RESUMEN GODIO - El Paradigma de La Sociedad Del Trabajo
RESUMEN GODIO - El Paradigma de La Sociedad Del Trabajo
RESUMEN GODIO - El Paradigma de La Sociedad Del Trabajo
Las fuerzas polticos laborales se movieron hasta hace 2 dcadas con el paradigma socio laboral
de la sociedad industrial-salarial, sustentado en las instituciones del originario estado de
bienestar. Hasta la dcada de los 80 exista la conviccin de que la sociedad industrial salarial
era capaz de extender constantemente sus estructuras productivas y aumentar la fuerza laboral
en la sociedad salarial.
Sin embargo, el paradigma de la sociedad industrial-salarial ya haba comenzado a perder
sustento en la dcada del 70.
Nace la economa informacional, cuyo ncleo duro son las nuevas tecnologas. Se pasa del
Fordismo al Toyotismo y a la empresa de variedad. Surge la nueva economa o economa
informacional en redes, como eje de la informtica y de la comunicacin, las cuales van
conformando la sociedad de la informacin. El desempleo y el subempleo se convierten en
fenmenos estructurales no solo en los pases perifricos y menos desarrollados, sino tambin en
los altamente desarrollados.
El capitalismo liberal logra que predominen las pautas orientadas a configurar la economa
informacional dentro de la segunda ola de mundializacin de la economa, conocida como
globalizacin econmica. El capitalismo se torna global.
El capital financiero motoriza las operaciones favoreciendo a las grandes multinacionales de los
pases industrializados. No existe la voluntad para utilizar las nuevas tecnologas para
modernizar la economa a escala global, sino para favorecer la concentracin capitalista. La
herramienta poltica es la revolucin conservadora que prioriza la oferta de capital sobre la
demanda, la rentabilidad empresarial y la crisis medioambiental.
La revolucin conservadora imagina y promueve una nueva sociedad funcional al predominio de
la teora de la oferta: la sociedad de mercado, que avanza an ms al aplicarse al diseo del
mundo del trabajo y anuncia que en el futuro el trabajo ser escaso, las sociedades duales,
donde habr desocupados y trabajadores informales de bajos ingresos.
El neoliberalismo apunta a construir una nueva hegemona para producir cambios en los
imaginarios sociales y erradicar modelos socialistas interiorizados.
Las nuevas sociedades de trabajo ponen en crisis el paradigma tradicional de educacincapacitacin y obliga a reformularlo a partir del planteo de diversas relaciones o situaciones,
como las de gnero, las nuevas percepciones del mundo de los jvenes adiestrados en las
culturas virtuales, la importancia de la dialctica trabajo-ocio, los nuevos valores y actitudes que
definen las relaciones de los trabajadores en las empresas y en las familias.
El neoliberalismo se apropia de la categora mercado y la reformula como libre mercado.
A partir de los aos 70, se produjo un auto revolucin del capital que refunda el capitalismo
liberal. Fue posible constatar que el supuesto libre mercado se construa en gran medida a costa
de la pauperizacin de trabajadores asalariados de la consolidacin de la pobreza, de los
empleos de baja calidad y de las economas familiares.
El capitalismo liberal desarticulo los mercados, incapacitndolo para promover el desarrollo
sustentable, para garantizar el crecimiento econmico pareca inevitable, durante un periodo
histrico determinado, la exclusin del trabajo productivo y decente de la mitad de los
trabajadores.
Lo que estaba en curso era una concentracin y centralizacin del capital: 500 grandes
empresas multinacionales controlaban en 2000 el 70% del comercio y las inversiones a escala
mundial. Ese procesos de concentracin y centralizacin era acelerado por el capital financiero
rentstico.
Fueron los sindicatos, los sectores de empresarios desplazados y condenados a la ruina, los
antiguos movimientos sociales y los nuevos movimientos emergentes los que organizaron las
acciones de resistencia al neoliberalismo.
El proceso de mercantilizacin de la vida es aquel por el cual se van introduciendo dentro del
marco del mercado actividades y recursos tiles para la vida que previamente no estaban en ese
marco. Cuando se toma agua del ro para calmar la sed se est resolviendo una necesidad
usando un recurso que queda fuera del mercado, pero si se resuelve la misma necesidad
utilizando el agua embotellada, entonces se est dentro del marco del mercado. Se ha
mercantilizado el agua.
Hay muchos bienes que antes estaban fuera del mercado y ahora estn dentro. El reduccionismo
que supone equiparar riqueza con mercantilizacin lleva tambin a despreciar y abusar de
aquello que queda fuera del mercado (como por ejemplo, los trabajos no mercantilizados que
realizan las mujeres y los "servicios" gratuitos que presta la naturaleza).
La mercantilizacin produce escasez o se aprovecha de la escasez de recursos. La
mercantilizacin produce y se aprovecha del deterioro los sistemas sociales y de los ecosistemas.
Contabiliza como produccin lo que en realidad es apropiacin y uso mercantil de recursos
preexistentes. La mercantilizacin por tanto puede producir una ilusin de crecimiento,
acumulacin o desarrollo cuando en realidad no es otra cosa que el cambio de marco de un bien
o un servicio. Si el agua est contaminada produce ms oportunidades de mercantilizacin y
negocio que si est limpia y accesible para todas las personas.
Se intenta que la lgica del mercado penetre de forma absoluta hasta el ncleo ms profundo del
sistema educativo. A las claras est cuando se introduce un criterio como el espritu
emprendedor para sustituir la educacin tradicional en valores. Deja claro que los valores del
capitalismo solo tienen que ver con el lucro a toda costa y la entronizacin del egosmo personal.
Adems, se nos vende como algo positivo que las personas quieran dejar de ser trabajadores y
pasen a ser emprendedores. El emprendedor es alguien activo, con ganas de salir adelante, con
arrojo, mientras el trabajador, y ms si lo es pblico, es un vago que se conforma con lo
establecido. Se trata de una lgica que viene extendindose mucho tiempo pero que, como
dijera Friedman, solo una buena crisis, real o imaginada, puede acabar de implantar. En tiempos
de sufrimiento, las personas son capaces de aceptar cualquier cosa que se parezca a la
salvacin, cualquier sucedneo, de ah que ahora se intente que el sistema educativo se
convierta en un apndice perfecto del Mercado.
Una vez que todo ha sido reconducido al mercado y ste se rige por sus propios fines, la
sociedad pasa a ser una sociedad de mercado, donde todas las relaciones estn supeditas al
valor de intercambio que puedan obtener en el mercado. Esto implica que todo, absolutamente
todo, puede ser comprado y vendido y todo, por tanto, es susceptible de generar beneficio. Por
supuesto, el beneficio es para los que controlan el mercado por poseer una posicin dominante
en l. El que posee los recursos o los medios de produccin, conseguir que los expoliados se
vendan al precio de mercado con el fin de conseguir los productos que necesitan para vivir. Nada
queda de la simetra y la centralidad. Todo es reducido a la obtencin de beneficio. De esta
manera, las relaciones sociales se pervierten, dejan de producir seres humanos para producir los
individuos productores y consumidores.
Mercantilizar la salud pblica, siendo la salud el bien ms preciado que tiene el ser humano, lejos
de servirle a la comunidad, empeora la prestacin de servicios de salud. Primero, porque los
pone en el papel de ser eficientes. Se debe ser eficiente en una empresa que fabrica calzados,
pero no en un hospital que recibe contingencias. La eficiencia se puede y se debe dar dentro de
un margen social, bajo los principios de solidaridad, equidad, igualdad, calidad y derechos
humanos.
Segundo, la mercantilizacin de la medicina crea la competitividad entre los diversos actores que
participan, especialmente el pblico y el privado. El gobierno le abri las puertas a la
competencia privada pensando que se iba a mejorar la competitividad y as la calidad de la
atencin. Pero ha sido lo contrario. Las EPS creadas entraron al mercado con grandes capitales
extranjeros y nacionales atrayendo a la mayora de usuarios y aprovechndose del desprestigio
de las EPS estatales, monopolizando as la salud.
Tercero, la mercantilizacin acabo con las agremiaciones de trabajadores de la salud, al adoptar
lgicamente el sistema de contratacin laboral temporal y a destajo. Y as impuso las
condiciones laborales que queran, desmejorando a sus trabajadores. Y las buenas empresas, las
que progresan, son las que les dan un buen trato a sus trabajadores, hecho demostrado por
todos los investigadores de mercado.
La implantacin de un modo de produccin binario del capitalismo, que se caracteriza por limitar
el bienestar pleno a una parte de la poblacin mundial y condenar al subdesarrollo y la exclusin
social a la mayora de esa poblacin
La prdida relativa de posiciones, de instituciones socio-polticas claves de la democracia liberal
(partidos, sindicatos,) la emergencia de nuevos movimientos sociales de contra poder.
FINAL DEL TEXTO: Funcionamiento del paradigma en las formaciones econmicosociales.
La economa informacional como motor del progreso.
La economa informacional, por sus potencialidades para configurar la economa mundial, se ha
adueado legtimamente del mito movilizador del progreso. Hoy, el capitalismo global se ha
posesionado de los destinos de la ciencia y la tecnologa al orientarlas bajo la hegemona
neoconservadora exclusivamente hacia la creacin del valor econmico.
Para recuperar el control sobre los vectores de la ciencia y la tecnologa y lograr su utilizacin a
favor de la humanidad se requiere detener el desmantelamiento del Estado.
Por lo dicho, es fundamental concientizar a las sociedades respecto de que las polticas pblicas
econmicas, laborales y sociales son estructuras y herramientas del Estado organizador para
preservar la democracia, para organizar los mercados y para promover el bienestar popular.
Constituir una nueva hegemona sociopoltica que restablezca la legitimidad del Estado slo ser
posible a travs de un nuevo vnculo entre la poltica y el mundo del trabajo.
La oposicin sociedad de trabajo versus sociedad de mercado es local, nacional y mundial. Las
estructuras donde compiten ambos modelos son las redes globales virtuales, en las que se
procesan las experiencias, los saberes y las pugnas por el control poltico. El escenario comn es
la sociedad de la informacin. El soporte tecnolgico sobre el cual se organiza la sociedad de la
informacin es la articulacin de la nueva lgica entre la economa y las comunicaciones.
No ser posible dotar de racionalidad a la economa informacional sin organizar sindicalmente a
una gran parte de quienes estn conectados, que son tambin asalariados del conocimiento.
Sin embargo, hay que plantear, con herramientas efectivas, la lucha contra la revolucin
conservadora desde el interior de la economa informacional. Se trata de impedir que internet
(instrumento vital para la produccin, la seguridad y las comunicaciones mundiales) est cada
vez ms expuesta a ser direccionada por los lobbies de proveedores, por grupos internacionales
que controlan los medios, por grandes corporaciones.
Los sindicatos deben comenzar a representar a los trabajadores de las redes, quienes
mayormente trabajan bajo modalidades de contratacin precarias. Se trata de ubicar esta
estrategia dentro de la perspectiva sociopoltica del desarrollo de instituciones constituidas para
asegurar los derechos de los ciudadanos a ser el sustento articulador consciente de una nueva
ciudadana digital.
El Estado recuperar sus capacidades si en sus agendas ubican, como motor del progreso social,
a una sociedad de la informacin basada en la participacin poltica de los ciudadanos/as segn
prcticas democrticas.
La sociedad de trabajo como componente de la economa poltica: En la construccin de
la sociedad del trabajo concurren y se ensamblan varias categoras tericas que, a su vez,
incluyen conocimientos y saberes sociales y tcnicos. El trabajo, como valor abstracto universal y
como valor concreto, se realiza a travs de las prcticas de profesiones y categoras laborales y
constituye la sustancia simblica y material de la sociedad de trabajo.
El trabajo de calidad para todos es una poderosa utopa movilizadora de la humanidad,
entendiendo por utopa una teora todava no realizada en la historia. La sociedad de trabajo es
un proceso que ha llevado siglos de construccin, no pocas veces mediante los mitos
movilizadores de las utopas.
La sociedad de trabajo en las empresas transformadas: En el universo de empresas
transformadas se agrupan las relaciones de produccin y distribucin propias de la economa y la
Todos los procesos de trabajo en las reas econmico-sociales precapitalistas se realizan dentro
de civilizaciones y culturas ancestrales que funcionan como proveedoras de smbolos y valores
de identidad colectiva. Esas civilizaciones y culturas deben ser respetadas y protegidas en el
marco del gran paraguas civilizatorio de los nuevos modos de desarrollo orientados segn el
patrn de la economa informacional.
Para las diversas categoras laborales no capitalistas, la sociedad de trabajo significa sustituir las
relaciones de produccin y de poder atrasadas e injustas por relaciones de produccin basadas
en diversas formas de trabajo cuyo ncleo duro son las economas y los emprendimientos
familiares productivos dentro de economas de mercado.
La sociedad de trabajo como sustento y la poltica como transformacin: No es posible
pensar que una sociedad de trabajo pueda constituirse en la economa global si carece de
soportes polticos en los Estados-nacin, o en comunidades polticas supranacionales que
aseguren la utilizacin racional del excedente econmico que garantice el desarrollo.
La sociedad de trabajo no es una utopa. Sus perfiles surgen espontneamente de una poca que
tiene la necesidad de redefinir los contenidos de las distintas formas de trabajo.
Debemos recordar tambin que el camino recorrido por el keynesianismo para demostrar que el
ahorro popular y el consumo de masas eran las mejores herramientas para fortalecer las
economas capitalistas result en su momento acertado. Hoy, la sociedad de trabajo es una
propuesta polticamente correcta porque reestructura y centraliza tcnicamente diversas formas
de trabajar dentro un paradigma socio- productivo dinmico y nuevo.
La formacin econmico-social en cada poca histrica un modo de produccin es dominante y,
a ese modo de produccin le corresponden roles laborales y formas de trabajar especficas.
Subordinados a l coexisten otros modos que fueron anteriormente dominantes y ahora
subsistentes de otras formaciones econmico-sociales. En la actualidad el modo de produccin
dominante es el capitalista, en pleno proceso de transformacin de capitalismo industrial a
capitalismo informacional. Este proceso de transformacin tambin incluye la imbricacin de
diferentes modos de desarrollo del capital.
El capitalismo es un modo de produccin con capacidades para autorrevolucionarse
peridicamente y para originar desconcierto y confusin entre sus adversarios sociales e
intelectuales.
Pero el modo de desarrollo capitalista informacional se realiza como relacin binaria entre polos
de desarrollo y de subdesarrollo, generando en esta ltima pobreza y desempleo masivos. El
mercado es una institucin preexistente al capital, y en su larga construccin histrica arrastra
prcticas sociales que han convertido las relaciones de intercambio de bienes en una forma
universal de progreso social. El mercado ha cortado en forma transversal todas las formaciones
econmicas preexistentes al capital.
El mercado es una categora econmica universal mientras que el capitalismo es slo la forma
conocida y hasta ahora ms desarrollada de realizacin del valor del trabajo.
Cmo debe pensarse entonces la relacin entre las sociedades de trabajo y los mercados?
Como sociedades capaces de construir mercados cuyas matrices de acumulacin y distribucin
sean funcionales a la necesidad de expansin de los trabajos productivos, segn polticas de
planificacin democrtica acordadas entre los agentes econmicos y el Estado, y aplicables a un
espacio no slo nacional sino tambin regional y mundial.
La sociedad de trabajo no es una utopa. Es una construccin social que recobra la centralidad
igualitaria y humanista del trabajo. Constituye una categora poltica, porque es en sus
articulaciones donde puede asentarse la democracia motivando a participar a los ciudadanos y
ciudadanas segn intereses sociales diferenciados y mundos ideolgicos plurales en las
instituciones polticas de la democracia.
Es la economa poltica del desarrollo la que debe ser reinstalada para proteger la democracia
poltica, la cual se fortalece con el desarrollo sustentable, con empleos productivos y con el
crecimiento de la demanda.
La economa poltica, al promover el bienestar, apuntala la legitimidad del concepto de
gobernabilidad democrtica. Son las sociedades las que, a travs de sus prcticas, organizan las
tramas de relaciones entre instituciones econmicas, sociales y polticas capacitadas para
orientar y servir de herramienta a los modos de desarrollo democrticos.