Ley Penal Uruguaya
Ley Penal Uruguaya
Ley Penal Uruguaya
Germn Aller 2
Sumario
1. Postrimeras legales del tiempo de la Colonia. 2. La
anhelada codificacin penal y procesal penal. 3. La ley penal
uruguaya. 4. Falta de definicin en materia de Poltica
criminal. 5. Excursus.
Extrado de Dogmtica de la accin y praxis penal, Montevideo, BdeF, 2008, pp. 7-22.
Doctor en Derecho y Ciencias Sociales por la Universidad de la Repblica, Montevideo. Doctor en
Derecho por la UNED, Madrid. Profesor Adjunto de Derecho Penal y Criminologa de la
Universidad de la Repblica.
3
Carlos Ferrs, poca Colonial. La Administracin de Justicia en Montevideo, Montevideo, Barreiro y
Ramos, 1944, pp. 1-10. Al respecto, Juan B. Carballa, Prlogo, en Cdigo Penal de la Repblica
Oriental del Uruguay, Montevideo, Centro de Estudiantes de Derecho, 1955, p. 5. Tambin, Miguel
Langon Cuarro, Manual de Derecho penal uruguayo, Montevideo, Del Foro, 2006, p. 139. Asimismo,
Milton Cairoli Martnez, El Derecho penal uruguayo y las nuevas tendencias dogmtico penales, t. I,
Montevideo, Fundacin de Cultura Universitaria, 2000, pp. 63-64.
1
2
e integrada por Ildefonso GARCA LAGOS, Lindoro FORTEZA, Alfredo VSQUEZ ACEVEDO
y Nicols DE SAN MARTN 10. La Comisin trabaj durante ocho aos, sucedindose
otros integrantes, como Manuel HERRERA Y OBES (su primer presidente), Laudelino
VZQUEZ, Romn GARCA, Gonzalo RAMREZ, Carlos DE CASTRO y Duvimioso TERRA 11.
Se sigui en definitiva el modelo italiano de ZANARDELLI y SAVELLI el cual tambin
fue aprobado en ese pas en el mismo ao que en Uruguay (1889) adems del
anterior proyecto italiano de Pascual Stanislao MANCINI y los cdigos penales
espaol y chileno 12. El objeto de este cuerpo legal fue, al decir de sus autores en el
Informe del 1 de junio de 1888, que se liberase a la Repblica del caos de la legislacin
vigente, o ms bien dicho, de la arbitrariedad dominante en materia criminal 13. Tal
propsito se consigui con creces mediante una legislacin de cuo liberal para su
poca, a pesar de mantener la pena de muerte, que fue luego abolida su aplicacin
por el presidente WILLIMAN mediante ley n. 3.228 del 23 de setiembre de 1907, no
sin librar un candente debate protagonizado por IRURETA GOYENA 14, SALGADO 15 y
FIGARI 16, siendo los dos primeros partidarios de mantenerla al menos por un
tiempo y el ltimo proclive a su abolicin. El proyecto del Cdigo Penal italiano de
ZANARDELLI y SAVELLI era de orientacin clsica, aunque con algunos aspectos de la
entonces pujante Scuola positiva italiana. En sntesis, dicho modelo se inspir en las
ideas de los clsicos, pero result al fin eclctico 17, y esto disgust a LOMBROSO, lder
fundamental de dicha Scuola italiana, que en contrapartida public rpidamente un
breve libro cuestionando la celeridad y el contenido del trabajo de los mencionados
redactores por no haber recogido en l los postulados positivistas 18.
Durante la dictadura de Gabriel TERRA, el entonces Ministro de Instruccin
Pblica, Alberto DEMICHELI, el 5 de junio de 1930 encomend al Colegio de
Abogados del Uruguay presidido por Jos IRURETA GOYENA la designacin de
especialistas en diversas reas para las reformas de los Cdigos existentes, dentro
de los cuales estaba el Penal. En el propio IRURETA GOYENA recay la tarea de presidir
la Comisin para la elaboracin del nuevo Cdigo Penal (y en definitiva
Alfredo Vsquez Acevedo, Concordancias y anotaciones del Cdigo Penal de la Repblica Oriental del
Uruguay, Montevideo, Sierra y Antua, 1893, pp. IX-XVII. Tambin, Miguel Langon Cuarro,
Cdigo Penal y Leyes Penales Complementarias de la Repblica Oriental del Uruguay, t. I, 2. ed.,
Montevideo, Del Foro, 2006, pp. 15 y 35-38.
11
Juan B. Carballa, Prlogo, en Cdigo Penal de la Repblica Oriental del Uruguay, p. 8.
12
dem, pp. 8-9.
13
Cdigo Penal de la Repblica Oriental del Uruguay, Montevideo, El Siglo Ilustrado, 1889, p. V.
14
Jos Irureta Goyena, La pena de muerte, Montevideo, El Siglo Ilustrado, 1903.
15
Jos Salgado, La pena de muerte, Montevideo, El Siglo Ilustrado, 1905.
16
Pedro Figari, La pena de muerte, Montevideo, El Siglo Ilustrado, 1903. Es el texto de su conferencia
dictada en el Ateneo de Montevideo el 4 de diciembre de 1903. Del mismo autor, La pena de muerte,
Montevideo, El Siglo Ilustrado, 1905. Esta publicacin recoge veintids artculos de prensa
publicados por Figari en El Sigloentre el 9 de mayo y el 21 de junio de 1905.
17
Miguel Langon Cuarro, Manual de Derecho penal uruguayo, pp. 140-141. Tambin, Milton Cairoli
Martnez, El Derecho penal uruguayo y las nuevas tendencias dogmtico penales, t. I, p. 65.
18
Cesare Lombroso, Troppo presto. Appunti al nuovo Progetti de Codice Penale, Roma, Fratelli Bocca,
1888, pssim.
10
redactarlo) 19. Esta Comisin se integr con IRURETA GOYENA como miembro
proyectante y, adems, Tefilo D. PIEYRO, Alfredo FURRIOL, Melitn ROMERO, Ernesto
LLOVET, Horacio ABADIE SANTOS, Alfredo GIRIBALDI ODDO, Mario Esteban CRESPI y
Ruben C. TRELLES 20. El ilustre maestro uruguayo a la sazn era el titular de la
ctedra de Derecho penal en la Universidad de la Repblica que ocup
brillantemente entre 1903 y 1931, adems de ser un aventajado integrante de la
amplia comunidad intelectual y social del pas 21. El 2 de enero de 1935 se design a
IRURETA GOYENA como presidente de la Comisin encargada de redactar el Cdigo
Penal Militar durante la presidencia de Alfredo BALDOMIR, el que fue aprobado el 28
de enero de 1943 y entr en vigencia tres meses despus de promulgado 22.
3. LA LEY PENAL URUGUAYA
IRURETA GOYENA se identificaba con la vertiente sociolgico-jurdica de la
Escuela positiva y, dentro de ella, concretamente con la preconizada Defensa
social, recibiendo tambin marcada influencia de Filippo GRISPIGNI (lisztiano),
Arturo ROCCO (tecnicista jurdico de orientacin bindingniana) y Max Ernst MAYER
(neokantiano) 23. Por ello, en su Exposicin de Motivos del proyecto de Cdigo, el
redactor hizo expresa mencin a la Defensa social 24. El prominente penalista
compatriota efectu un trabajo de orden eclctico y de Poltica criminal, siguiendo
el proyecto presentado por Alfredo ROCCO en Italia (que databa de 1930 y entr en
vigor en 1931) y cuya elaboracin fue de su hermano Arturo ROCCO 25, el cual era un
prestigioso catedrtico de la Universidad de Siena. En tal sentido, expresaba el
codificador uruguayo: He procurado hacer un Cdigo que consulte, sin rigideces
doctrinarias, las nuevas tendencias del Derecho Criminal. Estrictamente no se ajusta a los
Cdigo Penal. Ley n. 9.155, Montevideo, Ministerio de Instruccin Pblica, 1934, pp. 5-6.
Juan B. Carballa, Prlogo, en Cdigo Penal de la Repblica Oriental del Uruguay, p. 12.
21
El primer titular de la ctedra de Derecho penal en Uruguay fue Gonzalo Ramrez, quien la
asumi en 1871 a pesar de que la misma haba sido creada el 1 de diciembre de 1869. Seguidamente
sera su titular Martn C. Martnez, hasta que en 1903 la alcanz Jos Irureta Goyena, a quien le
habra de suceder Alfredo Giribaldi Oddo en 1931, un dogmtico penal atrado por el tecnicismo
jurdico, que desafortunadamente falleci en forma prematura. De all en ms, seguiran
distinguidos catedrticos: Carlos Salvagno Campos, Juan Carballa, Adela Reta, Orestes Arajo,
Fernando Bayardo, Ofelia Grezzi, Daro Corgatelli, Milton Cairoli, Miguel Langon y Gonzalo
Fernndez.
22
Cdigos: Penal Militar, de Organizacin de los Tribunales Militares y de Procedimiento Penal Militar,
Montevideo, Imprenta Militar, 1943, pp. 1-2.
23
Miguel Langon Cuarro, Cdigo Penal y Leyes Penales Complementarias de la Repblica Oriental del
Uruguay, t. I, 2. ed., p. 43.
24
Cdigo Penal. Ley n. 9.155, p. 7. Tambin, Miguel Langon Cuarro, Cdigo Penal y Leyes Penales
Complementarias de la Repblica Oriental del Uruguay, t. I, 2. ed., pp. 43-45.
25
Milton Cairoli Martnez, El Derecho penal uruguayo y las nuevas tendencias dogmtico penales, t. I, p.
65.
19
20
mile Durkheim, El suicidio [1897], trad. Mariano Ruiz-Funes, Madrid, Reus, 1928, pp. 255-301.
Robert King Merton, Social Theory and Social Structure, 3. ed., Illinois, Free Press, 1959, pp. 132139. Versin en espaol, Teora y estructura sociales, trad. Florentino M. Torner, Mxico, Fondo de
Cultura Econmica, 1964, pp. 141-148.
33
Germn Aller, Co-responsabilidad social, Sociedad del riesgo y Derecho penal del enemigo, Montevideo,
Carlos lvarez-Editor, 2006, p. 144.
34
Claus Roxin, Qu puede reprimir penalmente el Estado? Acerca de la legitimacin de las
conminaciones penales, en Problemas actuales de Dogmtica penal, trad. Manuel A. Abanto Vsquez,
Lima, Ara, 2004, p. 19.
35
dem, pp. 20-23.
31
32
Miguel Langon Cuarro, La necesidad de una Poltica criminal de Estado para enfrentar el
flagelo de la criminalidad, Revista de Ciencias Penales, n. 4, AA. VV., Montevideo, Carlos lvarezEditor, 1998, pp. 391-392. No es de extraar, como trataremos de demostrar, la falta de una verdadera
Poltica criminal de Estado, en rigor, la ausencia de cualquier Poltica criminal, llevada adelante por el
legislador, lo que se manifiesta en la forma errtica, carente de orientacin, de las diferentes leyes que se han
venido dictando durante los ltimos tiempos. Del mismo autor, El control social en el tercer milenio,
El control social hacia el tercer mileno, AA. VV., Montevideo, Carlos lvarez-Editor, 1998, pp. 27-38.
Tambin, La Poltica criminal en el Uruguay. La etapa de la ley y el orden: 1998-2001, en
Criminologa y Derecho penal, t. II, libro en coautora con Germn Aller, Montevideo, Del Foro, 2006,
pp. 83-87.
37
Miguel Langon Cuarro, El principio de proporcionalidad, en Criminologa y Derecho penal, t. III,
libro en coautora con Germn Aller, Montevideo, Del Foro, 2007, p. 280.
38
Gonzalo D. Fernndez, Poltica criminal o Derecho penal del enemigo?, en Estado de Derecho y
orden jurdico-penal, pp. 125-133. Tambin, Germn Aller, Co-responsabilidad social, Sociedad del riesgo
y Derecho penal del enemigo, pp. 163-249. Del mismo, otra exposicin del tema: Derecho penal del
enemigo, en Derecho penal del enemigo. El discurso penal de la exclusin, AA. VV., Madrid, EdisoferBdeF, 2006, pp. 79-117. Al respecto, Miguel Langon Cuarro, El Derecho penal del enemigo entre
nosotros (presentacin del libro de Germn Aller Maisonnave), en Criminologa y Derecho penal, t.
III, libro en coautora con Germn Aller, Montevideo, Del Foro, 2008, pp. 93-107. Asimismo, Bernd
Schnemann, Derecho penal del enemigo? Crtica a las insoportables tendencias erosivas en la
realidad de la administracin de justicia penal y de su insoportable desatencin terica, en
Cuestiones bsicas del Derecho penal, en los umbrales del tercer milenio, trad. Mariana Sacher, Lima,
Idemsa, 2006, pp. 186-196.
39
Gnther Jakobs, Derecho penal del ciudadano y Derecho penal del enemigo, en Gnther Jakobs
y Miguel Polaino Navarrete, El Derecho penal ante las sociedades modernas. Dos estudios de Dogmtica
penal y Poltica criminal, trad. Miguel Polaino-Orts, Lima, Grijley, 2006, pp. 23-52.
leyes y polticas pblicas sin consultar previamente a los profesionales de la justicia penal y
se ha reducido considerablemente el control experto de la agenda de polticas pblicas como
consecuencia de un estilo populista de hacer poltica 45.
Tal como enfatiz IRURETA GOYENA respecto de su proyecto de Cdigo Penal,
ste era un trabajo de Poltica criminal que, independientemente de sus aciertos y
fallos, puede decirse que recoga en forma eclctica las tendencias dogmticas de
su poca. Pero con la sucesin de modificaciones introducidas y, principalmente,
por las leyes extra-cdigo, en el devenir de los aos se ha perdido la congruencia
dogmtica y tambin la coherencia poltico-criminal. Por supuesto, Uruguay
como otros pases de manera imperiosa necesita definirse poltico-criminalmente
hablando, estableciendo un derrotero que cumplir en trminos de lneas directrices
tendientes a orientar al Derecho penal en un sentido concreto y coherente. De
manera de cumplirse as el designio de von LISZT al proclamar en 1893 que el
Derecho penal es la infranqueable barrera de la Poltica criminal 46; as como la precisa
afirmacin de ROXIN, para quien lo penalmente correcto debe tambin serlo en lo
poltico-criminal 47. Lgicamente, se deber ser el sentido liberal y garantista,
tolerante, comprometido con los derechos individuales, correspondiente con la rica
historia democrtica uruguaya y, por lo tanto, limitador del poder punitivo del
Estado; como tambin manifest von LISZT en esa oportunidad: Segn mi opinin,
aunque ello pueda parecer paradjico, el Cdigo Penal es la magna charta del delincuente.
No protege al orden jurdico, sino al individuo que se rebela contra ste. A l le garantiza el
derecho de ser sancionado slo bajo las condiciones establecidas en la ley dentro de los
lmites legales 48. Adicionando a ello que, como dice ROXIN, es igualmente cierto que
la Ciencia penal tiene que concretar y elaborar hasta el detalle las decisiones de Poltica
criminal del legislador; por lo que la fidelidad al Derecho y la elaboracin dogmtica,
as como la poltico-criminal, no se excluyen mutuamente 49. Los problemas
poltico-criminales son al fin de orden poltico, al punto que la Poltica criminal se
va tornando cada vez ms en parte de la poltica de Estado y quiz tambin de
David Garland, The Culture of Control. Crime and Social Order in Contemporary Society, p. 172.
Versin en espaol, La cultura del control. Crimen y orden social en la sociedad contempornea, p. 282.
46
Franz von Liszt, Ueber den Einfluss der soziologischen und anthropologischen Forschungen auf
die Grundbegriffe des Strafrechts, en Strafrechtliche Aufstze und Vortrge, t. II, Berln, J. Guttentag
Verlagsbuchhandlung, 1905, p. 80. Das Strafrecht ist die unbersteigbare Schranke der Kriminalpolitik.
47
Claus Roxin, Poltica criminal y sistema del Derecho penal, 1. ed., trad. Francisco Muoz Conde,
Barcelona, Bosch, 1972, p. 19. Tambin, Poltica criminal y sistema del Derecho penal, 2. ed., trad.
Francisco Muoz Conde, Buenos Aires, Hammurabi, 2000, pp. 36-37.
48
Franz von Liszt, Ueber den Einfluss der soziologischen und anthropologischen Forschungen auf
die Grundbegriffe des Strafrechts, en Strafrechtliche Aufstze und Vortrge, t. II, p. 80. Nach meiner
Meinung ist, so paradox es klingen mag, das Strafgesetzbuch die magna charta des Verbrechers.
49
Claus Roxin, Normativismus, Kriminalpolitik und Empirie in der Strafrechtsdogmatik, en Jus
humanum. Grundlagen des Rechts und Strafrecht. Festschrift fr Ernst-Joachim Lampe zum 70. Geburtstag,
AA. VV., Berln, Duncker & Humblot, 2003, p. 431. Versin en espaol, Normativismo, Poltica
criminal y empirismo en la Dogmtica penal, en Problemas actuales de Dogmtica penal, trad. Manuel
A. Abanto Vsquez, Lima, Ara, 2004, p. 61.
45
Joannis Carmignani, Juris criminalis Elementa, t. I, 4. ed. en Latn, Roma, Edebat Miceratae, 1829,
266, p. 140. Quoniam poena propter delictum infligitur, quemadmodum civilis delicti imputandi ratio
politica est ( 68), eadem et poenae infligendae ratio oportet sit. Tambin, t. I, 5. ed. en Latn, Pisa, Nistri
Fraters Eorumque Socii, 1833, 294, p. 88. Asimismo, Giovanni Carmignani, Elementi del Diritto
criminale, 1. ed. italiana, Malta, 1848. Tambin, 2. ed. italiana, Npoles, Stabilimento Tipografico de
P. Androsio, 1854, 294, p. 86. Giovanni Alessandro Francesco Carmignani ha sido un verdadero
icono de las ideas iluministas provenientes de la ilustracin y, no en vano, fue admirado por
Francesco Carrara. Esta estupenda pieza jurdico-penal fue editada en 1808 como Elementa
Jurisprudentiae criminalis y, tras una edicin como Elementi di Giurisprudenza criminale, cambi su
ttulo en 1822-1823 por Elementa Juris criminalis. La obra de referencia fue primeramente escrita en
latn y luego vertida al italiano en 1848, siendo recin traducida al castellano en 1979. Versin en
espaol, Elementos de Derecho criminal, trad. Antonio Forero Otero, Bogot, Temis, 1979, 294, p.
117.
51
Ernst-Joachim Lampe, La causalidad y su funcin jurdico-penal, en La Dogmtica jurdico-penal
entre la ontologa social y el funcionalismo, trad. Guillermo Orce, Lima, Grijley, 2003, p. 60.
52
Ibdem.
53
Ibdem.
10
Rolf Dietrich Herzberg, Reflexiones acerca del concepto jurdico-penal de accin y de la negacin
del delito pretpica, en Cuestiones actuales de la teora del delito, AA. VV., trad. Teresa Rodrguez
Montas, Madrid, McGraw Hill, 1999, p. 39.
54
11