Arritmias
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ACTUALIZACIÓN
PUNTOS CLAVE
arritmológicos.
alteraciones del ritmo cardiaco normal. Pueden
clasificarse en bradiarritmias (arritmias lentas) y
taquiarritmias (arritmias rápidas). Las
Criterios
frecuentes son la fibrilación auricular, las
taquicardias paroxísticas supraventriculares y el
flutter auricular. Las arritmias ventriculares más
TABLA 1
Clasificación y tipos de taquiarritmias
Taquiarritmias supraventriculares
Regulares (rítmicas)
Taquicardia sinusal con relación auriculoventricular fija
Taquicardia auricular con relación auriculoventricular fija
Flutter auricular con conducción auriculoventricular fija
Típico
Atípico
Taquicardia supraventricular por reentrada sinoauricular
Taquicardia supraventricular por reentrada intranodal
Típica (lenta-rápida)
Atípica (rápida-lenta)
Taquicardia supraventricular por reentrada por vía anómala
Ortodrómica (QRS estrecho)
Antidrómica (QRS ancho)
Taquicardia ectópica de la unión
Irregulares (arrítmicas)
Extrasistolia supraventricular
Fibrilación auricular
Fig. 1. Estructura y localización del sistema de producción y conducción de
estímulos eléctricos cardiaco. Flutter auricular con conducción variable
Taquicardia auricular multifocal
Taquicardia sinusal con conducción auriculoventricular variable
Taquicardia auricular con conducción auriculoventricular variable
normal en reposo en el ritmo sinusal se considera situada
Taquiarritmias ventriculares
entre 60 y 100 latidos por minuto (lpm). Al ritmo sinusal
Regulares (rítmicas)
cuya frecuencia es inferior a 60 lpm se le llama bradicardia
Taquicardia ventricular (monomórfica o polimórfica)
sinusal y cuando la frecuencia es superior a 100, taquicar-
Flutter ventricular
dia sinusal.
Irregulares (arrítmicas)
Las arritmias pueden dividirse en dos tipos fundamenta- Extrasistolia ventricular
les: lentas (bradiarritmias) y rápidas (taquiarritmias), depen- Taquicardia ventricular tipo torsades de pointes
diendo de si la frecuencia cardiaca es inferior a 60 o superior Fibrilación ventricular
a 100 lpm. Las bradiarritmias se deben fundamentalmente a
bradicardia sinusal, trastornos de la conducción sinoauricular
o de la conducción auriculoventricular, y se tratan en otra
monografía de esta serie. Las taquiarritmias pueden clasifi- auricular en los diversos estudios varía según el ámbito sani-
carse en supraventriculares o ventriculares (según su origen tario en el que se haya realizado la investigación (Atención
o lugar de producción) y en rítmicas o arrítmicas (según la Primaria, Especializada ambulatoria, hospitales o Servicios
regularidad del ritmo cardíaco). Las taquicardias supraven- de Urgencias), siendo más alta, como es lógico, en los estu-
triculares se originan por encima del haz de His (nodo sin- dios realizados en Atención Especializada. Las cifras de pre-
usal, nodo AV o aurículas), mientras que las taquicardias ven- valencia en los trabajos realizados en España oscilan entre el
triculares se producen en los ventrículos o en el sistema de 0,7 y el 17,6%, aunque la mayoría de estos se mueven entre
conducción intraventricular especializado. En la tabla 1 se el 2 y el 4%4-7. Hay que destacar que no existe una importan-
detalla la clasificación de las taquiarritmias de acuerdo con te diferencia por sexos, aunque en la mayoría de los estudios,
estos dos criterios antes señalados (origen y ritmicidad). Un con la excepción del REGICOR4, la prevalencia es ligera-
tercer criterio de clasificación es el patogénico, por el que las mente superior en mujeres, probablemente en relación con
taquiarritmias se clasifican en función de su mecanismo de la mayor supervivencia de estas (ya que la incidencia es lige-
producción (reentrada, alteración del automatismo o activi- ramente mayor en varones). Sí ejerce una notable influencia
dad focal desencadenada), como se verá más adelante en el la edad, ya que la prevalencia de fibrilación auricular se incre-
apartado Etiopatogenia de las taquiarritmias. menta de forma muy significativa con la misma, llegando a ser
superior al 10% por encima de los 80 años. En nuestro me-
dio7 4 de cada 10 pacientes con fibrilación auricular perma-
Epidemiología de las taquiarritmias nente tienen más de 70 años. La incidencia (casos nuevos por
año) de fibrilación auricular es de 3,1 por 1.000 personas/año
No existe en la actualidad en España una información dema- entre los 55 y 65 años, y de 38 por 1.000 personas/año en los
siado detallada sobre la epidemiología de las arritmias, aun- mayores de 852,3. Así pues, la incidencia se duplica a partir de
que es probable que podamos asumir las cifras de estudios los 50 años por cada década de incremento de edad.
epidemiológicos publicados en países occidentales, sobre La fibrilación auricular es la taquiarritmia más frecuente-
todo para la fibrilación auricular, que es la arritmia sostenida mente encontrada, tanto entre los pacientes que acuden por
más frecuente con diferencia1-3. La prevalencia de fibrilación primera vez a una consulta de Cardiología8, como en la po-
blación general9, seguida del flutter auricular y de las taqui- ban una menor tasa de muerte súbita en España en aquel
cardias paroxísticas supraventriculares (TPSV). Además de la momento13, lo que se justificaba por la menor mortalidad por
edad, otros factores influyen en su aparición. En el pasado enfermedad coronaria respecto a los países de nuestro entor-
la principal causa de aparición de fibrilación auricular era la no, aunque esto puede haber cambiado en la actualidad.
valvulopatía mitral reumática, mientras que en la actualidad, Otras cardiopatías graves, con insuficiencia cardíaca o dis-
la fibrilación asociada a enfermedad reumática cardiaca va función ventricular grave (miocardiopatías dilatadas, valvu-
perdiendo protagonismo, en beneficio de las no valvulares. lopatías aórticas evolucionadas), también pueden asociarse
La hipertensión arterial es, junto a la edad, el principal factor con muerte súbita, al igual que otras cardiopatías menos fre-
de riesgo de aparición de fibrilación auricular en nuestro en- cuentes, como la miocardiopatía hipertrófica, la miocarditis
torno7,8. aguda, la displasia ventricular derecha o las más reciente-
La prevalencia de las otras dos taquiarritmias supraven- mente descritas canalopatías (como el síndrome de Brugada
triculares más importantes, el flutter auricular y la TPSV, es y otras, de las que posteriormente hablaremos en el siguien-
mucho más baja. La incidencia de flutter en un estudio nor- te apartado). Estas cardiopatías “arritmogénicas” son las res-
teamericano10 fue de 88 por 1.000.000 de personas/año, sien- ponsables de la mayor parte de las muertes súbitas en jóvenes
do 2,5 veces superior en los varones y aumentando con la y deportistas, aunque no hay que olvidar que incluso en me-
edad. A diferencia de la fibrilación auricular, más de la mitad nores de 35 años la cardiopatía isquémica produce una pro-
de los casos de flutter auricular eran secundarios a una causa porción no despreciable de las muertes súbitas.
aguda o corregible (sobre todo tras cirugía cardiaca) y sólo
la tercera parte se asociaba a enfermedades crónicas, como la
diabetes, la hipertensión, la enfermedad pulmonar obstructi- Etiopatogenia de las taquiarritmias
va crónica y la insuficiencia cardiaca. Estas dos últimas son
los dos principales factores predisponentes, responsables de Las alteraciones del ritmo cardiaco se deben a dos tipos de
15,8 y del 11,6% de los casos respectivamente10. Respecto a problemas: alteraciones de la formación del impulso y altera-
la TPSV su prevalencia en el único estudio poblacional dis- ciones en la conducción del impulso. Las alteraciones de la
ponible fue de 2,25 por 1.000, con una incidencia de 35 casos formación del impulso son de tres tipos:
por 100.000 personas/año11. En este estudio se encontró que 1. Automatismo normal.
las mujeres tenían un riesgo doble al de los varones de pre- 2. Automatismo anormal.
sentar una TPSV, que este era 5 veces superior en las perso- 3. Actividad focal desencadenada (con dos variedades:
nas mayores de 65 años en relación con las más jóvenes y que precoz y tardía).
el 61% de los pacientes con TPSV tenían una cardiopatía Las alteraciones de la conducción del impulso que pro-
estructural asociada (90% de los varones y 48% de las muje- vocan taquicardias son las reentradas. Hay que tener en
res). Estos datos contrastan con la idea previa de que las per- cuenta que el conocimiento de la patogenia de las arritmias
sonas que sufren TPSV suelen ser jóvenes sin cardiopatía, no tiene exclusivamente un interés académico, sino que nos
idea proveniente de datos de series hospitalarias. Parece, por sirve de gran ayuda para su diagnóstico y tratamiento, como
tanto, que hay dos patrones diferentes de TPSV, según la se pone de manifiesto en las tablas 2 y 3, ya que cada meca-
presencia o no de cardiopatía asociada. Los casos sin cardio- nismo patogénico tiene unas características peculiares y una
patía suelen ser de edad más joven, con más frecuencia mu- forma de responder a distintos estímulos (tabla 2) y, además,
jeres, y tienen taquicardias más rápidas (lo que cuadra bien cada tipo de taquiarritmia suele deberse a mecanismos muy
con el perfil de la TPSV por reentrada intranodal). Además, concretos (tabla 3). A continuación revisamos brevemente las
la tasa de recurrencias es más baja en la población general características más importantes de estas alteraciones.
que en las series hospitalarias11.
Por último, respecto a la epidemiología de las arritmias
ventriculares (taquicardia y fibrilación ventricular) está muy Alteraciones del automatismo
ligada a la de la cardiopatía isquémica aguda y a la de la
muerte súbita, ya que la gran mayoría de arritmias ventricu- Algunas células o grupos celulares del corazón tienen la pro-
lares clínicamente relevantes ocurren en pacientes con car- piedad de producir, en condiciones normales y de forma es-
diopatía isquémica, bien durante la presentación de un sín- pontánea, impulsos eléctricos con una frecuencia determina-
drome coronario agudo, bien en pacientes con infarto de da. Estas células están situadas en el nodo sinusal, en el nodo
miocardio antiguo y disfunción ventricular, y en más de la AV y en el sistema His-Purkinje (fig. 1). Esto es lo que se
mitad de los casos la manifestación clínica inicial es la muer- denomina automatismo normal, para distinguirlo del auto-
te súbita. La incidencia de muerte súbita en países de nuestro matismo anormal, que consiste en que células o grupos celu-
entorno está en el rango de 0,36 a 1,28 casos por 1.000 per- lares cardiacos que habitualmente no poseen esta propiedad,
sonas/año, según las guías de práctica clínica sobre muerte la adquieren por alguna circunstancia patológica. La diferen-
súbita de la Sociedad Europea de Cardiología12, aunque se cia entre las células con automatismo y sin él radica en el
piensa que estas cifras pueden infraestimar la realidad. Así, potencial de acción transmembrana: las células automáticas
según este artículo, la muerte súbita por enfermedad corona- tienen un potencial diastólico en reposo ascendente, por lo
ria es la causa más importante de mortalidad en la población que alcanzan el potencial umbral de forma espontánea, des-
adulta en el mundo12. En nuestro país algunos registros pro- polarizándose e iniciando su activación de forma espontánea,
vinciales y locales publicados hace más de 15 años encontra- sin necesidad de ser activadas por un estímulo proveniente
usal inapropiada (tabla 3) y, quizá, TSVD: tracto de salida del ventrículo derecho; VI: ventrículo izquierdo.
de la sincronía auriculoventricular, pérdida de la contribución existencia o no de cardiopatía estructural y del tipo y grave-
auricular al llenado ventricular, pérdida de la sincronía inter o dad de esta, factores que, además, suelen estar muy relacio-
intraventricular, aumento del consumo de oxígeno miocárdi- nados. Por ejemplo, la mayoría de las taquicardias ventricu-
co, isquemia miocárdica, etc. Todas estas alteraciones llevarán lares, que son arritmias más graves y con un peor pronóstico,
a una disminución del gasto cardíaco y/o elevación de las pre- suelen aparecer en pacientes con síndrome coronario agudo,
siones de llenado. Sin embargo, la repercusión clínica concre- infarto antiguo con disfunción ventricular, miocardiopatías
ta de una taquicardia es muy variable, pudiendo oscilar desde dilatadas o insuficiencia cardíaca crónica, mientras que la
ser asintomática hasta causar la muerte. La magnitud de la mayoría de las taquiarritmias supraventriculares, habitual-
alteración fisiopatológica y clínica dependerá fundamental- mente más benignas, ocurren en pacientes sin cardiopatías o
mente del tipo de arritmia (las ventriculares se toleran peor con cardiopatías leves (con la excepción de la fibrilación au-
que las supraventriculares), de la frecuencia cardíaca y de la ricular). Aunque se hablará más en profundidad de estos as-
existencia o no de una cardiopatía subyacente y de su grave- pectos en los artículos correspondientes a cada arritmia, re-
dad. Por ejemplo, una fibrilación auricular rápida en una per- saltaremos aquí brevemente algunos aspectos de interés.
sona joven sin cardiopatía probablemente sólo producirá pal- La fibrilación auricular es un factor de riesgo indepen-
pitaciones y un cierto malestar, mientras que en un sujeto con diente de mortalidad en la población general, multiplicando
estenosis mitral originará un edema agudo de pulmón y en un por 1,9 en mujeres y por 1,5 en varones el riesgo de muerte23.
paciente coronario podrá desencadenar un síndrome corona- El mantenimiento del ritmo sinusal en pacientes con fibrila-
rio agudo. Estos aspectos se revisan más a fondo en los capítu- ción auricular previa se asociaba con la mitad de mortalidad
los correspondientes a cada arritmia. en comparación al grupo que seguía con la arritmia en el
estudio AFFIRM24. Por otra parte, la fibrilación auricular
también es un factor de mal pronóstico en pacientes con in-
Diagnóstico de las taquiarritmias suficiencia cardiaca crónica, y se asocia con un elevado riesgo
de accidentes cerebrovasculares: la etiología cardioembólica
El método básico para el diagnóstico de las arritmias es el es responsable de la cuarta parte de todos los ictus isquémi-
ECG, que recoge y registra la actividad eléctrica cardíaca. Para cos, estando presente la fibrilación auricular en más de la
un correcto estudio de la taquicardia es preferible un ECG de mitad de estos casos25. De ahí la gran importancia de un se-
12 derivaciones. En ocasiones, cuando el paciente refiere sín- guimiento adecuado de las indicaciones y pautas de anticoa-
tomas sugestivos (palpitaciones, mareos o síncopes) y el ECG gulación en los pacientes que tienen fibrilación auricular
basal es normal, es necesario recurrir a técnicas más complejas, permanente o paroxística. Además, la fibrilación auricular
como el registro continuo ambulatorio tipo Holter, la prueba suele ser el desencadenante del cambio de la historia natural
de esfuerzo o el Holter implantable. El estudio electrofisioló- de la estenosis mitral hacia estadios más sintomáticos y avan-
gico se utiliza para provocar taquicardias, estudiar sus meca- zados. Por último, señalar que en pacientes con hipertrofia
nismos y valorar la mejor forma de tratamiento, mediante la ventricular izquierda (estenosis aórtica, hipertensión arte-
estimulación eléctrica programada con catéteres-electrodo in- rial), la aparición de fibrilación auricular es mal tolerada,
tracavitarios. Las indicaciones y resultados de estas técnicas se pues estos pacientes, debido a la alteración de la función
detallan en otros capítulos de esta monografía. diastólica por la hipertrofia, son muy dependientes de la con-
Además de las técnicas puramente “eléctricas” es necesa- tracción auricular para mantener un llenado ventricular y un
ria una valoración global del paciente, con una historia clíni- gasto cardiaco adecuados.
ca y exploración física completas, orientadas hacia la detec- Otros tipos de taquiarritmias supraventriculares, como el
ción de enfermedades cardiacas asociadas e identificación de flutter auricular y las TPSV, tienen un buen pronóstico en
factores de riesgo para el desarrollo de arritmias y de factores ausencia de cardiopatía estructural. Los síndromes de preex-
pronósticos, así como la utilización de pruebas de imagen citación tipo WPW, en los que la vía accesoria tiene una ve-
(ecocardiografía transtorácica y transesofágica, técnicas ra- locidad de conducción rápida en sentido anterógrado (hacia
dioisotópicas, angiografía y coronariografía, tomografía axial los ventrículos), tienen mayor riesgo de muerte súbita por
computarizada [TAC] multicorte, resonancia magnética car- fibrilación ventricular, sobre todo cuando producen fibrila-
díaca) en los casos indicados. Con los nuevos procedimientos ción o flutter auricular con conducción hacia el ventrículo
de ablación de arritmias (fibrilación auricular, taquicardias por la vía accesoria, debido a la elevada frecuencia ventricular
ventriculares), también se han desarrollado nuevos sistemas alcanzada, superior a 300 lpm, que puede inducir una fibrila-
de mapeo electrofisiológico que permiten integrar imágenes ción ventricular. En estos casos existe una indicación absolu-
previas de resonancia o TAC cardiacas, produciendo una re- ta de ablación de la vía anómala. En el flutter auricular con
construcción virtual electroanatómica durante el procedi- conducción 2:1 a 150 lpm, en la fibrilación auricular rápida
miento en tiempo real22. mantenida y en las TPSV incesantes, cuando duran mucho
tiempo (días a meses) puede aparecer una miocardiopatía di-
latada con depresión grave de la fracción de eyección, el lla-
Historia natural y pronóstico mado síndrome de taquicardiomiopatía. Esta alteración sue-
le ser reversible cuando se controla la frecuencia de la
Al igual que hemos comentado al hablar de la fisiopatología taquicardia.
y clínica de las taquiarritmias, su historia natural y su pronós- Por último, ya hemos hablado del mal pronóstico de la
tico dependen fundamentalmente del tipo de arritmia, de la aparición de taquicardias ventriculares en pacientes con car-
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