte de la defnicin moderna del manuscrito, es decir, del antetexto francs, considerndolo como metfora de la creacin, no deja nunca de considerar que su recuperacin, y ms an su edicin, 14 BNDICTE VAUTHIER son tareas flolgicas en el sentido tradicional de la palabra. Y de hecho, el hilo rojo de su contribucin es la edicin flolgica de textos contemporneos, que declina en varias modalidades: edicin crtica, edicin digital, edicin crtico-gentica. Segn Lluch, esta ltima plasmara marcadamente el proceso gentico y editorial de una obra y sera, por lo tanto, la que mejor permite al fllogo enfrentarse a los dos in- terrogantes: qu texto editar?, y cmo editarlo?, que han de guiarle. En la edicin crtico-gentica, se conjugaran antetexto, texto y proceso editorial, ofrecindose al lector una edicin que expone el fuir de la escritura al tiempo que el trabajo del escritor en su conjunto, siendo un modelo para Lluch la coleccin Archivos. De la autografoteca al archivo cultural, segunda parte del volumen, consta de dos aportaciones sobre los archivos literarios; en Italia, en el caso de Renzo Cre- mante, quien habla de los Archivi letterari italiani del Novecento esbozando el historial del Fondo Manoscritti dellUniversit di Pavia; en Espaa, en el caso de Francisco J. Dez de Revenga, gestor del legado de Carmen Conde e investigador del mismo. En ambos casos, los crticos ponen nfasis en el papel que estos lugares desempean hoy en la custodia, archivo, conservacin y difusin de los manuscritos modernos. Subrayan tambin que la gestin de estas instituciones pblicas o pri- vadas no solo requiere una intensa colaboracin entre universitarios, archivistas, bibliotecarios, derechohabientes, etc., sino que estas son, al igual que el manuscrito moderno, piezas tan esenciales como imprescindibles para el trabajo de los crticos y editores. Como he adelantado, Cremante parte del Fondo Manoscritti di autori moderni e contemporanei, fundado por Maria Corti en 1968, y refexiona sobre la evolucin del concepto de archivo. Archivo literario en el sentido lato de la palabra, archivo cultural, o archivo de lo nuevo, irreductible, hoy en da, a una posible y mal entendida autografoteca o coleccin de autgrafos, ya que, segn observ Crocetti al que cita Cremante, en los archivos se buscan todas las teselas que sirven para reconstruir un mosaico y ninguna de ellas tiene pues menos valor que la otra. Y es precisamente esa concepcin del archivo como mosaico, como sistema interde- pendiente, lo que hace difcil la constitucin de centros sin centros en los que se conserva un material heterogneo (que incluye texto y antetexto, biblioteca y objetos personales del autor, cartas, etc.) y orgnico que revela las complejas rela- ciones que la escritura mantiene con la produccin y la circulacin editorial, con la prensa, los premios y las instituciones literarias, etc. Un ejemplo emblemtico de esta encrucijada literaria lo ofrecen, qu duda cabe de ello, los epistolarios, que ocupan a veces la parte del len de los archivos. Gestor e investigador del legado de Carmen Conde, Francisco J. Dez de Re- venga se centra aqu de forma prioritaria en una serie de documentos personales: diarios, cartas, dedicatorias, interesantes para reconstruir no solo la vida de unos autores en nuestro caso, del matrimonio Antonio Oliver Belms-Carmen Conde Abelln, sino tambin para hacer comprensible la historia social, cultural y pol- tica de un periodo. Despus de presentar de forma pormenorizada el legado, que contiene desde los primeros bocetos o manuscritos (en el archivo) hasta las dife- rentes ediciones de una obra (en la biblioteca), lo que permite recrear la trayectoria PRELIMINARES 15 de varias obras, Dez de Revenga se detiene en el examen de las agendas de Carmen Conde, uno de los medios de informacin ms iluminadores del legado, junto con el epistolario integrado por unas treinta mil cartas y las dedicatorias, verdadero puente, de carcter autobiogrfco, entre el libro dedicado y el momento vital en que esa obra se obsequia y se frma. Buena ilustracin de ello son las dedicatorias de la autora a su amiga de toda la vida, Amanda Junquera. En la tercera parte de este libro se renen, adems de unas observaciones de Louis Hay sobre ediciones de la Edad Media al da de hoy, unos seis estudios sobre los archivos y manuscritos de autores contemporneos: del gallego Ramn del Valle-Incln a los franceses Pascal Quignard y mile Benveniste, pasando por Federico Garca Lorca, Pedro Salinas, Miguel Hernndez y Juan Goytisolo. En dition critique et gntique: du Moyen ge nos jours. Quelques re- marques, Louis Hay recorri la historia de las ediciones, crticas, primero, gen- ticas, luego, inscribindolas en la longue dure, perspectiva histrica indispensable para captar las continuidades y las rupturas. Al escribir esta historia, se esboza tambin la relacin entre flologa, en particular medieval, y crtica, entre otros, gentica, as como la historia del manuscrito. Vemos as cmo de la copia de un escribano se pas al libro impreso y fnalmente al manuscrito autgrafo del autor sin que los mtodos editoriales apenas evolucionasen en un primer momento. Sin embargo, est claro que se estaba operando un divorcio entre dos actores: el editor, por un lado, el autor, por otro. Mientras que las intervenciones del primero per- mitan trazar una historia del libro, las del segundo confguraban la del texto. A cien aos de intervalo, dos medievalistas alemanes Lachmann, primero, Beissner, despus se dieron cuenta de la importancia de este cambio y buscaron, por ende, mtodos de edicin ms acordes con la naturaleza del objeto. Mientras Lachmann consultaba los manuscritos autgrafos de autor hroe de este relato, dice Louis Hay, Beissner trataba de encontrar una frmula capaz de refejar la evolucin temporal entindase, la gnesis a partir de la disposicin espacial de las huellas escritas. A estas iniciativas revolucionarias, que cuajaron en ediciones crticas en papel, se aadieron las refexiones de los medievalistas italianos: Contini y Segre, quienes, en contra de Croce, reivindicaron la critica del scartafaci. En los aos 1970, los franceses, lejos de seguir a quienes, a primera vista, podran parecer precursores, volvieron a descubrir los manuscritos de autor gracias al casual legado de los papeles de Heinrich Heine a la Bibliothque Nationale de France. Poco o nada interesados por la edicin crtica, estos germanistas de formacin sentaron las bases de lo que hoy se conoce como crtica gentica o gentica de los manuscritos. Como se ve, edicin y gentica no siempre corrieron de la mano y si el suizo Hans Zeller y el tipgrafo alemn Dietrich Sattler conjugaron felizmente los dos enfoques (al cabo de tres o cuatro dcadas de trabajos con la publicacin de obras completas de entre quince y veinticincos volmenes) solo el futuro nos dir si la digitalizacin y la edi- cin en lnea pueden ser una solucin al pecado original de la edicin gentica: haber desviado la impresin de su razn de ser, es decir, una fjacin estable del texto, esperando de ella en su lugar una representacin de las transformaciones del tiempo de la escritura. 16 BNDICTE VAUTHIER Los manuscritos de la obra de Valle-Incln, sobre los que tantas veces se ha especulado, existen. He aqu la buena nueva con la que Margarita Santos Zas, directora de la Ctedra Valle-Incln y responsable de la catalogacin, digitalizacin y edicin del legado del autor gallego, abre su contribucin Los manuscritos de Valle-Incln: el taller del escritor. En esta, despus de volver sobre el origen de este inesperado legado que contiene ms de 5000 pginas de puo y letra del autor, adems de copias o traslados para la imprenta de su esposa, Santos Zas presenta una tentativa de clasifcacin del material (borradores incompletos o ensayos redac- cionales, borradores en fase redaccional acabada, galeradas y ediciones con anota- ciones manuscritas). Pero, como resalta oportunamente en la conclusin, ms all del hallazgo, corroboracin o rectifcacin de teoras crticas, lo que los emborro- nados manuscritos del autor llenos de tachaduras, sobrescritos, notas marginales, etc. revelan ante todo es la febre del estilo del autor! El complejo caso editorial de algunos textos de Federico Garca Lorca (El pblico, La casa de Bernarda Alba) es el hilo rojo del que tira Francisca Vilches de Frutos en Los textos y sus representaciones: manuscritos y prctica escnica en el teatro espaol del siglo xxi. Despus de recordar los problemas que plantea la edicin de textos que aparecen despus de dcadas, adems de competir en el caso lorquiano con apgrafos que han constituido las fuentes ms empleadas, Vilches de Frutos se centra en una faceta de la edicin de los textos dramticos que solo recientemente ha llamado la atencin de los geneticistas: su condicionamiento por la prctica escnica, es decir, por las aportaciones de los directores de escena o su adaptacin a las representaciones, condicionadas a su vez por el mercado editorial, que puede dictaminar hasta el formato de los textos. El caso de Federico Garca Lorca revela ser buen ejemplo del perpetuum mobile de lo que implica la gnesis de una pieza, tal y como han mostrado recientemente Grsillon, Mervant-Roux y Budor en Genses thtrales. Un archivo disperso: los papeles de Pedro Salinas es el ttulo de la contribu- cin de Montserrat Escartn, que tanto sabe de la obra saliniana. Despus de recor- dar algunas difcultades a las que ha de enfrentarse quien se adentre en un archivo disperso, saqueado e incompleto, Escartn parte de los papeles de Salinas para tratar una serie de cuestiones frecuentes, entre las que destaco, por abordarse por primera vez en este volumen, la catalogacin de los documentos, la intervencin intro- misin? de la familia y derechohabientes en la gestin de un legado, la recreacin de un poema a lo largo del tiempo. De estos tres problemas son buen ejemplo la triloga amorosa y su paratexto. As, el epistolario del poeta a Katherine Whitmore fue desmembrado al separarse, por ejemplo, las cartas de los poemas que venan a completarlas. Las ediciones varias en manos de la familia del autor de Largo lamento como poemario de conjunto y de algunas composiciones suyas ofrecen un material inigualable para refexionar sobre la obra potica moderna concebida cual organismo que crece y se modifca a lo largo de los aos. En De nuevo sobre el archivo de Miguel Hernndez, Jos Carlos Rovira Soler no solo regresa a los archivos del poeta de Orihuela despus de 18 aos de silencio, sino que lo hace para contar algo nuevo y aportar nuevos papeles. Antes de desve- PRELIMINARES 17 lar un material indito an en 2009 (dos cuentos ilustrados escritos para su hijo), y publicado en 2010 con motivo de las conmemoraciones hernandinas de las que fue comisario, Rovira vuelve sobre un interrogante que no detuvo la atencin de la crtica pese al llamamiento que l junto con Snchez Vidal y Carmen Alemany haba lanzado aos antes. Se trata del valor hermenutico de los materiales de escritura que van de 1925 a 1936 y del antetexto que constituye el Cancionero y romancero de ausencias, publicados en el apndice de las Obras completas. Esta docu- mentacin, recuerda y pasa a ilustrar Rovira, contiene numerosas hojas que infor- man sobre el taller literario global del joven poeta o, por decirlo de otra forma, gnesis del mundo cultural y potico de Hernndez. Ah se ve cmo el poeta va haciendo pinitos y busca su propia voz potica listando palabras, copiando a Rubn Daro, imitando a Jorge Guilln o traduciendo a Valry, Mallarm, Apollinaire, etc. Los cuentos escritos para su hijo, supuestas traducciones del ingls, hacen eco de lo que en otra clave estaba escribiendo para un libro que deba llamarse Cancionero y romancero de ausencia y pueden, por tanto, verse y leerse como metfora infantil de un afn de libertad que trataba de eludir la censura. En Gentica de los manuscritos y gentica textual: el caso de Paisajes despus de la batalla de Juan Goytisolo, Bndicte Vauthier presenta los primeros frutos de su investigacin sobre el voluminoso antetexto de Paisajes despus de la batalla, novela de la que est ultimando una edicin crtica con apndices genticos. Consciente de la difcil complementariedad entre escuela gentica francesa y crtica textual hisp- nica, inscribe su investigacin en la estela de la primera, mas no desea romper con la segunda, mantillo de la tradicin hispnica, lo que la lleva a abogar por una bien entendida potica de transicin entre estados con vistas a reconciliar flologa y gentica y unifcar el panorama de la variacin textual expresin y objetivo que toma en prstamo de Jean-Louis Lebrave. El dossier gentico de la novela de Juan Goytisolo, primer autor vivo tratado aqu, le permite ilustrar las ventajas de un enfoque atento al proceso in feri. En la primera parte de su trabajo, Vauthier explica el protocolo de constitucin de un dossier gentico, presenta la situacin de Paisajes despus de la batalla y muestra por qu y cmo dossier y obra se burlan de las fronteras entre antetexto y texto, indito y editado, ajeno y propio y exhiben su carcter siempre movedizo. Luego se detiene en las enseanzas propias de un estudio gentico que hace aforar no tanto, ni tan solo, cmo el autor escribe, sino tambin cmo lee y se lee. Y concluye volviendo sobre la necesaria complementa- riedad de las metodologas, que pueden enriquecerse mutuamente, en particular cuando la primera abre nuevas perspectivas exegticas de la obra publicada, expreso deseo de Tanganelli. La tercera parte se cierra sobre la contribucin de Irne Fenoglio Cration scripturale, gense, dition. Manuscrits littraires (Pascal Quignard) et manuscrits scientifques (mile Benveniste). La estudiosa y lingista del ITEM refexiona sobre los rasgos de la creacin textual a partir de un doble corpus, cientfco y nar- rativo, siendo ambos creaciones discursivas. De acuerdo con los postulados de la gentica, Fenoglio se centra en los objetivos de la gentica: leer los borradores y ob- servar las huellas del proceso de escritura para tratar de comprender el objeto fnal, 18 BNDICTE VAUTHIER dejando para un segundo momento la fase propiamente hermenutica o crtica. Al acercar dos tipos de escritura, Fenoglio pretende ver si existen procesos o etapas de escritura comunes a los dos y, por tanto, parangonables. Si el antetexto de Bouts de Pascal Quignard, segundo autor vivo aqu tratado, le permite refexionar sobre las implicaciones de las nuevas tecnologas en el proceso de escritura (Quignard escribe en el ordenador, pero se lee y se corrige en versiones papel, producindose una ver- dadera infacin de versiones enmendadas: hasta treinta y tres en nuestro caso!), los archivos de mile Benveniste son motivo para comprender cmo se fraguan concep- tos cientfcos, dejando huellas, como deca Machado, del rumio de su andar. Gentica electrnica, manuscrito electrnico, cuarta y ltima parte del volu- men, est dedicada al porvenir de la gentica creativa, por un lado, y a la edicin, por otro. El caso de Quignard muestra ya que la irrupcin de las nuevas tecnologas no ha acabado an con las huellas escritas de la creacin, materia prima indispensa- ble para un estudio gentico, mientras que se suelen presentar las nuevas tecnolo- gas como va de salvacin para la edicin de voluminosos, a veces farragosos, dossiers genticos, cuya riqueza no se puede rebajar a un aparato crtico, sea cual sea su dis- posicin, y cuyo dinamismo difculta sobremanera una transcripcin diplomtica. Ahora bien, si todos creen que la digitalizacin permitira salvar el obstculo del impreso (el pecado original, segn Louis Hay), Jean-Louis Lebrave y Jess Ro- drguez-Velasco nos invitan a refexionar sobre otros obstculos que se habrn de superar antes de que podamos presumir de un verdadero avance editorial. Volviendo la vista sobre su itinerario, que corre paralelo con el nacimiento y el desarrollo de la crtica gentica, Lebrave distingue dos acepciones de una Gn- tique lectronique. La primera remite a la irrupcin del ordenador como herra- mienta de ayuda a la investigacin, una irrupcin que fue casi coetnea al despertar de la crtica gentica. La segunda tiene que ver con la utilizacin de las nuevas tecnologas con vistas editoriales. Ms all de la ancdota histrica, la alianza he- rramienta electrnica y edicin est en el origen del intento de formalizacin de la crtica gentica y de una de sus nociones clave: la substitucin, elemento bsico de la cultura lingstica. La substitucin o conmutacin es un trmino que subsume las dems operaciones de escritura como el aadido o la supresin; que implica la existencia de un contexto englobante y, fnalmente, que descansa en la posibilidad de una formalizacin entre parntesis o balizas, objetivo que se halla tambin en los orgenes de la Text Encoding Initiative (TEI). Ahora bien, si la substitucin es uno de los conceptos ms fructferos de la gentica textual primera, si la herramienta informtica obliga a precisar las hiptesis de lectura para proceder a su transcrip- cin o codifcacin, la riqueza plurisemitica del manuscrito moderno tambin las desborda e incluso las pone en jaque. Buen ejemplo de ello es el manuscrito fau- bertiano que ha necesitado el paso a un acercamiento de ndole hipertextual que remite a la segunda acepcin de la gentica electrnica como herramienta editorial. La digitalizacin y los avances tecnolgicos parecen abrir puertas al dinamismo de la escritura y a las relaciones entre legible y visible para superar escollos de la edi- cin en papel, incapaz, a veces, de refejar toda la riqueza del manuscrito de trabajo que no se reduce a la linealidad de la pgina impresa. Lebrave concluye su contri- PRELIMINARES 19 bucin al contemplar una posible tercera acepcin de la gentica electrnica: la del tratamiento de texto como herramienta creativa que vendra a tomar el relevo de la pluma y los cambios epistemolgicos y cognitivos que conlleva la expansin de la digitalizacin a un nmero creciente de medios comunicativos e informativos. En Manuscrito electrnico, alfabetizacin electrnica, Jess Rodrguez-Ve- lasco retoma, en alguna medida, la refexin sobre la era digital ah donde la deja Lebrave al tiempo que la desplaza hacia el terreno de la escritura y la lectura (alfa- betizacin) y de la creacin cientfca (co-laboratorio). Despus de hacer balance de la an escasa, a veces laberntica y fragmentaria, bibliografa sobre la cultura letrada electrnica, Rodrguez-Velasco centra su ensayo sobre dos de las conse- cuencias de la textualizacin del universo llevada a cabo por Internet. Muestra, pri- mero, por qu la alfabetizacin electrnica no es un proceso de sustitucin de los movimientos existentes de alfabetizacin y, en segundo lugar, explica por qu la alfabetizacin electrnica ha de examinarse como un problema cognitivo y episte- molgico autnomo y no en una relacin historicista con las culturas escritas ma- nuscrita e impresa. En la primera parte de su ensayo zorro, Rodrguez-Velasco revisa as la tesis seductora al tiempo que alarmista entre los humanistas segn la cual la cultura electrnica sera una cultura fragmentaria, una cultura concebida como base de datos textual. Para Rodrguez-Velasco, esta idea ha de ponerse en tela de juicio porque la alfabetizacin electrnica ha transformado la cognicin y las condiciones epistemolgicas, mediante la incorporacin de un universo modular y en gran medida personalizado o personalizable. Adems, obliga a inventar nuevas relaciones de afecto entre los usuarios y el universo electrnico, lo que viene a com- pletar, sin sustituirla, la necesaria relacin afectiva y corporal con el objeto libro. En segundo lugar, Rodrguez-Velasco examina las implicaciones del manuscrito elec- trnico entendido como co-laboratorio, como espacio de lecto-escritura. Muestra de modo convincente por qu el manuscrito electrnico, al discurrir por la arista de lo pblico, de la colaboracin, de la interaccin, plantea problemas sociopol- ticos y morales, ajenos a otros manuscritos autgrafo o impreso con los que s le une problemas de carcter ecdtico o editorial. De las refexiones poticas de Guillermo Carnero sobre la creacin in feri a la gentica electrnica; del manuscrito medieval al manuscrito electrnico pasando por el manuscrito de trabajo; de la edicin crtica a la crtica gentica; de Francia e Italia a Hispanoamrica, detenindose en Espaa y en algunos de sus creadores: dramaturgos, poetas, novelistas, he aqu algunas de las pistas abiertas que podr recorrer aqu el lector con la esperanza de que estas refexiones contribuyan a una mejor comprensin de lo que implica una gentica del manuscrito entendida como potica de transiciones entre estados. Ante todo, en una perspectiva editorial ms respe- tuosa de la genuina naturaleza del manuscrito contemporneo. PRELIMINARES Bndicte Vauthier LA MQUINA DE TROVAR DEL POETA Guillermo Carnero, Por signos de letrado: imaginario cultural y autoanotacin CRTICA GENTICA: ORGENES, RECEPCIONES Y ARRAIGO Almuth Grsillon, La critique gntique: origines et perspectives lida Lois, Los estudios de crtica gentica en el campo de la literatura hispanoamericana Fernando Colla, La coleccin Archivos y los Archivos Virtuales Latinoamericanos: dos experiencias en el campo de las ediciones electrnicas Paolo Tanganelli, Los borradores unamunianos (algunas instrucciones para el uso) Javier Lluch-Prats, El obrador del escritor y la edicin filolgica del texto literario contemporneo DE LA AUTOGRAFOTECAAL ARCHIVO CULTURAL Renzo Cremante, Archivi letterari italiani del Novecento: filologia e critica Francisco Javier Dez de Revenga, Gestin de un patrimonio literario: manuscritos, epistolario, docu- mentos personales, ediciones (El legado de Carmen Conde) HISTORIAS DE AUTORES Y EDITORES: DE LA EDICIN CRTICA A LA EDICIN GENTICA Louis Hay, dition critique et gntique: du Moyen ge nos jours Margarita Santos Zas, Los manuscritos de Valle-Incln: el taller del escritor M. Francisca Vilches de Frutos, Los textos y sus representaciones: manuscritos, prctica escnica y censura en el teatro espaol del siglo XXI Montserrat Escartn Gual, Un archivo disperso: los papeles de Pedro Salinas Jos Carlos Rovira Soler, De nuevo sobre el archivo de Miguel Hernndez Bndicte Vauthier, Gentica de los manuscritos y gentica textual: el caso de Paisajes despus de la batalla de Juan Goytisolo Irne Fenoglio, Cration scripturale, gense, dition. Manuscrits littraires (Pascal Quignard) et ma- nuscrits scientifiques (mile Benveniste) GENTICA ELECTRNICA Y MANUSCRITO ELECTRNICO Jean-Louis Lebrave, Gntique lectronique Jess Rodrguez-Velasco, Manuscrito electrnico, alfabetizacin electrnica Schweizerische Akademie der Geistes- und Sozialwissenschaften Acadmie suisse des sciences humaines et sociales Accademia svizzera di scienze umane e sociali Academia svizra da scienzas moralas e socialas Swiss Academy of Humanities and Social Sciences